cap. i ,ii,iii tesis paola g lara seminario ii.docx

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UNIVERSIDAD LATINOAMERICANA Y DEL CARIBE COORDINACION DE POSTGRADO MAESTRIA EN EDUCACION ESPECIAL INTEGRAL FORMACION SOBRE EL MANEJO DE LA CONDUCTA DE NIÑ@S QUE PRESENTAN DIFICULTADES DE APRENDIZAJE POR DEFICIT DE ATENCION E HIPERACTIVIDAD Profesor Asesor: Autora: MSc. Miguel Fuentes Paola G. Lara C.

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UNIVERSIDAD LATINOAMERICANA Y DEL CARIBE

COORDINACION DE POSTGRADO

MAESTRIA EN EDUCACION ESPECIAL INTEGRAL

FORMACION SOBRE EL MANEJO DE LA CONDUCTA DE NIÑ@S QUE PRESENTAN DIFICULTADES DE APRENDIZAJE POR DEFICIT

DE ATENCION E HIPERACTIVIDAD

Profesor Asesor: Autora:

MSc. Miguel Fuentes Paola G. Lara C.

C.I.V-13.970.156

Caracas, Febrero 2015

CAPITULO I

EL PROBLEMA

Planteamiento del Problema

En el capítulo I se expone el planteamiento del problema, la

contextualización y delimitación del problema, donde se hace referencia a

la importancia global del tema, enfatizando el plano de la problemática y

determinando el alcance de la investigación. De allí pues que surjan las

interrogantes que plantean el problema y que a la vez sugieren los

objetivos de la investigación y los beneficios que se obtendrían con el

logro de los mismos; y por último se encuentra la justificación de la

investigación.

En las Políticas de Educación Especial (1996), se señala que la

Educación Especial, es una modalidad del Sistema Educativo

Bolivariano, dirigida a la atención integral de los individuos con

necesidades educativas especiales, se orienta principalmente a la

consideración del educando desde una concepción holística: Como una

persona en permanente crecimiento, único en sus características y en

sus necesidades, constructor de su propia concepción del universo,

necesariamente gregario en sus proyecciones e interacciones sociales.

La Política de Educación Especial desde un enfoque humanista

social, concibe en primer lugar, al ser humano, en su condición de

persona y ciudadano; y luego, en su condición especial realza las

potencialidades de la persona con necesidades especiales o con

discapacidad, plantea la creación de condiciones y oportunidades en

diferentes contextos, de tal manera, que pueda adquirir capacidades que

le permitan un desarrollo individual, familiar y comunitario. En este

mismo sentido, el currículo es definido, como todo lo que está involucrado

en la formación del niño, adolescente y adulto con necesidades

especiales, contemplando las dimensiones filosóficas, axiológicas,

sociológicas, epistemológicas, ontológicas, teleológicas y pedagógicas; y

los sistemas: Familia, institución y comunidad, y no solo el plan de

estudios.

La Educación Especial como modalidad del Sistema Educativo

Bolivariano, establece un modelo de atención educativa integral donde se

asume el aprendizaje como un proceso resultante de las oportunidades

sociales, que le permiten al educando con necesidades educativas

especiales, su desarrollo personal y social. La interacción social en los

espacios educativos, más allá de la estructura escolar, facilita la

apropiación de los elementos culturales, donde se accionan los factores

cognitivos y no cognitivos como lo motivacional, lo afectivo, el deseo de

crecimiento personal, el desarrollo moral, en un ambiente contextualizado

y significativo.

Por lo que es vital para lograr un adecuado desarrollo socio-

emocional ofrecerle un ambiente rico en estímulos, que incentive al niño

hacia el trabajo escolar, que estimule los contactos sociales y el

aprendizaje, y este ambiente se inicia desde la familia, al respecto López

(2001), afirma que “La familia representa en toda la sociedad la célula

fundamental sobre la cual subyace los elementos sociales, morales,

religiosos y culturales, que de alguna manera intervienen en el proceso de

formación de la personalidad del individuo”.

En tal sentido, Dimkmeyer y Calson (1987), sostienen que es en

“La familia donde el individuo formula su visión de sí mismo como ser

social, y además desarrolla sus emociones primordiales hacia otras

personas por cuanto la familia como institución tiene la función de

socialización de todos sus integrantes”.

Por su parte, Satir (1991), expresa que “La familia es el lugar

donde se puede encontrar el amor, la comprensión y apoyo que puedan

ayudar a sus miembros a enfrentar el mundo”.

La conducta social que manifiestan los niños, está estrechamente

influida por las normas de conducta que se practiquen en el hogar. Es en

el colectivo familiar, donde se deben aprender y practicar los hábitos y

normas positivas de convivencia social. Esto es posible a través de las

adecuadas interrelaciones que se establecen entre sus miembros.

Por lo que las relaciones padres-hijos sustentadas en el amor y

respeto mutuo, son las que favorecen a formar buenos hábitos sociales y

por ende, a manifestar conductas de comportamientos adecuadas en el

medio escolar.

En este orden de ideas, cuando los escolares manifiestan

conductas disruptivas, que reciben tal denominación debido a que su

presencia implica la interrupción o desajuste en el desarrollo evolutivo del

niño o niña, imposibilitándolo para crear y mantener relaciones sociales

saludables tanto con adultos como con los miembros de su cohorte, y las

mismas se manifiestan con conductas de impulsividad, agresividad,

desatención y desobediencia en su área escolar, son elementos que

permiten concluir que existe un problema, ya sea proveniente del medio

familiar o social, que lo están predisponiendo a experiencias negativas

tales como deserción escolar, bajo rendimiento, trastornos emocionales,

alteraciones de la conducta, entre otros.

Los niños con conductas disruptivas o déficit de atención, en el

aula de clase, requieren de una atención que amerita descubrir las

posibles causas que ocasionan este tipo de conducta, de las cuales

podemos mencionar la marginalidad, hiperactividad, prepotencia,

sobreprotección por parte de los padres y familiares, violencia física y

verbal en el hogar.

La población escolar que presentan conductas disruptivas en el

aula manifiestan las siguientes características:

- No realizan las actividades en el aula por la poca atención que

demuestran.

- Molestan constantemente en el aula levantándose de su puesto o

pupitre.

- Sacan punta, piden permiso o a veces no, para ir al sanitario

constantemente.

- Molestan a los compañeros y no son compatibles con otros

compañeros.

- Nunca traen la tarea ni los útiles escolares necesarios para trabajar en

el aula.

- Son descuidados en su aspecto físico, y con sus pertenencias

personales.

- Conversan excesivamente en clase.

- Son impulsivos y desordenados.

- No obedecen ni respetan a los docentes de la institución.

- Tienen dificultad para aceptar limitaciones y frustraciones.

- Muchas veces estos niños gritan, pelean, golpean al compañero más

cercano, quitan sin permiso los lápices, creyones, sacapuntas, porque

ellos no tienen.

- Muestran bajo rendimiento escolar por no preocuparse en el aula de

realizar las actividades académicas.

Precisamente estas conductas son actitudes que traen del hogar por

problemas que tienen y lo reflejan en el aula, muchas veces en una

familia hay varios niños que muestran la misma actitud de desorden,

irresponsabilidad, y si ahondamos en la crianza que han tenido pues se

puede observar a familias que no están establecidas, o por el contrario,

establecidas pero dentro de ellas existen serios problemas que afecta

considerablemente al niño.

Debido a esta situación crítica, la investigación se propone estudiar la

intervención familiar y escolar para modificar las conductas disruptivas

tales como impulsividad, agresividad, desatención y desobediencia que

presentan algunos escolares, y pueden ser causas de la aparición de

dificultades de aprendizaje generales. Para lo cual se plantea las

siguientes interrogantes:

- ¿Qué importancia tiene una adecuada interacción padres-hijos, en la

adquisición de conductas apropiadas de sus hijos e hijas en los

ambientes educativos y sociales?

- ¿Cómo integrar y orientar a los padres y/o familiares para la

consecución de conductas adecuadas de comportamientos de sus

hijos?

- ¿Cómo puede el docente ayudar en la modificación de las conductas

disruptivas, tales como impulsividad, agresividad, desatención y

desobediencia, que presentan algunos estudiantes?

Objetivos de la investigación

Objetivo General

- Implementar un plan de estrategias que incentive el interés de los

padres en la modificación de conductas impulsivas, agresivas,

desatentas y desobedientes que causan dificultades de aprendizaje

generales en los estudiantes de la E.B.N. ”La Blanquera” del

municipio San Carlos del Estado Cojedes.

Objetivos específicos

- Describir el nivel de conocimientos que tienen los padres y/o familiares

en cuanto al desarrollo socio-emocional de los estudiantes.

- Identificar el grado de participación consciente de los padres en la

adecuada atención de las conductas disruptivas tales como

impulsividad, agresividad, desatención y desobediencia que presentan

algunos estudiantes.

-Elaborar un plan de estrategias dirigido a los padres para motivarlos

en el tratamiento de la modificación de las conductas impulsivas,

agresivas, desatentas y desobedientes que causan dificultades de

aprendizaje generales en los estudiantes E.B.N. ”La Blanquera” del

municipio San Carlos del Estado Cojedes.

.Verificar los resultados del plan de estrategias dirigido a los padres

para motivarlos en el tratamiento de la modificación de las conductas

impulsivas, agresivas, desatentas y desobedientes que causan

dificultades de aprendizaje generales en los estudiantes de la E.B.N.

”La Blanquera” del municipio San Carlos del Estado Cojedes.

Justificación

El aprendizaje implica la construcción progresiva de organizaciones

cognitivas que se van estructurando a través del intercambio con el medio

ambiente y de la experiencia que el individuo vive en dicho medio. Ello

expresa que el hombre dotado de una estructura biológica, al entrar en

contacto con situaciones diversas, está en capacidad de procesar toda

esa información y estructurarla de manera tal, que se internalicen aquellos

aspectos que han resultado significativos para él; es por ello que es de

vital importancia los factores emocionales y sociales, lo cual implica tomar

en cuenta la relación consigo mismo y con los otros, en función de sus

intereses, valores, actitudes y creencias.

Cualquier alteración que esté presente en las condiciones internas

del sujeto, en términos de su estructura neuro-biológica y psicológica, sin

afectar su integridad cognitiva, así como interferencias en su realidad

ambiental: familiar, escolar y comunitaria pueden ocasionar dificultades en

su proceso de aprendizaje.

Considerando que una adecuada interacción familiar es primordial

en el desarrollo socioemocional del individuo, y que la emociones tienen

un poderoso impacto en nuestro conocimiento del mundo circundante y

motivan nuestras acciones y afectos cuando interactuamos con otras

personas, y proveen de sentido a la vida, éstas poseen una función

reguladora que ayuda a adquirir los patrones de la conducta adaptativa, y

que éstos procesos emocionales están profundamente involucrados en el

aspecto cognitivo como la atención y concentración, la motivación al

estudio, los actos perceptivos, el aprendizaje y la memoria. De allí la

necesidad de proponer una adecuada intervención en la familia y escuela

para lograr una conducta apropiada en los niños y niñas que influya

significativamente en su proceso de aprendizaje.

En consecuencia la investigación tiene relevancia, por cuanto una

adecuada intervención familiar y escolar en la modificación de conductas

disruptivas podrán ajustar el comportamiento del estudiante a las

demandas del ambiente donde ellos se desarrollan.

Así mismo la presente investigación puede servir de referencia

para trabajos posteriores relativos al mismo tema, y sus resultados ser

aplicados en otras instituciones educativas que presenten las mismas

características.

CAPÍTULO II

MARCO TEORICO

Antecedentes de la Investigación

El capítulo II, lo conforman el marco teórico, los antecedentes

relacionados con el estudio, que reflejan otros trabajos de investigación

con títulos similares, las bases teóricas y las bases legales.

En la revisión realizada se encontraron algunos trabajos

relacionados con la presente investigación, entre otros se señalan los

siguientes:

Ruiz, L. (2002), realizó un estudio tipo descriptivo titulado “Manejo

de la disciplina en escuelas multigrado de la zona escolar Nº 9 de Chiriquí

Panamá”, cuyo propósito fue describir las estrategias utilizadas por los

maestros y maestras, en el desarrollo del sistema de disciplina del aula

multigrado y comprender las repercusiones que dependiendo de la

estrategia desarrollada ésta tendrá en el proceso enseñanza aprendizaje

y el rendimiento y logro académico de los estudiantes.

Concluyó de acuerdo a los resultados obtenidos, que en su

mayoría los docentes desconocen básicamente fundamentos teóricos y

conceptuales de lo que es la disciplina, y por ésta razón no le da atención

a este importante aspecto en su aula escolar.

Por lo que es necesario recomendar la organización y desarrollo de

un seminario de perfeccionamiento docente que parta desde un enfoque

constructivista en el cual se destacan la relación de los problemas

conductuales que se presentan en el aula escolar, las metodologías

utilizadas, tanto a nivel de aprendizaje como de estructura escolar, el rol

del docente, la pertinencia de los programas oficiales, es decir una

transformación pedagógica que asuma y dé alternativas a las dificultades

que se presenta a diario en toda población estudiantil.

Francia, M. (2006), llevó a cabo un estudio en la modalidad de

proyecto de investigación acción cualitativa, titulado “El método disciplina

inteligente como estrategia para mejorar los problemas de conducta

asociados, que presentan los niños con dificultades de aprendizaje en la

Escuela Básica”, el cual fue dirigido a los estudiantes que forman parte de

la matrícula de aula integrada, constituida por un grupo heterogéneo de

estudiantes que presentan dificultades de aprendizaje con problemas

conductuales y emocionales asociados.

De acuerdo a los datos obtenidos en la investigación se logró

verificar que es necesario realizar un Programa de estrategias para

padres y/o representantes, dirigido a contribuir con la modificación de

conductas en los niños y niñas a través del método disciplina inteligente.

Galán, Emelin, (2008), realizó una investigación titulada

“Modificación de conductas no adecuadas y estimulación de conductas

deseadas en niños y adolescentes de las edades de seis a catorce años

del Centro de Educación Alida España de Arana”. Este proyecto tuvo

como fin, detectar y brindar atención y orientación a los niños, niñas y

adolescentes de las edades de seis a catorce años, a los padres de

familia y educadores que están involucrados con la población que

presenta problemas de conductas, con lo que se efectúo un proyecto de

modificación de conductas no adecuadas y estimulación de conductas

deseadas, se realizó conjuntamente con el proyecto de problemas

emocionales para lograr mejores resultados y beneficios para los niños,

niñas y adolescentes.

Este trabajo de investigación fue realizado y se cumplieron los

objetivos planteados, dando como resultado cambios significativos en la

conducta durante las horas de clases y de receso

También se comprobó que a través de las charlas proporcionadas

a los padres de familias, contribuyó a una mejor relación padre e hijo y por

lo tanto a comprender desde una perspectiva diferente los problemas de

conductas y a buscar alternativas de solución a éstos.

Todos estos trabajos se encuentran relacionados con la presente

investigación, debido a que se evidencia la importancia de implementar

programas de modificación de las conductas no adecuadas que

presentan los niños y niñas en el ambiente educativo.

Bases Teóricas

Conductas disruptivas

El problema de las conductas distorsionadoras en el aula es uno

de los temas que cada vez goza de mayor preocupación entre docentes,

pedagogos y psicólogos. Los nuevos métodos de control y gestión en el

aula se encuentran con dificultades serias y difíciles para poder llevar a

cabo, con una eficacia totalmente rentable, los objetivos y contenidos

propuestos por motivo de un número reducido de estudiantes con

conductas disruptivas. Las numerosas investigaciones que se han hecho

sobre el análisis funcional de la clase han llevado a que se estudie

detenidamente aquellos estudiantes que presenta dificultades en sus

relaciones con los docentes y compañeros, perjudicando así la buena

armonía del aula. Los problemas distorsionadores en los centros

educativos son fenómenos crecientes en los sistemas educativos. En

nuestro país empieza a ser preocupante y las investigaciones llevadas a

cabo son escasas teniéndose que recurrir a otras literaturas extranjeras.

Frecuencia de las conductas disruptivas

En las investigaciones realizadas por Peiró y Carpintero, (1978) y

Jiménez y Bernia,(1981) indican que entre las conductas problemáticas

observadas por los docentes como más graves son: la agresividad, la

falta de compañerismo, las conductas moralmente inadecuadas, la que

atentan contra la autoridad del docente, las que dificultan el rendimiento

académico, las que alteran las normas de funcionamiento de la clase y las

dificultades de adaptación a la situación escolar y de aprendizaje. En el

estudio de García Correa, A. y otros,(1983) se obtuvieron las

conclusiones que ordinariamente los estudiantes con conductas

disruptivas en la clase presentan más de una conducta distorsionadora, y

entre las más frecuentes podemos mencionar las de charlatán, distraído,

inquieto, agresivo, ruidoso, injurioso, rebelde, indolente, mentiroso, no

participativo.

Gotzens, C. (1986), tomando como punto de partida un análisis de

varios trabajos señala las siguientes conductas disruptivas: a) Motrices:

estar fuera del asiento, dar vueltas por la clase, saltar, andar a la pata

coja, desplazar la silla, ponerse de rodillas sobre la misma, balancearse.

b) Ruidosas: golpear el suelo con los pies y con las manos los asientos,

dar patada a la silla o a la mesa, dar palmadas, hacer ruido con el papel,

rasgar papel, tirar libros u objetos, derribar las sillas o mesas. c) Verbales:

conversar con otros, llamar al docente para conseguir la atención, gritar,

cantar, silbar, reir, toser, llorar. d) Agresivas: pegar, empujar, pellizcar,

abofetear, golpear con objetos, arrebatar objetos o trabajos

pertenecientes a otros, destrozar la propiedad ajena, lanzar objetos.

e) De orientación en la clase: volver la cabeza y/o el cuerpo hacia otro

compañero, mostrar objetos a otro, observar a otros largamente en el

tiempo.

Conductas disruptivas y sexo

Los trabajos realizados al respecto manifiestan que los niños

poseen las siguientes conductas: violentos y agresivos(físicamente),

inquietos, rebeldes, ruidosos, nerviosos y rechazados, mientras las niñas

son más propicias a las siguientes conductas: charlatanas, explosivas

verbal y emocionalmente, injuriosas, miedosas; en cuanto las frecuencias

los niños se muestran más folloneros y se les llama más la atención y al

orden y se ejerce un mayor control sobre ellos tanto explícita como

encubiertamente. Los varones son más difíciles de controlar.

Conductas disruptivas y niveles educativos

En educación inicial las conductas más frecuentes son las motrices

como estar fuera del asiento, saltar, dar vueltas por la clase y las

agresivas como empujar, pellizcar, destrozar y golpear objetos; verbales

como no esperar el turno para poder hablar, se ha de recordar que en

niños muy pequeños muchas conductas problemáticas surge porque no

han aprendido una forma aceptable de hacer las cosas. Algunas veces el

problema está que los niños no saben que es lo correcto y otras veces

tienen una ligera idea del buen comportamiento siendo incapaces de

comportarse correctamente. Aunque no tienen deseo especial de

molestar al docente y a sus compañeros les resulta incapaz de someterse

a las normas de clase. En estas edades el docente ha de ser muy afable

y comprensivo para resolver con eficacia y cariño los problemas e

introducirlos con suavidad en el aprendizaje de las normas escolares y

sociales.

En educación Primaria las conductas más frecuentes son las

ruidosas, verbales y agresivas, siendo el segundo ciclo donde más se

dan. En este nivel es menos probable que las conductas se deban a la

ignorancia de los procedimientos establecidos y a su incapacidad para

comportarse bien. Lo normal es que sea olvido, la desconsideración de

las normas establecidas, aburrimiento, problemas de convivencia o el

propósito deliberado de perturbar la clase o molestar al docente.

Conducta disruptiva y clase social

Hay cierta relación frecuencial entre las conductas disruptivas del

aula y la clase social de los estudiantes, tomando como indicadores de

ésta la instrucción, profesión y estudios paternos. Una serie de razones

puede avalar esta relación. Los valores y normas de las instituciones

escolares suelen concordar más con los hogares de status

socioeconómicos elevados que con los de nivel inferior.

Esto significa que es más fácil un conflicto entre la casa y la

escuela, es decir que en algunos hogares de bajo nivel social se enseñan

valores y actitudes similares a los de la escuela, pero también es cierto

que tienen más probabilidades de verse envueltos en enfrentamiento. A

medida que se hacen mayores los estudiantes pueden rebelarse

intencionalmente contra la escuela, debido a que los valores que se les

pretenden inculcar no tienen paralelo con la vida de su entorno pues

muchas veces saben por experiencia que él no mostrarse duros y

agresivos están en desventaja con los demás niños de su ambiente. Por

lo que no debe sorprendernos que estos estudiantes den origen más a

menudo a problemas de control. A esto se ha de añadir que las clases

sociales más desfavorecidas obtienen peores rendimientos académicos

como se ha demostrado en muchas investigaciones.

Conductas disruptivas y su interacción en el medio familiar

La interacción del ser humano con su medio ambiente, su familia,

la escuela, entre otros, serán factores determinantes en la elaboración de

su forma de vida y por ende en la formación de su personalidad.

Por ello los psicólogos y educadores actuales sienten que es cada

vez más importante conocer el primer entorno psicológico en que se

desenvuelve el niño. Analizar este primer entorno en el contexto de la

crianza les permite evaluar en qué condiciones se está produciendo su

desarrollo y prevenir así problemas futuros.

La crianza es un factor determinante en la conducta del individuo,

constituida principalmente por la familia. Según la Guía de acción

docente (pág.155), el medio familiar tiene gran importancia en el

desarrollo e integración de la personalidad del niño.

Este seno familiar es donde se modelan sus rasgos y

características de su personalidad, se forman y se consolidan sus hábitos

y costumbres, su leguaje básico, muchas de sus actitudes, experiencias,

conocimientos y sentimientos de seguridad.

Sin restar importancia a la educación que juega un papel

importante, ya que el proceso educativo debe orientarse a preparar a los

educandos para vivir en sociedad, a través de una adecuada interacción

en el grupo y con otros grupos, habituándolos durante su enseñanza a las

normas que rige en la sociedad, y en su escuela, usando estrategias

motivadoras que le faciliten el aprendizaje de las mismas.

A lo largo de la vida, el individuo sufre un proceso de adaptación a

las normas que rigen en su ambiente; en primer lugar el niño inicia su

proceso de socialización con la familia ajustándose a las normas y reglas

que allí se imponen. Este será su primer núcleo de adaptación y será

fundamental, y en segundo lugar la escuela y es allí realmente cuando

observaremos como va a ser la adaptación a su grupo escolar y a la

sociedad.

Igualmente, García (1995), da importancia a la relación entre el

ambiente y la conducta a la que llamó Clima Familiar, pues es en la

familia donde se dan las condiciones para el funcionamiento de sus

miembros, en consecuencia, si el clima familiar es saludable y contribuye

al buen funcionamiento en cuanto al proceso enseñanza-aprendizaje, es

porque allí existe cohesión familiar, organización y valores morales y

religiosos; alcanzando así el educando un desarrollo optimo en el aspecto

emocional social.

El estudiante con problemas de conducta y de rendimiento

Las dificultades emocionales y de la conducta en los escolares

constituyen un serio y difícil problema tanto para la educación y la salud

mental de los estudiantes como para los padres cuyos hijos no logran en

la escuela un rendimiento acorde con sus esfuerzos y expectativas. La

mayoría de los estudiantes que presentan dificultades emocionales y

conductuales poseen leves alteraciones en su desarrollo cognitivo,

psicomotor o emocional, sin que en general puedan ser asignados a

categorías diagnósticas específicas tales como retardo mental, síndrome

de déficit de atención o trastornos específicos del aprendizaje.

Cada estudiante presenta características cognitivo-afectivas y

conductuales distintas, y las escuelas, en general, otorgan una enseñanza

destinada a niños normales o promedio que prácticamente no presentan

diferencias entre sí y que no muestran alteración, desviación, déficit o

lentitud en ningún aspecto de su desarrollo. Esto provoca que todos los

niños y niñas que por alguna razón se desvían o alejan de este promedio

están en riesgo de bajo rendimiento y de fracaso escolar. Un estudiante

en riesgo no significa que sea retrasado o que tenga alguna discapacidad.

La designación en riesgo se refiere a características personales o a

circunstancias del medio escolar, familiar o social que lo predisponen a

experiencias negativas tales como deserción, bajo rendimiento, trastornos

emocionales, alteraciones de la conducta, drogadicción, entre otros.

Los factores de riesgo del estudiante incluyen déficits cognitivos,

del lenguaje, atención lábil, escasas habilidades sociales y problemas

emocionales y de la conducta. Los factores de riesgo en la escuela se

refieren a aquellas características y circunstancias específicas ligadas a

los docentes y administrativos como los prejuicios y las bajas expectativas

de rendimiento, la inhabilidad para modificar el currículo, la falta de

recursos y la carencia de estrategias de enseñanza adecuadas, la

estructura, el clima organizacional y los valores del sistema escolar.

Hoy en día muchos escolares presentan bajo rendimiento,

perturbaciones conductuales y emocionales. Muchos de ellos no reciben

la ayuda profesional que necesitan ni dentro ni fuera del ámbito escolar.

Estos problemas de rendimiento, de conducta y emocionales cuando no

son tratados, no sólo provocan problemas en el aprendizaje de estos

estudiantes, sino además afectan la capacidad de los docentes para

enseñar y la de sus compañeros para aprender, lo que hace sentir a

muchos docentes sobrepasados por las alteraciones emocionales y

conductuales que estos estudiantes presenta en clases.

El docente de enseñanza inicial, básica o media, tarde o temprano

deberá enfrentar algún estudiante que presente problemas de conducta,

que altere la convivencia con sus compañeros y que interrumpa la clase.

La conducta disruptiva que el estudiante presente puede variar

considerablemente de acuerdo a la naturaleza del problema que lo afecte,

al tamaño del curso, y al tipo de escuela.

Los educadores pueden sentirse frustrados y sentir ansiedad

cuando deben enfrentar un estudiante con problemas de conducta,

especialmente si la escuela no está preparada y no tiene ni la

organización ni el apoyo de profesionales para enfrentar al estudiante con

problemas de conducta, en algunos casos, el docente puede considerar el

problema como propio del niño y, por lo tanto, la responsabilidad de la

conducta disruptiva recae sobre el propio estudiante. De acuerdo a esta

perspectiva, el docente no cree que su metodología de enseñanza

exacerba aún más la perturbación que el estudiante presenta. Asimismo,

si el docente estima que es el resultado de alguna dificultad en el hogar

del estudiante, va a tener bajas expectativas sobre su rendimiento

escolar.

Los padres y docentes comparten la preocupación por la alteración

conductual que el estudiante presenta. Si bien no se debe exagerar ante

un problema de conducta, tampoco debe minimizarse ya que, en general,

son el extremo más visible de los estudiantes con dificultades para

aprender. Los padres inevitablemente se preocupan por la manera en que

el hijo se comporta y esta preocupación se complica con sentimientos de

frustración y rabia cuando el progreso escolar es lento o es escaso y las

críticas de otros padres y de algunos docentes aumentan. Asimismo, este

estudiante causa problemas en su familia con sus hermanos, quienes

sufren porque los padres en general ocupan la mayor parte de su tiempo

en el hijo problema. Es necesario notar que el estudiante que molesta a

otros en clase y en los recreos no ha aprendido un modo apropiado de

hacer amigos y de establecer relaciones interpersonales. Generalmente

son niños infelices, aislados por sus compañeros de clases e impopulares

entre sus docentes.

La severidad de la alteración conductual depende en gran medida

de la percepción que sobre ella tengan las personas que viven y/o

trabajan con el niño. Las personas en diferentes contextos tienen

variadas expectativas sobre lo que consideran una conducta apropiada.

Tanto en los padres como en los docentes se pueden observar distintos

niveles de tolerancia frente al estudiante con problemas de conducta. Los

niveles de tolerancia también tienen relación con el estadio del desarrollo

del niño: por ejemplo, estudiantes preescolares no pueden estar mucho

tiempo sentados, concentrados, inactivos y les cuesta respetar su turno

para hablar o para jugar y por lo tanto se les toleran muchas

variabilidades en su conducta, lo que no ocurre con estudiantes mayores.

Asimismo, la manera como el problema de conducta del estudiante es

percibido por los adultos, determina, en general, la urgencia con la que

debemos enfrentarlo. Esta percepción está influida por la tolerancia

individual, la ansiedad que desencadena el niño en el ambiente que lo

rodea, la preocupación, el temor y la rabia que provoca su mala conducta,

la presión de los padres y de la escuela.

Los problemas emocionales y conductuales son citados tanto

como complicaciones secundarias de los trastornos del aprendizaje como

en la etiología de los mismos. De tal manera que generalmente un

estudiante que presenta alteraciones conductuales y emocionales sufre

también de cierta dificultad para aprender que puede tener distintas

etiologías. Dentro de este contexto, es posible confundir las diferencias

en el desarrollo psíquico individual con patologías o trastornos. Existen,

además variadas manifestaciones del desarrollo psíquico que varían de lo

que se considera normal, originadas por la vida en extrema pobreza, en

carencias afectivo-familiares y/o en la falta de incentivos para aprender

que no necesariamente se traducen en patologías pero que predisponen

al bajo rendimiento, al fracaso y a la deserción escolar.

Bases Psicológicas

Orígenes de la Modificación de Conducta

Las diferentes técnicas de Modificación de Conducta se basan en el

denominado Modelo Conductual. Dicho modelo surgió como una reacción

y renovación de los postulados psicológicos vigentes a principios del siglo

XX. En esos momentos el objeto de estudio predominante de la psicología

era la mente o la conciencia y su contenido, siendo la introspección su

método. El psicoanálisis freudiano contemplaba la existencia de muchos

elementos inobservables tales como el inconsciente, los conflictos

intrapsíquicos, entre otras y surgía la necesidad de cambiar estos

conceptos por otros más acordes con las nuevas tendencias, que

apostaban por desplazar a la mente cómo objeto de estudio a favor de la

conducta, y la introspección cómo método por el utilizado en la ciencia

experimental.

El postulado fundamental de la nueva psicología conductual era que la

conducta es fundamentalmente una consecuencia del aprendizaje que

tiene lugar en el medio social en el que crece y se desenvuelve el

individuo.

La base teórica en la que se sustentan los diferentes enfoques del modelo

conductual, se remontan a los estudios pioneros (a principios S.XX) de la

escuela rusa a través de autores tan relevantes como Paulov

(Condicionamiento Clásico), Sechenov o Betcherev (Reflejos) o de

psicólogos experimentales como Watson o Thorndike. Sus trabajos

comprendían rigurosos estudios de experimentación animal con los que

intentaban llegar a encontrar las bases científicas para poder explicar la

conducta humana.

Características generales del modelo conductual

1- La Conducta, tanto normal como anormal, es principalmente una

consecuencia del aprendizaje en las condiciones sociales del medio.

2- El modelo concede una especial importancia a las influencias del medio

como causa o determinante de la conducta y un menor protagonismo a

los factores innatos o hereditarios, si bien no ignora, en absoluto, la

posible influencia sobre la conducta de determinados factores genéticos o

constitucionales.

3- El objeto de estudio del enfoque está centrado sobre la conducta,

normal o anormal, como actividad medible o evaluable. Hay que señalar

que por medible no debe entenderse necesariamente observable, ya que

algunas mediciones se efectúan sobre variables psicofisiológicas que no

son observables directamente pero sí medibles a través de ciertos

instrumentos (presión arterial, resistencia eléctrica, ritmo cardíaco, etc.)

4- La mayoría de técnicas y métodos utilizados por el enfoque conductual,

tanto en evaluación como tratamiento han sido derivados de los

procedimientos experimentales, una vez comprobada su eficacia.

5- Señalar que, contrariamente a lo difundido por otros enfoques (más

humanistas), el modelo conductual, especialmente en las versiones

actuales del mismo, es igualmente sensible hacia el bienestar del

paciente. El rigor experimental no es incompatible con un adecuado trato

al paciente.

Análisis funcional de la Conducta. B.F. Skinner

Fue Burthus Frederic Skinner (1.904-1.990) quien dio un mayor

impulso al modelo conductual, a partir de los años 40-50 con su teoría del

Análisis Funcional de la Conducta, y su teoría sobre el Condicionamiento

Operante.

Este enfoque está centrado, en primer lugar, en el estudio de la conducta

externa o manifiesta y en las relaciones funcionales de ésta con los

estímulos del medio (tanto antecedente como consecuente de la misma).

De esta forma podemos obtener una descripción y explicación tanto del

desarrollo, como del mantenimiento y modificación de la conducta

humana, tanto de la normal como la anormal.

El modelo apuesta por la conducta como actividad medible y cuantificable,

centrando su atención, más específicamente sobre la conducta manifiesta

y relegando los procesos o manifestaciones cognitivas (aun sin negar su

existencia) por no considerarlos susceptibles de ser estudiados

experimentalmente ni apropiados para lograr uno de sus objetivos

básicos: la constitución de una ciencia de la conducta. De este modo se

sostiene que los procesos cognitivos no ejercen un efecto causal sobre la

conducta, sino que, por el contrario, son el producto de ella. La conducta

humana está controlada por las influencias exteriores del medio, si bien,

también se admite la influencia de factores genéticos o hereditarios.

El estudio psicológico debía, pues, basarse, según Skinner en el análisis

experimental de la conducta, centrado en el estudio intensivo de casos

únicos, en lugar del establecimiento de comparaciones estadísticas entre

grupos.

El Modelo Cognitivo-Conductual

Hoy en día, el modelo conductual ha evolucionado hacia un modelo

integrado en el que conducta y cognición han equiparado prácticamente

su estatus y asumen su papel de agentes causales recíprocos entre sí.

Por tanto, los primeros modelos más radicales (conductismo) en los que

la conducta manifiesta era el elemento principal de estudio han quedado

relegados.

El enfoque cognitivo-conductual, en términos generales puede

conceptualizarse según el conocido esquema A-B-C. Donde "A"

representa los acontecimientos de la vida que están relacionados con

determinadas consecuencias emocionales o conductuales que definen un

problema o trastorno psicológico representado por "C”

-Tal como señalan algunos autores, la Modificación de Conducta se

caracteriza por ser una terapia breve, directiva, activa, centrada en el

problema, orientada al presente, que supone una relación colaboradora y

en la que el cliente puede ser un individuo, una pareja, una familia, un

grupo o una comunidad.

Bases Legales

Las bases legales se encuentran en la Constitución de la República

Bolivariana de Venezuela (1999), en sus artículos 3, 102 y 103, donde

establece que la familia tiene el deber y derecho de contribuir con el buen

desempeño del proceso educativo de sus hijos, así como cumplir las

funciones formativas, del estímulo y desarrollo físico y emocional de sus

integrantes.

Igualmente, la Ley Orgánica de Educación (2009), en el Articulo 6,

dice se garantiza el derecho pleno a una educación integral, permanente,

continua y de calidad para todos y todas en igualdad de género,

condiciones y oportunidades, deberes y derechos.

Así también, en la Ley Orgánica de Protección al Niño, Niña y

Adolescente (2007), en sus artículos 5, 32-A, se establece las

obligaciones generales de la familia e igualdad de género en la crianza

de los niños, niñas y adolescentes, para el desarrollo integral de sus

miembros. Y en el Art. 32-A, establece el Derecho al buen trato de todos

los niños, niñas y adolescentes, en los ambientes familiares y educativos.

CAPÍTULO III

METODOLOGÍA

El capítulo III, expone el método y la metodología de investigación,

que incluye tipo de la investigación, unidades de estudio, las técnicas e

instrumentos de recolección de la información necesaria y el

procedimiento a seguir para el desarrollo del estudio.

Para realizar la presente investigación, se utilizará un enfoque de

investigación cualitativa, a lo que Galeano (2004), señala que la

metodología cualitativa consiste en más que un conjunto de técnicas para

recoger datos, es un modo de encarar el mundo de la interioridad de los

sujetos sociales y de las relaciones que establecen con los contextos y

con otros actores sociales.

La investigación cualitativa puede ser útil para familiarizarse con un

contexto, unos actores y unas situaciones antes de proceder “en serio” a

los procesos de muestreo y de aplicación de instrumentos de medición.

Por tanto, tiene sentido cuando se conoce poco del tema o de la situación

que se va a estudiar, como “inmersión” inicial que aporta elementos en la

formulación del problema o en la fase descriptiva de la investigación.

Para otros, su utilidad radica en complementar información para

acompañar el análisis estadístico con ciertos datos que contextualizan la

información.

La investigación cualitativa es un campo de estudio en sí misma,

cruza disciplina, áreas de conocimiento y problemáticas. Un complejo e

interconectado sistema de términos, conceptos, presupuestos, envuelven

lo que denominamos investigación cualitativa. Incluye tradiciones

asociadas en la fenomenología, el interaccionismo simbólico, la

hermenéutica, la semiótica, el post estructuralismo, la escuela crítica, la

sociología comprensiva, y una variedad de perspectivas investigativas

conectadas con estudios culturales e interpretativos (Denzim y Lincoln,

1994:1).

Como método de investigación, la perspectiva cualitativa articula

enfoques metodológicos; fundamentación epistemológica, ética,

metodología, disciplina y ontológica, estrategias y modalidades de

investigación; procedimientos metodológicos; técnicas de recolección,

sistematización, registro y análisis de información, estrategias de validez

y confiabilidad y forma de presentación de los resultados de la

investigación.

La investigación cualitativa es ideográfica (datos textuales,

detallados, descriptivos): busca las nociones, las ideas compartidas que

dan sentido al comportamiento social. Trabaja con la palabra, el

argumento, supuestos, imágenes visuales, gestos, representaciones, los

rastros de cultura material y traduce y presenta sus comprensiones en

textos escritos, visuales o audiovisuales.

Los investigadores cualitativos hacen énfasis en la validez en su

investigación. Los métodos cualitativos permiten estar próximo al mundo

empírico y están destinados a asegurar un estrecho ajuste entre los datos

y lo que la gente realmente dice o hace. Observando a las personas en

su vida cotidiana, escuchándolas hablar sobre lo que tienen en mente y

viendo los documentos que producen, el investigador cualitativo obtiene

un conocimiento directo de la vida social, no necesariamente filtrado por

conceptos, definiciones, operaciones y escalas clasificadoras (Taylor y

Bogdan, 1994).

En el enfoque cualitativo, el investigador ve al escenario y a las

personas en una perspectiva holística: las personas, los escenarios y

los grupos no son reducibles a variables, sino considerados como un

todo. El investigador cualitativo estudia a las personas en el contexto de

su pasado y de las situaciones en las que se haya (Taylor y Bodgan,

1994).

Los investigadores cualitativos, son sensibles a los efectos que ellos

mismos causan sobre las personas que son objeto de estudios. Se ha

dicho que ellos son naturalistas, es decir, que interactúan con los

informantes de un modo natural y no intrusivo (no entran rompiendo las

pipetas). En la observación participante tratan de no desentonar con la

estructura, por lo menos hasta que hayan llegado a una comprensión del

escenario. En las entrevistas en profundidad siguen el modelo de una

conversación normal, y no de un intercambio formal de preguntas y

respuestas, es decir, que quienes desarrollan propuestas de investigación

desde enfoques cualitativos, intentan entender a las personas dentro del

marco de referencia de ellas mismas, de ponerse en el lugar de ellas,

para comprender desde su lógica la realidad que viven.

Desde este punto de vista, la metodología de la investigación

cualitativa destaca la interacción entre el sujeto que investiga y la

realidad por conocer, que en esta investigación es la adecuada

interacción padres-hijos, en la adquisición de conductas apropiadas de

sus hijos en los ambientes educativos y sociales.

Naturaleza de la investigación

La presente investigación se desarrolló en el ambiente del Sector

Centro de la ciudad, de la población de San Carlos, municipio autónomo

Ezequiel Zamora, Estado Cojedes de la República Bolivariana de

Venezuela, donde se encuentra ubicada la Escuela Básica Nacional “La

Blanquera” municipio San Carlos del Estado Cojedes”, de dependencia

nacional, fundada el 16-03-1968.

La institución cuenta con un personal de 24 docentes (20 de aula

regular y 04 especialistas), 01 directora, 01 subdirectora encargada, 03

secretarias, 01 bibliotecaria, 04 obreros de mantenimiento y 01 portero.

En relación con su planta y espacio físico, cuenta con 19 aulas, 01 salón

de dirección donde igualmente funciona la subdirección y el Dpto. de

Orientación, 01 para informática, 01 cancha deportiva, 01 comedor, 2

baterías de baños.

La institución presta sus servicios a una población estudiantil de

567 estudiantes, distribuidos entre la primera etapa (1ero., 2do., 3ero.), y

Segunda etapa (4to., 5to., y 6to. Grado)

Tipo de investigación

De acuerdo al problema de investigación referido a la modificación

de conductas disruptivas en niños que presentan dificultades de

aprendizaje generales de la Escuela Básica Ligia Cadenas de Alvarado”,

y en función de sus objetivos se considera que la investigación está

enmarcada en un tipo de investigación acción.

La investigación acción, según Zapata, (2004), se configura como

una propuesta metodológica técnica, que se caracteriza por su enfoque

de intervención e investigación social. La meta fundamental de este tipo

de investigación es mejorar la realidad en que viven, trabajan o actúan

socialmente las personas que realizan la investigación, a diferencia de

otras técnicas, su operatividad estriba en la capacidad de transformación

y cambio de la realidad física, social o cultural.

El propósito central de la investigación acción, planteado por

Sánchez y Nube (2003), es:

1. Contribuir a la generación de procesos de organización e

integración de comunidades.

2. Desarrollar la investigación acción siguiendo las fases de un

proceso metodológico que debe ser asumido con el debido rigor

conceptual que permita al investigador participar en las comunidades

y desarrollar con éstas proyectos de acción autogestionaria.

3. Dirigir procesos que permitan orientar y organizar las escuelas para

que se conviertan en sólidos núcleos operativos que promuevan la

integración de las comunidades con ellas.

4. Propiciar un compromiso con el cambio dirigido en una transición

hacia formas diferentes de compartir el poder por parte de las

comunidades, mediante la creación de meras alternativas para el ejercicio

de ese poder.

Estos propósitos están íntimamente consustanciados con procesos

educativos orientados en el hacer, convivir y pensar, lo cual se traduce en

una educación con utilidad social que permita dar respuestas a las nuevas

exigencias de la sociedad.

Según Belkys Rojas de Escalona (2007), la investigación acción es

una forma de indagación colectiva emprendida por participantes en

situaciones sociales con el propósito de mejorar la racionalidad y la

justicia de sus prácticas sociales o educativas, así como la comprensión

de estas prácticas y de las situaciones en que ellas tienen lugar.

La investigación acción es un proceso social, colaborativo, en el

cual el investigador asume un papel activo, no busca sólo conocer y/o

comprender quiere indagar la significación del pasado para el presente,

así como participar en la transformación social para un futuro distinto.

El conocimiento de la realidad se obtiene en la acción

transformadora, en una relación dialéctica entre la objetividad y la

subjetividad.

En el proceso de la investigación se da cuatro momentos:

1) Reflexión inicial acerca de la situación a la luz de la preocupación

temática; 2) planificación conjunta de actividades y estrategias para

mejorar la situación; 3) puesta en práctica del plan y observación del

proceso de implementación en términos de alcances y limitaciones; 4)

reflexión en torno al proceso y los resultado con miras a reconsiderar la

preocupación temática, las oportunidades y restricciones, los logros e

implicaciones futuras e introducir los cambios que se consideren

pertinentes para volver a comenzar el ciclo.

Sujetos de estudio

En este sentido, Belkys Rojas de Escalona (2007), afirma que la

muestra en la investigación cualitativa no obedece a criterios de

representación numérica. Es más bien un muestreo intencional cuyo

propósito es seleccionar sujetos que puedan aportar información relevante

para un estudio en profundidad. El muestreo responde a la dinámica de la

investigación.

La presente investigación se realizó en un contexto de estudio

conformado por veinte (20) docentes, trescientos noventa (390)

representantes y quinientos sesenta y siete (367) estudiantes, que

pertenecen a la E.B.N. “La Blanquera” del municipio San Carlos del

Estado.

Informantes clave:

En relación a la unidad de estudio está constituida por dos (2)

docentes de aula regular, una (1) psicopedagoga perteneciente al servicio

de aula integrada, una (1) orientadora, y dos (2) representantes.

Para hacer una descripción más precisa de cada uno, se

identificaron como: 1, 2, 3, 4, 5 y 6.

Informante número 1: docente de aula regular con una amplia

experiencia en el quehacer educativo, actualmente ocupa el cargo de

Coordinadora de la Defensoría Estudiantil.

Informante número 2: docente de aula regular que lleva más de 15

años trabajado en la institución educativa, siempre se ha caracterizado

por ser una persona que le gusta colaborar en resolver las necesidades

de la institución.

Informante número 3: docente especialista en educación especial, y

psicopedagoga, por sus funciones en la institución objeto de estudio,

conoce ampliamente la problemática de ésta investigación.

Informante número 4: docente especialista en orientación, tiene una

experiencia de dieciocho años laborando en la institución educativa, y con

una amplia información sobre las distintas conductas disruptivas que

presentan los niños objeto de estudio.

Informante número 5: representante muy comprometida con las

actividades de la institución educativa, y en especial la de su

representado.

Informante número 6: representante de uno de los sujetos objeto de

estudio de la investigación. Es una madre que muestra interés por

resolver la situación problemática que atraviesa con su hijo.

Técnicas e Instrumentos de Recolección de Información

Para la recolección de la información necesaria se utilizaron las

siguientes técnicas:

- Revisión Documental: Mediante la revisión documental se pretende

recabar la información teórica necesaria a fin de revisar una selección y

análisis de los contenidos que sustentan el estudio, al respecto

Díaz (1998), sostiene que la revisión de documentos garantiza que la

información bibliográfica y documental se obtenga de una manera

sistemática, objetiva y ordenada de acuerdo al tipo de investigación que

se va a realizar” (p. 147).

- La Observación: Según Hurtado (1996), es un procedimiento de

recopilación de datos e información, en el cual se utilizan los sentidos

para captar los hechos o fenómenos de interés para el investigador.

La observación, según Ander Eggs, citado por Hurtado (1996),

puede ser definida como un procedimiento de recopilación de datos e

información, en el cual se utilizan los sentidos para captar los hechos o

fenómenos de interés para el investigador, se puede definir como la

selección, registro sistemático y codificación de un conjunto de hechos,

situación o conductas.

La ventaja de esta técnica es que se puede obtener la información

independientemente de la disposición que las personas estudiadas tengan

de proporcionarla.

Por el nivel de participación del investigador fue una observación

participante, donde el observador pasa a ser parte del grupo y se integra

como miembro activo del mismo.

Ander Eggs (Ob. cit.), señala dos tipos de observación participante:

Natural: cuando el observador ya pertenece al grupo o comunidad en

estudio y

Artificial: cuando se integra al grupo con el objeto de realizar la

investigación.

En la presente investigación correspondió a una observación

participante natural, ya que la investigadora es docente de aula de la

institución educativa.

La observación también puede ser clasificada según el autor antes

mencionado en observación estructurada y observación no estructurada.

Para este estudio se tomó la observación no estructurada, la cual emplea

el procedimiento de la “observación participante” en la que el investigador

actúa como observador y se familiariza con el lugar para posteriormente

volverse participante activo, desarrollar un plan de muestreo de eventos y

seleccionar las posiciones para llevar a cabo la observación, para ello se

recaba información referida al ambiente, los participantes, sus actividades

e interacciones, la frecuencia y duración de los eventos para ir tomando

“notas de campo”, “notas de observación”, “notas teóricas”, “notas

metodológicas” y “notas personales”, obteniendo así información sobre la

dinámica de grupo y el fenómeno a estudiar.

La entrevista.- Según Patton (2003), es una técnica de la que se

cuenta en la investigación cualitativa que permite acceder a cierta

información por medio de una conversación profesional con una o varias

personas, es una conversación durante la cual se formulan preguntas y se

reciben respuestas, es un recurso metodológico muy útil de la

investigación cualitativa.

El papel del entrevistador es muy importante, porque él es un

facilitador del proceso de comunicación entre dos personas, su papel es

inducir profundidad y detalle en las opiniones del entrevistado, debe

inspirar confianza, escuchar activamente y atender el comportamiento

verbal y no verbal de la persona que habla.

La entrevista cualitativa puede tomar las siguientes formas:

Entrevista informal conversacional, entrevista estructurada con una guía y

entrevista estandarizada.

La entrevista informal conversacional: las preguntas se formulan en torno

a un asunto que se explora ampliamente sin utilizar una guía que delimite

el proceso.

La entrevista estructurada con una guía: procura un marco de referencia a

partir del cual se plantean los temas pertinentes al estudio y posibilita un

proceso de recolección, y facilita un mejor manejo de la información.

La entrevista estandarizada: Organiza y formaliza el proceso de

recolección, este tipo de entrevistas es pertinente cuando hay más de una

persona responsable de recolectar información.

Una vez definida la modalidad de pregunta el investigador debe tomar una

decisión para relacionar el tipo de pregunta, la secuencia, el nivel de

detalles, y la duración de la entrevista.

Los tipos de preguntas pueden ser:

Preguntas sobre experiencias o comportamientos: lo que hace o ha

hecho una persona.

Pregunta sobre sentimientos: respuestas emocionales de las

personas.

Preguntas sobre opinión: lo que ellos piensan.

Preguntas sobre conocimientos: lo que las personas saben

específicamente.

Preguntas sobre sensaciones: lo que ven, oyen, tocan.

Preguntas de carácter histórico: características del informante.

Es recomendable comenzar las entrevistas con preguntas descriptivas,

sobre comportamientos, actividades, o experiencias, temas que requieran

poca memoria, e interpretación y sean fáciles de contestar.

Se recomienda plantear preguntas abiertas para que la persona

entrevistada responda en sus propios términos y seleccione sus propias

categorías.

También se debe evitar hacer preguntas dicotómicas, porque inducen

respuestas de sí o no.

Al realizar la entrevista se debe iniciar con la presentación del

investigador y explicar el objetivo de la misma, dar a conocer los temas a

tratar en la entrevista.

La calidad de los datos de una entrevista depende estrechamente de las

aptitudes de relación interpersonal del entrevistador, quien debe procurar

crear un clima tranquilo para la entrevista y entablar con los informantes

un nivel satisfactorio de comunicación.

Categorización

Categorizar es clasificar, conceptualizar o codificar mediante un

término o expresión breve que sean claros e inequívocos, es decir

clasificar las partes en relación con el todo, de asignar categorías o clases

significativas, de ir constantemente integrando y reintegrando el todo y las

partes, a medida que se revisa el material y va emergiendo el significado

de cada sector, evento, hecho o dato.

Según Belkys Rojas de Escalona (2007), las categorías

constituyen los aspectos que vamos a buscar en el texto, referidas a

determinadas variables. La categorización supone la clasificación de los

elementos de un conjunto a partir de unos criterios previamente

establecidos. Hacen referencia a los valores que el aspecto estudiado

puede adoptar en el análisis de contenido. Las categorías deben

ajustarse a ciertos criterios de orden lógico, psicológico y contextual.

Estos criterios son lo que facilitarán ubicar una unidad de análisis en una

categoría específica e interpretar su inclusión. Las categorías deben

seguir las siguientes reglas lógicas:

a) Homogeneidad: debe existir relación lógica entre las categorías y la

variable que se pretende estudiar.

b) Carácter de inclusividad: las categorías deben abarcar todas las

posibles variaciones para permitir la clasificación de todas las

observaciones.

c) Mutuamente excluyentes: los contenidos incluidos en una categoría

no pueden parecerse a los incluidos en otra.

d) Claras y precisas: las categorías debe ser definidas en términos que

no den lugar a diversas interpretaciones.

Estructuración

El proceso de estructuración constituye como el corazón de la

actividad investigativa: ilustran el procedimiento y el producto de la

verdadera investigación, es decir, cómo se produce la estructura o

síntesis teórica de todo el trabajo y, también, como se evalúa. El mejor

modo de comenzar la estructuración es seguir el proceso de integración

de categorías menores o más específicas en categorías más generales y

comprehensivas. Igualmente, debe considerarse como una ayuda

inestimable la elaboración frecuente de diseños gráficos (con flechas,

tipos de nexos, relaciones, entre otros), ya que permiten integrar y

relacionar muchas cosas y ayudan a captarlas en forma simultánea.

Contrastación

Esta etapa de la investigación consistirá en relacionar y contrastar

sus resultados con aquellos estudios paralelos o similares que se

presentaron en el marco teórico referencial, para ver cómo aparecen

desde perspectivas diferentes o sobre marcos teóricos más amplios y

explicar mejor lo que el estudio verdaderamente significa.

Aunque el marco teórico referencial, sólo nos informa de o que han

realizado otras personas, en otros lugares, en otros tiempos y, quizás,

también con otros métodos, sin embargo, el comparar y contraponer

nuestras conclusiones con las de otros investigadores, igualmente

rigurosos, sistemáticos y críticos, no sólo nos permitirá entender mejor las

posibles diferencias, sino que hará posible una integración mayor y, por

consiguiente, un enriquecimiento del cuerpo de conocimientos del área

estudiada, como se verá en la etapa de la teorización.

Debido a esto, habrá que tener muy presente que el proceso de

categorización, análisis e interpretación, deberá estar guiado

fundamentalmente por conceptos e hipótesis que provengan o emerjan de

la información recabada y de su contexto propio, que muy bien pudieran

ser únicos, y no de teorías exógenas, las cuales sólo se utilizarán para

comparar y contrastar los resultados propios.

Teorización

El proceso de teorización utiliza todos los medios disponibles a su

alcance para lograr la síntesis final de un estudio o investigación. Más

concretamente, este proceso tratará de integrar en un todo coherente y

lógico, los resultados de la investigación en curso, mejorándolo con los

aportes de los autores reseñados en el marco teórico referencial después

del trabajo de contrastación.

La mayoría de los investigadores manifiestan dificultades en

describir qué es lo que hacen cuando teorizan; pero un análisis cuidadoso

de sus actividades mentales hará ver que son similares a las actividades

cotidianas de una persona normal: las actividades formales del trabajo

teorizador consisten en percibir, comparar, contrastar, añadir, ordenar,

establecer nexos y relaciones y especular; es decir, que el proceso

cognoscitivo de la teorización consiste en descubrir y manipular

categorías y las relaciones entre ellas.

BIBLIOGRAFÍA

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