DISEÑO INDUSTRIALFormación, propósitos y acciones

Oscar Salinas Flores

COMPILADOR

DISEÑO INDUSTRIALFormación, propósitos y acciones

Universidad Nacional Autónoma de México

México, 2013

índicePresentación 9Jorge Tamés y Batta

introducción 13Oscar Salinas Flores

LA FORMACIÓN DEL DISEÑADOR

LosmotivosdeLdiseño:entreeLProyectodisciPLinarioyLacoLaboracióntransdisciPLinaria 17Enrique Ricalde Gamboa

GLobaLizaciónyescueLasdediseñoindustriaL 29Arturo Treviño Arizmendi

LoquePre-ocuPa 45Roberto González

LaformacióndediseñadoresindustriaLes 53Fernando Fernández Barba

LOS PROPÓSITOS DEL DISEÑO

LavisiónsociaLdeLdiseñoindustriaL.LainvestiGación 61atravésdeLosojosdeLdiseñoErika Marlene Cortés López y Aura Rosalía Cruz Aburto

HaciaunaHistoriacríticadeLdiseño 71Eloísa Mora Ojeda

esPacio,diseño,identidad 95César González Ochoa

diseño:ProPósitoyvaLor 111Luis Rodriguez Morales

DISEÑO Y SOCIEDAD

LasustentabiLidadenLaformacióndeLdiseñador.educaciónconmirasaLasustentabiLidad,unanecesidadindudabLe 121Brenda García Parra

diseñoindustriaLincLuyente 129Mauricio Moyssén Chávez

eLdiseñodeLainnovaciónoLainnovacióneneLdiseño 141Héctor López Aguado

innovaciónyProductividadeneLdiseño 157Julio Frias Peña

LasnuevasformaLidadesdeLdiseñocomoefectodeLastecnoLoGíasdeLainformaciónycomunicación(tic) 167Guillermo Gazano Izquierdo

diseñoindustriaLParanodiseñadores 173Luis Equihua Zamora

8

introducción

Hablar sobre el diseño que vivimos en la actualidad no es tan simple como sucedía en los primeros años de esta disciplina en México. El dise­ño de hoy muestra múltiples facetas que reflejan lo que es el mundo del siglo xxi y la complejidad de las sociedades actuales.

De hecho, todo aquello que separaba a las diversas disciplinas del di­seño, cada vez se muestra menos y el concepto de diseño asociado a una especialidad se diluye frente a los nuevos retos de un entorno que de­manda al diseñador no solo objetos, sino también servicios o incluso sistemas que requieren grupos de diversos profesionales que actúen inter­disciplinariamente. El diseño, como lo plantea Luis Rodríguez en este li­bro, “se entiende como un proceso para solucionar problemas complejos y no solo se centra en la aplicación de habilidades y conocimientos rela­cionados con la configuración formal o con la producción industrial”, y es por ello que la formación del diseñador ha iniciado una transformación que responde a las nuevas condiciones sociales, culturales y tecnológicas.

En México, hemos experimentado una evolución de la disciplina que en los últimos años ha suscitado un cambio notable en el perfil de los diseñadores y, se acerca a una nueva forma de relacionarse con un mer­cado profesional que también cambia de acuerdo a las circunstancias que impone el desarrollo del país, como resultado de sus interrelaciones den­tro de la cultura globalizada de nuestro mundo.

En este libro, se incluye un grupo de diseñadores profesionales que se distinguen por su orientación hacia la formación de nuevos diseñadores industriales dentro de la Universidad Nacional Autónoma de México, y que colaboran tanto en el Centro de Investigaciónes de Diseño Industrial como en el Posgrado en Diseño Industrial, de la Facultad de Arquitectura.

Nos ofrecen una serie de reflexiones que parten de experiencias, pro­yectos o propuestas que muestran el estado que guarda la enseñanza y la práctica de la disciplina del diseño no solo en el ámbito de la unam, sino en un amplio espectro de nuestra sociedad. Los textos que conforman esta publicación se han dividido en tres áreas que nos muestran

13

• La formación del diseñador • Los propósitos del diseño, y • El tema de diseño y sociedad

A partir del interés de los autores, y resultado de su experiencia profesio­nal, con el objetivo de ayudarnos a entender mejor hacia donde y cómo se conduce la disciplina.

En la sección sobre la formación del diseñador, reflexionan sobre los contenidos de un programa académico y su pertinencia para lograr una sólida formación, así como los mecanismos y acciones que impulsan la relación e integración de un sistema educativo con grupos, instituciones y empresas locales y globales, como demandan estos tiempos, que a su vez, nos llevan a identificar al diseño como una disciplina con distintos campos profesionales.

En la segunda parte, se abordan los propósitos del diseño, analizan­do diversos principios que soportan y dan sentido a los fundamentos de la profesión desde diversas ópticas. Desde nociones, como la identidad en el diseño, hasta la necesidad de abordar la historia y el análisis crítico a través de la investigación, nos acerca a la comprensión de los campos de dominio que el diseñador aborda en su actuación.

En la última sección, diseño y sociedad, se presentan diversos análisis sobre las responsabilidades del diseñador frente a los grupos que más re­ás re­s re­quieren de sus soluciones y participación en el mejoramiento de la cali­dad de vida de los ciudadanos. Un diseño incluyente hacia una sociedad sustentable, es hoy un tema de primera importancia en la integración de los nuevos programas académicos de Diseño Industrial y, un motivo para que algunos de nuestros autores analicen la actuación y el compromiso que los diseñadores tienen que asumir en el ejercicio de una profesión cam­biante que se propone cada vez menos someterse a las exigencias de un mercado de consumo, como lo hacía hace medio siglo en los inicios de la disciplina en México.

Al final, los autores vuelven a enfatizar en la innovación como objetivo primordial del trabajo del diseñador profesional; elemento fundamental que parte desde la concepción misma del entorno en que se prepara a los nuevos diseñadores, que prosigue con la estructura mental que adquiere el estudiante a lo largo de su formación, y concluye con su capacidad como profesional para colaborar en el desarrollo de objetos, servicios y sistemas que la sociedad de nuestros tiempos requiere.

14

En resumen, los quince autores de esta publicación nos ofrecen un análisis diverso de aquellos temas que ocupan, inquietan y mueven a los diseñadores preocupados por generar las reflexiones y discusiones sobre la profesión del diseño que nos puedan ayudar no solo a entenderla me­jor, sino principalmente, a participar en su evolución y transformación de acuerdo a las demandas de este mundo complejo en que habitamos, y los nuevos límites que se manifiestan alrededor de nuestra forma de vida. Con el cambio de siglo, se han presentado transformaciones notables en la caracterización de las disciplinas del diseño e incluso se han modifica­do o desaparecido los términos con que se determinaba el significado y propósito de cada una de ellas, incluyendo al Diseño Industrial, como un reflejo de las nuevas necesidades y las circunstancias que nos impulsan a vivir como vivimos.

Que el contenido de este libro sea un aliciente para la reflexión y el análisis de todos aquellos interesados en la profesión del diseño y su par­ticipación en el desarrollo de nuestra sociedad.

Oscar Salinas Flores

15

La formación del diseñador

17

LosmotivosdeLdiseño:entreeLProyectodisciPLinarioyLacoLaboracióntransdisciPLinaria

Enrique Ricalde Gamboa1

A principios de los años 90 me interesó comprender los soportes teóricos de mi profesión: el diseño industrial. Lo hice a través de una visión panorá­mica. Me propuse analizar, si realmente el diseño era un dominio en sí mismo, o un proceso que podía estar presente en distintas áreas del cono­cimiento; me interesaba entender, si éste proceso era realmente el mismo. El paso de los años, la experiencia académica y profesional, así como la continua reflexión teórica, nos ha permitido a los diseñadores darnos cuen­ta que: la noción de diseño cambia constantemente, los factores condicio­nantes del cambio se encuentran –en la mayoría de los casos, fuera del dominio del diseño, así como, la influencia determinante de las fuerzas sociales, del mercado y de los avances tecnológicos.

Tal vez, los dos cambios más importantes, que se han producido en la apreciación que ahora se tiene del diseño son, por un lado, dejar de buscar –el qué: el sentido de la configuración en diseño,2 para despla­zarnos –al cómo: hacia el proceso que en realidad es inverso: la confi-guración del sentido en diseño, y por otro lado, se ha hecho patente la necesidad de explorar los vínculos de nuestra disciplina con otras disci­plinas. Lo primero, me ha permitido revalorar el gran espectro de acción del diseño y su desplazamiento de lo material hacia lo virtual (Maldona­do, Aicher),3 así como, ver con renovado interés el planteamiento hecho por Jones,4 de abrir el diseño hacia una noción de circularidad, a la manera que se plantea desde la cibernética (Wiener, von Foerster), o desde los vínculos de ésta con la psicología y la teoría de la comuni­cación (Watzlawick), o a la manera en que se desarrollan los seres vivos desde la perspectiva de la biología y los sistemas abiertos (Maturana, Varela, Capra); es decir, conceptualizar al diseñador como un sistema autoorganizador que intercambia información con otros especialistas y energía y materia con el entorno, buscando siempre nuevos caminos y oportunidades de acción.

Lo primero que conviene aclarar, es que este ensayo no enfrenta un dilema; es decir, no invita a la reflexión para decidir entre dos polos de

1 El autor es actualmente, estudiante del programa de doctorado en Arquitectura de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México. La investigación en desarrollo, se encuentra registrada con el nombre de “La Transdisciplina en el diseño” y cuenta con apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt). Este ensayo es parte de los avances de investigación presentados en el Congreso 30 años del Posgrado de Diseño Industrial de la unam en el mes de agosto de 2011, así como, del 5º Coloquio de Doctorantes en Arquitectura realizado en febrero de 2012 en la unam.

2 Véase, Ricalde Gamboa, E. (2004). “El sentido de la configuración en diseño”. Tesis de maestría, Posgrado en diseño industrial, unam.

3 Ver, Maldonado, T. (1994). Lo real y lo virtual. Barcelona, Gedisa; Aicher, O. (2001). Analógico y digital. Barcelona, Gustavo Gili.

4 Ver, Jones, J.C. (1985). Diseñar el Diseño. Barcelona, Gustavo Gili.

Bamboocycles,Diego Cárdenas Landeros

18 Colección Textos FA o Diseño Industrial. Formación, propósitos y acciones

Fig. A: representación de campo monodisciplinar

acción del diseño: el proyecto disciplinario o la colaboración transdisci­plinaria. Se trata de reflexionar y comprender los motivos que hacen que cada modo de trabajo, se encuentre en el centro mismo de las acciones de diseño, con sus oportunidades de intervención y las contradiccio­nes que genera. La especialización disciplinaria (monodisciplina) y las demás formas de colaboración disciplinaria –inter, multi y transdiscipli­na, son conceptos que generalmente se confunden, o en el mejor de los casos son considerados como sinónimos. Aún hoy en día, esta situación provoca dudas en algunos.

Uno Especialización

Al estudiar las relaciones entre número y geometría y relacionarlos con los aspectos más primarios de nuestra mentalidad, González Ochoa (2003)5 nos da la oportunidad de vincular número, forma y mentalidad. Nos dice que, todo aquel interesado en la búsqueda de la realidad, toma como válido que: “todo fluye, nada permanece; todo está naciendo o muriendo o se mueve entre esos procesos; … en una búsqueda mítica de los procesos de transformación”.

Inicia su texto con las características del número uno, citando a Jámbli­co el neoplatónico del siglo cuarto de nuestra era: “el uno, la mónada, es el origen no espacial de los números y se llama así por su estabilidad puesto que preserva la identidad específica de cada número con el cual se une”; pues, “todo ha sido organizado por la mónada –asevera Jámblico– porque contiene potencialmente todo: los principios que están en todos los números. Además –continúa– “la mónada se produce así misma y es producida de sí misma puesto que es autosuficiente, imperecedera; es evidentemente la causa de la permanencia, …” (pp. 31­32). Para la tradi­

5 Ver González Ochoa, C. (2003). Música congelada. Mito, número, geometría. México, Ubari Ediciones. El doctor González Ochoa, forma parte de mi Comité Tutor en el programa de doctorado y le agradezco el haberme facilitado su texto. La estructura de este ensayo, le debe mucho, pues a lo largo del texto aparecerán entrecomillados con citas del mismo.

19Los motivos deL diseño: entre eL proyecto discipLinario y La coLaboración transdiscipLinaria

ción pitagórica y platónica, el círculo era la figura per­fecta, la más semejante a sí misma, la representación del número uno, la mónada. (pp. 37­41)

Tomo el texto de González Ochoa, para establecer analogías entre los números y las formas geométricas con los campos disciplinares y la colaboración entre dis­ciplinas. También entre lo que él llama “insensibilidad hacia los números” y lo que yo llamo, insensibili­dad para traspasar los límites del propio campo disci­plinar. Como analogías, son similares en algunos aspectos, pero en otros no. Por ejemplo, en los debates sobre colaboración disciplinaria (Follari), no se con­templa para cada modalidad, un número específico de participantes.6

Esta postura para ir más allá del propio campo, que aún prevalece, nos impide entender gran parte de los nuevos problemas y retos que tendremos que enfrentar como diseñadores industriales en los años por venir. La indagación sobre convivencia y colaboración discipli­nar, no es una negación de las bondades de la especia­lización disciplinaria. Por el contrario, nos obliga a profundizar y adecuar nuestras competencias, para que nos sirvan de andamiaje en nuestro que hacer cotidiano, académico o profesional, y, que al mismo tiempo, nos abran la posibilidad de acercamientos disciplinarios flui­dos con expertos y especialistas de otras disciplinas.

Si colocamos en el campo de un buscador en Inter­net “definiciones de diseño” obtendremos 4 400 000 ligas de respuesta,7 además de las búsquedas relaciona­das que nos dan definiciones más específicas por cam­po de acción de los distintos diseños: industrial, gráfico,

estructural, editorial, entre otros. Lo mismo podemos decir, si colocamos en el campo de nuestro buscador “definiciones de Arquitectura”, pues obtendremos, 1 590 000 ligas de respuesta, además de las búsquedas relacionadas que nos dan otras definiciones de Arqui­tectura más específicas, como lo son, por ejemplo, de­finiciones y opiniones de Arquitectura hechas por arquitectos.8

Este amplio panorama de definiciones, nos hace ver la riqueza y apertura de los diseños hoy en día, y nos indica, que más que cerrar las definiciones, lo que se abre es la idea de pluralidad. Tal vez, esto se ve con mayor claridad en la definición de diseño, en el sentido que lo define la organización internacional de diseño icsid (International Council of Societies of Industrial Design por sus siglas en inglés) e ida (International De­sign Alliance por sus siglas en inglés),9 y que de alguna manera incluye a la mayoría de los campos y profesio­nes del diseño, y a la cual, nos adherimos:

Diseño como actividad creativa cuyo objetivo es es­tablecer las cualidades polifacéticas de objetos, procesos, servicios y sus sistemas considerando todo su ciclo de vida. Por lo tanto, el diseño es el factor central de la humanización innovadora de tecnolo­gías y un factor crucial del intercambio cultural y económico. También nos dicen, que el diseño trata de descubrir y evaluar relaciones estructurales, or­ganizativas, funcionales, expresivas y económicas, con la tarea de: mejorar la sustentabilidad global y la protección del medio ambiente, apoyar la diversidad

6 Tal es el caso de colaboración disciplinaria en la Universidad de Georgetown, en donde los investigadores de 14 departamentos de la Universidad, participan en el Programa Interdisciplinario en Neurociencias colaborando multidisciplinariamente.

7 Datos obtenidos con el buscador Google. Fecha de consulta 27/02/2012.

8 Datos obtenidos con el buscador Google. Fecha de consulta 27/02/2012.

9 http://www.icsid.org/about/about/articles31.htm [acceso 6 abril, 2011].

Foto 1: Yves Behar, Fuseproject: diseño de productos,

San Francisco, California.

20 Colección Textos FA o Diseño Industrial. Formación, propósitos y acciones

cultural a pesar de la globalización del mundo, conferir a sus productos, servicios y sistemas, las formas que son expresión de (semiótica) y con­gruentes con (estética) su propia complejidad. Diseño esta relacionado con productos, servicios y sistemas concebidos con herramientas, orga­nizaciones y la lógica introducida por la industrialización –no solo cuan­do se produce por procesos en serie–. Así, el diseño es una actividad que implica un amplio espectro de profesiones en las cuales, productos, ser­vicios, gráficos, interiores y arquitectura toman parte. En conjunto, estas actividades deben mejorar –en armonía con otras profesiones relaciona­das– el valor de la vida. Por tanto, el diseñador se refiere a un individuo que practica una profesión intelectual, y no simplemente un oficio o un servicio para las empresas.

No es interés de este trabajo, ahondar en aspectos y características que como monodisciplina, cada profesión del diseño10 tiene, pues cada una cuenta con recursos propios y los aplica con éxito. Podemos sostener que, en el caso del Diseño Industrial o de la Arquitectura, contamos con una probada efectividad de acción profesional, demostrada ampliamente con ejemplos de aplicación de conocimientos “especializados” del cam­po disciplinar. Esta postura no esta en duda.

Veamos qué sucede cuando aparece el otro, la otra disciplina, el núme­ro dos.

Dos Interacción

El número dos, nos recuerda González Ochoa, aglutina varias cosas en una, iguala la pluralidad y la unidad. “Nuestra mente divide el mundo en pares de opuestos: en cielo y tierra, día y noche, luz y oscu­ridad, derecho e izquierdo, hombre y mujer, yo y tú, etc.”. En el caso de las disciplinas, implica abandonar la seguridad del campo propio, para acercarse al otro, compartir metodologías y procedimientos; en otras palabras convivir con él. Tal es el caso de la colaboración inter­disciplinaria. Aparentemente, nos dice González Ochoa, “el dos es el resultado de tomar dos unos y ponerlos juntos; sin embargo, esto no es tan obvio. La ecuación 1+1 = 2 no corresponde al ideal del único y eterno uno; sólo existe el uno que no puede duplicarse o repetirse”. (pp. 43­46)

10 Para entender el significado de la palabra diseño y su origen ver: Zimmermann, Y. (2002). Del Diseño. Barcelona, Gedisa. Para conocer la diversidad de puntos de vista y definiciones sobre el diseño: Simón Sol, G. (2009). + de 100 definiciones de diseño. México, UAM Xochimilco. Para un análisis teórico sobre la definición, posición del diseño respecto a los nuevos retos que le aguardan: Rodríguez Morales, L. (2010). Diseño: estrategia y táctica. México, Siglo XXI, Colección Diseño y Comunicación, en especial ¿Qué es el diseño? pp. 47-62. Para una teoría general de los diseños: Acha, J. (1988). Introducción a la teoría de los diseños. México, Trillas. Para una revisión ágil, gráfica e histórica sobre la arquitectura; escritos, definiciones y opiniones de arquitectos Evers, B. & Thoenes, C. (2011). Teoría de la Arquitectura: del Renacimiento a la actualidad (2 vols.). Köln, Taschen.

21Los motivos deL diseño: entre eL proyecto discipLinario y La coLaboración transdiscipLinaria

Entendemos que, el dominio del diseño comparte características signi­ficativas con campos de conocimiento que por su misma naturaleza, se encuentran cercanos al nuestro. Tal es el caso de, la ingeniería, la psico­logía cognitiva, la antropología, la estética, entre otros.11

Las experiencias de acercamientos interdisciplinarios cuentan con más de 40 años, durante los cuales muchas de las discusiones y análisis de conveniencia han girado alrededor de cuestiones epistemológicas y más recientemente filosóficas (McEwen et al.).12 En realidad, los modos de acercamiento interdisciplinario se han mantenido hasta nuestros días y su elección depende de cada caso en particular. Sin embargo, hay un aspec­to que resulta importante resaltar: la colaboración interdisciplinaria se ha dado por necesidad, principalmente por, ampliación del conocimiento, complejidad del problema, surgimiento de nuevas tecnologías, procesos y materiales. “¿Cómo, entonces, la unidad va más allá y se convierte en lo múltiple?, ¿Cómo puede la mónada generar otros principios, otras for­mas, otros números? y, ¿Cómo lo mismo produce lo otro, cómo el yo ge­nera el tú?” Una manera de hacerlo, nos dice, González Ochoa, es por medio de un espejo: simplemente es necesario poner frente al primer círculo otro círculo igual. (p. 49)

Los dos círculos que se traslapan tienen un región central que simboli­za la unión cielo y tierra, arriba y abajo, creador y creación, y, forman el antiguo símbolo de lo dual. “El principio de dualidad o de lo otro fue llamado díada por los griegos”. (p. 49)

Como podemos observar en el esquema, a diferencia del enfoque tra­di cional; es decir, de solución del problema desde el interior de cada dis­ciplina, el problema se resuelve por medio de la colaboración entre ellas. La interdisciplina une conocimientos y es muy apropiada en la fase de ideación y conceptualización. En el caso específico de la co laboración

Fig. B: representación de colaboración interdisciplimaria

Foto 2: Santiago Calatrava: Museo de Arte

de Milwaukee

11 Ver: Martín Juez, F. (2002). Contribuciones para una antropología del diseño. Barcelona, Gedisa; Calvera, A. (ed.) (2007) De lo bello de las cosas. Materiales para una estética del diseño. Barcelona, Gustavo Gili.

12 Citado en García, R. (2006). Sistemas complejos. Conceptos, método y fundamentación epistemológica de la investigación interdisciplinaria. Barcelona, Gedisa, 2008.

22 Colección Textos FA o Diseño Industrial. Formación, propósitos y acciones

interdisciplinaria, el acercamiento es tal que se comparten metodologías, se integran procesos de investigación y, su organización y resultados son más complejos, pues existe la búsqueda de un fin común.

En el ejemplo de la foto 2, se aprecia la interacción afortunada de co­nocimientos de los campos disciplinares de la Arquitectura y de la Inge­niería; es decir, convergencia interdisciplinaria.

Retomando a González Ochoa entendemos que, si bien, “La díada enfatiza la diferencia, muestra los límites aparentes del mundo, los con­flictos y los ecos de nuestro sentido de separación”, y en “cada oportuni­dad tratan de unirse y llegar a ser otra vez el todo”. (pp. 57­58)

Existen ejemplos clásicos y muy conocidos de paradojas –el mentiroso que dice que miente o el padre que ordena a su hijo que no cumpla con las órdenes. En la esencia de toda paradoja, esta la implicación o reflexi­vidad del que enuncia; es un espejo que refleja y refracta. Entonces, ¿Dónde ubicar las competencias del diseño: en el proyecto disciplinario o en la colaboración transdisciplinaria? La respuesta es: en ambos lados, ya que ubicar las competencias en el proyecto disciplinario, nos permite mantener el nivel de especialización en los límites de la propia disciplina. Pero también requerimos competencias para colaborar en los modos in­ter, multi y transdisciplinario.

En toda díada también existe un lado negativo que tiende a predominar por el lado de la discordia y de la división: por lo tanto, se requiere pasar de la dualidad a la trinidad.

Tres Colaboración

“Tres es el ‘más allá’: se ha dicho que el término latino tres está relaciona­do con trans, ‘a través’, ‘penetrar’. El paso a tres es el decisivo, pues es el

Fig. C: representación de colaboración multidisciplinaria

23Los motivos deL diseño: entre eL proyecto discipLinario y La coLaboración transdiscipLinaria

que introduce la progresión infinita en la secuencia de números. En muchas tradiciones el tres significa ‘mu­chos’, más allá de la dualidad. El tres es acumulativo y significa finalidad. Donde quiera que haya tres existe un paso a través de algo, un renacimiento o una trans­formación”. …“El tres resuelve la díada en un todo y una unidad hacia su origen en la mónada. Ninguna so­lución duradera es posibles sin tres aspectos, dos opuestos y una presencia neutral que limita, balancea y transforma. Si se hace una selección apropiada, se consigue un nivel de experiencia previamente desco­nocido, de balance y completud”. (pp. 60­71)13

En la colaboración multidisciplinaria, las disciplinas participantes, permanecen sin modificación; es decir, no comparten los mismos métodos. Los profesionales implicados en una tarea multidisciplinar adoptan actitudes de colaboración con objetivos comunes. Es posiblemente, el acercamiento disciplinar más popular, ya que al no integrarse el trabajo metodológico entre disciplinas permite un cierto grado de independencia entre participantes.

La colaboración multidisciplinaria es apropiada en la etapa de desarrollo en el proceso de diseño. El tres y el triángulo como su expresión geométrica, nos dan la definición misma de estructura.

Dadas las tres disciplinas, vemos que vemos que el proyecto P, al ser independiente a ellas, requerirá de una actitud de colaboración con objetivos comunes. Los investigadores hacen análisis independientes, y en el resultado final no presentan un resumen integrador,

13 En la descripción de González Ochoa, el tres significa muchos, y también a través, lo cual nos coloca en la posición de incluir bajo éste número tanto la multidisciplina como la transdisciplina. Hemos preferido separarlos para facilitar su comprensión.

no establecen vínculos entre disciplinas, ni una pers­pectiva articulada. Algunos autores destacan que es el nivel inferior de integración, que ocurre cuando alre­dedor de un interrogante se busca información y ayuda en varias disciplinas, sin que dicha colaboración con­tribuya a modificarlas o enriquecerlas. Esta puede ser la primera fase de la constitución de equipos para trabajo interdisciplinario.

Desde éste punto de vista, las profesiones del diseño se distinguen al considerar sus acciones como compo­nentes de colaboración social amplia: redes de depen­dencia mutua (académicas y/o profesionales), grupos de interés (por edad, sexo, nacionalidad, ingreso, estatus socio­económico, entre otros), afinidad o identidad culturales, estilos de vida, nivel socio­económico, etc. Podemos decir, que la perspectiva de las profesiones del diseño, es una forma de entendimiento y participa­ción en el mundo construido por los humanos que nos abre la posibilidad de pensar y participar en él de dis­tintas maneras: facilitando la comunicación humana (diseño gráfico), estableciendo cualidades polifacéticas de los objetos, procesos y servicios (diseño industrial), humanizando de forma innovadora la tecnología (diseño de la interacción, arquitectura, diseño industrial), opti­mizando el intercambio cultural y económico (diseño gráfico, diseño industrial, arquitectura), mejorando la sustentabilidad y la protección del medio ambiente (ar­quitectura, diseño industrial), apoyando la diversidad cultural a pesar de la globalización (diseño escé nico, di­seño gráfico, arquitectura, diseño industrial), evaluando

Foto 3: Centro de ciencias sobre las plantas Donald Danforth

en San Louis Missuri.

24 Colección Textos FA o Diseño Industrial. Formación, propósitos y acciones

relaciones estructurales, constructivas y organizativas (diseño industrial, arquitectura, diseño artesanal); en síntesis, mejorar –en armonía con otras profesiones– el valor y la calidad de vida.

En la imagen superior vemos un ejemplo de colaboración multidisci­plinaria: arquitectura, Ingeniería genética, química y biología.

Al contrastar espíritu y naturaleza, Gregory Bateson14 menciona la ley de Gresham de la evolución cultural, según la cual las ideas excesivamen­te simplistas desplazan siempre a las más elaboradas, y lo vulgar y detes­table desplaza siempre a lo hermoso. Y sin embargo, lo hermoso persiste.

Empecé a pensar que las anticuadas, malamente establecidas ideas so­bre epistemología, en especial sobre la epistemología humana, refleja­ban una física obsoleta y contrastaban curiosamente con lo poco que parecíamos saber acerca de los seres vivos. Era como si se supusiera que los miembros del género humano eran criaturas totalmente singu­lares y materialistas, frente a un universo viviente donde imperaba lo general (no lo singular) y lo espiritual (no lo materialista).

Desde la perspectiva de Bateson, la naturaleza no se encuentra allá afuera ajena a nosotros, sino que refleja en cambio, los aspectos más complejos de los seres humanos, los estéticos, los intrincados, los refinados. Reconoce así, en la naturaleza, “las raíces de la simetría humana, de la belleza y de la fealdad, de la estética, de la propia condición viva del ser humano y su pequeña cuota de sabiduría”.

Los principios del número nos conducen ahora a otra dimensión del universo, a la profundidad.

Cuatro . . . Transformación

En las mitologías de todo el mundo, la madre tierra se describe como la que alimenta los patrones emergentes con materia de los cuatro tipos

14 Bateson, Gregory (2002). Espíritu y naturaleza. Buenos Aires, Amorrortu., pp. 15-16.

Fig. D: representación de colaboración transdisciplinaria

25Los motivos deL diseño: entre eL proyecto discipLinario y La coLaboración transdiscipLinaria

descritos por los antiguos como los cuatro elementos fundamenta­les: tierra, agua, aire y fuego. …En lo relativo a los procedimientos cons­tructivos, mientras que el triángulo se constituye conectando los puntos existentes de la vesica piscis, la construcción del cuadrado requiere de la facultad del pensamiento racional, puesto que es necesario pasar por un procedimiento secuencial y lógico para descubrir los puntos ocultos que se deben de conectar. (Ibíd., pp. 84­85)

Entiendo proyecto transdisciplinario, como un proyecto que cruza cam­pos disciplinares, que integra y conecta conocimientos de manera cola­borativa; que los conocimientos se encuentran en distintos campos de especialización, en distintos lugares. En la colaboración transdisciplina­ria, no se entiende la colaboración, si ésta no es parte de las problemática de los distintos entornos. En la transdisciplina, la colaboración lleva al crecimiento de las propias disciplinas participantes. El vínculo entre disci­plinas propicia el surgimiento de propiedades emergentes. La colabora­ción transdisciplinaria es, la aceptación de la complejidad (Morin)15 del mundo real que no puede abordarse de modo simple. En la colaboración trasndisciplinaria, vemos como el entorno natural, social, y cultural influ­yen en la solución estructural y conceptual del diseño.

No hay duda que, las distintas acciones de diseño, tradicionalmente se han alimentado de diferentes campos de conocimiento, lo que ha provoca­do más de una dificultad al momento de determinar las características del propio campo disciplinar. Sin embargo, el diseño como campo y especiali­dad monodisciplinar, con su propios recursos: habilidades, conocimientos y actitudes, tiene mucho que aportar en la colaboración transdisciplinaria.

La invitación que hago como diseñador16 es, adentrarnos y acercarnos al modo de pensamiento complejo, con componentes imaginarios (Spen­cer­Brown), pues de acuerdo con Ibáñez (1990),17 son imaginarios porque no están en el espacio sino en el tiempo: en uno de los futuros posibles. El pensamiento simple, que él llama, de primer órden, piensa el objeto; en cambio el pensamiento complejo, –de segundo órden–piensa el pensa­miento del objeto; es decir, se interesa por el pensamiento de las personas.

Foto 4: Arq. Renzo Piano. Museo Academia de las Ciencias

en San Francisco, Cal. Foto 5: Tomás Saraceno:

instalación Spider’s Web

15 Para un panorama de los antecedentes de Morin sobre el pensamiento complejo: Morin, E. (1981). El método. La naturaleza de la naturaleza. Madrid, Cátedra. Para una introducción sobre el tema: Morin, E. (1990). Introducción al pensamiento complejo. Barcelona, Gedisa, 1994. Para ver la propuesta de aplicación del pensamiento complejo en la ecuación: Morin, E. (1999). Los siete saberes necesarios para la educación del futuro. México, Correo de la unesco, 2001.

16 Para un mayor detalle de la propuesta teórica ver, Ricalde Gamboa, E. (2007). “Transdisciplina, diseño y comprensión: la plataforma integradora”, en Anna Calvera (ed.), De lo bello de las cosas. Materiales para una estética del diseño, Barcelona, Gustavo Gili.

26 Colección Textos FA o Diseño Industrial. Formación, propósitos y acciones

Entonces, desde un principio debemos distinguir: el co­nocimiento (de objetos) de la comprensión de las accio­nes de los sujetos.

Algunos de los principios que fundamentan el pen­samiento complejo y la colaboración transdisciplinar son: no existe un centro obvio para la acción, cada nuevo miembro agrega valor, debe existir un deseo de contribución en todos los participantes, el conocimien­to se desarrolla en los cruces (emerge), la creatividad es potenciada, los valores surgen de la organización misma (dna), la fuerza de los puntos de intersección los con­vierte en ejes rectores, todo y todos nos encontramos interconectados de alguna u otra manera, las uniones débiles son importantes, pues también existe poder en las conexiones frágiles distantes.

Conclusión

Sin lugar a dudas, la “innovación” ha sido la caracterís­tica distintiva en las esferas social y de desarrollo de los últimos años. Este campo ha sido pionero de logros y de avances tecnológicos. Sin embargo, la próxima gran fuerza disruptiva para el desarrollo, deberá buscarse, no únicamente en un laboratorio, o a través de avances

17 Ibáñez, J. (comp.), (1990). Nuevos avances en la investigación social. Investigación social de segundo órden. Barcelona, Anthropos.

en logística, o en una mayor especialización, aún con­siderando, que todo esto puede impulsarnos hacia de­lante. El mayor logro, vendrá de un cambio en nuestra manera de pensar, que nos permita reenfocar nuestros esfuerzos para mejorar nuestra efectividad organizati­va­capacidad de colaboración transdisciplinaria. El surgimiento de un nuevo enfoque más estructurado y organizado alrededor de acercamientos y convergen­cia disciplinares, nos obligará realmente a examinar la evidencia para asegurar que los recursos que inverti­mos se ubiquen, allí donde el potencial de beneficios es más elevado. Requerirá de nuestra parte, adaptar nuestras herramientas de gestión y organización, así como, la construcción de nuestra capacidad colectiva para obtener resultados concretos.

Desde el punto de vista de los beneficios sociales y ambientales, la colaboración transdisciplinaria: estimu­la en la academia la creación de líneas de investigación relacionadas con el cuidado del medio ambiente, y del entorno social y cultural a mediano y largo plazo; como área de oportunidad es muy dinámica y se encuentra en crecimiento constante, debido al enorme desarrollo del conocimiento y la tecnología a nivel internacional. Habrá que estar muy atentos a la búsqueda de las pro­piedades emergentes que genere la colaboración múl­tiple abierta (inteligencia colectiva).

27Los motivos deL diseño: entre eL proyecto discipLinario y La coLaboración transdiscipLinaria

Referencias

Becher, Tony (1989). Tribus y territorios académicos. Barcelona, Gedisa 2001.Capra, F. (2002). La trama de la vida: Una nueva perspectiva de los sistemas vivos.

Barcelona, Anagrama.Carbajal Escobar, Y. (2010). “Interdisciplinariedad: desafío para la educación supe­

rior y la investigación”, en Revista Luna Azul núm. 31, julio­diciembre 2010, Colombia, Universidad de Caldas, pp. 156­169.

Charle, C., Schriewer, J., Wagner, P. (comps). (2004). Redes intelectuales trasna-cionales. Formas de conocimiento académico y búsqueda de identidades cul-turales. Barcelona, México, Pomares, 2006.

Flores­Malagón, A., Millán de Benavides, C. et al. (2002). Introducción en Alberto Flórez­Malagón y Carmen Millán de Benavides (eds.), Desafíos de la transdisci-plinariedad. Bogotá: Universidad Javeriana.

Flores Valdéz, J. y Martínez Mekler, G. (comps.) (2011). Encuentros con la com-plejidad. México, Siglo XXI, unam.

Follari, R. (2005). “La interdisciplina revisitada”, en Andamios. Revista de Investi-gación Social , junio, año 1, vol. 1, núm. 2, México: Universidad Autónoma de la Ciudad de México. pp. 7­17

Foerster, H., In Pakman, M., & Sluzki, C. (1991). Las semillas de la cibernética: Obras escogidas. Barcelona, Gedisa.

García Canclini, N. (2004). Diferentes, desiguales y desconectados. Mapas de la interculturalidad. Barcelona, Gedisa.

García, R. (2006). Sistemas complejos. Conceptos, método y fundamentación epistemológica de la investigación interdisciplinaria . Barcelona, Gedisa, 2008.

Gutiérrez Serrano, N.G. (coord.), (2009). Redes, comunidades, grupos y trabajo entre pares en la investigación eductativa. México, crim, unam, Plaza y Valdés.

Maturana, H., & Varela, F. (2003). El árbol del conocimiento: Las bases biológicas del entendimiento humano. Buenos Aires, Lumen, Editorial Universitaria.

Nicolescu, B. (2008). Transdisciplinarity: Theory and Practice Cresskill, NJ: Hamp­ton Press.

Nicolescu, B. (2002). Manifesto of Transdisciplinarity . Albany, State University of New York Press.

Plattner, H., Meinel, C. & Leifer, L. (editors) (2011). Design Thinking. Understand, Improve, Apply. Heidelberg, Londres, Springer.

Watzlawick, P. (1981). Teoría de la comunicación humana: Interacciones, patolo-gías y paradojas. Barcelona, Herder.

Wiener, N. (1985). Cibernética o el control y comunicación en animales y máqui-nas. Barcelona: Tusquets.