consideraciones sobre la inmigración de brasilenos a españa

UNIVERSITAT DE VALNCIA

INSTITUT UNIVERSITARI DESTUDIS DE LA DONA

MSTER EN GNERO Y POLTICAS DE IGUALDAD

GNERO, MIGRACIONES E INTERCULTURALIDAD

Consideraciones sobre la Inmigracin de Brasileos a Espaa

PROFESORES: CONCEPCIN DOMINGO JOAN LACOMBA

ALUMNAS: EDDLA KARINA GOMES PEREIRA

JULIA ARAJO MENDES ROMIE EHLERT CHRISTEN

VALENCIA 2009

____________________Consideraciones sobre la Inmigracin de Brasileos a Espaa

ndice

Introduccin .................................................................................................................. 03

1 Datos de Brasil y Espaa .......................................................................................... 05

1.1 ndice de Desarrollo de Gnero ............................................................................ 05

1.2 Esperanza de Vida de la Mujer ............................................................................. 06

1.3 Tasa de la Alfabetizacin de la Mujer .................................................................. 08

1.4 Porcentaje de Mujeres Activas ............................................................................. 09

1.5 Desigualdad Salarial entre Hombres y Mujeres ................................................... 10

1.6 ndice Sinttico de Fecundidad............................................................................. 12

1.7 Estructura de Edad ................................................................................................ 13

2 Datos de La Inmigracin Brasilea en Espaa ....................................................... 15

2.1 Inmigracin brasilea en Espaa y feminizacin del flujo migratorio ................. 15

2.2 Inmigracin y mercado laboral en Espaa ........................................................... 18

2.3 Inmigracin e ndices de natalidad y fecundidad en Espaa ................................ 20

2.4 ndice de Desarrollo Humano (IDH) .................................................................... 22

Consideraciones Finales ............................................................................................... 23

Bibliografa .................................................................................................................... 24


Introduccin

En 1900, nueve de cada diez inmigrantes del mundo estaban concentrados en

apenas cinco pases: Estados Unidos, Canad, Australia, Argentina y Brasil. En Brasil,

09 de cada 10 inmigrantes eran europeos1. Solo entre 1750 y 1950, Europa ha perdido

70 millones de europeos que emigraran, sobre todo para las ex-colonias europeas.

En 1970, eran 82 millones de personas inmigrantes por el mundo. Treinta aos

despus, en el ao 2000, ese nmero ya haba casi duplicado para 150 millones. En

2007, se estima que llegamos a la cuantidad de 200 millones de personas migrantes,

equivalente a un 3% de la poblacin mundial. El Coordinador de CESPI, de Roma,

Ferruccio Pastore, denomina un continente mvil.

En el pasaje del siglo XX para el XXI, Brasil pas de pas receptor histrico de

inmigrantes para pas de emigracin2.

Se ha dado entonces el carcter constitutivo de la sociedad brasilea en el mito

de las tres razas: millones de indgenas exterminados, millones de africanos

secuestrados y millones de inmigrantes europeos recibidos de brazos abiertos por la

tpica hospitalidad brasilea3. Oriundos de pases europeos colonialistas, pos-

colonialistas y neo-colonialistas. Fugitivos de las sucesivas guerras europeas.

Evidentemente, sin necesidad de registro o visado de entrada.

Hoy, hay mucha controversia en la cuantificacin de los millones de brasileas

y brasileos viviendo en el exterior, por los ms diversos motivos y que representan la

diversidad sociocultural de Brasil. Un pas de dimensiones continentales,

experimentando un perodo indito donde apenas empiezan las principales reformas

estructurales que la sociedad brasilea histricamente reivindica.

El Encuentro de Bruselas, realizado en noviembre de 2007, en Blgica,

reafirm - por parte de las 40 organizaciones que trabajan el tema de la migracin y de

las comunidades brasileas representadas en todos los pases de Europa - la necesidad

1 Segn CESPI, de Roma, citado en La Vanguardia del da 13/12/2006. 2 Desde 1980, registros de los aeropuertos sugieren que Brasil est perdiendo ms personas que recibiendo. El movimiento ha llegado a tener una pausa entre 2001 y 2004, pero, a partir de 2005, el xodo ha retomado su fuerza. En 2005 han salido 24 mil personas de Brasil ms do que las que entraron por la va area. En 2006 ese total ha aumentado para ms que el doble, pasando para 58 mil (Victor Klagsbrunn, coordinador del curso de posgrado en Relaciones Internacionales de la Universidade Federal Fluminense. In BBC Brasil, 24/03/2008). 3 Como dira el escritor Stephen Zweig, en Brasil, pas do futuro. Tambin afirmaba Darcy Ribeiro (O povo brasileo), el emprendimiento colonizador ha sido uno de los objetivos ms persistentemente perseguidos por el gobierno imperial, que en l ha invertido enormes recursos, asegurando a los colonos el pagamento de transporte, facilidades de instalacin y de mantenimiento y concesiones de tierras.


de construir polticas pblicas especficas para este sector de la poblacin

(numricamente superior la poblacin de algunos de los mayores Estados de la

Repblica Federativa de Brasil).

En el Encuentro de Bruselas se ha creado la Red de Brasileas y Brasileos en

Exterior. Una de las primeras iniciativas de la Red, articulndose con apoyo de los

organismos pblicos y de las organizaciones no gubernamentales debera ser la

promocin del conocimiento sobre quienes son esas ciudadanas y ciudadanos brasileos

en exterior, para que se pueda mejorar, cualificar la representacin de esas personas y

hablar con mayor propiedad sobre sus respectivas expectativas de migracin4.

Como los controles de registros de salida y entrada an son una asignatura

pendiente en la poltica brasilea de migracin, un perfil de la comunidad brasilea en

exterior, podra significar una contribucin para el mejor conocimiento de los flujos

migratorios brasileos Europa5, empezando por un pas de notable crecimiento en

presencia de la migracin brasilea, Espaa6.

Un Perfil Bsico de la Comunidad Brasilea en Espaa apenas ayudar a

desvendar el complejo proceso de actualizacin permanente de la informacin sobre

esas personas. Pero se considera de grande importancia en las lagunas que tienen que

ser rellenadas en la historia de las relaciones internacionales de ambos pases. Estudios

anteriores evidencian la transitoriedad de los fenmenos cuantitativos en situaciones de

intenso flujo migratorio, como el realizado apenas en determinadas comunidades

autnomas de Espaa, como Madrid, en el ao 2007 con muchos cambios en el

4 Los brasileos en exterior no son nada ms do que la representacin de la diversidad sociocultural y de la desigualdad econmica del pas, tambin fuera de l; con todas las oportunidades y desafos que eso puede significar para Brasil y para el mundo. 5 Ms datos: un 62,2% de la inmigracin brasilea en Espaa son mujeres, lo que torna Brasil el primer pas en proporciones de mujeres inmigradas a Espaa; 3 pas en total de migracin en territorios como las Islas Baleares y Galicia; 13 en remesas de los inmigrantes de Espaa para Brasil en 2006, segn informe de la ONU, equivalente a 0,16% del PIB brasileo, o sea, ms de lo que el comercio de la industria del acero y de la madera entre eses dos pases. Solo en el ao 2004, los brasileos en Espaa enviaran ms de 100 millones de euros (4,45% del total enviado por los inmigrantes, 7 lugar en envo, segn el Banco de Espaa, La Vanguardia, 16/03/07). En el ao 2006, las remesas ingresaran 7,3 mil millones de dlares en Brasil, segn el BID, citado en el 1 Encuentro de Brasileos en Exterior. 72% de la prostitucin masculina en Espaa es realizada por brasileos y, de estos, 25% tienen SIDA, segn el Ministerio de la Salud de Espaa. En 2006, Brasil ha recibido 211.741 turistas espaoles, el octavo puesto de turistas del pas. De estos, 96,2% manifestaran su intencin de volver (segn el peridico 20 minutos de 17/03/2008). 78.133 espaoles residen en Brasil, segn La Vanguardia de 24/5/2007. 6 En Espaa, el nmero de brasileos ha aumentado ms que el doble en los ltimos tres anos. Segn estimativas de la ONG SOS Racismo, haba cerca de 30 mil brasileos en 2005. En 2007, serian 80 mil, un aumento de 166% (dem - BBC Brasil, 24/03/2008). Las ms recientes expectativas indican que factores como la crisis en la economa norte-americana y el aumento del control contra atentados terroristas, la progresiva baja del dlar y el aumento del poder adquisitivo de la clase trabajadora brasilea seran preponderantes para el cambio de rumo de los flujos migratorios de los Estados Unidos para pases como Espaa.


expresivo aumento cuantitativo de brasileos en toda Espaa, de un ao para otro. Una

cuestin a ser considerada por cualquier anlisis comparativo: la ciencia felizmente

continua sometida a la dialctica de los procesos sociales.

Para esto, una propuesta de perfil tendra el imperativo de articularse en un

marco global de colaboracin con el proceso de constitucin del Observatorio

Permanente de las Migraciones Brasileas en Espaa. Tendra an que dialogar con

estudios cualitativos ms profundos como la propuesta de investigacin presentada por

el Grupo de Estudios de Inmigracin y Minoras tnicas de la Universidad Autnoma

de Barcelona (GEDIME / UAB) a la Fundacin Cultural Hispano Brasilea. Por estos

motivos, la opcin ms viable, del punto de vista estructural y respetando parmetros

metodolgicos de las ciencias sociales, sera realizar un perfil bsico, sin mayor

profundizacin en cuestiones an ms complejas que el propio fenmeno en estudio: las

migraciones de brasileos para Espaa.

En este trabajo, hablaremos un poco sobre la migracin de brasileos a Espaa,

sus caractersticas, as como haremos una comparacin entre datos de los dos pases.

Los datos fueran obtenidos desde informes del Instituto Brasileiro de Geografia e

Estatstica IBGE, Instituto Nacional de Estadsitca INE (Espaa), Programa de las

Naciones Unidas para el Desarrollo PNUD.

1 Datos de Brasil y Espaa

1.1 ndice de Desarrollo de Gnero

El ndice de Desarrollo Ajustado al Gnero (IDG) es un indicador que

considera los mismos criterios del ndice de Desarrollo Humano IDH, pero penaliza

las desigualdades entre hombres y mujeres. El IDH evala educacin, longevidad y

renta, no considerando el gnero, en cuanto que el IDG hace lo mismo pero ajustando el

IDH para reflejar las desigualdades entre hombres y mujeres7.

En el ao 2005, el ndice de Desarrollo de Gnero de Espaa era de 0,944, que

corresponde al 13 del ranking mundial, quedando entre Estados Unidos y Dinamarca.

7 UFRJ Ncleo de estudos de Polticas Pblicas em Direitos Humanos. Disponible en: . Acceso en 26 febrero 2009.


Ya Brasil en este mismo ao, era el 70 del ranking quedando entre Macedonia y

Dominica, con ndice de 0,7988.

El ndice de Desarrollo ajustado al Gnero es un indicador que evala las

diferencias en el desarrollo entre hombres y mujeres. Brasil, en el ao 2000, ocupaba la

posicin 64 en el orden internacional, con un valor de 0,751. Ha perdido posiciones

pero el ndice es ms elevado, lo que indica una disminucin en la desigualdad entre

hombres y mujeres desde el ao 2000 hasta el 20059.

Haciendo una comparacin entre el IDH (0,807 y 0,949) e IDG (0,798 y 0,944)

de Brasil y Espaa, respectivamente, en 2005 verificamos que la diferencia no es

significativa. Esto indica una virtual igualdad de gnero en los pases, o sea, las mujeres

viven ms y poseen ms escolaridad, pero la renta menor reduce las condiciones de vida

de ellas, lo que demuestra que el gnero es un factor de discriminacin social. As,

como en la lista del IDH, en el IDG el lder es la Islandia y el ltimo colocado, Sierra

Leona en el ao 200510.

1.2 Esperanza de Vida de la Mujer

En 2007, en Brasil la esperanza de vida era de 72,57 aos. Entre 1992 y 2006,

la esperanza de vida de la poblacin brasilea ha incrementado en 5 aos, 6 meses y 26

das. En el mismo perodo, la relacin entre la mortalidad de hombres y mujeres con

edad entre 20 y 24 aos pas de 3,34 en 1992 para 4,20 en 2006. Si las muertes por

causas externas, particularmente las violentas, no tuvieran su actual dimensin, la

esperanza de vida de los brasileos podra ser ms elevada en cerca de 2 aos11.

En este mismo perodo, la esperanza de vida de las mujeres en Espaa ha

aumentado de 80,84 en 1992 para 84,09 en 2006 y sigue siendo ms elevada que la de

los hombres, que en 2006 era de 77,59. En la figura 1, a nivel de ilustracin, hay una

comparacin entre la esperanza de vida en las comunidades autnomas espaolas en el

ao 1999, por sexo12.

8 Fuente: PNUD, 2005. 9 Fuente: PNUD, 2000. 10 PNUD, 2005. 11 Fuente: IBGE 12 Fuente: INE, Espaa


Figura 1: Esperanza de vida de hombres y mujeres en las Comunidades Autnomas de Espaa en el ao 1999. Fuente: GISPERT, 2007.

Cuanto a la esperanza de vida de hombres y mujeres en Brasil y Espaa, de

acuerdo con los datos presentados en la Tabla 1 (abajo), se percibe que la diferencia por

sexo ha disminuido de 7,17 para 6,50 en Espaa en este perodo. Eso indica que la

esperanza de vida de los hombres est aumentando en una velocidad mayor que la de las

mujeres, pero las mujeres siguen viviendo por ms tiempo. Lo mismo de observa en

Brasil, donde las mujeres viven cerca de 8 aos ms que los hombres.

Tabla 1: Esperanza de vida por sexo y gao absoluto en el perodo de 1992 a 2006 en Brasil y

Espaa

Sexo 1992 2006 Gao en el Perodo

Brasil

Ambos los Sexos 67,00 72,57 5,57

Varones 63,20 68,82 5,62

Mujeres 70,90 76,44 5,54

Espaa

Ambos los Sexos 77,25 80,85 3,60

Varones 73,67 77,59 3,92

Mujeres 80,84 84,09 3,25

Fuentes: IBGE, 2007 e INE, Espaa, 2008


Se sabe que a pesar de vivir ms tiempo, la calidad de vida de la mujer es peor,

o sea, viven por ms tiempo, pero con inferior calidad de vida, aunque a los pocos,

como ya dicho anteriormente, la diferencia entre los dos sexos se est reduciendo.

Comparando los dos pases, la poblacin espaola, hombres y mujeres, viven

cerca de 8 aos ms que los brasileos. Entre las razones para explicar esa diferencia

observada destacan el desempeo de los servicios de salud y las condiciones

socioeconmicas de cada pas, aunque no siempre una mejora de estas condiciones

implica la de la salud.

1.3 Tasa de la Alfabetizacin de la Mujer

El ndice o tasa de alfabetizacin es el porcentaje de la poblacin que sabe leer

y escribir despus de determinada edad. No existe una convencin internacional acerca

de la edad a tomar en cuenta ni el nivel cualitativo de lectura o escritura, pero en general

se consideran personas de 15 aos o ms.

En Brasil, la diferencia entre los sexos de la tasa bruta de alfabetizacin ha

variado considerablemente desde el siglo pasado. En 1940, los valores para hombres y

mujeres han sido, respectivamente, un 41,12 y 32,79%, una diferencia de poco ms de

siete puntos porcentuales. Ya en 1980, esa diferencia se haba reducido a un 1,12%. En

1991, las tasas fueron, respectivamente, un 75,16 y 76,35% con una ventaja de un

1,19% para las mujeres. En 2000, la ventaja femenina sigui creciendo, aunque en una

velocidad ms pequea13.

Ya en Espaa, la tasa de alfabetizacin femenina ha aumentado. En el ao

1991, un 76,40% de las mujeres podan leer y escribir, ya en el ao 2007 un 86,28%. Si

comparada con la tasa de los varones, que fue de un 90,50% en 2007, vemos una

diferencia pequea. De 1991 a 2007, la tasa de alfabetizacin de las mujeres ha

aumentado un 9,88% en cuanto que la de los valores un 7,30%14.

Se percibe el mismo comportamiento en Brasil y Espaa: las mujeres se estn

educando ms. Pero es bastante evidente que cuando se habla en tendencia a la

igualdad o paridad de gnero respecto a la inversin en la relacin entre gnero y

educacin: es que el hecho de que las mujeres se estn igualando a los hombres y

13 Fuente: IBGE 14 Fuente: INE, Espaa


incluso superndoos en trminos de educacin. Todava, este cambio no debe ser

ingenuamente considerado, por s solo, como indicador de superacin de las

desigualdades sociales y de las formas de dominacin que histricamente marcan las

relaciones de gnero.

1.4 Porcentaje de Mujeres Activas

En 2003 las mujeres representaban un 42,7% de la poblacin econmicamente

activa (PEA), en Brasil. Sin embargo, estaban concentradas en subempleos y en el

sector informal de la economa. La categora de empleadas domesticas representar un

19% de la PEA femenina, algo en torno de cinco millones de mujeres, de las cuales un

56% son negras15.

En 2003, en cuanto la tasa de desocupacin entre las mujeres llegaba a un

12,3%, entre los hombres era de un 7,8%, en Brasil. Adems, la mayor escolaridad

conquistada no garantiza a las mujeres una igualdad de remuneracin en relacin a los

hombres con misma instruccin, como ya dicho16.

El porcentaje de mujeres activas en Espaa, en el primer cuadrimestre de 2009

era de un 51,51%, dato que en tercer cuadrimestre de 1976 era de un 28,80%. La mayor

parte de las mujeres trabaja en el sector servicios, seis veces ms que en la industria,

siendo la presencia femenina casi testimonial en la construccin y la agricultura, con

porcentajes que apenas superan el 2%17.

En los dos pases las mujeres son mayora en el sector servicios, que es en el

que ms creci la ocupacin femenina los ltimos 25 aos, un 5% ms que la ocupacin

total de las mujeres en esos aos, porque se produjo un trasvase de empleo entre

sectores.

15 Fuente: IBGE 16 dem 17 Fuente: INE, Espaa


1.5 Desigualdad Salarial entre Hombres y Mujeres

Las mujeres obtienen salarios inferiores a los de los hombres en todos los

casos, independientemente del sector econmico, actividad, ocupacin, antigedad,

formacin, tipo de jornada, contrato o tipo de empresa.

Por formacin, los salarios medios femeninos son mucho ms bajos que los

masculinos en los niveles de educacin secundaria o inferiores, acortndose las

diferencias en los niveles de formacin profesional y diplomaturas universitarias, para

volver a distanciarse cuando se trata de educacin universitaria, aunque sin llegar a las

diferencias de los niveles formativos ms bajos. En todo caso, los salarios aumentan

significativamente con el nivel de estudios alcanzado.

En Espaa, el salario bruto anual medio fue de 19.680,88 euros por trabajador

en el ao 2006, correspondiendo 22.051,08 euros a los varones y 16.245,17 euros a las

mujeres. El salario promedio anual femenino fue, por tanto, el 73,7% del masculino,

aunque esta diferencia podra matizarse en funcin de otras variables laborales (tipo de

contrato, de jornada, ocupacin, antigedad, tamao de la empresa, etc.) que inciden de

forma importante en el salario18.

Por sexo cabe destacar que el nmero de mujeres que ganan menos de 12.000

euros es mayor que el nmero de varones19. A partir de esta cifra, el nmero de mujeres

que percibe cada nivel salarial siempre es inferior al de hombres que tienen ese mismo

salario.

En cuanto a las diferencias salariales por sexo y actividad econmica hay que

sealar que se mantiene con ligeras modificaciones el ranking de actividades en cada

sexo. As, la intermediacin financiera fue la actividad con salario ms alto, tanto para

los hombres como para las mujeres, y la Hostelera la que tuvo los salarios ms bajos20.

En Espaa, por sector econmico, la diferencia es mayor en los servicios,

similar en la industria y menor en la construccin, que como ya comentado es un sector

residual para el empleo femenino. Por ocupaciones, la diferencia supera la media en

direccin de empresas, tcnicos y profesionales de apoyo (la ocupacin con ms

mujeres) y operadores de instalaciones industriales. As, mientras las mujeres sin

18 Fuente: INE, Espaa 19 dem 20 Disponible en: < http://www.ine.es/prensa/np525.pdf>. Acceso en 10 de mayo de 2009


estudios ganan un 38% menos que la media, aquellas con formacin universitaria ganan

un 54% ms que el salario medio femenino21.

A pesar de las brasileas presentaren mayor esperanza de vida, mayor tasa de

alfabetizacin y mayor tasa bruta de frecuencia escolar, el rendimiento femenino, en

Brasil, es, en promedio, un 78% del rendimiento masculino, como se puede analizar en

la figura 2. Lo mismo se verifica con las espaolas, pero con una diferencia bastante

menor, de un 26,3%22.

Figura 2: Diferencia salarial entre hombres y mujeres en diferentes pases.

Fuente: PNUD, 2006.

Esa diferencia ocurre debido a antiguas convenciones sociales de gnero. Por

eso, la mujer ocupa un espacio privado y el hombre el espacio pblico, de proveedor de

la casa. Con el tiempo, la mujer viene ganando espacio, pero eso no se refleja en el

mercado laboral, donde hay lo que llamamos techo de cristal: cuanto ms alto el puesto

en las empresas, menor el nmero de mujeres.

En Brasil, las mujeres ocupan un 9,4% de los cargos legislativos, un 35% de

los de alto grado, y un 53% de los puestos de gestin23.

El Informe de Desarrollo Humano de 1995 ha constatado que la participacin

de la fuerza de trabajo femenina ha crecido solo cuatro puntos porcentuales en 20 aos

21 Disponible en: < http://www.cai.es/sestudios/pdf/notasprensa/070305mujeres.pdf> Acceso en 10 de mayo de 2009. 22 Fuente: IBGE 23 dem

733,3%

117,4%

78,6%

56,3%

26,3%

22,0%

19,0%

Palestina

Japn

Brasil

EEUU

Espaa

Kenia

Suecia


de un 3,6% en 1970, para un 40%, en 1990. Todava, el crecimiento en el nmero

mujeres adultas alfabetizadas y en las matrculas ha aumentado en la proporcin de

escolares dos tercios24.

En 2006, apenas un 37% de los cargos de liderazgo eran ocupados por mujeres

en Brasil. Este pas ocupa la 100 posicin en el ranking de igualdad salarial entre

hombres y mujeres25.

1.6 ndice Sinttico de Fecundidad

El ndice sinttico de fecundidad es el nmero medio de hijos por mujer. Para

que se asegure el reemplazo generacional y la poblacin de un pas se mantenga, debe

ser del orden de 2,1, lo que quiere decir que cada matrimonio (dos personas) debe tener

2,1 hijos. Se aade el 0,1 para contrarrestar la mortalidad infantil26.

El ndice de fecundidad de un pas indica cual es el comportamiento que estn

teniendo sus habitantes con respecto al nmero de hijos por mujer (por matrimonio, por

tanto). As, el ndice de fecundidad en Espaa en 1995 que fue 1,2, indica que los

espaoles tuvieron un nmero tal de hijos ese ao que supone que cada mujer tendra en

su vida 1,2 nios/as si este comportamiento se prolongara. Si el ndice se estabilizara en

este valor la media de hijos de la familia espaola llegara a ser de 1,2. En el ao 2005,

ese ndice ha aumentado para 1,5, lo que es bueno para el crecimiento de la poblacin

espaola27.

Ya en Brasil, el ndice est disminuyendo: en el perodo 2000-2005 era de 2,35

y actualmente es de 2,25. Una estimacin para el perodo 2010-2015 es que llegue a

2,15. Algunos factores responsables por esa disminucin son la mayor concientizacin

de las mujeres respecto a su sexualidad y el ingreso en el mercado laboral. Se percibe

que pases ms desarrollados tienen un ndice ms bajo, comparado con pases en vas

de desarrollo28.

Junto con la migracin, el ndice sinttico de fecundidad es el principal

determinante de la dinmica demogrfica, no siendo afectado por la estructura etaria de

24 Fuente: Informe de Desarrollo Humano, 2005. 25 Fuente: PNUD, 2006. 26 Disponible en: < http://tabnet.datasus.gov.br/cgi/idb2000/fqa05.htm>. Acceso en 10 de mayo de 2009. 27 Fuente: INE, Espaa 28 Fuente: IBGE


la poblacin. La disminucin de ese ndice puede estar asociado a diversos factores:

urbanizacin crecente, reduccin de la mortalidad infantil, incremento del nivel

educacional, ampliacin del uso de mtodos contraceptivos, mayor participacin de la

mujer en el mercado laboral e inestabilidad de empleo.

1.7 Estructura de Edad

La estructura de edad muestra el porcentaje de jvenes, adultos y viejos en

determinado local, durante un cierto perodo. La estructura de la poblacin es

representada en forma de pirmide clasificada en base ancha de la pirmide, cuerpo

estrecho de la pirmide y el pice de la pirmide.

La base corresponde al nmero de jvenes de un pas, son considerados

jvenes los con edad entre 0 y 19 aos, el cuerpo de la pirmide corresponde a las

personas con edad entre 20 y 59 aos y el pice de la pirmide corresponde a las

personas con edad superior a 59 aos.

En las ltimas dcadas hubo un cambio en la estructura de edad brasilea, que

ha sido decurrente a factores como disminucin de las tasas de natalidad y elevacin de

la esperanza de vida, provocando automticamente un aumento en el crecimiento

natural/vegetativo. Eso se percibe al mirar la figura 3, que corresponde a las pirmides

etarias de la poblacin brasilea en los aos 1992 y 2006.

Figura 3: Pirmides poblacionales de Brasil en los aos 1992 y 2006.

Fuente: IBGE


Brasil ocupa la 100 posicin en el ranking de los 130 pases investigados en el

ndice que contabiliza la desigualdad salarial entre hombres y mujeres. El informe anual

fue publicado en el Foro Mundial de Economa, en Ginebra.

En el ranking general del ndice General de Desigualdad entre los Sexos que

evala la igualdad en la economa, poltica, educacin y salud Brasil est en 73 lugar,

ante la 72 posicin de 2007. Islandia es el pas que mejor promueve la igualdad entre

los sexos.

Por otro lado, Brasil es uno de los 24 mejores colocados en educacin, a lado

de naciones como Australia, Repblica Checa, Francia, Jamaica y Nueva Zelanda. El

informe apunta que la expansin en las matrculas de educacin bsica ha ayudado

Brasil a subir posiciones.

Espaa, como los dems pases desarrollados, tiene una pirmide poblacional

envejecida. Segn datos de 2006, un 14,4% de la poblacin tiene hasta 14 aos, un

67,8% es poblacin de los 15 a los 64 aos y hay un 17,7% de viejos en la poblacin

espaola, casi un quinto. En la figura 4 hay una pirmide etaria referente a la poblacin

espaola, en 2005. Promedio, la edad de un espaol es, en 2006, 39,9 aos (38,6 aos

para los hombres y 40,3 para las mujeres)29.

Figura 4: Pirmide poblacional de Espaa en el ao 2005.

Fuente: INE, Espaa, 2005 29 Fuente: INE, Espaa


2 Datos de La Inmigracin Brasilea en Espaa

2.1 Inmigracin brasilea en Espaa y feminizacin del flujo migratorio

Actualmente, Brasil ocupa el octavo puesto (excluyendo los pases que hacen

parte de la Unin Europea) cuanto a la cantidad de inmigrantes en Espaa, son

116.54830 brasileos superando los 90.161 registrados por el Padrn de 2007. Entre los

pases latinos, Brasil es el sexto y Ecuador lidera la lista, seguido de Colombia, Bolivia,

Argentina y Per. Este nmero puede, incluso, llegar a ser ms alto, pues segn el

Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil la estimativa es de que haya alrededor de

los 150.00031 brasileos/as en Espaa. En la tabla 2 hay los datos de la poblacin

extranjera en Espaa, por pas de nacionalidad, cuyos datos son del Instituto Nacional

de Estadstica.

Tabla 2: Poblacin extranjera por pas de nacionalidad, Padrn 2008

Pas Total

Rumania 731806 Marruecos 652695 Ecuador 427718 Reino Unido 352957 Colombia 284581 Bolivia 242496 Alemania 181174 Italia 157789 Bulgaria 153973 Argentina 147382 Portugal 127199 China 125914 Per 121932 Brasil 116548

Fuente: INE, Espaa, 2008

La inmigracin brasilea hacia Europa ha empezado a tener gran expresividad

en mediados de los ochenta y su principal ruta era Portugal. El vnculo de antigua

colonia, la facilidad por el idioma y cultura similares atraan a los brasileos que

emigraban del pas en una bsqueda por mejores condiciones de vida en Portugal o

apenas como punto de partida para los dems pases europeos. Este flujo se dio 30 Fuente: INE, Espaa, 2008. 31 Fuente: Informe Brasileiros no Mundo, de julio de 2008


principalmente por dos motivos: la crisis econmica que marc Brasil, y muchos de los

pases latinos-americanos, en la dcada de los ochenta (la llamada dcada perdida) y

tambin por las frustraciones generadas por los primeros aos de redemocratizacin del

pas.

A finales de los noventa, la inmigracin brasilea en Espaa empez a crecer

en larga escala, posiblemente porque Espaa, al contrario de Portugal, empez a

presentar un alto ndice de crecimiento econmico. En 1999, el nmero de brasileos en

Espaa era de 8.28332 y en Portugal de aproximadamente 21.00033. Ya en 2001, Espaa

registr en su Padrn Municipal 17.30234 brasileos, mientras que en Portugal el

nmero fue de 23.42235. Es decir, en apenas dos aos, la poblacin brasilea en Espaa

dobl, mientras que en Portugal creci poco ms de un 10%.

En este mismo perodo, segn un informe del Ministrio do Trabalho e

Emprego (MTE), editado en mayo de 2009, por el Instituto de Pesquisa Econmica

Aplicada (IPEA), fue registrado en Brasil un ascenso en la tasa de desempleo y en el

empleo informal, aunque con crecimiento en la calificacin de la fuerza laboral.

Confirmando la estrecha relacin que hay entre emigracin brasilea y la bsqueda por

oportunidades de trabajo.

En la ltima dcada, se ha sentido bastante el proceso de feminizacin de la

inmigracin en Espaa. En el caso de la inmigracin brasilea este proceso se confirma

con los ltimos datos registrados por el Padrn 2008. De los inmigrantes brasileos en

Espaa, un 40,3% es de varones y un 59,7% de mujeres36. Este hecho caracteriza el

colectivo de Brasil como uno de los ms feminizado de Espaa.

Los nmeros tambin muestran que es una inmigracin predominantemente

joven y en edad laboral: en los dos casos, tanto de mujeres cuanto de varones, la

mayora se concentra en la franja de edad de los 20 a los 40 aos.

En la tabla 3 presentamos los datos de la poblacin brasilea en Espaa por

sexo y en la Figura 5 las estructura de edad de los brasileos en este mismo pas.

Tabla 3: Poblacin brasilea en Espaa por sexo, Padrn 2008

32 Fuente: INE, Espaa, 1999. 33 Dato referente a la poblacin legalmente residente, INE, Portugal. 34 Fuente: INE, Espaa, 2001. 35 Dato referente a la poblacin legalmente residente, INE, Portugal. 36 Fuente: INE, Espaa, 2008.


Total

Ambos sexos 116548

Varones 46998

Mujeres 69550


La feminizacin de la inmigracin en Espaa est muy conectada con la

demanda de trabajo existente en la sociedad de acogida. Con la creciente incorporacin

de la mujer espaola al mercado laboral, las extranjeras, sobre todo las

latinoamericanas, encuentran trabajo principalmente en el sector domstico.

Varones

Mujeres

0 5000 10000 15000 20000

0-4

05-09

10-14

15-19

20-24

25-29

30-34

35-39

40-44

45-49

50-54

55-59

60-64

65-69

70-74

75-79

80-84

85 y ms

Figura 5: Estructura de edad de la poblacin brasilea en Espaa


Las mujeres inmigrantes tambin ofrecen grandes aportes en el mercado

sexual. Las redes de trfico de mujeres han crecido significativamente en Espaa. Se

estima que alrededor de 70.000 mujeres estn incluidas en este esquema, segn el

estudio Trata de mujeres con fines de explotacin sexual en Espaa, editado en 2008

por la Federacin de Mujeres Progresistas. Y de los pases latinoamericanos ms

representativos, Brasil es lo que presenta un nmero ms alto, un 36,6% de las mujeres.

Esas redes acaban siendo una opcin para muchas mujeres jvenes, cabezas de familia y

que encuentran la emigracin como solucin para la falta de oportunidad laboral y la

discriminacin de gnero sufridas en sus pases de origen. Aunque un 65,7% de esas


mujeres afirman que no tenan conocimiento de la prostitucin como finalidad del viaje

a Espaa.

2.2 Inmigracin y mercado laboral en Espaa

La inmigracin en toda Europa, en los ltimos aos, ha significado una gran

oferta de mano de obra para puestos menos cualificados, los cuales son menos buscados

por la poblacin autctona.

Sin embargo, los sectores del mercado laboral ms ocupado por los inmigrantes

latinoamericanos estn relacionados a la construccin, turismo y restauracin y otros

trabajos de menores cualificaciones, indicando que en muchos casos la mano de obra

tiene una formacin superior al puesto ocupado.

Debido a la ocupacin mayoritaria en estos sectores, las regiones que ms

reciben inmigrantes son Catalua, Madrid, Andaluca y Comunidad Valenciana. Las

regiones de la costa del mediterrneo son particularmente buscadas por una mayor

oferta de trabajos en turismo y restauracin. Los datos de la poblacin latinoamericana y

de la brasilea referente al mercado laboral en Espaa estn presentados en las Tablas 4,

5 y 6.

Tabla 4: Poblacin latinoamericana ocupada (miles de personas)

Total

Ambos sexos 1346

Varones 661,6

Mujeres 684,4



Tabla 5: Poblacin latinoamericana segn relacin sexo/ocupacin (miles de personas)

Cargo ocupado 2007

Varones

1 Direccin de las empresas y de la administracin pblica 12 2 Tcnicos y profesionales cientficos e intelectuales 13,8 3 Tcnicos y profesionales de apoyo 24,9 4 Empleados de tipo administrativo 20,2 5 Trabajadores de servicios de restauracin, personales, proteccin y vendedor de comercio

80,5

6 Trabajadores cualificados en agricultura y pesca 10,7 7 Artesanos y trabajadores cualificados de industrias manufactureras, construccin y minera, excepto operadores

245,5

8 Operadores de instalaciones y maquinaria; montadores 65,2 9 Trabajadores no cualificados 185,9 0 Fuerzas armadas 2,8

Mujeres

1 Direccin de las empresas y de la administracin pblica 9,7 2 Tcnicos y profesionales cientficos e intelectuales 11,4 3 Tcnicos y profesionales de apoyo 18,9 4 Empleados de tipo administrativo 43,4 5 Trabajadores de servicios de restauracin, personales, proteccin y vendedor de comercio

220

6 Trabajadores cualificados en agricultura y pesca 1,7 7 Artesanos y trabajadores cualificados de industrias manufactureras, construccin y minera, excepto operadores

14,5

8 Operadores de instalaciones y maquinaria; montadores 10,4 9 Trabajadores no cualificados 353,7 0 Fuerzas armadas 0,6



Tabla 6: Poblacin brasilea por Comunidades Autnomas, Padrn 2008

Comunidad Autnoma Total

Andaluca 11331 Aragn 2339 Asturias (Principado De) 2870 Balears (Illes) 4053 Canarias 3369 Cantabria 1606 Castilla Y Len 6333 Castilla-La Mancha 1944 Catalua 25746 Comunidad Valenciana 11218 Extremadura 2006 Galicia 10574 Madrid (Comunidad De) 23453 Murcia (Regin De) 2240 Navarra (C. Foral De) 1707 Pas Vasco 5125 Rioja (La) 626


2.3 Inmigracin e ndices de natalidad y fecundidad en Espaa

Segn datos de 2007 del INE, la Tasa de Natalidad del colectivo brasileo en

Espaa es de 29,2 nacidos por 1000 habitantes, presentando un ndice Sinttico de

Fecundidad de 1,98. En el mismo ao, en Brasil, la Tasa de Natalidad registrada fue de

17,06 y el ndice Sinttico de Fecundidad de 1,93.

.atalidad y fecundidad37: Total nacimientos madre extranjera, Brasil: 2.634/2,82% Tasa de natalidad: 29,2 (nacidos por 1000 habitantes)38 Tasa General de Fecundidad: 56,739 ndice Sinttico de Fecundidad: 1,9840

37 Datos del apartado Movimiento Natural de la Poblacin, Nacimientos de madre extranjera por pas de nacionalidad y cifras absolutas/relativas, 2007. 38 Clculo propio a partir de la frmula: n nacimientos x 1000/poblacin media. Datos de 2007: poblacin total (Brasil=90.161) y total de nacimientos de madre extranjera (Brasil). 39 Clculo propio a partir de la frmula: n nacimientos x 1000/mujer (15-49).Mujeres entre 15-49 aos, datos de 2007 a partir de clculo propio de la poblacin de mujeres por edad y nacionalidad: 46.433.


En Brasil, si comparamos con los datos de los aos anteriores, se nota el

descenso de esos indicadores, como se presenta en las figuras 6 y 7.

Figura 6: Tasas de Natalidad 1990-2008

Fuente: IBGE

Figura 7: ndice Sinttico de Fecundidad 1990-2008

Fuente: IBGE

stos sumados a otros indicadores, como la Tasa de Mortalidad Infantil (24,10

por cada mil nacidos vivos) y la Tasa de Analfabetismo en personas de 10 aos o ms

(alrededor de un 8,9% de la poblacin), demuestran una posible mejora en los niveles de

educacin sexual y reproductiva en el pas.

Como se ha podido notar, la Tasa de Natalidad y el ndice Sinttico de

Fecundidad del colectivo brasileo en Espaa son ligeramente ms altas que las tasas en

el propio pas de origen. Estas diferencias pueden indicar factores como la idea de que

40 Clculo propio a partir de la frmula: TGF x 35/1000.


las/os hijas/os tendrn ms y mejores oportunidades aqu en Espaa. Por eso las

mujeres brasileas tendran ms hijas/os, o el hecho de que quedarse embarazada

facilita la adquisicin de la ciudadana, ya que el Derecho de los/as Nios y Nias

garantiza que ellos/as tengan una nacionalidad, por lo tanto facilitando el trmite

tambin para la madre y el padre.

2.4 ndice de Desarrollo Humano (IDH)

En el ltimo informe sobre el IDH del PNUD (2007-2008), Brasil entr para la

lista de los pases con un alto IDH, en la posicin 70 con 0,800, contra 0,792 en el

informe anterior. Dos factores han contribuido mayoritariamente para este dato: el

aumento de la expectativa de vida (de 70,8, en el informe anterior, para 71,7) y tambin

del PIB (de US$ 8,195 para US$ 8,402)41.

El IDH brasileo viene creciendo de forma consistente en los ltimos aos en

todas sus dimensiones, incluso presentando altos niveles, como, por ejemplo, la Tasa

bruta combinada de matriculacin en primaria, secundaria y terciaria (87,5%) est entre

las 36 ms altas del mundo.

El IDH fue concebido como forma de ensear las tendencias del desarrollo

humano a largo plazo. Por lo tanto, lo ideal es comparar eses datos dentro de un plazo

mediano y largo. Segn el PNUD, entre 1990 y 2005, Brasil viene evolucionando

constante y positivamente. En este periodo, la expectativa de vida creci ms que 5 aos

y medio y el PIB aument en 1/6. La alfabetizacin de los adultos subi en 7% y la tasa

de matrcula combinada aument en casi un 20%42.

Sin embargo, y pese a entrar pala el listado de los pases con alto IDH, Brasil

sigue presentando indicadores inferiores a muchos pases latinoamericanos en casi todas

las dimensiones. Lo que implica que Brasil apenas ha marcado el principio de una larga

trayectoria.

Ya Espaa viene presentando altos niveles de crecimiento. En comparacin

con el informa anterior, en el cual Espaa ocupaba el puesto 19 con un IDH de 0,938,

ahora est en la posicin 13 y con un IDH de 0,949. Un avance notable est en la

clasificacin segn el PIB per cpita menos la clasificacin segn el IDH, con ndice 11,

41 Fuente: PNUD 2007-2008 42 Fuente: PNUD


mientras en el informe anterior presentaba ndice 3, lo que quiere decir que la

clasificacin de Espaa segn el IDH es muy superior a la clasificacin segn el PIB,

estando delante, incluso, de pases como Suecia, Islandia, Finlandia y Francia43.

Consideraciones Finales

De acuerdo con la lgica vigente de organizacin socio-cultural, es perceptible

una desigual divisin del poder. El androcentrismo ha creado, en la sociedad moderna,

marcos reguladores e interpretativos que alejaron la actuacin femenina en el escenario

social, lo que explica sin justificar, por supuesto- la infravaloracin de las actividades

impartidas por las mujeres.

Desde esta perspectiva, surgieran algunas afirmaciones desfavorables sobre la

condicin femenina, tales como: que el trabajo de la mujer se concentre en

determinados sectores y ocupaciones (discriminacin horizontal); que ella tienda a

mantenerse en la base de la jerarqua laboral (discriminacin vertical); y, por ltimo,

que ella deba ser peor remunerada, en trminos generales (discriminacin econmica)44.

La feminizacin de la pobreza, pues, deriva del hecho de que el trabajo de la

mujer es socialmente minusvalorado. No obstante que la bsqueda de cualificacin haya

crecido en proporcin considerable, la contrapartida del mercado laboral no camina en

la misma velocidad, lo que demuestra una cierta resistencia en la respuesta del mercado

laboral a la mayor calificacin femenina indudablemente razn de factores tambin

culturales. O sea, el nivel de estudio de las mujeres es creciente, pero la disminucin de

la desigualdad de gnero no ocurre en la misma velocidad.

De hecho, la desconstruccin de la desigualdad de gnero necesita cambios

sociales pluridimensionales. Todava, es posible percibir que progresivamente se estn

incorporando valores que fortifican la lucha en favor del rompimiento de los dualismos

instituidos siempre en perjuicio de las mujeres.

Cuanto a la migracin brasilea a Espaa, se percibe que hay la pretensin

constante de buscar mejores condiciones de vida. Se debe destacar que el mayor nmero

de inmigrantes es mujer, en virtud, como dicho, del tipo de mercado laboral ofrecido

43 Fuente: PNUD 44DOMINGUES, C.: Material de apoyo del Mdulo Migraciones del Mster en Gnero y Polticas de

Igualdad, p. 1.


por Espaa (domstico y sexual). Todava, tal conclusin debe ser observada en

conformidad con otras perspectivas, como, por ejemplo, la gran molestia que tal proceso

causa en las inmigrantes, que, sobre todo, por la educacin sentimental, an reciben las

mujeres. Eso revela, tambin, el aumento de la proporcin de mujeres responsables por

el mantenimiento y bienestar de sus familias.

Otro facto que pode demonstrar porque Espaa es un destino procurado por

los brasileos es los precios de los billetes areos, generalmente ms bajos que para

otros destinos europeos y no hay necesidad de visado para embarcar. Tambin se puede

citar la mayor facilidad para entrar, ya que Espaa, a pesar del destaque de diversos

casos de impedimento de entrada, an es considerada, por muchos, menos rigorosa que

otros pases.

En conclusin, se entiende que la desigualdad de gnero es mayor en Brasil

cuando comparado a Espaa, porque los fenmenos socio-econmicos son esenciales

para garantizar la igualdad en el seno social. El objetivo mundial de formacin de pases

justos e iguales, pues, por ser una pretensin comn, debe tener el soporte de polticas

de cooperacin internacional sostenibles y, sobre todo, efectivas.

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http://www.pnud.org.br/home/

http://www.undp.org/

consideraciones sobre la inmigración de brasilenos a españa

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