candidato al discipulado contacto akoustikoÍ 3 · 2013-11-19 · buscadores de la verdad el...
TRANSCRIPT
CANDIDATO AL
DISCIPULADO AKOUSTIKOÍ
CONTACTO
3
COMPAÑERO DEL SECRETO
Comunidade Jessênia © Reservados todos los derechos.
ÍNDICE Introducción.............................................................................................................................. 2 Capitulo 1
La tarea iniciática de una Escuela de Misterios ................................................................... 10 Capitulo 2
Los Arcanos propuestos al neófito y los conceptos básicos de la Iniciación Jesenia .......... 13 Capitulo 3
El concepto zoroástrico del Sendero Iniciático adoptado por los jesenios actuales............. 16 Capitulo 4
Las exigencias de la Senda del Bien .................................................................................... 20 Capitulo 5
Los Treinta y Cuatro grados y los Cinco Aspectos de la Iniciación Jesenia........................ 25
Libro de Contacto 3
2
INTRODUCCIÓN
Llegamos al último libro de la serie de contactos con la que la Comunidad Jesenia quiere presentarse al público occidental con el fin de hacer accesible a los verdaderos buscadores de la verdad el contenido esotérico de los Misterios Antiguos y de la Sabiduría Clásica. La Comunidad Jesenia abre ampliamente sus portales para permitir a quienes deseen hacer una incursión al interior de sus sagrados palacios, una visita a los templos de la antigua Persia, de Egipto, de Jerusalén en Palestina, de la India, de los Gnósticos Cristianos y de todos los pueblos antiguos que abrazaron, en el pasado, la Doctrina Secreta Universal.
Para desempeñar su papel de anunciadora de un Camino Iniciático, la Comunidad
Jesenia formó todo un cuerpo cósmico-templario invisible y una organización mágica de manifestación (visible) de sus aspectos doctrinarios, tarea que fue llevada a cabo por el rabino judío señor Jodachay Bilbakh junto con doce hermanos más, todos ellos unidos al eslabón de los grandes maestros de la Cábala.
El señor Jodachay viajó por todo el planeta, visitando Egipto, Persia, India, Grecia,
China, a los Mandeanos de Irak, al Brasil y Europa. Parte de su vida transcurrió dedicada a momentos de gran meditación en las grutas de Qumran en Israel y de los Cátaros en el sur de Francia (en especial la gruta de Boan y la caverna de Lombrives), y en Egipto (cerca del lugar en el que vivieron los terapeutas esenios alejandrinos). En Francia, él y algunos de sus discípulos directos recorrieron el antiguo Camino druídico desde París hasta Santiago de Compostela en España.
Durante esos largos viajes, el señor Jodachay entró en contacto cada vez más íntimo
con su pasado microcósmico, con su pasado reencarnatorio, y acabó uniéndose de manera muy profunda con el cristianismo profesado por los cabalistas cristianos, los rosacruces y los masones.
La iniciación del señor J. Bilbakh fue, sin embargo, genuinamente oriental, recibida de
la corriente de los maestros y discípulos cabalistas judíos de la línea del Zohar y del Sepher Yetsirah, dos obras tradicionales y antiguas que registran la Tradición Secreta de los antiguos judíos. Todas las bases de la Doctrina Sagrada de la Cábala se encuentran registradas en estos dos libros.
La Cábala en su aspecto original, y dentro del terreno del judaísmo, fue preparada a lo
largo de muchos años, desde el patriarca bíblico Abraham hasta los días actuales, para ser accesible sólo a los rabinos judíos. La Cábala presenta una enseñanza derivada de las instrucciones secretas que fueron reveladas al patriarca antediluviano Henoch, al patriarca de la nación israelita, Abraham, y a Moisés, legislador y autor de los primeros cinco libros de la Biblia. Dichas instrucciones contienen un tesoro iniciático antiguo que formó la base del cristianismo, del esenismo y de las corrientes esotéricas occidentales.
Jesús demostró durante todo su tiempo de ministerio que conocía la divina ciencia de
la Cábala, manejándola de forma muy especial y con gran sabiduría. En las obras cristianas no
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 3
bíblicas que los teólogos denominan apócrifos1 como, por ejemplo, en los llamados Evangelios de la Infancia, se narra que Jesús fue llevado junto a un maestro judío para aprender a leer y escribir y que en su primera lección, el niño divino demostró un elevado conocimiento del alfabeto hebreo y del significado esotérico cabalístico de cada letra, de tal forma que el maestro judío acabó convirtiéndose en discípulo de Jesús.
El principio y fundamento de la enseñanza cabalística es la consideración de que el
alfabeto hebreo (usado para escribir las escrituras sagradas del Antiguo Testamento) es un alfabeto sagrado poseedor de un significado oculto, de una inteligencia divina, de forma que cualquier palabra escrita en esa lengua se convierte, inmediatamente, en imagen de los Misterios divinos, en reflejo del Pensamiento divino creador. Así, por ejemplo, la palabra casa, escrita en español, indica apenas el lugar donde viven personas, una habitación. Sin embargo, traducida al idioma hebreo se escribe Baith – , donde la letra beth – , que suena como la letra “b”, indica la creación que Dios realizó para que sirviese de habitación a Sus atributos divinos; la letra yod – indica Su más secreto nombre, Jehová – , el cual Él eligió para servir de manifestación de Sí mismo en el medio de la creación. La ultima letra, tav – que posee la forma de un portal, indica que en la creación Dios estableció portales de entrada y de salida de Sus poderes, cualidades y atributos. De esta forma el cabalista ve en la palabra baith o casa, la imagen de la creación que Dios adornó como habitación de Su Ser, como lugar de manifestación de Su nombre Jehovah y por cuyos portales entran y salen Sus energías creadoras y transformadoras.
Más allá del Misterio de las letras en sí mismo, existe también el Misterio de $los
números inherentes a cada letra. Así, por ejemplo, en la palabra baith o casa, la letra beth – tiene valor 2, y la letra yod – valor 10. Sumando estas dos letras, obtenemos el número 12. Esto significa que la gran casa sideral de Dios se divide a su vez en doce casas zodiacales. Sumando toda la palabra baith – , tenemos aleph ( ) + beth ( ) + tav ( ) obtenemos el número 412. La palabra hebraica , que se lee yashev, suma 312 y significa morar, establecerse, habitar. Comprobamos, por verificación numérica, que estas dos palabras poseeen un significado común: el 412 indica la palabra casa, el 312 indica el verbo habitar o morar.
El Misterio de la Cábala es, por tanto, el Misterio de las letras del sagrado alfabeto
hebreo, de los sonidos que ellas representan y de los números que ellas ocultan. En esa lengua hebrea y en la aramea, considerada también una lengua sagrada, fueron escritos, como ya mencionamos, los libros bíblicos del Antiguo Testamento. El cabalista, al leer el Antiguo Testamento en su original hebreo y arameo, ve directamente el Pensamiento de Dios; sorprende a Dios en Sus Pensamientos íntimos, en su imaginación divina y puede así, conocer la mente del Creador, Sus secretos, Sus ideas. De esta forma el cabalista puede obtener un conocimiento mucho más profundo acerca de Dios, un conocimiento mucho más sabio y real, que cualquier otro estudiante de la Biblia.
Quien conoce la Cábala sabe muy bien por qué Jesús, a los doce años, impresionó
profundamente a los sabios judíos del Templo de Jerusalén. El rabí fundador de la Comunidad Jesenia, el señor Jodachay Bilbakh nos dice que, como rabino cabalista, él se veía también
1 Apócrifos: Los libros sagrados que conforman la Bíblia son denominados canónicos. La Bíblia, sin embargo, en el pasado, poseía muchos otros libros que más tarde fueron rechazados y finalmente excluidos de las Escrituras Sagradas recibiendo el nombre de apócrifos.
Libro de Contacto 3
4
constantemente impresionado con el conocimiento que Jesús revela en sus evangelios, así como el conocimiento de sus discípulos, como el de Pedro, Juan y Santiago.
Según el rabino Jodachay B., el cristianismo primitivo de la época en que vivieron
Jesús y sus discípulos, era muy judío cabalístico, y en su estructura era muy similar al esenismo de Qumran, y fue llamado de Jesenismo (o esenismo según la visión de Jesús) por los primeros historiadores cristianos.
La Comunidad Jesenia, en su manifestación actual, pretende mirarse en ese estado
primitivo del cristianismo y, como el pasado, presentarse como escuela de Misterios. ¿Qué es una escuela de Misterios? Es una organización clásica, proveniente del más
remoto pasado, manifestada en la Tierra con su grupo de iniciados e Instructores para traer y ofrecer a los verdaderos buscadores de la Verdad la Senda de los Misterios. Como Escuela de Misterios se diferencia de las religiones y sigue la ruta de la Iniciación clásica.
Pero ¿qué son los Misterios? Son el conjunto de arcanos secretos manifestados bajo la forma de enseñanza sagrada
los cuales constituyen la Doctrina Universal. Esta enseñanza habla del Universo, del Hombre, de Dios y la Naturaleza, y revela un conocimiento inédito acerca de ellos, muy diferente del que se enseña en las religiones comunes de la masa, en las academias universitarias, en los libros o en las bibliotecas.
La Doctrina de una Escuela de Misterios está constituida por un tipo de enseñanza que
denominamos esotérica, mágica, alquímica u oculta. La Doctrina de la Comunidad Jesenia es denominada “Sabiduría Antigua” ya que proviene de la enseñanza secreta de los sabios antiguos, como Osiris y Hermes en Egipto, Orfeo en Grecia, Moisés y los Profetas en Palestina, Zoroastro en Persia, Krishna en la India y Jesús en Judea e Israel, etc.…
Estos grandes Instructores de la Humanidad enseñaron, cada uno en su época, que el
Hombre, el Universo y la Naturaleza perdieron su unidad Primordial, se desligaron de Dios, provocando el accidente que conocemos como la Caída. El Universo y su complejo mecanismo de existencia, de sostenimiento y transformación, era regido por la Fuerza Luz del Soplo Divino. Esa Fuerza-Luz era el producto de la Idea-Pensamiento creadora de Dios y contenía un manantial infinito de los poderes, posibilidades y energías que constituían la Naturaleza Original.
Cuatro de estas energías son denominadas energías primarias o energías raíz: El
Sonido, el Calor, la Luz y la Vida. La Naturaleza Original es por tanto un océano de energías y substancias cósmicas colocadas en movimiento y llevadas a la existencia y funcionamiento por la Idea-Pensamiento Creadora Divina. El resultado de la interacción entre la Idea-Pensamiento creadora de Dios y la Naturaleza, fue la creación de miríadas de mundos y criaturas.
Una de ellas era el Hombre. El conjunto de mundos creados recibió el nombre de
Universo (Uni-verso o diversos conectados al Uno único, o también, la diversidad de cosas, criaturas y mundos unidos a un centro único de Fuerza-Luz). Hombre, Naturaleza, Dios y Universo se encontraban todos unidos a un único centro: La Misteriosa unidad en la que todos los poderes, todas las cualidades, todas las fuerzas tienen su origen, sustento, existencia y
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 5
perpetuidad. Ese Centro-Unidad es denominado en griego Logos, palabra compleja que designa la manifestación de Dios como poder acústico creador y ordenador. Este Logos dominaba en el principio toda la Creación, manteniéndola continuamente en orden, equilibrio, armonía y perfección crecientes.
Sin embargo, en un momento dado, algo que es muy difícil de definir perturbó parte
de la Creación y separó al Hombre, junto con una parte del Universo y de la Naturaleza, de la Unidad-Logos que residía en Dios.
Todas las piezas de la Creación que sufrieron esa perturbación cayeron en el caos, en
el desorden, en la separación del Centro Uno, del Uno-Raíz. Ese accidente fue llamado, en la Biblia, “la Caída”.
Esta separación o desconexión del Universo-Hombre-Naturaleza de su Centro-Uno
(registrada por todas las tradiciones antiguas) generó una terrible aberración, un desorden inimaginable, una maldad sin límites. Los mundos separados de la Unidad-Raíz son presidios tenebrosos en los que se encuentran diversas olas de creaturas cósmicas, entre ellas el hombre. Esos seres caídos tuvieron, durante el proceso de Caída, la posibilidad de escoger libremente el liberarse de dicha perturbación cósmica, pero, o bien no quisieron apartarse de ese mal, o bien eran, dentro de la corriente de la perfección en que nacieron, muy inmaduros en su desarrollo para poder evitarlo.
La Caída, como accidente cósmico generó una naturaleza que el Logos sólo podía
controlar y sobre la que sólo podía actuar de manera indirecta. Para poner un límite a los efectos de este proceso, e incluso para ofrecer a los que fueron arrastrados al error y al desorden una oportunidad de corrección, innumerables jerarquías angélicas descendieron al interior de esa naturaleza caótica, al país de la tinieblas, y manifestaron la Escuela de Misterios y la Sabiduría oculta, llevando a los seres caídos los grandes maestros instructores venidos de Luz quienes introdujeron en la Tierra la Iniciación, es decir, el camino de retorno al seno de la Naturaleza divina y perfecta.
El Cabalista jesenio, durante su discipulado, es colocado ante el drama cósmico de la
ruptura de la Unidad como un agente capaz, no solamente de apartarse de dicho proceso de Caída, sino también de penetrar, como un mago de Dios, como un Alquimista, en la raíz de esta Caída y liberarse a sí mismo, al mundo y a la Naturaleza. Él es, por así decirlo, invitado a convertirse en aprendiz de Mago y co-creador. Junto a Dios y sus santas criaturas angélicas, él atacará toda la creación en caos y co-construirá una Naturaleza, un Universo y un Hombre reunificados con la Unidad Raíz. ¿Cómo ocurrirán esas cosas proclamadas por la Doctrina de los Misterios?
Ocurrirán a través de una Escuela de Misterios, del Aprendizaje proporcionado por
ella. Quien se adhiera a esta corriente de aprendices de Magos aprenderá que dentro de la Comunidad Jesenia le son ofrecidos como tesoros CINCO ASPECTOS (de los cuales hemos hablado de forma resumida en los contactos anteriores), cinco puertas de entrada para volver a la Unidad-Raíz.
El PRIMER ASPECTO - COMPAÑERO DEL SECRETO es el del Hombre que
hará de sí mismo una sepultura en vida. Es decir: en ese aspecto el cabalista o aprendiz de Mago se coloca en la perfecta mortificación de todo su sistema mental, astral, etérico y físico, dejando morir todo su viejo mundo mental, sus viejos pensamientos, deseos, hábitos,
Libro de Contacto 3
6
costumbres, vicios, voluntades, todo aquello que lo aparta de la Unidad divina. En ese discipulado, él se convierte en un “muerto-vivo”, en un hombre que entierra su voluntad, sus errores, para hacer resucitar sus más elevadas virtudes y dones espirituales.
Esa fase está representada por el candidato a la Iniciación que entra en la Tres Noches
de Misterios, es decir en el anochecer de las facultades del Pensar, del Querer y del Sentir. En la Iniciación egipcia corresponde a la fase en que el candidato es llevado hasta la esfinge en medio de la noche, sin ninguna antorcha para iluminar su camino. Él tiene que descifrar los cuatro enigmas de la esfinge (los cuatro elementos en estado caótico) que en medio de las densas tinieblas le grita: ¡Descíframe o te devoraré! En medio de las tinieblas el candidato avista la antorcha del hierofante y, guiado por su pequeña luz, llega hasta la cámara de la esfinge. Allí, es abandonado por el maestro receptor y, ya sin antorcha, el candidato a la iniciación desciende entonces a la cámara subterránea de la pirámide, símbolo del santuario pélvico, morada del karma, del subconsciente y de la Kundalini impía. Después se eleva hasta el corazón, hasta la cámara del rey, hasta la cabeza donde una tumba abierta le ofrece la triple mortificación del Sentir, del Pensar y del Querer. Si tiene éxito en esta tarea de mortificación, el hierofante reaparece con su antorcha y lo conduce fuera de la pirámide como un neófito aceptado en los Misterios Osirianos.
En los Evangelios, esta fase es representada en la descripción de Lucas que comienza
con la genealogía de Jesús (dividida en 3x24 generaciones) y continúa hasta la decapitación y sepultura de Juan el Bautista (Mateo 14:12).
Como ya lo hemos mencionado, la Comunidad Jesenia da a esta fase el nombre de
PRIMER ASPECTO – COMPAÑERO DEL SECRETO. Ese aspecto está dividido en siete grados comenzando con el discipulado AKOUSTIKOÍ (se lee Akustikoi) y terminando con el APODOKOÍ (se lee Apodokoi, el admitido en los Misterios).
El Akoustikoí es, como lo señalamos en los contactos anteriores, el OYENTE: aquel
que escuchará los rudimentos de la Doctrina Secreta, procurando silenciar en su mundo mental todo tipo de crítica, duda, y de cuestionamientos oriundos de la vieja mentalidad cargada de cultura intelectual, académica, cegada por la lógica científica, con la razón asesina de la fe. El tema base de esas instrucciones durante esa fase del proceso se puede resumir en una frase de la obra La Voz del Silencio: “La mente es el gran asesino de lo real”. En el antiguo sistema iniciático egipcio, el Akoustikoí era recibido en la barca nocturna de Ra (El Dios-Sol) por el dios Toth (personificación de la Sabiduría oculta, de la Iniciación clásica) quien llevando la plumas de Maat, su diosa-esposa (personificación de la Justicia y del Mantra Yoga, es decir, de la preparación mágica de la voz), le abanicaba y soplaba sobre su cabeza, es decir, entregaba al candidato las primeras enseñanzas secretas, usando para ello, su voz mágica llena de fuerzas astrales divinas.
El Akoustikoí buscará también en su corazón, orientado por las instrucciones propias
de su discipulado, la llamada Joya en el Loto o Átomo Pneumático que es la fuente ígnea de la vida y el lugar en el que se encuentran guardados, en estado latente, todos los tesoros y poderes divinos que el hombre poseía cuando se encontraba despierto y en total actividad antes de la Caída.
El último grado, denominado Apodokoí, se refiere al DISCÍPULO ACEPTADO. En
ese grado el candidato a los Misterios recibe la llave del León y de Águila, la cual le permite
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 7
entrar en el interior sagrado de la esfinge, penetrar en la pirámide y llegar, finalmente hasta la cámara del rey donde una tumba abierta lo aguarda.
El León y el Águila son las dos figuras de Misterios que componen parte del cuerpo de
la esfinge. Ellas no aluden tan sólo a los elementos alquímicos del Fuego y del Aire, sino también a las dos grandes corrientes de Misterios: La Corriente Cabalística, simbolizada por Jesús, llamado León de la Tribu de Judá; y la Corriente Gnóstica, simbolizada por Valentín, quien es llamado Águila de los hierofantes occidentales y Ángel Guardián de los Misterios gnósticos. En el antiguo Egipto el Apodokoí recibía del dios Thot la llave serpentina (la llave en forma de cruz con serpientes entrelazadas) con la cual podía abrir la tumba de Osiris para preparar, dentro del ataúd, su resurrección.
El SEGUNDO ASPECTO – HIJO DEL SECRETO coloca, en su primer grado
denominado Beni Mitizvah (hijo del Mandamiento), al candidato a los Misterios ante la MEDIA NOCHE INICIÁTICA en la que las tinieblas, es decir, la ausencia de cualquier luz de la vieja mentalidad, de la vieja personalidad psicológica, del viejo yo y de su mundo de deseos, voluntades y pensamientos, creencias religiosas, filosóficas y académicas, deben volverse completas. En el antiguo sistema iniciático egipcio, después de que el Apodokoí o Aceptado abrían la tumba de Osiris, Toth lo conducía al interior del ataúd y cerraba la tapa, arrojando al muerto vivo sobre las aguas. Él se convierte entonces en el Hijo de los Mandamientos y la Biblia se dirige a él de este modo: “De noche Jehovah me sondeará,y me sumergirá en el fuego, para comprobar la pureza de mi corazón” (Salmo 17:3).
En las aguas, el barco-atáud del Beni Mitizvah se junta, primero a otros nueve barcos-
esquifes, y se convierte entonces en Beni MeMinyan (hijo de los diez). Toth y Anubis, los dos sacerdotes de la gran noche iniciática, en dos otros barcos-ataúdes completan el grupo de doce; ellos guían a los muertos-vivos a través de la regiones peligrosas de la muerte y de la noche, les dan Antorchas sagradas, lo que los convierte entonces en Beni Esh o Hijos del Fuego y, más tarde, en Hijos de la Luz (Beni ‘Or) e Hijos de la Aurora (Beni Schahar). En los Evangelios, Jesús se encuentra con sus discípulos de noche, en medio de las aguas del Mar de Tiberiades (Juan 21:1 a 14). Aún sumido en la noche, navegando en su barco-esquife, el candidato a los Misterios recibe toda la Doctrina de la Cábala (la que constituye la llave del León) y se convierte en Beni Hatsadokh o Hijo del Sacerdocio Tsadokiano; después de entender todo lo que el sacerdocio secreto de los esenios y jesenios requiere del candidato a los Misterios, empieza entonces el grado del Beni Hakabbalah (Hijo de la Doctrina Cabalística) en el que los más altos secretos de la Cábala le serán totalmente revelados. Jesús se aproxima entonces a él haciéndole tres propuestas y tres llamados sacerdotales. El candidato entonces pasa a ser parte del grupo del TERCER ASPECTO – HERMANO DEL SECRETO. La primera pregunta lo conduce al grado de Frater alquimista, la segunda, al grado de Frater de la Rosa Cruz de Oro y finalmente en la tercera pregunta, se convierte en Frater de la Sagrada Rosa-Cruz. Un poderoso sello, en forma de TRIANGULO, le es revelado y se convierte en Frater de los Tres Sellos. Él comprende que su barco-esquife es una réplica de la Tumba de C.R.C. (Cristián Rosa-Cruz, hierofante de los rosacruces clásicos) y lee en la lápida de esa tumba toda la Doctrina Gnóstica Hermética. Él se convierte entonces en Frater de la Lápida de C.R.C.
Todos los hierofantes del pasado esculpieron sus enseñanzas secretas en La Lápida de
C.R.C, encontrándose marcadas todas ellas con el símbolo de Toth y su Vara con serpientes. Esa es la marca de los grandes médicos alquimistas de todos los tiempos que poseyeron la Verdadera Medicina, un inmenso conjunto de dones y conocimientos, entre ellos la sagrada y
Libro de Contacto 3
8
hermética Fitoastroterapia alquímica, denominada Vera Arte de Cura. De la visita a la Lápida de C.R.C. surge el Frater Veritas Medicae. En la leyenda de Osiris, su cuerpo después de haber navegado por el río y el mar dentro del esquife de madera, encalla en la costas de Fenicia, en tierra fértil y allí brota convirtiéndose en un frondoso cedro cuyas hojas contienen un remedio universal que los hierofantes fenicios recogieron para destilar la panacea (sustancia de la cura universal) y el elixir de la vida eterna. Más tarde, los auxiliadores de Hiram Abiff extrajeron enormes vigas de maderas de ese árbol y las llevaron a Jerusalén con el propósito de utilizarlas en la construcción del Templo de Salomón. En esa empresa se encontraron con la tumba vacía de Osiris, pues el cuerpo había sido localizado y substraído por Isis (su esposa) siglos atrás, habiéndolo llevado de vuelta a Egipto donde los sacerdotes lo momificaron. Entres los siglos X y XII, los nueve compañeros que fundaron la Orden de los Caballeros Templarios encontraron un vano en las ruinas del Templo de Jerusalén el cual contenía una de esas vigas de cedro intactas que fue recogida y llevada al norte de Francia para servir de sostén al techo de unos de los principales templos de los Caballeros Templarios. Realmente, desde el grado de Beni ‘Or (Hijo de la Luz) y Beni Schahar (Hijo de la Aurora), el discípulo cabalista ya se encuentra en la mañana de la resurrección. El lenguaje universal de Misterios indica esa mañana al relatar que la tumba de Jesús, o la tumba de Osiris e incluso la de Hermes, fueron halladas vacías.
En el Aspecto del Hermano del Secreto, los Frateres regresan a la tumba repetidas veces con el objetivo de completar su resurrección hasta la perfección. La resurrección es un proceso de autocura, de autoterapia alquímica que incluye muchos y profundos conocimientos acerca del hombre visible e invisible, tanto del hombre biológico como del hombre alma-espíritu.
Aquel que ve la Luz ve el reino, según enseñan los cristianos gnósticos antiguos. El
reino es la manifestación de la Escuela de Misterios en la Tierra. El lugar o país en el cual es bien recibida, se vuelve un reino gnóstico. Todos los que ingresan en la Escuela de Misterios se convierten en Reyes Sacerdotes.
Cuando ese reino representado por la Escuela de Misterios vuelve a lo inmanifestado,
o mejor dicho, a lo invisible, todos sus tesoros son cuidadosamente guardados por los guardianes, los MAESTROS DEL CUARTO ASPECTO – MAESTROS DEL SECRETO. El reino del Oriente guardó sus tesoros en Qumran y en Nag Hammadi. Otros lugares donde los guardianes orientales guardaron tesoros semejantes a los de Qumran y Nag Hammadi, están todavía por ser descubiertos. El reino del Occidente los guardó en el Sabbartez, en el Sur de Francia, tierra de los antiguos cátaros y druidas. Aquí también muchos otros lugares de tesoros espirituales serán descubiertos en el futuro. Todos los maestros que contemplaron las partes visibles e invisibles de esos tesoros, son Maestros Guardianes del Secreto Real. Cuando ellos dominan la parte astral de los tesoros de la Luz, tal como está descrito en el Evangelio de la Pistis Sophia, se convierten en Pastóforos (magos operadores de los 36 aspectos zodiacales del Fuego Astral universal) y Arquimagos (dominadores perfectos de todos los aspectos del Fuego astral universal).
EL QUINTO ASPECTO – MAESTRO DEL CANDOR o ARQUIPONTÍFICE, o
también ARQUIMAESTRO, es el aspecto del Maestro que eligió construir nuevos templos; es el aspecto del Arquitecto Masón que llevará a otros la sagrada Doctrina del arte Real de Construcción. Pesados y elevados deberes constituyen el discipulado de esos grandes maestros. Honor, sólo el del sacrificio; Gloria, sólo la del brillo de la iluminación; Poder, sólo el de dominarse a sí mismo: esa es la frase básica de esos elevados últimos grados del
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 9
discipulado jesenio. Mucho desapego, una gran voluntariedad, anhelo absoluto e inviolable de entregarse al servicio de la humanidad son las cualidades del Maestro del Candor. Él adquiere en sí mismo el Ser de la Inviolable Tranquilidad. Su alma está impregnada por la eternidad, vestida por el Manto áureo de la resurrección en progreso. Gracias a esa resurrección, adquirida gracias a una enorme e inquebrantable persistencia, paciencia y dedicación durante los Treinta y Cuatro grados jesenios, el alma puede volar como un pájaro ígneo y sumergirse en el centro del fuego, en las llamas luminosas de la Luz Solar y anidar en el Reino de las Llamas del Logos. El Arquipontífice abre, al final de su discipulado, un puente entre el tiempo y la eternidad y se coloca a lo largo de él como una flecha que apunta al Camino de retorno al Hogar divino.
Libro de Contacto 3
10
CAPITULO 1
LA TAREA INICIÁTICA DE UNA ESCUELA DE MISTERIOS
Quien desea conocer la Comunidad Jesenia así como sus características de Escuela de Misterios puede ahora entender nuestro objetivo, nuestra misión, la tarea que cada jesenio quiere, desde lo más íntimo de su corazón, realizar en la Tierra. Nuestro discipulado tiene algunas particularidades que queremos exponer con detalle a los interesados, y consideramos todo aquello que aquí vamos a revelar como un presente que la Luz quiere ofrecer a la humanidad extraviada en las tinieblas de esta existencia terrenal.
Para empezar, querido amigo, usted ya debió entender que a lo largo de los Treinta y
Cuatro grados de nuestro discipulado (que mostraremos de forma esquemática en el capítulo 4) introduciremos con toda su fuerza original el triple tesoro de la Cábala, de la Alquimia y de la Gnosis.
En segundo lugar, queremos informarle que esos Treinta y cuatro grados pueden ser
revelados a los candidatos y buscadores de los Misterios por medio de las 1122 lecciones adquiridas con nosotros. En cada discipulado el alumno se inscribe para recibir las lecciones correspondientes a aquel grado las cuales le serán enviadas por correo. Tendremos entonces 34 inscripciones y un total de 1122 lecciones que pueden ser solicitadas en cualquier momento, de acuerdo con las posibilidades de dedicación del solicitante.
Todo el trabajo de la Comunidad es puramente voluntario y cuenta con la cooperación
de unos pocos colaboradores. Dentro de nuestra actual condición y estructura, tanto física como organizacional, los envíos de las lecciones pueden incurrir en pequeños retrasos, desde la etapa de la traducción y digitación hasta la de encuadernación y remesa; sin embargo, estamos trabajando para que estas eventualidades sean mínimas hasta que puedan desaparecer por completo. Antes estos hechos ineludibles, aunque seamos contrarios a ello tenemos que pedir a los interesados que contribuyan al menos con los costos del material enviado. Si no eligiéramos esta medida y los interesados no hubieran acogido y entendido nuestras necesidades esenciales, la continuidad del trabajo se habría vuelto imposible. Sin embargo, esperamos que algunos jesenios se ofrezcan voluntariamente para proporcionar mejores condiciones administrativas y operativas para nuestra Comunidad, y permitir de ese modo, por ejemplo, la adquisición de una sede propia.
Por ahora nuestra Comunidad es una estructura casi puramente espiritual, con un
organismo material muy básico que atiende de forma satisfactoria a nuestros discípulos hasta del 17° grado. Después de él tenemos que dar instrucciones orales para los que desean formar Távolas; y en este punto tenemos dificultades por falta de recursos indispensables. Lo que hemos pospuesto durante tanto tiempo se hace ahora urgente. Y debemos convivir con este hecho de la forma más transparente y espiritual posible. Estamos ciertamente a la espera de amigos verdaderamente cooperadores. Sin embargo, aquel que pueda ofrecer una asistencia material a la Comunidad, además del trabajo espiritual, será también bienvenido. Pero alertamos, en este caso, que ninguna distinción, ninguna atención especial será ofrecida como compensación, y aquí prevalecerá la condición establecida por Jesús: “aquel que se juzgue mayor, que se coloque como servidor del menor”. El candidato tendrá que procurar saber en secreto cómo funciona nuestro organismo interno, es decir, el método de recibir y distribuir los bienes de forma equitativa y común para el beneficio de toda la Comunidad.
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 11
Retornando al tema de la preparación del discípulo jesenio para que pueda pertenecer
a las Távolas: al llegar al nivel de los discipulados del Hermano del Secreto, el candidato podrá recibir una invitación especial para pertenecer y formar una Távola del Grial, un grupo de estudio formado por DOCE MIEMBROS. Dicho grupo tendrá derecho a la gran enseñanza oral secreta de la Corriente Universal de los Hierofantes y tendrá en sus manos los medios para formar el Eslabón de la Corriente de los Discípulos Jesenios. Los miembros de la Távola son los verdaderos candidatos a la Maestría Jesenia y a los tesoros de la Gran Luz. Sólo ellos podrán abrir nuevas Távolas y llevar a otros el Sagrado Vaso del Grial. Sólo a ellos les es ofrecido el Quinto Aspecto, el del Arquipontífice y Maestro del Candor. Antes de esa invitación y a pesar de haber participado de muchas y profundas enseñanzas de la Doctrina Jesenia, el neófito es simplemente un estudiante, y los títulos que recibe a lo largo de los grados NO LE PERTENECEN DE HECHO sino que apenas indican el estado y nivel en que se encuentra.
Como es característico de la Cábala, en el discipulado de la Sabiduría Antigua,
solamente la enseñanza oral y secreta, destinada a revelar aspectos herméticos prácticos, escatológicos y astrales, constituye el verdadero aprendizaje del candidato a los Misterios. Y solamente dentro de él es posible alcanzar de manera ritual y efectiva los títulos de los grados. En esa enseñanza de boca a oído es transmitida al discípulo la astrología esotérica esbozada, por ejemplo, en el Sepher Yetsirah y en la Pistis Sophia, obras en las cuales son introducidos los aspectos prácticos que el discípulo tendrá que observar diariamente, ya que el cielo astrológico del reino de los seres inmutables, así como de nuestro mundo solar caótico y mortal, se encuentran en constante y dinámico movimiento.
Los Ángeles del Logos-Unidad están en constante trabajo de reforma astral,
comandando los astros, configurando el zodiaco visible y observable cotidianamente, para que, de sol a sol, una Escuela Hierofántica pueda ejercer su obra redentora y trabajar en la materia. Cada periodo astrológico que los Ángeles alquimistas de Dios ejecutan en los cielos zodiacales tiene que ser repetido o reflejado en la Tierra. Sin esa noble labor en la materia jamás podría volverse real la ley de Hermes: “Así como es arriba, también es abajo”.
Hombres y Ángeles trabajan en el Zodiaco visible como constructores y arquitectos;
hombres y Ángeles trabajan en la materia día y noche. Y si tienen éxito en esa labor, adquieren las condiciones para entrar en el reino de la perfección, en la parte de la Creación que no fue tocada por el error de la Caída y donde el Logos de Dios tiene pleno dominio para ejecutar también allí, elevadas y muy nobles construcciones.
De esta manera, el alquimista y el cabalista hacen uso constante de observaciones
astrológico-proféticas de las fuerzas que poseen un periodo, hora y lugar correctos para ser estudiadas, asimiladas o rechazadas, dependiendo de qué tipo de trabajo están encargados de ejecutar teniendo a su disposición el zodiaco impío y deformado por el error luciferino, así como el zodiaco divino que constituye y hace parte de la Creación que no fue alcanzada por el accidente de la Caída. De esta manera él puede retirar de estos dos zodiacos fuerzas mágicas, pues ambos zodiacos tienen fuerzas que pueden ser asimiladas por el hombre terrestre de forma positiva y ambos tienen también fuerzas que causan daños a la humanidad caída. Saber definir estas fuerzas, sus orígenes y los medios para su correcta asimilación, sin causar daño a los discípulos, es de importancia vital en un grupo o comunidad que quiera conectarse con el eslabón de una corriente de Escuelas de Misterios. Esa cadena infinita de eslabones de la corriente de Escuelas Hierofánticas de Misterios siempre conservó un objetivo mayor y
Libro de Contacto 3
12
fundamental: preservar al hombre terrestre para que pueda adquirir posibilidades de ascensión espiritual.
Para cumplir con ese objetivo mayor, esa cadena se vale de muchos conocimientos
prácticos que sólo pueden ser enseñados oralmente, ya que las palabras usadas para transmitirlos deben contener la “fuerza-vida” que el maestro transmite al discípulo oyente por medio de su voz. En el Contacto 2, dijimos que esa Palabra con fuerza-vida era, en Dios, Verbo, Poder sonoro creador que actuó junto a Dios en la Creación. Estas palabras que contienen fuerza vida sólo pueden aparecer en las enseñanzas orales de las Escuelas de Misterios.
De tal manera, si el estudiante quiere apenas conocer, sin practicar, podrá avanzar en
su discipulado hasta donde le sea posible, pero no podrá llegar al QUINTO ASPECTO y no podrá ser aceptado como ARQUIPONTÍFICE. ¿Cómo podrá alguien abrir nuevas Távolas, dedicarse ardua y voluntariamente, con celo e inquebrantable persistencia, a la enseñanza secreta, si no quiere asimilar en la práctica la Doctrina Universal? ¿Cómo podrá ser Arquimago alguien que no quiera día y noche, hora tras hora, con todo su ser y toda su mente, con todas sus fuerzas, practicar los santos y secretos arcanos de la Cábala, de la Alquimia, de las enseñanzas secretas zoroástricas y del cristianismo gnóstico? Este neófito que no desea practicar, debe caminar sólo hasta donde se lo exige una simple toma de conocimiento sobre los Misterios.
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 13
CAPITULO 2
LOS ARCANOS PROPUESTOS AL NEÓFITO Y LOS CONCEPTOS BÁSICOS DE LA INICIACIÓN JESENIA
Para que el neófito jesenio entienda claramente las lecciones que le serán ofrecidas, es necesario asimilar algunos conceptos, ya que ellos estarán en la base de todo lo que será enseñado a través de los Treinta y Cuatro grados.
En otras órdenes esotéricas no cabalistas, no cristianas y desligadas de la Iniciación
clásica ofrecida por la Sabiduría Oculta, por las Cinco Tradiciones Antiguas, se desconoce o menosprecia el concepto de la Caída, esencialmente cabalístico pero que también fue enseñando por Platón y Pitágoras en Grecia, así como en los Misterios de Eleusis. En Egipto los sacerdotes enseñaban igualmente este concepto. Así, en los escritos de las pirámides y del Libro de los Muertos se describe, por ejemplo, que durante una revuelta celeste entre los dioses de la barca solar ocurrió un accidente y la Tierra fue infestada por terribles serpientes venenosas que causaban el desorden y temibles enfermedades.
Cuando Moisés describió la Caída en el Génesis, no hacía nada más que transmitir a
sus hermanos de raza algunas de las más preciosas enseñanzas de los hierofantes egipcios. En el budismo, incluida la Tradición Hindú, el mundo en el que el hombre vive es
considerado como ilusorio, constituido de agregados tenebrosos, en el cual reina el dolor, el ciclo reencarnatorio del crecer, envejecer y morir. La vida terrestre es, en el budismo, un valle de tormentos, de sufrimiento, de gran dolor, de enfermedades e ilusiones. El hombre que nace en ese valle de miserias recibe una mente constituida por elementos tenebrosos, y con esa mente él penetra en la irrealidad, en los falsos conceptos, en los caminos espinosos y, de esta manera, en el sufrimiento de la vida terrestre. Para salir de esos caminos tormentosos, el budismo señala las Cuatro Verdades (La verdad sobre el sufrimiento; la verdad sobre la causa del sufrimiento; la verdad sobre la cesación del sufrimiento y la verdad sobre el camino que lleva a la cesación del sufrimiento) y el Camino Óctuple (punto de vista correcto; intuición correcta; hablar correcto; medios de vida correctos; esfuerzo correcto; pensamiento correcto y meditación correcta).
Según el budismo, la vida terrestre tiene diez características básicas, diez cadenas
aprisionadoras: la auto-ilusión, un gran compromiso con rituales y procedimientos religiosos inútiles, deseos sensuales, mala voluntad, anhelo por la vida enraizada en los aspectos inferiores de la materia, anhelo por una falsa promesa de vida eterna en más allá de la tumba, vanidad o presunción, inquietud e ignorancia. Los maestros budistas afirman que si el discípulo domina sólo el deseo sensual y la mala voluntad, se convierte en “aquel que reencarnará solamente una vez más y después se liberará”, y que quien supere la auto-ilusión, las dudas o falta de fe, y la fe religiosa inútil, o sea, el primero, segundo y tercer grilletes, se convierte en uno “que entró en la corriente”, es decir, que “entró en el Sendero de los Misterios”. Pero sólo aquel que rompe y domina las diez cadenas es plenamente un sabio.
En la Cábala, la vida terrestre es también dinamizada esencialmente por las Diez
Keliphoth. En lugar de una Corona para reinar (Sephirah Kether), ella ofrece ataduras para aprisionar al hombre; en vez de Sabiduría para vivir correctamente (Sephirah Hokhmah), ofrece insensatez para revolcarse en el error; en lugar de Inteligencia para vivir con una
Libro de Contacto 3
14
conducta correcta (Sephirah Binah), ofrece ignorancia para comportarse de forma ciega; en vez de Justicia para vivir de forma equilibrada y tranquila (Sephirah Din) ofrece inquietud y constantes y duras perturbaciones; ofrece desgracia en vez de Gracia (Sephirah Rressedh); fealdad en lugar de belleza (Sephirah Tifereth); derrota en vez de victoria (Sephirah Netsah); materia corporal densa y enferma en vez de corporeidad gloriosa y esplendorosa (Sephirah Hodh); negros abismos en lugar de fundamentos seguros (Sephirah Yessodh); un mundo caótico y lleno de fuerzas arrasadoras y destructivas en vez de un reino y hogar seguro para una existencia divina (Sephirah Malkuth).
Los cabalistas han sido acusados de entregarse a ideas zoroástricas cuando presentan
el concepto de diez Keliphot, ya que Zoroastro (gran instructor persa) también reconoció que la vida terrestre era miserable y estaba llena de ilusiones. Como Zoroastro y Buda, Mani, en el siglo III d.C., enseñó que el hombre terrestre es un dios caído y que la Tierra es su lugar de exilio. Platón enseñaba también que el Alma humana, al habitar un cuerpo terrestre, estaba encarcelada y era castigada por un error cometido contra el gran Ordenamiento cósmico divino. Al enseñar esa doctrina, Platón sólo estaba siguiendo una corriente de enseñanzas muy antiguas profesadas por Sócrates, Pitágoras y muchos otros maestros anteriores a él.
La Cábala, como rama de la Doctrina Universal, tampoco se aleja de ese concepto.
Los esenios y los cristianos primitivos siguieron también de cerca esa enseñanza, así como los cristianos gnósticos y, después de ellos, los alquimistas, los templarios, los cátaros y los primeros masones.
Nosotros como jesenios profesamos también los mismos conceptos, aunque esto nos
distancie de algunas órdenes esotéricas que consideran al mundo terrestre como un campo de evolución planeado intencionalmente por Dios para que diversas oleadas de vida cósmica se desarrollaran en él.
Los jesenios enseñan que la evolución es un segundo camino, un largo camino de
desarrollo del hombre hylico (materialista) y del hombre psíquico (religioso) hasta alcanzar el estado humano pneumático adecuado para la Iniciación (en tanto la Iniciación es el primero y más corto, tal como los expusimos al hablar de las diez cadenas). Esta evolución no era el propósito inicial del Logos, pero fue ofrecida a la humanidad después de su error para que este fuese paulatinamente disminuido, mientras que la Iniciación era (y continúa siendo) un proceso continuo en el que los seres y criaturas divinas ascienden por la escalera infinita de una perfección divina siempre creciente. Con la Caída, la Iniciación fue ofrecida de forma misericordiosa a los hombres caídos como un proceso que permite volver nuevamente al ciclo de desarrollo de la perfección.
En estos libros de Contacto pre-iniciáticos de nuestra Orden no podemos ampliar el
concepto jesenio de Caída y Evolución. Un abordaje de mayor profundidad de este grandioso y antiguo doble concepto de la Doctrina Universal será ofrecido en las lecciones del discipulado jesenio.
Lo que aquí debe quedar muy claro es que los jesenios proponemos el Camino corto
de la Iniciación, del cual se desviaron muchas órdenes esotéricas actuales, a pesar de ser este el Camino que el alma humana busca con gran e incomparable avidez, con profundo y firme anhelo.
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 15
El camino largo es también estudiado para poder entender en qué punto del gran plan de desarrollo cósmico se encuentran nuestro planeta, el hombre que vive sobre él y nuestro sistema solar.
Esa doble manera de mostrar el Sendero es característica de la Sabiduría Antigua y
amplía, como ya dijimos, la comprensión del candidato a los Misterios, indicándole hasta qué punto la naturaleza terrestre evoluciona, y hasta qué punto es posible sacar beneficio espiritual de esa evolución. Así, por ejemplo, nuestro Sol en el tiempo de los egipcios antiguos, no había traído a la Tierra una manifestación tan elevada de Su noble Luz como aconteció con la encarnación de Jesús. Esta encarnación preparó una nueva actividad del Sonido o Palabra de Dios en el centro de la Tierra, en el laboratorio del 3er Logos (del Espíritu Santo). De acuerdo con esa nueva actividad, de forma diferente a lo que era habitual en el sistema egipcio de Misterios más primitivo, así como en el sistema israelita, no era necesario, por ejemplo, eludir el bazo para desarrollar los circuitos kundalínicos. A partir de la Era de Piscis, ese órgano pudo ser preparado para ser el portal de las fuerzas solares de Cristo. La Fuerza-Cristo proveniente del Sol trajo consigo, en Su manifestación en la gruta de Belén, el misterioso y sagrado nombre Yeoshuáh – (Jesús), denominado por los cabalistas rosacruces Mantra de la Yesca del Fuego, a través del cual el discípulo puede llevar adelante el desarrollo de la Joya en el Loto, del Átomo Chispa y de las fuerzas plenas de la Kundalini. Grandes órdenes actuales, a pesar de ser nobles y respetables, desconocen este hecho y ofrecen a sus afiliados el sistema egipcio de Iniciación más antiguo, ya sobrepasado y peligroso para la Era de Acuario.
Libro de Contacto 3
16
CAPITULO 3
EL CONCEPTO ZOROÁSTRICO DEL SENDERO INICIÁTICO ADOPTADO POR LOS JESENIOS ACTUALES
Los Jesenios clasifican los caminos que la humanidad terrestre recorre en su odisea de errante de la luz, como Senda de la Luz y Senda de la Tinieblas.
Ciertamente, los esenios, al final de la era de Aries, ya afirmaban que la Tierra se
encuentra regida por dos espíritus, el del Bien y el del Mal, y que cada uno traza un camino propio para la humanidad.
El espíritu del mal tiene como príncipe a Lucifer y sus Ángeles luciféricos, los que
generaron, en el lejanísimo pasado del nacimiento y primeros pasos de nuestro sistema solar, lo que algunos denominan la rebelión de los ángeles. El error luciférico fue resultado de la tentativa de una cierta ola de vida angélica de ejecutar, junto a la Creación, algunas actividades que no estaban previstas o idealizadas en la Mente divina Universal, en el Plan Creador de Dios.
Como resultado de ello nuestro vasto mundo que era, antes del error luciferino, un reino enteramente regido por las fuerzas del Bien Supremo, se mezcló con el Mal. Y el hombre surgió en el escenario de la Creación como una joven ola de vida angélica que descendió a la Tierra en el momento en que los Ángeles luciféricos eran castigados por el error cometido.
El error luciferino llevó a la manifestación aquello que en los Contactos anteriores
hemos denominado mundo impío y tenebroso. El hombre paradisiaco, el primer Adán, debía apartarse de ese mundo y de sus tortuosos y tenebrosos caminos.
Más tarde el hombre, que se encontraba en un escalón inicial de la perfección divina,
cometió el mismo error que las jerarquías luciféricas cometieron, y nuestro planeta, que era un paraíso, fue apartado de la Luz junto con Adán y su descendencia. A partir de entonces comenzó la saga de la humanidad terrestre en la que debía optar entre recorrer dos caminos: o el camino del retorno a su estado primordial, al estado luminoso y paradisiaco, o el de permanecer en las oscuras veredas del error.
Dentro del mundo exclusivamente judío quienes primero anunciaron que la Tierra está
regida por dos espíritus, uno de la Luz y del Bien, y otro de las tinieblas y del mal, fueron los esenios. Ellos se apoyaron en elementos doctrinarios revelados por los profetas de manera muy incipiente y escatológica2, tal como podemos observar en el Salmo 18.
El Salmo 18, cuyo autor es el rey profeta David, muestra al hombre terrestre habitando
las fronteras oscuras e infernales de la muerte, encadenado a la impiedad, unido al terrible abismo del mal, y que, sintiéndose cerca de perecer y caer en un foso profundo y fatal, grita con las fuerzas vivas de su corazón, consiguiendo, de esta forma, ser escuchado por Dios y por las Jerarquías Angélicas que vuelan en su auxilio.
2 Escatología: la ciencia que trata de los acontecimientos profetizados y que deberán ocurrir en el futuro.
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 17
Quien socorrió al rey David en su afligida súplica fue la omnipotente y tremendamente
misteriosa Voz de Jehovah – que rodeó la Tierra con su fuego consumidor, con Sus relampagueantes sonidos y con alas de Querubines. Esa voz abrió una hendidura en los fundamentos del planeta y descendió al fondo del abismo, tomando el alma del profeta, rescatándola del camino de las tinieblas y colocándola en el Camino de la Luz.
Tenemos así en este salmo dos arcanos que hemos abordado en los Contactos 1 y 2. El
arcano de la Voz Mántrica del Corazón humano, es decir, del Átomo Pneumático cardiaco, y el arcano de la Palabra o Poder acústico de Dios. En el Contacto 1, dijimos que el discípulo de los Misterios Egipcios tenía que manifestar el don de Maa Keru, la Voz Interior mágica, a través de la cual él atraía hacia sí los poderes celestes divinos, los dones y virtudes del mundo del Bien absoluto. En ese mismo Contacto dijimos también que la Palabra pronunciada como Maa Keru se convertía en Keperu, es decir, se convertía en círculos giratorios luminosos y sonoros (lo que la Cábala denomina Sephirah, el singular de Shephiroth). David al invocar el auxilio celeste con voz maa keru, atrajo la poderosa Voz girante de Dios. Ella llega hasta él como un “candil iluminador que disipa las tinieblas” (Salmo 18:28), de tal forma que el rey canta en alabanza: “Con el benigno el Señor se presenta bueno, con el hombre sincero se presenta con sinceridad. El Camino de Dios es perfecto y Su Palabra es un escudo fabricado en el fuego”. (Salmo 18: 25 y 30).
El salmista testimonia con poesía y musicalidad, con juegos cabalísticos de palabras
hebreas, el poder acústico que el discípulo posee en el corazón expresando cómo ese poder puede sacarlo del sendero del mal y ligarlo a la potente e incomparablemente poderosa Palabra ígnea de Dios. Esa Voz divina lo coloca en “un lugar espacioso, librándolo de la calamidad y de sus terribles enemigos” (Salmo 18: 17 y 19). En el Salmo 29 David continúa relatando las virtudes y características de la Voz de Jehovah – . Allí él revela un curioso efecto de la Voz de Dios: “ella hace el desierto de Cadez vibrar y separa con destreza las llamas del Fuego cósmico”. (Salmo 29: 7 y 8). Esto significa que por medio del Maa Keru de Dios el gran Fuego cósmico astral, en el que surgen las corrientes de éteres eléctricos, es tocado y obligado a manifestar toda la plenitud de las virtudes mágicas latentes en él.
El Maa Keru del discípulo debidamente preparado y purificado puede obligar al
Átomo Chispa de su corazón a liberar sus corrientes astrales e ígneas de poderes divinos. La Voz del Hombre y la Voz de Dios pueden unirse a través del acto mágico adecuado, tal como está descrito en los dos salmos que hemos mencionado, y producir una decisiva desconexión del discípulo con los caminos negros e impíos del mal, para conducirlo hacia los Caminos de la Luz y del Bien.
En los documentos esenios del Mar Muerto podemos comprobar hasta qué punto esta
doctrina del salmista se encuentra desarrollada y perfeccionada. Pero, mucho antes que los esenios quienes enseñaron esa sublime doctrina fueron los magos Persas, los seguidores de Zoroastro. Ellos daban a Dios el nombre de Ahura Mazda, el Todo Luminoso, y enseñaban a sus alumnos que del otro lado del mundo creado por Dios habitaba Arimán, el terrible príncipe de las tinieblas que comandaba un verdadero ejército de espíritus demoniacos e impíos. Por muy primitiva que esta idea pueda parecer, ella guarda, sin embargo, un secreto que, mucho más tarde, 1000 años después de la manifestación de Zoroastro (calculada alrededor de 700 a.C.), fue acogido, en el siglo III de la era cristiana, por el persa Mani. Las ideas maniqueas perduraron hasta el siglo XIV de la era cristiana, y tuvieron como últimos representantes a los Cátaros del sur de Francia.
Libro de Contacto 3
18
Los maniqueos enseñaban que ante el hombre se extienden dos caminos: el Camino de
la Luz y el de las tinieblas. Cuando un hombre decide recorrer los caminos de las tinieblas, pierde casi por completo la conexión (astral, energética, mágica o magnética) con el mundo luminoso de Dios. Como consecuencia, su corazón se sumerge en una materialidad muy profunda, de tal manera que la Joya en el Loto se duerme durante incontables siglos, sin poder siquiera mostrar la menor vibración. Citando la Biblia, los maniqueos decían que ese hombre endurecía su corazón.
En el caso contrario, cuando el hombre toma la decisión de seguir el camino de la Luz,
cada día que pasa él se desliga progresivamente de las oscuras veredas del mal. Su corazón se expande, se despeja poco a poco dejando al Átomo Pneumático despertar y desarrollar sus actividades astrales y mágicas. Y finalmente, él abre enteramente su flor divina, dejando surgir el Mantra de la Yesca del Fuego, el mantra Jesús – , el cual representa la Voz de Dios en el interior del ser del hombre.
Por detrás de ese nombre está escrito también, en el corazón humano, el nombre Adán
– , el nombre ígneo que Dios sopló en la nariz del primer hombre, y que los rosacruces antiguos denominaban “la Palabra Perdida”.
Esa doctrina de los dos caminos que aquí hemos introducido de una manera aún muy
superficial, cuyas puertas están en el corazón humano, en la silenciosa Voz interior que allí habita, es extraordinariamente bella y pertenece únicamente al tesoro de las Cinco Tradiciones Antiguas. No es extraño entonces que amigos que son antiguos estudiantes de otras órdenes nos escriban diciendo que nunca oyeron hablar de tales doctrinas.
Eso nos entristece ya que nos gustaría que la Verdad encontrará muchas voces amigas,
muchas corrientes de escuelas y pudiera hacerse oír de forma clara y fuerte, de manera que todos los hombres pneumáticos, cuyos corazones se convirtieron en jardines en flor y se perfumaron con los pétalos abiertos del Átomo Chispa cardiaco, puedan escucharla con sus oídos de akoustikoi y asimilarla de forma positiva, tomando una fuerte y definitiva decisión de adherir de forma mística a la corriente de los peregrinos del camino de la Luz.
Fue así que con gran alegría los jesenios actuales aceptaron retornar a la herencia
doctrinaria de los antiguos magos persas, de los maniqueos y Cátaros. También la de la Cábala, que aunque en la corriente representada por los rabinos judíos no acepta el dualismo expresado en la doctrina de los dos caminos y de los dos espíritus gobernadores de la Tierra y de los mundos decaídos y caotizados, en su vertiente esenia se abre enteramente a dicha doctrina dualista sin restricción alguna.
Por lo tanto, nuestra enseñanza está estructurada por el dualismo maniqueo y esenio,
por el dualismo de los magos persas. Esto constituye para nosotros un factor que indica la fidelidad de nuestras instrucciones de Misterios y nos convierte en la única Escuela manifestada en Occidente que se liga a la corriente quíntuple de las Tradiciones antiguas. Hay otras escuelas que, siguiéndonos más o menos de cerca, introducen elementos similares, y en ese punto, no hacen otra cosa que juntarse a nuestros esfuerzos, lo cual apreciamos mucho. Sin embargo, acaban o bien negando la tradición semita cabalística o negando la instrucción persa de la Magia antigua. Enseñan, por ejemplo, a sus alumnos que el Mantra Yoga es una ciencia muy peligrosa, impropia para la nueva era. Debemos considerar que cualquier doctrina esotérica de Misterios que caiga en manos inconsecuentes de irresponsables, puede
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 19
convertirse en un instrumento peligroso de destrucción, cuando sólo debería ser un tranquilo medio de impulsar el crecimiento y desarrollo espiritual. Los mantras pueden convertirse así en un arma fatal en las manos de hombres poco pneumáticos, dotados de segundas intenciones, de corazones pérfidos. Pero aquel hombre que pasa por las pruebas de los Misterios, que consigue llegar hasta los grados avanzados del discipulado jesenio, no tiene nada que temer, ya que el Grial con sus aspectos terapéuticos siempre estará ante él. Ese tipo de alumno no tiene carencia de ninguna instrucción, ni tiene que digerir lecciones de hierofantes ya fallecidos y que no pueden traer, para la Era de Acuario, las doctrinas gnósticas antiguas. Nuestro mebaker está vivo y en constante contacto con sus discípulos directos, de forma que ninguna duda que surja durante el camino discipular quedará sin esclarecimiento ni será respondida a medias por discípulos sin experiencia y sin ninguna Iniciación legítima.
Los portales de nuestra Escuela se abren ampliamente para que todas las almas
pneumáticas, las únicas capaces de seguir el Sendero de la Luz, se adentren en el santuario sagrado con la finalidad de ser preparadas y guiadas para iniciar la magnífica y noble salida de los senderos de la muerte, las tinieblas y el mal.
Libro de Contacto 3
20
CAPITULO 4
LAS EXIGENCIAS DE LA SENDA DEL BIEN
La Comunidad Jesenia precisó adaptar de manera práctica su instrucción discipular a las condiciones de la vida moderna y acuariana de los pueblos de la Tierra. Ella no necesitó inventar sus medios modernos y acuarianos de Iniciación pues todas las providencias que debían ser tomadas ya estaban escatológicamente anunciadas en las diversas Escrituras Sagradas de la Quíntuple Tradición Antigua.
El sistema de Távolas, por ejemplo, fue ampliamente utilizado por los antiguos reyes
druidas de la Galia y de Bretaña. Sus ejércitos formaban, al mismo tiempo, una fuerza militar secular y una Comunidad de Misterios. En sus campañas y guerras, ellas obedecían a la formación de doce grupos, siempre que esto fuera posible, manteniendo así, la unión mística necesaria para llevar a cabo encuentros y reuniones rituales.
Los Caballeros de la Orden Templaria también utilizaron la misma formación, siempre
que ella fuera útil y perfecta como técnica de defensa. Pero su verdadera intención era mantenerse en formación de Távolas. De esta manera formaban una caballería celeste y mística, constantemente dirigida hacia la lucha contra las fuerzas del mal, de las tinieblas y de la impiedad. El código de honor de los caballeros templarios era verdaderamente una regla cristiana gnóstica de desarrollo discipular.
Y Mani, mirando hacia el pasado de la gran Tradición Persa, Semita y Egipcia, adoptó
la formación de las Távolas en los grados más elevados de su comunidad. Sin embargo, todos esos grandes hombres espirituales establecieron duras reglas de
admisión en sus órdenes. En las condiciones de la actual vida moderna, sería imposible adoptar tales reglas, puesto que ellas son esencialmente pisceanas y arianas.
Ante esta situación, la Comunidad adoptó igualmente medidas eficientes para una
verdadera Iniciación, exigiendo sólo aquello que denominamos “condición mística décupla”, adoptada por muchas Escuelas de Misterios Orientales, así como por los antiguos rosacruces de Occidente. Estas reglas pueden ser encontradas en la más remota antigüedad, en la corriente de la Sabiduría Oculta de todos los tiempos así como de la actualidad, preservando en ambos casos sus características esotéricas y su eficiencia mística.
La primera condición que el candidato a los Misterios Jesenios debe trabajar en la
Comunidad es la Entrega Mental. Dicha condición es estudiada durante los siete grados del Compañero del Secreto. Para resumirla, ella se refiere a la transmutación que el discípulo hace, de manera gradual y consciente, de sus opiniones sobre el conocimiento esotérico. Con tal entrega, él abre sus oídos mentales para poder oír con comprensión las instrucciones de la Doctrina Universal. En el budismo, esta condición es denominada “punto de vista correcto”. El discípulo transmuta su mundo mental, con gran confianza, para la Luz de un nuevo entendimiento y de esa forma, se dispone a asimilar los conceptos y arcanos de la Sabiduría Oculta y Clásica.
La segunda condición es la Meditación. El discípulo orienta su meditación hacia los
grandes temas de la Sabiduría clásica, abandonando cualquier otro tema. Esa meditación no
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 21
utiliza las técnicas yóguicas comunes al antiguo brahmanismo hindú, o al budismo exotérico, o aún a las que se practican en ciertas órdenes esotéricas occidentales. En la Cábala esta meditación consiste básicamente en el cambio de comportamiento mental reflexivo, pudiendo ser indicada como un método para recordar las enseñanzas entregadas en los libros o reveladas oralmente en las Távolas, procurando asimilarlas tal y como son, evitando mancharlas con opiniones personales (la primera condición).
En cuanto a la primera y segunda condición, la Comunidad Jesenia parte del principio
que los alumnos que se unen a ella, poseen una naturaleza cardiaca pneumática, es decir, poseen la Voz cardiaca activa, aunque tan sólo sea en un grado mínimo, y por ello pueden escuchar a su Maestro interior. Todo lo que es enseñado en nuestra Orden debe ser sometido a esa Voz cardiaca, y es por la confianza en ella que el discípulo adherirá completamente a nuestras enseñanzas.
La tercera condición es la de lo hablado y lo escrito. El discípulo sólo divulgará
revelará o transmitirá las enseñanzas recibidas con la orden directa de los Maestros del Candor, y estos sólo darán esta orden, después de someter el pedido al Mebaker Jesenio. El discípulo tiene que preservar con total seguridad el Secreto. Cuando reciba la autorización de poder hablar, enseñar o comentar con otra persona sobre su sublime orden, deberá estar sostenido en tres pilares a los que denominamos trípode místico: con quién hablaré sobre las enseñanzas jesenias, por qué hablaré y de qué hablaré.
Esto es válido también para lo escrito. El alumno podrá volverse un divulgador de la
existencia de nuestra Orden, incluso permitiendo a otros, a quienes considere aptos para recibir los conocimientos esotéricos, leer los tres libros de Contacto, pero jamás deberá hacer copias de ese material literario, ni dejar que otros lo hagan. En cuanto a los libros de los grados discipulares, no deberá ni siquiera mostrarlos, extraer frases o comentarlos a otros.
La cuarta condición se refiere a la guarda del corazón. El discípulo debe mantener
todo a su alrededor, todas las decisiones de su día a día, así como todas las decisiones referentes a su caminar en el Sendero Iniciático, la enseñanza esotérica recibida, en la esfera de la Voz de la consciencia de su corazón. Para eso, él mantendrá su mundo sentimental lo más puro posible, moderando todo tipo de tensión cardiaca en la medida en que ello le sea posible, o buscando en el Grial la tranquilidad terapéutica adecuada, cuando sienta que haya fracasado en esa condición. En resumen, él debe entregar al Grial su corazón y toda su vida sentimental para que la Luz universal derramada en él lo purifique y haga crecer en él la Joya en el Loto. Esta condición sólo le será solicitada cuando el discípulo esté listo para iniciarse en el aspecto del Hijo del Secreto.
La quinta condición es la Silsilah. Esta palabra árabe es utilizada en las corrientes
secretas e iniciáticas del sufismo, así como en el antiguo sistema zoroástrico de admisión discipular. Dicha palabra significa “cadena de maestros” o “preservación del lazo con el maestro” y es, en el sistema jesenio, una de las adhesiones más importantes del conjunto décuplo. El discípulo se entrega a su maestro, y a su representante, con total amor, confianza y libertad, formando un eslabón más en la corriente de maestros, eslabón que es permanente, indisoluble e inviolable.
Nuestra cadena empieza con nuestro querido maestro e hierofante el señor Jodachay
Bilbakh. La cadena de los sufis se inicia con el Profeta Mahoma. Esto significa que una cadena tiene inicio cuando un Ángel o mensajero divino desciende del reino sideral de la Luz
Libro de Contacto 3
22
y se manifiesta en la Tierra. Antes de Mahoma los sufis no encuentran ningún eslabón en su cadena de maestros, ya que ésta se inicia con el gran Profeta.
Nosotros los jesenios no podemos mencionar, a pedido de nuestro Mebaker, los
eslabones que lo antecedieron. Esos sublimes seres descendidos de la Luz procuran, en algunos casos, mantenerse enteramente anónimos, principalmente cuando nacen unidos a la cadena cabalística. Así, para que se pueda tener permiso de abrir Távolas y divulgar la enseñanza jesenia, el discípulo debe absorber la Silsilah, encontrar en ella su autoridad, buscar en ella la doctrina mística, procurar ser reconocido por ella. El Mebaker de Brasil está autorizado a recibir en la cadena occidental, donde quiera que ella se manifieste, eslabones y Távolas. Sólo él puede, en conformidad con lo que le fue permitido por el señor Jodachay Bilbakh, reconocer y afiliar eslabones, nadie más. Cuando un Arquimaestro (del Quinto Aspecto) desea afiliar un grupo duodécuplo y, con ello ofrecer a dicho grupo los bienes espirituales de la Iniciación Jesenia, tiene que recurrir al Mebaker de Brasil y reafirmar ante él la Silsilah de cada miembro de la nueva Távola. Sin esto, una Távola sería como un edificio construido sin cimientos y sin el primer piso.
La sexta condición es el Servicio Devocional. Esta es una de las más importantes
adhesiones que el discípulo puede hacer cuando alcance el Tercer Aspecto, el aspecto del Hijo del Secreto. Si en la quinta condición el discípulo procura amar sus maestros espirituales, en la sexta él extiende ese amor a la propia Comunidad; como un hijo, él ama a su padre y a sus hermanos, los defiende, se dedica a practicar la enseñanza que el padre reveló y, sobre todo, a cuidar celosamente de todo lo que es necesario para que él pueda continuar con seguridad su tarea de padre.
La Comunidad Jesenia está compuesta por hombres espirituales, es decir, personas
que, según sus corazones pneumáticos, pueden practicar un servicio espiritual consciente y amoroso al servicio de la humanidad y del Bien. Cada miembro que avanza en su discipulado sabe que recibe en sus manos, no sólo su destino y su propia naturaleza, sino también la entera naturaleza planetaria, cósmica y estelar. Se espera entonces de él, por tanto, una entrega devocional, voluntaria, elevada e incondicional a las prácticas, enseñanzas y sostenimiento de su sublime Orden.
La séptima condición es Ithar, palabra árabe que significa abnegación o
desprendimiento. Ella es exigida solamente a los Arquimaestros o Maestros Arquipontifices, como condición básica de reconocimiento del Quinto Aspecto. El Arquimaestro posee el ser de la inviolable tranquilidad y del desprendimiento, no quiere nada para sí mismo, pero su mayor deseo, su mayor dedicación, es la mantener unida, tranquila y sin perturbación a la Comunidad Jesenia, a las Távolas y sus bienes, tanto materiales como espirituales. En él no habrá instigación alguna, ningún apego, ninguna vinculación con cualquier tipo de disputa de poder, con cualquier inquietud perturbadora, ninguna desarmonía. Él se desprende de todo eso.
La octava condición es Sruti, palabra sánscrita que significa enseñanza recibida
exclusivamente a través de la audición. Cuando una Távola se forma, algo que ocurre normalmente sólo después del décimo séptimo grado (en el Tercer Aspecto), ella tiene derecho a recibir una enseñanza oral que debe someter a oídos preparados mentalmente según las instrucciones del discipulado Akoustikoí. Esa enseñanza jamás debe ser anotada, escrita o transmitida, constituyéndose en un secreto personal que sólo puede ser mencionado, pronunciado o ser tema de conversación durante las reuniones de la Távola. Actualmente, es a
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 23
través del contacto personal o llamada telefónica a Belo Horizonte, donde se encuentra actualmente nuestra sede, que el Mebaker transmite personalmente la enseñanza oral, la que debe ser guardada mentalmente, sin nunca grabarla o anotarla y, en seguida, para luego transmitir las instrucciones y enseñanzas recibidas a los demás hermanos cuando la Távola se reúna. Las dudas y fallas son comprobadas posteriormente de la misma manera. Hay otras Távolas que, con mucho esfuerzo, demostrando condición devocional (la sexta condición), juntan durante un cierto tiempo los recursos financieros necesarios para facilitar una visita del Mebaker, y recibir directamente de él, de voz a oído, la enseñanza oral, lo que es muy importante y necesario según se comprueba al recordar aquella parte de la enseñanza que menciona la importancia de la Voz hierofántica del Mebaker, es decir, del maestro.
La novena condición es A´dakh, palabra hebrea que significa “mantener la unión” o
“mantenerse unido”. Cuando el discípulo se entrega a A´dakh, entonces se dedica devocionalmente a mantener con todas las fuerzas del alma la unidad de la comunidad, a la que los cabalistas llaman sello sobre el corazón. Cada jesenio debe poseer unidad de grupo, sin colocar jamás ningún objetivo de la vida material y cotidiana por encima del deseo de unirse, en reunión, a la Távola. Formar una Távola debe ser, por lo tanto, su mayor anhelo. En un nivel más profundo, la unidad de grupo significa romper definitivamente con cualquier ilusión, comportamiento, o actitud que pueda crear discordia y separación entre los miembros del grupo duodécuplo.
El jesenio debe poseer también un objetivo único, es decir debe mirar hacia una sola
meta, la de la realización de su proceso mágico de Iniciación. Él debe incluir también como objetivo único la ayuda y el auxilio devocional que él puede dar proporcionar a su Orden así como para sus hermanos en el Camino, al servicio de la realización del proceso iniciático. Todos los demás objetivos deben ser abandonados por la Távola o colocados en un plano inferior, en el caso de que tengan algún fundamento espiritual. Otro factor importante de la A´dakh es la armonía y tranquilidad necesaria para la realización de las actividades espirituales dentro de las Távolas. Cualquier actitud que viole la tranquilidad y la armonía, que agreda la unidad de grupo, de la comunidad, o de toda la Comunidad, debe ser eliminada. La ausencia de segundas intenciones también es un factor importante de la A´dakh. Ella garantiza que la única y verdadera intención sea la señalada por la enseñanza de los maestros jesenios, en especial la enseñanza del señor Jodachay Bilbkah.
La décima condición y la última, es la asimilación de la Mussah, palabra hebrea que
significa Doctrina o Enseñanza. Desde el punto de vista jesenio, el conocimiento transmitido a los discípulos es universal y asimilarlo significa adherir a la Enseñanza Iniciática Universal. Según la décima condición, el discípulo, después de comprobar por medio de la Voz de su corazón que la enseñanza recibida es genuinamente la de la Verdad Universal, la de la Sabiduría divina e iniciática, manifiesta entonces con ese mismo corazón una entrega y confianza absoluta a sus métodos y arcanos.
La condición décupla debe ser introducida por el discípulo en su totalidad y plenitud
en el momento en él desee formar una Távola. Sin embargo, ya durante su admisión en el discipulado Akoustikoí, él debe formalizar su deseo de aceptación de la tercera y quinta condiciones. Durante su discipulado Akoustikoí el discípulo puede presentar la primera y la segunda, en el punto de los estudios que juzgue más apropiado. Las demás se refieren a los grados más avanzados, y él esperará hasta entonces para presentarlas de forma libre y consciente.
Libro de Contacto 3
24
Sin la condición mística, el jesenio tendrá dificultades en continuar sus estudios, ya que él no guardará ninguna ligazón con el eslabón de la Comunidad, ningún compromiso, constituyéndose en un riesgo para la Comunidad Jesenia. Sin la Silsilah, por ejemplo, no podremos confiar a nadie la guardia y la divulgación de nuestros tesoros de sabiduría. En este punto, la tercera condición es igualmente indispensable.
Comunidad Jesenia
www.jessenios.com.br 25
CAPITULO 5
LOS TREINTA Y CUATRO GRADOS Y LOS CINCO ASPECTOS DE LA INICIACIÓN JESENIA
A continuación ofreceremos una visión estructural de las etapas o grados así como de los aspectos que constituyen la Iniciación Jesenia. Creemos que una vista previa de esos grados y aspectos facilitará la comprensión del discípulo cada vez que sean mencionados en nuestras lecciones.
Creemos también que es importante que el amigo que lee este tercer contacto tome un
conocimiento previo de todo lo que verá en el futuro, de una forma resumida, para que pueda tomar sus decisiones de forma libre y consciente. Él debe, por tanto, como candidato a las puertas de nuestro primer grado (Akoustikoí), leer y releer los tres contactos, sin dudar pedir, cuando lo considere necesario, las aclaraciones respectivas.
Los gnósticos antiguos afirmaban que la verdadera religión y sabiduría son las del
corazón. Con esto, ellos indicaban la Voz del Corazón, la Voz de la Joya en el Corazón. Es ella la que deberá guiar al discípulo. Es ella la que confirmará en la sangre del discípulo que nuestra enseñanza es una expresión genuina de la Verdad.
Los grados, de los que hemos hablado parcialmente en el Contacto 2 y al comienzo de
este contacto, están distribuidos de la siguiente manera: 1er Aspecto (Compañero del Secreto): 1er Grado: Akoustikoí (Oyente) 2º Grado: Matetekoí (Estudiante Secreto) 3er Grado: Talmidh (Estudiante de Cábala) 4º Grado: Etoimakoí (El Preparado) 5º Grado: Dzetetekoí (Buscador de la Iniciación) 6º Grado: Propilaikoí (Ante los Portales) 7º Grado: Apodokoí (el Aceptado) 2º Aspecto (Hijo del Secreto): 8º Grado: Beny Mitziwah (Hijo del Mandamiento) 9º Grado: Beny Meminyan (Hijo del grupo de Diez) 10º Grado: Beny Esh (Hijo del Fuego) 11º Grado: Bnay Scharrar (Hijo de la Aurora) 12º Grado: Bnay ‘Or (Hijo de la Luz) 13º Grado: Bnay Hatsadokh (Hijo de Tsadok) 14º Grado: Bnay HaKaballáh (Hijo de la Cábala) 3er Aspecto (Hermano del Secreto): 15º Grado: Frater Alquimista 16º Grado: Frater de la Rosa de Oro 17º Grado: Frater de la Sagrada Rosacruz 18º. Grado: Frater de los Tres Sellos 19º Grado: Frater de la Lápida de C.R.C. 20º Grado: Frater Fitoastroterapeuta
Libro de Contacto 3
26
21º Grado: Frater Veritae Medicae 4º Aspecto (Maestro del Secreto): 22º Grado: Guardián del Sabbartez 23º Grado: Guardián del Grial 24º Grado: Guardián del Tesoro de Qumran 25º Grado: Guardián del Tesoro de Nag Hammadi 26º Grado: Maestro del Secreto Real 27º Grado: Pastóforo 28º Grado: Arquimago 5º Aspecto (Arquimaestro): 29º Grado: Maestro Constructor 30º Grado: Maestro de la Piedra Angular 31º Grado: Mehokekh 32º Grado: Sumo Sacerdote 33º Grado: Maestro de las Vestiduras Áureas 34º Grado: Sumo Pontífice o Bnay Mebaker
Estos son los Treinta y cuatro grados discipulares de la Comunidad Jesenia que son estudiados en primer lugar por los candidatos a los Misterios hasta el 17°, después pueden ser adquiridos de forma ritual, cuando se conviertan, a su vez, en títulos discipulares.
Los términos griegos y hebreos que aparecen en los nombres de los grados serán
estudiados en las lecciones de los grados de forma más profunda, sin embargo, la totalidad de sus significados sólo podrán ser conocidos cuando se alcance los grados a que ellos se refieren.
Esperamos que el amigo lleve en su corazón la verdadera necesidad y la cualidad
propias del hombre pneumático, del verdadero buscador de la Verdad, y que, impregnado por su espíritu cardiaco se adentre en la corriente de los discípulos jesenios.
Desde lo alto de la Luz, del centro solar de Dios, delante de los doce portales
siderales, Cristo y su Jerarquía Angélica aguardan la llegada del peregrino de los Misterios.
¡Amén!