COMENTARIOS HOMILÉTICOS A MT. 24 Y LC. 21

El presente escrito fue preparado con el propósito de proveer a mis consiervos de las reflexiones bíblicas que les sirvan de ayuda en la preparación de sus sermones para la serie del mes de octubre 2015. Todas han resultado del análisis personal de los dos capítulos ya señalados y de la necesaria investigación de los escatólogos que han estudiado y sistematizado el conocimiento bíblico sobre el tema. Es mi deseo y oración que les sirvan de apoyo en la preparación de los mensajes que sembrarán en nuestros miembros las necesarias enseñanzas bíblicas que les guíen en la configuración de un modo de vida que honre su esperanza de vida.

Estos pasajes proféticos revelan dos eventos escatológicos muy importantes para el discernimiento de nuestro tiempo:

La destrucción de Jerusalén. Evento cumplido en una primera fase en el año 70 y cuyo cumplimiento final o Celsius plenior será en la mitad de la semana 70 o gran tribulación.o Esto nos indica un punto anterior que abre una etapa profética

desencadenante hacia el final pero que aún no se desencadena completamente al mismo, abriéndose lo que los teólogos llamamos el paréntesis de la gracia.

La gran tribulación. Evento por cumplirse, cargado de terribles juicios y dirigido directamente al pueblo de Israel y las naciones.o Este nos provee el marco que permite en el presente interpretar

adecuadamente los eventos climáticos, políticos y económicos como apenas vestigios de los que verdaderamente ocurrirán con toda su fuerza en aquellos tiempos por venir.

La segunda venida de Cristo. Evento por cumplirse diferente y por tanto posterior al traslado de la iglesia en tanto que dicho descenso será visto por todo el mundo, castigará y enjuiciará a las naciones, restaurará a Israel e instaurará el reino milenial.o Esta profecía nos provee el marco que permite en el presente discernir y

diferenciar el evento escatológico del traslado de la iglesia del evento correspondiente a la segunda venida de Cristo. Esto nos pone en nuestro sitio de modo que establezcamos nuestras

responsabilidades en el presente en cuanto a nuestro modo de vivir, predicar y misionar.

Los siguientes constituyen una serie de comentarios de interés homilético. Esto significa que aportan información bíblica que apunta a la aplicación de las enseñanzas dejadas por la información profética:

Las profecías de Mt. 24 y Lc. 21 nos agudizan el discernimiento: “El entonces dijo: Mirad que no seáis engañados; porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo, y: El tiempo está cerca. Mas no vayáis en pos de ellos”. (Lc 21:8):

o Aunque sus profecías no corresponden a nuestro tiempo, nos dan información que agudiza nuestro discernimiento del tiempo presente a fin de que: Evitemos el engaño de los falsos cristos. Evitemos el engaño de aquellos que niegan el traslado, la gran tribulación

y el milenio, tales como, la teología del reino presente o dominionismo. Nos llama a vivir alertas sin dormirnos, siendo fieles a las enseñanzas del

nuestro verdadero Cristo. Las profecías de Mt. 24 y Lc. 21 nos afinan la actitud escatológica

básica. “Con vuestra paciencia ganaréis vuestras almas”… “Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo”. (Lc 21:19; Mt 24:13):o Esa actitud es la paciencia perseverante. Es escatológica porque se refiere a

la espera de un evento futuro, en el caso de la iglesia, su traslado a los cielos. En el caso de Israel, la segunda venida de Cristo y el reino milenial. Aunque parezca una frase redundante refleja el adecuado énfasis que el Señor quiere darle a nuestra espera de su retorno para trasladarnos al cielo como su iglesia.

o Enfoca nuestra atención no tanto en la espera sino en el fruto de la misma: En palabras de Mateo, “ganar nuestras almas”; en palabras de Lucas, “ser salvos”.

o Provee esperanza al establecer un punto final a dichos acontecimientos escatológicos en la expresión “hasta el fin”.

Las profecías de Mt. 24 y Lc. 21 nos despiertan al estudio de los tiempos. “Porque estos son días de retribución, para que se cumplan todas las cosas que están escritas”. (Lc 21:22): o El propósito de estas profecías es una prueba de la fidelidad de Dios.o Constituyen un llamado a indagar diligentemente sobre eso que está escrito

y que aún falta por cumplirse.o Es un llamado a no ser desconocedores de nuestro tiempo y de su lugar en

los tiempos finales de Dios. Este conocimiento debe producir en nosotros una clara conciencia de

nuestra responsabilidad misionera con respecto a los que no han sido salvados por Cristo para que aprovechen estos tiempos de gracia.

Las profecías de Mt. 24 y Lc. 21 nos da la ventaja de la visión anticipada: “Desfalleciendo los hombres por el temor y la expectación de las cosas que sobrevendrán en la tierra; porque las potencias de los cielos serán conmovidas”. (Lc 21:26):o Conocer con anticipación la reacción emocional de las personas de aquella

época futura de juicio y calamidad, nos da la ventaja de evitar tales consecuencias y esforzarnos por ayudar a muchos más a evitarlas también.

o Este pasaje nos provee información para contrastar la reacción emocional de la gente que estará en la gran tribulación con la respuesta de todos los que sabemos con anterioridad lo que ocurrirá en esos tiempos. Poseer este conocimiento es tanto un llamado a estar alerta como a cuidar nuestra salvación y privilegio y a ayudar a otros a buscar la salvación de Cristo.

Luc 21:31 Así también vosotros, cuando veáis que suceden estas cosas, sabed que está cerca el reino de Dios: Lo más cercano que veremos de estas señales

es su preparación y escaramuzas. Debemos estar atentos manifestando una actitud de espera y expectación por la manifestación del reino de Dios en la forma como lo hará en los acontecimientos finales.

Luc 21:32 De cierto os digo, que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca:o Por generación se entiende el término en su acepción de pueblo, raza,

nación. Lo cual hace referencia a Israel como pueblo sobre el cual se cumplirán todas estas profecías.

o Aunque dichas profecías no se cumplirán en nosotros, si es para nosotros la lección que nos deja claro una vez más que debemos vivir en constante expectación de que habrá un período final donde se desencadenarán una serie de acontecimientos que terminarán con la historia humana tal como la conocemos.

Luc 21:34 Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día:o Un llamado a mantenerse fieles y cuidarse de distenderse con las

costumbres e intereses del mundo actual como lo hizo Israel con las costumbres y formas cananeas apartándonos de la gracia de Dios.

Luc 21:36 Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre:o La actitud y la acción esperada por parte de todos los que creemos en el

Señor y hemos sido salvos: El velar con la actitud de guardia activa cuidando de que nada ni nadie nos

robe ni nos venza en nuestro propósito de mantenernos firmes y fieles al Cristo que viene a buscarnos antes de todas estas cosas.

La oración, una comunión constante con el que con su palabra ordenará el inicio de tales cosas, nosotros la iglesia, dando gracias por habersenos concedido en Cristo el ser librados de tales situaciones y de estar en pie delante del Señor, sentado con él en los lugares celestiales.

Mat 24:12 y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará:o Esta advertencia aunque se aplica directamente a aquellos tiempos futuros

posteriores al traslado de la iglesia, deja una estela de advertencia para nuestros tiempos en el que mucha gente se resiente con Dios y se les enfría el amor reclamándole a él que permita la multiplicación de la maldad sin darse que es parte de las cosas que están escritas para cumplirse a fin de probar la profundidad y la intensidad de la maldad humana y cuan merecedora es del castigo divino.

o Esto apunta a la objetividad y legitimidad de la justicia de Dios. Mat 24:25 Ya os lo he dicho antes:o Este es un mensaje de advertencia que deberá ser tomado en cuenta por

quienes tenemos promesa de que no pasaremos por la gran tribulación, pero solo si atendemos con gran atención las advertencias y señales dadas por el Señor en estos pasajes.

o La advertencia es: "Se los estoy diciendo con anticipación para que se apresten a ser levantados antes de todas estas cosas y eviten caer en el

descuido y ligereza que les lleve a ser dejados y padecer todas las cosas de estas profecías".