catalunya construye seguridad en la construcción

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MONOGRÁFICOS SEGURIDAD EN LA CONSTRUCCIÓN a destacar LAS CIFRAS La presión de los agentes sociales, la Inspección de Trabajo y la patronal obtiene sus frutos en materia de seguridad LA MESA REDONDA Los expertos reclaman medidas laborales específicas para que peones y oficiales puedan jubilarse antes D D catalunya construye Un operario utiliza sistemas de seguridad mientras trabaja en la construcción de un edificio de viviendas. E l último informe sobre sinies- tralidad laboral publicado por el Observatori del Treball –ente dependiente de la Ge- neralitat de Catalunya– re- coge los datos correspondientes al pe- riodo comprendido entre los meses de diciembre del 2009 y noviembre del 2010. Según la mencionada fuente, durante es- te tiempo un total de 105.743 accidentes de trabajo cursaron baja en Catalunya. La gran mayoría (104.910) fueron de carác- ter leve, 770 graves y 63 mortales. Pero no son los valores absolutos, sino los índices de incidencia –el número de accidentes por cada 100.000 afiliados a la Seguridad Social–, los más útiles para analizar la evolución de la siniestralidad, pues permiten comparar los datos de di- ferentes periodos, independientemente del número de trabajadores que se en- contraran en activo en cada momento. La nota más esperanzadora es que, durante el lapso de tiempo analizado, dicho valor se redujo en Catalunya hasta alcanzar las cifras más bajas de los últimos cinco años. Así, mientras que el índice de inciden- cia de los accidentes leves fue de 5.898,72 en el 2006, en el tramo 2009-2010 fue de 4.088.04. Los accidentes graves pasaron de un índice de 45,63 (en el 2006) a 30 (en el 2009-2010); y los mortales de 5,22 (en el 2006) a 2,45 (2009-2010). Esta evo- lución se refleja en los diferentes sectores. SINIESTROS EN LA OBRA De los accidentes laborales que se pro- dujeron en Catalunya entre los meses de diciembre del 2009 y noviembre del 2010, 16.461 correspondieron al sector de la construcción –lo que representó un 15,56% del total–, un número bastante in- ferior al de afectados en el sector servi- cios (60.476 accidentes) y en la industria (26.990), pero superior al registrado en el sector agrícola (1.816). De las 16.461 personas afectadas en la construcción, 16.279 (un mayoritario 98,89%) sufrieron un accidente leve. Por el contrario, 167 trabajadores padecieron un percance grave y 15 perdieron la vida en la obra. En valores reales, la construcción ha lo- grado en los últimos años reducir consi- derablemente el número de accidentados en todas las franjas de gravedad, inde- pendientemente de que el número de tra- bajadores haya menguado con motivo de la crisis del sector. Lo demuestran los ín- dices de incidencia. En el 2006, por cada 100.000 trabajadores de la construcción afiliados a la Seguridad Social, hubo 12.569,75 accidentes leves, 136,67 gra- ves y 13,17 mortales. Desde diciembre del 2009 y hasta noviembre del 2010, las pro- porciones fueron menos catastróficas: 8.526,34 accidentes leves, 87,47 graves y 7,86 mortales. LAS POSTURAS A la vista de estas cifras, la mejora en cuanto a la prevención de riesgos labora- les en el sector de la construcción no de- ja lugar a dudas. Sin embargo, Juana Are- nas, responsable del sector de la cons- trucción de UGT Catalunya, recuerda que no hay motivos para bajar la guardia. “Es cierto que a lo largo de estos últimos años se ha producido un descenso de los accidentes, sobre todo los morta- les. El factor fundamental para este logro ha sido la presión de los agen- tes sociales que, junto a la Inspección de Trabajo y la patronal, están apos- tando por erradicar los accidentes en la construcción. Sin embargo, toda- vía queda un largo camino y tenemos que convencer a muchas empresas de la construcción para que apuesten por una cultura preventiva, dejando de considerar la seguridad y salud co- mo un coste añadido”. Comparten esta misma preocupación los técnicos de la Asociación Catalana de Empresas de Andamios (Aceba). “La si- tuación económica actual puede pro- vocar que algunas empresas, princi- palmente en el sector de la rehabilita- ción y la pequeña construcción, in- tenten reducir costes y abaratar pre- cios mediante el incumplimiento de la normativa vigente o sus obligaciones fiscales, laborales, de prevención de riesgos o de responsabilidad civil. En- tre todos los agentes implicados de- beríamos intentar evitarlo, para ga- rantizar la calidad en el sector y la se- guridad de todos los que montan, uti- lizan o conviven con andamios”, afir- man desde la asociación. CAÍDA EN PICADO Alfredo Bienzobas, responsable de Salud Laboral de la Federación Construcción y Madera de CCOO aporta una visión no mucho más optimista. “La siniestralidad no solo afecta a los trabajadores de la construcción, sino a todo el sector. La caída en picado de la edificación residencial ha trastocado las esta- dísticas. Todo cae, desde la licitación pública hasta los visados colegiales, que han llegado a mínimos”. Y del em- pleo, según el portavoz del sindicato, más vale no hablar: peones que cobran 30 eu- ros por día trabajado, trabajadores chinos durmiendo en sótanos... “Entre tanto, mucha retórica sobre la innovación. ¿Y si todos nos arremangáramos y viéramos cómo ponernos de acuerdo para sacar al sector del agujero? Si solo esperamos que la crisis amaine, to- dos habremos perdido”, concluye.2 Un rayo de luz al final del túnel La siniestralidad en el ámbito de la construcción en Catalunya registra los mejores datos de los últimos años ALBERTO GONZÁLEZ Área Monográficos M www.catalunyaconstruye.com LOS SINDICATOS SUBRAYAN LA IMPORTANCIA DE UNA CULTURA PREVENTIVA ES ERRÓNEO CONSIDERAR LA SALUD COMO UN COSTE AÑADIDO FUNDACIÓN LABORAL DE LA CONSTRUCCIÓN

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La siniestralidad en Catalunya registra los mejores datos de los últimos años

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MONOGRÁFICOSSEGURIDAD EN LA CONSTRUCCIÓN

a destacarLAS CIFRASLa presión de los agentes sociales,la Inspección de Trabajo y la patronalobtiene sus frutos en materia de seguridad

LA MESA REDONDA Los expertos reclaman medidaslaborales específicas para que peonesy oficiales puedan jubilarse antes

D D

catalunya construye

Un operario utiliza sistemas de seguridad mientras trabaja en la construcción de un edificio de viviendas.

El último informe sobre sinies-tralidad laboral publicado porel Observatori del Treball–ente dependiente de la Ge-neralitat de Catalunya– re-

coge los datos correspondientes al pe-riodo comprendido entre los meses dediciembre del 2009 y noviembre del 2010.Según la mencionada fuente, durante es-te tiempo un total de 105.743 accidentesde trabajo cursaron baja en Catalunya. Lagran mayoría (104.910) fueron de carác-ter leve, 770 graves y 63 mortales.

Pero no son los valores absolutos, sinolos índices de incidencia –el número deaccidentes por cada 100.000 afiliados ala Seguridad Social–, los más útiles paraanalizar la evolución de la siniestralidad,pues permiten comparar los datos de di-ferentes periodos, independientementedel número de trabajadores que se en-contraran en activo en cada momento. Lanota más esperanzadora es que, duranteel lapso de tiempo analizado, dicho valorse redujo en Catalunya hasta alcanzar lascifras más bajas de los últimos cinco años.

Así, mientras que el índice de inciden-cia de los accidentes leves fue de 5.898,72en el 2006, en el tramo 2009-2010 fue de4.088.04. Los accidentes graves pasaronde un índice de 45,63 (en el 2006) a 30

(en el 2009-2010); y los mortales de 5,22(en el 2006) a 2,45 (2009-2010). Esta evo-lución se refleja en los diferentes sectores.

SINIESTROS EN LA OBRADe los accidentes laborales que se pro-dujeron en Catalunya entre los meses dediciembre del 2009 y noviembre del 2010,16.461 correspondieron al sector de laconstrucción –lo que representó un15,56% del total–, un número bastante in-ferior al de afectados en el sector servi-cios (60.476 accidentes) y en la industria(26.990), pero superior al registrado en elsector agrícola (1.816).

De las 16.461 personas afectadas enla construcción, 16.279 (un mayoritario98,89%) sufrieron un accidente leve. Porel contrario, 167 trabajadores padecieronun percance grave y 15 perdieron la vidaen la obra.

En valores reales, la construcción ha lo-grado en los últimos años reducir consi-derablemente el número de accidentadosen todas las franjas de gravedad, inde-pendientemente de que el número de tra-bajadores haya menguado con motivo dela crisis del sector. Lo demuestran los ín-dices de incidencia. En el 2006, por cada100.000 trabajadores de la construcciónafiliados a la Seguridad Social, hubo12.569,75 accidentes leves, 136,67 gra-ves y 13,17 mortales. Desde diciembre del2009 y hasta noviembre del 2010, las pro-

porciones fueron menos catastróficas:8.526,34 accidentes leves, 87,47 gravesy 7,86 mortales.

LAS POSTURASA la vista de estas cifras, la mejora encuanto a la prevención de riesgos labora-les en el sector de la construcción no de-ja lugar a dudas. Sin embargo, Juana Are-nas, responsable del sector de la cons-trucción de UGT Catalunya, recuerda queno hay motivos para bajar la guardia. “Escierto que a lo largo de estos últimosaños se ha producido un descenso delos accidentes, sobre todo los morta-les. El factor fundamental para estelogro ha sido la presión de los agen-tes sociales que, junto a la Inspecciónde Trabajo y la patronal, están apos-tando por erradicar los accidentes enla construcción. Sin embargo, toda-vía queda un largo camino y tenemosque convencer a muchas empresasde la construcción para que apuestenpor una cultura preventiva, dejandode considerar la seguridad y salud co-mo un coste añadido”.

Comparten esta misma preocupaciónlos técnicos de la Asociación Catalana deEmpresas de Andamios (Aceba). “La si-tuación económica actual puede pro-vocar que algunas empresas, princi-palmente en el sector de la rehabilita-ción y la pequeña construcción, in-

tenten reducir costes y abaratar pre-cios mediante el incumplimiento de lanormativa vigente o sus obligacionesfiscales, laborales, de prevención deriesgos o de responsabilidad civil. En-tre todos los agentes implicados de-beríamos intentar evitarlo, para ga-rantizar la calidad en el sector y la se-guridad de todos los que montan, uti-lizan o conviven con andamios”, afir-man desde la asociación.

CAÍDA EN PICADOAlfredo Bienzobas, responsable de SaludLaboral de la Federación Construcción yMadera de CCOO aporta una visión nomucho más optimista. “La siniestralidadno solo afecta a los trabajadores dela construcción, sino a todo el sector.La caída en picado de la edificaciónresidencial ha trastocado las esta-dísticas. Todo cae, desde la licitaciónpública hasta los visados colegiales,que han llegado a mínimos”. Y del em-pleo, según el portavoz del sindicato, másvale no hablar: peones que cobran 30 eu-ros por día trabajado, trabajadores chinosdurmiendo en sótanos... “Entre tanto,mucha retórica sobre la innovación.¿Y si todos nos arremangáramos yviéramos cómo ponernos de acuerdopara sacar al sector del agujero? Sisolo esperamos que la crisis amaine,to- dos habremos perdido”, concluye.2

Un rayo de luz al final del túnelLa siniestralidad en el ámbito de la construcción en Catalunya registra los mejores datos de los últimos años

ALBERTO GONZÁLEZÁrea Monográficos M

www.catalunyaconstruye.com

LOS SINDICATOSSUBRAYAN LAIMPORTANCIA DE UNACULTURA PREVENTIVA

ES ERRÓNEO CONSIDERAR LA SALUD COMO UN COSTE AÑADIDO

FUNDACIÓN LABORAL DE LA CONSTRUCCIÓN

Los profesionales aseguran que, con la crisis, muchas compañías apuestan por la formación,y destacan que la seguridad es una partida imprescindible que forma parte del presupuesto

Invertir en prevencióncontinúa siendo rentable

La lucha contra la siniestralidadlaboral no cesa, ni siquiera entiempos de desaceleracióneconómica. Crisis significaoportunidad y según los ex-

pertos participantes en la mesa redondaorganizada por EL PERIÓDICO DE CA-TALUNYA, este es un buen momento pa-ra que, tanto empresario como trabajador,inviertan en formación. La sala de actosdel Institut de Tecnologia de la Construc-ció (Itec) fue el punto de encuentro paradebatir y analizar el momento actual.

El contexto de crisis en el sector animaa reducir gastos, pero muchas empresasapuestan por la prevención para ser máscompetitivas. “Hay que aprovechar lasituación actual de menos actividadpara formarse y salir reforzados, tan-to en prevención como en oficio”, ex-pone Jordi Martínez Navarro, director delCentro de Seguridad y Salud Laboral deBarcelona, de la Conselleria d’Empresa iOcupació. “El riesgo cero es difícil deconseguir, porque puede existir el ries-go sin accidentes, pero es una de lasprioridades del sector.” Una tendenciaque Gemma Carol, gerente del Servei dePrevenció Gaudí, ha visto cómo crecía enlos últimos meses. “Últimamente, lasempresas han formado más a los tra-bajadores y, también hemos obser-vado que han comenzado a realizaractividades que antes no hacían porfalta de tiempo, como analizar los mé-todos de trabajo”, asegura Carol. “Aun-

que en los dos o tres últimos años decrisis, las empresas han tenido queracionar mucho el gasto, aquellas queaún se mantienen, son competitivasy son serias, no han bajado el listónde la prevención”, apostilla.

Invertir en formación supone no perderde vista la seguridad en detrimento del be-neficio económico, y aunque algunas vo-ces han acusado a los empresarios de re-ducir el gasto a expensas de la prevención,Néstor Turró, presidente de la Confede-ració Catalana de la Construcció, rompeuna lanza a favor de los profesionales queactúan dentro de la legalidad y apuestapor perseguir las obras que operan des-de la economía sumergida. “La mayoríade empresas no quieren que se pro-duzcan accidentes, pero el problemade la construcción es que hay muchaeconomía sumergida que no cumplela normativa”, afirma Turró. “La seguri-dad es una partida que forma parte deun presupuesto y es imprescindible”.

MÁS MEDIDAS DE CONTROLTurró apuesta por incrementar las inspec-ciones en todas aquellas obras que nocumplan la ley y que cuenten con traba-jadores que ni siquiera han recibido la for-mación necesaria.

Por su parte, Màrius Martí, presidentede la Associació Catalana de Tècnics enPrevenció de Riscos Laborals lamenta lamala praxis de algunos promotores. “Enlos presupuestos piden que hagas elmismo trabajo pero reduciendo cos-tes y ese 20% menos, que se exige enalgunos casos, de alguna parte debe

salir”, explica. “Muchas veces pareceuna subasta y se viven situaciones de-sesperantes”. Martí también consideraimprescindible reorganizar el sistema decontrol dentro de las obras y definir los ro-les para mejorar en la seguridad; de estemodo, el peligro se puede prevenir másfácilmente.

Sin duda alguna, uno de los temas másespinosos y controvertidos es el que serefiere a la responsabilidad civil de un ac-cidente. Cuando se produce una situaciónde riesgo, ¿quién es el responsable final?Aunque los expertos coinciden en que laformación es clave a la hora de prevenirriesgos, no opinan del mismo modo a lahora de determinar quién es el responsa-ble final de una situación de peligro.

RESPONSABILIDAD EMPRESARIAL Néstor Turró denuncia que los empresa-rios se encuentran desprotegidos a la ho-ra de tomar medidas contra algunos em-pleados que actúan de manera temeraria.“Si un trabajador acude a la obra conuna tasa de alcoholemia superior a lapermitida y tiene un accidente mortal,las responsabilidades penales y eco-nómicas serán para la empresa, parasus cargos directivos”, explica Turró.“Esta es una situación que nos preo-cupa porque, hoy por hoy, no pode-mos obligar a nadie a someterse apruebas de alcoholemia o de drogasantes de entrar en una obra, ni tam-poco prohibirle la entrada. Las perso-nas tienen que ser responsables desus actos a título individual”. Una afir-mación que no es compartida por el res-

to de expertos convocados al debate.Para Jordi Martínez, esta problemática

afecta a una minoría de trabajadores. “In-dividualmente, existe algún caso deeste tipo, pero el problema de losmuertos en la construcción y de los167 heridos graves o muy graves, enlos últimos 12 meses, no es precisa-mente ni el alcohol ni las drogas”, ase-vera Martínez. “La gran mayoría de losaccidentes mortales se produjeron porfalta de medidas de seguridad y, ade-más, por situaciones que se podíanhaber prevenido de manera efectivasi se hubieran destinado los recursosnecesarios”. Martínez afirma que no esuna situación fácil, pero recuerda que laempresa continúa teniendo la potestaddisciplinaria para actuar contra un traba-jador que acuda a la obra sin estar en con-diciones de desempeñar sus funciones.

En esta línea, Gemma Carol recordó que“los trabajadores tienen una respon-sabilidad, pero las empresas también,y disponen de una herramienta, reco-gida en los estatutos y en los conve-nios laborales, que es la disciplina.Cuando un trabajador incumple unanorma, se le tiene que obligar a cum-plirla porque sino pierde su valor nor-mativo”, explica la gerente del Servei dePrevenció Gaudí. “Aquí también entraen juego la jerarquía y, en una obra, eljefe de obra y el de la cuadrilla debentransmitir esa conciencia y esa res-ponsabilidad. Deben velar por la se-guridad en todas las fases de la obra”.En este sentido, Màrius Martí asegura que“las personas actúan por mimetismo”.

El presidente de la Associació Catala-na de Tècnics en Prevenció de Riscos La-borals, Màrius Martí, coincide con Martí-nez en que la situación es preocupante.Martí reivindica una revisión de los luga-res de trabajo, que se analice si la per-sona candidata al puesto cuenta con lasaptitudes necesarias y si se encuentra encondiciones óptimas. “A veces nos per-demos en los temas de seguridad pro-piamente dichos, y la reducción de ac-cidentes viene también por la supervi-sión de muchos otros aspectos de larutina diaria”, apunta. Sobre este tema,Gemma Carol recuerda la existencia de laespecialidad preventiva de Vigilancia de laSalud, “que da sentido a todas las ac-tividades que una empresa ha pues-to en marcha en este sentido. Todoslos trabajadores deben someterse aun reconocimiento médico preventi-vo para saber si es apto o no para se-gún qué tareas”. La mayoría de los ex-pertos coinciden en señalar que la detec-ción y prevención de este tipo de proble-mática ayudaría a disminuir los riesgos la-borales, no solo los accidentes más gra-ves, sino las lesiones que incapacitan altrabajador, afectan a su calidad de viday a su rendimiento.

NUEVOS RETOS DE FUTUROAunque las cifras hablan por sí solas y sehan reducido el número de accidentes ca-si a la mitad en los últimos 10 años, losservicios de prevención de riesgos labo-rales no bajan la guardia. Los participan-tes en la mesa redonda lamentan que he-rramientas como la tarjeta profesional de

la construcción (TPC) haya visto recorta-das muchas de sus competencias. Segúnreza la sentencia, la TPC ya no deberá re-flejar la formación sobre prevención quehaya cursado el titular de la misma. Todoscoinciden en destacar que era una ma-nera eficaz de certificar si el trabajadorcontaba con la formación necesaria. “No-sotros creemos, al margen de lo quepueda decir el tribunal, que es una he-rramienta muy positiva y útil, tanto pa-ra el trabajador como para las empre-sas”, comenta el presidente de la Confe-deració Catalana de la Construcció, Nés-tor Turró. Jordi Martínez, por su parte, afir-ma que “nos sorprendió mucho la sen-tencia porque era una buena manerade evitar duplicidades y, por tanto, esuna buena herramienta”.

Gemma Carol apunta que tal vez el errorfue darle a la TPC carácter obligatorio, enlugar de hacer hincapié en la obligatorie-dad de la formación. “Lo obligatorio esque la gente esté formada, y la TPCera la manera más racional de reunirtoda esta información”. Pero ademásde encontrar un sistema que agilice la re-copilación de esta información, algunosde los retos del futuro de la prevención deriesgos laborales en la construcción nosolo pasan por la reducción de la sinies-tralidad a cero, sino también por incre-mentar el nivel de concienciación colecti-va y establecer una metodología de trabajoen la obra que ayude a disminuir los ries-gos de manera eficaz.2

Vídeo resumen de la mesa redonda en laweb: www.catalunyaconstruye.com

da. “Existen profesiones en las que sepermite la jubilación a los 60 o inclu-so antes, y esta es una medida que yase reclamó en su momento al Minis-terio de Trabajo e Inmigración, paraque también se tuviera en cuenta a lospeones y a los oficiales”.

Para Jordi Martínez, al envejecimientode la población se suma un problema aña-dido inherente a algunas rutinas y méto-dos de trabajo. Se trata de las enferme-dades profesionales que, en muchos ca-sos, derivan en trastornos músculo-es-queléticos. Según el director del Centrode Seguridad y Salud Laboral de Barce-lona, este tipo de lesiones afecta al 48%de los trabajadores de la construcción enEspaña. “Si con 40 o 50 años casi lamitad de los trabajadores del sectorsufre este tipo de lesiones, no sé sipodrán llegar activos más allá de los60 años. La reforma laboral prevé ex-cepciones en la edad de jubilación se-gún la profesión, y el sector de laconstrucción debería tenerse en cuen-ta”, sentencia.

ENFERMEDADES PROFESIONALESAdemás del envejecimiento de la pobla-ción, ¿las rutinas de trabajo se adecuan ala normativa para evitar este tipo de esta-dísticas silenciosas? Para Martínez, es evi-dente que no. “Aunque la tecnología haeliminado muchas tareas pesadas, lamanipulación constante de material,los movimientos repetitivos y las jor-nadas interminables pasan factura.Tenemos un problema muy importan-te”, subraya.

A su juicio, una persona que trabaje en unlugar con malos hábitos se contagiará deesas malas prácticas, y a la inversa. Poresa razón, defiende concienciar desdeedades tempranas. “Del mismo modoque se imparten clases de seguridadvial, tal vez nos deberíamos plantearincluir formación sobre prevención deriesgos en las escuelas”.

A QUÉ EDAD JUBILARSECrear una cultura de prevención es unode los objetivos actuales, pero algunos ex-pertos coinciden en que cambiar las ru-tinas de trabajo de aquellos que poseenuna larga experiencia en el sector no essencillo. Esta problemática se agrava sitenemos en cuenta el envejecimiento pro-gresivo de la población activa, y la entra-da en vigor de medidas como el retrasoen la edad de la jubilación. “El sector dela construcción es uno de los másmaltratados en este sentido”, explicaTurró. “Hay una serie de puestos detrabajo, como oficiales o peones, querequieren unas condiciones físicas,y gente con más de 60 años difícil-mente las puede desarrollar”. Turróconsidera que este tipo de trabajador hallevado a cabo su actividad en condicio-nes duras, a la intemperie y durante mu-chas horas y, aunque la progresiva indus-trialización del sector ha convertido estosprocesos en rutinas más llevaderas, el es-fuerzo físico aún existe. Turró cree nece-sario e imprescindible que la Administra-ción tenga en cuenta una reivindicaciónque han hecho suya tanto empresarioscomo sindicatos: la jubilación anticipa-

ÁNGELA PLAZAÁrea Monográficos M

Néstor Turró, Màrius Martí, Jordi Martínez y Gemma Carol, de izquierda a derecha, en la sede del Institut de Tecnologia de la Construcció.

DLas estadísticas sobre si-niestralidad en el sector indi-can que 15 personas perdie-ron la vida entre enero ynoviembre del 2010

DLos datos también reflejanque un total de 163 trabajado-res han resultado heridos gra-ves o muy graves durante elmismo periodo del 2010

DBarcelona y Tarragona con-tinúan siendo las demarcacio-nes catalanas que presentanunos índices de accidentali-dad más elevados

EL RIESGO,EN CIFRAS

DLos participantes en la me-sa redonda piden medidas la-borales específicas para quelos peones y los oficiales pue-dan jubilarse antes

DLos expertos coinciden en laimportancia de perseguir ysancionar la mala praxis de al-gunos empresarios del sectorde la construcción

DOtro de los objetivos priori-tarios que hay que tener encuenta es fomentar la educa-ción en materia de seguridaddesde las escuelas

LOS AGENTESRECLAMAN

ANNA ALEJO

“El sector debe adaptarse a lasnuevas tecnologías y promoverel control y la seguridad desdedentro de las obras ”

Màrius

MARTÍPRESIDENTE DE LA ASSOCIACIÓ CATALANA DETÈCNICS EN PREVENCIÓ DE RISCOS LABORALS

“Aunque las empresas han tenidoque racionar el gasto, las que sonserias y competitivas no hanbajado el listón de la prevención”

Gemma

CAROLGERENTE DEL SERVEIDE PREVENCIÓ GAUDÍ

“Hay que incrementar lasinspecciones para erradicar laeconomía sumergida y lasprácticas al límite de la legalidad”

Néstor

TURRÓPRESIDENTE DE LA CONFEDERACIÓ CATALANA DE LA CONSTRUCCIÓ

“El 48% de los trabajadores de laconstrucción, de entre 40 y 50años, sufre enfermedadesderivadas de su profesión”

Jordi

MARTÍNEZ NAVARRODIRECTOR GENERAL DEL CENTRO DESEGURIDAD Y SALUD LABORAL DE BARCELONA

Mesa redonda. SEGURIDAD EN LA CONSTRUCCIÓN