contribucion al analisis de la division espacial del trabajo

5/10/2018 Contribucion Al Analisis de La Division Espacial Del Trabajo

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CONTRIBUCION AL ANALISISDE LA D IV ISION ESPACIAL DEL TRABAJO

PHILIPPE AYDALOI eEs a nivel internacional donde mas se ha tratado el analisis de Ia division

del trabajo en e1 espacio, La teoria del imperialismo, la teoria del ciclo pro-ductivo, eI analisis de Ia Firma multinacional, han mostrado como la empresabuscaba, mediante Ia movilidad del capital, un freno a Ja disminucion de susganancias a traves de la posibilidad de sobrepasar las regIamentaciones na-cion ales y de utilizar una fuerza de trabajo mas harata. Al mismo tiempo, nu-merosos economistas regionales seguian viendo en los desplazamientos de activi-dades al interior del espacio nacional una sumision a las determinantes deriva-das de los costos de transporte 0 como una expresion de su preocupacion deobtener los beneficios de los sistema, de ayudas Financieras planteadas parlos poderes publicos. En un reciente libro se ha tratado de demostrar que losmismos mecanismos deberian explicar los desplazamientos observados tantoen el espacio internaciona1 como en el espacio interregional (AydaIot, 1976),

Sin duda, los fennrnenos se evidencian mas clararriente en el espacio inter-nacional en la medida en que los distintos conjuntos alli son evidentemente masheterogeneos que al interior del espacio nacionaI. Sin embal'go, inversamente1a ausencia de Fenomenos norrnativos distorsionantes, tale!' como, pOl' ejem-plo, el menor peso de la distancia (es decir, de los ga~to~ de transporte ); mues-tran mas cIararnente los mecanisrnos de la division del trabajo a nivel nacional.

Para hablar de la division del trabajo en el espacio es necesario abandonarel conjunto de hip6tesis de homogeneidad propias del pensamiento neoclasico,La identidad de Ia selecci6n tecnica, Ia remuneraci6n de los factores a suproductividad marginal, la falta total de consideracion de las relaciones sociales,tanto como de la herencia tecnica 0 social de Ia historia, situan a1 espacio s610como una distancia entre dos 0 varies puntas dentro de un territorio: dos pun-tos s610 se distinguen en funcion de la distancia que los separa, es decir, de los

" Algunos trabajos anteriores del autor, profesor de la Universidad de Paris I, Pantheon-Sorbonne, quedesarrollan diverscs aspectos de Ia division espacinl del trabajo SOD; "Dynamique spatiale t developpementinegal'~, Econornica 1978: "Politique reglonalc et ~trate~ie spat iale de In. grande enrreprtse'", UNR15D, Re-gional series X~.' 9, 1970; "~e,y industrial structures and urban izutioa"r Conferencia en Hialowiez a, Po-Ionia, 1979; "Le rOle du travail dans les nouvelles strategies de localisation", Revue d'Economie Region.Ieet Urbnine, N',l 2, 1979: "Division spatiule du travail et coftt de reproduction de 1 1 . 1 force de truvn il".eolloque Hedeploiernent industriel et developpement regional, Clermont-Ferrand, 1979; "L'entreprise donsI'espuce urbairr", Economica 1979.



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costos que hay que afrontar para desplazar Factores 0 hienes de un punta aotro. Si se abandonan las hip6tesis econ6micas y tecuicas que homogenizan elespacio, este se transfonna en alga mas complejo que una simple distancia,

Dado que los costos de transports disrninuyen, el pensamiento neoclasicoconduce hacia una neutralizaci6n del factor cspacial, ~ egar este cnfoque significadefinir de otra manera el espacio. dC6mo? El espacio ya no es un pedazo desuelo 0 un conjunto de distancias, sino que son las relaciones tecnicas, economi-cas y sociales las que se relacionan entre agentes localizados en lugares dife-rentes, Estas relaciones definen estructnras quc representan relaciones jerarqui-zadas v diferenciadas,

Partamos de la mecanica neoclasica para mostrar, por proceso inverso, 10que implica el abandono de al~llllas de sus hipotesis mas significativ3'i. Para losautores neo-clasicos, la dificultad en definir e 1 espacio "e produce debido a que,siendo la productividad del trabajador la que detennina su salario, todos los es-pacios son, 0 deberian ser, indiferentes al coritratista al escoger una determinadalocalizacion, si la productividad es menor en un espacio, los salarios 10 serantambien y el resultado global sera consecuentemente equilibrado. Es esta inde-terminaci6n espacial la que impone el uso de una noci6n en que las econorniascxtemas SOll las unicas capaces de explicar las diferencias en el poder de atrac-ci6n de los espacios, 0 bien, se plantea la primacia de los costas de transporteen Ia definicion del espacio.

Sin costo de transporte ni econornias externas, e1 problema de la Iocalizacion6ptima careceria de soluci6n dado que cada loca1izaci6n ofreceria par definicionun resultado siempre identico, Sin embargo, el problema cambia cuando se rom-pe la relaci6n salario-productividad,

LA GRAN EMPRESA

Es sin duda necesario empezar con las estructuras industriales. EI procesode concentraci6n se desarroIl6 a tal punta que las grandes empresas representanhoy dia, en las economias avanzadas, la mayor parte de la producci6n y del em-pleo. Se sabe que su importancia se vuelve dominante en las relaciones interna-cionales (al punto que, por ejemplo, las exportaciones de las firmas multinacio-nales instaladas en Mexico representan el 72%en las exportaciories industrialesmexicanas, 0 que s610 la planta de Ford en Burdeos es responsable del 13% delcomercio exterior de la region de Aquitania). Cabe agregar que, en el planonacional, las gran des empresas son responsables de la mayor parte de la crea-ci6n y relocalizaciones de establecimientos (de esta forma, una encuesta reali-zada con una muestra de las 1.800 mayores emprcsas frances as registr6 que, ensu seno, las empresas de 18 establecimientos y mas, que corresponden solamenteal 13 % del numero de empresas considerada en la encuesta, poseen el 71% delos establecimientos y son responsables del 85%de las creaciones de nuevos es-tahlecimientos rcgistradas entre 1965 y 197.5. Aydalot, 1978).

Ya no sc puede, pues, construir una teoria de Iocalizacion en el marcoimplicito de la empresa con establecimiento unico que selecciona una localizacionoptima, sino que deben bus carse, en las formas de funcionamiento de la granempres3, las bases de sus calculos espaciales,



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Observarnos, en primer lugar, que a] contrario de 1 0 que a menudo seescribe, la mejor carta de triunfo de la gran empresa no reside s 6 1 0 en laseconomias de escala que aprovecha, sino mas bien en el con junto de medicsde los cuales dispone en relaci6n a la pequeiia. Cabe destacar, de maneraespecial, los medios Financieros can que cuenta (a traves de lUI acceso Faoilal credit a, en diversos centres Iinancieros, 0 de su aptitud para generar losmargenes de financiamiento que pcrrnitan iniciar una nueva estrategia) yorganizacionales (5610 una gran empresa es c3paz de administrar conjuntascomplejos, diseminados en un vasto territorio, de organizar el acceso a materiasprimas 0 numerosos productos intermedios a de cmprender una politica co-mercia] en gran escala ).

Se pueden reinterpretar estos "ases de triunfo" en terrninos espaciales:]3 gran empresa aparece como capaz de entrentarse a1 espacio, 10 que noparece posible en Ia pequefia empresa. Esta ultima se caracteriza pOl ' . ' i 6 1 0 unestablecimiento, mano de obra contratada en una zona urbana )' suburbanaunica, un mercado local y proveedores pr6ximos. Sus posibilidades de elecci6nse ven, pues, limitadas: estas estan supeditadas a la existencia de otras empre-sas vecinas que Ie provean Insumos locales, debe, pOl' tanto, dirigirse a pro-veedores vecinos. Su politica salarial esta definida por las norma') locales, sinque puedan tornarse gran des libertades 3 este l'especto. En resumen, debe ad-quirir todo en la zona donde esta irnplantada, y asi, es en ultimo termino, e1espacio el que define a la empresa. Su debilidad lc impide a rnenudo una des-localizacion, 1 0 que implicaria tina renovaci6n de su personal, sus proveedo-res v aun mas, sus c1ientes. Sus selecciones, tanto tecnicas como econ6micas,finMcieras y sociales, Ie son en el hecho impuestas por su media.

Inversamentc, la gran empresa, qne posee varios establecimientos y tiencla capacidad de abrir otros, puede hacer abstracci6n de su medio inmediato,1 0 que modifica por comp1eto su Iuncionamiento, puede escoger entre la manade obra localizada en lugares diferentes, con aptitudes y costas diferentes,puedo seleccionar a sus proveedores en gran escala y reclutar a sus clientes elluna arnplia zona. Tal empres3 tiene capacidad de elegir desde el punto devista social, eoonrnnico a tecnico y utilizar cl espacio en husca de la Iocaliza-cion que mas Ie convenga.

Esto significa que esta empresa utilizara solamente 1 0 que es util de carlaarea 0 localizacion deterrninada; no esta obligada, como la pequefia, a dependerde la localizacion elegida en todo. La dioisiot especial. del trahaia camien;r.ncuando la empresa es capaz de sobrepasar los actuates limites eepacuile de suactividad. De esta manera, no cs el espacio el Cf!le define a la empresa, sinola empresa la que pasa a definir el espacio,

La empresa 50 vera asi premunida de esta Iibertad respecto del espacio,1 0 qlle constituira . su gran poder.

TECNOLOGIA Y TRABAJO

De esta manera, el dominio tecno16gico cs una de las principales armasde la gran empres3: creaci6n de nuevos productos a proponC' f a los poteucialesusuaries, creaci6n de nuevos procedirnientos, creaci6n de nuevas tareas, de



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nuevos gastos, de nuevos trabajos, de nuevas estructuras de calificaci6n. Esbasicamente, la aptitud de las empresas para innovar 10 que Ies provee laforma concreta de una estrategia de desarrollo, de supervivenoia, de cambia,etc., ya que Ia tecnologla no es un fin en si misma, sino un instrumento quepermite a la empresa alcanzar sus objetivos (dominio de un mercado, dominicde una zona geografica determinada, maximizacion de utilidades, diversifies-cion, etc.).

Cabe destacar que una nueva tecnologia no se oefine solamente pOl' lasnuiquinas que las materializan 0 los nuevas productos flUC ella produce, sino,sobre todo, par los movimiento') !J las tareas que ella exige. Esto se debe a quela Fuerza de trabajo no se adapta mecanica y pasivamente a procedimientosproductivos nuevos, Toda la fuerza de trabajo no se adaptara en igual plazoa una tecnologia nueva; existe un periodo de adaptacion que depende de Iacalificacion de los trabajadores llarnados a aplicarla, Todo procedimiento nuevono se caracteriza s610 por una norma de productividad conocida de antemanoy determinada pOl' los implernentos concebidos para su aplicacion.

Esto significa que la empresa, cuando promueve una innovacion, no eligela dupla tecnologia-productividad, sino una relacion tecnologia-Fuerza de trabajo.SegUn la fuerza de trabajo requerida para utilizar la tecnologia, diferiran susformas y sus resultados, Cada tecnologia, cada procedimiento, cada organizaciondel trabajo, cada tipo de tarea y de calificacion pueden dcfinirse por el tipode media que le es adecuado, por Ia masa de conocimientos cientificos y tee-nicos que incorporan, por un cierto gl'ado de "sofisticacion" :', finalmente, par'Ill nivel dado de mecanizaci6n.

Hasta aqui, la observacion mas evidente es que las tecnologias nuevaspresentan una situacion que podria parecer paradojal: toda tecnolog1a nuevaincorpora una masa de eonocimientos superiores a aquellas incorporadas enlas tecnologias anteriores. Pero se observa paralelamente que estas nuevas for.mas tecnicas se materializan par un acrecentado distanciamiento de las califi-caciones y par un frecuente crecimiento de las tareas que no requieren cali fica-ci6n. Es el fen6meno conocido como segmentaci6n del mercado del trabaioy algunas veces calificada como proceso de descaliiicacion; sobre calificaci6n.Junto a un aurnento del conjunto de los conocimientos y de aptitudes, seagrega una dispersion acrecentada de las calificaciones. Simetricamente, lastareas descalificadas son a menudo las que exigen una mayor mecanizacion

Aparece asi una relacion entre el tamafio de la empl'esa, Ia escala de pro-duccion, el grado de mecanizacion y el grado de descalificaci6n de las operacio-nes de prnduccion. Si las operaciones de preparacion de Ia produccion (investiga-cion, desarrollo, ingenieda) y aquellas de vigilancia y mantenimiento sean muycalificadas, las tareas de produccion son muy mecanizadas, ya que se trata deproducci6n en gran escala y emplean, a menudo, mano de obra no calificada,La industria electrica y electronica y la industria autornotriz son claros ejernplosde ello.

La relaci6n recientemente analizada entre pequefia y gran empresa severifica aqui claramente: en la medida en que una producci6n se transformaen produccion en gran escala, las grandes empresas adquieren una ventajacon respecto de las pequenas: su aptitud para concebir los procesos rnecaniza-dos que perrniten el empleo de una mana de obra no calificada de bajo costoy a1tamente productiva, aptitud para financiarlos y para organizarios. La con-



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centracion industrial aparece, pues, como la materializaci6n de los procesosde produccion-consumo masivos,

EI tarnafio de las empresas, las Iormas mecanizadas descalificadas de pro-duccion son 1a adaptaci6n de nuevas Formas de consumo igualmente norma-Iizadas, son reflejo, Finalmente, de la sociedad urbana moderna,

De este modo, una innovacion tecnica esta tam bien definida poria Fuerzade trabajo requerida para utilizarla, Es decir, la elecci6n de una cierta tee-nologia tiene sentido 5610 si esta en relacion con una seleccion de localizacion:se elige una tecnologia determinada en funcion de las caracteristicas de lamana de obra disponible localizada,

Se ha dicho que la gran empresa, que domina la tecnologia, domina tam-bien el espacio; eI espacio es tambien para ella un Iugar caracterizado par unafuerza de trabajo (sus caracteristicas, sus aptitudes productivas, su costo).

EI dominio del espaeio es, entonces, la aptitud para ir a buscar la fuerzade trabajo que mejor se adapte a la tecnologla deseada, de la misma maneraque el dominic tecnol6gico es aptitud para crear las tecnicas adecuadas a lamana de obra buscada.

Tras la tecnologia se encuentra, necesariamente, el sistema de localizaci6nque Ie eonfiere sentido, es decir, para la empresa, su rentabilidad, este sistemade localizacion esta definido por una Iuerza de trabajo localizada, definidaella misma por su costo, y la productividad que obtendra con la tecnologlaanalizada,

Existe, entonces, una substitucion entre espacio y teelwlogia, teniendo co-mo intermediario el trabajo: cada espacio esta definido por las tecnicas posiblescon la fuerza de trabajo localizada, en cada tecnica esta definida par el espacioque contiene Ia fuerza de trabajo que le es adaptada. La empresa escoge sunul-uineamente una tecnica y un espacio, a traves de Ia seleccion de una manode obra.

Minimizar un costo de producci6n es, pues, elegi1' una determinada tecno-Iogia que permita una productividad relativamente elevada y que pueda serdesarrollada en espaeios que ofrezcan una fuerza de trabajo capaz de obtenersu nivel de productividad a un costa (un salario ) relativamente bajo,

Pensar asi significa salirse de los marcos neoclasieos habituales. si sepiensa que el trabajo es un factor hornogeneo, si se piensa que el salariorepresenta la productividad del trabajo, entonces, el factor trabajo es neutroen el espacio y 10 que precede carece de sentido, Sin embargo, si se rompenestas dos relaciones el trabajo aparece como el factor estructurante de lasIocalizaciones en relaci6n con Ia selecci6n de tecnicas.

No es sorprendente que la teoria tradicional, que admitia las tesis neo-clasicas acerca de neutralidad del trabajo, haya propuesto la primacia de loscostos de transporte en la explicacion de las localizaciones, por otra parte,ella Iue concebida en una epoca en que clarameute los costos de transporte eranelevados Y estructurados. Hoven dia se sabe que eI factor transporte ha vistoreducida 'su influencla: .- Porque los considerables incrementos de productividad han reducido el costadel transporte;



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- Porque economias en el usa de materias primas han reducido el caracterpesado de la industria pesada, y

- Porque Ias industrias que hoy dia crecen mas rapidarnente son las industriaslivianas.A pesar de que la mauo de obra dista mucho de ser el unieo factor de

localizacion, su irnportancia es creciente: todas las encuestas la situan en elprimer plano, bajo sus mas divers os aspectos, cuantitativo, estructural y enterminos de costo. Nose debe, por otra parte, contraponer estos divers asaspectos: la existencia de una fuerza de trabajo movilizable, su costa, suactitud frente al trabajo industrial, su grado de adaptaci6n a las tareas que laempresa piensa confiarle, estan intimamente vinculados.

El costa de reproduccion de la [uerza de trabaio

Una fuerza de trabajo, tal como la considera la empresa, constituye unconjunto complejo que puede ser analizado bajo diferentes imgulos. EI econo-mista pone hincapie en dos aspectos: a) El aspecto tecnico: el grado de adap-tacion del trabajador a una tecnologia; b) EI aspecto monetario: la relacionsalario-productividad.

Ya se ha abordado el primer punto. En relacion al segundo, se ha dichoque Ia reIaci6n cambiante entre productividad y salario constituia un elementoestrategico, Si se deja de lado el problema de la contribuci6n del asalariadoen un medio nuevo, es decir, el de la creaci6n de relaciones de producci6ncapitalists, se puede decir que el salario es, en ultima instancia, y mas aliade las turbulencias engendradas pOl' las luchas sociales, la expresi6n de loscostas soportados por el trabajador,

Sin duda, en el analisis de la Forrnacion del salario, las tesis neomarxistas,a menudo ponen enfasis en las relaciones de fuerza y juzgan como secundarioe incluso ilusorio el costo de reproduccion de la fuerza de traba]o, Parecepoco pertinente conceder importancia teorica a una discrepancia (salario comoexpresi6n de relaciones de Iuerza, 0 salario como materializaclon del costo dereprcduccion ) que surge mas bien del traslape entre dos enfoques (sociol6gicoy eeon6rnico) de un mismo analisis. Los sociologos tienden a presentar unanalisis que gira en tomo al est ado de las relaciones sociales, los economistas,en cambio, proponen mecanismos generados en datos medibles en terrninos decostas.

A nuestro parecer se deben distinguir las fuerzas que definen las basesde un sal aria necesario (costas soportados por el trahajador en su existenciacotidiana) y las modalidades concretas a traves de las cuales estas fuerzas seimponen (Iucha social). Sin duda, eI empresario no tiene una nocion clarasabre el costo de reproducci6n de la fuerza de trabajo, sin embargo, percibeclaramente las relaciones de Iuerza. Sin duda, entonces, el salario es frutade las Iuchas sociales, No obstante, se debe dar al nivel de la vida real, quedepende del costo de reproduccion de Ia fuerza de trabajo, eI 1'01 que le corres-ponde jugal' en estas luchas, Las luchas sociales son, en un determinadomomenta, tanintensas que el costo de reproducci6n es insuficiente tomandoen cuenta el salario, elias son una lucha contra la degradaci6n de las con-



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diciones de existencia reales, la combatividad sindical decrece frente a lossalarios que estan en relaci6n a las necesidades de los trabajadores, Nos parecepor 10 tanto, van a confrontar las dos tesis, que 110 se situan en el mismo planoy que no son contradictorias.

Se han pcdido entregar elementos de verificacion estadistica en la tesisque ve en el costa de la reproduccion del trahajo la tendencia que dirige ladefinici6n del salario. Se sostiene aqui que:- El salario, determinado pOl' las luchas sociales, tiende a aproximarse al costade reproducci6n de la fuerza de trabajo.

- Este costo de reproduccion no es, en ningun caso, una variable aleatoria,Expresa relaciones sociales anteriores 0 actuales: estas son las fonnas enque opera el modo de producci6n que define las forrnas de consurno impuestasal trabajador,2.C6mo materializar las relaciones entre el costa de reproducci6n y las

formas de organizaci6n social? Son muchos los factores que inciden en el costade reproduccion, tales como:- La urbanizacuin. La ciudad, sobre todo la gran ciudad, crea costos espe-cificos ligados a su dimension y tarnbien al modo de vida que impone a sushabitantes: las distancias entre el hogar y el Iugar de trabajo, contribucionesterritoriales que repercuten en el costo de la vivienda, La vida urbana generatipos de fatiga especificos y hace necesarios esparcimientos origina1es y cos-tosos.

- La movilidad de los trabajadores: separar a los trabajadores de su medioambiente original aumenta las car gas que recaen en ellos )' acrecienta suconsumo cotidiano.

- EI crecimiento de las tasas de acticidad y la prolongaci6n de Ia jomada detrabajo aleja cada vez mas a las personas de su hagar (el incremento de lastasas de actividad femenina asalariadas provocan un alejamiento creciente delhagar). Reducir el tiempo de permanencia en el hogar impone nuevas form aspara realizar las Iunoiones comunmente dedicadas al trabajo dornestico (ali-mentos comprados y preparados fuera, uso de aparatos electrodomesticospara reducir el trabajo en la casa, etc.).

- La sofisticad6n de las tareas crea gastos suplementarios, tanto en la produc-cion de est a nueva fuerza de trabajo (duraci6n de la educaci6n, costa deesta Iormacion ) como en su reproducci6n corriente (recreaciones, diversosconsumos socio-culturales y que dependen, no ya de una organizaci6n espon-tanea, sino de una organizaci6n especifica y costosa}, Subyacente a estefen6meno, se encuentra que estos Iactores de reproducci6n no son mas queindicadores de un fen6meno mas general: este es, sin duda, la extensi6n delmodo de producci6n capitalista, la desaparici6n prog:resiva de las formasprecapitalistas, tanto cn la produccion (trabaja a domicilio, sistema del taller,formas artesanales, etc.) como en e1 consumo (traba]o domestico, formasno mercantiles de bienes de consumo) que sefialan el incremento del castode reproduccion de la fuerza de trabajo,Son dos los aspectos aqui cuestionados:



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- Nuevas formas de trabajo y de vida colectiva obligan a recurrir a bienes yservieios suplementarios para reproducir la fuerza de trabajo, y

- las nuevas Iormas de organizaci6n de Ia produccion y de la vida fuera deltrabajo obligan a recunir a [ormas mercantiles que reernplazan a form as nomercantiles de consumo.En l(l~ dos cases, estos nuevos consumes son reflejo de mutaciones que alte-

ran los modos de existencia social, las modalidades tecnicas de la producci6n,incluso el sistema familiar represent ado en comportamientos especificos expresa-dos aqui par costos crecientes y analizados, en este caso, por el economista.Sin embargo, 10 que se esta cuestionando son los sitemas de relaciones socialesderivados del sistema capitalista y que inciden en la triple relaeion entre capi-talisrno, ciudad e industr:ia.

Un interesante ejemplo de estas mutaciones, que acarrean grandes costosde reproducci6n, en los nuevas tipos de organizaci6n, se refiere al trabaio do-mestico: esto se debe a que el bajo coste de reproduccion de la fuerza de trabajoen las estructuras sociales que la engendran, es debido en gran parte al carac-ter no mercantil de los servicios domesticos, mantenidos como son par la estruc-tura familiar. Esto plantea un problema teorico: los autores marxistas 1ostienenque la 16gica del capitalismo consiste en ampliar el campo de acci6n de lasrelaciones rnercantiles, sobre todo respecto de la reproducci6n de las fuerzas detrabajo, a traves de la urbanizacion, la estandarizaci6n del consumo, 10 querepresentaria la extinci6n progresiva del trabajo dornestico no mercantil, Sinembargo, producido esto, habria un nuevo encarecimiento del costo de repro-ducci6n del trabajo. Sin duda, el trabajo domestico no tiene valor, ya que al noestar destin ado al intercambio es, pues, por naturaleza, no productive. No obs-tante, si bien no es una rnercancia, puede sustituirse por mercancia; al no pro-ducir plusvalia es, de alg{m modo, equivalente a plusvalia en cuanto a quepermite (0 aumenta) la formaci6n de plusvalia en el sector mercantil a travesde la disminuci6n del costa de reprodncci6n del trabajo (es decir, del salario).

El problema teorico subyacente es esencial. Si el modo de producci6n capi-talista tiende a reducir el trabajo domestico, incorporando a la mujer en formaacelerada en la produccion mercantil ", las modalidades de reproduceion de lafuerza de trabajo engendran un encarecimiento cruzado al interior de las mo-dalidades de reproduccion dominadas por el estilo de vida urbana netamentemercantiles, Si, par el contra rio, ciertas formas de produccion capitalista bus-can formas menos mercantiles de reproducci6n (0 mas "tradicionales"}, en-tonces la estrategia es a todas luces diference y se analiza bajo un prisrna deuna busqueda de un costo de reproduccion minimizado.

Es comprensible que una parte importante de las diferencias en los nivelesde ingreso ref'leja menos diferencias en el nivel de vida que diferencias en lamodalidad de vida. Se ve, igualmente, que existen lazos entre las formas tee-nicas y los tipos de salario, configurando tipos ambientales que conllevan a

1 Por ej, Ch, Pulloix, Travail et production, Mnspero, 1971:1.2 Hernos relevado que, si bien en Francia las tnsa.s de actividud de las muieres no han aumentadodemasiado desde hace treinta aDOS, se hu ida produciendc un reemplazo de las. mujeres activas en laagrtcultur -trnbajo que para ellas no estaba bien rem unerado-e por mujeres nctlvas en Ia industria 0en el sector terciario en el seno de las zonas salnriales, que las aleja del trabujc dornestico y Ies imponeactlvldades que pueden corupararse a aquelias de 10. hombres,



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form as de consurno: un estado avanzado de la division del trabajo implica ciertasIormas urbanas: reagrupamiento de poblaciones, desarrollo de una economiade intercambio, Tecnicas sofisticadas y mecanizadas pueden tan s610 desarro-llarse dentro de un media ambiente urbanizado y modemo (a traves de las ne-cesidades que se manifiestan por una poderosa infraestructura, un entorno cien-tifico, contactos interindustriales, etc.). S1, como se ha mostrado, cualquier tipode tecnica no es compatible con cualquier tipo de mano de obra, no es de ante-mana compatible con cuaIquier tipo de media ambients.

Si todo avance tecno16gico conlleva, sin duda, un incremento en la actividad,engendra paralelamente un encarecimiento del costa de la reproducci6n deltrabajo, reduciendo asi la oportunidad de modernizaci6n. Las formas de compe-tencia entre Jas empresas conllevan a un refuerzo en Ia acumulaci6n, un avanceen las tecnioas, pero esto palm siempre a traves de formas mas costosas de orga-nizaci6n, un medio ambiente mas urbanizado, un costa de reproduccion del tra-bajo acrecentado. EI hecho que el reagrupamiento de trabajadores moviles enlas aglomeraciones urbanas sea Ia forma normal de movilizaci6n de Ia fuerzade trabajo, indispensable para incorporar tecnicas mas productivas, significaque los incrementos de productividad se veran contrariados debido al necesarioencarecimiento del costo de reproducci6n de estes trabajadores, es mas, enadelante, el desarrollo urbano sera el unico "beneficiario" de esta fuga. EI resul-tado global del progreso tecnico sera nulo, se desarrollara una sociedad despil-farradora y nada se opondra fundamentalmente a Ia tendencia de disminuci6nde las utilidades.

Es cierto que, desde hace tiempo, la estrategia dominante fue la de con-centrar a los trabajadores, Imitormar SIIS condiciones de cida, en aras de unamejora en las econorriias de escala y la productividad. Sin embargo, nada per-mite suponer que estos incrementos de productividad tienen una intensidadsuperior al reencarecimiento consiguiente del costo de reproducci6n de la fuerzade trabajo. Toda una epoca de la industrializaci6n ha side marcada por estaestrategia.

Con la concentraci6n de las empresas y la popularizacion de las tecnicasse pudo tener acceso a tipos de mana de obra diversificados, a menor costo.La creciente movilidad, caracterfstica de las gran des empresas, permite llevarla delantera cn la busqueda de la mana de obra periferica, mientras que Iaestandarizaci6n de las tecnicas Ies perrnite lograr una elevada productividad. EIproblema reside, pues, en el menor costa de reproduccion de los trabajadoresde Ia periferia, mantenidos en un medio menos mercantil y men os urbano queen el "centro".

Mantener a los trabajadores en su media de origen, preservar un ciertoaislamiento de esta mana de obra, permite perpetuar, a 1 0 menos por un tiempo,modos de vida menos costosos, a pesar que las bases econ6micas que los habiangenerado, hayan desaparecido: las empresas que emplean personas en espa-cios caracterizados por las antiguas Formas de industrializacion, utilizan, al mis-mo tiempo, estos modos de consumo para su provecho, Elizabeth Campagnac,por una parte, Bernard Couvert y Michel Pinet por otra, han analizado estosprocesos en Ia region norte de Francia. Si bien en el largo plazo las pract icasde prodHcci6n determinan los modos de consumo, puede existir un desfasetemporal que las empresas utilizaran para su provecho, De esta manera se desa-rrolla una logica de enclave en los espacios de consumo tradicional: s610 un



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relativo aislamiento puede perpetuar particularidades locales a los niveles deconsumo heredados de etapas anteriores. Los mercados Iaborales rurales aisladosofrecen modos de consumo poco costosos, reduciendo el costo de reproducci6nde la fuerza de trabajo )', par otra parte, permiten el acceso a tipos de manade obra caracterizados por un costa de reproduccion espeoialmente debil: lamario de obra rural, femenina joven.

Sin duda, tal estrategia no podria dural' mucho tiempo: con Ia invasi6n delas tecnicas modernas, las formas de consumo, tarde 0 temprano evolucionarany el coste de reproducci6n de Ia mana de obra acabara por ser identico al de la~innovaciones tecnicas y sociales en la produccion, En ese momenta le corres-pondera a la empresa buscar nuevas localizaciones mas "perifericas", que con-serven los modos de consumo tradicionales,

Se define, de esta manera, una estrategia que lleva a las empresas hacia labusqueda de mana de obra que conserve formas de consume poco costosas,De esta rnanera, las grandes empresas pueden utilizar los recurs os antes men-cionados:

Su dominio del espacio les permite mantener siempre una Iuerza de trabajoque se adapte a sus necesidades, su dorninio tecno16gico los lleva preferente-mente a adaptar los procesos tecnicos a las caracteristicas de la fuerza de traba]oescogida, antes que a mejorar directamente la productividad. En efecto, el em-plea de mana de obra periferica lleva consigo dificultades tecnicas: se trata,por definici6n, de una mana de obra no adaptada a tareas cornplejas y que noposee una adecuada formaci6n profesional. Hay que aSignarles tareas poco cali-ficadas que puedan producirse a movimientos muy simples. Una alta mecani-zaci6n permite una simplificaci6n y una normalizaci6n del trabajo, y se puedeadaptar a las caracteristicas de esta fuerza de traba]o. Puede decirse, entonces,que la empresa descalifica la mana de obra para desoalorizar Ia fuerza de tra-bajo. Es decir, es la eonjugaci6n de la gran empresa y del dominic de la tee nolo-gill lo que permite la division espaciai del trabaio, la dimension de la empresapermite la producci6n a distancia, la busqueda de una fuerza de trabajo alejada,el dominic de la tecnologia permite adaptar las tecnicas a las posibilidades deest a fuerza de trabajo.

La tecnologia no es, por ]0 tanto, un elemento en 'if misma: no es suficientesaber concebir una nueva tecnologia para poder sacarle mayor provecho: unapequeiia empresa puede crear una tecnologia avanzada, pero raramente podrautili zarla de una manera que Ia satisfaga plenamente. E] ejemplo de la relojeriaes claro: la crisis de Ia reloi eria suiza, a partir de la decada del 60, y sobre todoen Ia decada del 70, no se debe, especificamente, a aIguntipo de inercia tecnicade las ernpresas relojeras suizas: desde la deoada del 60 son los relojeros suizosquienes han concebido y producido los primeros relojes electr6nicos (el relo]de "diapason"). La enorme ventaja del reIoj electronico es que utiliza componen-tes que han podido ser ]0 suficientemente simplificados como para poder darlessalida en paises con bajos salaries del Sudeste de Asia. Esta tecnolog:ia propor-ciona ventajas tan 5 6 1 0 a Ia empresa que sea capaz de distribuir las diversasfases de producci6n en diversos continentes, de acuerdo a los tipos de tareas enque 5e diversifica esta producci6n. Poseer Ia tecnologia sin esta dimension resui-taria vano, tal como 10 demuestra la experiencia sufrida pO I la relojeria suiza,Lo que ha Ilevado a la declinacion a la relojeria suiza es el hecho que estabaacantonada en un espacio reducido (Le Jura suizo ), caracterizado par una mao



CONTRIBUCION A.L ANALIS]S 19

no de obra muy calificada, pero costosa, y debido a esto incapaz de sacar el me-[or provecho econ6mico de la introducci6n de la electronica,

Continuemos el analisis a partir de este ejemplo: 2,por que la relojerta suizatenia estas estructuras]': Porque se desarrollaba en un medio (semirrural y mon-tafies ) que habia permitido a un modo de organizaci6n (fundado en la base dela pequena empresa, la tecnologia de la mecanica de precision, Ia Formacion pro-gresiva de una fuerza de trabajo 1 1my caIificada pero de un costa elevado de re-produccion y una relativa inercia tecnoI6gica) alcanzar un monopolio de factopara el reloj mecanico, producto de Iujo.

Sin embargo, esta misma estructura plantea dificultades para adaptarse aun cambia tan grande como el que significaba el reloj electronico, Tal vez hoyen dia la relojeria suiza se modernice y pueda hacer rente al desafio de Ia re-lojeria americana a japonesa. Pero ya no sen! mas Ia misrna relojeria: habiendoabandonado los valles del Jura en provecho de la meseta de Neuchatel 0 Bien-ne, 0 las pIanicies situadas alrededor de Zurich; habiendo estrechado lazos enlas relaciones mundiales, experimentando una reestructuraci6n mas iva y aeep-tando un gran cambio tecnol6gico, Ia renovacion del sector, pues, implica in-eluso Ia adcpcion de ciertas arm as de 105 competidores que les han abierto estanueva via,

Tras la declinacuin del antiguo modo de producci6n de la reloieria, se en-cuenira Ladeclinaciotv de Hn medio que representaba, a la vez, un modelo t.~cni-co fuera de vigencia, y un modelo de consumo demasiado costoso,

TRABA JO Y LOCALIZACION

Una vez establecidas las bases de seleccion de una Iocalizacion, dc6mopodrian las em,presas conciliar tecnologla v rnano de obra?

Cabe destacar que las consideraciones reIacionadas con los Factores relativosa Ia mano de obra no intervienen sino una vez establecido un supuesto sobreigualdad de costos de transporte y de provision de infraestructura, A pesar deque ha disminuido considerablemente la importancia de los costos de trans-porte, ello no implica que este sea nulo, especialmente en el casu de localizacio-nes perifericas, POI' otro lado, los procesos de mecanizaci6n Intensiva, que sonparalelos con el desarrollo de producciones con mano de obra no calificada, im-ponen, generalmente, la existencia de una poderosa infraestructura (abasteci-miento de energia electrica, redes de comunicaciones modernas, terrenos indus-triales vastos y bien dispuestos ... ), Es decir, que los antiguos espacios indus-triales aun poseen ventajas a este respecto frente a zonas de bajo costo de re-produccion, que tienen a menudo una infraestructura deficiente, De manera ge-neral, siendo que todas las localidades de zonas centrales pueden recibir irn-plantaciones industriales modernas, el numero de zonas correctamente equipadasse reduce a medida que se desplaza hacia la periferia. Asi , por ejemplo, nume-rosos paises en vias de desarrollo no pueden industrializarse sino en uno 0 doscentres, igualmente, en eI espacio frances se observa que la industria, tan diserni-nada en las regiones cercanas a Pans, se concentra mucho mas en las grandesciudades de las regiones menos centrales, En Ia mayor parte de los departamentosperifericos Ia ciudad principal concentra entre dos tercios y tres cuartos de losempleos descentralizados.



20 REVISTA EURE N~ 19

Esto explica el hecho de que los procesos aqui analizados no se generalizansino Ientament e. La empresa sornetida a los calculos definidos en las paginasprecedentes debera constituir una fuerza de trabajo, 10 que implica varias cosas:reunirla, formarla, reproducirla y perpetuarla. El calculo de la empresa no 5 6 1 0se reduce a la minimizacion de su costo inmediato, sino que sus calculos son,por un lado, I royectados en el mediano plaza (probablemente tambien en ellargo plazo) )', por otro, aumentados de manera tal de considerar las rela-ciones de producci6n en su conjunto.

De manera mas 0 men os artificial, se pueden distinguir Ia estrategia de laempresa para r iovilizar su mana de obra y luego para perpetuarla.

Mooilizar una [uerza de trabaio de bajo costo, puede significar diversosprocesos:- Elegir una fuerza de trahajo de poco coste: debido a que la localizacion ele-gida permite bajos costos de reproduccion, 0 porque los trabajadores llevaranuna parte de su modo de consumo a hogares mas perifericos (como por ejem-.plo las zonas rurales de las cuales ellos son originarios, 0 los paises del TercerMundo) que se han mantenido tradicionales.

- Situarse en forma tal que le permita tan s610 pagar una fracci6n del costatotal de reproducci6n del trabajo, ya sea pennitiendo Ia incorporacion detrabajadores de corta duraci6n de vida profesional (mujeres j6venes que aban-donan la actividad al con traer matrimonio, e inmigrantes que regresan a supais de origen despues de algunos afios ) , 0 que el Estado subsidie una partede ese costo (subvencionando las viviendas, los transportes, los servicios cul-turales y sociales, etc.},El analisis de las politicas de localizaci6n de las gran des empresas en los

ultimos 25 alios, muestra que se han utilizado particularmente varios "estan-ques" de mana de obra: los rurales, las mujeres, los j6venes, los inmigrantes.

Pueden destacarse diversos procedimientos en este caso: La recogida rno-torizada de 1a mano de obra y su concentraci6n en pequelios estab1ecimientosen medio de las zonas rurales.

La recogida motorizada por la empresa es una tecnica tipo, que materia-liza 1a importancia de la mana de obra en Ia estrategia de la empresa. Se podriatratar de clasificar las divers as practicas que ponen en usa una tal recogidade 1a mana de obra,- La empresa sclecciona una localizaci6n en una regi6n situ ada en el centrode un conglomerado de mano de obra rural.

- La empresa localizada en una ciudad desde hace mucho tiempo, pero de-seando emplear una mano de obra rural sin tener que financiar una desloca-lizacion, utilizara esta mano de obra nueva y lejana, gracias al procedimientode la recogida.

- La empresa que se ve obligada a elegir una localizacion urbana alejada delos centros de la mana de obra rural, par motivos tecnieos, compensa este in-conveniente a traves del procedimiento de la recogida.

- La empresa que desea hacer compatible un gran establecimiento y una loca-lizaci6n fuera de una gran aglomeraci6n, debe ampliar su area de reclutamiento.



COI\lR1BUCION AL ",,"'JALISIS 21

A continuacion se presentan algunos ejemplos que permiten analizar cadauna de estas situaciones, EI primer caso puede caracterizarse con el ejemplo delo s establecimientos que Micbelin ha implantado en el Oeste de Francia: dosestablecimientos bastante cercados (Cholet y La Roche Sur-Yor ) emplean 2.700asalariados. De estos, 1.410 residen Iuera de Ia aglomeraci6n; de estos, mas de1.100 son recogidos cotidianamente. Se han organizado doce Eneas de recogidaalrededor de Cholet, que transportan una mano de obra alejada, a veces a unadistancia de 50 kilometres de la industria.

BERLIET, instalada hace bastante tiempo en las afueras de Lyon, empleacerca de 20.000 personas. Para arnpliar sus posibilidades de contratacion, la em-presa ha desarrollado, progresivamente, un sistema de recagida que beneficia hoydia a mas de 9.000 personas en un radio de 75 km. Paralelamente, las empre-sas del sector textil de la region de Roubaix-Tourcoing, empres3s antiguas y amenudo de pequefio tamafio, tratan de reducir sus costos de salario y la com-petencia de las otras empres as en la fuente de empleo local, yendo a bus car unamana de obra situada en la region minera, a mas de 30 km (en el sur, masalla de la aglomeraci6n de Lille ). Durante 24 afios, esta mano de obra residenteen la zona minera en crisis, paso de 9 a 32% del empleo en estas empresas (sobretodo se trata de una mana de obra femenina joven y sin calificaci6n). Aqui, larecogida es un sustituto de Ia deslocalizacion, permite evitar el desplazamientohacia las zonas perifericas y rurales que imponen a las empresas en decadenciala competencia con empresas mas poderosas y cap aces de entregar salarios su-periores,

La empresa siderurgica USINOR ha implantado, des de 1960, un poderoso ymodernisimo complejo en Dunkerque, en el puerto construido para este efecto.Para aminorar los inconvenientes de una localizaci6n urbana en una aglomera-ci6n ya industrial, USINOR no ha dejado de ampliar su area de contrataci6n yde bus car una mano de obra cautiva. En 1975, USINOR recagia cotidianamenteel 70% de sus 12.000 empleados.

RENAULT implant a estableclmientos de gran dimension (a rnenudo de 10.000a 20.000 asalariados ). El problema de emplear una mana de obra de origenrural y de evitar las gran des aglomeraciones, obliga a la empresa a utilizar Fuen-tes de empleo muy extensas. Al mismo tiempo, Ia empresa distribuye sus esta-blecimientos de manera de evitar competencia entre elias, y crea redes de trans-porte en los trayectos dan de no hay servicio publico de movilizaci6n.

Clobalmente, se observa que Ia recogida evita, por una parte, una desloca-lizacion hacia una zona mas rural, 0 bien es un elemento sustantivo de la elec-cion de la nueva localizacion de la empresa. Es utilizada sobre todo por los gran-des establecimientos y los sectores antiguos (tanto para los primeros como paralos segundos la recogida coincide con un bajo nivel de calificaci6n). Concierneantes que nada a mano de obra obrera y relativamente femenina. Ofrece nutne-rosas ventajas a la empresa: al nivel de los salaries (menor costo de reproduc-cion en el campo) y, al mismo tiempo, una gran dependencia de esta mana deobra cautiva, dispersa, poco sindicalizada.

Diversos estudios (Coing, 1976; Cerardina, 1978) demuestran que Ia re-cOgida adquiere, desde hace 20 afios, una gran difusi6n, que se ha ida desarro-Ilando para1elamente al movimiento de concentraci6n industrial y de descentra-lizacion espacial caracteristico de la decada de los 60, y que alcanza hoy, sin du-da, 10 a 2 0 % de Ia mano de obra industrial total. Su elevado costa (5 a 10%delsal aria ) muestra cabalmente ]a importancia que Ie asignan las empresas.



22 REVIST A EDRE X? 19

De manera mas general, se ha comprohado que la proporcion de trabajado-res que residen en las zonas rurales aumenta en la medida que se trate de es-tablecimientos de gran tamaiio, de reciente implementaci6n y pertenecientes aempresas importantes: en la Rochelle, un alto porcentaje de los trabajadores deChrysler residen fuera de la aglomeraci6n; en Dunkerque, la cifra es de 48% delos 1.200 trabajadores de USINOI:I; en Cholet y la Roche sur Yon, , ) . ' 3% de los2.700 empleados de Michelin; en Venissieux mas del 5 0 % de los 20.000 trabaja-dares de BEJ.U,IET, etc.

Indudablemente esto no es casual, mas aun, en muchos casas, las grandesempresas tienen una politics deliberada de alejamiento de los Iugares don dereside el personal. Ademas, de los cases va mencionados, citarernos el caso de lasidenirgica de IJMUIDE:-.r en Rolanda (24.000 personas), In mas poderosa deEuropa. Contrariarnente a 10 que se daba hace algunos alios, una gran partedel personal ha sido dispersado y reside actualmente a decenas de kilometresde la Fabrica. Resulta evidente que esta dispersion se vera acompariada par unabaja de los salarios, cabe destacar, ademas, el hecho de que se trate de evitarsisternaticamente las grandes concentraciones urbanas, sin6nimo de poder sindi-cal, costos de congesti6n, etc .. , elementos que podrian generar una tendenciade incremento en los costos,

La generacum de un eniambre de unidades en zonas semi rurales puedeconstituirse en un sustituto de la recogida, En vez de desarrollar un estabIeci-miento principal, 1 0 que implica ampliar cl espacio de contrataci6n 0 aceptaruna competencia costosa en ese lugar, la empresa puede, si esa politica es teo-ricamente rentable, crear establecimientos medianos 0 pequerios, en zonasrurales donde existe disponibilidad de mana de obra. EI caso de Ia sociedadDavave, en la region de Limoges, es particularmenta esclarecedor.

La empresa, que a comienzos de Ia decada de los 60 contaba can un granestablecimiento en Limoges, tuvo que enfrentar perspectivas de crecimientoimportantes. Agrandar este establecimiento hubiera significado tener que crearun sistema de recogida en la zona sitnada entre los 15 y los 60 km de Limo-ges. Pero, dpor que no instalar estos nuevas establecirnientos disperses en esa zo-na? La empresa dispondria asi de los misrnos trabajadores, rero empleados ahimismo y desplazandose par S 1 mismos, de esta forma, se evitaria el costo de sutransports.

AI mismo tiempo, las nueve localizaciones escogidas en los doce afios SI-guientes llegarfan a cubrir la totalidad de Ia zona, de tal manera que los "estan-ques" principales de reclutamiento de mano de ohra de cada una no entraranen competencia entre 5 1 (radio de ,) km alrededor del establecimiento), queninzun puntode 1a zona estuviera a menos de 15 km de un estahlecimientode Ia sociedad y gue la reserva de empleo de Limoges (15 km alrededor de laciudad) fuese liberada para no competir con el establecimiento principal.

PERPETUACION DE LA FlJEllZA DE TRABAJO

Se analizaran los diversos rnetodos utilizados por las empresa~ para con-servar SlI mano de obra v eximirse, aungue sea parcialmentc, de Ia competenciaen el mercado lab oral. '

En primer lugar, cabe destacar la perduracion de antiguas form as en lasrelaciones sociales que no participan en el Iuncionamiento corriente del mercado



r;OKTRIBUCIOl': AL k'JALlSIS 23

de trabajo: se observa una increible perduraci6n del trabaio a domicilio en laszonas rurales, que concierne sobre todo al trabajo femenino de avanzada edad yse presenta como una modalidad alternativa a la del empleo de mujeres j6ve-nes, 0 de otro tipo de trabajadores. La dispersion, inherente a este tipo de rela-ciones de trabajo; la existencia de relaciones particulates entre patron y asala-riado, dan al patr6n una autoridad muy particular. Pero, sin duda, aunque ex-traiiamente aun sobreviva el trabajo a domicilio, hoy en dia esta en franco re-troceso.

Se debe hacer igualmente una distinci6n sobre el tipo de mano de obra y,par ende, sobre las posibilidades de estandarizacion del trabajo, a veces la pro-ductividad del trabajador es el fruto de su extensa practica en el seno de la em-presa, y su partida podria privar a la empresa de una productividad dificilmenterenovable por un trabajador nuevo: es 1 0 que se produce cuando la mecaniza-cion es baja y cuando la tecnica empleada depende en gran parte de las cualida-des propias del trabajador, Es entonces cuando la problematica de minimizaci6ndel costa de reprodueci6n cede su lugar a una politica de tipo pater nolista, yaque la empresa no desea desprenderse del trabajador; la ganancia de la empresase realiza a traves de Ia productividad del trabajador v por su antigi..iedad en laempresa m a s que por la reducci6n de su salario. El factor variable no es e1salariosino la productividad. Se puede apreciar, as), como la empresa trata de con-quistarse al trabajador mediante ventajas especificas ligadas a su antigiiedad(vivienda, ventajas sociales, prim as de antiguedad ) a fin de integral' cad a vezmas al trabajador a la ernpresa. Sin embargo, la tecnolog:ia cambia y permitela estandarizacion de las tareas en forma tal que, en pacas semanas, el trabaja-dol' adquirira una productividad "normal" y la estrategia de minimizar el costode reproducci6n recobra su importancia.

Se puede decir, en terminos generales, entonces, que la empresa busca unmonopolio total 0 parcial sobre su fuente de mano de ohm: se ha visto que 1a"recogida" constituye una de las politicas habituales de Ia empresa para con-seguir este prop6sito. Cuando no parece posibIe un monopolio espacial, las ern-presas utilizaran otros mecanismos: el mecanismo salarial, pOl' ejemplo. Laempresa localizada en un mercado 1aboral en el que entra en cornpetencia conotras, tendra que decidir entre un salario mas bajo (Io que implica el riesgode perder a sus trabajadores en beneficio de otras empresas ) y un salario maselevado (donde e1 aumento en eI costo se ve acompafiado par un dominic delmercado del trabajo ). Abundan los ejernplos que muestran los diferentes cami-nos alternatives escogidos par las empresas en tales circunstancias,

Cabe agregar que la empresa puede tam bien escoger entre diversos tiposde mana de obra en el seno del mismo mercado de trabajo: de acuerdo can laintensidad de la competencia por el mercado laboral, la empresa puede apelar atipos de trabajadores diferentes: al ser desplazada de un mercado, la empresase moved. a otro. E] ejernplo de 1a Radiotecnica en Dreux es muy claro: estaempresa empleaba una fuerte proporcion de mujeres j6venes en 1970. La loca-lizaci6n de una pIanta Renault priv6 brutabnente a la Hadiotecnica de una im-portante parte de su personal, el que fue atraido par los altos salarios ofrecidospor esta empresa nacional, Centenares de obreras inmigrantes ocuparon eI Iugarde las antiguas obreras, Desde la crisis de 1974-75 , el empleo de las trabajado-ras inmigrantes ha disminuido: estas Fueron reemplazadas por hombres oesantesde la regi6n.



24 REVISTA EURE )l? 19

LOCALIZACIOh"'ES Y NUEVAS FOR:YIAS DE DESARROLLO URBANO

La relaci6n industrializacion-urbanizacion queda inserts as! en el marcode una doble relacion, empresa-mano de obra y mano de obra-ciudad. EI me-canismo que vinculara las formas recientemente asumidas por la industrializacional imp acto en la urbanizaci6n se refiere a las modalidades de reproducci6n de lafuerza de trabajo.

Lo quese encuentra tras las nuevas Iormas de Iocalizacion de las empresases una modalidad novedosa de la reproduccion de la fuerza de trabajo industrial.Ademas, la ciudad aparece, ante la empresa, como la forma "normal" de estareproduccion, La ciudad, en consecuencia, sufrira nuevas presiones provenientesde 1a empresa: como ya se ha vista, Ja cmpresa, a partir de este momento, puededejar de considerar, en cierta medida, Ja ciudad, 0 bien imponer1e nuevas fun-ciones,

Si bien, en el pasado las ciudades podrian tener funciones distintas a las re-queridas par las formas de Ja industrializaci6n de la epoca, actualmente, la redurbana, a pesar de penuanecer intacta en sus Formas mas visibles (orden de lasprincipales ciudades clasificadas segun su poblaci6n), obedece a nuevas reglas.La jerarquizaci6n de las ciudades corresponde a un ordenamiento distinto

de las funciones que ella cumple. Ya no es mas una jerarquia de las funcionescomerciales (a la Christaller), sino una [erarquia ligada a la [uncion principal dela ciudad: liderazgo, producci6n, transmisi6n-coordinaci6n, incluso a Ia investi-gaci6n.

Las nuevas form as de industrializacion permiten el surgimiento de nuevostipos urbanos, tales como los complejos industriales-portuarios, que tuvieron mu-cho auge en los alios 60, en tomo a la industria pesada (Dunkerque, Rotterdam,Ijmuiden, Marsella-Fos, Tarente, Brindisi, Sirecuse, etc.). Estas ciudades hanvista condicionado su desarrollo a las form as de industriaJizaci6n de las quedependen.

EI erecimiento de ciudades depende, pues, de dos elementos: el porvenirde la funcion que se le atribuye y su aptitud para cumplir esta funcion en bene-ficia de las empresas.

En efecto, el desarrollo urbano implica en S 1 misrno un encarecimiento delcosto de producci6n de la fuerza de trabajo, ]0 cual inc ide en un incremento enel costo salarial. De esta man era, las empresas preocupadas de minimizar elcosto salarial, podrian abandonar 1a ciudad cuando le resulte demasiado cos-toso. Algunos ejemplos recientes de desarrollo urbano en Francia, permiten evi-denciar que la ciudad se mantiene ajcna al desarrollo industrial: las estrategiasde empleo de las empresas rnodifican la funci6n de la ciudad la que se trans-forma en WI simple soporte material de la empresa, en una suerte de lugar dereunion de la fuerza de trabajo,

La ciudad de Nevers sigue siendo terciaria (los dos tercios de] empleo co-rresponden a actividades terciarias, mientras que el tercio restante esta ernplea-do, sobre todo, en pequenas empresas industriales locales implantadas hace mu-cho tiempo). EI crecimiento de Nevers es moderado y sigue basado en las acti-vidades tradicionales de la ciudad, En los alrededores (en un radio de 10 a 15Ian) se han localizado grandes establecimientos en los ultimos veinte arios,



CONTRfB\;CIO:\f AL ANALISIS 25

can el fin de utilizar la mana de obra industrial liberada p O T la declinacion de laindustria de fundicion y de las empresas metalurgicas instaIadas en el sigIo XIXen los valles vecinos, alrededor de los yacimientos de fierro actualmente agota-dos. En Ia dec ada del 70, estos nuevas establecimientos utilizan preferentementemana de obra no calificada, mientras que los j6venes educados en Xevers no en-cuentran trabajo aIH y deben abandonar 1a region. Existe, por 10 tanto, una dua-lidad entre la ciudad, externa a la gran industria, y sus alrededores, los que sonutilizados como "estanques" de mano de obra por las empresas.

Sancoins es una pequena aldea de Nivernais, mcrcado agricola con activi-dades esenciaImente comerciales. No obstante, varias industrias se han insta-lado alli (una de las cuales, Hicouard, cmplea a 500 personas). A pesar de queestas empresas emplean una mana de obra rural contratada en un radio de 20km , no utilizan ninglm servicio local y no tienen contactos interindustriales enel mismo Iugar. La ciudad, a pesar de que ha recibido algunas industrias, man-tiene totalmente su caracter comercial y lOS absolutamente ajena a su industria.Sus recursos provienen de la renta de [a tierra, de feria.'> y de [a crianza deganado. Para las empresas industriales, Sancoins no es mas que el lugar de con-trataci6n de una mano de obra externa. Con el mismo espiritu, Sully sur Loire,pequerio pueblo de 5.000 habitantes, acoge dos empresas automotrices (S]MCAy SE&"lA), las que emplean en total mas de 2.000 asalariados. : \ T : 1 < ; aun, laCompafiia Francesa de Electro-Ouimica emplea 600 ,personas en Outarville,pueblito de 1.000 habitantes.

La Roche sur Yon, pequefio pueblo cornerciante de Vendee, regi6n tradi-cionalmente agricola, se ha beneficiado con varias Iocalizaciones industrialesimportantes, Dos empresas, Esswein v Michelin, emplean 2.7{)0 personas. Lasrazones para estas localizaciones son ~encillas: la agricultura de Vendee ha J i-brado la mitad de sus efectivos entre 195 v 1977 (de 61 .700 a .33.000 activos ),ofreciendo una mana de obra disponible bastante considerable. Tambien la ima-gen del pueblo no ha sido modificada pOl' esta industrializacion. actualmentesolo un 28% de los actives de la Roche sur Yon son empleados en la industria,mientras que 2.000 de los 2.700 trabajadores de Michelin y Esswein residen enzonas rurales (de los euales, gran parte son llevados cotidianamente pOl' losbuses de la empresa). Es decir, incluso aqui la industria esta desvinculada de1a ciudad, mientras que Michelin se ha beneficiado con numerosas ventajas otor-gadas por Ia municipalidad de la Roche sur Yon.

Al igual que muchas otras ciudades, Evreux aparece, en gran medida, co-mo un centro de reclutamiento de mana de obra. Cada dia, mas del 1 5 % de losactives que trabajan en Evreux vienen del exterior de la aglomeraci6n, mientrasque un 6% de los residentes de Ia ciudad trahajan lejos y son Ilevados por losbuses de las industrias Renault (automoviles ) a yendo a Ia region parisina, yaque los empleos que se ofrecen en Evreux no siernpre coinciden con la forma-ci6n recibida por los trabajadores de Evreux, Esto mismo sucede en Dreux, querecibe diariamente 1.200 trabajadores que vienen de pequefios pueblos y aldeasvecinas, mientras que 2.200 entre ellos abandonan la ciudad para trabajar enotras partes, a menudo en Paris. De un modo mas general, se observa que nurne-rosas ciudades de descentralizacion son saldos de migraciones altemas muypositivas, sabre todo para las categorfas de empleos menos calificados, ya queson, mas que nada, los obreros sin calificaci6n que, residiendo en las zonas ru-rales de los alrededores, vienen a trabajar cotidianamente a las empresas des-



26 REVISTA EJ..;RE ;\~ lfl

centralizadas implantadas en la ciudad. El siguiente cuadro indica, para cuatrociudades, el nivel del saldo migratorio alternante respecto al empleo total(para 1968).

Giudad Poblacion Obrerosaciica tIJtol nIJ caUficodlJ~ Otras caiegotias

% % %Laval 13,2 22,5 10,6St. Dizier 12,7 22,2 10,1Cholet 9,1 14,6 7,8Chateauroux 8,6 13,6 7,7

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CONCLUSIONES

Pueden extraerse divers as conclusiones de este analisis,Antes que nada, se puede destacar una hipotesis interesante en relaci6n a

la evoluci6n de la cobertura real de las necesidades en una sociedad en procesode urbanizacion, Irving Hoch puede, mediante un andaz giro, proponer unairnportante conclusi6n: rnidiendo por separado los datos relativos al norte y alsur de los Estados Unidos, ha observado que para una determinada categoriade trabajadores, las diferencias de salarios, seg{m la dimension de la ciudad, al-canzaban un 23,6%, mientras que las diferencias en el costo de la vida reprc-sentaban un 12 ,1% en esta diferencia. Se manti ene, pues, una diferencia aparentedel nivel de vida de 10 , 3% . Sin embargo, Hoch supone que esta diferencia esficticia y expresa tan s6lo costos complementarios engendrados por la granciudad, admitiendo, entonces, la hipotesis que dice relacion COil las diferenciasde salarios, de acuerdo al tamafio de las ciudades para los miernbros de unamisma categoria de asalariados, las que representan unicamente diferencias en elcos to de reproduccion del trabajo. Esta hip6tesis de trabajo le permite com-parar Ia evoluci6n de los salarios medios (por categoria de asalariados ) respectoa aquellos de los niveles de urbanizacion. De esta manera, si en el transcursode un periodo el nivel de vida aparente (considerando el costa de la vida) haaumentado en promedio de 5%para una categoria de asalariados, pero si duranteeste lapso, estos asalariados han pasado, en general, de una categoria de ciuda-des a otra mas poblada, 10 que implica costos mayores que un 5% (esto es,medido par las diferencias instantaneas de salaries reales entre los dos tiposde ciudades para esta categora de asalariados ), Hoch deduce de esto que elresultado es nulo y que el nivel de vida real ha permanecido constante, ya queel aumento de la productividad ha servido tan s610 para financiar los mayorescostos de vida de la gran ciudad.

De esta manera, muv razonablernente, Hoch muestra que, en 19 alios, elaumento de los costos e~gendrados pOl' el aumento del tamano medio de lasciudades de residencia de los asalariados, ha sobrepasado, en EE. UU., en 1111L8% al aumento de los salaries.

Esto significa que (considerando, por otra parte, el impacto del alza delos precios ) el aumento aparente del poder de compra de los asalariados ni



CO;'l;'TRIBCCIO", AL AXALISIS 27

siquiera ha compensado ei aumento de los costos de reproduccion de la [uerzade trabajo, derivadas de una tendencia haeia forrnas acentuadas de urbani-zaci6n. Asi, el incremento de la producticidad en EE. UV. ha pasado par com-pleto a financiar los costos de la urbanizacion. Esta conclusion solo tiene con-sistencia si se le da a la relacion sal aria y coste de reproducci6n de la Fuerzade trabajo una proveccion absoluta, 10 cual e.s dificilmente demostrable en ter-minos empiricos. No por esto deja de ser interesante.

Es evidentc que la dosis de "satislaccion" de los trabajadores aumenta menosrapidamente de 10 que sugieren las estadisticas, e incluso es posible que existauna baja del nivel de vida real. El crecimiento econ6mico no es, entonces, masque una carrera entre los progresos de productividad y el aumento de los cos-tos generados por Ias formas contemporaneas de organizaci6n del trabajo y dela vida Fuera del trabajo.

Julius Margolis, ell una critica al trabajo de Kuznets, "Income and Wealthin the U.S.", "sin lameutarse sobre el paraiso rural perdido, es cierto que 10esencial de la produccion urbana (vivienda, servicios publicos, transportes, es-parcimiento ) es el precio que se debe pagar para estabilizar nuestras econo-mias desarrolladas y agrega mucho menos a la satisfaccion del consumidor de10 que sugieren los indices de produccion",

Otra conclusi6n dice relaci6n con la fragilidad del crecimiento urbane: to-dos los calculos muestran que el efecto diferencial es superior en la mavoriade los oasos, al efecto estructural ": es decir, que eI destine de los conjuntosurbanos esta dependiendo de las mutaciOMS que Ie imponen las empresas. Seha visto que to do crecimiento urbano acarrea un declinamiento futuro ell lamedida en que este trae aparejado un encarecirniento que, tarde 0 temprano,excluira las actividades mas sensibles al costo salariaI. De esta manera, el ere-cimiento de Ia ciudad s610 se perpetuara si, en cada etapa, nuevas actividadesacupen el lugar de las actividades suprimidas par el incremento de los costas.Las unidades urbanas son, pues, dependientes, y estan sujetas a frecuentesreconversiones,

Contrariamente a la situaci6n anterior, el destino de los espacios no seconfunde con el de las empresa



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un efecto tnoderador sobre la evoluci6n espacial, Son elIas las que han evitadocambios drarnaticos: considerando s610 las grandes empresas, hubierarnos asis-tido a una crisis de la region parisina y a un crecimiento acelerado de la pro-vincia, 1 0 cual implicaria intensas migraciones y reconversiones incesantes.

-------- ----TOMS las ernpresas1961-1972

%

Cratules empresas1965-1975

%

Ciudad de ParisResto region purisinaTotal regi6n parisinaTotal provinciaTotal Francia

+ 3,8+16,8+ 9,4+17,2+16,6

-16,5+ 7,5- 0,4+22,3+15,4

Fuente: Los datos relnt ivos n las gr.mdes ernpresns han side extrufdos de una encuestn llcvada a cabo en1976 (Aydalot, 1978). EI datu sob re "todas I,IS empresas" ha sido extraido de declarac.ones de los em-pleadores (2.460); estas cifrns son un poco nbultud.rs dcbido a] mejorurniento nrogresivo en la calidad deestas declamcioues.

Cabe, asimismo, destacar que la dinarnica impuesta por las grandes empresasimplica una ampliaci6n constante del espado afectado por sus calculos: nosolamente crece la movilidad de Jas actividades en el espacio, sino que, ademas,evoluciona en un espacio que se amplia permanentemente, dado que, si noconsideran este aspecto v no traspasan las fronteras, no podran ya afrontar[a tendencia al aumento del costa de reprodncci6n de su fuerza de trabajo, y ladinamica del sistema se vent bloqueada (A~dalot 1976, p. 297).

La teoria de la division espacial del trabajo perrnite, finalmente, avanzaren el analisis de la desigualdad: la desigualdad social y la desigualdad espacialestan entrelazadas y se apoyan mutuamente. Cabe destacar. a este respecto,dos puntos de vista;

a) En la desigualdad del cos to de reproduccion de la Fuerza de trabajoen el centro y en [a periferia se perfila la imagen de la desigualdacl en terminosde intercambio. En el intercambio entre espacios, independienterriente de lasrelaciones sociales entre trabajadores de diferentes status, los espacios con uncosta de reproduccion poco importante vendran a los espacios centrales delos productos en los qne se intercambiara un modo de consumo frustrado, mien-tras que los espacios centrales impondran, a traves de SU5 ventas, una genera-lizacion de los tipos de consumo oostosos y sofisticados. Implicito en los inter-cambios entre centro y periferia se cncuentra, pues, mecanicarnente un intercam-bio desigual: la periferia participa en el financiamiento de los elevados costosde reproducci6n del centro, mientras que ella no participa de estos costososmodos de consume, el centro en sus compras se beneficia del hajo costo dereproducci6n de la periferia.

b) La observaci6n de la estructura salarial en el centro y en la periferiarnuestra que las estructuras de los salarios (segtlTI las categorias de los asal a-riados) es dependiente de la estructura socio-profesional de Ia zona analizada.He lIevado a cabo un analisis de las diferencias salariales en el espacio frances(periodo 1962-1968). Tcdos los calculos demuestran que existe una correla-ci6n positiva entre Ja cornposicion socio-profesional de un departamento, y el



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nivel de los salaries de cada categoria al interior de ese departamento: porejemplo, el salario obrero en un departamento es proporcional al de la cantidadde obreros, EI salario es menor a mayor nurnero de obreros, mientras que esmas elevado si Ia estructura en su conjunto del departamento es socialmenteelevada, Esto significa que la estructura socio-profesional de un espacio "irnplica"los salaries de los asalariados de este espacio, definiendo un modelo tipo deconsume, el cual tendra como referenda a todos los trabajadores, De este modo,los obreros de los espacios mas ricos percibiran una especie de "sobresalario",en relaciou a los obreros de las otras regiones.

Todo sucede como si el trabajador rninoritario tuviera en el espacio dondehabitualmente reside, costos especificos que se traducen pOl' un salario relati-vamente e1evado. La desigualdad social, aqui Y alla, es Funcion de la estructurasocio-profesional del conjunto. Ella define rnecanicamente una desigualdad maselevada en los espacios pobres (donde las categorias elevadas son relativamentemejor tratadas que en los espacios ricos donde son las categodas de bajos in-gresos las que cobran una prima). Esta desigualdad diferenciada no es mas quela traduccion de las rnodalidades de reproduccion de la Iuerza de trabajo enlos diferentes sectores,

Estas precisiones invitan a revisar los conceptos basicos del analisis espacial:espacio-centro-periferia,

Considerando las Formas del calculo de las empresas, se llega a una nuevadefinicion de localizaci6n: 10 que las cmpresas tom an en consideraci6n al elegirsu ubicacion no son "regiones", tampoco ciudades propiamente tales, sino quereductos de empleo analizados como lugares de reproducci6n de la fuerza detrabajo, Es la unulad. del modele social de cons-wno 1 0 que define el espacio,Proponiamos al comienzo la idea segun la cual el espacio es una relaci6n social:vernos aqui que el espacio expresa, a traves de los modelos de consumo (y loscostas asociadas), la: fonnas actuales del modo de produccion localizada.

Tras las multiples materializaciones del centro y de la periferia y las rela-eiones que la estructuran, se encuentra un contenido nuevo. La periferia no selimita a la producci6n de bienes primarios, no es solarnente el lugar de lasrelaciones desiguales y la expresi6n del imperialism 0, sino que, ames que nada,una forma de reproduccion. Tras las relaciones desiguales que las estructuran,el centro y la periferia se definen par modos diferentes de consumo, expresivasde una historia social y tecnica contrastadas, Y es porque en el pasado se hangenerado form as de consume diferentes, que el centro atraera a las actividadesque necesitan de un entorno costoso y sofisticado, sed. el Iugar donde se origi-naran las decisiones, la distribuci6n de los Financiamientos y Ia elecci6n de latecnica, y sera abandon ado por las actividades que pueden ser conducidascorrectarnente por trabajadores, insertas en un medio menos mercantil, massimple y menos costoso. La perileria, cuyo contenido esta definido por la historiaacogera estas actividades y minimizara el costa.

De esta manera definido, e1 conflicto centro-peri feria acarrea rnecanismosque amplian las relaciones desiguales que este expresa. El intercarnbio desiguales intercambio de modos de consumo, rnientras que eI privilegio esencial delcentro es poder transferir -en p31te- los elevados costos que debe soportar.Los costas generados porIa gran ciudad se benefician de un mecanismo com-pensatorio que reparte el gasto de su financiamiento en el conjunto del espacio.



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