Cómo afrontar la etapa

universitaria que da

cominezo

Son muchos los jóvenes que, después de terminar sus

estudios en los diferentes pueblos o núcleos

familiares, los que deben comenzar sus estudios

universitarios en otras ciudades o emplazamientos.

Es en ese momento en el que múltiples dudas les

vienen a la mente y, algunas de ellas de difícil

respuesta.

En base a esa nota obtenida una vez realizados todos

los exámenes de Selectividad, dependerán muchas

decisiones importantes.

Ya que, de una nota y del esfuerzo realizado en los

años pasados es de lo que dependerá en la mayoría de

las ocasiones qué estudios realizar y en qué ciudades

llevarlos a cabo.

Puede que unas décimas hagan que podamos

quedarnos más cerca de casa o que por el contrario

esto haga que nos tengamos que alejar del domicilio

familiar, comenzando la que será una nueva vida para

los siguientes cuatro años como mínimo.

Con el paso del tiempo y una vez nos hayamos

asentado en los nuevos destinos, comenzaremos a

aprender a manejar diferentes ocasiones que se nos

vayan presentando, pero ahora en los comienzos es

recomendable tener en cuenta una serie de pautas o

consejos para que este sea lo más sencillo y práctico

posible, así pues, deberemos, en primer lugar elegir

nueva ciudad y, por consiguiente, espacio en el que

vamos a vivir, existiendo en ambos campos amplias

posibilidades.

Además de esto, os dejamos algunos consejos para comenzar a vivir esta nueva etapa que nos formará como profesionales, y que, nos volverá más responsables en nuestra nueva vida que comienza ahora.

En primer lugar debemos comenzar por saber

gestionar nuestro tiempo, marcarnos nuestros

propios horarios, esto sobre todo si vivimos en un

piso de estudiantes en el que no existan unas horas

prefijadas para realizar, por ejemplo, las comidas.

En este caso debemos aprender a madrugar por

nosotros mismo, acudir a las clases sin llegar tarde,

saber a que hora irnos a dormir para poder

descansar y estar en buenas condiciones al siguiente

día. Mención especial merecen las épocas de

exámenes que requieren de mayor responsabilidad.

Otro de los elementos que debemos tener en cuenta,

un poco ligado a lo mencionado anteriormente, es

que, al igual que debemos controlar el tiempo para

las responsabilidades, debemos otorgarle a nuestro

ocio y tiempo libre aquello que le corresponde.

En este caso, se recomienda que se tenga tiempo

para uno mismo, para hacer aquello que más

apetezca, recorrer la ciudad a la que nos hemos

trasladado, conocer nuevas amistades y, en

definitiva, disfrutar de uno mismo y el entorno.

Uno de los aspectos que más preocupan a nuestro

familiares, y que por supuesto debemos tener en

cuenta es que nuestra alimentación sea lo más

saludable posible, si decidimos realizar nuestra

etapa en una residencia de estudiantes en la que

haya un servicio de comida establecido, será mas

sencillo ya que estos deben estar llevados a cabo por

profesionales de la nutrición. Es en el caso de piso y

de la libertad nutricional en dónde deberemos

prestar más atención a aquello con lo que nos

nutrimos y en lo que basamos nuestra dieta.

Así como la limpieza y el orden, ya no tenemos a

nuestros padres tras de nosotros para que nos

ordenen que debemos hacerlo, es de nosotros de

quien debe nacer llevarlo a cabo, sobre todo en el

caso de que hayamos decidido vivir en un piso de

estudiantes compartido.

En este caso lo que mejor funciona es crear un

horario o calendario de actividades y cumplirlo por

parte de todos los habitantes del mismo.

Por último, comenzaremos a ser los propios gestores

del dinero con el que contamos. Empezaremos a

saber lo que cuestan algunas cosas que hoy en día

nunca nos habíamos planteando y esta es una de las

mayores responsabilidades que vamos a asimilar.

Es conveniente establecer un presupuesto semanal o

mensual, y a partir de este saber que monto o

cantidad será dedicada a cada una de las

actividades, compras o gastos que vayamos a

soportar en este periodo establecido.