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Ciclo C – pequeños
Cuarto Domingo de Adviento
Sesión # 4
Tema: “María se prepara para recibir a Jesús”
Objetivo: Indicar el gusto que sintió cada uno de los personajes de la narración de recibir a
Jesús.
Referencias bíblicas:
• Miqueas 5:2-5ª
• Isaías 55:6-11
• Hebreo 10:5-10
• San Lucas 1:39-45(46-55)
Pre-Actividades sugeridas:
• Saludos, cánticos y oración.
• Pedirle a los niños que hagan mímicas de como expresan su alegría. Cada uno debe
hacer una mímica diferente.
Estrategia de enseñanza: Algunas sugerencias al estudiante. .
• Narrar a los niños la lección o San Lucas 1:39-55. Puede utilizar una figurita de María, de Isabel
y de un ángel para narrar la historia.
• Deje que los niños repitan la historia, usando las figuritas.
• Luego pregunte:
• ¿Qué personajes menciona la lectura?
• Describe ¿quiénes eran cada uno de los personajes?
• ¿Quién era el niño en el vientre de María? ¿Quién era el niño en el vientre de Isabel?
• ¿Como se sintió María al saber que iba a ser la madre del Salvador del Mundo? ¿Cómo se
sintió Isabel de que la madre de su Señor viniera a visitarla?
• ¿Cómo se sintió el niño en el vientre de Isabel?
• ¿Cómo te sientes tú de que nuestro Salvador venga a visitarnos?
• ¿Cómo expresó María su alegría y su aceptación de la Voluntad del Padre Celestial?
• ¿Cómo se llama la alabanza que hizo María cuando aceptó la Voluntad del Padre
Celestial?
Libros:
• Biblia
• Himnario
• Libro de Oración Común
Ciclo C – pequeños
Cuarto Domingo de Adviento
Lección # 4 “María se prepara para recibir a Jesús”
San Lucas I: 39-45 (46-55)
María era una muchacha joven. Vivía con sus padres en el pueblo de Nazaret. Un
día el ángel Gabriel llegó a la casa de María. Ella se sorprendió mucho de recibir a un
ángel de visita. Él le dijo, «Hola María, mi nombre es Gabriel y no debes asustarte tanto
porque te visito, pues vengo a decirte que tú eres la escogida de Dios para algo muy
grande y algo muy importante. Es muy especial lo que vengo a decirte».
« ¿Qué dices?»," preguntó María con miedo, pues no sabía de qué hablaba
Gabriel. «Que no te de miedo», dijo el ángel Gabriel. Vengo a decirte que Dios te ha
escogido para ser la madre del Salvador del mundo. El nombre del niño que vas a tener
será Jesús y el será santo, especial, el propio Hijo de Dios y quitará el sufrimiento del
pueblo de Israel. El será el rey».
Cuando María oyó esto dijo, «Acepto hacerlo que me pide Dios. Estoy lista para
recibir a Jesús el Salvador del mundo». El ángel Gabriel se fue y María se quedó en su
casa contenta por la noticia de la visita tan especial que iba a recibir. Unas pocas semanas
después decidió visitar a su prima Isabel.
Isabel esperaba a su hijo Juan (el Bautista) que iba a nacer en esos días. Cuando
María entró a la casa de Isabel y la saludó, el niño se movió en el vientre de Isabel. Ella
quedó llena del Espíritu Santo y muy gozosa.
Entonces llena de alegría y en voz muy fuerte dijo a María, «Prima, Dios te quiere
mucho y te ha dado mucha alegría, más gozo que a todas las mujeres. También ha
bendecido al hijo que vas a tener. ¡Y qué dicha que venga a visitarme la madre de mi
Dios!. Sé que eres especial porque en el momento en que me saludaste el hijo que llevo
en la matriz se movió de alegría en mi vientre. Feliz seas, prima María, porque has creído
todo lo que dijo el ángel».
Entonces, María cantó con alegría, «Mi alma y todo lo que soy alaba al gran Dios
y que me llene de alegría en Dios mi salvador, pues Él se ha fijado en mí, una muchacha
sencilla. Ha hecho que todos me llamen dichosa desde ahora en adelante. Porque ha
hecho grandes cosas en mí, santo y bendito sea su nombre».
María, y su prima Isabel estaban contentas de saber que Jesús iba a venir al mundo y
listos para recibirlo. En este cuarto domingo de Adviento todos nos prepararemos para
recibir a Jesús con alegría y con agradecimiento, así como lo hicieron ellos.
Preparémonos para dar nuestro amor a otros, para que ellos también sean felices y juntos
estemos listos para servir a nuestro Dios.
Evaluación: Al finalizar esta lección el alumno será capaz de responder a las siguientes
preguntas:
• ¿Cuáles son los nombres de. los personajes de esta lección?
• ¿Cómo sabemos que María estaba preparada para recibir a Jesús? –
• ¿Cuál fue su respuesta al ángel Gabriel?
• ¿Cómo sabemos que su prima Isabel estaba contenta de la venida Jesús?
• ¿Cómo demostró su alegría el niño Juan, que aún no había nacido?
• ¿Cómo podemos saber si tú y yo estamos preparados para recibir a Jesús?
• Lea detenidamente el <Magníficat> . Lea varias veces: permita que lo lea una
niña. Repita y dígales que lo escuchan atentamente. ¿Qué sienten al escucharlo?
¿Qué sienten las niñas al leerlo? Pregunte: ¿Qué sentirías si tu hubieses sido
María?
Ciclo C – pequeños
Cuarto Domingo de Adviento
Sesión # 4
CÁPSULA ANGLICANA
EL MAGNIFICAT
Se conoce como el Magníficat la oración de alabanza y de gozo que hizo María cuando su
prima Isabel le dice que era “bendita entre todas las mujeres y bendito el fruto de tu vientre”.
Isabel le confirma a su prima María lo que el ángel le había dicho. María aceptó la Voluntad de
su Padre Celestial con gozo y pronuncia la alabanza conocida como el Magníficat. Como María
alabamos Dios, no para obtener algo, sino porque el Divino Ser nos inspira a alabarle. Como
María debemos dar gracias por todas las bendiciones de esta vida, por nuestra redención y por todo
lo que nos acerca más a él.
Ciclo C – pequeños
Cuarto Domingo de Adviento
Ciclo C – pequeños
Cuarto Domingo de Adviento
ACTIVIDAD DE REFLEXIÓN
Una de las características que describen a María, era su obediencia. El Magníficat
es un ejemplo de ello. Ella aceptó la Voluntad de Dios con alegría. Todos los cristianos
que amamos a nuestro Padre Celestial, aceptamos su Voluntad, porque él siempre quiere
lo mejor para nosotros. Él nos ama. La obediencia a las personas que nos aman y quieren
lo mejor para nosotros es importante, porque nos ayuda a crecer saludablemente. Eso no
significa que no puedas expresar tu sentir, cuando algo no te gusta. Pero la manera correcta
de hacerte sentir es hablando con respeto con la persona o con las personas que te piden
que hagas algo. Es importante que escuches las razones por las cuales debes obedecer las
reglas que te piden que realices. Vivimos en sociedad o sea con más personas, para vivir
en sana convivencia todos debemos seguir las reglas. Cada lugar donde vamos tiene unas
reglas. Pero también debes tener cuidado. No todos hacen las cosas bien.
Establece con tus compañeros las reglas de sana convivencia que todos deben seguir para
visitar la iglesia y compartir en la catequesis. ¿Cuántos estarían dispuestos a seguirlas?
¿Cómo podemos ser obedientes y recibir en nuestros corazones al niñito Jesús?
Ciclo C - Intermedios
Cuarto Domingo de Adviento
Sesión # 4
Tema: "Preparándonos como María para recibir a Jesús"
Objetivos: Identificar aspectos de nuestras vidas que debernos ir moldeando para recibir
a Jesús.
Referencias bíblicas:
• Salmo 80:1-7
• Miqueas 5:2-4
• Hebreos 10:5-10
• San Lucas 1:39-49(50-55)
Pre - actividades sugeridas:
• Completar el proyecto navideño.
• Hacer las preparaciones finales para la fiesta de Navidad.
Estrategia de enseñanza: Algunas sugerencias al estudiante.
• Cantar un himno o corito alusivo a la lección.
• Analizar la letra de este himno especialmente las estrofas 1, 3, 4 y 5.
• Nombrar elementos de nuestras vidas que Jesús viene a liberar según el himno de
arriba. Dar todas las respuestas posibles a la pregunta, ¿Qué nos indica que María
estaba preparada para recibir a Jesús?
• Leer la lección preparada para esta sesión o San Lucas 1:39-49.
• Leer el Magnificat y expresar que sienten al leerlo?
Libros:
• Biblia
• Himnario
• Libro de Oración Común
Ciclo C – Intermedios
Cuarto Domingo de Adviento
Sesión # 4
“PREPARANDONOS COMO MARIA PARA RECIBIR A JESUS"
San Lucas 1:3-49 (50-55)
Hoy es cuarto y último domingo de Adviento. Hemos llegado a la culminación de
la preparación para la venida de Jesús. Hoy veremos a la Virgen María y cómo respondió
ella cuando fue llamada a ser la madre de Jesús, el Salvador del mundo.
María era una muchacha joven y sencilla que vivía con sus padres en el pueblo de
Nazaret. María amaba a Dios y deseaba agradarlo.
Un día, mientras María estaba en casa, fue visitada por el ángel Gabriel quien la
saludó diciéndole, «María, Dios está contigo, le agrada tu manera de ser y tu deseo de
hacer lo que a él le da gusto,»
María se sorprendió ante la visita del ángel Gabriel y también le sorprendieron sus
palabras y se preguntó a sí misma por qué un ángel le decía esas palabras a ella.
Gabriel, el ángel le dijo, «No tengas miedo María. Dios está contigo y tú vas a
tener un hijo que le pondrán el nombre de Jesús. Él va a ser el Salvador del mundo».
María le dijo a Gabriel, «Yo no entiendo nada de lo que me dices porque ni tengo
marido». Gabriel le dijo, «El Espíritu Santo vendrá sobre ti. Por eso el niño será santo e
Hijo de Dios, para El no hay nada imposible».
Luego María contestó, «Yo soy la sierva del Señor, que El haga su voluntad en
mí». El ángel se fue y María quedó pensando en lo que le había dicho.
Pocos días más tarde, María decidió visitar a Isabel, su prima, en un pueblo
cercano. Isabel estaba embarazada de su único hijo Juan (conocido más .tarde como Juan
el Bautista). María estaba emocionada de que ella había sido escogida para algo tan
importante. Ella tan humilde, tan sencilla había sido llamada a hacer un trabajo tan
valioso.
Cuando Maña entró en la casa de su prima dijo alegremente, «Hola Isabel».
Cuando Isabel escuchó el saludo de María, el niño se movió en su vientre y ella quedó
llena del Espíritu Santo.
Entonces llena de alegría y con voz fuerte dijo, «María, prima mía. Dios te ha
bendecido más que a todas las mujeres. Eres la más feliz de todas. También ha bendecido
al hijo que espera.
Yo me siento dichosa porque tengo este gran honor que no merezco, pues nada
menos que la madre de mi Dios me viene a visitar». Entonces Isabel le platicó a María
cómo desde el momento que escuchó su voz la criatura se había movido en su vientre.»
Eres tan dichosa porque siempre creíste en la promesa de Dios y esa promesa se va
cumplir, porque tú serás la madre del Mesías».
María se puso aún más contenta al escuchar las palabras de su prima Isabel y dijo,
«Mi alma alaba al Señor porque es grande y mi Espíritu se alegra en Dios mi Salvador,
porque se ha fijado en una muchacha sencilla. Estoy dispuesta a hacer lo que él pide. Por
eso desde ahora todos me llamarán dichosa. Pues él tiene todo poder y ha hecho en mi
grandes cosas. Santo es su nombre».
María estaba alegre de haber aceptado con gusto lo que Dios había pedido de ella.
Se sentía feliz de hacer lo que agradaba a Dios, aun cuando no entendía bien qué
problemas le iba a causar.
Eso es lo que quiere Dios de nosotros. No le interesa sacrificio ni ofrendas. Lo
que quiere de nosotros es que estemos dispuestos a hacer su voluntad en todos los
momentos de nuestra vida. Solo si le ofrecemos nuestra voluntad El podrá hacer lo que
quiere por medio de nuestras manos, nuestra boca y nuestros pies.
Sólo cuando hacemos esto estaremos preparados para recibir a Jesús cuando
venga en Navidad. Ojalá así lo hagamos.
Tarea: Buscar el canto de María página 54 del Libro de Oración Común. ¿Qué tiene este
canto? Escríbelo.
Evaluación: Al finalizar esta sesión el estudiante será capaz de responder a las siguientes
preguntas:
• ¿Cuál es la preparación que debemos tener para recibir a Jesús?
• ¿Cómo sabemos que María estaba preparada para recibir a Jesús? –
• ¿Qué es lo más importante en la preparación para recibir a Jesús?
• ¿Qué canto salió del corazón de María cuando fue llamada por Dios para ser la
madre de Jesús?
• ¿Qué nombre recibe ese canto en el Libro de Oración Común?
• ¿Qué sientes cuando escuchas este cántico y que piensas del compromiso que hizo
María.?
Ciclo C- Intermedios
Cuarto Domingo de Adviento
Sesión # 4
CÁPSULA ANGLICANA
EL MAGNIFICAT
Se conoce como el Magníficat la oración de alabanza y de gozo que hizo María cuando su
prima Isabel le dice que era “bendita entre todas las mujeres y bendito el fruto de tu vientre”.
Isabel le confirma a su prima María lo que el ángel le había dicho. María aceptó la Voluntad de
su Padre Celestial con gozo y pronuncia la alabanza conocida como el Magníficat. Como María
alabamos Dios, no para obtener algo, sino porque el Divino Ser nos inspira a alabarle. Como
María debemos dar gracias por todas las bendiciones de esta vida, por nuestra redención y por todo
lo que nos acerca más a él.
Ciclo C- Intermedios
Cuarto Domingo de Adviento
Ciclo C- Intermedios
Cuarto Domingo de Adviento
ACTIVIDAD DE REFLEXIÓN
Una de las características que describen a María, era su obediencia. El Magníficat
es un ejemplo de ello. Ella aceptó la Voluntad de Dios con alegría. Todos los cristianos
que amamos a nuestro Padre Celestial, aceptamos su Voluntad, porque el siempre quiere
lo mejor para nosotros. El no ama. La obediencia a las personas que nos aman y quieren lo
mejor para nosotros es importante, porque nos ayuda a crecer saludablemente. Eso no
significa que no puedas expresar tu sentir, cuando algo no te gusta. Pero a manera correcta
de hacerte sentir es hablando con respeto con la persona o con las personas que te piden
que hagas algo. Es importante que escuches las razones por las cuales debes obedecer las
reglas que te piden que realices. Vivimos en sociedad o sea con más personas, para vivir
en sana convivencia todos debemos seguir las reglas. Cada lugar donde vamos tiene unas
reglas.
Establece con tus compañeros las reglas de sana convivencia que todos deben
seguir para visitar la iglesia y compartir en la catequesis. ¿Cuántos estarían dispuestos a
seguirlas? ¿Cómo podemos ser obedientes y recibir en nuestros corazones al niñito Jesús?
Ciclo C – Mayores
Cuarto Domingo de Adviento
Sesión # 4
Tema: "Dispuestos a recibir a Jesús"
Objetivo: Señalar elementos que indican madurez en la fe y pedir a Dios que nos de
madurez espiritual.
Referencias Bíblicas:
• Salmo 80:1-7
• Miqueas 5:2-4
• Hebreos 10:5-10
• San Lucas 1:39-49(50-55)
Pre-Actividades Sugeridas: Completar el proyecto de Navidad.
Estrategias de Enseñanza: Algunas sugerencias al estudiante.
• Cantar algún himno relacionado con la lectura o estación.
• Hacer un breve repaso de las tres lecciones anteriores.
• Leer la colecta del día y cada persona diga o piense por un momento de qué tiene
que purificar su conciencia.
• Compartir lo que se sabe de la vida de María.
• Leer la lección preparada para la sesión o San Lucas y Hebreos citados arriba.
• Hacer una dramatización de la lección.
• Leer el Magníficat y expresa que sientes al escucharlo y qué piensas del
compromiso de María?
Libros:
• Biblia
• Himnario
• Libro de Oración Común .
Ciclo C - Mayores
Cuarto Domingo de Adviento
Sesión # 4
DISPUESTOS A RECIBIR A JESUS
San Lucas 1:39-49
Hebreos 10:5-10
Se acerca una de las fiestas más celebradas en el mundo la Navidad. Este
domingo es el último domingo antes de la celebración de esa gran fiesta. El mundo
celebra la Navidad de una manera diferente a la Iglesia cristiana, porque el significado es
diferente para unos y para otros.
La Iglesia Episcopal observa la estación de Adviento que dura cuatro semanas y
son los cuatro domingos antes de la Navidad. Esta estación es una época que la Iglesia
aprovecha para la preparación espiritual con el fin de estar listo para recibir a Jesús en
nuestros corazones en la fiesta de Navidad, a la vez que nos preparamos para su segunda
venida en gloria. Durante esta estación vimos la importancia de la preparación, cómo
Juan ayuda a preparar a las personas para recibir y conocer a Jesús. Hoy veremos el
ejemplo de madurez espiritual de María como un modelo para nuestras vidas.
Como probablemente ya saben, María era una jovencita del pueblo de Nazaret.
Ella trataba de vivir de acuerdo a la voluntad de Dios. Ella estaba comprometida con un
hombre llamado José y pensaban casarse en un futuro no muy lejano.
Un día María fue visitada por el ángel Gabriel, quien después de saludarla le dijo
que iba a tener un hijo, un niño especial. Este niño iba a ser el mismo Hijo de Dios o el
Mesías que tanto había esperado el pueblo de Israel.
Desde luego María se sorprendió ante la visita y ante la noticia. Ella le pidió al
ángel Gabriel que le explicara cómo iba a ser la madre de un niño cuando nunca había
vivido con un hombre. El ángel le explico que Dios, para quien nada es imposible, iba a
hacer el milagro de que concibiera su hijo por medio del Espíritu Santo. También le dijo
que su prima Isabel, que ya era una mujer vieja, estaba esperando su primer hijo por
milagro y gracia de Dios.
María no entendía todo lo que le había dicho el ángel, pero confiaba en Dios y le
entregó su corazón, su voluntad y su vida entera. Ella estaba preparada para la misión que
se le había encomendado; estaba preparada para ser el instrumento por el cual la
salvación de Israel se hiciera posible y también la salvación del mundo entero. María no
permitió que el qué dirán afectara su respuesta a Dios.
La respuesta de María fue un «sí» seguro y afirmamos esto cuando escuchamos
las palabras con que respondió al ángel Gabriel, «Yo soy sierva del Señor, que Dios haga
conmigo como me has dicho».
Pocos días después, María que no se contenía de la alegría, decidió hacerle una
visita. a su prima Isabel que vivía en otro pueblo, en otra regían (Judea) del país de
Palestina. Llegó a casa de su prima y la saludó. En el momento en que Isabel escuchó la
voz de María el niño que esperaba se movió en su matriz y ella quedó llena del Espíritu
Santo. María le platicó todo lo ocurrido a su prima Isabel y todo lo que el ángel Gabriel le
había platicado.
Isabel llena del Espíritu Santo de Dios, rebosante de alegría dijo a su prima María
en voz fuerte, «Dios te ha bendecido, prima mía. Te ha bendecido más que a ninguna otra
mujer en el mundo y ha bendecido a tu hijo. Que dicha siento y me pregunto quién soy yo
para que venga a visitarme la madre de mi Señor». Isabel continuó diciéndole a María,
«Fíjate que desde el momento en que escuchó tu voz en el saludo, mi hijo se movió de
alegría en mi vientre. Que dichosa eres tú, María. Dichosa tú por haber creído que han de
cumplirse las cosas que el Señor te ha dicho».
Entonces salió del gozoso corazón de María el canto que sus labios pronunciaron así:
Mi alma alaba la grandeza del Señor
Mi Espíritu se alegra en Dios mi Salvador
Porque se ha fijado en mí, una mujer humilde y
Desde ahora siempre me llamarán dichosa,
Porque mi Dios, el Todopoderoso ha hecho en mí
grandes cosas, santo es su nombre.
María no sólo aceptó la voluntad de Dios, sino que se gozó en que Dios la había
escogido para su obra. Aún con tan corta edad, María era madura espiritualmente. Aceptó
la voluntad de Dios, no sólo sin titubeo, sino con alegría y con agradecimiento.
Dios no nos pide sacrificios y ofrendas aunque sean cosas buenas y la iglesia las
recomienda. Lo que Dios pide va un poco más allá. Pide de nosotros que digamos como
el salmista, lo mismo que Jesús, su Hijo y Salvador del mundo cuando se ofreció en la
cruz, «A qué vengo para hacer tu voluntad».
Si hemos de estar dispuestos a recibir a Jesús en nuestro corazón en esta Navidad
y recibirlo en su segunda venida en gloria eso quiere decir que hemos respondido a Dios
como el salmista, como María y como Jesús mismo. «A qué estoy para hacer tu voluntad
oh Dios».
Evaluación: Al finalizar esta sesión el estudiante será capaz de responder a las
siguientes preguntas:
• ¿Qué es madurez espiritual?
• ¿Cómo demostró María esta madurez?
• ¿Cómo sabemos que María estaba llena del Espíritu Santo?
• ¿Cuál fue la respuesta de María?. ¿Lo tomó como compromiso?
Ciclo C - Mayores
Cuarto Domingo de Adviento
Sesión # 4
CÁPSULA ANGLICANA
EL MAGNIFICAT
Se conoce como el Magníficat la oración de alabanza y de gozo que hizo María cuando su
prima Isabel le dice que era “bendita entre todas las mujeres y bendito el fruto de tu vientre”.
Isabel le confirma a su prima María lo que el ángel le había dicho. María aceptó la Voluntad de
su Padre Celestial con gozo y pronuncia la alabanza conocida como el Magníficat. Como María
alabamos Dios, no para obtener algo, sino porque el Divino Ser nos inspira a alabarle. Como
María debemos dar gracias por todas las bendiciones de esta vida, por nuestra redención y por todo
lo que nos acerca más a él.
Ciclo C - Jóvenes y Adultos
Cuarto Domingo de Adviento
Sesión # 4
Tema: "Preparados para responder corno María"
Objetivo: Aumentar la madurez espiritual.
Referencias Bíblicas:
• Salmo 80:1-7
• Miqueas 5:2-4
• Hebreos 10:5-10
• San Lucas 1:39-49 (50-55)
Base Doctrinal:
• Bosquejo de la fe, catecismo, la naturaleza humana.
(Página 705, Libro de Oración Común)
Actividades Sugeridas: Hacer un breve repaso de las lecciones anteriores.
• Cantar el himno o corito de la estación.
• Analizar el titulo o tema de la lección.
• Leer Hebreos 10:5-10, San Lucas 1:39-49 (50-56).
• Reflexionar sobre la respuesta de María.
• Identificar el corito de María en el Libro de Oración Común.
• Leer la colecta para el cuarto domingo de Adviento.
• Orar para pedir la ayuda de Dios en la tarea de hoy.
• Reflexionar sobre su respuesta a Dios.
• Analizar su madurez espiritual.
• Buscar medios y/o maneras de aumentar la madurez espiritual y compartir unas
ideas con toda la clase.
• Formar grupos de apoyo (Oración) para la búsqueda de la madurez espiritual.
Ciclo C - Jóvenes y Adultos
Cuarto Domingo de Adviento
Sesión # 4
CÁPSULA ANGLICANA
EL MAGNIFICAT
Se conoce como el Magníficat la oración de alabanza y de gozo que hizo María cuando su
prima Isabel le dice que era “bendita entre todas las mujeres y bendito el fruto de tu vientre” Isabel
le confirma a su prima María lo que el ángel le había dicho. María aceptó la Voluntad de su Padre
Celestial con gozo y pronuncia la alabanza conocida como el Magníficat. Como María alabamos
Dios no para obtener algo, sino porque el Divino Ser nos inspira a alabarle. Como María debemos
dar gracias por todas las bendiciones de esta vida, por nuestra redención y por todo lo que nos
acerca mas a él.