comunicado frente al paro nacional agrario, Étnico, popular y el cierre de la universidad de...

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El Paro agrario del 2013 fue el resultado del abandono estatal desde hace varias décadas, durante estas protestas en calles y carreteras a lo largo y ancho del país por parte de la sociedad colombiana, el gobierno nacional tuvo que sentarse a darle cara a los problemas del agro y realizó 88 acuerdos, de los cuales hasta el momento solamente ha cumplido 16. Ante esta situación sectores campesinos, indígenas, afros, sindicales y organizaciones populares se dieron encuentro en la Cumbre Agraria: Campesina, étnica y popular, conformando un pliego único nacional de exigencias compuesto por 8 puntos que identifican la crisis del agro y recoge las reivindicaciones históricas del pueblo colombiano contra un modelo de despojo y explotación, sumando las exigencias pasadas de las movilizaciones agrarias e indígenas del 2013. Los procesos juveniles y estudiantiles de las ciudades y campos no somos ajenos a la situación de movilización actual en Colombia, nunca las organizaciones juveniles hemos estado al margen de los procesos que impulsan cambios en el país, cambio del modelo económico imperante y cambio para una vida digna y justicia social. La Universidad de Cundinamarca, como universidad pública y de provincia, no puede estar al margen de lo que acontece a nivel nacional, sus problemáticas están ligadas al modelo económico que impera a nivel mundial y en ella se ven todas las contradicciones propias de un sistema deshumanizante. Por un lado, el ingreso al Alma Mater es dificultoso, debido a sus altos costos de matrícula, y al poco apoyo por parte de bienestar universitario, haciendo cada vez más difícil el ingreso a jóvenes de pocos recursos de la región. Además, su desarrollo académico e investigativo está al servicio del sector privado, generando un impacto negativo a la región de Cundinamarca. Bajo el discurso sin raíces de la “Excelencia Académica” se legitima la mala inversión de los recursos en la universidad, la irregular contratación docente, la poca investigación, y como si fuera poco los escasos logros siempre han sido utilizados como cortinas de humo publicitario desviando así la discusión política con respecto a la situación de la universidad, encubriendo de esta manera los problemas legales del rector con la procuraduría, entre otras cosas. Los estudiantes de la universidad sabemos que la realidad de las aulas, las bibliotecas y los laboratorios de cada una de las seccionales y extensiones, es distinta a lo mostrado en la página de la Universidad y en el famoso panfleto Udecando. Por lo anteriormente nombrado, la decisión de la suspensión de actividades académicas decretada por el consejo académico no es una sorpresa, sabemos de antemano sus intereses políticos en la región y su cercanía a los partidos que manejan a su antojo el rumbo de esta y la articulación con las mafias que desean controlar los brote de indignación y rebeldía. En el Paro Agrario del año 2013, la universidad fue utilizada por agentes externos del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) como vivienda, allí descansaban después de largas jornadas de represión y de poner en riesgo la vida de toda la comunidad Fusagasugueña, allí se prepararon para dar el golpe que terminó con la vida del joven campesino JUAN ACOSTA. Fusagasugá 28 de Abril del 2014 COMUNICADO FRENTE AL PARO NACIONAL AGRARIO, ÉTNICO, POPULAR Y EL CIERRE DE LA UNIVERSIDAD DE CUNDINAMARCA POR PARTE DE LA ADMINISTRACIÓN

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El Paro agrario del 2013 fue el resultado del abandono estatal desde hace varias décadas, durante estas protestas en calles y carreteras a lo largo y ancho del país por parte de la sociedad colombiana, el gobierno nacional tuvo que sentarse a darle cara a los problemas del agro y realizó 88 acuerdos, de los cuales hasta el momento solamente ha cumplido 16. Ante esta situación sectores campesinos, indígenas, afros, sindicales y organizaciones populares se dieron encuentro en la Cumbre Agraria: Campesina, étnica y popular, conformando un pliego único nacional de exigencias compuesto por 8 puntos que identifican la crisis del agro y recoge las reivindicaciones históricas del pueblo colombiano contra un modelo de despojo y explotación, sumando las exigencias pasadas de las movilizaciones agrarias e indígenas del 2013.

Los procesos juveniles y estudiantiles de las ciudades y campos no somos ajenos a la situación de movilización actual en Colombia, nunca las organizaciones juveniles hemos estado al margen de los procesos que impulsan cambios en el país, cambio del modelo económico imperante y cambio para una vida digna y justicia social.

La Universidad de Cundinamarca, como universidad pública y de provincia, no puede estar al margen de lo que acontece a nivel nacional, sus problemáticas están ligadas al modelo económico que impera a nivel mundial y en ella se ven todas las contradicciones propias de un sistema deshumanizante.Por un lado, el ingreso al Alma Mater es dificultoso, debido a sus altos costos de matrícula, y al poco apoyo por parte de bienestar universitario, haciendo cada vez más difícil el ingreso a jóvenes de pocos recursos de la región. Además, su desarrollo académico e investigativo está al servicio del sector privado, generando un impacto negativo a la región de Cundinamarca. Bajo el discurso sin raíces de la “Excelencia Académica” se legitima la mala inversión de los recursos en la universidad, la irregular contratación docente, la poca investigación, y como si fuera poco los escasos logros siempre han sido utilizados como cortinas de humo publicitario desviando así la discusión política con respecto a la situación de la universidad, encubriendo de esta manera los problemas legales del rector con la procuraduría, entre otras cosas. Los estudiantes de la universidad sabemos que la realidad de las aulas, las bibliotecas y los laboratorios de cada una de las seccionales y extensiones, es distinta a lo mostrado en la página de la Universidad y en el famoso panfleto Udecando.

Por lo anteriormente nombrado, la decisión de la suspensión de actividades académicas decretada por el consejo académico no es una sorpresa, sabemos de antemano sus intereses políticos en la región y su cercanía a los partidos que manejan a su antojo el rumbo de esta y la articulación con las mafias que desean controlar los brote de indignación y rebeldía. En el Paro Agrario del año 2013, la universidad fue utilizada por agentes externos del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) como vivienda, allí descansaban después de largas jornadas de represión y de poner en riesgo la vida de toda la comunidad Fusagasugueña, allí se prepararon para dar el golpe que terminó con la vida del joven campesino JUAN ACOSTA.

Fusagasugá 28 de Abril del 2014

COMUNICADO FRENTE AL PARO NACIONAL AGRARIO, ÉTNICO, POPULAR Y EL CIERRE DE

LA UNIVERSIDAD DE CUNDINAMARCA POR PARTE DE LA ADMINISTRACIÓN

La doble moral de los administrativos es irrisoria, ante este nuevo paro, se atreven a hablar de agentes externos que van a perturbar a la comunidad, queremos decirles que los “agentes externos” que nombran en su comunicado (27/04/2014) SI EXISTEN, son los campesinos y trabajadores de la región, padres y madres que llaman a las puertas de la Universidad exigiendo oportunidades académicas para sus hijos, exigiendo que los directivos de la UdeC y los politiqueros de turno, dejen de hacerse los sordos frente a los problemas del agro, de la educación, de la salud, de la vivienda, de Vida Digna.Por último, como hijos de trabajadores, obreros y campesinos, queremos invitar a los estudiantes de la Universidad de Cundinamarca y a la comunidad a que nos movilicemos este primero de mayo y a que apoyemos el Paro Nacional Agrario, étnico y popular en las calles y carreteras bajo la consigna PARAR PARA AVANZAR… porque es ahora o nunca, esta es la hora primera y las calles el justo lugar…

ASOCIACIÓN NACIONAL DE JÓVENES Y ESTUDIANTES DE COLOMBIA

ANJECO CUNDINAMARCA