Daiana Calaza Escalada

4ºCD

¿Por qué algunos humanos sufren sonambulismo?

• Las personas que presentan sonambulismo (un trastorno del sueño clasificado como parasomnia), también llamado noctambulismo, desarrollan actividades motoras automáticas que pueden ser sencillas o complejas. Un individuo sonámbulo pueden salir de la cama, caminar, orinar o incluso salir de su casa, mientras permanecen inconscientes y sin probabilidad de comunicación. Es difícil despertarlos aunque, en contra de lo que se cree comúnmente, no resulta peligroso.

Los sonámbulos corren más riesgo de dañarse así mismos que a otros. Cuando los sonámbulos son un peligro para ellos mismos o para otros (por ejemplo, cuando suben o bajan escaleras o tratan de usar una herramienta potencialmente peligrosa como una estufa o cuchillo), es aconsejable alejarlos del peligro y llevarlos nuevamente a la cama.

¿Por qué los ojos rojos en las fotos?

• En situaciones con iluminación difusa —en general de interior— o en días nublados, las pupilas están dilatadas para aprovechar mejor la escasa luz. Si en ese instante realizamos una fotografía, la luz del flash ilumina la parte interna de los ojos y rebota en las retinas proyectando el color rojo de los vasos sanguíneos que irrigan la retina.

• Esto ocurre siempre que la luz del flash incida de manera frontal y la distancia sea relativamente corta. Y que se mire directamente a la cámara, claro. Y suele ser un efecto más evidente en niños y en ojos claros, pues son más sensibles a la luz. 

¿Por qué el arco iris muestra siete colores?

• La luz blanca se descompone en 7 colores al pasar por un prisma. En el cielo siempre aparecen los arco iris después de que hubo (o durante) la lluvia por la presencia de gotas de agua que hacen las veces de prisma. La forma de arco obedece a la redondez de la tierra. Los 7 colores en que se descompone la luz son Violeta, Indigo, Azul, Verde, Amarillo, Anaranjado y Rojo. Y, sí, el índigo sí se aprecia (es un azul que no llega a ser morado).

¿Por qué se pone roja la nariz cuando nos refriamos?

• Cuando un virus, como el del resfriado, invade las membranas mucosas, especialmente en las fosas nasales, los vasos sanguíneos que las irrigan se dilatan y causan tumefacción y enrojecimiento de la nariz. Paralelamente, la irritación de este apéndice por parte de un agente viral propicia una descarga de mucosidad tan copiosa, que la persona afectada puede acabar fácilmente con varios paquetes de pañuelos de papel en un día. El esfuerzo por despejar los conductos nasales hace que la irritación sea aún mayor. Para atajar esta reacción tan útil, millones de personas utilizan descongestionantes nasales, que contienen feniledrina seudoefredina, fenilpropanolamina y oximetazolina. Éstos y otros compuestos actúan constriñendo los vasos sanguíneos, lo que se traduce en una sensación de alivio. Aunque hay que decir que no borran el color rojo de la nariz.

¿Dónde nacieron las postales?• Estas pequeñas tarjetas de cartulina rectangulares que

son como un saludo a distancia tienen su cuna en Alemania, en 1865. Cuatro años después fueron adoptadas por el sistema de correos de Austria y de ahí fueron invadiendo el mundo entero, a pesar de que al principio no llevaban ningún tipo de ilustración. A España la idea de estos breves mensajes, no demasiado comprometedores y aptos para los perezosos de la pluma, nos llegó en 1873, el mismo año que a los Estados Unidos. El éxito de la postal desencadenó al poco de su aparición un verdadero boom de la comunicación sólo comparable con el que ha logrado el teléfono móvil en nuestros días.

De mensaje escrito en sus inicios, la postal pronto se convirtió en comunicación ilustrada con la mayor diversidad de temas y destinatarios: dibujos, paisajes, monumentos, amaneceres, puestas de sol, marinas...; madres abnegadas, parejas de enamorados, gatitos, sonrosados querubines... y, sobre todo, felicitaciones para el día de la madre, el cumpleaños o el bautizo.... Ante tal oferta, en la que participaban también ilustradores famosos, las postales se elegían con sumo cuidado, no sólo para enviarlas sino también para guardarlas y coleccionarlas.