UNIVERSIDAD PEDAGOGICA NACIONAL

FACULTAD DE HUMANIDADES

LIC. CIENCIAS SOCIALES

HISTORIA Y EPISTEMOLOGIA DE LA PEDAGOGIA

CRISTIAN ANDRES ALVAREZ PARRA – 2015160001

Cambio social y educación indignada (sobre pedagogía de la indignación – Paulo Freire)

“La tarea del educador de ninguna manera puede ser autoritaria sino que debe apuntar a crear en el aula la posibilidad y cambio de la transformación de la sociedad. “Por eso, el educador progresista, serio y capaz, no sólo debe enseñar muy bien su disciplina, sino que debe desafiar al educando a pensar críticamente la realidad social, política e histórica en la que vive” (Freire, 54).

Quise abrir este escrito con la cita anterior para recalcar la figura del educador y de lo importante que es para él generar condiciones aptas para la posibilidad, en las clases la discusión se sitúa continuamente en este y otros aspectos como el papel del maestro, el estudiante, los modelos pedagógicos, etc. pero sobre todo en la educación. Freire y el contexto brasileño en el cual estaba arrojado todo su pensamiento dejo gran luz y reflexión en el hombre como actor o participe de cambio de su condición y realidad, lo cual coincide con una característica importante de la educación que hemos abordado: la educación como proyecto político, si no se piensa en un proyecto de ciudadano o de mundo para el cambio en cuanto a deberes y derechos, no sería un acto fundamentalmente político. Cabe decir que el educando, el proyecto de ciudadano o el hombre para Freire, solo es capaz de hacer el cambio en cuanto sea autónomo por medio de su libertad, pero libertad no como libertinaje, sino libertad con límites y autoridad como dice Freire:

“Cuanto más y más auténticamente hayamos vivido la tensión dialéctica entre las relaciones entre autoridad y libertad, mejor nos habremos capacitado para superar razonablemente una crisis de difícil solución para quien se entrega a las exageraciones licenciosas o para quienes se someten a los rigores de la autoridad despótica” (Freire ,42).

Freire refiere al movimiento en contra de la reforma agraria en Brasil, el movimiento de Los sin tierra, para mostrar que todo aquel que quiera mejores condiciones de vida, es necesaria la indignación y la lucha a partir de las posibilidades de interpretar el mundo como posibilidad. Es así como la escuela es el lugar en donde el sujeto aprende a intervenir en el mundo según sus elecciones, decisiones y voluntad, disfrutar de la libertad, consolidar su autonomía y reflexionar críticamente su realidad. En pocas palabras según Freire, decidir sobre su propia vida, (muy acorde al pensamiento que vimos en Pestalozzi) tarea fundamental de la educación es preparar para la vida, un mundo más justo y democrático, sin personas oprimidas, educación como dispositivo de formación ciudadana. En La segunda carta, "Del derecho y del deber de cambiar el mundo". Freire

dice que “La transformación del mundo necesita tanto del sueño como la indispensable autenticidad, de este depende de la lealtad de quien sueña las condiciones históricas, materiales, según el desarrollo tecnológico y científico del contexto del soñador”.

Desde el principio de nuestra clase se ha compartido y reflexionado la definición de educación del profesor Aponte: introducir a las nuevas generaciones en un acervo histórico y cultural. Aquí Freire indica la preocupación por la comprensión de la juventud y su inclusión en un modelo de sociedad a través de la relación libertad y autonomía, educación para formar personas, humanizar no tiene sentido cuando la juventud se mantiene matando gente, como en el caso del asesinato del indio Galdino por parte de unos adolescentes, aquí otra característica para la educación: garantizar los principios éticos más fundamentales para proteger la vida y también aplicaría a la preservación de la memoria histórica y cultural, para hacer lucha contra toda violencia no solamente física sino simbólica como el racismo y la indignación como acto de cambio en la educación, indignación para mostrar y combatir las contradicciones de nuestra sociedad.

En el apartado de otros textos hay un conflicto con las revoluciones tecnológicas ya que estas dificultan la transmisión de experiencias y valores en los jóvenes hoy en día, Freire interviene aquí con la alfabetización para que las personas se apropien de su palabra para la lectura del mundo, para reflexionar más que los medios de comunicación lo que se transmite por medio de ellos, recuerdo que en alguna clase se debatió la cuestión de la tecnología en la educación y la idea del no acceso o acceso poco profundo del conocimiento en estos medios, aquí Freire nos soluciona un poco el panorama:

“Yo confieso que no puedo comprender como un educador puede rechazar la televisión, rechazar el video, rechazar la computación, rechazar la radio (...). Para este trabajo en la televisión es necesario saber, sin embargo, que no hay televisión neutra. Un medio de comunicación como este no puede dejar de ser inminentemente político e ideológico (...) Además el dueño de la televisión tiene una opción política e ideológica, y no va a trabajar contra su opción política” (Freire, pág. 82)