DIOS TE LLAMA A SERVIRLE

Base bíblica:

Apocalipsis 22:12 He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra.

¿Cuánto saben que Cristo viene pronto? , Pero la pregunta más importante en esta tarde es: ¿Cuántos estamos trabajando en la obra del Señor?

El texto que acabamos de leer es muy conocido, yo lo he escuchado desde pequeño y lo sigo escuchado aun a mi edad, lo han escuchado mis padres, lo escucharon mis abuelos y estoy seguro que ustedes también lo han escuchado en diversas ocasiones, pero una palabra que me llama mucho la atención es de esta cita bíblica es “recompensar” y la recompensa hermanos Es un premio que se obtiene por un merito o una buena acción.

Y meditando en esto, viene a mi mente el ejemplo de nuestro trabajo secular, cuando nosotros hacemos bien nuestro trabajo y damos el mejor y mayor de nuestros esfuerzos, estos se ven recompensados con un mejor puesto o un mejor sueldo, de la misma forma hermanos, así como damos el mayor de nuestros esfuerzos en nuestro trabajo secular, debemos de dar nuestro mayor esfuerzo para trabajar en la obra de Dios.

Debemos entender que todos nosotros hemos sido llamados para servir en su obra, no solamente para congregarnos y ahí se acabo todo, cada uno de nosotros tenemos algo que hacer en el servicio a Dios.

Pero a veces nos preguntamos ¿Qué puedo hacer yo en la obra de Dios? déjame decirte que Cristo al llamarnos, nos ha capacitado con dones, talentos, o algo con lo cual podemos colaborar en la obra.

En Mateo 25:15 nos dice: A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad; y se fue lejos.

En esta cita nos damos cuenta que Dios nos ha provisto de algo, conforme a nuestra capacidad.

Muchos pensaran que no están capacitados, o que no pueden hacer algo, que no son útiles, pero la realidad es otra, pues Dios nos capacita a todos para que podamos hacer un trabajo dentro de la iglesia.

Algunas veces en nuestro caminar cristiano hemos dicho: “Yo no trabajo en la obra de Dios porque no hay nada que hacer” pero la palabra a mi me dice en

Mateo 9:37 Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos.

“La cosecha es grande, pero los obreros son pocos”.

No importa el trabajo que Dios te llame a desempeñar dentro de tu congregación, porque por muy pequeño que parezca para Dios es importante.

Si me permiten imaginar, en una empresa con sus gerentes, oficinistas, empleados de aseo, podemos llegar a pensar que los empleados de aseo no son tan importantes como los gerentes, pero en realidad si lo son, si ellos no limpiaran ¿Quién lo haría?, entonces podemos deducir que son tan importantes como lo sería el gerente o cualquier otro empleado.

Hermano, si tú sientes el llamado de Dios para trabajar en su obra no te detengas, basta ya de dejar a Dios en segundo lugar, basta ya de hacernos menos y decir que no podemos, basta ya de poner excusas, Dios te quiere usar grandemente, es momento de levantarnos, de retomar las fuerzas perdidas, de recobrar el ánimo, de esforzarnos y ser valientes, recordemos algo muy importante

“El trabajo en el Señor no es en vano”

Porque no pasas a este altar y le ofreces tus proyectos a Dios, habla con él pide perdón por abandonar su trabajo, estoy seguro que si no te sientes capaz el te va a capacitar, el quiere hacer algo grande contigo.