29 – IX- 2013 – celebración arciprestal del año de la fe

EN LA PUERTA DEL TEMPLO

Caio: Nuestra vida, como nuestra fe, se va haciendo poco a poco. Hemos sido convocados como arciprestazgo del Barco de Valdeorras para celebrar nuestra fe.

Edi: y comenzamos en esta puerta porque nuestra incorporación a la Iglesia supuso cruzar el umbral de una puerta para formar parte de la comunidad de seguidores de Jesús.

Selene: Cruzar la puerta de la fe nos introduce en la comunión con Dios, pero no nos da la fe para siempre; supone emprender un camino que dura toda la vida.

Brais: Atravesemos esta puerta recordando que somos invitados por el Señor a vivir nuestra existencia con un corazón que busca el encuentro con Jesús, que busca una vida de fe auténtica.

PROCESIÓN y Canto de entrada:

Obispo: En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo…

PRESENTACIÓN DE LOS AGENTES PASTORALES

Religiosas y Miembros de institutos seculares Catequistas Animadores litúrgicos Voluntarios de Cáritas y Manos Unidas Agentes de pastoral de la salud Miembros de coros Miembros de cofradías Miembros de movimientos Consejos pastorales Catecúmenos Sacerdotes

Escuchamos la Palabra de Dios

caio: Desde la fe, reunidos en comunidad, vamos a escuchar la Palabra de Dios. Esa palabra que nos habla al corazón.

Edi: Es una invitación a escuchar a Jesús, que nos propone creer en Él y extraer el agua viva que mana de su fuente.

Sacerdote: Lectura del Evangelio según San Juan (4, 4-26)

Narrador: Jesús llegó a un pueblo de Samaría llamado Sicar, cerca del terreno que Jacob dio a su hijo José. Jesús, cansado del camino, se sentó junto al pozo de Jacob. Era mediodía. Una mujer de Samaría llegó a sacar agua. Jesús le dice:

Sacerdote: Dame de beber.

Narrador: Los discípulos habían ido al pueblo a comprar comida… Le responde la samaritana:

Samaritana: ¡Cómo! ¿Tú, que eres judío, me pides de beber a mí, que soy samaritana? Los judíos no se tratan con los samaritanos.

Narrador: Jesús le contestó:

Sacerdote: Si conocieras el don de Dios y quién es el que te pide de beber, tú le pedirías a él, y él te daría agua viva.

Narrador: Contestó la mujer:

Samaritana: no tienes con qué sacar el agua y el pozo es profundo, ¿dónde vas a conseguir agua viva? ¿acaso eres más poderoso que nuestro padre Jacob, que nos dio este pozo, del que bebían él, sus hijos y sus rebaños?

Narrador: Le contestó Jesús:

Sacerdote: El que bebe de esta agua vuelve a tener sed; quien beba del agua que yo le daré no tendrá sed jamás, porque el agua que le daré se convertirá dentro de él en manantial que brota dando vida eterna.

Narrador: Le dice la mujer:

Samaritana: Señor, dame de esa agua para que no tenga más sed.

Narrador: Le dice Jesús:

Sacerdote: llama a tu marido y vuelve.

Narrador: Le contestó la mujer:

Samaritana: No tengo marido.

Narrador: Le dice Jesús:

Sacerdote: Tienes razón porque has tenido cinco hombres, y el que tienes ahora tampoco es tu marido. En eso has dicho la verdad.

Narrador: Le dice la mujer:

Samaritana: Señor, veo que eres profeta. Nuestros padres daban culto en este monte; vosotros en cambio decís que es en Jerusalén donde hay que dar culto.

Narrador: Le dice Jesús:

Sacerdote: Créeme, mujer, llega la hora en que ni en este monte ni en Jerusalén se dará culto al Padre. Vosotros dais culto a lo que no conocéis, nosotros damos culto a lo que conocemos; porque la salvación procede de los judíos. Pero llega la hora, ya ha llegado, en que los que dan culto auténtico adorarán al Padre en espíritu y en verdad. Porque esos son los adoradores que busca el Padre. Dios es Espíritu y los que lo adoran deben hacerlo en espíritu y verdad.

Narrador: Le dice la mujer:

Samaritana: Sé que vendrá el Mesías, el Cristo. Cuando él venga, nos lo explicará todo.

Narrador: Jesús le dice:

Sacerdote: – Yo soy, el que habla contigo.

Palabra del Señor.

Exposición del Santísimo

Canto: en momentos así

Selene: Después de un momento de silencio para interiorizar la Palabra de Dios, siete niños se acercan a la Biblia.

Brais: Recogen nuestras oraciones y elevan a Dios una súplica confiada. Contestamos: TE DAMOS GRACIAS, SEÑOR

Lector 1: Gracias, Señor, por el regalo de la vida; ayúdanos a defenderla, amarla, cuidarla y respetarla.

Lector 2: Gracias, Señor, por reunirnos en comunidad de fe. Que la Iglesia viva movida por un auténtico amor a Ti y a los hermanos.

Lector 3: Gracias, Señor, por el regalo de la fe. Ayúdanos a vivir desde la fe y con la confianza puesta siempre en Ti.

Lector 4: Gracias, Señor, por el regalo de tu Palabra. Que nos acerquemos a este pozo del que brota tu mensaje de amor y paz.

Lector 5: Gracias, Señor, por las personas que pones en el camino de nuestra vida. Que sepamos responder con amor a su presencia.

Lector 6: Gracias, Señor, por el inmenso regalo de los sacramentos. Que experimentemos por ellos tu presencia amorosa de Padre.

Lector 7: Gracias, Señor, por la familia que nos ha enseñado a experimentar tu amor y a vivir los valores del evangelio.

Caio: Después de presentar las oraciones, se reparten velas a varios participantes, con un papelito que dice “Tú eres sal y luz”.

Edi: Se encienden desde una principal situada junto a la Biblia, y quienes las portan rodean el altar para adorar al Santísimo.

Danza de adoración al Santísimo

RENOVACIÓN DE LAS PROMESAS BAUTISMALES

Celebrante: en nuestro Bautismo, nuestros padres y padrinos renunciaron en nuestro nombre al mal.

Obispo: ¿Estáis dispuestos a perseverar en esa renuncia?

Todos: Sí, estoy dispuesto.

Celebrante: y manifestaron la fe en Dios, Padre creador, en su Hijo Jesucristo, nacido de María, muerto, resucitado y sentado a la derecha de Dios, y en el Espíritu Santo, que vive en la Iglesia.

Obispo: ¿Os reafirmáis en esa fe?

Todos: Sí, me reafirmo.

Obispo: Confesemos hoy como ayer nuestra fe.

Todos: Creo en Dios Padre todopoderoso,Creador del cielo y de la tierra.Creo en Jesucristo,su único Hijo, nuestro Señor;que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo,nació de María Virgen;padeció bajo el poder de Poncio Pilato,fue crucificado, muerto y sepultado;descendió a los infiernos,al tercer día resucitó de entre los muertos;subió a los cielos y está sentado a la Diestra de Dios Padre;desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos.Creo en el Espíritu Santo;la santa iglesia católica,la comunión de los santos;el perdón de los pecados;la resurrección de los muertos;y la vida eterna. Amén.

Obispo: Señor que nos quieres santos y nos lavaste en las aguas del bautismo, purifícanos con tu gracia. Por Jesucristo nuestro Señor.

ASPERSIÓN Y CANTO: Una nueva vidaGUARDAR EL SANTÍSIMO

Proyección: la fe de la Iglesia católica que peregrina en el arciprestazgo del Barco de Valdeorras Obispo:

- La Iglesia instituida por Cristo y animada por el Espíritu Santo, vive para evangelizar: su finalidad es transmitir con las palabras y las obras los valores del evangelio.

- Nuestra Diócesis de Astorga ha iniciado el año pasado un nuevo plan pastoral con el objetivo general: ser testigos alegres de la fe en Jesucristo en el mundo de hoy.

- Os invito y animo a todos los cristianos de este arciprestazgo del Barco de Valdeorras a implicaros activamente en este nuevo curso pastoral que iniciamos con esta celebración.

- Los sacerdotes y los consejos pastorales parroquiales y arciprestal han subrayado en sus líneas de actuación para este año la formación, especialmente con dos acciones concretas: el estudio y reflexión de la Doctrina Social de la Iglesia, y la lectura creyente de la Biblia. Corresponded con generosidad.

Oración final: Te pedimos, Señor, con renovada confianza y esperanza firme, que los que hemos participado de esta celebración, confesemos la fe con plenitud para que nuestro testimonio de vida como creyentes sea cada vez más creíble ante todos los que entren en contacto con nosotros en nuestros lugares de trabajo, en nuestras familias, en nuestros lugares cotidianos.

Canto final:

Obispo: el Señor esté con vosotrosObispo: y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo, esté con vosotros.

Celebrante: Id, pues y sed testigos alegres de la fe en Jesucristo en el mundo de hoy. Podéis ir en paz.