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:15FICHA ARTISTICA Y TECNICA

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@ otREcctoNJUAN cAFLos PÉREz DE LAFUENTEvEFsróN

coMPostctÓN MUstca|.

COBEOGRAF¡A

JUAN CAFLOS SANTAi¡ABIA

EscENocFAFíaLLOFENQ COFBELLAVESTUAFIO

lLUMtNActóN

soNlDoEDUARDO VASCOMAQUIILAJE

AYUDANTE DE DIFECCIONMARIANO DE PACO SERRANOAYUOANÍE DE DIBECCTON

aststENfE a LA DtFEcctóNJAI¡\¡E fVOFATEaYUDANfE DE GoFEoGBAFiaJOSE ANTONIOAFFOYOAYUDÁNIE DE ESCENOGBAFIA

MONTSE GABDEAYUDAN'E DE ILUMINACIONLUIS SEGURA^sEsoR Musrc^L

AYUOANTE DE COMPOSICIÓN MUSICAL

[4 IGUEL FU Z

DIRECÍORA DE COROS

ANA PEREZPFODUCCION

FEALtzactóN EscENocFAFiaATECONSABAYNTONTRADEMAAMBIENTACIONGEFAFDOfFOffPANEL DE EstactóNscANDAVrs óNVEMISAREAITZACION VESTUAFIO

CORNEJOU'ILERIACASfELLSEFE.XI\4ATEOSPec LúDtca

vÁzouEzEoutPo DE ulLERiA DEL cDNBEALIZACIóN MÁSCARAJAV]EB MAÑEBOFEALtzactóN PANfEFA

REALtzactóN PELucasVDA DE FIUIZREALrzacróN DE víDEoCARLOS MUGUIROFODAJE SPOTDFAFÍ WOFILO WIDEGRAAACIO¡I MUSICALKYRIOS

srNcFoNiaFOTOGRAFIAScHtcHo

CENfBO DFAMAfICO NAC ONAL

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ACTOR

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i 3

PERSONAJE

fos vtst¡aNfEsCLAIRE ZACHANASSIANEL I\¡AYOFIDOMO (BOBY)

MARIOO VI I (MOBY)MARIDO V] I (HOBY)

MARIDO X (ZOBY)

JEFE DE POFTEADORESPOFTEADOF ] (LOBY)PORTEADOF 2 ITOBY)PORTEADOR 3 (GOBY)

POBTEADOR 4 (SOBY)

KOBYLOBY

[¡ús co

CAMARERO 6

ACTOB

¡¡AF¡aJEsús vALDÉs

ROOFTGO POTSON

JosÉ LUrs sANTosD ONISIO SALAMANCA

JosÉ MAFTAGAMBiNLOFENZO ABEA

PAco cELDFÁNDAN IEL ALBALADEJOFERNANDO GILGOFGON O EDUViCTOR NAVABFETET¡ANUELAGU LAR

IGNACIO ALONSOAOBEBTO NOGUEFAN4IGUEL DELAMAKAROL SLAWO¡/ IF WISNIEWSKIJORGE ALLENDE

PEñSONA!'E

ros vtsrfaDos

S¡.J MUJEB (IVAT LOE)su |-IJAsrl HrJoELALCALDESU MUJEB (ANITA)

E L C U F AEL MAESTROEL MÉorcoELJEFE DE POLICiACIUDADANO IC¡UDADANO 2

CiUDADANO 3

N4UJEB ]¡'1UJEB 2AYUOANÍE 1BOÍ\4BEFO 1BO¡'IBEBO 2/AYUDANTE 2I\¡ALETEFOLos DEMÁSCONDUCTOB DE TRENNSPECfOR DE HACIENDALOS IMPOFTUNOSESTRELLAPEFIODISTA 1PEFIODIST¡JAYUDANTE DE CÁMAFA 1PEFIODISf¡JAYUDANTE DE CÁMAFA 2PEFIODISÍ¡JIVAQUILLADOBPEFIOD!ST¡JPELUQUEFO

JUAN JOSE OTEGUI

vtcfoFta RoDRícuEzESPEFIANZA CAM PUZANODANIEL FOIvIÁNHECfOF COLOME

PEPE V YUELAJoAouiN NorABtoGABF]EL I\¡OFENOJOSE NAVAFJOSE MONfESINOS

JosE vrcENTE Mo BóN

DAVTD sÁNcHEzrr,lAFlCO AURELIO GONZALEZROSACASUSO

ROBEBTO NOGUERA¡,1GI]EL DEL AMAKAFOL S WISN EWSKIALBEBfO PEFEZ

ROBERTO NOGUERA

CABLOS MONfALVO

SUSISANCHEZN¡ANUELAGUILAFI

GNACIOALONSO

ROBEFTO NOGUEBAFFAN FEBNÁNDEZKAROL S WISN EWSKIM GUEL OELAMA

JORGEALLENDE

EL GOFO

MIGUEL ÁNGELGAI\¡EFIO

Mi CAFIMEN LLAN LLO

c¡nLos vó¡.¡r¡rvoDANIEL BOMÁN

CARLOS SEGUI

LA EANDAJOSE LU S DELCEFFO (TUBA)

BEATFIIZ DELGADO (FLAUTA)

JOSE RAMON GABCIA (OBOE)

ANNE LANoA{AcoFDEóN)JUAN JosÉ oRTi (PERcus óN)JUAN TAMAYO {SAXO)

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4 LA ALEGORíA'M¡ pasión, na siempre afo¡1u-nada, es el representar en elteatro la iqueza y mun¡pl¡cidaddel nundo. Asi, niteatro resul-ta a nenudo nultívoco y parc-ce confund¡r. Se cuelan tan-bién ñalentend¡dos en cuantose ntenla desespeedarnenteencontrar en el gall¡nerc de nisdtañas el hueva de la explica-cton, que se supone me obsfl-

"El escenario no rcpresentapan m¡ ün campa oe reanas,larnulac¡anes y concepcionesdel mun.lo. s¡no un instrumen-ta cuyas pos¡b¡l¡dades prccuraegar a canocer tañéndo|o.

NaluQlrnenle, en m¡s obesaqarccen tambtén personajesque tienen una concepc¡ón delmundo o una ¡e: no me rcsulla¡ntetesante sacar a escenapurcs tonlos. La obra no está alservtc¡o de unas fornulac¡o-nes, s¡na que éslas están enn¡ tealro, potque en él semanelan seres humanos, y elpensamenlo, Ia le ¡ncluso unpoquito la f¡losofía, petlenecenen pañe a la natunleza huma-

SATiRICA DE DÜRRENMATT

as dos c¡tas anle¡¡oresson de libro Problémásdel leatrc, una obra leót -

1955. En e as se aprecia ya!ña de las caraclerísticas másgeneralmenle ap cable a todasu obra, como es la utilizaciónde lo paradójico y conlrad¡cto,Ío para poner eñ escena unarepresenlación del mundo,enlendido ésle como un uni-verso caótico donde lo naturalse ha convert¡do en excepc¡o-nal y lo exlravagante apenasllama a álención. Por eso, afir-ma qlre para interpretar susobras hay que hu¡f de blscaren ellas senlidos profundos,enseñanzas morales o pri¡c-

A pesar de eslo, no sonpocos os cfÍt¡cos que, comoWe walh, definen los dramasde Dürrenmall como "lanlasías

de las qre se desprende unarno€leja , aunque, dado que laofienlación d¡ar¡ática seencuenlra actualrnente bienlejos del didaclismo o delreatrosocial, elpropio dfamatufgo sen¡egue a admiliro. En cual-qurer caso, el autor ¡ns¡ste enque ¡o le rmporta la moralejaconcleta que pueda efraersede sus obras, si es que eiecl -vamente puede sacaGe átguna. y que es el especladof elque puede seleccionar de lodolo v¡slo en la escena aquelloque e parezca Inrefesante,

también, por qué no, alguna

Friedich Dürrenr¡atl naceen un pequeño pueblo s!zo,Konoifingen, en 1921. Sus pri-meros esludios, influ¡do por supadre, paslor p¡olestante, lue-rcñ de fiosolia y teologia.Comienza a escrlbir en 1943,e¡ un amb¡enle lueriemenlemarcado por la SegundaGuera l\,,lundial: a pesar de lano bel¡gerancia suiza en econll¡cto, es evideñle que no leresultó nada láci al jovenDrlrrenmatt conocer otra obradranrálica que a que entoncesse escrbra en la Alemania

Rónuto el Grande 11949)sera s! pnmera gran obfa.Antes habia compuesto Estáescrio, sobre los anabaptistas,que causo un veroaoefoescándao por llevar hasla lasú llmas consecuencias la para,dola cr¡sl¡ana de que 'los ú I,mos serán os primeros"i y E/.legó, la histo¡ia de un hombreque vive en mitad de un mundoen rurnas qle é cree ¡nlacto.Pero ¡especlo a esias dosobras, pese a que ya apuntanalgo de la dGmalurg¡a dúrren-...atttana. Rónula el Grandesupone un canrbo hac¡a lo queca que escribio Dürenmall en

sera el reslo de a produccónoe esre auror. pL¡es e¡sayaaq!r una lórmula comica pa¡adójica e trónica. emparenladacon ¡a comed¡a de Aristólanesque e permr¡e repfese¡tar ena escena la compleldacl delmundo. o cual como v¡f¡oses una de as pr nc¡pales preo-cupacrones rormares deDrlr.enr¡all Las dos obrasanlerores efan lraged¡as, peroe¡ esle genefo de la comed adramal¡ca que inaLrg!ra co¡Bónuló el Gtande seá en eque escr ba sus mejores y más

El propio Drlrenr¡all califi-caba sus obras de cornedasgrolescas: La lragedia pfesu,pone c! pa, pe¡ura, mesura,vsOn de conjunto, responsabildad. En a chapucer ia denuestro s¡gro, en esta liquidac¡ón de a raza blanca, ya ¡ohay cu pables ni lampoco res-Ponsables. Nad e plrede remedraro y ¡ad¡e lo lra querido Escie.lo que lodo funcona perIeclamenle s¡n ¡adie. Todo esarraslrado y queda enganchaclo de cualquier rast r i lo .Somos cu pab es coecl ¡va-menle, eslamos coleclivamen,le e¡lerados en los pecadosde nueslros padres y antece,sores. No somos más que hijosde hlos Eslo es nuestra malasuerle, no nueslla culpa:culpaexisle ya sólocorno rea zac¡óni¡dividual, como acción rcligio-sa. Sólo nos co¡fesponde ya lacomedia. Nuesfo mundo hacoñduc¡do a lo groiesco comoha llevado a la bomba atómica.de la misma lorma que los cua-dros apocalÍpticos de Hiero-nimls Bosch lambién son gro-tescos. Pero lo grolesco essolamenle una expres¡ón sen-s!al, una paradola sensla, lalorma de una delormidad, elrosiro de !n mundo s¡n rosiro,y de la misma manera quenueslfo pensam¡enlo pafeceno poder funcionar s n el con-ceplo de paradoja, tampoco opuede hacer el arle, o nueslromundo, ya que sólo o(isle por

que exsle a bomba alómica:por miedo ante e lalPnbtenas del teatra 1955)

Este lipo de cor¡edia trági-ca y Paradólca l¡ene. comoveiamos. su pimer exponenleen a obra de Dürenmatl enRónuto el Gnnde. ob? er aque Rómulo Augusto. el últ¡rnoemperador ronrano aparentaser t]n necio nlant ocupadoexclusvamente e¡ la cr ia degallinas;c aro que. r¡lerpretan-do ese Papel de neco, consigue savaf su munoo y haslalos reslos del ¡mper¡o, rnen-kas que los poli|cos y orado-rcs que conliaban en salvar aa Palria con sus gÉndes geslos y su grand¡locuencia seránqu¡enes apa.ezcan conro los

Desp!és vendrán E/ matr¡mon¡a del señot l",liss¡ss¡pp¡

11952) y Un ánget ttega aAabllorla (1954). En ambasobras insisle Dr¡rrenmatt enesa vs¡on del mundo de laque oeslacan oos asuntosesenciales: los abom¡nablesresultados del poder absoluloy la omn presenc¡a de la r¡uer

te De hecho, eslos dos lemasseran ros p!n los cenl ra lessobre os qle g re loda la pfo-ducc¡ón del aulor . y p ledenenconrrafse como mo|voslunda¡¡enla les tanto en suobra dramátca como eñ suobra naralva. Evdentemenle, un mundo concebidodesde dos pres!puestossemelanles ¡o es. desdelLrego, el mejor de los mu¡dos

Hay que resalar que estaconcepción del mundo es engran medda hlja de su época:noolvrciemos que se fata de laobra de !n escr lor cenlroeuro-peo ñac¡do en el periodo deenlreguerras, que comte¡za aescr¡b¡r leniendo como referen-les h¡stóricos aconlec¡m¡entoslaes corno os horrores delnazismo, la segu¡da guer¡arn!ñdial o el lanzarnieñlo de lapr¡rnera bomba alóm¡ca. Perola respuesta de Dúrrenmafl noes cofno Ia de tealfo exisien-c¡al¡slade Sartre, o corno la delleatro del absurdo de Anaud,Beckell o lonesco, auioreslodos que e son rnás o menosconter¡poraneos. Como lodos

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j1 los escrilores clados, Dúren-matl está convenc¡do de quelos grandes problemas de lahumanidad son autént¡camen-te ¡rresolubes, pero se relug¡ade esto en una sarcásl¡cavisión de a vida, o que serefleja en sus obras eñ la ironÍa

Cómo lGspasa Drlrrenmatlesta lo¡ma de enlender emundo a sus obras drar¡álicases argo que pooemos compro-bar prec¡samenle iomandocomo ejemplo Los f,s,icos(1962), porque eL msrno autorha descrto en ve¡nl !n pLrntos laforma en que escribó a obra:

l. N¡ punto de partida es unah¡slor a, ¡o una tesis.2. Sielpunto de part ida es unah¡stor a, ésta debe desarollaFse hasla su conc usión lógca.3. La conc us¡ón lóg¡ca de unahstora se logra cuando losaconlecrmeñlos lonran el peor

4, El peor giro posibe de losacontecrrn enlos ño puede pre-verse. Se da como resultado

5. El arte del dÉmaiurgo con'sisle en su hablidad para inlro'ducir en el argumento el elemenlo casual, causando e elec-lo más sorprendeñle pos ble.6. Los agentes de un argu'

7. La casualidad en e argu-menlo equ¡va e a: quiénencuenlra a qu én por casualidad, y dónde y cuándo liene

8. Cuanlo mayo. es la preci-s¡ón con que los hornbres pla-nean sls acc¡ones, rnás sor-prendenle es el efecto de ver-los alectados pof a casuali

9. Los hombres qle planeansus acciones con precisión lohacen para lograr un lln espe-cilico. La cas!a idad l¡enesobre ellos el electo adversocuando, como resullado deella, legan al lin juslamenleopueslo al que habian planea'do: cuando oblienen prec sa

me¡te lo que temian y habianinlentado evitar con sus planes(ejemp o, Ed po).1O. Un afgumento de esle lpopuede ser grotesco, pero ño

I l. Es una paradota.12. Los dramalurgos no pue-den ev¡tar las paradojas, ¡gualqle ¡o as pueden evrtar loslóglcos.13. Los lís¡cos no pueden ev'tar las paradolas, igual que nolas pleden evilar os lógcos.14. Un drama para i is icos

15. No debe oclparse dellema de a lisica, sino sólo de

16. El lema de la lisca con-c¡erne a los lis cosisus efeclosnos conciernen a iodos.17. Lo que afecta a todos, sólopor lodos puede ser resueto.18. Cualquer intenlo de unapersona de resolver por sisolaun prooema que concrerne atodos está condenado a faca-

19. La real¡dad aparece en la

20, OLr en alronle la paradoja

21. El drarna puede persuad ra espectador a rechazar larea dad, pero no puede obLi-gare a oponerse a ella coñ lir-meza n¡ a conquislarla.

Como hemos podido ver,aLgunos de eslos punlos sefel|eren muy co¡c.elamenle aa obra de ¿os f/s,bos, peromuchos olros soñ aprcables aloda a obra de Düreñmatt, porcuanio resultan básicos a ahoÉ de enlender lanto la con-cepcón de mundo de esleautor como su concepc¡ón del

Enlre el ú timo draña quehabramos comentado, Unángel lega a Bab¡lon¡a, y Losts/cos, escribe Dúrenmatlentre olfas su obra más famo-sa. La visila de la v¡e¡a dana,que ana rzafemos a conln!a-cón. Para e reslo de su producc¡ón, cuantiosa y va ada

(obras dramálicas, realos,novelas -muchas de ellas poli-ciacas-, escrilos teóricos,ensayos lile€ios y lilosóficos,guiones para la radio y a tele-vis ión.. ) , remlmos a cuadrobiográfico que aparece en eapariado dedLcado al contexloh¡stórico, soc aly cullural, den-tro de las Actvidades de esleCLraderno Pedagógico.

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LA VISITA DE LA VIEJA DAMA

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a''Hace algunos añas. la esposade Dúrrennatt restdia. enler-ma en Berna: él v¡via enNeuchatel y lenía que hacercanslanles vtates entrc estasdas c¡udades. Alo largo deltñ-yeclo una hon- Dúrrenna¡tadv¡ñ¡ó que el táp¡do se dete-n¡a en algunas c¡udadespequeñas y no en attas naya-res, cano samet¡do a un plannistet¡aso. Pensó que entelas estac¡ones ahota alvida-das, algúnas qu¡zá habían teni-do en oko t¡eñpo el hanor deuna paada. ¿Qué deberiaacuÍÍ, se prcqunta. para queet tren volv¡eta a detenercealli? Haría lalta que algu¡enemplease la señal cle alarma.Perc. ¿quién se atreveria ahacerla par un mattva estnclamenle personal. estanda hmttada el uso a casos de luer2anayor? Una petsona lo bas-lante r¡ca para sa|arce losregtamentos y pagar ¡a muna.Perc ¿por qué querria dete-nerse prcctsamente en estaciudad? Pan realizar un aclodel que ha hecho el obietiva de

Y es asi cono la m¡ onat¡aClara Zachanass¡an un dia,en la ¡nag¡nación del vla¡eta,ut¡ltzó la señal de alarma delVenec¡a Estocolna para ba¡ar

en Gulen, su ciudad nalal, yalli obtenet de sus conciuda-danos la repatación de una¡ntust¡c¡a de ]a que habia s¡dovcttma cuatenta y c¡nco anasantes. De este mada emp¡¡conacló la abta de Diitrennattne¡at y más f¡meñenle cons

l s í descr ibe Hubed

I-l Glsnoux a qénes¡s deI lLa vtslta de ]a v¡ejadama. obta er que aparecenlodos los rasgos I p¡cos deleatro de Dr i r renmat l : unasituación d¡amá1ica agobianlebasada en a sur¡a de ele-mentos ¡ ¡ ¡ca lmente nocuos,con camb¡os paradoj¡cos en esentrdo de la lrama que levanal espectador de la rsa ahorror de a cor¡ed a a la lra-ged¡a. Los lemas predomÉnañles en a obra deDürenmat l la muer le y epooef como e eme¡ro cofup-lor , se desarolan en es led¡arna lomando como exc!sa

ve¡ganza: C a i reZachanass¡an vuelve al pue'blo donde ñació. convert daen a nru jer r ¡ás rca demunoo, para vengarse oeAlredo | . La obra se desarrolla en tres aclos que, argumenla lmenle. podnan resu-m rse de siguiente nrodo:

PRIII4ER ACTO

Zachanassan en a eslac¡ónde Gulen sltue para presentarnos a todo el pueblo y paraconlarnos a hislor¡a de lajoven Clafa y de su enriquec-m enlo paralelo a empobrec-menro de pueblo. Pero cua'r-do ega la veta dar¡a, cueniasu verdadera hsloia y cómotuvo que abandonar Gu e¡hum¡lada y rechazada portodos, embarazada por lll deun hijo que ésle no qu so reco-nocer Bealiza la promesa delos millones que todos espera-ban, pero ¡mpone una concli-cóñ: qle se haga luslicia oque supone para e a la muerlede Afredo lll, Por el momenlo,e pueblo rechaza unánime'mente la proposción de laZachanassian eñ nombre de aelca y de a cv izac ión.

SEGUNDO ACÍOLa fam¡ la de l l l y

todos sus convecinos le man'fieslan su fideldad y elrechazoa las cond clones de laZachanassan. Pero paulatina-menle I va descubriendo enelos algu¡os camb os inqlle-tanles, motivados sobre todopofque, a pesaroe su poDreza,

prando a cuenla zapalos y

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E

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ropas nuevas, comida cara y dado rnoi¡vo a grandes raqe_

hasta aulomóviles, confiados dlas en la hislofia de la lile€lu'

en realidad en quealguien aca_ ra, v que apafecen recurente

bará porcumplk las exigencias mente en obras clasrcas'

de a vleja dama Parale_ empezando por lás de los auto_

lameñte a este proceso, se res griegos, padres de a lrage-

nranilesla una creciente host¡_ dla Sin eñbargo muchos

lldad del pueblo hacia su vecF aspeclos separan la lragedLa

¡o, aquien comienzan aculpar de Dúrenmatl de E 1rageora

de ser el único obstáculo que cásicales separa de la rqueza

TERCER ACTOEl rechazo deL Pueblo

a AÍredo lll es Ya evdenle El

aLcalde ega a Proponerle un'suicidio honroso como unrca

salida a la situación, Pero elno

esiá d¡spuesio a mor¡r Y cargar

adernás con la responsabllldaddel crimen. Se celebra u¡ ju¡cio

público en el que es condena_

do y eL asesinaio ueñe lugar

nmedialamenie. Clara reclbe

el cadáver. al que le aglardan

los más altos honorcs, Y eñre-ga por f ln su cheque a la lca lde

Como Ya hemos

señaado, y habremos oe Ins|s

lir en ello en el apanaoo

siguienle, dedicado a la eslruc-

lura de esta obra, ellema de la

venganza en La v¡sita de la

viél¿ danra está ¡nlmamenleligado a Los lemas de la mueney del poder. Venganza Podefmuerle... Son temas que han

Como e! Propro au¡or

señala en su librc Prablenas

del leatro l\er a?af'ado

Dürrenmatl habla de simlsmo'

de este Cuaderno Pedagó_gico), ya no eslán los trempospara sacar a escena a los gran-

des héroes, y coñ un Pequeñoacaparador, con !n oficinisla.

con !n polizonle, se reproduce

mejor el mundo acluaL que con

un consejero de estado o con

un canci l ler ' Y s iñ embargo, la

Iiglra de CLaire zachanassañ

no deja de lener algo de la falr_

dica y monstruosa grañdeza de

una Medea. S! cadcter lnÍlexf

ble y su inamovible deseo de

venganza lá silúan Por encima

delb en y delmal, su ¡dea de ¡ajustc!a, bien lejana de lo que el

mundo occ¡denlal en qle ella

misma se mueve e¡llenoe

como tal, será aplicada con La

brutaLldad Prop¡a de lo que en la

lragedia clásica eran los desrg_

nios falidicos de los dioses

En La visita de la v¡ela

dama, Cla re Zachanassran es,

a la vez, diosa y heroína, como

tamb én es a a vez vlc¡ma Yverdugoi pr¡mero sulno en supropla carne el despredo oe

lodos, cuando fue expulsada

del pueblo en que nac|o, Y oes_pués, ironias de la Mda, suqueza le hace dueñá del des_

lino de todo un pueblo y, muy

especlalmenle, de qlien iue el

origen de sLr desg€cia, Allredo

l1l Paradójicame¡le, aquella

Infeliz CLarila que abandonó

G!!en humillada y en el colrno

de la mise a, vuelve convertda

en la dueña Y señora de

Pero laltá Precisa_rnente esa ¡dea de desllno que

en la lragedia grlega s'a s¡luabapor eñcima del hérce. clara no

es qllen mueve los hilos del

destino, sino que se l¡mlia a

que olras fuerzas, en realidad

mucho menos grandrosas,

menos tlaglcas, curnpLa¡ su

cornelido: lo fatídlco, lo inev¡la_

ble, no está ahora en manos

de un dest¡no de ongen olvLno

sino en la venaLidad Y la

coruplibilidad del ser hurnanoi

la grandeza de los héroes cla'

sicos, que aceptaban con aplo_

rno el aciago desllno que los

dioses habían establecido Para

e os, se P¡elde cuando lo qlemarca el deslno de os hom-bres ño es otra cosa que slspropias pasiones, sus bajezas.s ls rur¡dades y sus vcos.

Co¡ lodo. hay en taobra dos f¡glras q!e. ncluda,blemente, encarnan mejor quelas demás el mundo de la tra-ged a cláslca. Nos refermos aC a¡re Zachanassian y aAllredo | . E¡ rea dad. ellosdos. acusadora y acusado, sonos unrcos pefso.a les q!emanl ienen a lo largo deldramaa dignidad propa de las grandes figuras de la tragedia. Ella.ir¡placable. alrva, sin rnoslrarjamás, por nada nlpor nad¡e, elmenor at¡sbo de piedad. en supape de diosa, que llega aGu en v¡olando las leyes de lanaluraleza i é, asumiendo sudesl no, aceptando la condenaqle Cara ha d clado en suconlra corno el ¡ev¡table casti-go por sLr componamrenro, taneluclable expiación de sus

También hay quehacef ¡olaf que, nr enlras quee personaje de eLa no expeimen¡a apenas cambbs a olargo de a obra -se limla aexponer su voruntad y a esperar que ésla se cumpa inexorabemenle. el personate deAlfredo lll sí que sufre un pro-ceso que de alguna ma¡efa lere¡vrndica, e alza desde esehombre ¡nle¡esado que cono-cemos al píncipio, capaz de¡ntentar seduc r de nuevo a laZachanass¡an para que dejesus m¡llones en elpueblo, cuyaPersonal¡dad se enfanga másaún cuando ela crenta la ver-dadera razón por la que luvoque abandonar el pueblo deGu en, hasta elAllredo ttt de taescena Inal, cuyá muerle teneño poco de sacrificio, de inmolación en aras dei bieñ de susconc¡udadanos y como pago

No varnos a nsistir e¡los conten¡dos élicos que sus

tenlan La v¡s¡ta de la vjejadama. porque son evidenles yporque ya hemos vislocómo epropro aulor rehuye expl¡carsus oofas desde ese punlode v is la. Como pre l ereDürenmatt. analzaremos suobra ¿omo rep¡esentacrón delrnLrndo. cle su r¡queza y su mufliplicidad. Eso ¡os ayudará ano eslablecef ju¡c¡os r¡an que-os de bondad o maldad sobrela Zacha¡assian, sobre A lredoll o sobre los habitantes delpueb ecilo de Guen.

Clarc qLre la vs¡ónque nos olrece Dürenmall esa cle un mundo donde e dine-ro es el ún¡co valor irrelutabe.donde a élica, la tusricia o aamrslad lenen un precro -a!n-qLre este pueda ¡esular muyalo-. Por eso, el escenarioplreoe resu¡ar a veces unaespecie de lemplo serÍa unode los mol¡vos para ia utiliza-ción de las vidrieras-, un lemPlo mas pagan¡zado que pagano, cled¡cado ahora al dios deld¡nero y de la riqueza

Pero eslo no da pie alu cos de valo¡ n isobre la con-ducta de los personajes nsobre ¡ nguno de los tefnas deros que lÉla la obfa. N¡ s¡quie-¡a soore ra venganzai en unaenlrevsla eñ la que pregunta-ba¡ a aulor sobre esle lema,que aparece en vafas de susobras. conleslaba: La venganza es ago muy vnculado a lhombfe. Nalufalmenle, esla,mos confa |a venganza, pefo,

¿por qué? Nuesko derechoprohibe la venganza, pero esono ocure en e rslam. La ven-ganza lorma parte de esa rei-gión, es alqo ñatural. Hoy, elhornbre es, pas¡onalmente,igual que en la edád de lascavernas. En eso ¡o hemos

Tampoco esta concepc¡on del hornbre y demundo da lugar a escenasapocalÍpticas. y el indudabledfamarisr¡o de la obra no se

presenn oe una manefa oes,nuda o exc usivarnenle lrág¡ca.El mu¡do que represenraDü¡rennrall e¡ La v¡s¡ta de lav¡ela dama, y ésle es un rasgode realisr¡o, de veros¡m¡l¡lud,es un mundo en e lque se l rnenlo tlág co y lo cór¡ co, lo heroi€o y o v i l i de aqui , e lguslo po¡la paradoja que, en el caso deDúfrenrnal l , es ta¡ lo unaopc¡ó¡ forr¡al como una nece-srdad a a hora de rcllejar ensus lextos sLr propia vsón delmu¡do. Recordemos la esceñadel banquete con que acaba elpÍme¡ aclo la presenlación delanl¡guo luez de Guen, ahoramayordomo de la m¡llonara, aconve.sacón de A lreclo lll cone cura en el segundo acto y,sobre todo, la h laranle actua,cón de Estre la, la per iod¡staque t ransr¡ i te e l iu ico en e lque Al f redo l l es lá sendocondenado a muer le por sus

EL uso de a paradojalene mucho que ver con laeslructura de la obra, por loque o ana zaremos más dela-ladamenle eñ e l s¡guienteapadado de esre cuadefnoPedágógco.

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ÉI ESTRUCTURA

los lemas fecufenles enDúrenmall eran La muede Y einf ulo que ejerce el poder en ealma humana: precsamenle,en La v¡sna de la v¡eja dana,lavenganza eslá conectada conestos dos lemas lundamenta-les. ya que llevará consgo am u e r r e d e A l f e d o l . y s 0 opodrá ser eleculada gracras alor¡ñimodo poder que CaireZachanasslan ha conseguidoalesorar en sus manos.

A pr¡mera v sla.la obÉ pre-senta una d visión en lres aclosque se cofespoñde con la tra-d¡c¡onal eslruclura de plantea-m ento, nudo y desenlace, con-torme a la cLra el tema de avenganza se desarrolla alendiendo al siguienle esquema:

Primer acto: Planteam¡ento,Cairc Zachanass¡an presenlasu plan de venganza en forñade pet¡c¡ón de jus lca. y condiciona la donación de dinero aque alguieñ nrale a Afedo lll.Todos rechazan a demanda

Segundo acto: Nudo,A pesar del rechazo lncal . seinicia uñ prcceso de hostilidad

l lema f lndar¡enlaLde aoora es ra venganza.Recordemos ahora que

de los convec nos hacraAllrcdo ll que cada vez se

Tercer acto: Desenlace,E pueblo señlenca a muerle alLl y a condena se eieculaLnrned alamenle, con lo qleCla¡re Zachanassian ve cumplioos sus oeseos oe venganza.

Eslos tres apartados en osque puede d¡v¡dise eslruclu-ralmente a obra se hallanr¡agiskalrnenle un¡dos pof elaulor r¡edLanle una ser¡e deenlaces. E¡ pimer l'rgar, ypa¡a dane a lodo e conjunlo launidad lenrálca que requierela obra. basada comovimos enla rdea de la veñganza, la per'sona de Claie ZachanasslanLlena la escena desde elcor¡renzo. puesro que aunantes de apafecer no se hablade olra cosa que de e a m¡en-fas se la espera en La eslác¡o¡de Gulen; posterlormenle.lega la m¡llonar¡a y ella y sucortejo nundan el espac¡oescénicoi el poder que Le da sudinero le perrnle olro lipo depoder. uñ poder psicológicoque le hace sentirse dueña yseñora de as siluaciones, delas personas, de los deslnosde los dernás y del suyo pro-

pio. Al comenzar el segundoacro, y ya hasta el final de laobra. a Zachanass an ocL¡paráun bacón del GÉn Holel, que

domi¡a la escena como una ale-goria rnás deLdomlnio de Carasobre las alnras de Gulen y quemant¡eñe gualmenle esa omnlpresenca de a Zacharassran

Tamblen Juegan u¡ papeleslructuralmenle deslacableotros elemenlos, cor¡o los f¡na-les en c Ímax de Los dos prir¡e-ros ados, e pnmero con lrnaCare Zachanassan q le hav¡slo rechazada su propuesia.pero que se instala en Gulen ycon¡esla a ese €cnazo con unlacónico y confado Esperaré...': y e segundo con elfallido intenro de Alfredo lll deescap de su pueblo, cleesca-parde slr desl no: Esloyperd-do , exclama lras perderellren

en e que hub¡era querdo

escapar del od¡o de sus con-

Hemos hablado tamb¡én enel apartado anler¡or de esleCuaderno Pedagóg¡co de olrosprocesos argumeniales de laobra paraeos a cumpl¡m entode la venga¡za de Cla i reZachañasslant nos reler mosIundamenlalrnenle a los cam-

bos que se operan en Alredo| . que pasa de la l ranqu¡ l ¡dadya conlEnza ¡n¡c¡aes a r¡ edoque le va embargando conlorme avergua las verdaderasi ¡ r lenciones de s! adoradaC ar ta. y los q!e se evidencianen los habilanles de Gulen.que del cv i zado rcchazo n-cia a a sed de venga¡za de arnllo¡rara pasarán a ser losejeculores de sus planes.

Por o que se re lere aesros procesos, se pfesenknen la obra con una eslrucluraque nos parece ¡nleresanledeslacar por cuanlo se rcp¡lecon c¡erla lrecuenca en lasobras de Dürrenmatli inclusomuchas de as escenas de ¿avis¡ta de la v¡eja dana pe'mtlrian un anáisis de esle tipo: eaulor va ofreciendo ñlorrna-cÓn y dalos aparcnternenie s1n¡mpolanc¡a que, de pronlo,cobran un senl¡do sorpr€nden'le, generalmenle dramát¡co yler¡ble.

AsÍ, llse aslsla cuando veque s'rs convecr¡os ernp ezana gasrar a pesar oe su poofe'za, pues nluye que conlian enque agu¡en cumpla los des¡g 'n¡os de la Zachanass¡ani elmedo es mayor después dev silar a la policÍa, ycreceloda-via lras habar con el alcalde,con e cufa y con e maeslro,pero lodos le aseguran quelodo son fantasias. que noirene nada que iemer... haslaque haba con Cla¡re, q{re easeg!ra no estaf brcmeando.

Es la r¡isma eslructura dea úllima esce¡a del segu¡doacto, cuando todo el pueboacornpaña a lll a la estacón,pues prelende hu¡r. Todos eanir¡an a quedarse, insistiendoen que nadie quere hacerledaño. '[¡ira cuánlo se le quie-re', le dicen. 'Toda a ciudadestá conligo' Y cuando llega elmor¡enlo le anir¡an a subir allren e desean buen viaje y

mucha suerie. E momenlo haegado. Por D¡os, sube a ese

lren. e dice e acalde Perolodos le roclean. y a la vez qLrele animan a parl r , l l l i ie¡e caroque no le van a permilir lah!ida, que no se quedaránqLr elos viendo cómo se va enese tre¡ el r¡o¡lón de mi onesqle la Zachanassian ha pro-melido a cambio de su vida.'iuno de vosolros me detendrál Uno me delendrá| , grta,presa del pánico. mienlras elren se marcha s n é. Todaviael policÍa parece reprochare:'¿Lo ves? Lo has detado esca-par". Y élsólo puede conrenlar:' iEsloy perd¡dol .

Lo m¡smo ocurre con elproceso de envileclmienlo delpueblo de GuLen. El segundoaclo comeñza eñ casa de lll,donde su fam la le renueva s'llide dad, su amor y e rechazoa os panes de la Zachanas's¡ani luego, en la lrenda, vanlegando sus conc¡udadanos acompfar, y lambién le reiteranque eslán de su lado. Pero oque al principlo parece naluraly en absolulo ¡nq! elanle se varevelando como lrágicamenles¡gnil¡cal¡vo: ya ¡o compranpollo, s¡no lernera blanca, chu-letas de cordero y solom llotlle-van ropas nuevas y zapalosnuevos, rolost el sign llcado deesrcs camoos parece c afo:enrea ldad se eslán endeudando.eslán gaslando a crédlo de loque a m l lonaria esdarácuan-

[,luchos olros casos podrianofrecerse pa€ esludar estelrpo de estructLÍa en las esce-nas de La v¡s¡la de la v¡ejadana. Tras ana zar, por ejem-po, aquel la en la queelmayor-domo de a Zachanassian sedescubre como el añlguo juezde Gulen qr.re dictó a injustasenlencia que a obligó a deiarel pueblo, GeoBe E. Wellwarthconcluye: Es ésla unB esce¡ar ip¡ca de Dürfenrnari . s!

eslruclura puede compararse aa opefacronbrznas de paja sobre el lor¡ode un camello hasla que acolumna verlebral se qu¡ebrabajo e peso. La evdencia vaacumuanoose poco a poco,casi iñ perceptib emente, haslaque súb¡ lamenle loda esarnasa aparen¡emenle ñ0cuacobra lerible sgnificado con lapfopos¡c¡ón l¡nal de Clara. M lmi lones para Gulen. . . . salguen mala a ALlredo lll . Escomo si Dl¡rrenmaii, con unrepenllno l¡rón, desmoronaralodo el edificio, hacendo qleaclores y especladores lornenconc¡enc¡a de una situación

y sorprenoenre.Dürrenmatt emplea lna y olravez esla técn¡ca tremenda-

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EL TEXTO1- acEBCA DE LA VEBStóNLa prosperidad es la marca

La visita de la vle@ clama esuna obra maeslra. U¡a deesas raras piezas de la lileratu-ra dramálica del siglo xx queseguirán subiendo a escena enel XXl. Ffedrich Dürenmallconsiqu ó escrbir una tragedacórnica que siendo lealro deideas es lamben tealro popu-lar. lJna obra que es flosóficano porque haya filosofemas enboca de sus persoñajes, s¡noporque oa que pensar alespectador. Dürenmatt cono-ce e secrelo del mejor tealrode ideas: lo que ¡mporta no sonlas deas delauior, sino la refle-xión que La obra provoque eñ el

Cuando Juan Carlos Pérez dela Fuenle me propuso faer laobra al caslelLano, recibi s!encargo como un honor.Tambén como una d¡fic¡l res-ponsabilidad. Tanto rnás poFque me demandaba un lexto

no para la edición, siño paÉuna determrnada puesta enescena. l\¡i versión de ¿a vre¡ade ]a vie¡a dama es indisacia-ble de rnuchas horas de d¡álogo con Juan Canos, desdeantes de lraducir La primeÉfrase hasla pocas horas anlesde levantar el lelón. He lrabaja-do sab¡endo en qué esceno-gralia se iba¡ a moverlosacto-res, qué iluminac ón lba a abr'garlos... He len¡do el pr¡v¡legode saber qué gran actr¡z ba aencarnar a la vieja dama.En Clalre Zachanass¡an creóDürrenmalt !no de los grandespersonajes de la hisloria dellealro. Frenle a esa opulentamujer esta su depauperadopueblo nalal, G! en. Es la pro-pia Zachanassian quien lo haconducido a la miseria, porquer¡ecesita la pobreza de loscuerpos para dom¡nar sobrelas almas. Y es que la acció¡fundamenlal de ¿a v/bl¡á de /av¡e¡a dama no ocu e eñ lascalles de Gulen, sinoen a con-

c encia de sus gentes.A cambio de que Gulen démuerle alhombre que la abando¡ó embarazada en su juven-tud, Claire oirece prosperdad.Una vez proclamada esa ofer-la, las cosas suceden con lamplacable necesidad de la tra-gedia. Los gulenses no sóoacabarán haciendo lo queCLaire desea, srno que seadherirán sincerameñle a supunlo de vsla. Esa sinceridades lo que resr.rlla rnas eslfeme-cedor en lá obrai los qulensesse convenceñ de que I es cul-pable y sólo enlonces le danrnlerre. La dicha coleci¡va lfasconsumar el cast¡go es la dehombres y muleres que se t¡e-nen porjuslos y que, porlanto,merecen ser prósperos. La feli-c¡dad de los gulenses ante elcadáver ca ente de Allrcdo llles uno de los finales rnás pro-vocalivos que jamás se hayan

He hecho m trabajo desde elarnor por la obra de

Dürenma11. Tarnbién en esosmomentos en que, a pnmeravisla. más parece dslanciarsemr vers¡ón de or¡ginal.DÜrrenmatt escrib¡ó su obra en1955 y s luó la acción eñ elpresenle. Esa indicación me haserv'do de eje. Ivl versió¡ deLa vis¡ta de la vieta damasucede, corno Dürenmatt que-ria, en e presenle. En unaEuropa qlobalzada de la queGulen es excepción. G'rlen esej lugar en que no se del¡enenlos lrenes, algo as' como unpero rnuerlo al borde de unaaulop¡sta. Hasla que la r¡caamericana i¡ra deL treno deemergenc¡a. La veo bajar dellren con el progreso balo elbrazo y me parece qlreDúrrenmatt la hubiese concebi-do para nosokos. La mi onarianos Íae un fnensale: a pros-per¡dad es la marca de los jus-

Asi es como interprelo yo lav¡s¡la de la vieja dana. Canfíoen que m ectura ¡o diliculle alespectador hacer a suya. Encua quier caso, r,rña traducciónes inevilablerneñle una inter-pfelac¡ón. Al elegk entre ver-s¡ones pos¡bles de una expre'sión, el traductor subraya ymarg¡na, ¡ncluye y exc uye.Todá lraducción es por fuerza,uña leclura. Por eso, el peorfaductor de un lexto polisémico -y La v¡s¡ta de laviejadañalo es como sólo lo son asobras maeslras- es el que loreduce a su propa leclura,clausurando olras lecluraspos¡bles. Espero haber servidolealmenle a Dürrenmatt evilan-

Y espero, sobre todo, haberhecho algún servicio a mi dio-ma. Esa es, creo yo, a r¡ siónmás aila de un lraductori servi

a su ¡dioma. E traduclor €ntiaen rugares a |oS que nuncahubera l legado sn e mpulsode la engua origlnaL; dalogan-do con ésta, hace más hondosu prop¡o ¡doma, lo ensancha.Desde luego. el lraductor esresponsable anle la obra o.rg-nal Pero sobre lodo es res-ponsabe ante su prop¡a lensua.

que el ALCALDE anore). claraamaba lajuslcla. Unavez vo aunos policias deleniendo a unvaqabr.rñdo y ella apedrcó a los

aLcaLDE: Amor a la luslcia.Eso s empre causa ¡mpacto.Pero el incclenle con los polac¡as, melor nos lo ca lamos.r|.|-: (Señalando la lib¡ela).Compania cuanto era suyo. Yo que no era suyo. Bobópalatas para una pobre v¡uda.aLc^LDE¡ Caballeros. estolengo que sacarlo a colacióñ áloda cosla, Es o esencial:señlido de la cardad. (Anola).Y de su padre. el albañi,¿recuerda alguien algún €d licio construido por su padre?Oledaria b¡en en el dlscurso.(Todos intenlan recordar. Nolo consiquer]. Se mrran unos a

c¡uDAoaNo r: Se d¡ce que era

cruD^D^xo 2: Su rnuler lodejó plantado.cruD^D¡No r: ¿No murió e¡

^LG¡LDE: {CeÍando la libre-ia). Ya tengo sulicieñle i¡lor.mación. Prometo un buen dis-curco. El reslo liene quehacerlo lll.rLL¡ No hace lalla que me lodiga: la Zachanassian debe

aLcArDE: "Dinero . Esa es lapalabra justa. Nada de po ide-porllvos, hospllales o bibliote-cas. Dine'ro. Adrn¡rado l l l ,eres la persona más queridade Guleñ. En pr¡rnavera expiramimandalo y con loda segur-dad pasaré a la oposiclón.N¡uchos cr€emos que deberias

(Todos asienlen).rrl! Señores, lo prirnero es lopnmero. anles que ¡ada voy a

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JUAN I\,,IAYoFGA

2. EL TEXTOACTO PBINIERO, cuadro pri-

arcaLDE: Eslamos en tusmanos, lll. Tú eras su meloramigo.rl|.¡ No había me]ores amigoseñ el nrundo. Éramos jóvenesy fogosos. Hace ciñcueñlaaños, yo era un tÍo de lnapieza. Y Clara, todavía aestoy v¡endo descalza por elbosque, con su foja melena alv enlo, esbela como unjunco,endemon¡adamenle bel la.Pero ya veis,la vlda nos sepa'ró.¡LcaLDE! Se me eslá ocu-fr¡endo que, de cara a mipequeño discurso del banque-le, deberia recopiar alglnosdetalles sob¡e la señoraZachanassian. (Saca unalrbrela).[aEsrio: He revisado losarchivos de la escuela. Lasnolas de Clara son, por des-gracra, pero que muy malas.Sobre todo eñ comporlámien-lo Sólo aprobó Ciencias

aLcarDE: (Anotando).Eslupendo. Buenas notas enCiencias Naturales. Eslupendo.rLL (Señalando la libreta, para

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:15exponer a Clara nuesl ¡a s tua-

cuua: Pero con prudenc a.

rLL: F lay q!e proceaer co¡mucha pscoog a Una acog.da desalorlunada puede man

ar-calD€: Eslamos ante unmomenlo t rascendenla LaZachanassian psa de n'revo esuero par ío vueve a casa conágrmas en os olos. se reeñcuenlra con las rmágenes des! luventud. Todo liene queestar a la allura de as c rcunslancas Yo iré veslido de ga a ycon mr baslón de ma¡do A mlado. mr señora. y deanle m sn etec las de banco. con sen-

(Fu do de tren que se acerca).c luoaDÁr¡o l : E l Orando

CTUDADANO 2: El lfen de ataveLoc¡dad L¡sboa-Berlin.cruD^DANo r: Las once y ve n

cuRA: Todavia le¡emos hora y

aLcaLDE: Ya qle no nay cam-pa¡a. sonará la sirena de bom-beros. (Seña ando a losC¡udadanos I y 2). Vosoros ose¡cargarérs de la pancarta(Señaa a Cudadano 3) . Losdemás, agitaré¡s vueslrospañuelos. Pero, por tavornada de gr¡taf como cuandoviniero¡ aq!elos señadores. Elefeclo fue pésimo, nos q!eda-mos s¡n subvencón. A¡le lar ¡ i lonar¡a estar ía fuera delugar una euforia desbordada.¡,4as ben conv¡e¡e !na alegrÍaÍnt¡ma, apenas un solozo desirnpalia hacia la hija pród¡ga.Seamos nalura es. since¡os,pero orgañrza0arñeme.(Eslreploso fechinar de lrenos. En lodos os roslros se

expresa e oescondeno).E ren de alla

C¡UDADÁNo 1: Se ha paraclocruDADANo 3: iE l Or lando

CIUDADANO 2: EN GUIEN

cruDADAñO 1r iEn e más

cluDADANo 3: . PUnl lo enre

cruDÁDANo 2: Las leyes de analura leza han sdo vtoadasCIUDADANO 3: EI L¡Sboa BeTIinlenLa q!e aparecer por acomo L.rna exhalac¡ó¡ y desaparecer por a l l ¡co¡¡o un punlonegro.(De l ren baja Cla¡rezachanassan. una muler der¡undo peLiroia. oslenla¡dor queza hasta lo nrpos b le.pero co¡ lna exfa¡a gracraque la sava de parecer grotes-ca. Poco a poco. a o largo dela escena, ¡rán apareciendo losacompa¡anles de Ca¡re: eoclogenar io Mayordomo.Bony: el [,,lar do Vl , [,4obyt osIorzudos Roby. Toby, Goby ySoby, que lienen arres de qrar'daespadas de un gángsleri osCamarercsi los lVúsicos que.dscretarnente, s¡ernpre va¡ a

Claie es perseguida por !nenladado Conductor de lren)CLATRE! ¿Esloy en Gulen?cor{DUcToR: Ha I rado lsledclel lreno de emergencia.cLArnE: Yo s¡empre lro delfreno de ernergencia.coNDUcTon¡ E¡ este pais nose tira dellreno de emergenc¡an¡ squ¡erá en caso de emer-gencia. Puñtualidad: ése esnueslro principio supremo. iL€ex¡jo una explicac ónicrArRE: Desde lueqo qleestoy en Gulen, [,¡oby.Reconozco el oor del lriste

puebucho. Lo único q le vaela pena es el bosque En eoosque ¡ay u¡ ro e¡ e que

rLL: (Como despertando).CiararoDos: La ZachanassianMAEsrRo: El coro r.xlo no

aLcaLDE: iLos bomberos!cuna, iEl monagLr o!aLcaLDE: (Al C ldadano 3)lv,li baslón de mandol

(El C udadano 3 core lraciaGLr len) .arcALDE: (A C¡udadano 3)

ilt4¡señoral i[4 s ¡ietec lasC anla l

iNueslra Clarila lSigue gritan-

Gu en)coNDUcroR: Esloy espe¡andou¡a exp cación En nombre dela dtrecc ón de ferocariles.CLAIFE: No sea pesacloQu ero v is lar esta a ldea.

¿Ten a que haber saltado enmarcha de su tren de ata velo-

CoNDUCTOR: sr deseaba visi-lar Gulen, len 'a a s! dsposi -con el cercanias de las docecuarenta. con llegada a Gr¡le¡

cLA|nE ¿El cercanias? ¿Éseque para eñ ¡rescren¡os pueblos anles de l legar aqui?

¿Prelende que vaya dandolumbos por loda la comarca?coNDucToR: Eslo le va a cos-

CLAIRE: Boby.(Boby saca dinero y se o enlre-ga al sorprenddo ConductorLos gulenses abren la boca,

cLATRE: Y ot ro tanlo para laFundación a lavor de las

v iudas de ferov iar ios" .( A o b y d a m á s d n e r o a lCoñductor . Las bocas se

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coNoucroR: Pefo esa funda-cion no ex sle. senoraGLATRE: Pues llndela usted(ElAcade suslm ago a l o ido

corDuctoR: Nalura mente esocamba as cosas De haberosabcio. por sup!es lo quehabrlamos parado en Guen Sudrnerc. seaora Zachanass an( lntenta devovero Los gulen 'ses no pueqe¡ apanar sls otos

cLArnE: Oredese con esa

Los cuLENsEs: ¡Quédeselo!coNDUcroR: ¿Desea la señoraque el Ire¡ a espere hasla quela señora haya acabado de \rLsilar Guen? La diecc¡ó¡ delferocaril lo aprobará con sumogLrslo Se dce que e pódico dela caledral es dgno de versecon Ln Porlenloso Jlico FinaiSl la señora renunciase a pre-seniar una queja anle la diec-ción de los ieÍocariles.. Fue un

cunE: Usied y su lren. luem

M^RrDo vn: (En grego se¡alando a lre¡) Pero ia prensa,ratonc¡ro. La prensa no ha baja-

crarRE: Ovidale de los perodslas, Nloby. De momenlo, noos neces to en Guen.(E Alca de se dirige soemne aCla re. Eltren parle).arcarDE: Honorable señora.En m ca¡dad de Acalde deGulen lengo el honor, como hilaque es de nuestra amada c!-

(El ruido del lren hace ncor¡prensbie el resto del discursodelA calde, quen s igue haban-

cr,arFE: Hermoso discurso,

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DOCUMENTOS

de Europa ce¡tlál. y ha sdoescrila poralquien que en rnodoalguno se dislanca de esospersonajes y no e$a r¡lysegurode que no acabaria acluandocomo elos. Loque la historiaespor añad¡dura no hace laladecilo aqui ni escenilicarlo enel tealro. Eslo lambiéñ vaepara el final. C erto es que lagenle haba alli más solemnemenle que como lo harÍa en lareaidad, algo más en la lÍneade lo que se denomina lireratu-ra, lenguaje poél¡co, a!¡queeslo soo ocufe porque osquleñses acaban de acceder ala queza y, como buenos nuevos ricos, ernplean tarnbién unlenguale más seLecto.

Yo describo seres hurna-nos, no manonetas, ui¡lizo unaacc¡ón, no una alegoria, pro-pongo un mlndo, ¡o unamora, como se me mputa avecesi es más, ni s iqujera¡nlenlo confrontar r¡¡obra conel mLrndo, porque esto es algoque ná surg endo espontánea-menle m¡entras el públcotambén forme parte de tea-tro. Para rni, lna obra de tea-tro se desarolla denfo de as

a v¡sita de la v¡eia dana esuna hisloria qle ocurrc enun pueblo de agú¡l lugar

posib idades deeñ lu¡cióñ de alguna ndumentara esl i l is l ica. C!añdolos g! le¡ses fepresenlanunos arboes, por ejemplo, nolo hacen por parecer su rreaL¡s-tas, s ino para hacer mássoportable, preslándole unma¡co poel¡co, la esce¡a deamor argo penosa que renelugaf en aquel bosque, esdecrr, e ¡ntento de aprorma-cron de un hornbre v¡ejo a !na

Yo escibo a pal¡r de unaconlianza imanente e¡ e leairo, en el aclor. Esle es mprinc¡pal eslímulo. EL maleriame seduce. E aclor necesitamlry poco para represe¡lar aun ser humano, sólo a piemás externa, el lexlo r,rsmoque, claro eslá. deberá ade'cuarse a é1. N¡e explico: asicomo un organsmo se cetaen símismo y se aisla lorrnan-do uria p¡e !na coberturaexler¡or. larnbié¡ una obra delealro se aÍsa y se del¡m¡ta alravés del leng!aie. que es loún¡co qire proporciona eaulor. El enguale es su resu -lado. De ahÍque no se puedalrabajar sobre e lenguale ensi, sino sólo sobre aquello quecrea lenguaje: la dea y la

accó¡, por ejernplo. Co¡ eenguale en si, con el eslilo,lGbajan lan sóo los d¡ lelan-les. La larea de actor cons¡s-le. a mi luico, eñ ograr denuevo ese res|.] lad0;lo que esarle tene que man lestafsecomo naturaleza. Si se inteFprela coreclamenle el pr roerplano dado por r¡í, e relón defondo surgirá esponlánea-

No r¡e cuenlo entre losaulores de vanguardia. C eloes que tar¡rJen poseo una leona esiél¡ca -ihay que ver a decosas que nos cl¡v¡erlenl- perome Lo reseÍvo como op¡n¡ónpelsonal (de lo conlrario ten'dda que regrrme por ella), yp.el ero pasar por !n h¡jo de lanaluraleza algo conluso y deescasa voluntad configurado-ra. Lo más aconsejable seráque monlen m¡ obra s¡gu¡endola lÍnea de las obras popu aresy me l€ten como a u¡a espe-cie de Neslroy (1) consclenle.Es rnelor qledarse coñ misocurrenc¡as y dejar de ado labúsqueda de sent¡dos profun-dos, electuar los camblos deescena s¡n lelón y sin palsas,resolver la escena del cochecon tota s¡mp cdad, empean-do clalro sillas, (Esta escena

que ver co¡W der: ¿cómo es asÍ? Ejerc clod¡alécl¡co para cdlicos).

C ara Zachanass an norePresenla la lus lca. n i e lplan l4arshall. n menos aún elApoca pss Deberá ser soa-me¡le o que es la mLrjer nrásr¡ca de mundo qL¡e. gracas asu fortuna, está en condicones de ac luar corno unaheroina de la anl ¡gua l ragediagr ega. de rorma cruel y abso-lula. cor¡o |\,ledea. por ejem-po. Puede permi l i rse lo Ladama ¡ene humor. no hay queovrdano, ya que guarda ds-lanca anle a genlecomo ante

comprao e, yse d is tancia tambén fenle asi misma Posee además unaexl raña gfacra un encanloperverso. Y s¡n embargo,como se rnueve iuera delorden h!mano, acaba converI¡da en algo inmLrlable. rigido.incapaz ya de evolucionar ysin olra opc¡ón que la de petÍi carse. de conver l i rse enidolo Es una aparc ión poél ica. como también lo es suséqu lo. iñc lu idos los eunucos.que no deberan represenlarserecurr¡endo al faslidioso expe-die¡ie fea ¡sla de er¡plearvoces de castrados, s no másb¡en dent¡o de lrn marco reallabuloso. lenue: son sereslañlasrnagor¡cos dentro de sule icidad vegelativa, vicl masde rna venganza lolal, que eslóg¡ca como os códjgos de losI empos pr imi l vos. (Paramayor lacil¡dad, ar¡bos pue-den hablar tambié¡ allernali-vamente. en vez de hacerlo alrnrsmo r empo. aunque enesle caso sin rcpetir las lra

S Claie Zachanassan esuna heroina inmulable desde elprncrpio, su viejo ar¡ante. seconverte gradla lmenle enhéroe. Tenderc sórdido. cae viclma de la mi lonara desde e lpnmer momenro srn sospecnarlo, y se hace cllpabe de creerque a v¡da ha eiiminado todoraslro de cu pa pof sinrisma. Esun hombrachón rel exivo. unIndv¡duo snrple a que e r¡iedoy e leror Le hacen compre¡derlenlameñie algo personal¡s¡mo,que vive la jusl cia en carne pro-pia porque reconoce su culpa. yque la mlerte lo engrandece(sLr muede no carece de cerlamonumenra dad) Es unamuerle que le¡ey ¡o llene senldo a lm¡smo l ¡empo Lole¡d¡ ÍasóLo en e reino mílico de unaanlgua Pol¡s. pero el caso esque la hs lora aconlece enGuleñ. Y en a época actual.

A os héroes se suman losgu enses, nomores comotodos fosolros. No hay querepresen¡anos pafa nadacomo genles de mala fer dec -

didos e¡ un princip¡o a fecha-zar la olerta, se van endeu-dando no con el prcpósilo demalar a lll. s¡no por irreilexióñ,movidos por la sensacón deque lodo acabará aíeqlándo-se. Asa hay que montar elsegundo aclo. Lnclu da laescena de la estac¡ó¡ . E lúnrco que lieñe rniedo es | .que ha comprend do s! s lua-ción au¡que rio se oiga unasoa palabra hosl i l . Sóo laescena en e granero de Petersupone un punro de i¡llexión.La la la dad es ya inevrabe. A

Partr de este momenlo losgurenses se emprezan a pfeparar para el asesi¡alo. indig

nándose ante la culpa de l l l ,etc. Tan sólo la lamilia i¡lenlará persuadl¡se hasla e l f ina ldeqle lodo acabará bent tampo-co ella es nrala. solamenle esdébil, como lodo e mundo. Esuna comu¡roao que vaced¡endo lenlamenle a la ten-lacrón. como el maeslro, a!n-que esta reacción debe resuflar comprensible. La lenlac ónes demas¡ado grande, y lapobreza demas¡ado arnarga.La vieja dama es una obraperversa, au¡que por esomrsmo no debe nterprelarsecon petuelsidad, sino dándoleel lono más humano pos¡be,con trsteza, no con rc, pefolamb¡é¡ con hur¡or , puesnada perjud¡ca lanlo a eslacomedra. que l¡nal¡za trágica-me¡te. como una ser¡edad

(Escr i to por Fr iedr chDÜrenmall e¡ 1956 para laprirnera ed c¡ón de La visita dea veja dama. ExlraÍdo de ¿avisita de la v¡eja dana, ediro-al Tusquels Fábula, 1' edi

ción, Barcelona 1999).

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(1) Johann Neslroy, dra-malurgo, actor y direclor aus-lr iaco (1801'1862), aulor demás de ochenla comedias enas que se unen los eiementospopulares con los de la come,d¡a de coslumbres. y coñ lasque alcanzó gran lanra y presI gio (Nota de coo.dinador).

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DURRENMATT HABLA DE MISMOsr

nru acrones y concepcroñesdel mundo, s¡no u¡ ¡nslrLr-mento cuyas pos¡b l ¡dadespfocufo egaf a conocertañéndolo. Naturalmente, enm s obras aparecen lambiénpersonales que renen !naconcepción del mundo o unafe: no me resulta ¡nleresantesacar a escena puros lontos.La obra no eslá a servic o deunas lormulac¡ones, sLno queeslas eslán en m¡ tealro, por-qle en él se manejan sereshunra¡os, y el pensam ento,

lesceñano ¡o repre-señla para mÍ uncampo de leoriás, lor-

a le, ncl !so u¡ poqulo lal¡losofía, pertenecen e¡ partea la naluraleza hLrmana. Siñembargo, os problemas queme planleo como aulof dfamál co son problemas deorden práclico, que no se rnePlanlean anles, s¡no durantela abor, o, para ser másexaclos, cas srer¡pre desp!és de realzar la, por c! lpade una cuiosidad de saber, aciencia c erla, cómo la he rea-l i2ado. Ouls era puntual izaralgo más sobre eslos proble-mas. aun a r lesgo de nosal is lacer elcomún y generalanhe o de proflndidad y decalsar la ¡mpresión de quequ¡en habla es u¡ sastre.Francamenle, ¡o tengo lamenof dea de cómo podriaarreglarse uno para habar dearle, s¡no al modo de los sas-lres. AsÍ que sólo puedohabar para aquel los que se

reyenoo aHe¡degger.

Una obra leairal aconlece.En a dGmática lodo debelransforrnarse en nmedialo.v¡slble y sensoria, coñ a aña-d¡dura de q're no iodo puedelraducirse a lo inmedialo ysens ble. No, por eiemplo,Kalka, qu¡en, por o lanto, ¡openenece a ra escena.

En los l iempos de Goetheño era i.ecue¡le que se repre-se¡lara. tanto cor¡o ahora aos antguos. Los mas represenlados eran Schi l ler y pr in-cipalmente Kotzebue y otrospor el esl¡lo. Ha de hacersenolar expresar¡e¡le aqur elhecho de que el c ne desalolócle learo a los Kolzebues y aos B¡ch Plei l fers. No esposible irnagiña. lo que sefepresentafia noy sL no sehub¡era ¡¡venlado elc ne y losaulores de lilr¡s escriberan

Toda gfan época iealral hasido posble porque se habíadescubierlo !na delerminadaIorma, un delerminado esliloescénco. en el cual y por elcual se escribe¡ obras lealra-les. Eslo puede cornprobarseen el lealro ¡nglés, o en eespañol, o en elteatro popularde We mar, el más marav¡llosolenómeno deltealro en lenguaalemana. Sólo asi puedeexpl icarse, por ejemplo, elgfan numero de dramas queescrbló un Lope de Vega.Esli isticamenle, a obra tea-lral no era problema para é1.Pero en la medida en que ya¡o ex¡ste, n¡ puede vover aexislr, un esl o teatral un¡taro, el escr ibr lealro se hace

un prob ema mucho mas d¡ i icr Asi. e tealro actual es dedos c ases: por una parte. unmuseo por olra u|r car¡po deexper menlos. hasla la puntoque caoa oora pone ar auroranre nuevas ¡areas. an¡e nue-vas cuestones de esl lo. Eesl lo ya no es hoy algo genefa. srno ago persona I unadecrs on que recae sobre cadacaso Ya no hay un esl¡ lo. Sóohay eslilos, frase que caracier¡za la si t lacó¡ presenle del

Sr l ray sóLo esl los. haysolo ar les escenrcas y no unarle escén co.. . Siñ embargo. es conceb¡b]e un ar leescen¡co de cada uno ylodos los casos pos¡b es. asicomo hay una qeometría que¡cluye lodas as d r¡ensro-

N¡i pas ón. ño siemprealor lunada es el ¡epreseñtaren e leatro a rqueza y mul-r¡plc idad de mundo Asi. mileatfo resu ta a menudo mullivoco y parece conlund r. Secuelan tamb én malenteñdi-dos en cuanlo se intentaoesespera0amente encon-lrar en el gal l ¡nero de rn¡sdrar¡as e huevo de la expl i -cacron, que se supone meobstino en no poner.

La acción dramálica es larelorta en que el hombre seconvierte, debe convert rse,en palabra. Pero eso signilicaque yo debo poner a ¡os per-sonajes deldrama en s luacio-ñes que les obiguen a hablar.Si presenlo dos personas quelor¡an calé juntas y chanandel tier¡po, de po ít¡ca o de lamoda, por muy esp¡r¡lualmen-le que lo hagañ, no resulla deahÍ una situaclón o un diálogodramálico. Debe ocurrir algoque haga sus d¡scursos singu-lares, dramálicos, de doblelondo. Cuando el espectadorsabe, porejemplo, que e¡ unade las lazas de café, o en lasdos, hay veneno, de modo

que res!lla una convercac¡ónoe envenenaoores es¡erec!rso ar l istco conv¡ene elhecho de beber calé en unasrluacron clramál¡ca. a part fde la cua. y sobre cuya base.a pos bi dad del diálogo dramátco aparece. Si¡ lna len-s¡ón especraL de !na especias¡l'racion. no hay d álogo dra

Fa tan autént icos represe¡lanles. y los héroes trág -cos son anón¡r¡os. Con unpequeño acaparador. con |]ñol¡c n¡sla, con u¡ polzo¡ le, sereprod'rce melor el r¡undoacruar que con Lrn conselerode estado o con un cancrller.Elarte se inleresa siempre poros sacrlicados. se nleresa.en geireral. por el hombre.pero no alcanza ya a los pode-rosos. Los secretar¡os deCreonte lquidan el asunto deAntígona. El Estado ha perd -do su eslfuclufa y, como lal¡s¡ca sóio puede relejar elmundo en fórmlrlas r¡alemát -cas, asi e Estado sólo plederepresentarse hoy en estadís-lcas. Hoy, la polenc¡a se hacevisible y cobra eslructura sóloacaso cuando estalla: en labomba alómica. ese hongomaravi loso que asciende y seo(Pande, Lnmac!lado como elsol , y en elque se conlugan eLasesinalo en masay a belleza.Pero una vez que a bombaatómica ha efeciuado su pre-senlaclón, su representacióñ

Se manl¡ene siernpre lapos bilidad de mosirar perso-najes anirnosos. Esla es,pues, una de mis priñcipales

Si el perdido orden delmundo se restaura en losPechos de los hombres ani-mosos, lo un¡versal escapa ami intento de asirlo. [¡e niegoa enconlrar Lo universal enuna doctrina. Yo la aceplocomo caos. El mundo, y con élel escenafo en que se nos

presenla, me parece como unmoristrLro, corno uñ e¡igma dedesastre, que es pfec¡soaceplar, porque ante é nocabe a capi lu acón. Elmundoes, pues r¡ayor que er ¡or¡bre. y así. forzosame¡te.asume rasgos amenazadores.que. vrsros oesoe u¡ punroexler¡or. no serian lales. Perono lengo ningúñ derecho ncapac¡dad alguna para siluarme en un punlo exleror. Econsueo de la poes a es ame¡udo hado ba¡alo. [,,]ásdig¡o es conseñ/ar el ángulov sual prop¡o del hombre.

(De Problenas del teatrc.Extraido de la Fevsla Pr merActo, n ' 47, páginas 16 17.[4adrid. 1963).

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CONVERSAC¡ONES CON EL DIRECTOR

DO EN EL CEN¡FO OF^MÁNCO

NACIONAL; PENO. ¿OUÉ RdONES CON.

lvl¡ cur¡osidad por esl€ autofsurgió a pan r de ia leclura deLa v¡sla de la vleja daña, haceya laf¡olerade veinte años. Enia vrela y enlrañable librería deLa Avspa, Julia. su anliquaProp¡etar¡a, me recomendó suleclura. Me fascinó la obla yme senli alrardo por el ¡nquie-tanle y monstfuoso un¡vefso deese niño terible que esFr¡edrich Dürenmatl.

Leitodos sus texlos publicadosen caslellano, y de lodas susobtas La v¡s¡ta de la vieja damafue sin duda la que rnás mesedujoi y lo s¡gue haciendo.Por aquel entonces ya habíadado mis prmeros pasos en ladirecclón escénica y me prepa-raba para el examen de ingre-so en la RESAD.

A rnodo de pitonisa, Jul¡a medito. Algún día la diigirás .Ahora se hace realdad su pro,

lecia. La obra llega a nosotroscargada de signos de iatalidad,de grotesca lalalidad, en unlier¡po que quiere ser nuevo ens! carcasa, peroque está cons-lru¡do y habtado por los mis-mos y débiles sefes humanosde sempre. En esla necesidadde acuñar !n conc€plo cllturaeuropeo, rec¡b mos, desde esler¡ncon del contiñenle, al viejomaeslro surzo cargado dealmosleras que nos recuerdanal v|ejo maeslro galaico.

2, U VÉ¡fA OE U VEJA DAMAESfACOÉ.

MÁs coNsEcuroo DE oúFFENMAn

La v¡sila de la vie¡a dama ñascuenla a hisloria de una ven-ganza tolal , a que leva acafJo a millonaria Cla reZachanas-sian sob¡e su exnovio, el viejo y decrépitoAllredo lll. Pero no es por ellola hislorra de un monstluo,sino de lo monstruosos quepodemos llegar a ser los habi-lañtes de este planela, Cornorampoco son seres malvadoslos gu ens€s; tan sólo soñgente débi l que se sienleseduc¡da por la forluna, hoyl lamada progreso. Junlo aesta ¡dea ceniral de la ven

ganza hay dos pilarcs lunda,menlales que s!sle¡tan nosoro esle lexto, sino tamblénlodo su lealro: una ácida ysardón ca reflexión sobre elpooef y soore a muene,entend endo ésla como sacrilc¡o, como inmolación de Lrnhombre coriente en aras del

Todas eslas caracterislicashacen que esla puesta enescena sea una gfan cercmo-nia iniciática, con la peculiafi'dad de que nueslra heroina ynuestro héroe no habitan en lapolis griega en los siglos clási-cos, s¡no en la Europa conlem-poránea y en un pueblucho lla-rnado Gulen.

LAs crFcuNsfaNcras HrsróFrc¡s oÉ

O¡FAS OBRAS DELMISMOAUfOF. ¿OUÉ

DESfACARiA USIEO OE ESTA OBFÁ COÑ

FELACION ÁL PI]SLICO ACruAL, ESPE,

crarMENrE PENSaNDo EN EL púBl¡co

La obra es una gran iábu a, ycomo lal la conlamos. El'Érase una vez... de ñuestrosclenlos ¡nlanliles se imponepara hablarnos de nueslraspasioncillas, las que nos devo-

ran a todas las ñuleres yhombres de este muñdo nues

Su aulor pfolelzó en 1956 toque hoy es una rcalidad palpabe, posiblemente siernprc lofue: a veneración a un diosconocrdo o d¡osa. si es quelas divinidades l¡enen sexo-: edrnero el poder, la forlLrna la

Prosperdad. en del¡niliva elprogfeso. esa honorable pala-bra que lan ben conocennueslrcs po ilcos. Y lodo ellohasla converl ro en rclgión endogma, en le. Esla lebre quenos nvade parece ser que ¡oshace fe ces y hasta libres. esonos d¡cen, por lo menos.

Hay mucho hurnor en la obra.un humor ácdo, y negro, ycruel. U¡a m¡rada sardónica aeste mundo caóico que, atlerza de ¡ntenlar dar un sentido a nleslra exslenc¡a. hemosconverlrdo en u¡ carnaval trá-

La v¡s¡ta de la v¡eta clana esuna gfan avenlu¡a lealfal quesólo pfetende d iver l i rnos.hacer que nos ramos de noso-lfos misnros. Eslá cargada desobresalos eñ los que eLllantoy a rsa se conrunden como enuna noche rnágica de SanJuan donde tratamos de ben-decir un agua inexislenle yveñerar un luego fatuo.

ESCFIOF MOFALIZANTÉ ¿OUÉ PIENSA

No creo que fuera su inlenciónnroral¡zar y si hacer una €diografía de nueslro comporla,r¡ enlo. No pretende dar solu-cories a los conÍiiclos qleplantea en su obra. sobfe todoporque cree que no las hay. Sule en la hurnanidad es nula: Elhombfe es ¡ idiculo porque

Su obsesión por la muede le

evará a convenc mienlo deque nueslros aclos está¡ des-provrstos de sent¡do, cons¡de-rando nueslra ex¡stenc a comoirna brcma crue y r¡dicula. Noobslanie, sr me atrevo a aven-turar que el hecho de habefeslud¡ado Teologia y habervrvldo muy de cerca las ense-ñanzas de la Biblia -su padreera un paslor proleslanle haceque s! realro sea una parábolasobre nueslra ex slencia.

No es casual que esta obrahable de la pasió¡ de un hom-bre come¡te y que reclerde apasión de u¡ héroe rágico decrs lanrsr¡o, con la pecu ar-dad de que Alkedo lll ¡o es ehio de Dios, s¡no un camicero,y no v¡ve ef Jerusalén s no enGLrlen, y en nueslros dÍas.

5 €L GENEFo 8AMÁT co AL oÚE PEF-

OO ÉÑ ESTE CUAOEFNO PEOAGóGICO.

¿OUE ÉLEMENTOS OE TRAGEDIA Y CUÁ.

E mundo para nuesfo autores un gran show en e queIOOos, personales, actofes ypúblco, lormarnos pade de lafarca. Dúrrenmatt se fie delcaos que envuelve n!estravida, del núlil debare sobrenueslra existeñcia. Esas s tua-c¡ones son las que he poten-ciado, s¡n pudor, para que surlaa risa que acabará volv¡éndo-se lanlo lragedla No hay queenlrenlarse a esle teat¡o conuna delerminada ideologia,sino con una determinada acti-tud ex slencial: ser co¡sc enlesde que lodos vamos a morir,que a muerte es inevitable. Deahi slrgen unas femendasganas de vivir

La vts¡ta de la v¡e¡a dana seconv¡e(e de esla forrna en ungran carnaval gfolesco, espef-péntico, apoca iprico: en lagrañ ce¡emon¡a de los senlidos, y eñ el sueño imposible de

!ños débles seres que buscanansrosos la puena del laberin

caFAdEFisrcos DEL rEno o€ u v¡s!

ALCÚÑ MOOO EN SU PUESTA EN ESCENA?

La lraged¡a sufge de nr.reslrahur¡añdad, de nuesrra irnpeFlecc¡ón. La t¡agedia grotescadeja al descubierlo os gruesosh os que mueven a os déb esmuñecos, e ncusoa manipu-ador, reconociéndose lambiéne en otro particpanle más e¡la comedia, en e linglado

La risa es el mejor anlidotocontra la inevlabe kagediaque nos acec¡a: ta muene.Hac¡endo que lodo sea come-d¡a tragica comeda. m radasardÓ¡ca a un rnundo que arL¡elza 0e no encontrarse hadec¡d¡do vv r en plen¡tud y sinlabúes s! camino hac¡a e lGólgota.

Y si alguien tiene duda de enqué consiste a ñirada o ep!ñlo de vsia sadónico, sólotrene que obseruar una lologra-fia de F edrich Dúrrenmatlr unnño gra¡de y orondo. conojuelos pícaros escondidoslras uñas gafas redondasm¡entras sonrÍe y sonríe, yluma rn Romea y Julieta, ybebe un buen vino, ... y vive.

autoñ oEJó EscFFAs PAF^ !A puEsra

Dirigi es inteerelar un texto ala uz de un delerminadomomenlo histórico y desde unugar delerminado del planela.

Han pasado 45 años desdeque Friedrich Dürrenmatt esc.i-biera esla fábula y en elmundohan pasado muchas cosas,Por desgracia todas dan lafazon al autor suizo, haciendode La v¡sita de h vieja dana

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uno de os metores lexlos delleal ro conlemporáneo europeo. con abso u la vrge¡capara la sociedad actua.

Todas as adverrencas que elautor dejó a os fuluros d reclo-res han sdo no sólo le idas yesludiadas. s ino lenidas encuenla desde una oplca dehoy para un público de hoymuy d¡sirnlo estércamente alpúb co de enlonces, aunquedesde e puntode vsla élico. elser humano no haya exper¡r¡enlado nrnqún cambio. Todo

coRAL PEño fAMs ÉN oEPEssoNAJEs,

Cincuenta y dos aclores, apro-xrrnadarnenle selenta persona-jes que han sidodirigidos comosi lodos lueran protagon¡slas.

Tañ imporlanle para eldesaro-llo deldrama son la millo¡ara o

Alkedo lll como cualqu era clelos pequeños personajes queel autor y e adaplador hanpueslo sobre e l esce¡ar io.I¡abalo compleio pero trabaloapasronanre er q!e nos van aoirecer dia a dia sobre as ve-

las tablas de un escenarlo.I rabajo comprometdo querequrere una e¡rrega rcra .

Es un repano compelo degente de leatro encabezadopor la nritca l\,4aria JesúsValdés, una niña g.ande ylerr¡ble capaz de sorprendernoslodos los dias, asi como suscompañeros Juan José Olegu¡,o Héclor Colomé, o... todosác¡o¡es y acrnces de faza.

Tealrc antiburgués donde apalabra se hace emoción, nodesde el cerebro, sino desdelas vísceras. Teatro expres¡o-n¡sla, hoy lan alelado de losjovenes actores con caras boni-las que aparecen por las serieslelev s vas con la mismalugaci-dad que la eslea que deja ellren deállaveloc¡dad a su pasopor Gulen. Porque un actor delealro no se ¡mprov¡sa, n¡ un

monraje como esre rampoco

El movimie¡lo es un signo 1ea-lral más. que obedece a unadele¡m nacla concepción de la

As¡st¡rnos en La visita de lav¡e@ dama a una gran proces¡ón donde o religioso, o circense o a pasarela de modase dan c¡la Tealro ilual y decercmonia de ¡uestro caólicomlndo, con a l las doss desed'rccóñ, de pervelsión, deexhibición, de rnasoquismo.

Aletea el espiilu de ¿a paradaae tos monstruos a ae unacabalgala de D sneylandia.feairo para desperlar los senti-dos sin ado¡mecer el cerebro.Carusel del hombre rnodernoen es¡e gran parque 0e atrac-ciones que es nueslro mundo

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PROPUESTAi. EscENocBAFia

ARTISTICA

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Decadenca. orgullo. riquezapobreza, relig¡ón apar¡encavenganza. s imboLsmo. Ia lse-dad. pa€dola. muerle. espe-ranza.... lealro Todo eslopodernos encontrar en e lexiode La vEna de la v¡e¡a clana.De loclo ello se desprende quees una gran ópera donde te-nen qLre In€tuenrr (ooos aque'llos elenrenlos q're conformanu¡ especlaculo tota .

Se ha inlentado crear l]n espa-cio escén¡co donde se plredacontemplar o dejar entr€ver elmundo que envueve a lodoeste pueblo. Con unas imágenes en pincp¡o real¡slas y quese van alternando con olras másexpresionistas o s mbólicas.'llene que haber especlaculari-dad, y liene que reslllar unespacio creíble, como de ver-dad, y que se resp re la esenciadelleatrc, es decrr, lenemos unaeslación de lren, eslilizada.donde lodo lo que vemos es realy clespués pasamos al bosque,u¡ bosque frea completamenlepero con guiños leatrales quenvilan al públco a entrar eneste bosque de encuenlros ydesenclenlros. Cambios deestelpo se van sucediendo a loargo de todo e moñtaje.

La d¡ l icu l tad que supone d¡se 'ñar el espac¡o escén¡co parauna obra tan comp eja dramal¡camenle es l r iba en conse-g! t r !n espacro que se pueoalransforr¡ar de !n modo suf -

cenlemeñle úpido y s imp ev sualmenle para lrasladarnosa !n gran hole l u¡ rJosqle,! rn granero u¡a renoa, u¡oespacno. !na praza. u¡a

La soLucón ha s ldo reaizaruna gran eslfuclura base decrsla y hierro, con relerenc¡asa la arqu¡lectura ¡nduslr¡al quenos pooemos enconlrar enfábicas, mercados, inver¡a-deros, eslac¡ones de lrcn, elc.La est i izac ió¡ que se hahecho nos puede legar arecordar un templo. La combi-ñacó¡ de es le espaco y lantervención de olros elemen-los, más la rluminac¡ón, ¡mpoFlanlislma, es lo que ayuda aconf igurar os d i lerentesambientes rodo elo lenlendoen cuenla las dificultades quesupone lener a !na cornpañiade cr¡cuenla aclores y acln-ces que pasean, corren,suben y baja¡, se escondeñ...,es oecrr, que no para¡ oemoverce soore er escenaro.

z. tLUMtNActóNLa luz que nos visita

Eslamos en Gulen Un Glleñenferrnizo y agónico. Un Gu engris, trío y sombrío.

La luz de la estacón con lasestelas lur¡inosas de los lrenesque la visilan sn pararse. Elpfogreso pasa oe argo enGulen.

La vieja dama llega a Gulen,'v¡olando las leyes de la naluraleza sr es necesar¡o, con elsolde Capr¡. La uz de Capi eselái con sus ama¡ecercs y

Sólo se resquebraja e¡ laoscuridád desprendiéndose desls deb dades y sus prólesis.

Dlici lentac¡ón para a c¡uda'danía ante el brlllo, el coordeseado y el rad¡anle sol demed¡odía de Med¡lerráneo que'¿po¡ q(ré no?' puede, por lin,

Cla¡a llega con su lLrz y. sobretodo, con sus sombfas.Sombras para lll, lantasmasde pasado que, cosas deldes-lino, ño le han perdonado y semalerializan ante él e¡ la per'sona de sus conciudadanos.

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En e bosque de Gulen la !zse cuea entre as copas de osárboles para v s tares corno t]¡tañlasma de pasado. La luz ylos árboles únrcos testigosr¡udos del pasado amor deClara e l l .

Luz que aprsona a l l l ante su

Todo e o enke la frcgilidad delcnslal, lransparenle e i¡lran-

Qliéñ sabe si la v eja dar¡a daráa Gulen e lbr i l lo . e lco lory la luzque loda la c¡udadania anhela.

ALBEUT FAIFA

3. VESTUABIO

Es la mujer más rica delmundo,elevada ahora a milo, a D¡osade a Fortuna. Ella y su traupes mbolizan el nuevo mLrndo.Amér¡ca, el lriunlo del SLreñoAme¡cano (o lo que nos handicho que es), la lberiad.

Fue muy bella e¡ su juventud,una be leza salvaje, libre auté¡t -ca. Algo grác¡ , mezcla de gacelay lerecilla indomabe, hacia deella una pequeña salvale. Todoseslos rasgos caEcleriológicoseran anlef¡ores a la rragedia dejucio. Después aqLrella jovenaprende la lección: para sob¡eviv r fodo es lÍcilo. La vida se con-vrene para ela en un campo debatal a donde todo está pennitidocon talde qanar. Elmundoes delos ve¡cedores, de los que no tie-nen escúpulos y, sobre lodo, esde bs rrombres. E hombre essuobtel¡vo: los conoce, los maneja,los ulilza, los usa,los lia,

Las heridas de alma se esconden en el sólano de su viejoesqueleto orlopédlco. Po¡ fuera,l¡ene ago de caledÉlgótica enruinas, apunlalada con estruclu-ras melá¡cas y mañlo devirgenandaluza en Inlefnet, conincruslaciones de panialas detelev¡s¡ón em tiendo spo¡s pub i-c¡lar¡os. Inspira horror, fascina-

cón, m¡edo, risa y lanto. Seexh¡be pa.a ser venerada yodiada. Es una provocacón, decuero y álex. Conv¡ve con conr-plemenlos y lexturas considera-dos fáslton. El cabarct y lapasarca de r¡oda lambén see¡cuenlfan y se recoñocen

¿Es una mujer o es un mons-lruo? Es mly bela, pero damiedo. Toda ella es anf¡cal,loda ha sido ma¡ pu ada.Carcce de senclllez y nalu¡al¡dad. Toda ela es una provocacó¡, no podemos dejar demrarla. Prcbab emente poquenunca legaremos a descubrirla.

(Notas del Cuaderno deDiecc¡ón sobre el vestuano deCla re Zachanassiañ)

4. MústcAGulen. Un un¡verso mus¡cal

Leyendo por pr¡mera vez lav¡s¡la de la vieja dama, comen-ce a ¡maginaÍ¡e el son¡domus calque lraeria consigo unpuebo maginado: Gulen. Unpueblo con su banda un lanloder¡ediada, pero una ba¡da alIn y a cabo y su coro. Lassugerenc as 0e auror apuñta-ban haca un sonido muy e!ro-peo, una especie de simbiossentre iodas as rnúsicas denueslra Europa, ago relativa-menle simple. Nada más lejosde la realidad de esle montajeen el que eslamos inmersos.Según avanzábarnos en nues-lro lrabajo, fui advlrtie¡do lañecesidad de acercar ese son,do a un mundo r¡ás persona,más ñuestro y pfóximo.

Cuando las ideas pasarcn de lacabeza al papel pautado, obser-vé qle esle un¡verso sonorodependia de muchas máscosas que de ¡as suger¡das pofel texlo: era necesano acercaraú¡ más, melódica y limbrica,r¡etue, ese sonrdo a nuesl¡asreferenc¡as culturaes, para asiconsegurf que el €specladorque asisliera a la represenia-cón de esle monlale o viviera

de uña lorma personaly p¡op a.

S n saber cónro, la múslca seimpuso por sj m sma. y v ató-n¡to como cobraba vda prop¡a.Es nnegable el nilujo que 1¡enen as mágenes, los cooresY a luz sobre el sonido, peronu¡ca llegué a ¡maginar que elralamiento de los caracteres yperconales, la dramatizaclónen si m sma. pudiera ejerceruna Inllue¡c¡a ian grande y aa vez lan agradecda.

Ahora, cuando estamos f ren-te a l resul lado casi f i ¡a .aovrefro qra lamenre sor-prend¡do qLre e l resul tado deeste puzz emucho mas a ¡ed terá¡eoque a Cenlroeuropa. Cinemarográ¡camente hablando.s se me perm le. y en cua¡lo

eslamos máscerca de ¡eoreal¡smo rned -

Iefaneo qle de otras corren-les esté l ¡cas que. a pr¡or i ,parec¡a sugerifnos con luerza

Los t¡mbres poco agresivos deras rnadems (flaura y oboe)sumados al acordeó¡ y alsaxo, coniorman una mezca¡oslálgica y evocadora de !nunrverco musrca featmentecercano a noso¡fos: escucha-mos e lsonidode una banda depueblo que parcce sa¡r delondo de la memo¡ ia. Unabanda, pof olra parte, casiimposible en a realidad. Laausencra de rnstrumentossolslas de melal produce eseeteclo sorprendenle de bandade un pueblo soñado en algu-naparre, yra base rilmica (tubay bombo con platos) conribuyea que erplrso no deca¡ga; ésees realmenle el cofazón deesle unrverso ci,rya ex¡stencanunca anles lrabía maginado.

En cuañlo a sonido delfinal dela lunción, ese happy end tarameflcano mezc ado con nues,lro prop¡o mundo rilual, pocopLredo dec¡r que no esté cafa-menle apunlado en la esencia

mrsma de esla ve¡sron:

Progreso y ocura y ilo y.gr los de ! ¡ Occdc¡ le quet ,a a y q le se nueve y qLeslLre ba a¡do y q le es la a.Co.loc rc! 10 l¡terp.elac ón ensondo de un cor tocrcuto de

MAH ANO M¡F N

5. coREocRAFÍA

La aa¡za surge po¡ a necesdad ¡nnala que lene e honrbredc Írove.se Las pe.sonas nos

¡ s t . t v a m e n t eexpresa¡oo ¡!esrros esladosde an r¡o: dolo¡ alegria. amorodo. etc ¿Q! e¡. e¡ r¡omenlosde fe crdad no ha parado dedar bnncos s n qre le r¡pode eq!e d rá¡r . ¿quén. en nromentos de espera o nqu elud, no lraParadode rde u¡ lado a o l rode

E ¡ G L r e ¡ . u ¡ p u e b o d e p r m d oeconomrcame¡re. r r sre y grs.en e l qLre e único mov¡me¡tot s co de sLrs habla¡ teses e ldenrover a cabeza de !¡ ado aolro para ver pasar os lrenes atoda veocdad o e d€ l r iare¡cogdos de f r io y de medo¡o vaya a sef qLre otra des-

gracra es oclfa lo0o va acambar desde a aparc ión de¡Lresl ra protago¡rs la. CareZachanassan en gr¡atco personale qLre a luerza de vo unlad ha creaclo a s! akcdedor !¡mundo de nqueza depoder deadmmc on de o/á.no¿i

La cqada a Glre¡ de ClareZachanass an o lor !a a sLrsvecnos e f ¡ovme¡ro 0e suscuerpos qLre anles no ten anAsi pLres. ex is le ! ¡a anaoqiae¡ a coreogfaf ia e¡1re apobreza ta ta de mov m enlo yra r q leza ba Le de a leqr ara¡nD en s! Prese¡ca pocero,sa y at !a perrn le que osgule¡ses mien sus r ¡ov im e¡-los s! es1 o de vda

JLraN CaRLos S^NraM¡F a

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a ACTIVIDADES1. DEBATE EN CLASE

1.1 Bealiza un resur¡en delafgLrmento de lá obra que hasvslo representada. Seña acuá es a tu jlr co e lema prin-clpal , y si hay agún terna

1.2 La acolación inicial dellexto drce que la acc¡ón ocureen Gulen, !n pueblo y en laépoca aclual . ¿Qué intencón

le parece qle liene esa ocalizac¡ón lan genérica?

1.3 E aulor cal i l icaba susobras como comedias groles-cas'. ¿Oué opin¡ón te mereceesra delinición?

1.4 Lo paradólco es aqueloque apafenlemenle resu laconlrad¡cto¡¡o pero ¡o lo es.Señala aquellas paradojas quereclerdes de la obra que hasv¡sto represenlada. ¿Oué sen'l ¡do l iene una ul l izacón lanabundante de esle recurso?

1.5 La ¡ro¡ia, que consisle eñdecir lo conlraio de o que veFdaderamente se qu¡ere expre'sar, eslá muy en reación conlas Paradojas que veiamosanles, e ¡nc¡de en elhumorquerespira la obra. ¿Oué op¡nasdel senl ido del humor que

mleslra Dürrenrnatl en La y,sr

1.6 'Ateradora como aquellasd¡osas griegas que manejaban€ldest¡no de los hombres' , asidescrbe e rnaeslrode Gulen aC alre Zachanassian, queacaba de l legar al puebloCor¡enla las caracleristtcasque le parezcan mas nolables

1.7 S la Zachanassian encar-na la figura de una diosa de laanligüedad, lll sería el héroelrágico. También es elmaestro,e humanista de Gulen, quendce que en esta historia "el

destrno avanza como enEd po'. Haz una descripciónde personaje de A fedo | .

1.8 Hemos hablado en esteCuademo de una ser¡e de pro-cesos que se desarrolan a lolargo de la obra. Fijér¡onosahora en e quet¡ene como pro-lagonisla a A iredo ll, cuya l¡gu-ra se engranaece segun avan,za la acc¡ón. ¿Qué te slgercque la purilicación que sufre lltenqa un final laf fágico?

1.9 líienlras que esta purifica-ción de Allredo lll no rcporraningún beñeficio social, el pro-ceso de enviecirnienio que

sulre a c udadania de Guen síles repofla unas rnejoras male,r¡ales evidentes. ¿Te pareceque esto es lrna aegorÍa del

1.10 Pero ya hemos vislo qleelaulor ño qu¡ere dar ecc¡onescon su obra, sino mostrarnos elmundo tal como es. ¿Oué teparece la representacón demundo que Dúrrenmall haceen La v¡s¡ta de la vEja dana?

1.'11 A hablar de alegoria delmundo, ya hemos apuntadouna pos¡ble ¡nterprelación de laobra, Pero caben muchas más.Señala las que le parezcan

1.12 Analiza la puesla en esce,na y valora cuáles de as posbles ¡nlerpreiac ones que añlesse lran señalado quedan resal-ladas en el monlaje. Sería nle-resante repasaf os comenla-fros recogrdos en el apartado'PropLresla artislica de est€Cuaderno Pedagógico, a pro-posilo de la escenoqafia. aiuminación, el vesluario, lar¡ús ca y la coreog¡alía.

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1 2 72. TBABAJO EN GRUPO

2.1 Anál is is de las cr í i icas

Proponemos como actvdad arecop ac ón de ras crilicas q!ese pLrb que¡ en os d as poslerores a es l ¡eno en N¡adrd dcLa vsr¡a de la vtela danaAn¿ zad os elemenlos cor¡Llnes que obseves e¡ e l las. as icor¡o as d i fere¡c as Reaco

propa opnon sobre a obra ypreseniar vuesl ras conc!so

2.2Análisis de los personajes

Bea zad por escr i lo !n análs¡sde los pr i ¡c pa es perso¡a lesde a obrá Para ello. podé¡sayldaros de a agr !pació¡ que

os vs lanles Cla i reZachanass an y sLr séqu¡lo denrar dos. mayordomo e!nu

ros v is i lados Al rcdo I sufam a. e acaLde. e l cura. enraesl ¡o e¡ medco e l pol rcaos l'rombres y as muleres deG! en

os der¡as: e rev sor del lren

2.3 La v¡s¡ta de la vie¡a damay la lragedia clásica

Recoged toda la niormacrónq!e podá s sobre as f iguras deN¡edea y de Edipo en a terat ! ra c lásca greco at na. y com.paranas con as de CareZacha¡ass an y Afredo l l l

¿Oue aspeclos l ienen encomún? ¿Y qt ]e d ierenc asenclenlras enlre estos cuatro

2.4 El género literario de Lavisita de la v¡eja dana

Re aconad os aspeclos tráqcos y os comcos de a obra ydesaro a'l por escrlo un aná-sLS sobre el genero drarnalco

al qu€ perlenece ¿a y/sxa de /ávrg€ damá valorando os mol -

vos por os que Lrl za e aLrloresta mezca de comed a y lragea a y os resulaoos q!e con

2.5 Sobre ¡a pena de muerte

ntormaos sob¡e eleslado de aey oe penaEspaña y en e res lodelos pai -ses de a Unón Elropea yEstados U¡dos ¿En q!é paises y en q le sLples1os ssu-av¡gente esla ley? ¿Oué op n ón

3, CONTEXTO HISTORICO,SOCIAL Y CULTUBAL.

Propo¡e¡¡os a conlinu¿c ón uncuadro con os dalos bográÍ¡cos de Fredrch Düre¡ma11 yos aconlec m e¡los h slor¡cos.soc ales y c! l!rales que e f!e.ro¡ conrer¡poraneos ana 2aen q! . medda dchos acontec r¡ enlos se ven relelados enra oDra qLe ¡as vrslo represe¡

EI

VIDA Y OBRA DEL AUTOR coNTExTo HrsTóFtco. soctaL y cULTL,RAL

1921 Nacc en Konof .gen. úna ¡ dea dercantón surzode Bern¿ e 5 .le e.eró

Tras a G lerá Múnd ia . os a ádós es tab tecenparaaeman a u .á cuanrosa repáracón de Glera

19J5 Ld l¿m a 5e muda " ¿ . udad de Bern¿ H I er rima os Oecrelos de Núreñbe¡g: 600 000lúd ios son prvadós de la naco¡ardád aemanapé.'rendo qfan pane de sús dere.hos

1939 Com enzá la lG le ra l ¡ lndá

1941 Term na e bachr erálo l¡ ca estudrós súperores Se represe.lá é¡ Suza M¡.l¡é Có¡ále

1942 Es ludra ¡ te ra lu ra y I oso fa en Ber .a y Zú fch Da com enzó á o lensva arada eñ e

1943l la la decara la quera aAemana

l94s Prmera publ.acró¡ Eianciana lñarác on) Tprm.¿ ¿ | G!er . Mund a 5e . rea ra ONt l

1946 S€ casa co. Lóllr Ge ssler. actr2 e¡ paro Tefmrna e Próceso de Núreñberg

1947 Pubrc¡ su pr merá óbra lealra: Fs¡á es.r1o

Comenz¿ sú abor de . rnóó lea l ra l

Tralados de Páz de ParisCáza de brulas e. Ho¡ywood

1948 Go pe coñunsra en Checosovaq l ia

1949 se c¡ea ú. esrado comu.rslá én alema.ra ofeñla

1950 Etluez y su vetdLgo lnow a) Estala la gLera en Corea

1952 El ñatt¡nan¡a .Jet señót ̂ ,hsstsstpplLa ctudad El1uez t e¡veklLgo E/ ¡nrel(nove as)Se nslala e¡ Nelclraie

Levanram ento delEsraruro de oc!pac¡ó¡paÉ la BFA por e Irálado de alena.rá

1953 Es.¡ be a óbra leat .a El ptabtena teatral Múere Sr¿ In Le !an tamre¡ los en ta RDA

1954 ún ¿nget ttPga ¿ A¿btton 1

1955 Es.nbe La vtsna de ta weja danaGnega bLsca gt¡ega lñave al

Se ceebra en G neb¡á e tp rmer e . .ue . t ro de te tesde Estado Esre-oesle desde 1945

1956 Esrrena é. Zúnch la vrsr¡a de lá vteja danaEt despedec¡a l¡aue a)

LevanÉmrenlo popurar en H!¡griaconÍá ás rropas sov elr.ás

1957 Coneda ta.i óló¡.a Eiconkatieñpa Se crea e N,lercado Común Europeo

1954 Juan XX I es eegdo PapaEslreno en Broa.lway de La yrsttade ]a veta dan)a

E

4VIDA Y OBFA OEL AUTOR coNTEXTo HtsfóRrco, socrAL y cULTUFAL

r !59 L¡ vrsr/á d.1¡ vrFt¿ d¡rra re.bÉ ePren¡o de a Cr r.a Te¡lra .re Nlevá York

Fde C¿s l ro n revo ider c !b¿no

F t d f t \ I ¿ p E 1 d . , r r ¡ ¡ r ! r p r 1 . r d . ] Aqr¿vam €no de co¡ l c lo e . l r€ ¡ UBSS ! Ch ¡a

t 9 6 l Se evan la e lN ¡ l i o de Be i n

I962 C , t 5 d e o s r e € n C l b ¡

t963 hel.lr¿s e¡ ,pr eslá¡r¡ .te A!g/¡s E Co¡se lo de Eur .pa esr¿b.ce s ! sede e .

r sl¡¡ de /¿ f¡ela ¡ráfr¡ es .vad¡ a c ne Ch na prueba cón éx 10 a bo¡lr. atónr.a.a q ! n r ¡ pore . .a n ! . rear

1965 Eslre.¿ Pro..srt.¡ 1.r sDn¡¡¡ de !r ¡!/¡. Pruebas s !b le t raneas i ! . leares en EEUU

1 9 6 6 Fevo ! .o r cu lú ra cn Ch ¡¿B,ez¡ev .ue ! . r ider de a !RSS

rvlo! nr e¡los r.vo !c o¡¡ros europeosmayo rrances ! p ¡¡vef¡ de Praqán laso . de Che.osDva. l ! ¡ po , e P¿. lod€Vars .v ¡

E t rombre psa por p r n ie rá vez a ! . ¡

Se ap úcb¡ e vo lo reñen no er S ! 7 ¡

r r rue l l . . rc 1 ¡ rn€ l .ovÉa)

Coni e¡z¿ ¡ plb .¡rse s! O¡¡á.rmpl.r¡. túe va c ! i s (a de r rL - n l ¡ !o r !n re .e !

li.m e¡za . lrlera lrai r¿k

1 9 3 3

N¡ la GórL ,á . l rov .s ee !Jdo se . re t¿ro

Fle. be d.s d. .. frenr 03 rras p est q.s.s.le ¿s elrds a eman¡s. e ceorq Bú.lr¡ery e 5 .h Ér Geda.nr s

En Sliza se re.fráza por referendlm á entrada

Desas l ¡e nuc €ar . le Cher .óby

r e € 8 sLsp€n. ido e p roye. ló de u¡ ¡ ce¡ l fa n lc re¿r

Fr r¿re dé l .nos l ¡ . vc . )

r 9 9 0 M L . r c . r ¿ d e . t c e n . t r r e .e¡ su .¡sa .le N,puchele e¡ Sú z¡ 5! za apruebe é¡ rele¡.rlum

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I

30 IBIBLIOGRAFíA- Corcoll Calsa( Robedo.Estud¡o sobre la tenát¡ca y laesltuctun de las obras l¡tera"r¡as de tuiedich DúÍennai.Un¡versidad de Barcelona,Secretar¡ado dePublicaciones, Inte¡cambioCienlifico y ExleñsiónUniversilaria. Barcelona, 1977.

- Dürenmatl, Friedrich.'Dürenmatt habla de sim¡srno". Primer Acto número47. Páginas l6-17. flladf¡d,1963.

' Dürenmatt, Friedrich- tav¡s¡la de la v¡eja dama.Edilorial Tusquets, Fábula. 1?edición, Barcelona, 1999.

- Gignou¡, Hubert.'Dürrenmatt' Revisla PrimerAclo número 27- Páginas 5-10. llladr¡d, oclubf€, 1961.

- Gignoux, Hubert.'Dürenmatl y los problemasdel leatro cómico y contempo-ráneo". Revista Primer Actonúmero 57. Págiñas 5-12.l¡adid, octubre, 1964.

- Gómez GarcÍa, l\,4anuel.D¡ccionaio de Teatro. EdilotialAkal. 1E edición. I\,4adfid, 1997.

' I¡onleón, José. "La visita dela vieja dama". Pímer Acto nq10. Páginas 54-55. l¡adrid,sepliembre-oclubre, 1 959.

- Otd']ña. Javier. Eltealre ale-many contempotan¡ a I estalespa,?yol. l,,lonograiies de lea-tle, número 25. DiputaciónProvlñcial de Barcelona.Instituto de Ediciones.Barcelona, 1989.

- Floetze( Hans Gerd ySiguan, lvaisa. H61ola dé /al¡teralun alenana 2. A s¡gloXX. De 1890 a 1990. EtlitotialAriel, colección Lenguas[¡odemas. ]l edición,Barcelona, 1992.

- Wellwarlh, George E. Iealrode Prctesta y paracla¡a. Laevoluc¡ón delteatro de van-g u a rd ¡ a- Alianza-Lutne n.Itladrid, 1974.

É15

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5 3 1CUADERNOS PEDAGóGICOS1. Elyerño de las almas, 7. Tragicomedla de Don

de Ramón del Vallelnclán. Cr¡sióbaly la Seña Bosltay Betabl¡llo de

2. El libro de las best¡as, Don Cristóbal,de Bamón Llull. de Federico García Lorca.

3. Pelo de tormenla, 8. San Juan,de Frañcisco Nieva. de lvax Aub

4. Elavaro, 9. La cása dede l\¡oliére. Bernarda Alba,

de Federico Garcla Lorca.5. La ¡ncreíble hlstoria del

Dr. Flolt & Mr. Pla, 10. La Fundación,de Els Joglars. deAñlonio Buero Vallejo.

6. Madre Caballo, 11. Fedra,deAnionio Onetti. de Miguelde Unamuno.

PUBLICADOS12. Ellector por horas,

de José Sanchis Sinislera.

13. Cártas de amor a Stal¡n,de Juan lvayorga.

14. Daaatíde Els Joglars-

15. La vlslta de lavie¡á dama,de Friedrich Oünenmalt.

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a OTBAS ACTIVIDADES EDUCATIVASVIAJE POR ELÍEATFO

El CDN propone a los Centroseducaiivos lna forma de cono-cer elleairo airactiva y amena.A lravés de la vlslla g! ada porlas d¡versas secciones quecomponen el Teatro MaríaGuere¡o, el alumno lieñe unavis ón globalde las labo¡esquese desarollan en un espectá-culo, con explicaciones lantode la hisloria del lealro comode los lugaresy elementos prolagon¡slas de una iuncrón.

Estas visrlas se realizañ enhorario de mañana los diaslaborables. Su duración seesl¡ma en 60 minulos ap¡oxir¡adamenie. Para un mejoraprovechamiento de la visitalos grupos no deben estarcompuestos por más d€ 15alumños, aunque se puedeneslablecer dos lurnos por díapara un mismo Centro.

Durante el periodo de expos-c¡ones en la Sala MargadtaX¡rgu del Teavo l,,la¡íaGuerero, se incluirá lna visitaa la m¡sma con explicaclonesespecilrcas acerca de su con-len¡do, con lo que la duraciónglobal del recorrido será agosupeior a la habilual.Sidesean solicitar cita o recibir

más información, puedenhacero llamando al teléfono91.700.33.43, o mediante

CHARLAS- COLOOUIOS

Olra de las aclivdades que elCDN propoñe a los Cenfoseducatvos cons sle en organi-zarpara aquellos grupos que losoliciten uñ pequeño coloquiocon los actores y el equipoartistico, En eslos encuenfosse produce un conocirnienlomas ampl¡o de aquellos aspec-los que rodean el montaje deuna lunción deleminada y dela creaclón lealral en su con-junlo. En el los, el alumnoPlede plantear lodo aquelloque siempre quiso saber sobreel mundo del tealro y ñunca se

ASISTENCIA EN GFUPO ALAS REPRESENÍACIONES

Aquellas personas que deseenacud¡ren grlpo a las repfesen-taciones pueden beneficiarsede los siguientes descueñtos:- 25% de descuenlo a gruposde 21 a 30 personas' 50o/. de descuenio a gruposde más de 30 personas

Eslos descuenlos serán aplica,

r¡Es ún¡camente los mart-as y

Las reservas deberán realizar,se en el leléfono de raquillasdel Tealro lvaría cueffe¡o(91.319.47.69), y deberánrecogerse en d¡chas taquillasal menos una semana antesdel día corespondienle a a

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