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De la mitología Siriono Cuando la luna reinaba en la tierra i - rfc*. —II— --m- Si J JN estudiante de un colegio cualquiera •;n nuestro pais. le preguntásemos sobre la •otología griega, romana o. por qué no, so- '.yo'-aescandinava, estoy seguro que nos 'rsoond"na algo y. tal vez. hasta nos pudie- dar una orientación. Pero, si al mismo es- odiante le preguntásemos sobre las distin- tas leyendas y mitologías de los diversos irupos selváticos que. desde miles de años, han venido dominando la inmensa región d'jl oriente boliviano, estoy casi seguro que 'iincultosamente obtendríamos una respues- -,y. V no seria raro, por esa región de nues- tra patria han pasado arqueólogos, antro- pólogos y etnógrafos de casi todas las par- tes del mundo: han escarvado, cavado, he- cho aountes, tomado fotografías, desente- rrado cerámicas (las cuales se encuentran en muscos privados o estatales en otros países), pero ijs conclusiones de sus excavaciones nos han servido de muy poco ya que, o han S'do publicadas en lenguas poco accesibles a nuestros historiadores o, sencillamente, no ha habido resultado alguno Lamentablemente, para nuestros arqueó- logos y etnógrafos nacionales, pareciera que todavía basta y sobra con las grandes cultu- ras tiawanacota e incaica. Sin embargo, al- gunos investigadores extranjeros, conjunta- mente con muy contados nacionales, han arriesgado sus vidas ingresando a lo más pro- fundo de nuestras selvas para tratar de des- enterrar su misterio, ese su eterno silencio. La Luna (Dshyasi) vivió en la Tierra Asi nos cuenta una leyenda de los sirionó, antiguo pueblo aborigen que habitaba (y aún lo hace) gran parte del Beni. Sus rai- ces se remontan, según algunos investigado- res. a aquellos tiempos cuando los guaraníes, desde el sur, / los arawak. por el norte, bor- deaban y atacaban al imperio incaico. Sin embargo, hay otros que colocan la antigüe- dad de este pueblo mucho más atrás. De rodas maneras, la mencionada leyenda se escabulle hacia la historia del principio ("inandshira" en sirionó), en aquellos tiem- pos cuando la Luna reinaba en la Tierra sobre los hombres-animales. La leyenda nos cuenta que una vez. cuan- do la Luna se encontraba de caza, el ¡aguar tyakwa) mató al hijo de ésta {la Luna tiene artículo masculino en el idioma sirionó). El hijo de la Luna tenia como guardianes al mono araña, al mono aullador y al coatí. Los guardianes habían aprovechado el viaje de la Luna para hacer un "hiri-hiri", es de- cir, una fiesta de bebidas y fue entonces que el jaguar aprovechó que los guardias es- taban totalmente ebrios para cometer el a- sesinato. La rabia y el dolor de la Luna fue tan grande, que decidió dar a cada uno de los hombres-animales Isemi-dioses) un castigo de acuerdo al grado de culpabilidad que tenían en relación al asesinato de su hijo. Esta es, al parecer, la simple explicación del por qué hay distintos animales y también de la existencia de nosotros, los humanos. 7

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De la mitología Siriono Cuando la luna reinaba en la tierra

i- rfc*. —II— --m-

Si J JN estudiante de un colegio cualquiera •;n nuestro pais. le preguntásemos sobre la •otología griega, romana o. por qué no, so-

'.yo '-a escandinava, estoy seguro que nos 'rsoond"na algo y. tal vez. hasta nos pudie-

dar una orientación. Pero, si al mismo es-odiante le preguntásemos sobre las distin-

tas leyendas y mitologías de los diversos irupos selváticos que. desde miles de años, han venido dominando la inmensa región d'jl oriente boliviano, estoy casi seguro que 'iincultosamente obtendríamos una respues--,y. V no seria raro, por esa región de nues-tra patria han pasado arqueólogos, antro-pólogos y etnógrafos de casi todas las par-tes del mundo: han escarvado, cavado, he-cho aountes, tomado fotografías, desente-rrado cerámicas (las cuales se encuentran en muscos privados o estatales en otros países), pero ijs conclusiones de sus excavaciones nos han servido de muy poco ya que, o han S'do publicadas en lenguas poco accesibles a nuestros historiadores o, sencillamente, no ha habido resultado alguno

Lamentablemente, para nuestros arqueó-logos y etnógrafos nacionales, pareciera que todavía basta y sobra con las grandes cultu-ras tiawanacota e incaica. Sin embargo, al-gunos investigadores extranjeros, conjunta-mente con muy contados nacionales, han arriesgado sus vidas ingresando a lo más pro-fundo de nuestras selvas para tratar de des-enterrar su misterio, ese su eterno silencio.

La Luna (Dshyasi) vivió en la Tierra

Asi nos cuenta una leyenda de los sirionó, antiguo pueblo aborigen que habitaba (y aún lo hace) gran parte del Beni. Sus rai-ces se remontan, según algunos investigado-res. a aquellos tiempos cuando los guaraníes, desde el sur, / los arawak. por el norte, bor-deaban y atacaban al imperio incaico. Sin embargo, hay otros que colocan la antigüe-dad de este pueblo mucho más atrás.

De rodas maneras, la mencionada leyenda

se escabulle hacia la historia del principio ("inandshira" en sirionó), en aquellos tiem-pos cuando la Luna reinaba en la Tierra sobre los hombres-animales.

La leyenda nos cuenta que una vez. cuan-do la Luna se encontraba de caza, el ¡aguar tyakwa) mató al hijo de ésta {la Luna tiene artículo masculino en el idioma sirionó). El hijo de la Luna tenia como guardianes al mono araña, al mono aullador y al coatí. Los guardianes habían aprovechado el viaje de la Luna para hacer un "hiri-hiri", es de-cir, una fiesta de bebidas y fue entonces que el jaguar aprovechó que los guardias es-taban totalmente ebrios para cometer el a-sesinato.

La rabia y el dolor de la Luna fue tan grande, que decidió dar a cada uno de los hombres-animales Isemi-dioses) un castigo de acuerdo al grado de culpabilidad que tenían en relación al asesinato de su hijo. Esta es, al parecer, la simple explicación del por qué hay distintos animales y también de la existencia de nosotros, los humanos.

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ESPECIALES Luego de repartir a cada uno su puesto en 101

ta vida, la Luna. ¡unto a su compañero, el Sol (Tanda), ser marcharon de la Tierra y desde entonces se dedican a contemplar el quehacer de los hombres-animales.

El argentino Mario Cal i fano. el nortea-mericano Alian Holmberg y otros, han lo-grado recopilar una serie de leyendas de los selváticos orientales. Ellos nos muestran Que dentro del contexto mitológico de los distintos grupos aborígenes, la luna viene a lugar un papel muy importante para cada comunidad.

Pero las cavilaciones no deben ni pueden Quedarse alrededor de leyendas y de mito-logías. éstas deben ir mucho más allá, al estudio científico de ia verdadera historia ove hace mucho tiempo atrás aconteció en e: hoy llamado oriente boliviano.

La selva y la pampa no han sido sólo eso.

Estudios arqueológicos recientes, llevados a rfectc en el Bem por la Universidad de La

I Piara. vienen a confirmar los trabajos ar-| queológicos hace tiempo efectuados por

E• ana Nordenskióid t 'I y ¡/Villiam Denevan. _a existencia de uria cultura muy antigua.

L\.e abarcó la casi totalidad del actual terri-I • deI Ben, está va confirmada: sólo

• ••id ¡untar l:is tretas del "rompecabezas" va ra pooer descifrar la poca información oue todavía queoa esparcida y cubierta por la vegetación. Colocar esta cultura en el • m'oo Ipor algunos mal denominada "ca-

i cicazgos"). tal vez llegue a despertar ciertos resquemores. Pero, dejemos que sea la c ene - con sus métodos cada vez más efi-caces la oue uetermine tal antigüedad.

•Jn resultado preliminar sobre los traba-ios arcueológicos. realizados en los al rede-cores ce Trinidad, ha sido publicado en la ••s:s "Jnvedades. del museo arqueológico

i f~ •* Universidad de La Plata (Vol. 1, No.7. rzc. ríe 1984)

Lo breve -eseña está escrita por B. j ."• ;,,:¡hi"ry y H.A Calandra, los cuales fue-i • r responsables del t-aba/o de campeo e-i ti-' ario en el Bem. Las excavaciones reali-¡ . : •/> iri Loma Alta de Casarabe. situada | <• "i Kilómetros a/ suroeste de la capital be-j ." 3" lemurstrnn ia existencia Isegún la ! 'W**/ "e •res per toaos o, por lo menos. \ tí'.- --es enr.aacies culturales sucesivas.

'La primera con características sui-géne-\ ••<. presentándose ¡a segunda y la tercera

con rasgos compartidos, en alguna me-j a ido

Lj PASE CASARABE. con un inicio ncerto. terminó alrededor del 345 d. C..

v pueoe ser correlacionada hasta cierto punto cor et estilo Bajo Velarde de Nordenskiold í ').

Carece de platos estriados !¿ralladores oe mandioca? I. y muestra cerámica tri-rolni. bicolor con pintura blanca sobre '•rruju rojo, y Ciras alfarerías con ma-cones y modelados sencillos. Algunos '-agmentos muestran improntas de mar-tos de maíz, indicio seguro de la agri--ultura de este cereal 'La FASE MAMORE. entre 345 y ca.

1200 d.C.. muestra la irrupción de nue-vas técnicas decorativas Iinciso, puntea-do. pintura roja sobre et fondo natural de la pasta o sobre pintura blancuzca) / formas como platos rallados. Empie-zan a aparecer fragmentos de alfarería con gruesos canales, producidos por el frotamiento de un cuerpo duro, que se-guramente fueron utilizados como afila-dores. Los motivos decorativos la aso-cian con el estilo Masicito. Posiblemen-te el inicio de esta fase sea posterior al

de una fase similar determinada en la Loma Mary. a orillas del río Mamoré, cerca de Trinidad.

"En la FASE SAN JUAN, estimada en-tre 1200 y 1350 d.C.. continúan mu-chos de los rasgos de la fase anterior. Al-gunos elementos nuevos consisten en la aparición de una decoración por estam-pados de cordelería en los vasos, la mo-dificación de los platos ralladores, que se hacen cada vez más cóncavos, y la

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aparición de grandes trípodes con borde hueco. Su finalización es incierta, ya que desconocemos si había desaparecido con la llegada de los primeros europeos, o si continuó tiempo después".

La reseña continúa más adelante:

"Si bien la cronología radiocarbónica es incipiente y los fechados deben ser ma-nejados con suma precaución, queda fuera de duda que hubo un antiguo pro-ceso de ocupación y de cambios cultura-les en el territorio de Moxos. al cual ha-brá que conectar, en posteriores investi-gaciones, el problema de los campos de cultivo situados en una sabana que, en la actualidad, sigue siendo considerada, en términos generales, como agrícolamente improductiva, o muy difícilmente mane-jable, pero que fue proficuamente utili-zada por grupos aborígenes carentes de piedra o metales para la confección de sus utensilios agrícolas; grupos que, no obstante, lograron suficiente cohesión como para construir importantes obras hidráulicas en terreno inundable".

El año pasado tuve la oportunidad de visitar al Lic. Calandra, el cual me dio la impresión de ser un profesional con muchos conoci-mientos y experiencia. Sin embargo, en mu-chas ocasiones, esto no es suficiente. Tengo la sensación que los resultados han sido to-mados un poco a la ligera. Mas. valga la a-claración, el Lic. Calandra me indicó que éstos eran preliminares.

De todas maneras, si se estudia el texto con cuidado, inmediatamente resaltan a la visfj muchas <-:>ntradicciones: "...hubo un antiguo proceso de ocupación campos de cultivo...". Si se retorna a la fecha del 345 d. C. y, por la extensión de las dos fases posteriores, entonces ¿quiénes ocuparon an-

tes del 345 los campos de Moxos? y ¿de dónde venían?. ¿Eran en ese entonces los campos solamente sabanas? y. si dichos campos fueron ocupados, ¿es que sólo fue-ron levantados para cultivos?

Inmediatamente después del texto conti-núa con: "...grupos aborígenes carentes de piedra o metales para la ... no obstante, lo-graron suficiente cohesión como para cons-truir importantes obras hidráulicas en terre-no inundable".

Desgraciadamente hay muchos, desde lue-go, acosados por dar una explicación y una solución al problema de las inundaciones, que han optado, como los de la Universidad de La Plata, a explicar la existencia de los terraplenes, camellones y lomas artificiales como obras hidráulicas que "grupos de abo-rígenes carentes de piedra o metales", le-vantaron para defenderse de la subida de las aguas. Lamentablemente, nada demuestra que esto hubiese sido así. y todo se basa en meras especulaciones que, a la corta, sólo tienden a dar una respuesta incierta a una pregunta que continuará latente, sin una respuesta concreta por el momento. Algo que sí es cierto es que aquella, por un mo-mento llamémosla "civilización", tenía una capacidad mucho mayor que con la que ac-tualmente cuenta el Servicio Nacional de Caminos, pues, en el Beni, existen carrete-ras tterraplenes. si se quiere!, con una anti-güedad ya milenaria y que verdaderamente, casi se extienden por todo el departamento.

Hacia la creación del Museo Etnográfico Oriental.

Es inminente la necesidad de ta creación de un museo, sobre todo, etnográfico para el departamento del Beni. Preservar las eos-

ESPECIALES tumbres, las lenguas, las leyendas, etc.. de la gran diversidad de grupos étnicos (en un tiempo alcanzaban a más de 28) que aún viven en el oriente, es, sin duda, parte de nuestro patrimonio nacional.

Para todos los bolivianos debería ser lo más normal, el poder contestar con toda naturalidad sobre nuestra propia mitología, ya sea ésta aymara. quechua u oriental.

Sin lugar a dudas, el interés que los dis-tin tos gobiernos han demostrado por los de-partamentos del Beni y Pando, han sido hasta ahora casi igual a cero; esto implica-ría que esperar la ayuda del gobierno para crear un museo, sería como solicitar que. por decreto, se terminasen las inundacio-nes. Una alternativa lógica sería buscar la ayuda en el extranjero, y estoy seguro que si instituciones como la Universidad Técni-ca del Beni iniciase una campaña en este sen-tido. llegaríamos a conseguirlo.

O ¿Quién fue Nordenskióld?

La familia Nordenskióld tiene un origen muy antiguo. La mayoría de sus miembros han aportado a la historia de una u otra manera. Erland Nordenskióld nació en 1877, en Estocolmo. y falleció en Cotem-burgo en 1934.

Nordenskióld realizó en total seis expedi-ciones a las Américas, de las cuales, cuatro estuvieron relacionadas con BOlivia. Su in-terés se centraba, más que todo, en la histo-ria de los pueblos autóctonos, abarcando desde sus sistemas económicos hasta sus lenguas y costumbres. Tanto la producción literaria como las investigaciones de este gran científico, han sido inmensas.

La primera expedición, en la que partici-pó como biólogo, se llevó a efecto en 1898. Dicha expedición tenía como meta la Patagonia. El objetivo era el estudio de u-na especie extinguida de un inmenso ani-mal prehistórico, cuyos restos habían sido encontrados en el interior de una caverna.

De vuelta a Sudamérica en 1901. enca-bezó la expedición denominada Cordillera-Chaco, la cual realizó estudios de flora y fauna y, por supuesto, etnográficos en la región dei norte argentino hasta el río Pil-comayo, en el valle de Tarija. Fue durante este viaje que Nordenskióld paso a dedi-carse exclusivamente a la etnografía. Entre los informes escritos hay uno titulado "So-bre los mamíferos-fósiles del valle de Ta-rija". publicado en 1903 en Buenos Aires.

En 1904. una nueva expedición lo llevó a visitar el altiplano boliviano (los alrededo-res de La Paz y el lago Titicaca) / la fronte-ra entre el Perú y Solivia. Al mismo tiempo navegaría los ríos Madre de Dios y Beni, entrando en contacto con distintos grupos aborígenes, como ser los Chama, sobre el río Madidi. y los Maropa, sobre el río Beni. De esta expedición escribió, entre otros, el libro "De las montañas a los bosques", en sueco.

El año 1908, fue el inicio de otra larga expedición, esta vez al noroeste boliviano. Visitó la entonces pequeña ciudad de Santa Cruz de la Sierra, la cual contaba con una población de tan solo 12 mi! habitantes.

IContinúa en la página 72) 9

ELECCIONES 1985. OSSIO SANJ INES tviene de i. pás,n, S2> se i m p o n g a en cada p e r s o n a en cada pa í s , en el m u n d o ente-ro . E s t o es la u t o p í a , la ideali-

¿ K e s p e c t o de los a n t e c e d e n t e s a los que hace r e f e r enc i a la pre-gun ta . . .?

Se deben , sobre t o d o , a los an-t eceden t e s cupu la r e s de los go-biernos , p o r q u e en ¡as organi-zac iones de base, en jas c o m u -nidades , exis te u n a l to g r ado de r e s p e t o hacia la democrac i a , una ve rdadera p rác t i ca de la de-m o c r a c i a . E s t o s des fases deben te rminarse con el s is tema al que a sp i r amos los bol ivianos . Quis ie ra q u e nos p u n t u a l i c e con algún d e t e n i m i e n t o el t i po de v inculac ión q u e t e n d r í a su régimen con los pa í s e s vec inos , los l a t i n o a m e r i c a n o s , especial-m e n t e los de la A m é r i c a Cen-tral; los del M e d i o O r i e n t e , i n c l u y e n d o a los pa le s t inos ¿ C ó m c t r a b a j a r í a la d ip lomac ia boliviana ba jo su c o n d u c c i ó n en los f o r o s i n t e rnac iona l e s , en especial en los casos c r í t i co s m e n c i o n a d o s ? La especie h u m a n a es u n a sola, y d e b e m o s p rop i c i a r re lac iones en b loques , f o r t a l e c i e n d o pri-m e r o la in tegrac ión l a t i noame-r icana, pa ra que p u e d a implan-tarse un s i s tema de m e j o r a de vida genera l en nues t ros pa íses , y del m u n d o en t e ro . E s t o su-p o n e , e m p e r o , que !a jus t ic ia

d a d ; p e r o ex i s t en rea l idades c o n c r e t a s , c o m o las re lac iones Nor t e -Su r , Este-Oeste . Noso-t ros c r e e m o s que d e b e m o s ali-n e a m o s c o n el Te rce r Mundo, , q u e d e b e m o s buscar la just ic ia en la p r o p u e s t a N o r t e - S u r , a t ravés de la desviación de los r e c u r s o s para la guer ra , hac ia el desarrol lo ; q u e se l imi te la b r echa ex i s t en te e n t r e los pa í s e s indus t r i a l i zados del N o r t e , y ios pob re s del Sur . En c u a n t o al c o n f l i c t o Este-Oeste , c o n s i d e r a m o s que está p a s a n d o de ac tua l idad h i s tó r ica , y q u e e s t a m o s en c a m i n o de u n a nueva c o n f r o n t a c i ó n q u e supe ra al due lo Es te -Oes te , y q u e t o m a los valores de a m b o s l ados en f avor de u n a nueva c o n c e p c i ó n del h o m b r e q u e no-so t ros a b r a z a m o s , c o n énfas is especial . P r e t e n d e m o s que, en el o rden i n t e rnac iona l , más que buscar e l e m e n t o s c o y u n t u r a l e s . de ali-n e a m i e n t o , d e b e m o s l u c h a r en c o n j u n t o c o n t r a el h a m b r e , la d e s n u t r i c i ó n , la de l incuenc ia , la e x p l o t a c i ó n de n u e s t r o s recur -sos na tu r a l e s , la segregación, la

se lect iv idad en el p rec io de nues t r a s ma te r i a s p r i m a s , e tc . La l ínea de nues t ra p o l í t i c a in-t e rnac iona l , r e s p o n d e m a s bien a es tos ob je t ivos c o n c r e t o s , an-tes que a las a l ineac iones co-y u n t u r a l e s . desde el p u n t o de vista de u n pa í s p o b r e , subde-sar ro l lado , que r equ ie re de la' a y u d a d l e la so l idar idad de los pa í ses mas avanzados , más de-sar ro l lados . A n t e s de t e r m i n a r , en la pre-g u n t a N U E V E , D r . Ossio, n o t e n e m o s clara la imagen de los c o s t o s de p r o d u c c i ó n de mine-rales , ¿Qué p u e d e c o m e n t a r -n o s . . .? El caso es general . Se ha esta-d o a t a c a n d o a C O M 1 B O L con t o d o , y eso no es j u s t o , la em-presa p r o d u c e di"isas, y t iene q u e c o m p r a r i n s u m o s al p r e c i o del dólar para le lo . C r e e m o s q u e en esta s i tuac ión adecuare -m o s con real ismo el pago p o r los p r o d u c t o s que genera la C O M I B O L , así c o m o o t r a s em-presas mineras .

E s t o es pa r te del p r o b l e m a , na-t u r a l m e n t e . A h o r a e x p l o t a m o s m i n e r a l e s de m u y b a j o rendi -m i e n t o , con socavones de kiló-m e t r o s de p r o f u n d i d a d , la posi-b i l idad está en u t i l izar las co las , d e s m o n t e s y escor ias .

p a r a consegu i r r e c u p e r a c i o n e s al tas a través de invers iones m e n o r e s . En el caso de las co las , el p r o m e d i o es 0 .92 o/o, m i e n t r a s que de i n t e r i o r m i n a se es tá s a c a n d o con u n 0 . 3 0 o b ; e s t o s igni f icar ía el a u m e n t o de ingresos en las e m p r e s a s p r o d u c -to ras de mine ra l e s . Le voy a dar u n d a t u especta-cular , y que es p o c o c r e í b l e p r e c i s a m e n t e p o r es ta carac te-r í s t ica : a c t u a l m e n t e ex is te en los d e p ó s i t o s de C O M I B O L , Y P F B , C o r p o r a c i o n e s de Desa-r ro l lo y o t r a s e n t i d a d e s , e q u i p o n o u t i l i z a d o , a l g u n o o b s o l e t o , n a t u r a l m e n t e , p e r o n o exce-d i e n d o un p r o m e d i o del 2 0 o b , p o r valor de 1 . 2 0 0 mi l l ones de dó la res , q u e deb ie ran inver t i rse en el desa r ro l lo de los m e d i o s de p r o d u c c i ó n q u e a c t u a l m e n t e t e n e m o s en el pa í s . 1 . 2 0 0 mi l lones de dó la res , es u n a c a n t i d a d e n o r m e m e n t e grande pa ra e q u i p o . . .

¿Qué le pa rece . . .?

Que v iv imos p e r m a n e n t e m e n t e en u n c l ima de d e s i n f o r m a c i ó n de las ac t i v idades del E s t a d o , de su p a t r i m o n i o . Bien, c r eo q u e h e m o s c o n c l u i d o . Gracias p o r su t i e m p o , D r . Oss io . •

L O R G I O V A C A . . . (Viene de la Pág. 391

p o r t e s m o d e r n o s y c i e n t í f i c o s , p r o d u -

c e u n n u e v o m e n s a j e , p e r m a n e n t e y a l

a i r e l i b r e , d e p r o p i e d a d p ú b l i c a e i n t e -

g r a d o ¿ ¡a v i d a d i a n a de l c i u d a d a n o

c o m ú n

E s t o s l o g r o s , q u e s o n f r u t o s t e m p r a -

n o s e i n i c i a l e s y c o n s t i t u y e n n o m u y

n u m e r o s o s c a s o s c o n c r e t o s , p r e c i s a n

d e u n a u r g e n t e c o n s o l i d a c i ó n y d i f u -

s i ó n , p o r l o q u e p i e n s o q u e u n a d e l a s

l a b o r e s p r i m o r d i a l e s d e l o s a r t i s t a s e

i n t e l e c t u a l e s b o l i v i a n o s d e h o y , d e b e

d i r i g i r s e , c o n el a p o y o d e l p u e b l o , a la

f o r m a c i ó n d e n u e v a s g e n e r a c i o n e s q u e

p u e d a n c r e a r s o b r e l a s b a s e s f i r m e s d e

e s t a t r a d i c i ó n m a d u r a d a e n la l u c h a y

•̂n el s a n o o r g u l l o d e l a s p r o p i a s r a í c e s .

L . V . - L a f u n c i ó n s o c i a l de l a r t e e n L a -

t i n o a m é r i c a e s , f i n a l m e n t e , m o s t r a r n o s

q u e s o m o s u n s o l o p a í s q u e v i b r a c o n

• o s m i s m o s t r i u n f o s y se a f l i j e p o r l a s

n i s m a s d e r r o t a s y q u e , al m i s m o t i e m -

:>o, n u e s t r a r e a l i d a d e s i n a g o t a b l e y d i s -

i n t a , P e r o , q u e s in I2 u n i ó n d e e s f u e r -

z o s n o p o d e m o i s v e n c e r n i la b a t a l l a d e las i d e a s , ni s i q u i e r a la b a t a l l a d e l o s s u e ñ o s , s e a n é s t o s p l á s t i c o s , p o é t i c o s o c i n e m a t o g r á f i c o s .

CUANDO LA LUNA... (Viene de la página 91

Nordenskióld llegó a pronosticar la impor-tancia económica y geográfica que más ade-lante Santa Cruz llegaría a jugar en el queha-cer nacional.

No conforme con los resultados de la ex-pedición de 1908. nuevamente retorna a

BOlivia en 1913. esta vez acompañado de su esposa. En esta expedición. Nordenskióld llega a redescubrir las ruinas incaicas de ln-calla/ta. en las proximidades de la ciudad de Cochabamba. Del valle se interna hacia la zona del Huachi. donde visita las todavía existentes misiones franciscanas de Coven-do (indígenas Mosetenes) y Cavina (indíge-nas Cavinas). De aquí, continúa internándo-se hacia las selvas orientales, hasta alcanzar el río Iténez o Cuaporé. donde roma con-tacto con algunos grupos de indígenas.(Si-rionó. Huaynam. Huari, etc.), los cuales to-davía no habían entrado en contacto direc-to directo con la llamada "civilización"

En 1914 y encontrándose en la ciudad beniana de Ribera/ta. le alcanzó la noticia de! estallido de la Primera Guerra Mundial.

suceso que le obligó a abandonar la expe-dición que, según él, había sido la mejor planeada. Sin embargo, una vez más. Nordenskióld publica un voluminoso libro: "Aventuras e investigaciones en Sudaméri-ca". donde sintetiza los resultados de la ex-pedición de 1913-1914. Este libro es de muchísimo valor para nuestro país. La rt copilación de informes y datos hechos en-tonces son. actualmente, de un gran valor.

Las descripciones que Nordenskióld hizo sobre el problema de la goma, el tráfico de esclavos y venta de indígenas, las masacres realizadas por los explotadores de la goma contra los aborígenes, muestran páginas es-condidas de nuestra historia que también es necesario desenterrar. La comprensión del por qué de la existencia de un sinnúmero de grupos selváticos en el oriente boliviano, que fueron reducidos por el Imperio Incai-co, uno de los imperios más poderosos en aquellos tiempos, nos hacen pensar en nue-vos horizontes.

Es por esto y por mucho más. que Erland Nordenskióld. se puede decir, fue uno de los pocos investigadores extranjeros que han aportado un sinnúmero de conocimientos e investigaciones para una mejor compren-sión de una parte de la verdadera historia de nuestro país.

Edwin Salas Russo Estocolmo. Suecia.

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