Comencemos…Renovando nuestro

compromiso

Nehemías 9:38, - 10:28-39

Comenzamos y nuestro anhelo debe ser hacerlo de la mejor manera, haciendo primero lo primero, poniendo a Dios por encima de todo.Debemos priorizar la voluntad divina y descansar con la certeza de que el sabe lo que es mejor.

También es valioso reconocer que con el paso del tiempo en nuestro peregrinaje espiritual muchas cosas se desgastan, nuestras fuerzas, la pasión, el deseo y el compromiso con la obra de Dios, suelen caer presas de la rutina que nos roba la bendición de gozar cada etapa de este largo camino a la eternidad.

Por supuesto no podemos ignorar que el pecado, el mundo y las artimañas del enemigo juegan un papel antagónico influyente y pueden producir a través del engaño no solo el adormecimiento sino también el retroceso y la perdición de todo cuanto tenemos en Dios.

Renovar nuestro “compromiso” se vuelve parte vital, puesto que un día prometimos renunciar alas ofertas del mundo, a nuestros deseos porque estimamos el llamado de Dios como sublime e incomparable y la razón de nuestra misma existencia.

Aprecio mucho la historia de Nehemías, puesto que fue un hombre que llevó a todo un pueblo a hacer un compromiso escrito y firmado, este pueblo que por un largo periodo se había apartado de Dios y estaba sufriendo las consecuencias de su pecado, pero luego de escuchar la Palabra de Dios, estaban ansiosos de volver a Dios, derramaron sus almas delante de Dios, verbalmente declararon su arrepentimiento y en un documento escrito plasmaron su “compromiso”.

A la luz de este pasaje notaremos algunos aspectos que implicaban la renovación del compromiso de Israel con el Dios Todopoderoso;

1. Nehemías 10: 28-29…jurar que andarían en la ley de Dios… y que guardarían y cumplirían todos los mandamientos, decretos y estatutos de Jehová nuestro Señor.La conversión es separarse del curso y de las costumbres de este mundo, y consagrarnos a la conducta dirigida por la palabra de Dios. Cuando nos comprometemos a cumplir los mandamientos de Dios, es para hacer todos sus mandamientos, y para considerarlo a Él como el Señor, y nuestro Señor. (MH)Oseas 4:1 y 6 San Juan 15:10

2. Nehemías 10: 30Y que no daríamos nuestras hijas a los pueblos de la tierra, ni tomaríamos sus hijas para nuestros hijos.Si el pueblo escogido de Dios iba a testificar por El en un mundo pagano, necesitaba familias unidas y temerosas de Dios.También, debían evitar cualquier tentación de adorar los ídolos de los pueblos que vivían a su alrededor.2 Corintios 6:14

3. Nehemías 10: 31…nada tomaríamos de ellos en ese día ni en otro día santificado; y que el año séptimo dejaríamos descansar la tierra, y remitiríamos toda deuda.Dios reconoció que la atracción del dinero entraría en conflicto con la necesidad de descansar un día, por lo que se prohibió el comercio dentro de la ciudad el día de reposo. Al decidirse a honrar a Dios en primer lugar, los israelitas estaban rechazando hacer del dinero su Dios.Mateo 6:24

4. Nehemías 10: 32-34…contribuir cada año con la tercera parte de un siclo para la obra de la casa de nuestro Dios.El templo había sido reconstruido bajo el liderazgo de Zorobabel aproximadamente setenta años antes. Las contribuciones al templo, las ofrendas y las festividades fueron restauradas.Mateo 17:24-27

5. Nehemías 10: 39…y no abandonaremos la casa de nuestro Dios.En el tiempo de Nehemías, el lugar de adoración era el templo, Dios vivía allí, por esto era el lugar más importante.Hageo 1:9 Esperaban cosechas abundantes, pero fueron pobres; y cuando trajeron la cosecha a su casa, yo la hice desaparecer con un soplo. ¿Por qué? Porque mi casa está en ruinas, dice el SEÑOR de los Ejércitos Celestiales, mientras ustedes se ocupan de construir sus elegantes casas.

Concluyendo, lo que ellos dijeron fue:De aquí en adelante, vamos a ser personas diferentes, este documento será nuestra constitución, nuestra declaración de compromiso, nuestros hogares serán diferentes, nuestra filosofía de vida será distinta a la de los que viven fuera de este muro, tu Palabra será nuestro manual de vida y él anhelo por tu casa arderá en nuestros corazones. Era realmente un compromiso serio que demandaba sacrificios y dedicación para cumplirlo.