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La Agrupación de Abogados Jóvenes y su equipo de redacción no se hacen responsables de las opiniones manifestadas en los artículos publicados.

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Ejecutiva de la Agrupaciónde Abogados Jóvenes

Presidenta: María Esther Medina CastillaSecretaria: María Milagrosa Pacheco PérezVocales: Mónica Raquel Benítez Díaz

Javier Ramos RosalesVanessa Raquel Arvelo EstévezJuan Rodríguez Batista

Amedida que avanzo en el ejercicio deesta nuestra profesión de abogado, heido constatando que algunos compañe-

ros incumplen sistemáticamente el Código Deon-tológico; Código en el que perviven, como princi-pios fundamentales en el ejercicio de la profesiónde la abogacía, la independencia, la dignidad, laintegridad, el servicio, el secreto profesional y lalibertad de defensa, donde se propugna que elabogado debe actuar siempre honesta y diligen-temente, con lealtad al cliente, con respeto a laparte contraria... “y si cualquier abogado así no lohiciere, su actuación individual afecta al honor ydignidad de toda la profesión”.

Sin embargo y, sobre todo, en lo que respec-ta a las relaciones entre letrados, cada vez más,acudimos a juicios (los del turno de oficio, en losque no hemos conseguido dar con el beneficiariode asistencia jurídica gratuita) donde el compa-ñero, el propio día y hora de la vista, te informaque va a representar a aquél que, hasta esemomento, era tu defendido, sin que previamentete haya solicitado la venia, incumpliendo porende el art. 9.1 del mentado Código, ocasionán-dote la pérdida de la mañana en el Juzgado y eltiempo de preparación de la vista.

O bien, intentas comunicarte con un compa-ñero telefónicamente y/o quedar con él paraintentar transar un asunto, y te encuentras conque es misión imposible pues siempre “está muyocupado”, incumpliendo, por tanto, el art. 12 delmismo texto, donde se establece que debemosatender inmediatamente las comunicaciones deotros abogados, así como, recibir siempre y conla máxima urgencia al compañero que visitenuestro despacho.

Pero es más, el colmo llega cuando tu propiocliente es llamado por el compañero de la partecontraria (con el que ya has hablado en otrasocasiones) con el fin de obtener información ointentar forzar un acuerdo, al que tú ya le hasmanifestado tu oposición.

Por ello, desde esta Editorial, insto a losmiembros de AJA a que no incurramos en elincumplimiento del Código Deontológico y queintentemos aplicarlo con el máximo rigor, lo quemejorará nuestras relaciones con los compañe-ros o, al menos, nuestros sueños, al tener laconciencia tranquila.

María Esther Medina CastillaABOGADA Y PRESIDENTA DE LA AGRUPACIÓN AJA

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bastante controvertida y some-tida a un continuo debate jurídi-co, ya que la misma está ínti-mamente relacionada con elderecho a la intimidad, el secre-to de las comunicaciones y laprotección de datos.

Como muestra de la grancantidad de sentencias que hansido dictadas sobre el tematratado, a continuación expon-go una de las más conocidaspara que cada uno extraiga suspropias conclusiones:

Sentencia del TribunalSupremo, Sala 2ª, de 1 marzode 1996, Ponente: MartínPallín. En unos de los funda-mentos jurídicos de dichasentencia se establece que “Lacuestión de la validez de unagrabación subrepticia de unaconversación entre cuatropersonas realizada por una deellas sin advertírselo a losdemás, no ataca a la intimidadni al derecho al secreto de lascomunicaciones, ya que lasmanifestaciones realizadasrepresentaban la manifestaciónde voluntad de los intervinien-tes que fueron objeto de graba-ción de manera desleal desdeel punto de vista ético pero queno traspasan las fronteras que

H oy en día quién no haparticipado en lasmás que usuales

llamadas telefónicas de ciertascompañías privadas, que sededican a ofrecer determinadosproductos y servicios por estavía. Serán muy pocas laspersonas que no han interveni-do en dichas conversaciones, yque no han sido grabadas enlas mismas pero, ¿nos hemosparado a pensar en la legali-dad de esas grabaciones tele-fónicas?

Lo cierto es que el estudiosobre la legalidad e ilegalidadde dichas grabaciones es untema que ha sido discutido deforma extensa no sólo por ladoctrina sino también por laabundante Jurisprudencia queversa sobre la materia.

Si se analiza la Jurispruden-cia mayoritaria, ésta fija unoscriterios que se han de tenersiempre presente para estudiarsi la grabación es consideradalegal o ilegal. No sé si a todosles causará una grata o ingratasorpresa el hecho de que lagrabación de llamadas telefóni-cas se consideren legales si elque realiza la grabación esparte interviniente en la misma,

sin la necesidad de comunicar-le a la otra parte que se le esta-ba grabando en su conversa-ción. Un supuesto diferentesería si la persona que procedea realizar dicha grabación no esparte interviniente en la misma,independientemente de que lecomunique a los interlocutoresque les está grabando.

Una vez visto el criterio porel cual se rige la Jurisprudenciamayoritaria, se puede compro-bar que abundan las típicasgrabaciones que se realizancuando llaman operadores deciertas compañías, que nohace falta mencionar porque atodos se nos viene a la cabezamiles de ejemplos, grabacionesque son consideradas legalesindependientemente de que secomunique al interlocutor quese va a proceder a la grabaciónla conversación. Por ello, estasgrabaciones serán legales ypodrán ser utilizadas en juiciocomo prueba de los contratos opactos llevados a cabo durantedicha grabación.

A pesar de que numerosassentencias emanadas por losTribunales españoles, tiendena inclinarse en el sentido mani-festado, ésta es una cuestión

3,2,1…¡GRABANDO!

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el ordenamiento jurídico establece para protegerlo íntimo y secreto.

El contenido de la conversación pudo llegar alproceso por la vía de su reproducción oral sialguno de los asistentes recordaba fielmente loconversado o mediante la entrega de la cinta querecogía textualmente, con mayor o menor calidadde sonido, el intercambio de palabras entre todoslos asistentes.Cuando una persona emite volun-tariamente sus opiniones o secretos a un conter-tulio sabe de antemano que se despoja de susintimidades y se las transmite, más o menosconfiadamente, a los que le escuchan, los cualespodrán usar su contenido sin incurrir en ningúnreproche jurídico”

Asimismo no sólo se encuentran múltiplessentencias del Tribunal Supremo sino quetambién el Tribunal Constitucional se ha pronun-ciado sobre este tema y más concretamente ensu Sentencia 11/1984 de 29 de Noviembre en lacual manifiesta lo siguiente:

“Quien graba una conversación de otros aten-ta, independientemente de toda otra considera-ción, al derecho reconocido en el art. 18.3 CE;por el contrario, quien graba una conversacióncon otro no incurre, por este solo hecho, enconducta contraria al precepto constitucional cita-do.”

En realidad, no hace falta decir que la finali-dad que persigue este tipo de grabaciones es“asegurar la calidad del servicio y el contenido dela mismas”, la persona que realiza dicha graba-ción es uno de los interlocutores en dicha conver-sación, ello supone que la legalidad de las graba-ciones realizadas no están siendo debatida, haquedado claro por la abundante Jurisprudenciaque las mismas son totalmente legales.

Por lo tanto, después de esta breve inmersiónen el mundo de las grabaciones telefónicas ysobre la legalidad de las mismas, es imprescindi-ble ser cuidadoso con las manifestaciones que serealicen durante la conversación telefónica, yaque las mismas podrán ser utilizadas parademostrar determinados hechos, pactos ocontratos verbales.

Yurena Rodríguez Afonso Abogada

Deontología

A la vista de los continuos incumpli-mientos por parte de algunos denuestros compañeros del CÓDI-

GO DEONTOLÓGICO, no está de más,recordar los siguientes artículos:

Artículo 9.- Sustitución del Aboga-do.

“1. El Abogado no podrá asumir ladirección de un asunto profesional enco-mendado a otro compañero sin advertirpreviamente al mismo por escrito o soli-citar su VENIA ...”

Artículo 12.- Relaciones entreAbogados.

“8. Las reuniones entre Abogados y susclientes se procurará celebrarlas en lugarque no suponga situación privilegiada paraninguno de los Abogados intervinientes yse recomienda la utilización de las depen-dencias del Colegio de Abogados, cuan-do no exista acuerdo sobre el lugar decelebración de las reuniones...”

“9. El Abogado debe recibir siempre ycon la máxima urgencia al compañeroque le visite en su despacho y con prefe-rencia a cualquier otra persona, sea o nocliente, que guarde espera en el despa-cho...”

“10. El Abogado debe atender inme-diatamente las comunicaciones escritaso telefónicas de otros Abogados y estasúltimas debe hacerlas personalmente”...”

Artículo 14.- Relaciones con laparte contraria.

“1. El Abogado ha de abstenerse detoda relación y comunicación con la partecontraria cuando le conste que está repre-sentada o asistida por otro Abogado...”

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Soy abogada desde hace 2 años… fuiprimero pasante durante algunos mesesdonde aprendí que es ser abogado

porque, cuando salí de la facultad, no era aboga-da sino que el ejercicio de aprendizaje que meofrecieron mis compañeros de despacho invir-tiendo su tiempo en mí, me motivaron y me ense-ñaron al trato con los clientes, el ambiente decolaboración y el estudio. Fue lo que me dio laexperiencia recabada para decir hoy, que soyabogada, aunque sé que me queda mucho poraprender.

Mi misión como abogada joven es dedicar mitiempo y esfuerzo constante a dar lo mejor de míen cada caso con los medios disponibles a mialcance, y que cada vez que llegue a mi casadespués del trabajo, tenga la sensación ética dehaber hecho un buen trabajo y que mi clienteesté igualmente satisfecho.

El comienzo es siempre duro porque nadie teconoce y sólo eres un licenciado en Derecho conun curriculum vitae mejor o peor presentado queotro compañero de facultad y, nadie sabe si eresbueno o no, porque no tienes referencias previasni relaciones que te avalen en este ámbito profe-sional.

El primer paso es peregrinar por los despa-

chos jurídicos que nos interesen y nos brinden laoportunidad de adquirir experiencia trabajando,eso sí, los primeros meses gratis y trabajandomuchas horas, cosa que nos desanima muchopero, es comprensible, hasta cierto punto.

Lo ideal es que el periodo de práctica sólo seprolongue como máximo de 4 a 6 meses con unapequeña remuneración de 400 euros (sólo paraalgunos afortunados que se las paguen).

El problema de la iniciación de la profesión esla desinformación y desorientación que siente elabogado joven, que se irá compensando poco apoco (con suerte) con la colaboración e implica-ción de los compañeros de profesión, la forma-ción y ayuda en su colegio de Abogados y, sobretodo, de la Agrupación de Jóvenes Abogados,donde he encontrado un gran apoyo.

Y después viene el gran dilema: Trabajar porcuenta de un despacho o de forma independien-te. En esta cuestión, el abogado debe sopesarcada opción y ver la que mejor se adapta a susposibilidades.

En resumen, lo que buscamos los abogadosjóvenes es información sobre la profesión queiniciamos para que la formación teórica que reci-bimos en la universidad se convierta en experien-cia práctica y para conseguir este objetivo nece-

EL COMIENZOY LA ABOGACÍA JÓVEN

Mirian Liber Oliva DíazAbogada Col. 4332

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sitamos que abogados cualificados y con expe-riencia nos transmitan su conocimiento prácticodel día a día en los juzgados y en los despachos.

Los abogados jóvenes sólo queremos aportarun aire fresco y renovador a la abogacía tradicio-nal introduciendo nuevas tecnologías y agilizan-do los tan lentos procesos judiciales, así como, eltrato más directo con el cliente, ya sea con elcara a cara tradicional o con las consultas porinternet. Esto es una utopía pero, con ilusión yconstancia, lo conseguiremos.

Eso sí, siempre manteniendo la seriedad y elprotocolo que requiere la difícil y necesariafunción de defender el honor de la ley en nombrede la sociedad.

Para avanzar en el mercado jurídico hay quepensar en la profesión de la abogacía como enuna empresa e intentar adaptar los nuevos instru-mentos de gestión tecnológico que consiganagilizar nuestra actividad (programa Infolex, pági-nas webs de jurisprudencia, etc...) y comprome-terse en nuevos retos a través de estrategias,apostando por la especialización y la formacióncontinuada. Para avanzar debemos comenzar decero y olvidar costumbres perjudiciales marcán-donos como meta la eficacia, organización einnovación moderna positiva.

Y ante todo un nuevo cambio de mentalidad,el abogado joven debe saber que el crédito de unabogado no viene de los pleitos que gana, sinode los que evita, porque “la abogacía moderna,como la medicina; se va haciendo cada día máspreventiva que curativa” y con frecuencia se oyedecir: más vale un mal arreglo que un buen juicio.

Mirian Liber Oliva Díaz

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CONVENIO DECOLABORACIÓN

FINANCIERA ENTRE LAAGRUPACIÓN DE

ABOGADOS JÓVENES YBANCO SANTANDER

CENTRAL HISPANO S.A.

Nuestra AJA, al igual que todas las Agru-paciones de Jóvenes Abogados queintegran la Confederación Española de

Abogados Jóvenes del Estado Español, hafirmado un Convenio de Colaboración con elBanco Santander Central Hispano S.A., conunas condiciones muy ventajosas, resumiéndo-te en estas líneas sus productos principales:

• Cuenta Corriente retribuída exenta de comisio-nes y mantenimiento.

• Anticipos de honorarios profesionales a 0%interés.

• Negociación de recibos.• Pago de Impuestos.• Medios de pago: supertarjetas sin coste primer

año.• Superhipoteca (adquisición, reforma o equipa-

miento del despacho).• Credilocal (adquisición, rehabilitación o refor-

ma del despacho).• Préstamo profesional (adquisición o renova-

ción equipamiento)• Préstamo formación (0% interés)• Leasing mobiliario e inmobiliario.• Bansacar autorenting (arrendamiento vehícu-

los con opción compra)• Seguros de accidentes, vida, hogar: 15% des-

cuento en la prima durante todo el contrato.

PÓRTICO LEGAL. Contiene leyes, directorios deprofesionales, boletines informativos y herramientas einformación que pueden aportar soluciones concretasal abogado. http://www.porticolegal.com

IUSTEL-PORTALDERECHO. Formado por profe-sores universitarios, incluye legislación actualizada,revistas de prensa, proyectos de ley, información sobreoposiciones y jurisprudencia. http://www.iustel.com

Portales Jurídicos NOTICIAS JURÍDICAS. El portal de Bosch ofreceacceso gratuito a legislación, jurisprudencia y noticias.http://www.noticias.juridicas.com

VLEX. Este portal ofrece tanto contenidos gratuitoscomo premium (de pago), incluyendo el acceso a labibliografía de Editoriales como Dykinson, Montecorvoo Ramón Areces. http://www.vlex.com

PORTALES DE CONSULTA. Existen portales diri-gidos a ciudadanos, como lexjuridica.com, canaljuridi-co.com o iabogado.com, que completan su servicio deconsultas online a abogados con guías legales.

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preparación de las ponencias en el mismodesplegadas. Lo que trato de hacer desde estatribuna, es como ya dije, un sano ejercicio deautocrítica y, por qué no decirlo, de introspección,empezando por quien esto suscribe, ya queentiendo que, estando de acuerdo en las formas,en lo que no estoy tan de acuerdo es el fondo, ymás concretamente en el enfoque, dado al temasobre el que versaba dicho Congreso, en el quese propusieron una serie de enmiendas, la mayo-ría de las cuales, gravitaban en torno al factoreconómico, es decir, a las distintas retribucionesque el Letrado percibe por el turno de oficio, quesi bien, es un caballo de batalla permanente denuestro colectivo con las diferentes administra-ciones de Justicia (autonómicas y estatal),entiende quien estas líneas suscribe, una rúbri-ca tan extensa y elocuente, como la que enmar-caba dicho Congreso, debería dar muchomargen de juego, puesto que hay toda una seriede aspectos del turno de oficio y por ende, de laLey 1/1996 de Asistencia Jurídica Gratuita, queserían susceptibles de ser mejorados, y que nogravitan primordialmente sobre aspectos retribu-tivos, puesto que, si bien es cierto, que tambiénen dicho Congreso se propusieron una serie demejoras en lo referente a la imagen que nuestrocolectivo debe proyectar a la sociedad, no esmenos cierto que alguna de ellas cabría tacharlade fútiles, con ello me estoy refiriendo en concre-to a una de las propuestas que más me llamó laatención, que no fue otra que el llamado “sello decalidad”, como una suerte de certificación ISO(International Organization for Standardization uOrganización Internacional para la Standariza-ción) que debería otorgársele a los despachosprofesionales de abogados, con la finalidad dearrogarles un supuesto plus de calidad de cara a

Entre los días 18 y 20 del pasado mes deSeptiembre de 2008, tuvo lugar en Valen-cia el Décimo Quinto Congreso Estatal

de la Abogacía Joven que aglutina a todas lasAgrupaciones de Jóvenes Abogados (AJA) deEspaña, y que se viene celebrando con unaperiodicidad bianual. En esta ocasión, y bajo larúbrica “El turno de oficio y asistencia jurídicagratuita: presente, futuro, propuestas de mejora”,se traían a colación toda una serie de propuestasy sugerencias encaminadas a tratar de mejorar yprestigiar, el tan a veces denostad,o Turno deoficio, siempre desde la perspectiva de los profe-sionales de la abogacía que son los auténticospeones de brega en estas “lides”, tratando, comono podía ser menos, de consensuar posturas ode establecer puntos de encuentro como vías deposible solución a dichas inquietudes y proble-mas, a los que nuestro colectivo tiene que hacerfrente día a día en el desempeño de su labor. Hade resaltarse en este punto, el magnífico esfuer-zo organizativo desplegado por parte de laConfederación AJA Valencia, cuya Ejecutiva veló,en todo momento, por que el citado encuentrosaliera a la perfección, vaya desde aquí todaclase de laudos y parabienes para tan magníficalabor realizada.

Una vez dicho lo anterior, trataremos desdeestas líneas y dentro de los límites de lo quedebe ser un artículo de opinión, de aproximarnosdesde una postura reflexiva, y en clave de auto-crítica, a lo que entiendo debe servir encuentroscomo el que nos reunió en Valencia, vaya pordelante que no pretendo menospreciar, en abso-luto, el gran esfuerzo que los ponentes del citadoencuentro realizaron, ni tampoco, como cabesuponer, el enorme trabajo que les supuso la

XV CONGRESO ESTATALDE LA ABOGACÍA JOVENVALENCIA 08 - REFLEXIONES VARIAS

Javier F. Ramos Rosales. ABOGADO Y VOCAL DE LA AGRUPACIÓN AJA

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los posibles usuarios de nuestros servicios, noquedando claro cual debería ser el órgano o insti-tución encargado de tal otorgamiento, ni la utili-dad última de dicha propuesta, que todo hay quedecirlo, no salió adelante, en pura lógica, a juiciode quien esto suscribe, ya que estimo, quepropuestas como la apuntada, lejos de mejorarde forma sustancial tanto la efectividad como laimagen que da el Letrado en el desempeño de sulabor, podría generar, precisamente, el efectocontrario al deseado, amén de no aportar una

garantía suplementaria tanto al beneficiario de laasistencia jurídica gratuita, en particular, como alciudadano/justiciable en general, pudiendocontribuir de forma involuntaria a dar esa imagensesgada que algunos sectores de la sociedadtienen acerca de nuestro colectivo, y lo que espeor aún, sobre nuestro trabajo. Excedería estemarco si tratase de analizar una por una todaslas propuestas allí barajadas, lo que en cambio sitrato, es poner el acento en que, aquellos queformamos parte de esta noble profesión, que nolo olvidemos desempeña un papel irreemplaza-ble en ese conglomerado llamado Administraciónde Justicia, nos enfrentamos a una serie de retosconstantes en el devenir diario por los diferentesjuzgados y pasillos de las administraciones, y porello, y a modo de reflexión final, diré que creo quenuestro colectivo tiene la suficiente fuerza y elnecesario peso específico, tanto en el seno denuestros respectivos Colegios Profesionales,como dentro de nuestra sociedad, que no lo olvi-demos, se configura como un Estado social,democrático y de derecho, como para tratar de

cambiar todas aquellas cosas que entendemosmanifiestamente mejorables, y que nos afectantanto a nosotros, profesionales del derecho,como al resto de ciudadanos, cuando de acudir ala administración de justicia se trata. Tendremosque tener bien presente, por tanto, las formas, delas que hablaba anteriormente, como el enfoqueque debemos darle a dichas solicitudes decambio, puesto que, de no ser así, podríamosdesatar, como ya apunté, un efecto antitético aldeseado, amén de generar incomprensión tanto

en las administraciones, destinatariasúltimas de nuestras reivindicaciones,como en el resto de la ciudadanía,empezando por el cliente que acudea nuestro despacho en busca deasesoramiento.

Como colofón diré, que tendre-mos que estar atento, e hilar muy finoa la hora de incardinar nuestrasdemandas de mejora, y tratar en lamedida de lo posible, de no errar enla senda a seguir en la consecuciónde nuestras reivindicaciones para conla administración de justicia, que esti-mo debe ser una constante en nues-tro trabajo, y que no seamos ajenos alos verdaderos problemas que nos

afectan a tod@s, y que no son otros, que los queaquejan en su génesis más profunda al tercerpoder.

Javier F. Ramos RosalesAbogado.Vocal de la AJA Tenerife

REUNIONES DE LAAGRUPACIÓN

El primer y tercer miércolesde cada mes, a las 13:00horas, en el Colegio de

Abogados de Santa Cruz deTenerife. Una vía para cana-lizar tus inquietudes, otromodo de relacionarte con

los compañeros y decompartir ideas con aboga-

dos jóvenes como tú

Palac io de Congresos de Valenc ia

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_ Así que eres Armando Gracia _ me dijo el hom-bre trajeado desde el otro lado de la mesa des-pués de estrecharme la mano. No sonreía. Dehecho, parecía imposible que lo hiciera. Asentícon la cabeza. Él siguió revisando los tres pape-les grapados, sin quitarse las gafas de sol, y surostro aún se volvió más severo. _Veintidós años,residente en La Laguna, con coche propio, estu-diante de Derecho…_ ¿Ya han decidido lo que van a tomar? _ Le inte-rrumpió el camarero._ Un Cutty Shark, con agua, no mucha. Dosdedos _ respondió sin apartar la vista del docu-mento. Su voz sonó grave, densa, autoritaria, conun acento que no logré clasificar; suramericano,quizás. El camarero asintió y pasó a prestarmeatención a mí._ Yo de momento nada, gracias _ contesté trascalcular cuánto llevaba en la cartera. _ Nunca mehabían hecho una entrevista de trabajo en unacafetería _ traté de bromear._ No me extraña, porque según lo que pone aquíno tienes ninguna experiencia.Noté cómo el rubor poblaba mis mejillas. Olvidéese detalle. El currículum con la experiencia labo-ral falsa se lo había enviado a otra empresa.Fallo mío._ Derecho es una carrera difícil. ¿En qué cursoestás?_ En tercero... Bueno, y en segundo _ añadí rien-do, recordando que aún tenía pendiente la asig-natura de Derecho Penal.El señor del traje negro me miró arrugando lafrente. Imaginé cómo aquellos ojos, ocultos trasel oscuro cristal, me estudiaban; cómo escruta-ban cada poro de mi piel y se llenaban de perple-jidad al escuchar mis palabras. Y es que los ojosde más de cincuenta años no saben de suspen-

sos, no entienden de profesores sin vocación, ylas carreras de cinco años han de durar eso;cinco años. Ni más, ni menos.Noté cómo el cuello de mi camisa se empeque-ñecía por momentos.La tensión la rompió el camarero, que dejó labebida encima de la mesa._ La honestidad hay que dejarla colgada en casaantes de ir a una entrevista de trabajo _ aconse-jó, haciendo una mueca de desagrado al tiempoque apuntaba algo en el papel. Bebió del anchovaso, abriendo tan portentosamente la bocacomo para no mojarse los labios _¿Sabes que eltrabajo sería por un mes, en el sur de la isla?Tendrías que alojarte en la misma casa. ¿Tesupone algún problema?_ Ninguno, por mí perfecto._ ¿Sabes algo de bricolaje, mecánica?_ Algo, sí. Me gusta mucho todo ese mundillo.Soy un asiduo de Bricomanía _ mentí sin convic-ción._ ¿Y de jardinería?_ También, también. En casa tenemos un peque-ño jardín que me gusta cuidar. Lo riego, arrancolas malas hierbas, quito las hojas secas… Lo nor-mal, vamos.Él torció la cabeza en un tic nervioso y se frotó lafrondosa barba. Intuí que se estaba dando cuen-ta de que no decía la verdad. Tarea que de hechono era nada difícil, ya que yo miento fatal._ Tampoco vas a hacer nada del otro mundo _

aclaró tras echar otro trago_ . Si tuvieras que ele-gir los tres adjetivos que mejor te definen, ¿cuá-les serían?_ Pues… yo diría que…Inconstante._ …constante…Inexperto.

MI SEGUNDO PRIMER TRABAJOPor Yerai Teruelo Hernández

GANADOR DEL PRIMER PREMIO DE LAIII EDICIÓN DEL CERTAMEN DE RELATO BREVE

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_ …eficaz…Imbécil._ …y, como usted ya se ha podido dar cuenta:honesto._ Bien, muy bien… _ respondió, esta vez pare-ciendo satisfecho_ . ¿Cuánto esperas ganar,Armando?¿Qué pregunta era aquella? Yo me conformabacon lo suficiente como para pagarme la matrícu-la de la Universidad y que me sobrase algo paraalgún capricho. Unos quinientos euros._ Pues unos…_ Pero no me lo digas _ se apresuró ainterrumpirme_ . Quiero que pienses esa canti-dad, que la tengas bien clara en la mente.Visualízala y guárdala para ti.Seiscientos.Apuró todo el contenido del vaso y lo dejó concontundencia en la mesa. Se quitó las gafas paralimpiarlas con una de las servilletas. En ese ins-tante sus ojos se cruzaron con los míos. Eran deun azul grisáceo, incapaces de mostrar alegría,pero enérgicos, magnéticos, destacando sobreunas violáceas ojeras que terminaban de esculpirunas facciones angulosas infinitamente castiga-das por el paso de los años._ Lo que yo te voy a proponer es un trabajo queal mismo tiempo no lo es; o, dicho de otro modo,son dos trabajos en uno. Pero necesito que exis-ta confianza. Necesito confiar en ti y necesito queconfíes tú en mí.Me miró, de nuevo con las gafas puestas._ Comprendo.Setecientos._ Es un asunto serio, delicado, y necesito a unapersona inteligente como tú para llevarlo a cabo.No quiero malentendidos. Yo te voy a explicarcómo, cuándo, dónde… Pero lo que nunca vas asaber, lo que jamás quiero que me preguntes, esel porqué._ De acuerdo _ contesté, sintiendo cómo mis tri-pas se iban revolviendo hasta convertirse en unadensa amalgama.Ochocientos._ Tu trabajo, mejor dicho, tu primer trabajo con-sistirá en trabajar en un chalé haciendo las labo-res propias para mantener el jardín, hacer lasreparaciones pertinentes en la vivienda y todoslos demás trabajos menores que te sean pedi-dos. ¿Hasta aquí bien?Asentí.Novecientos.

_ Ahora bien, hay un segundo trabajo que teexplicaré si aceptas mi oferta y del que sólosabremos su existencia tú y yo. Por eso necesitotu confianza, ya que yo ya estoy depositando lamía en ti, contándote esto.Mil._ ¿No habrá que matar a alguien? ?me aventuréa preguntar._ ¡Por supuesto que no! Es algo totalmente legal.No vas a hacer nada que te pueda meter en unlío. Pero necesito tu confianza. Y como sé queme la voy a tener que ganar, ahora quiero quevuelvas a visualizar esa cantidad, ese sueldoideal. ¿Lo tienes?Mil doscientos._ Sí, lo tengo._ Seamos justos. Antes de comentarte esto nosabías que se trataba de dos trabajos en uno. Asíque multiplica esa cantidad por dos y escríbelaaquí _ me extendió una servilleta junto a su carobolígrafo.Con caligrafía temblorosa escribí un tres seguidode tres ceros, la doblé y se lo entregué. Él ni siquiera abrió el papel; lo introdujo directamente enel bolsillo interior de su americana sin mostrar unatisbo de curiosidad._ Confianza, es lo fundamental. Sin ella estamosperdidos. No va a existir ningún contrato de pormedio, no vas a estar inscrito en la seguridadsocial. Pero lo que sí vas a tener es dinero; a dia-rio. Cada día te ingresaré en tu cuenta bancarialo que te corresponda por día trabajado según lacantidad que me has escrito aquí ?dijo dando dosgolpecitos en el bolsillo de la chaqueta?, de esemodo garantizamos nuestra confianza recíproca.¿Te parece bien?Cien euros diarios era, sin lugar a dudas, unnegocio redondo._ Desde luego que sí._ ¿Aceptas el trabajo, entonces?Por un momento me imaginé a mí mismo contes-tando que no, diciéndole adiós a tal cantidad dedinero, volviendo de nuevo a casa con las manosvacías… Y sin saber en qué consistía el segundotrabajo._ Por supuesto, puede contar conmigo, señor.Le estreché la mano, sonriendo, y él respondiótorciendo la boca en un intento de corresponder-me. Después rebuscó en su maletín y sacó de élun estuche negro, algo abultado._ Tu segundo trabajo, Armando, es más sencilloque el primero, pero precisa de la atención de tus

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seis sentidos. Y digo seis porque te vas a tenerque inventar un sexto sentido. Necesito queoigas, que observes, que escuches, que palpes,que huelas… y que proceses toda la informaciónque tengas a tu alrededor, la almacenes en tumente y, cuando termines el trabajo, me la comu-niques. Tan simple y, al mismo tiempo, tan com-plejo como eso.Volvió a quedarse mirándome fijamente, espe-rando mi reacción._ No parece difícil _ comenté aliviado_ . ¿Y esode ahí? _ Pregunté refiriéndome al estuche._ Es una cámara de fotos. Sólo quiero quesaques alguna foto, no muchas, de las personasque ronden por la casa. Muy sutilmente, no hande darse cuenta. ¿De acuerdo?_ De acuerdo _ contesté._ Eso es todo, entonces. Recuerda que esta con-versación no ha tenido lugar, que tú no me hasvisto, y que lo único que vas a hacer es trabajarde jardinero durante un mes. No sabes nadamás, sea quien sea quien te pregunte. ¿Bien?_ Bien, bien.Y tras esa entrevista fue cómo empezó todo.

Llegué a Taramela tras un tortuoso viaje tratandode buscar la calle concreta. Después de haberdado mil vueltas conseguí darme cuenta de quelo que buscaba había estado delante de mí todoel tiempo. Aquello no podía llamarse chalé; esacasa era una mansión en toda regla. El muro querodeaba el jardín era tan largo que lo había con-fundido con la tapia de un edificio público. Elpaseo que daba a la entrada estaba flanqueadopor una hilera de setos, cuidadosamente poda-dos cúbicamente, que constituían un armoniososendero hacia la puerta principal. Pensé en locomplicado que debía ser podar de aquellamanera un seto y cómo iba a ser capaz de con-seguir hacerlo sin ayuda de nadie.Subí las escaleras, que eran de un gres asalmo-nado, y pasé unos instantes perdido de nuevotratando de encontrar el interruptor del timbre. Enlugar de éste había instalada una campana de lomás rústica. Tiré con energía de la cadena y elpotente sonido logró avergonzarme. Poco des-pués la puerta se abrió.Apareció ante mí una elegante señora, delgadapero con una sinuosa figura que, ataviada conuna pomposa bata azul y el pelo negro recogidoen un intento frustrado de moño, me miraba sinocultar el interés. Entre los dedos sostenía un

cigarrillo, confiriéndole el humo que desprendíauna mística aura._ Tú debes ser el que viene a sustituir a Román_ preguntó con una voz áspera, ronca._ Sí, soy yo, el jardinero _ respondí con la vozmás cordial que pude. Le tendí la mano, pero ellaobvió estrechármela arqueando una ceja y dandouna profunda calada al cigarrillo._ Pasa _ ordenó apartándose de la puerta altiempo que permitía al humo escaparse entre suslabios. Obedecí y vi lo lujoso que era el ampliorecibidor. El suelo estaba enmoquetado, de uncolor granate. El techo lo atravesaban unas grue-sas vigas de madera, que le daban a la estanciaun aspecto sólidamente majestuoso?. Eres muyjovencito, ¿no? ¿Cuántos años tienes?_ Tengo veintiún años, señora._ No me llames así, hazme el favor. Mi nombrees Rocío._ Armando, encantado _ dije, a lo que ella res-pondió tendiéndome su mano para que se labesara. Decidí que sería mejor idea estrechárse-la?. Un placer.Ella suspiró un tanto airada.Rocío me enseñó toda la casa, que constaba decinco dormitorios, uno de ellos para invitados,que sería el que iba a ocupar yo. Después baja-mos al jardín y me dijo cuáles serían las tareasque debía llevar a cabo los días pares: cortar elcésped, podar, limpiar las hojas y conectar el sis-tema de riego. Los días impares debía comenzara desmontar, lijar y barnizar cada una de laspuertas y ventanas de la casa. Tarea que, segúnella, nunca había querido hacer Román y memantendría ocupado durante todo el mes.Mi jornada terminaba a las cuatro de la tarde. _ Después de esa hora puedes hacer lo quequieras, igual que los sábados y domingos._ ¿Y qué se puede hacer por aquí? ¿Hay algúncentro comercial cerca?Ella respondió con una sonora carcajada. Sellevó el cigarro a la boca y soltó el humo con airechulesco._ ¿Aquí? Morirte del aburrimiento. Tienes LosCristianos a media hora. Pero no te aconsejo quevayas entre semana porque yo te quiero en pie alas ocho de la mañana._ De acuerdo.No tengo excusa para no estudiar DerechoPenal, pensé.

Los primeros días pasaron rápido. El trabajo en

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el jardín era mucho más ameno que el de carpin-tero. Y en cuanto a mi segundo trabajo, aún nohabía sido necesario utilizar ningún sexto senti-do. ¿Se habría equivocado el hombre del trajenegro? La casa sólo la ocupábamos Rocío y yo.No había nadie más. Ella se dedicaba a pasar lashoras echada en el sofá, fumando y viendo latelevisión en su pantalla panorámica. Ni si quieracocinaba, sino que pedía la comida a un restau-rante chino que tenía servicio de venta a domici-lio._ La comida china es el secreto para manteneruna figura ideal _ me había confesado un día enla cocina _. ¿Cuántos chinos conoces que esténgordos? _ preguntó guiñándome un ojo.No había ni un solo motivo para desconfiar deella.En cuanto a las fotos, había conseguido sacarunas cuantas cuando descansaba plácidamentetras sus excesos con el whisky escocés. La ope-ración había sido un éxito. Todo se estaba des-arrollando con increíble tranquilidad.Pero aún no sabía lo que ocurriría la madrugadadel día siguiente.

Me sacaron de mi profundo sueño unos gritosque, aunque sonaban lejanos, poseían el timbredesgarrador de la auténtica desesperación. Mehelaron la sangre. Sonaban acompasados y fero-ces. Traté de armarme de valor cuando desapa-recieron. Estaba claro que aquél era el motivo demi segundo trabajo.Abrí el cajón de la mesilla de noche tratando deencontrar algo que me sirviera de defensa. Noencontré nada. Intenté tranquilizarme, pensar,pero oí unos pasos que terminaron de desespe-rarme. Fui al armario, cogí la percha más sólidaque encontré y salí al pasillo con la cautela pro-pia del mejor cazador.Caminar por aquella inmensa casa de noche erauna verdadera prueba de hombría. Al final delinterminable pasillo se veía una luz encendida.Era la habitación de Rocío. Caminé, casi repté,sigilosamente en su dirección, empuñando lapercha como si se tratara de la más mortífera delas armas, hasta que otro sonido consiguió que elcorazón me diera un vuelco.La ducha.Fui hacia el baño, esta vez corriendo. El aguacaía con virulencia y la nube de vapor que seestaba formando impedía tener una visión clara.Abrí la puerta de la mampara y, sin dejar de

apuntar con la percha, grité:_ ¡Sal de ahí o te clavo esto en todo el cuello!_ ¡Ey! ¡Relax, amigo mío! _ respondió un chicodesde dentro de la ducha con un marcado acen-to italiano. Con el cuerpo desnudo y toda la natu-ralidad del mundo continuó hablando conmigo _.¿Tú eres de la familia?_ No, yo trabajo aquí _ respondí, seco._ ¡Ah! ¿De otra agencia?_ ¿Perdón?_ ¿Eres escort también? Yo soy de la agenciaMarea. Maurizio, encantado _ me tendió la mano.Sin saber qué decir ni cómo reaccionar, volví denuevo a mi cuarto.

Tras el incidente con el chico de compañía todovolvió a la calma. Los días siguientes se desarro-llaron con la más absoluta tranquilidad. Yo recibíael dinero periódicamente como se me había pro-metido, pero a cada día que pasaba me encon-traba más inquieto realizando el trabajo. Ni siquiera quería salir los fines de semana ya que elmiedo por no conseguir alguna noticia para elhombre trajeado era superior a mis deseos derelacionarme socialmente. Quién sabía quépodría pasarme si finalizaba el mes sin informa-ción alguna.La tarde del jueves de la segunda semana lapasé estudiando en mi habitación. Había conse-guido avanzar bastante, por lo que quise tomar-me un momento de descanso. Fui hacia la coci-na, abrí un refresco y me lo serví.Rocío estaba hablando por teléfono en el salón.Su voz sonaba furiosa. Intenté escuchar:_ ¡No te voy a enviar más dinero, Martín!¡Búscate la vida de una vez, levanta cabeza! Noquiero pagar nada más tuyo, ¿comprendes? _ Seprodujo una pausa. _ Mira, eres mayorcito ya. Túhas elegido esa vida, pues allá tú. Te quisiste ir,¿no? _ Otra pausa. _ Me importa un bledo, yo yacerré el grifo hace tiempo, así que ni se te ocurravolver a llamar para pedirme dinero. ¿Por qué novienes por navidad como haría un hijo cualquie-ra? No, tú sólo eres una sanguijuela inútil._Silencio otra vez _ . ¿Qué yo qué? ¡Adiós! Traté de seguir escuchando, pero a las últimaspalabras de Rocío le siguió el sonido del hielochocando contra el cristal del vaso.Si alguna vez había existido alguna familia enaquella casa, ya no quedaba ningún vestigio deella.

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A ese día le siguieron otros muchos de purotedio. A falta de una semana por terminar mi tra-bajo, la información más sustanciosa que teníaera que había descubierto un bote en la cocinacon un fajo de unos veinte mil euros, en billetesde quinientos. Nada más.Era aún temprano y estaba lijando la última delas puertas. El verano terminaba ya y ni si quierahabía conseguido empezar con las ventanas. Alapagar la lijadora conseguí oír lo que me impedíael ensordecedor ruido de la máquina. Era Rocío,de nuevo discutiendo.Subí sigiloso las escaleras y pude verla a ella, depie en la cocina, realizando aspavientos con lamano. Sentada a la mesa, y con un carrito debebé al lado, se encontraba una chica con la queguardaba con un inconfundible parecido físico._ No, no quiero saber nada de vosotros.¡Liendres, parásitos!_ gritaba Rocío encoleriza-da_ . Hablé con tu hermano el otro día y vino apor lo mismo. ¡A sacarle dinero a la pobre vieja!_ Pero mamá, Héctor, tu nieto, lo necesita _ dijola joven, que tenía el rostro casi tan demacradocomo su madre?. ¡No tenemos nada! _ El bebécomenzó a llorar. Rocío dio rápidamente la vuel-ta y, encorvándose como un buitre, se acercó asu hija, quedando cara a cara con ella._ ¡Ni se te ocurra decir que eso es mi nieto! _ Leapuntó con el dedo _ . Porque que yo sepa esehijo no está reconocido, Carmen. ¡Y que yo sepasi un hijo no tiene padre, tampoco tiene por quétener abuela! ¡No me mezcles con tus desgra-cias! ¡Yo no soy abuela! ¡Ni si quiera quiero ser tumadre! ¡Olvídame, mala hija!_ ¿Cómo puedes decir semejante cosa, mamá?¿Cómo puedes ser tan cruel? _ preguntó la hija,con lágrimas en los ojos_ . Normal, normal queno te soportara papá y se fuera al extranjero.¡Porque eres una bruja! Sólo piensas en ti, en ti yen ti…_ ¡¡Fuera!! ¡Fuera de MI casa, sucia! La hija se levantó, tirando del carrito del bebé. Yome agazapé, procurando que no me vieran.Rocío la siguió, profiriendo más gritos e insultos._ ¡Y ni pienses en la herencia, interesada, porqueno te voy a dejar ni un céntimo! ¡Ni uno! _ gritóRocío en el alféizar de la puerta principal._ Diez años sin saber de él. ¿No te parece raro?¿No te da que pensar que ni tu propio marido tehaya podido coger cariño? _ insistió la hija, yadesde fuera. Rocío contestó con un sonoro por-tazo que hizo retumbar la pared. Después salió

corriendo hacia su habitación.Los llantos se oyeron hasta bien entrada lamadrugada.

A las ocho de la mañana del día siguiente, Rocíome levantó. En la mano llevaba un paqueteancho y estrecho, envuelto en papel marrón,atado con una cuerda._ Quiero que tires esto al contenedor de la calle_ dijo, abatida.Sus ojos parecían ridículamente pequeños enci-ma de las hinchadas ojeras. Su pelo era unaauténtica maraña informe._ Enseguida, Rocío. No te preocupes ?la calmé.Ella volvió a su cuarto.Cogí el paquete, con el pensamiento aún embo-tado por el letargo. Pesaba poco y por el tactoimaginé que era un cuadro. Bajé las escaleras yfui hacia el contenedor. Abrí la tapa y, cuando ibaa meter el paquete, recordé en qué consistía misegundo trabajo. Me dispuse a abrir el nudo. Rasgué el papel lomás rápido que pude.En efecto, era un retrato de un hombre cierta-mente atractivo._ Pues nada, ninguna noticia, señor _ dije paramí.Lo metí dentro y me dirigí de nuevo a la casa.Pero en el instante en que iba a cruzar la puerta,lo comprendí todo. Corrí de nuevo hacia el contenedor, abrí la tapade golpe, cogí el cuadro con los brazos casi tem-blando. Y lo vi.Vi a un hombre atractivo, con una poderosa mira-da. Sus inconfundibles ojos medio grises medioazules, parecían pretender atravesar el lienzo,como queriendo escrutar más allá de lo que elresto de los humanos pueden ver.

El hombre trajeado estaba sentado enfrente demí, serio, detrás de las opacas gafas de sol.Había pedido su bebida preferida; un Cutty Sharkcon dos dedos de agua. _ Tú dirás, Armando _ me dijo. Su rostro, másserio que la primera vez que lo vi, permanecióimpávido esperando respuesta._ Señor… Sé que mi trabajo, mi segundo traba-jo, no consistía en saber el porqué del mismo. Yno se lo voy a preguntar, porque lo sé._ ¿Cómo? _ preguntó el hombre trajeado, sinmostrarse inquieto del todo._ Sabía el cómo, el dónde, el cuándo de mi tra-

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bajo… y ahora sé también el porqué _ expliqué _.Y es que me resultó imposible no averiguarlo,señor. ¿Comprende?_ No, no te entiendo. Explícate _ protestó.Tragué saliva, pero intenté mostrarme tan tran-quilo como él._ Fue imposible no saber quién es usted, señor.Hay un retrato suyo colgado en la habitación desu esposa Rocío. Ella ha estado estos treintadías hablándome a diario de usted, contándomecómo logró amasar tanta fortuna con el sudor desu frente. Lamentándose de por qué se fue sindejar ni rastro… Y si le soy sincero, ese es unhecho que yo aún no entiendo._ ¿Cómo está ella? _ preguntó, esta vez sin evi-tar mostrar cierta inquietud._ Bien, está muy bien. Si me permite decírselo,es una mujer realmente bella; por ella no pasanlos años. Rebosa vitalidad y frescura. Eso sí, senota que ha sufrido mucho. Supongo que no esfácil encajar que la persona a la que más quieresdesaparezca de tu lado de la noche a la mañana._ ¿Pero le dijiste que me habías visto? _ Inquirióvehemente._ Señor, yo a usted nunca le he visto._ Bien… Bien… ¿Y los niños? ¿Has visto aCarmen y a Martín?_ A Martín no, pero sé que está trabajando fuera,en un buen puesto. Terminó la carrera de empre-

sariales y ahora es un hombre de negocios.El hombre trajeado se frotó la barba._ ¿Y Carmen? ¿Cómo está ella? _ preguntóacercándose a mí._ Carmen le ha hecho abuelo, señor. Es unamujer muy feliz._ ¿Cómo? ¿Que soy abuelo? ¿Tengo un nieto? _

preguntó incrédulo._ Sí, señor. Vino de viaje de Alemania y trajo alpequeño Héctor. Es un muchacho muy sano. Asu marido no logré conocerlo.El señor trajeado sacó un pañuelo del bolsillo desu americano, y se enjugó los ojos, sin quitarselas gafas._ Es una familia muy feliz, señor _ agregué,poniendo encima de la mesa la cámara defotos_. Aquí tiene algunas fotos que tomé. Si lasquiere ver…_ No, no… Ya es suficiente… Ya sé lo que queríasaber._ ¿No va a ver a su familia, señor?_ No, no puedo, no es necesario._ Pues que sepa que tiene usted una familiamaravillosa. Aún le quieren, señor.

Y el hombre trajeado, por imposible que puedaparecer, sonrió.

Yerai Teruelo HernándezGanador del primer premio de la

III Edición del Cerntamen de Relato Breve

“Apartarse de la justicia es un menoscabo dela naturaleza humana”

MARCO AURELIO, Los recuerdos, X, 12

“La honra puede ser mancillada, la justiciapuede ser vendida, todo puede ser desgarrado;pero la noción del bien flota sobre todo y nonaufraga nunca”

MARTÍ, Pensamientos, 12

“La justicia despiadada se convierte en cruel-dad, Y la piedad sin justicia es debilidad”

METASTASIO, Giuseppe, I

“La justicia puede dormitar un poco, pero alcabo ve”

MIDDLETON, The Mayor of Queenborough, I, 1

“El primer deber de los reyes consiste enhacer justicia”

NAPOLEÓN, Pensées

Frases Célebres “La justicia está entre nosotros, sobrenosotros y dentro de nosotros. Nos castiga y nosrecompensa. Ella, y solamente ella, es la quenutre las cosas, asegurando la felicidad de losespíritus en el gran espíritu de la humanidad”

NIEVO, Confessioni d`un ottuagenario, III

“La virtud de las grandes almas es la justicia”AUGUST GRAF VON PLATEN, Die verhängnisvolle

Gabel IV (Mopsus), 1826

“Si bien es cierto que la justicia absoluta esinaccesible, la que se precisa en la vida cotidia-na pueden lograrla quienes la convierten en sufin”

RUSKIN, Unto this Last

“Donde no hay justicia no hay libertad, ydonde no hay libertad no hay justicia”

SUEME, Spaziergang nach Syracus

“Quien lleva consigo a la justicia tiene derechoa vanagloriarse”

SÓFOCLES, Ayax, V. 1125

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actividades Actividades de la Agrupación

E n el portal de internetwww.icatf.es, páginade nuestro Colegio,

puedes estar informado detodas aquellas actividadesque llevamos a cabo duranteel año NOTICIAS, así como,del orden del día de lasREUNIONES que seguimoscelebrando el primer y tercermiércoles de cada mes, a las13:00 horas, en el Colegio.

Dentro de estas activida-des, podemos destacar lassiguientes CHARLAS:

• MODIFICACIÓN DE LALEY DE ENJUICIAMIENTOCIVIL. ACTOS DE COMUNI-CACIÓN POR MEDIOSELECTRÓNICOS: LEXNET,impartida, con fecha 22 demayo, por D. Francisco

Escuela Losada. Abogado,Presidente Honorífico denuestra AJA. Expresidente dela Comisión de Nuevas Tecno-logías de nuestro Colegio.

• ALTERNATIVAS DE DE-FENSAS Y PROTECCIÓN DEINTERESES PARTICULA-RES EN PROCEDIMIENTOSSAN-CIONADORES ENMATERIA URBANÍSTICA),expuesta, con fecha 2 de octu-bre, por D. Pedro Díaz Corral,Abogado, Interventor delAyuntamiento

de El Rosario y por D.ªRuth Cristina Arteaga, Aboga-da, Secretaria del Ayunta-miento de Arafo, cuyo resu-men te ofrecemos en laedición de esta Revista.

También hemos entregado

los premios de la III EDICIÓNDEL CERTAMEN DE RELA-TO BREVE, siendo el fallo deljurado, en cuanto al primerpremio, dotado con 300 euros,para el relato “Mi segundoprimer trabajo”, el cual puedesdisfrutar en Serventía, de D.Yeray García Teruelo, y elsegundo, con 200 euros, paraD. Luis de la Cruz por el relato“Dña. Lasa y sus infortunios”.

Nuestra Agrupación haparticipado activamente en la

CARAVANA DE DERE-CHOS HUMANOS, asesoran-do desinteresadamente acuantos se acercaron a solici-tar nuestra ayuda.

Asimismo, este año, comovenimos haciendo hacemuchos, hemos participado en

AGRUPADOS DE AJA ASISTENTES AL CONGRESO

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las Reuniones de la CONFE-DERACIÓN DE ABOGADOSJÓVENES DEL ESTADOESPAÑOL, www.ceaj.es, quese han celebrado en Bilbao, el1 de marzo, y en Ronda(Málaga), 13 y 14 de junio, asícomo, en el XV CONGRESOESTATAL DE LA ABOGACÍAJÓVEN celebrado en Valen-cia, los días 18 a 20 deseptiembre, donde debatimosla ponencia “Turno de oficio yasistencia jurídica gratuita:presente y futuro. Propuestasde mejora”, junto a cuatromesas redondas:

1 El comienzo del ejerci-cio profesional: ¿una

cuestión de (in-) dependen-cia?

2 La abogacía joven: dedónde venimos y hacia

dónde vamos.

3 Conciliación de la vidafamiliar y profesional

del abogado: presente yfuturo.

4 Cliente, los baremos yel abogado.

En cuanto a nuestra activi-dades lúdicas, el 19 de julio,celebramos en el Mesón LosMosqueteros de La Laguna, laCENA DE FIN DE AÑO JUDI-CIAL, velada que se alargóhasta la madrugada.

Muchas de estas activida-des no las podríamos llevar acabo sin el apoyo de nuestroDecano, su Junta de Gobier-no, así como, los empleadosdel Colegio, por lo que losmiembros de AJA y, en espe-cial, nuestra Ejecutiva, lesagradecemos, desde estaslíneas, su colaboración.

María Esther Medina CastillaABOGADA Y PRESIDENTA DE LA AGRUPACIÓN AJA

LOS MANDAMIENTOSDEL ABOGADO

Honramos nuestras columnas con la inserción de los diezmandamientos del notable procesalista americano. ProfesorEduardo J. Couture. Es una fecunda lección de ética profesionalque habrá de servir de enseñanza a la Juventud forense de laAmérica Hispana.

Originalmente este trabajo fue un discurso pronunciado por elProfesor Couture cuando recibió el merecido titulo de Socio Hono-rario del Colegio de Abogados del Buenos Aires; luego adquirióforma de volumen, del cual recomentdamos su lectura completa.Contiene una sólida aportación de ciencia y de experiencia, y de allíla utilidad que tiene, sin duda, para nuestro alumnado de la Escue-la de Derecho, al que dedicamos de modo especial esta inserción.

I.- ESTUDIAEl Derecho se transforma constantemente. Si no sigues sus

pasos serás cada día un poco menos Abogado.II.- PIENSA

El Derecho se aprende estudiando, pero se ejerce pensando.III.- TRABAJA

La Abogacía es una ardua fatiga puesta al servicio de la Justi-cia.IV.- LUCHA

Tu deber es luchar por el Derecho, pero el día en que encuentraen conflicto el Derecho con la Justicia, lucha por la Justicia.V.- SÉ LEAL

Leal para con tu cliente, al que no debes abandonar hasta quecomprendas que es indigno de ti; leal para con el adversario aúncuando él sea desleal contigo; leal para con el Juez que ignora loshechos, y debe confiar en lo que tú le dices y que en cuanto alDerecho alguna que otra vez debe confiar en el que tú le invocas.VI.- TOLERA

Tolera la verdad ajena en la misma medida en que quieres quesea tolerada la tuya.VII.- TEN PACIENCIA

El tiempo se venga de las cosas que se hacen sin su colabora-ción.VIII.- TEN FE

Ten fe en el Derecho, como el mejor instrumento para la convi-vencia humana, en la Justicia como destino normal del Derecho, enla Paz, como sustitutivo bondadoso de la Justicia y sobre todo, tenfe en la Libertad, sin la cual no hay Derecho, ni Justicia, ni Paz.IX.- OLVIDA

La Abogacía es una lucha de pasiones. Si en cada batallafueras llenando tu alma de rencor, llegará un día en que la vidasería imposible para ti. Concluido el combate, olvida tan pronto tuvictoria como tu derrota.X.- AMA A TU PROFESIÓN

Trata de considerar la Abogacía de tal manera que el día en quetu hijo te pida consejo sobre su destino, consideres un honor para tiproponerle que se haga Abogado.

COUTURE, Eduardo J,. LOS MANDAMIENTOS DEL ABOGADO.RLUZ, abr. 1950, vol.2, no.2, p.43-57. ISSN LUZ

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El día 2 de Octubre del presente año laAgrupación de Abogados Jóvenes orga-nizó una charla, en la que tuvimos el

honor de contar con la presencia de D. PedroDíaz Corral, Abogado especialista en asesora-miento a Administraciones Públicas, Interventory Tesorero de Administración Local con habilita-ción estatal, Vicepresidente del Colegio Provin-cial de Secretarios, Interventores y Tesoreros deAdministración Local y miembro de la UDITE(Unión Europea de Directivos Locales) y de D.ªRuth Cristina Arteaga, Secretaria de Adminis-tración Local con habilitación estatal, Secretariadel Colegio Provincial de Secretarios, Intervento-res y Tesoreros de Administración Local, Miem-bro de la UDITE. Ambos cuentan con una ampliaexperiencia profesional, habiendo trabajado endistintos Ayuntamientos y Cabildos de nuestrasislas e impartido diferentes cursos de formaciónpara distintas instituciones.

La charla, que fue impartida bajo el título“Alternativas de defensa y protección de intere-ses particulares en procedimientos sancionado-res en materia urbanística”, abordó los siguientespuntos:

MARCO NORMATIVOLey 30/1992, de 26 de noviembre, de régimenjurídico de las Administraciones Públicas ydel Procedimiento Administrativo Común.

En materia sancionadora, concretamente ensu Título IX, la Ley recoge una serie de principiosgenerales que deberán de ser observados por laAdministración en el ejercicio de esta potestad(arts. 127 a 133) y otros que tienen que ser teni-dos en cuenta en el propio procedimiento (arts.134 a 138), pero ahí se queda, no va más allá,

obvia el procedimiento material que la Adminis-tración debe de tramitar para poder sancionar.

Los principios generales contenidos en la Leyde procedimiento se aplicarán supletoriamenteante la ausencia de regulación específica en laLey sectorial. Se habla, en cuanto al ejercicio deesta potestad de legalidad, irretroactividad, tipi-cidad, responsabilidad, proporcionalidad, pres-cripción y concurrencia de sanciones, y en cuan-to al procedimiento que tiene que tramitar laAdministración, de garantía del procedimiento,de derechos del presunto responsable, de medi-das de carácter provisional, de presunción deinocencia y de resolución.

Sin embargo, con estos principios en unamateria de la importancia de la sancionadora, nohacemos gran cosa. Fue necesario el desarrolloreglamentario de un procedimiento para el ejerci-cio de esta potestad por la Administración: elReal Decreto 1398/1993, de 4 de agosto. Setrata de un Reglamento estatal cuya aplicacióndirecta o supletoria dependerá de que el Estadotenga o no competencias plenas en la materia.

En el caso de las infracciones urbanísticas,nos encontramos ante una materia sobre la queel Estado no tiene competencia plena. Se trata deuna materia de competencia exclusiva de laComunidad Autónoma de Canarias. El artículo30.15 en relación con el 41.2 del Estatuto deAutonomía de Canarias le reconoce en materiade urbanismo la potestad legislativa, la potestadreglamentaria y la función ejecutiva, incluida, lainspección.

De ahí que en Canarias se aplique el DecretoLegislativo 1/2000, de 8 de mayo, por el quese aprueba el Texto Refundido de la Ley de

ALTERNATIVAS DE DEFENSASY PROTECCIÓN DE INTERESES

PARTICULARES EN PROCEDIMIENTOSSANCIONADORES EN MATERIA

URBANÍSTICA

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resuelva la solicitud de licencia de un particulares de tres meses, a partir de los cuales, bastan-do una comunicación con 10 días de antelacióna la Administración, el vecino puede empezar aedificar. Se entendía el silencio como positivo.Sin embargo sólo los intrépidos o inconscientesoptan por esta aventura, ya que como siempre, lanorma tiene un apartado de “gana la casa” queprohíbe en todo caso la adquisición de licencia ode derecho alguno en materia de ordenaciónurbanística que contravenga la norma.

Por tanto podría darse el caso que un particu-lar solicita licencia para realizar una determinadaobra. Transcurren los tres meses y la Administra-ción no contesta. Comunica el inicio y la Adminis-tración tampoco dice nada. Cuando comienza laobra, el vecino denuncia y cuando la Administra-ción informa la obra no es legalizable porquecontraviene la norma urbanística.

Parece que haciendo valer esos principiosgenerales que hemos visto en la Ley 30/1992, lasobras sin licencia comenzadas por el particularpresumiendo que son legales ante el silencio delAyuntamiento se encuentran amparadas pareceser por una licencia adquirida por silencio admi-nistrativo positivo. Este acto tendrá que ser obje-to de revisión por la Administración que revoca lalicencia adquirida por silencio, asumiendo elcoste de la demolición de las obras y la posibleindemnización que pudiera corresponder al parti-cular derivada de la inactividad administrativa.(artículos 184, 185 y 186 del TRLOTC en relacióncon el artículo 102 de la Ley 30/92).

Un panorama de tanta cantidad de normas enmateria urbanística, donde es sencillo equivocar-se, conlleva la proliferación de incumplimientosde la norma y, por tanto, el aumento de procedi-mientos sancionadores que se incoan desde laAdministración Local a los particulares, debiendoconocer, al menos, el procedimiento por el que senos va a sancionar, ya que difícilmente podemosconocer la norma que debíamos cumplir.

Aspectos de mayor relevan-cia en la tramitación de unprocedimiento sancionador

en materia urbanísticaEl sujeto que comete una infracción urbanísti-

ca, difícilmente podrá negarla, extremo que sipodría ocurrir en otras áreas del derecho, por ello

ordenación del Territorio y Espacios Natura-les Protegidos y supletoriamente el Reglamen-to 1398/93 y la Ley 30/1992.

La competencia exclusiva en materia de urba-nismo ha sido aprovechada por la ComunidadAutónoma de Canarias que se ha dedicado aaprobar continuamente normativa que incide deforma directa sobre el territorio, aludiendo alexceso de población, a la fragmentación del terri-torio canario y a la necesidad de un desarrollo ocrecimiento sostenible. Serán estos textos losque resulten de aplicación preferente en Cana-rias. Las principales leyes dictadas son: la Ley1/1998, de 8 de Enero, de Espectáculos Públi-cos y Actividades Clasificadas, el DecretoLegislativo 1/2000, de 8 de mayo, por el quese aprueba el Texto Refundido de las Leyesde Ordenación del Territorio de Canarias yEspacios Naturales Protegidos, la ley 19/2003,de 14 de abril, por la que se aprueban lasDirectrices de Ordenación General y lasDirectrices de Ordenación del Turismo enCanarias, la Ley 2/2003, de 30 de enero, deViviendas de Canarias, la Ley 9/2006, de 28 deabril, sobre evaluación de los efectos dedeterminados planes y programas en elmedio ambiente y la Ley 6/2006, de 17 de julio,del Patrimonio de la Comunidad Autónoma deCanarias.

Dado que en Canarias las diferentes Adminis-traciones tienen competencias en la ordenacióndel territorio, se dicta normativa por las distintasinstituciones: por la Comunidad Autónoma(Directrices de Ordenación), por los CabildosInsulares (Planes Insulares de Ordenación,Planes Territoriales, Proyectos de ActuaciónTerritorial y Calificaciones Territoriales) y porlos propios Ayuntamientos (Planes Generalesde Ordenación, Planes Parciales, PlanesEspeciales y Estudios de Detalle).

Tal cantidad de normas superpuestas queregulan un mismo territorio complica enorme-mente la labor de los profesionales del derecho.

La Ley obliga a los Ayuntamientos a incorpo-rar con carácter previo a la resolución de unexpediente de licencia, todos los informespreceptivos y sectoriales que en las diferentesnormas se exigen.

El plazo para que el Ayuntamiento tramite y

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los abogados deben valerse de todos los mediosque la ley les pone a su disposición para vigilar elformalismo que se siga por la Administración enel procedimiento, los plazos, las competencias,las fases, los derechos, los atenuantes, lagraduación de la sanción, la caducidad, la pres-cripción de la acción y de la infracción y la aplica-ción de las bonificaciones ante el cumplimiento ocolaboración con la administración en la fase derestauración del orden jurídico infringido y, portanto, en la demolición.

Partimos de que el procedimiento sanciona-dor únicamente pude ser incoado de oficio desdela administración, mediante acuerdo del órganocompetente, bien por propia iniciativa o comoconsecuencia de orden superior, por peticiónrazonada de otros órganos o bien por denuncia.El órgano que incoa puede abrir un período deinformación previa o actuaciones previas paravalorar la conveniencia o no de incoar (art. 69 dela Ley 30/92 en relación con el art. 12 del Regla-mento 1398/1993). Este trámite de actuacionesprevias no computaría a efectos de la caducidaddel procedimiento.

La mayor parte de los procedimientos sancio-nadores se incoan como consecuencia dedenuncia entre particulares en suelo urbano o,después de la creación de la Agencia de Protec-ción del Medio Urbano y Natural, dependiente dela Consejería de Urbanismo y de que las compe-tencias sobre el suelo rústico la tiene el Cabildo,por denuncia del Seprona.

ÓRGANO COMPETENTEPARA INCOAR

Una cuestión de especial relevancia es elórgano que tiene la competencia para la incoa-ción del procedimiento. En este sentido, el artícu-lo 190 del TR atribuye competencia al Alcaldepara la incoación de los procedimientos sancio-nadores por infracciones de las Normas Munici-pales y de los Planes Generales. Únicamente enel supuesto de delegación competencial víaconvenio de colaboración en la Agencia deProtección del Medio Urbano y Natural, podráésta incoar. También podrá hacerlo subsidiaria-mente en el caso de infracciones graves y muygraves siempre que no actúe el Ayuntamiento o,en su caso, los Cabildos.

La competencia en la adopción de acuerdos

debe ser analizada minuciosamente en todas lasfases del procedimiento ya que la incompetenciade los órganos puede viciar de nulidad el mismo.

FORMALISMO DELACUERDO DE INCOACCIÓN

Este acuerdo requiere de un formalismo espe-cial ya que tiene que contener y concretar loshechos imputados, la identificación de lospresuntos responsables, la tipificación de lainfracción, la posible sanción y, algo muy impor-tante, el nombramiento de instructor, y en sucaso, secretario, el órgano competente pararesolver, el trámite de alegaciones, el pronuncia-miento técnico sobre la posibilidad o no de legali-zar las obras en el plazo de tres meses y, en sucaso, las medidas cautelares, la orden inmediatade suspensión de la ejecución de las mismas yel anuncio del precinto.

El acuerdo de iniciación del procedimiento esun acto especializado, en el sentido de que no setrata de un simple acuerdo de inicio sino que enél se recogen prácticamente todos los datos,circunstancias y fundamentos que deberán deser comprobados posteriormente por el órganoinstructor. Tan especializado puede resultar esteacuerdo que en el mismo se hace constar que enel supuesto de que el presunto responsable norealice alegaciones, podrá entenderse comopropuesta de resolución sin más trámites.

CADUCIDAD

La Ley Sectorial Canaria alude a la caducidaden el plazo de seis meses desde la incoación, sinembargo, el precepto se refiere a la aplicacióndel procedimiento recogido en la Ley 30; de ahíque surja la duda de si el cómputo se inicia desdela fecha de notificación del acto a cada uno de lospresuntos responsables o, si por el contrario, elcómputo se inicia desde el día que el órganocompetente dicta la resolución de incoación.

Sin embargo la duda interpretativa parecedespejarla el artículo 6.2 del Reglamento, alentender que si transcurren dos meses desde elacuerdo de incoación sin notificación del acto, seprocederá al archivo de las actuaciones, notifi-cándoselo al imputado, sin perjuicio de lasresponsabilidades a que dé lugar. El plazo de losseis meses corren a favor del presunto responsa-ble y el de los dos también. De ello se deduce

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que la Administración dispondrá de un plazomáximo de dos meses para intentar la notifica-ción del acto de iniciación del procedimiento y deun mínimo de cuatro más para concluir y notificartodas las demás fases del mismo. Serán válidoslos medios dispuestos en el artículo 59 de la Ley30, incluso la publicación.

La caducidad del procedimiento sancionadorconstituye una de las principales causas de cierrey archivo de procedimientos sancionadores en laAdministración Local. La escasez de medioshumanos y la inexistencia de unidades adminis-trativas y órganos especializados en esta mate-ria, hacen que los seis meses transcurran sin quese hayan formalizado la totalidad de las fases delprocedimiento. El apartado 5º del artículo 190posibilita que los interesados puedan solicitar lacertificación en la que conste que el procedimien-to ha caducado y que se ha procedido al archivode las actuaciones.

PRESCRIPCIÓN

Cuestión diferente es el cómputo del plazo deprescripción de la infracción urbanística cometi-da que se fija, en 4 años para las muy graves enel TRLOTC a diferencia de los 3 que fija la Ley deProcedimiento, en 2 para las graves y en 1 paralas leves y que se computa a partir de la totalterminación de la obra o desde el momento enque pudo ser incoado el procedimiento sanciona-dor. La prescripción de la infracción no exime alinfractor de la obligación de pago del Impuestode Construcciones, Instalaciones u Obras, al serel hecho imponible la acción de edificar y no laobtención o no de licencia administrativa previa.

La prescripción podrá acordarse en el proce-dimiento sancionador si una vez incoado, seaprecia esta circunstancia por el instructor. Cuan-do se trate de construcciones totalmente termina-das en el momento de la entrada de la denunciao de la incoación del procedimiento, la carga dela prueba para el presunto responsable secentrará en acreditar ante la Administración quela edificación tiene una antigüedad superior a 4años. Esta resolución no otorga legalidad a laconstrucción, sino que reconoce la imposibilidadde la Administración tanto para actuar como pararestaurar el orden jurídico infringido. El artículo180.2 establece limitaciones a la prescripciónpara infracciones urbanísticas en dominio públi-co, en bienes catalogados, etc.

SANCIONES

En cuanto a las sanciones, el plazo de pres-cripción comienza a computarse desde la efecti-va notificación del acto administrativo firme deimposición de la misma. El plazo establecido porel artículo 205 del TRLOTC fija, para las muygraves, 3 años; para las graves, 2 años; y paralas leves, 1 año.

El cómputo es desde el día siguiente a la noti-ficación del acto administrativo de imposición, yno desde el día siguiente a las notificacionessobre la resolución que se pudiera producir delos recursos de reposición y contencioso que elinteresado pudiera interponer.

DISTINCIÓN ENTREMEDIDAS CAUTELARES YMEDIDAS PROVISIONALES

Al hablar de medidas cautelares nos referi-mos a la suspensión inmediata de la ejecución delos actos y usos que se vienen ejerciendo oejecutando sin licencia o, en su caso, contravi-niendo las mismas. Sin embargo, cuando nosreferimos a medidas provisionales aludimos aaquellas que se pueden adoptar a lo largo detodo el procedimiento y que sirven para asegurarla eficacia de la resolución que en su día pudieserecaer en el mismo.

En el primero de los casos la orden desuspensión se contiene en la resolución de iniciodel procedimiento y va acompañada normalmen-te del anuncio del precinto y de la posibilidad deimposición de una serie de multas coercitivasmientras persista el incumplimiento y de la pues-ta en conocimiento del Ministerio Fiscal.

En el segundo de los casos, podrán adoptar-se en cualquier momento, por el órgano compe-tente para resolver y van desde la suspensióntemporal de actividades, la presentación de fian-zas, la retirada de productos o la suspensióntemporal de servicios por razones de seguridad,sanidad e higiene. Estas medidas sólo podránadoptarse al inicio del procedimiento en el casode urgencia y con el fin de preservar el interéspúblico.

Mientras que las medidas cautelares desuspensión responden a la necesidad de suspen-sión de actos no amparados por licencia, lassegunda, deben de responder a asegurar la

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ejecución de la resolución que en su día se adop-te; de ahí que deben de tener presente los princi-pios de intensidad, proporcionalidad y necesidadde los objetivos a garantizar.

TRÁMITE DE ALEGACIONESY DE PRUEBA

El trámite de alegaciones se fija en 15 días yel de prueba en no menos de 10 días ni más de30. Ambos trámites resultan determinantes en elprocedimiento. Si se prescinde del trámite dealegaciones, el acuerdo de iniciación se convier-te en propuesta de resolución de forma automá-tica y en cuanto al trámite de prueba, se admitecualquier medio admisible en derecho, recayen-do la carga de la prueba en la Administración queestá obligada a aportar la prueba de cargo enque se basa la imputación que justifica la imposi-ción de la sanción. Este principio jurisprudencialencuentra su modulación en el principio depresunción de legalidad de los actos administra-tivos.

VALORACIÓN DE LA PRUEBA

En lo relativo a la valoración de la prueba porel órgano instructor, no existe un sistema prees-tablecido para hacerlo aunque con caráctergeneral se han establecido unas reglas genera-les de preferencia en la consideración; esto es,se otorga preferencia a los informes o actuacio-nes de funcionarios que tienen la condición deautoridad, así como se concede mayor valorprobatorio a los informes oficiales que a los departe.

PROPUESTA DE RESOLUCIÓN

Finalmente se producirá en el procedimientola propuesta de resolución y en su caso el trámi-te de audiencia. Serán estos documentos los quese incorporen al expediente para finalizar la fasede instrucción y dar paso a la de resolución quedebe corresponder a un órgano diferente al ante-rior.

El órgano competente para resolver en losprocedimientos sancionadores, no viene expre-samente establecido en la Ley sectorial urbanís-tica, a diferencia de lo que ocurre en la regulado-ra de Actividades Clasificadas y EspectáculosPúblicos.

En esta última, se dispone que la resolución

de los procedimientos sancionadores por infrac-ciones muy graves, corresponderá al Pleno muni-cipal, y las graves y leves, a la Alcaldía o, en casode delegación, a la Junta de Gobierno Local.

Sin embargo, en materia urbanística esto noqueda así determinado, por lo que, en ausenciade normativa y por extensión, será el órgano quetenga atribuida legalmente la competencia parael otorgamiento de las licencias, al que le corres-ponda la decisión final en los supuestos de edifi-caciones sin contar con ellas.

Apoya esta interpretación el artículo 176 delTRLOTC, que atribuye al Alcalde la competenciapara suspender la ejecución de obras sin licen-cia.

A grandes rasgos este es el procedimientoordinario para el ejercicio de la potestad sancio-nadora por la Administración, existiendo unosimplificado para aquellos hechos que fueranconstitutivos de infracciones leves.

Existen además dos procedimientos que seentrelazan en el propio procedimiento sanciona-dor: el de legalización de los usos, actividades yobras y el de restablecimiento del orden jurídicoperturbado.

LEGALIZACIÓN DE LOS USOS, ACTIVI-DADES Y OBRAS

Se ofrece al presunto responsable en elacuerdo de incoación del procedimiento sancio-nador. Se recoge en el artículo 178 del TRLOTC.Se dispone de un plazo de tres meses parainstarlo, estableciendo el texto que si se llega a laresolución del procedimiento sancionador en losseis meses y, se acredita que el responsable noha solicitado la legalización de las obras, se lepodrán imponer multas coercitivas para que loreconsidere. El procedimiento administrativopara la legalización de una edificación legalizableseguirá el mismo procedimiento que se siguepara la concesión de licencias.

RESTABLECIMIENTODEL ORDEN JURÍDICO

PERTURBADOEste procedimiento debe ser obligatoriamen-

te tramitado por la Administración para la reposi-ción de la realidad alterada. Se incoará en aque-llos supuestos en que no pueda ser objeto de

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legalización la edificación ejecutada sin licenciao, en su caso, contraviniendo las determinacio-nes en ella contenidas.

La demolición o restauración del orden infrin-gido ha sido la parte más polémica. En la expe-riencia de la ponente D.ª Ruth Cristina Arteaga,únicamente había vivdo dos amnistías o suspen-siones de las órdenes de demolición de las edifi-caciones no amparadas por licencias. La prime-ra en el año 1997, la segunda en el año 2006. Laprimera intentaba dar cobertura legal a muchasde las edificaciones con las revisiones de losplaneamientos municipales. La segunda fueintroducida en la ley 4/2006 que modifica elTRLOTC, fundamentada en materia de necesida-des socioeconómicas y de primera necesidad,señalando que lo cierto es que en la realidad lamaterialización de las demoliciones son escasas.El alto coste económico y social que estas actua-ciones acarrean y la pasividad, permisividad yproliferación de construcciones ilegales en elterritorio canario, unido todo ello a una demoraexcesiva en la redacción y adaptación de losPlanes Generales de los diferentes Ayuntamien-tos a la normativa urbanística que ha entrado envigor en estos últimos años, han llevado a lamodificación del Texto Refundido en algunos desus preceptos por la Ley 4/2006, de 22 de mayo,concretamente en los artículos 178, 179,182 y190.

Mª Milagrosa Pacheco PerezAbogada

Extraído de los apuntes de la ponente D.ªRuth Cristina Arteaga.

REUNIONES DE LAAGRUPACIÓN

El primer y tercer miércolesde cada mes, a las 13:00horas, en el Colegio de

Abogados de Santa Cruz deTenerife. Una vía para cana-lizar tus inquietudes, otromodo de relacionarte con

los compañeros y decompartir ideas con aboga-

dos jóvenes como tú

LA AGRUPACIÓN DE ABOGADOS JÓVENES

DEL ILUSTRE COLEGIO DE ABOGADOS DE

SANTA CRUZ DE TENERIFE

CONVOCAEL IV PREMIO DERELATO BREVE

BASES 1. Podrán optar a este premio estudiantes de

derecho y abogados con menos de 15 años decolegiación con obras originales e inéditasescritas en lengua castellana que no hayan sidopremiadas en otros certámenes.

2. Los originales, de tema libre, deberán tener unaextensión no inferior a cinco folios ni superior adiez. Se presentarán mecanografiados a dobleespacio por una sola cara, numerados y portriplicado. Cada autor podrá enviar exclusiva-mente un trabajo.

3. Los trabajos tendrán que ir firmados con pseu-dónimo y acompañados en un sobre cerrado encuyo exterior figure el pseudónimo y, en su inte-rior, el nombre, edad, domicilio, teléfono y brevereseña biográfica del autor.

4. Los textos deberán ser enviados antes del 30de septiembre de 2009, indicando en el sobre"IV Premio de Relato Breve" a la siguientedirección: AGRUPACIÓN DE ABOGADOSJÓVENES DE SANTA CRUZ DE TENERIFE, C/Leoncio Rodríguez 7, 1º, Edif. El Cabo, 38003,Santa Cruz de Tenerife.

5. La dotación del primer premio es de 300 euros y200 euros para el segundo. La Agrupación sereserva el derecho a publicar los relatospremiados en la revista SERVENTÍA, o en laedición de un libro recopilatorio, sin que puedanser reclamados por ello derechos de autor.

6. El fallo tendrá lugar en la segunda Jura deAbogados que se celebrará a finales de octubrede 2009. La A.J.A. no devolverá los originalesno premiados.

7. El fallo del jurado será inapelable y la presenta-ción a este premio supone la aceptación de lasbases.