capiteles de filiaciÓn cisterciense en iglesias de la ... · da occidental). también permite...

22
51 CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA COMARCA BETANCEIRA 1 MANUEL ANTONIO GARCÍA LAMAS RESUMEN A partir del estudio de dos tipos de capiteles decorados con tallos, se propone considerar la irradiación artística de los enclaves cistercienses de Sobrado y Monfero sobre la veintena larga de iglesias de los siglos XII y XIII incluidas en la comarca de Betanzos, sobre todo en base a los restos con- servados en la sala capitular del monasterio de Sobrado. ABSTRACT From the study of two types of capitals decorated with stems, we propose to ponder over the artistic irradiation of the cistercian enclaves of Sobrado and Monfero on the long score of churches of the XIIth and XIIIth century included in Betanzos’s region, especially on the basis of the remains in the chapterhouse of Sobrado. I En el volumen fotográfico dedicado a la arquitectura cisterciense en Galicia, José Carlos Valle Pérez recogía una serie de capiteles de Oseira y Melón decorados con tallos provistos o carentes de hojas, que se anudan o se cruzan en forma de X en la cara principal de la cesta, aunque a variable altura; en los ángulos un lazo los reúne, y de él penden hojas por lo general a modo de palmetas (Fig. 1) 2 . En la misma Oseira encontramos variantes que denotan la vida de las formas a partir de este modelo sencillo, dúctil 3 . Dos piezas de Meira, a la entrada de sendas capillas de cabecera, son de mayor elaboración al lucir astrágalos sogueados y tallos leñosos, enlazados no sólo en los ángulos sino en la zona superior e inferior de la cara principal, donde se invierten simétricamente (Fig. 2).

Upload: others

Post on 07-Aug-2020

1 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

51

CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE

EN IGLESIAS DE LA COMARCA BETANCEIRA1

MANUEL ANTONIO GARCÍA LAMAS

RESUMEN

A partir del estudio de dos tipos de capiteles decorados con tallos, sepropone considerar la irradiación artística de los enclaves cistercienses deSobrado y Monfero sobre la veintena larga de iglesias de los siglos XII y XIIIincluidas en la comarca de Betanzos, sobre todo en base a los restos con-servados en la sala capitular del monasterio de Sobrado.

ABSTRACT

From the study of two types of capitals decorated with stems, we proposeto ponder over the artistic irradiation of the cistercian enclaves of Sobradoand Monfero on the long score of churches of the XIIth and XIIIth centuryincluded in Betanzos’s region, especially on the basis of the remains in thechapterhouse of Sobrado.

I

En el volumen fotográfico dedicado a la arquitectura cisterciense enGalicia, José Carlos Valle Pérez recogía una serie de capiteles de Oseira yMelón decorados con tallos provistos o carentes de hojas, que se anudan ose cruzan en forma de X en la cara principal de la cesta, aunque a variablealtura; en los ángulos un lazo los reúne, y de él penden hojas por lo generala modo de palmetas (Fig. 1)2. En la misma Oseira encontramos variantesque denotan la vida de las formas a partir de este modelo sencillo, dúctil3.Dos piezas de Meira, a la entrada de sendas capillas de cabecera, son demayor elaboración al lucir astrágalos sogueados y tallos leñosos, enlazadosno sólo en los ángulos sino en la zona superior e inferior de la cara principal,donde se invierten simétricamente (Fig. 2).

Page 2: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

52#52

52

Como el primer tipo (A) se explota a conciencia en la mencionada aba-cial ursariense, edificada entre ca. 1185 y ca. 12394, y se reconoce en lacabecera y en la capilla que se abre al norte del transepto de Melón, data-bles dentro del mismo intervalo, Valle Pérez atribuía su extensión por otrostemplos orensanos coetáneos (San Clodio, Augas Santas, Xunqueira deEspadañedo y San Xoán de Ribadavia) bien al “impacto” de la primera o a lamediación de la segunda5, si bien a posteriori, en el marco de una reflexióngeneral, ve la necesidad de proceder con cautela a la hora de establecerfiliaciones6. No obstante, dado que tenía a los centros de la Orden como“poderosos focos irradiadores de sugerencias artísticas”7, siempre hemosde considerar la premisa de que el motivo se difunde por las respectivasáreas de dominio artístico cisterciense.

Fig. 1: Santa María de Oseira. Capitel de cabecera(Valle Pérez, J. C.- La arquitectura cisterciense en

Galicia, p. 65, fig. 203).

Fig. 2: Santa María de Meira. Capitel de cabecera.

Fig. 4: Catedral de Mondoñedo. Capitel bajo el arcode acceso a la desaparecida capilla sur.

Fig. 3: San Pedro Fiz de Hospital do Incio. Capitelde cabecera.

Page 3: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

53

Fig. 5: Catedral de Mondoñedo. Capitel de laportada oeste.

Siguiendo este principio, James D’Emilioentendía que a partir de Melón se introduceel tipo A –al que denomina “clasped stems”–,a continuación en Oseira, y después se pro-ducen versiones: a los templos ya indicadospor Valle Pérez añade Ramirás y Pombeiro8;por su parte, el tipo B –“banded palmette”–,procedente de Meira, se vierte en un capitelabsidal exterior de la iglesia de Hospital doIncio9. Pero en otra pieza de tallos muy aplas-tados, a modo de cintas, en el interior del mis-mo cuerpo, asistimos a una hibridación entreambos tipos (Fig. 3), a la que también se lle-ga en Santa María de Castro de Rei de Le-mos10, es de sospechar porque se tenía co-nocimiento de ambos más que por unacreación original a partir de cualquiera deellos. De hecho en la catedral de Mondoñedoconviven, si bien en lugares extremos: el B, trasunto de uno de los capitelesde Meira11, bajo el arco de acceso a la desaparecida capilla absidal sur (Fig.4), y en otra pieza degenerada bajo el de la norte, imitando la disposición dela misma iglesia cisterciense; el A, por su parte, en el flanco derecho de laportada occidental (Fig. 5). Como elemento de interés, este último capitelmuestra un fruto angular. Los mindonienses son también ejemplares tardíos,sobre todo con la mirada puesta en el occidental, al haberse datado la dedi-cación de la catedral en 124612. Para explicar la ausencia del tipo A en el“foco” meirense, que conserva los capiteles eclesiales, cabe sugerir que enel claustro o en otra dependencia desaparecida destacaba un hermoso ejem-plar de tallos que ofreció la pauta para la ejecución del catedralicio. Sin sertan estrictos, más razonable parece que uno y otro tipo se hubieran ya difun-dido mediante dibujos, lo que también haría innecesaria la teoría del maes-tro supervisor itinerante para explicar su presencia en varios templos de dis-tinta categoría, aunque tal posibilidad siempre ha de ser considerada13.

Pero la tipología A se dilata aún más en el espacio pues además deverla, dentro de la provincia de Lugo, en San Pedro de Bembibre –cuyotímpano sur lleva la fecha de 1191–14, en la variante de Berbetouros (portadalateral) y en otros templos15, ocupa un lugar en el románico rural de Ponteve-dra: iglesias de Pescoso y Loimil16 y variante de San Andrés de Órrea (porta-da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho másprofundo de la cripta occidental de la catedral de Santiago intercala el pri-mer tipo, de forma seriada, entre los ventanales ciegos (Fig. 6), ofreciendo lamayor pureza y plasticidad hasta ahora vistas. Los tallos, en este caso leño-

Page 4: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

54#54

54

sos, adquieren un relieve consistente, y sus hojas y frutos angulares, nota-blemente despegados, se recortan sobre el fondo de la cesta. Neil Stratfordbuscaba su ascendencia en los primeros edificios góticos del Dominio Realfrancés al indicar que capiteles idénticos tienen acomodo en una de las ca-pillas corales de la catedral de Noyon (Picardía), fechable ca. 1150-1160,mas también hacía notar que se trata de un tipo “relatively common in EarlyGothic French”, sugiriendo que los capiteles “franceses” de la cripta, aunquecon modelos originarios de Ile-de-France, habrían de entenderse tras unaposible adaptación en la Borgoña17. Entre las piezas borgoñonas hemos decitar un soberbio capitel del segundo cuarto del siglo XII atribuible a Saint-Laurent-l´Abbaye conservado en el Museo de Arte de Filadelfia (Fig. 7)18. Noobstante, debe atenderse a posibles paralelos en regiones limítrofes19.

El hecho de que el motivo tenga su distante origen y su abolengo impli-ca que puede identificarse en otras áreas geográficas. Valle Pérez, por ejem-plo, lo ha reconocido en las iglesias cistercienses de Sandoval y Gradefes(provincia de León), dudando de su adscripción al “bloque” gallego20. Por suparte, la iglesia asturiana de San Martín de Gurullés (concejo de Grado)muestra bajo su arco triunfal un hermoso capitel de tallos y hojas rizadas,cercano a nuestro motivo, al parecer prodigado en el románico del Principa-do21. Además, cabe localizarlo en iglesias catedrales, abaciales, parroquialesy capillas, así como en otros contextos: modillón bajo vierteaguas de facha-da (San Xoán de Ribadavia), mocheta (Oseira) y hasta pila benditera (SanXoán de Portomarín)22.

Fig. 6: Cripta del pórtico oeste de la catedral de San-tiago. Capitel de cabecera.

Fig. 7: Museo de Arte de Filadelfia. Capitel borgo-ñón (Cahn, W.- Romanesque sculpture in American

Collections, XI, p. 59, fig. 22).

Page 5: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

55

II.1.

Si ahora centramos nuestra atención en la comarca de Betanzos23,observamos la persistencia del motivo, con manifestaciones en Santa Ma-ría de Cuíña (nº 1), (Fig. 8), y en la ermita de San Cosme (nº 1 y 2), (Fig. 9),inclusa en la parroquia de Mántaras, entre las que median poco más dediez kilómetros en línea recta, pero a las que parecen convenir datacionesmuy diferentes. La primera ha sido fechada entre finales del XII y principiosdel XIII24, mas la otra nos adelanta, al menos, hasta la segunda mitad delXIV ante la semejanza de su escultura con el arte que promueve FernánPérez de Andrade O Bóo25. En este último caso la peculiaridad no estribatan sólo en que el motivo sea, por una vez, de cronología “baja” pues se leha conferido especial importancia al exhibirlo por duplicado en la portada.De todas maneras, nos hallamos ante una versión grosera y simplificadaen la que los tallos leñosos siguen el trazado de la tipología B tan sólo en lasección angular; el capitel de Cuíña, por su parte, guarda parecido con elinterior de Hospital do Incio (Fig. 3), aunque el escultor imponga a sustallos un recorrido más sinuoso. Pese a la cercanía relativa de ambos tem-plos, no resulta convincente el pensar que los capiteles de Mántaras deri-ven de la pieza de Cuíña; a lo que parece, recogen un motivo instituido queya ofrecía distintas respuestas y cuya dependencia quizá hubiera de bus-carse, una vez más, en el dominio cisterciense: el monasterio de Sobrado,y quizá el de Monfero, su afiliado, situados ambos en la vecindad de nues-tra comarca, si bien uno al sudeste y otro al nordeste, respectivamente.Tales vínculos bernardos fueron justamente señalados por James D’Emilioen relación a la ermita de San Cosme, cuyos capiteles también reconociócomo tardíos y vinculables con Monfero26, y por Mª del Pilar Carrillo Lista enrelación a Cuíña27. Nuevas interpretaciones un tanto libres, con los tallos amodo de cintas de trazado singular, advertimos en tres ejemplares (Mondoi,

Fig. 8: Santa María de Cuíña. Capitel de ca-becera (nº 1).

Fig. 9: Capilla de San Cosme (Santa María de Mántaras).Capiteles de la portada occidental (nº 1 y 2).

Page 6: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

56#56

56

Localización de los templos de la comarca de Betanzos citados en el texto, así como de los enclavescistercienses de Sobrado y Monfero (sobre el Mapa Comarcal de Galicia, Compostela: Xunta de Galicia,D.L. 1997).

Page 7: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

57

nº 3; Porzomillos, nº 4; Verís, nº 1), (Fig.10), el último de ellos adscrito por el citadoprofesor al grupo que nos ocupa28.

Las obras en la iglesia cisterciensede Sobrado hubieron de iniciarse “ca.1150 o poco después”, abarcando hastael primer veintenio del XIII. De esta etapaconservamos restos de la sala capitular,fechable hacia el 1215-1220, si bien ente-ramente reconstruida (a excepción de ungrupo de columnas en sus portadas), quehoy alberga una pequeña serie de capite-les, en su mayoría entregos, simples ydobles, en tanto que otros ocupan la ca-pilla de San Xoán, al norte del transeptoeclesial, así como tres atribuidos al monasterio se conservan en la iglesiade San Pedro da Porta29; en ninguno de ellos apreciamos el motivo enestudio. Sin embargo, éste hace acto de presencia bajo el arco triunfal deCarelle, iglesia con elementos tardorrománicos situada a 5 kms. de Sobra-do, la familiaridad de cuyo capitel con Cuíña ya advirtió Carrillo Lista (Fig.11)30. Monfero, por su parte, carece prácticamente de escultura arquitectó-nica medieval, a no ser el capitel de entrelazo en un lienzo antiguo delcostado meridional de la iglesia, de tipo muy distinto al nuestro. La funda-ción del monasterio se ha llegado a fijar en 1134, y su incorporación alCíster, bajo la tutela de Sobrado, en 114731. Más difícil resulta establecer lasecuencia constructiva de la iglesia medieval, que gozaba de tres naves.La fábrica del templo –no sabemos si la primera u otra posterior– se vefavorecida con donaciones desde la segunda mitad del siglo XIII. La cabe-cera, al menos, estaba finalizada en 1328 al disponerse entonces sepulturaante el altar mayor, aunque el edificio aúnpermanecía inconcluso en 1362, lo quenos aproxima a la fecha asignada a Mán-taras32. De esta manera, ¿los capiteles detallos de Cuíña y San Cosme –emplazadala segunda a unos 10 kms. de Monfero–dependerían de dicho cenobio, al igualque pudiera haber sucedido con Carellerespecto a Sobrado?

Si ahora reconsideramos los mencio-nados capiteles de la cripta occidental dela catedral de Santiago, cuya situación enel extremo oriental aboga por su datación

Fig. 10: San Pedro de Porzomillos. Capitel de cabe-cera (nº 4).

Fig. 11: San Lourenzo de Carelle. Capitel de cabe-cera.

Page 8: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

58#58

58

temprana dentro del conjunto de actuaciones que culminaron en la consa-gración de 1211, tal vez una primera etapa que arranca a comienzos de losaños sesenta33, y por otra parte los supuestos homólogos sobradenses, des-aparecidos, cuya iglesia se inició en torno a unos diez años antes, ¿quiereello significar la repercusión de Sobrado sobre Compostela, entre los quedistan unos 50 kms.? Ante la importancia de las labores acometidas en unoy otro centro, y las patentes diferencias de estilo entre las piezas del monas-terio y las de la cripta, sería más adecuado pensar que en las respectivaslabras participaron equipos independientes, aunque no necesariamente des-conocidos, cuyos álbumes o libros de modelos recogían una decoraciónpresente en el ascendiente común: la escultura arquitectónica de regionesdel norte o centro-este de Francia, es decir, Picardía, Ile-de-France, Champañao Borgoña34. Otra cuestión sería discriminar lo que deben a alguno de estosámbitos o a la basílica jacobea otros capiteles gallegos de iglesias de laOrden.

II.2.

Las similitudes entre los capiteles de tallos de ambos templos betancei-ros (Cuíña y Mántaras) y otros del Císter han de considerarse pruebas cir-cunstanciales o indirectas de la repercusión de Sobrado-Monfero al careceren tales centros de referentes. Quizá pudieran obtenerse otras pruebas, in-cluso directas, si reparamos en nuevos tipos de capiteles integrados en laveintena larga de iglesias de los siglos XII- XIII esparcidas por la comarcabetanceira, y tratamos de relacionarlos con los vestigios, desmembrados orecompuestos, presentes en la sala capitular sobradense. Mª del Pilar Carri-llo Lista ha detectado ese “espíritu del Císter”35, dentro de nuestra comarca,en Verís, Porzomillos y Cuíña.

Partiendo del total de edificios, observamos que la serie más importan-te en cantidad es la de Mezonzo, un antiguo monasterio donado en 1183 a laIglesia de Santiago por Fernando II36, cuyos 68 capiteles eclesiales repre-sentan bastante más de la mitad del total de producciones; en cuanto amunicipios, Oza dos Ríos y Coirós suman el mayor número de iglesias (sieteel primero, seis el segundo), aunque con capiteles de limitado repertorioformal.

En primer lugar, quisiera destacar la notoria presencia de los astrága-los sogueados en capiteles de cabeceras, bien en el interior de los ábsideso en columnillas de sus ventanas (A Espenuca [Coirós], Brabío, Coirós,Colantres, Doroña, Lesa, Mondoi, Santa María de Ois, San Pedro de Ozados Ríos, Quintás y Reboredo), y en dos casos, en la portada principal (AEspenuca y Tiobre), aunque pocas de ellas subsistan. Desde luego, sor-

Page 9: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

59

prende encontrarlos con frecuencia y, por lo general, buena factura en es-tas iglesias rurales de planeamiento tradicional (Fig. 22), aunque no selimite a nuestra comarca al estar presente, sin ir más lejos, en el entorno dela capital coruñesa. Pese a las conocidas vinculaciones protohistóricas delmotivo, su expansión por tierras betanceiras habría de entenderse, quizá,por otras razones, como la del rescate o la supervivencia de una prácticaprerrománica37, a no ser que provenga de un medio contemporáneo. Lacatedral de Santiago prescinde del mismo, y en el Císter gallego es muyselectivo, asociándose –como hemos visto– a la tipología B de los capite-les de tallos, más preciosista, tanto en Meira como en la catedral de Mon-doñedo (Figs. 2 y 4), donde se concentra en siete piezas sobre un total quesupera en mucho la centena; en Armenteira, por su parte, y de forma pocosatisfactoria, decora tres en el flanco derecho de la puerta principal38. Mepregunto si se empleó con asiduidad en Sobrado-Monfero, aunque un úni-co y patente testimonio ofrece el enorme capitel poligonal que corona elpilar sudoccidental de la sala capitular (Fig. 12). No obstante, de él se pres-cinde en Mezonzo, la iglesia medieval de la comarca betanceira más próxi-ma a Sobrado, lo que no implica su inexistencia en el enclave bernardosino, sencillamente, un descarte.

Los capiteles del todo lisos, como manifestación acendrada de la aus-teridad cisterciense, están prácticamente ausentes de la comarca; tan sóloconozco uno de muy basto granito, jaspeado (Mezonzo, nº 25), (Fig. 13)39.Existe un tipo más reconocible de grandes hojas lisas tan integradas en lacesta que, en vez de adaptarse a su contorno, parecen generar ellas mismasel capitel, pudiendo adquirir éste una fisonomía estilizada, campaniforme. Alos contornos foliares superiores pueden también adherirse tréboles o for-mas lobuladas (Mezonzo, nº 4 y 6; Tiobre, nº 1; Viñas, nº 1- 4). Como refe-

Fig. 12: Santa Maria de Sobrado. Capitel de la salacapitular.

Fig. 13: Santa María de Mezonzo. Capitel de la nave(nº 25).

Page 10: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

60#60

60

rente sugerimos una pieza suelta deposita-da en el Museo Provincial de Lugo que talvez haya pertenecido al claustro del monas-terio de Meira, datada por Valle Pérez ca. 1225(Fig. 14)40. Dado que una similar destaca contoda su pureza en el exterior de la cabecerade Mezonzo (nº 4), (Fig. 15), quizá más tem-prana41, entendemos que dicho tipo pudierahaberse difundido desde fechas anteriores apartir de Sobrado. En todo caso, su formabásica llega a alcanzar gran proyección tem-poral42.

Uno de los ejemplares anteriores (Tio-bre, nº 1) dispone de caulículos y de dimi-nutas bolas que se van interponiendo en losángulos que éstos forman, haciendo juegocon las bolas mayores que las hojas abri-gan. La misma estructura guardan dos ca-piteles fronteros (Tiobre, nº 2 y 3), (Fig. 17).Aunque sin la presencia de vástagos, a estaocupación de esferas menores y mayoresen los espacios interfoliares y en el limbo,que crean el mismo efecto, se recurre en uncapitel entrego sobradense y en el del án-gulo nordeste del Capítulo (Fig. 16). La pie-za del ángulo sudoeste de la misma estan-cia exhibe colgados del centro de las hojasgrandes frutos picudos y reticulados identi-ficables con piñas o fresas (Fig. 18), princi-pio seguido en dos de nuestros templos

(Mezonzo, nº 15, 20 y 22; Verís, nº 2), (Fig. 19). A una hibridación entreambos tipos parece haberse llegado en tres casos (Mezonzo, nº 17, 19 y21), (Fig. 20), al combinar bolas intercaladas con frutos picudos en lashojas laterales.

El gran ejemplar sobradense del Capítulo, poligonal y exento (Fig. 12),culmina sus vegetaciones con dos registros: bolas o roleos, por un lado, ypor el otro pequeñas hojas densas de forma avenerada, a modo de cogo-llos, así denominados (cogulhos) por una autora portuguesa que hizo notarsu presencia en la iglesia cisterciense de Alcobaça43. Estos últimos elemen-tos vemos en dos iglesias de nuestra geografía, en los que el motivo pareceser resultado de la transformación de las volutas angulares del capitel corintio(Lesa, nº 1, 2 y 4; Porzomillos, nº 1 - 4), (Figs 10 y 27).

Fig. 14: Museo Provincial de Lugo. Capitel atri-buido a Santa María de Meira (Valle Pérez.- La

arquitectura cisterciense, p. 151, fig. 517).

Fig. 15: Santa María de Mezonzo. Capitel absidal(nº 4).

Page 11: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

61

Fig. 16: Santa María de Sobrado. Capitelde la sala capitular.

Fig. 17: San Martiño de Tiobre. Capiteles de la portada occidental (nº 2

y nº 3).

Uno de los capiteles entregos de Sobrado procede a la neta diferencia-ción de las hojas inferiores, muy destacadas, y de las volutas superiores, depronunciadas espirales, unidas ambas por largas tiras de caulículos (Fig.21). Dicha tipología parece haberse interpretado en algunos templosbetanceiros (Coirós, nº 1 y 2; Doroña, nº 1; Mondoi, nº 1 y 2; Santa María deOis, nº 1-4), (Fig. 22).

Al contrario que las otras iglesias de la comarca, Mezonzo gusta depresentar en capiteles de distinta calidad repartidos por cabecera y navehojas con incisiones radiales paralelas (penninervias), a veces con un mar-cado nervio central (Mezonzo, nº 1, 3, 8, 9, 10, 15, 18 y 24), (Fig. 24). Éstastambién reaparecen en la capilla sobradense de San Xoán44 y en algunosejemplares que ocupan las portadas de la sala capitular, no sabemos si de-rivados de piezas anteriores (Fig. 23). Para estrechar lazos ha de repararseen que algún ábaco de las mismas portadas contiene un disco de radioscurvos, con paralelo en un destacable capitel de la primera iglesia (Mezonzo,nº 14).

Fig. 18: Santa Maria de Sobrado.Capitel de la sala capitular.

Fig. 19: Santa María de Verís. Ca-pital absidal (nº 2).

Fig. 20 – Santa María de Mezonzo. Capitelde la nave (nº 19)

Page 12: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

62#62

62

Fig. 25: Santa María de Meira. Detalle del tímpanode la portada sur.

Fig. 26: Santa María de Mezonzo. Capitel de la nave(nº 23)

Fig. 21: Santa María de Sobrado. Capitelen la sala capitular.

Fig. 22: Santa María de Ois. Capitel absidal (nº 2).

Fig. 23: Santa María de Sobrado. Capitel en una portadade la sala capitular.

Fig. 24: Santa María de Mezonzo. Capitelabsidal (nº 1).

Page 13: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

63

Resulta muy sugerente emparentar a las piezas que recurren a un holga-do trenzado en los ábacos (Mezonzo, nº 13 y 18; Verís, nº 2), (Fig. 19)45, con elplinto de una basa de la capilla sobradense de San Xoán, de similar decora-ción, que pudiera derivar de basas o capiteles del edificio cisterciense46.

En lo que respecta a plantas o formas arbustivas, nada conservamosen Sobrado; sin embargo en Meira es bien conocido el tímpano meridional,cuyo Agnus Dei (Fig. 25) se ve flanqueado por lo que Valle Pérez interpreta,en un contexto apocalíptico, como la arboleda de la vida en base al modelode la miniatura de un Beato47, aunque señala que la forma del pie semeja deun candelabro, objeto que creen reconocer Sánchez Ameijeiras y JamesD´Emilio48, si bien Yzquierdo Perrín le reintegra su condición vegetal, asig-nándole un estrecho parentesco con el tímpano norte de San Salvador deSarria49. En tres casos, dentro de nuestra comarca, se advierten formas algoparecidas, desde luego vegetales, aunque restringidas a un solo elementoidentificable con una planta de peciolos simétricos de los cuales pendenhojas acorazonadas o lanceoladas (Lesa, nº 3; Mezonzo, nº 23; Porzomillos,nº 2), (Fig. 26). Cabe especular acerca de una decoración similar que sirvie-ra de guía en Sobrado-Monfero.

Al campo de la especulación también ha de fiarse un curioso capitelde Porzomillos cuya cara central, aplanada, se cubre con lacería de enmar-que cuadrangular, nudos intermedios y un rombo inscrito (nº 1), (Fig. 27).Según Carrillo Lista, guarda parecido con metopas de Castrelo de Miño,San Xoán de Ribadavia y San Estebo de Ribas de Sil50. Este mismo diseñose repite, curiosamente, en el frente del pilar derecho que articula la porta-da occidental de Vilar de Donas, por debajo de la imposta (Fig. 28), obradel segundo cuarto del siglo XIII. No creo que ello implique una afinidadestilística ante las diferencias entre el capitel betanceiro y los de la fachada

Fig. 27: San Pedro de Porzomillos. Capitel de ca-becera (nº 1).

Fig. 28: San Salvador de Vilar de Donas. Pilar dere-cho de la portada occidental.

Page 14: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

64#64

64

de la iglesia santiaguista, ni tan siquiera ladependencia de la lacería del primer templorespecto a la del segundo; así, pese a la ri-queza del lucense, es más logrado el diseñode Porzomillos al seguirse mejor el curso delas vueltas y los lazos. Me pregunto si enambos casos pudiera tratarse de un peculiarsigno lapidario inspirado en el arte de la es-critura; en concreto, en alguno de los signosde validación que ornan los escatocolos. Unode ellos, muy difundido a lo largo del Medie-vo y aún después, responde al nuestro en lobásico, es decir, un enmarque cuadrangularcon vueltas angulares y una forma romboi-

dal o estrellada, bien inscrita, bien circunscrita (Fig. 29). En un templo comoéste incluido en el campo de actuación de Sobrado, y ante el referentegráfico, habríamos de escudriñar la colección documental del monasterio,en particular sus famosos Tumbos, escritos a mediados del siglo XIII51, paradeterminar quizá no tanto la filiación concreta del signo lapidario sino lafamiliaridad que pudieron haber tenido los escultores que intervinieron ennuestra comarca con los signos de las escrituras coetáneas.

III.

James D’Emilio ha expresado la conjetura de que la decoraciónsobradense tardía depende de Meira ante ciertas concordancias ornamen-tales genéricas y ante la gran semejanza de un capitel de uno y otro centro52.Como el autor defiende convincentemente la difusión meridional del estilomeirense hacia O Incio y Sarria53, nada tendría de extraño que sus artíficesse hubiesen desviado un tanto hacia el oeste hasta recalar en Sobrado. Sinembargo la decoración de Meira, por un lado, y de Sobrado, por el otro,parece mantener su personalidad propia; por tanto, ¿sería factible que losejemplares tan parecidos respondiesen a un diseño ultrapirenaico? Y es que,si prescindimos de los capiteles con tallos en X, de muy ramificada genealo-gía y cuya presencia en Sobrado-Monfero es altamente posible, aunque nosegura, resulta significativo que los demás analizados en la comarca deBetanzos guarden parentesco con las pocas piezas sobradenses en mayormedida que con el gran número que se distribuye por las iglesias de Oseiray Meira. Falta por saber si la parte que a Sobrado-Monfero corresponde en elcomponente vegetal de la misma es representativa de su repertorio o si seprocedió a una selección. Atendiendo a la cronología de la iglesia de Sobra-do, temprana en relación a las de nuestra comarca, así como a la de su

Fig. 29 – Signum de un escriba (año 1561).

Page 15: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

65

Capítulo, tal vez coetáneo de muchas de ellas, entra en lo posible que escul-tores ocupados por entonces en iglesias de la tierra de Betanzos fuesenartífices menores que intervinieron o se formaron en el obrador del monaste-rio. Y si reparamos en los mejores capiteles, que ocupan las cabeceras dePorzomillos y Mezonzo, ¿se debería su factura a destacados artistas quelabraron en Sobrado-Monfero? Es por ello que a mucha de la decoraciónvegetal estudiada cabe entenderla no como producto de la influencia sinode la vivencia o el reflejo menor del arte que por entonces se estaba creandoen ambos enclaves.

No obstante, en la comarca betanceira no son exclusivos ni excluyen-tes los modelos cistercienses o, en su caso, sobradenses. La gran proyec-ción volumétrica de las volutas en los capiteles de Brabío (nº 3 y 4), lostensos pitones angulares de Reboredo (nº 1 y 2), (Fig. 30), o los lobuladosen dos ejemplares de Mezonzo (nº 11 y 12), (Fig. 31), abogan por su depen-dencia de la catedral compostelana, ya señalada por Carrillo Lista54, o porcopias de ella derivadas. Las protuberancias cuadrangulares en la parte mediade los ábacos se observan en cier-tos capiteles de las ventanas absi-dales de Mezonzo (nº 1, 2, 4, 5 y7), (Fig. 15), con ascendencia enlas catedrales de Compostela yLugo (Fig. 33)55. Por otra parte, enejemplares interiores de Tiobre sehan advertido formulaciones san-tiaguesas56, que deben comple-mentarse con los vínculos cister-cienses percibidos en capiteles dela portada principal.

En cuanto a la figuración, nosé que consideración otorgar a lasescasas representaciones terio-morfas de la comarca. Los leonesafrontados en sendos capiteles deuna ventana absidal, en la actuali-dad acéfalos (Brabío, nº 1 y 2), pue-den recordar a los de un ejemplarursariense57; en otro los animalesse apiñan de manera muy tosca(Mondoi, nº 4), y en el último os-tentan un elegante porte (Mezon-zo, nº 16), (Fig. 32). Dado que losleones no caracterizan al medio

Fig. 30: Santiago de Reboredo. Capitel de cabecera (nº 1).

Fig. 31: Santa María de Mezonzo. Capitel de cabecera (nº 11).

Page 16: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

66#66

66

artístico cisterciense de Galicia, ¿los de nuestras iglesias –los dos últimos, almenos– evocarán a otros compostelanos (Fig. 33)? Sin embargo, y como seha recalcado en más de una ocasión58, las imposiciones de la Orden limita-ron el arte de los escultores, en cuyo repertorio pudieran contarse animalescomo éstos.

La coexistencia en las mismas piezas de astrágalos sogueados conflora de fisonomía compostelana, o en un mismo templo y etapa, de piezasde corte compostelano y cisterciense, e incluso la inconcreta adscripción delos leones obliga a considerar los “diálogos” e “interacciones” puestos demanifiesto por James D’Emilio al analizar capiteles de la diócesis lucense,análisis que además enriquece al ambientarlos en el contexto específico quele brindan las colecciones documentales y los estudios históricos.

A los contados capiteles sobradenses reunidos en el Capítulo no se lesdefine adecuadamente recurriendo a la tópica austeridad cisterciense sino alas cualidades derivadas de la observancia de una disciplina: vegetacionesde amplias superficies lisas, bien delineadas, con adición de mínimos ele-mentos que les imprimen una sencilla articulación (Figs. 12, 16, 18 y 21).Estas características las apreciamos, con mayor o menor intensidad y acier-to, en muchos congéneres de las iglesias mencionadas. Por tanto, las rela-ciones entre los capiteles de Sobrado-Monfero y otros de la tierra de Betanzos,que en algunos casos se vislumbran y en otros parecen desvelarse, animana considerar bien al tándem o a Sobrado en exclusiva como un verdadero“foco de irradiación artística” hacia esta comarca.

Fig. 32: Santa María de Mezonzo. Capitel de ca-becera (nº 16).

Fig. 33: Catedral de Santiago. Capitel.

Page 17: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

67

APÉNDICE:

DIAGRAMAS DE SITUACIÓN DE LOS CAPITELES CITADOS EN EL TEXTO

San Xiao de Coirós.San Martiño de Brabío.

Santa María de Cuíña.

Santa Cruz de Mondoi. Santa María de Ois. San Pedro de Porzomillos.

Santa María de Doroña.

Santa María de Verís.

Santiago de Reboredo.

Page 18: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

68#68

68

San Martiño de Tiobre.

Santa María de Mezonzo.

Page 19: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

69

San Cosme deMántaras.

Santa Mariña de Lesa. San Pantaleón dasViñas.

Page 20: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

70#70

70

NOTAS

1 Los números en cursiva que se distribuyen por el cuerpo de texto atañen a la topografía delos capiteles, recogida en diagramas del apéndice. Los templos parroquiales se nombran sin laadvocación, salvo en el caso de homónimos.

2 La arquitectura cisterciense en Galicia, vol. II, A Coruña: Fund. Barrié de la Maza, 1982 (Oseira:figs. 148, 149, 193, 203, 225, 243, 256, 267, 270, 296, 297, 298 y 315; Melón: figs. 654, 655, 658,677 y 678).

3 Id., figs. 194, 217, 236, 244, 275, 277, 278 y 316.4 Id., vol. I, p. 126.5 Id., p. 134, n. 115; 135, n. 124; 235, n. 125; 237, n. 196.6 “Los estudios sobre la implantación de la Orden del Císter en España: el caso de Galicia.

Situación actual y perspectivas”, El Museo de Pontevedra, nº 43 (1989), pp. 138-139.7 Valle Pérez, José Carlos.- La arquitectura cisterciense… Cit., p. 47.8 D’Emilio, James.- “The romanesque churches of Galicia: the making of a provincial art”,

IV Congreso Internacional de Estudios Galegos (Universidad de Oxford, 26-28 de septiembrede 1.994), actas, vol. II, Oxford: Centro de Estudios Galegos, 1997, pp. 549-550.

9 Id., pp. 564-567 y fig. 19.10 Id., fig. 23.11 Castro Fernández, Celia.- Estudio iconográfico y estilístico de los capiteles de la catedral

de Mondoñedo, Lugo: Diputación Provincial, 1993, p. 65.12 Mayán Fernández, Francisco.- “Fecha de dedicación de la Santa Iglesia Catedral de Mondo-

ñedo”, Boletín de la Comisión Provincial de Monumentos Histórico-Artísticos de Lugo, vol. VII, nº53-56 (1960-1961), pp. 13-15.13 Acerca de ella vide D’Emilio, James.- Op. Cit., p. 551; ID.- “The cistercians and the romanesque

churches of Galicia: Compostela or Clairvaux?”, Perspectives for an Architecture of Solitude (Essayson Cistercians, Art and Architecture in honour of Peter Fergusson), Terryl N. Kinder (ed.), Turnhout:Brepols/Cîteaux, 2004, pp. 325-326.14 Yzquierdo Perrín, Ramón.- La arquitectura románica en Lugo (I: Parroquias al oeste del Miño),

A Coruña: Fund. Barrié de la Maza, 1983, p. 105 y Fig. p. 309. Aquí reencontramos las lazadas enzig-zag de un ejemplar ursariense (Valle Pérez, J. C.- La arquitectura cisterciense… Cit., fig. 217).15 D’Emilio, James.- “The cistercians…” Cit., p. 318 y n. 29.16 Bango Torviso, Isidro G.- Arquitectura románica en Pontevedra, A Coruña: Fund. Barrié de la

Maza, D.L.1979, láms. XX d (Pescoso) y XLIX e-f (Loimil).17 “Compostela and Burgundy? Thoughts on the western crypt of the cathedral of Santiago”,

Simposio Internacional sobre “O Pórtico da Gloria e a arte do seu tempo” (Compostela, 3-8 deoctubre de 1988), actas, Compostela: Xunta de Galicia, D.L. 1991, p. 58. También se reconoció elmotivo en iglesias picardas del segundo cuarto del siglo XII, si bien buscando una ascendenciagenérica del capitel meirense (D’ Emilio, James.- “Compostela or Clairvaux?...” Cit., p. 319, n. 31y fig. 7).18 Cahn, Walter.- “Romanesque sculpture in American Collections. XI. The Philadelphia Museum

of Art”, Gesta, vol. 13, nº 1 (1974), p. 59, fig. 22.19 Es el caso de uno de los magníficos ejemplares del Museo de San Remigio de Reims

(Champaña), en este caso doble, procedente del claustro de la abacial y también datado en elsegundo cuarto del siglo XII (Johnson, Danielle V.- “Fingerprinting stone from Saint-Remi in Reims”,Perspectives for an Architecture of Solitude… Cit., pp. 284-286 y fig. 7).20 “La arquitectura en el Reino de León en tiempos de Fernando II y Alfonso IX: las construccio-

nes de la Orden del Císter”, Simposio Internacional sobre “O Pórtico da Gloria e a arte do seutempo”... Cit., p. 172, n. 117.21 Álvarez Martínez, Mª de la Soledad.- El Románico en Asturias, Gijón: Trea, 1999, pp. 179-80 y

Fig. p. 180.22 Valle Pérez, José Carlos.- La arquitectura cisterciense… Cit., fig. 301 (mocheta); D’Emilio,

James.- “The romanesque churches…” Cit., fig. 24 (pila benditera).23 Así designada en la división comarcal aprobada por la Xunta de Galicia el 20 de febrero de

1997, y constituida por los siguientes municipios: Aranga, Betanzos, Cesuras, Coirós, Curtis,

Page 21: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

71

Irixoa, Miño, Oza dos Ríos, Paderne, Vilarmaior y Vilasantar (Mapa Comarcal de Galicia [esca-la 1: 250.000], Compostela: Xunta de Galicia, D.L. 1997) No obstante, Betanzos ha sido inclui-do en el Golfo o Arco Ártabro, de acuerdo con la denominación de Otero Pedrayo, o bien –junto con otros municipios de la relación– en As Mariñas dos Condes, posible recuerdo delseñorío de los condes de Trastámara. Por otra parte, el análisis artístico diferencia un “románi-co de la comarca eumesa”, al que se acogen dos templos que oficialmente habrían de perte-necer a la betanceira: Santa María de Doroña (Vilarmaior) y San Xoán de Vilanova (Miño). (VideVázquez Penedo, Álvaro.- El Románico en la Comarca Eumesa, Pontedeume: Imp. Vda. LópezTorre, 1977; Castro Álvarez, Carlos de.- Igrexas románicas da Comarca do Eume, [Compostela]:Xunta de Galicia, 1997).24 Carrillo Lista, Mª del Pilar.- Arte románico en el Golfo Ártabro y el oriente coruñés (Archivo de

ordenador). (Tesis Doctoral dir. por el Prof. Ramón Yzquierdo Perrín y tutelada por el Prof. JulioVázquez Castro), Universidad de Compostela, D.L. 2005, p. 747.25 El edificio ha sido datado en el primer tercio del XV (Caamaño Martínez, Jesús María.- Contri-

bución al estudio del Gótico en Galicia [Diócesis de Santiago], Valladolid: Universidad, 1962, pp.113-115). Al relacionarse perfectamente nuestros capiteles con los del flanco derecho en mate-rial y formato, y al recoger éstos la temática y estilo prodigados por el taller o talleres fernandinos,se hace difícil tener a los primeros como fragmentos románicos reutilizados.26 D’Emilio, James.- “Compostela or Clairvaux?...”, Cit., p. 319. Los vínculos entre Monfero y O

Bóo –con cuyo taller o talleres guarda relación la capilla de San Cosme, según hemos dicho–son bien conocidos al hacerle éste concesiones en 1.370 y fundar en él una capellanía (LópezSangil, José Luis.- “Fernán Pérez de Andrade III, O Bóo. Sus relaciones con la Iglesia y el mona-cato: Monfero y la Granja de Sáa”, Cátedra, nº 9 [2002], pp. 123, 127, 139-141 [ap. II] y 142-143[ap. III]).27 Carrillo Lista, Mª del Pilar.- Op. Cit., p. 744.28 D’Emilio, James.- “Compostela or Clairvaux?...”, Cit., pp. 318-319.29 Acerca de las dataciones y asientos de las piezas vide Valle Pérez, José Carlos.- La arquitec-

tura cisterciense... Cit., pp. 66-67, 71, 78, 80 y 81.30 Carrillo Lista, Mª del Pilar.- Op. Cit., pp. 759-760.31 López Sangil, José Luis.- “Privilegios reales concedidos por Alfonso VII, Fernando II y Alfon-

so IX al Monasterio de Santa María de Monfero (años 1135 a 1213)”, Cátedra, nº 5 (1998), pp.107-109; ID.- Historia del monasterio de Santa María de Monfero, A Coruña: Dip. Provincial [1999],pp. 25-26.32 Acerca de esta secuencia cronológica vide Valle Pérez, José Carlos.- La arquitectura

cisterciense…Cit., p. 56, n. 92; López Sangil, José Luis.- Historia… Cit., pp. 58-59.33 Sendas mandas ad opus (años 1160 y 1161) han llevado a sugerir la “reactivación” de la

fábrica catedralicia (Manso Porto, Mª del Carmen.- “El documento de 1161 relativo a la supuestaintervención del maestro Mateo en la construcción del puente de Cesures”, Simposio Internacio-nal sobre “O Pórtico da Gloria e a arte do seu tempo”… Cit., pp. 103-115), a las que despuéshemos de sumar el famoso privilegio de Fernando II de 1168 (López Ferreiro, Antonio.- Historia dela Santa A. M. Iglesia de Santiago de Compostela, t. V, Compostela, 1902, doc. nº IX, pp. 27-30).34 La impronta borgoñona en el Císter gallego ha sido recalcada por Valle Pérez (La arquitectu-

ra cisterciense… Cit., pp. 43-45; 70; 78; 148, n. 434; 158-160; 239, n. 240; 276; 286).35 Así titula el capítulo 11 de su Tesis Doctoral.36 Tumbo A de la Catedral de Santiago (estudio y edición de Manuel Lucas Álvarez), Compostela:

Seminario de Estudios Galegos/Cabildo Catedralicio, 1998, doc. nº 134, pp. 271-272.37 A propósito de su presencia en capiteles prerrománicos asturianos, se recordó la aparición

del motivo no en el arte indígena sino en homólogos bizantinos del siglo VI (Schlunk, Helmut.-“La decoración de los monumentos ramirenses”, Boletín del Instituto de Estudios Asturianos, t. V[1948], pp. 58-59).38 Valle Pérez, José Carlos.- La arquitectura cisterciense… Cit., fig. 784.39 Según apreció Carrillo Lista, los que se sitúan bajo el arco triunfal de Colantres fueron repica-

dos (Op. Cit., p. 260), y de hecho quedan restos vegetales en los extremos.40 Valle Pérez, José Carlos.- La arquitectura cisterciense… Cit., p. 175 y fig. 517.

Page 22: CAPITELES DE FILIACIÓN CISTERCIENSE EN IGLESIAS DE LA ... · da occidental). También permite retroceder en el tiempo; así, el nicho más profundo de la cripta occidental de la

72#72

72

41 Desde luego, no sería anterior a las postrimerías del siglo XII a juzgar por la arcatura de lacornisa absidal, difundida a partir de entonces (Valle Pérez, José Carlos.- “Las cornisas sobrearquitos en la arquitectura del noroeste de la Península Ibérica”, Compostellanum, vol. 29, nº 3-4[1984], pp. 312-326). Carrillo Lista sitúa a la cabecera en una primera campaña fechable afinales del XII o en los primeros años del XIII (Op. Cit., pp. 548-549).42 Fernández Pérez, Sonia María.- “Capitel xeminado”, Luces de Peregrinación (Xacobeo 2004),

[Compostela] : Xunta de Galicia, D.L. 2003, pp. 197-198 y Fig. p. 199.43 Miranda, María Adelaida.- “Um olhar sobre as artes plásticas cistercienses. A Galiza e Portu-

gal (séculos XII-XIII)”, Arte del Císter en Galicia y Portugal, A Coruña: Funds. Barrié de la Maza/Calouste Gulbenkian, D.L. 1998, pp. 144-145 y figs. pp. 149-152.44 Valle Pérez, José Carlos.- La arquitectura cisterciense… Cit., fig. 28.45 En Santo Tomé de Salto se traslada el motivo a la imposta de la ventana sita sobre la portada

occidental.46 Valle Pérez, José Carlos.- La arquitectura cisterciense…Cit., fig. 24.47 Id., pp. 166-167.48 Sánchez Ameijeiras, Mª del Rocío.- “Las artes figurativas en los monasterios cistercienses

medievales gallegos”, Arte del Císter en Galicia y Portugal… Cit., p. 108; D’Emilio, James.- “Com-postela or Clairvaux?...” Cit., p. 321.49 Yzquierdo Perrín, Ramón.- “Arte medieval (II)”, Galicia, t. XI, A Coruña: Hércules Eds., 1993,

p. 38.50 Carrillo Lista, Mª del Pilar.- Op. Cit., p. 735.51 Loscertales de García de Valdeavellano, Mª del Pilar.- Tumbos del monasterio de Sobrado de

los Monjes, vol. I, Madrid: Archivo Histórico Nacional, 1976, pp. 9-14.52 “The cistercians…”, Cit., p. 318 y figs. 2 y 3.53 Id., pp. 322-324.54 Carrillo Lista, Mª del Pilar.- “Analogías entre dos iglesias románicas de la comarca de Betanzos”,

Anuario Brigantino, nº 18 (1995), pp. 201-206.55 D’Emilio, James.- “The romanesque churches…” Cit., p. 552.56 Carrillo Lista, Mª del Pilar.- “La iglesia románica de San Martiño de Tiobre”, Anuario Brigantino,

nº 17 (1.994), p. 235.57 Valle Pérez, José Carlos.- La arquitectura cisterciense… Cit., fig. 329.58 Vide, por ejemplo, Sánchez Ameijeiras, Mª del Rocío.- “Las artes figurativas…” Cit., p. 107.