brecht, galileo y el género didáctico

Upload: rodrigo-e-torres

Post on 17-Jul-2015

526 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Universidad Autnoma de AguascalientesLicenciatura en Artes Escnicas: Actuacin Teora Dramtica II Profesora: Sandra Rzales Alumno: Rodrigo E. Torres Orozco N.

Galileo Galilei, Betolt Brecht, y el Gnero didctico.Nuestra poca ha producido muchos espritus innovadores cuyos inventos podran beneficiar considerablemente nuestras vidas. Gracias a la fuerza de las mquinas podemos cruzar los mares y [] liberar a la humanidad del trabajo muscular que produce fatiga. Hemos aprendido a volar y gracias a las ondas electromagnticas podemos difundir informacin y noticias por todo el mundo. Pero, como no se ha organizado en absoluto la produccin y distribucin de las mercancas, el individuo tiene que seguir viviendo con el miedo de verse excluido del proceso econmico. Albert Einstein.

IntroduccinSobre el contexto socio histrico de Bertolt Brecht, enfatizando los aconteceres de su vida durante el periodo de escritura y mltiples correcciones de la obra a estudiar, y sobre los turbulentos cambios cientficos y religiosos que le toc vivir a Galileo Galilei:

El siguiente trabajo es un anlisis de la obra Galileo Galilei o La vida de Galileo del dramaturgo alemn, Bertolt Brecht. Para adentrarnos en materia, comenzaremos este texto situndolo en su doble contexto: El del autor y su primer pblico y el de la obra y sus personajes. Nos referiremos al primero como contexto real y al segundo como contexto de la ficcin. Contexto Real: Tomaremos como contexto real el periodo de gestacin, nacimiento y madurez de la obra hasta el estreno de su tercera versin por el Berliner Ensamble casi al final de la vida del dramaturgo. Como punto de partida nos situamos en la Dinamarca de 1938, ao en que Brecht comienza a escribir la primera versin de La vida de Galileo (durante su exilio de Alemania por el gobierno nacional socialista, del que hablaremos despus) en su idioma natal y que concluye en un periodo de tres meses. Sin embargo al verla sobre la escena sin mucho xito en Finlandia en el ao de 1940, se siente defraudado con la interpretacin sobre la escena de su protagonista, del cual deca: Es demasiado etreo. La idea que se tiene corrientemente de lo que ha de ser un enamorado de las estrellas. Lo que l quera era un Galileo firme y carnal Gordo, socrticamente feo, bien asentado sobre susIlustracin 1 Charles Laugthon interpretando a Galileo en su 2a versin

piernas. En una palabra: un fsico y eso fue lo que encontr en Charles Laugthon, un actor estadounidense de renombre en teatro y

cine que ya antes haba experimentado el teatro de Brecht con la obra de Schwej en la segunda guerra mundial y sediento de ese teatro crtico y contestatario le pidi a Bertolt presentar su Vida de Galileo en Estados Unidos.

En diciembre de 1944 se pusieron a trabajar juntos en esa nueva versin, y fue un trabajo titnico lleno de contratiempos, ya que Charles no hablaba alemn y Bertolt hablaba un muy mediocre ingls. Pero las mayores dificultades estuvieron en hacer que el cambio de lengua no afectara dos de las principales caractersticas del teatro brechtiano: el elemento irreverencia ese humor incisivo e irrespetuoso contra las ideas burguesas y religiosas imperantes en su tiempo y lo que l llamaba dialctica suspendida descrita por el filosofo marxista Fernndez Buey como su manera de jugar lingsticamente con las contradicciones, su formar de volver constantemente del revs el calcetn de la historia, que en el caso especfico de Galileo Galilei resulta un elemento imperante en la dramaturgia. La resolucin de estos problemas llev al autor a reescribir casi ntegramente varias de las escenas originales y agregar otras nuevas, como en la que Ludovico y Galileo discuten sobre las consecuencias de estudiar o ignorar los descubrimientos recientes sobre las manchas solares. Sin embargo el verdadero valor que gana esta versin se da gracias a las discusiones polticas que tiene Bertolt, un hombre que transpira poltica, con Charles, un ignorante del asunto. Y es que uno de los amigos literatos de nuestro dramaturgo a tratar le ha hecho entender al autor que su primer Galileo es una biografa muy fiel pero sin ningn transfundo, la segunda versin se enfocara en ser una tesis sobre los dilemas ticos de la ciencia ante la sociedad y la manipulacin poltica. Sin embargo las escenas finales de la obra dan un giro completo con una noticia que trastorn al mundo: Hiroshima y Nagasaki haban sido destrozadas por la bomba atmica. La ciencia que Galileo defenda haba mostrado su rostro ms ruin ante la humanidad, su servilismo hacia los poderosos insaciables. Brecht sentenci el acto afirmando Este sper-pedo ha apagado el repique de las campanas de la victoria pues se haba ganado la guerra, pero no la paz. Laugthon, siempre ms terrenal e inocente vea este dato histrico como un problema ante la futura audiencia, pues quin querr ir a un teatro a ver la historia de el padre de la misma ciencia que destruyo una nacin. Este cambio en el rumbo de la historia cambiar el tono de la obra de Brecht del melodrama a la tragedia, pues la realidad ya ha quebrantado todos los valores que el protagonista defenda, y el hroe trgico muerte si sus valores se alteran.

Para este entonces la figura de Laugthon y Galileo ya se haban vuelto un tanto difusas en la mente de Brecht, y en ambos vera una hipocresa que l llamaba luciferina en sus acciones, y esto se ve reflejado en las escenas finales del texto donde Galileo prefiere la comodidad ante la verdad. Al final podemos agradecer que estos detalles enriquecieron al personaje ms no doblegaron la amistad. Como dato curioso podemos mencionar que en el preestreno de la obra, delante de muchos fsicos y literatos, Bertolt agreg un prologo a su obra en el que haca evidente el smil manejado entre la comprobacin de la teora heliocntrica y el descubrimiento de la bomba atmica. Sin embargo este prologo fue suprimido en las dems versiones. Por ltimo la tercera versin que en realidad fue un plan B, ante la imposibilidad de escribir una obra sobre la vida de Einstein, muestra la decepcin que sinti al ver la ambigedad moral del cientfico a quien ms respetaba. Hay que tener en cuenta que esta ltima versin la escribe al regreso a su pas natal despus del exilo y con el apoyo monetario del gobierno alemn. Contexto de la Ficcin Nuestro contexto dentro de la obra abarca un periodo de tiempo de casi medio siglo. Comienza aproximadamente en 1609 cuando Galileo charla con su discpulo Andrea sobre la validez del sistema de Coprnico y concluye en 1637, cuando el libro de Galilei "Discorsi" atraviesa la frontera italiana. Es importante mencionar que el siglo XVII es considerado por muchos historiadores como el siglo de la fsica, pues fue en este periodo cuando las aportaciones de Galileo Galilei, Ren Descartes y Sir Isaac Newton dieron origen a la fsica clsica, modificando el pensamiento de su sociedad, que dej las explicaciones mticas, sustituyndolas por las cientficas. Comenz el auge de las maquinas simples que aminoraron la carga fsica a los trabajadores, e incluso la comprensin de el hombre y su entorno fue planteada como un mecanismo de estudio. Sin embargo, muchas de estas ideas atentaban contra el pensamiento dogmtico difundido por el Vaticano, que segua siendo el centro del poder del mundo oxidental, o ms concretamente de Europa.

Durante este periodo el papado fue ocupado por Paulo V (1605 - 1621), Gregorio XV (1621-1623) y Urbano VIII (1623- 1644). Paulo V era abogado de carrera, impuso la moda de barba de candado entre los papas y tena fama de ser extremadamente reflexivo. Gener conflictos con Venecia, al enfrentarse a sus leyes anticlericales y en la Inglaterra (principalmente protestante) al prohibir firmar a los catlicos un acuerdo de fidelidad hacia el rey Jacobo I, que ya haba sufrido un atentado por parte de un fantico religioso. En 1616 se entrevist con Galileo Galilei en un intento de censurar la difusin de su comprobacin de la teora heliocntrica, antes propuesta por Coprnico. Gregorio X estudi humanidades y filosofa con los jesuitas y leyes en la real academia de Babilonia. Fue el ltimo pontfice electo por aclamacin, pues el mismo decreta que la eleccin de sus sucesores se diera mediante el voto libre y secreto. Apoyo econmicamente a Fernado II de Habsburgo contra los protestantes y a Segismundo III de Polonia contra los turcos. Todos sus familiares ocuparon altos cargos religiosos y escribi el ltimo tratado sobre caza de brujas. Urbano VIII desde pequeo se vio sumergido en los oscuros mundos de la Santa Iglesia. En su papado reafirmo la prohibicin de la esclavitud en indigenas, prohibi pintar aureolas en personas que no hayan sido canonizadas por la iglesia, y extendi los territorios del vaticano ms que ningn otro papa, supuestamente sin uso de violencia. A los pocos das de su papado ya toda su familia tena cargos de poder en el Vaticano. Tambin sentenci a guerra a varios pueblos europeos con el fin de engrosar su riqueza. Se proclam protector de las ciencias y el arte, de hecho fue buen amigo de Galileo, incluso antes de subir al trono pontificio le escribi un poema titulado Adulatio Perniciosa. Galileo le retribuy este acto con la dedicacin de su libro Il Saggiatore. En 1630 se rompe la amistad, pues Urbano VIII fue convencido por sus colegas de que la obra magna de Galileo, Dialogo Sopra I Due Massimi Sistemi del Mondo, pretenda ridiculizarlo mediante el personaje de Simplicio. Esto le hizo aborrecer el sistema copernicano y el 23 de septiembre de 1632 comienza un juicio en su contra, obligndolo a retractarse de su tesis el 22 de junio de 1633. Tambin durante el marco temporal de la obra se pblica la segunda parte de El Quijote, se desat la guerra de los treinta aos y la guerra franco espaola.

Brecht, Galilei y el gnero didctico.De cmo el seor Bertolt Brecht contribuy al desarrollo del gnero didctico y las repercusiones de sus teoras en el teatro contemporneo, haciendo especial nfasis en su obra Galileo Galilei o La vida de Galileo y los elementos correspondientes a la estructura del genero didctico.

1.- Bertolt Brecht, el destructor: Juez.- Cules son los cargos contra el acusado? Fiscal.- El aqu presente se somete a juicio bajo los cargos destruccin de propiedades pblicas y asesinato. Sus Vctimas: La cuarta pared, los procesos de empata y emotividad del espectador, adems Disculpe, me resulta doloroso decirlo El acusado ha jugado deliberadamente con la vida de la ficcin. Juez.- Cul es el nombre del acusado? Bertolt.- Brecht, Bertolt Brecht, su Seora. Juez.- Y su abogado. Bertolt.- Si me permite me defender solo, Seora. Juez.- Si esa es su voluntad. Cmo se declara el acusado? Bertolt.- Culpable pero inocente. Juez.- No estamos para juegos dialecticos, seor Brecht. Fiscal.- Explquese. Bertolt.- Declaro que yo he destrozado la cuarta pared, matado la empata y emotividad, compaeras tan amadas del seor Espectador, y tambin confieso que he puesto en riesgo la vida de la ficcin, con premeditacin, pero sin alevosa ni ventaja. Fiscal.- Es culpable, su seora. No le veo razn a este juicio. Bertolt.- Sin embargo los asesinatos han sido en defensa propia, la destruccin de la cuarta pared en busca de un bien social mayor y los experimentos con la seorita Ficcin (A pblico.) S que es de difcil comprensin (Regresa.) Fue por su propio bien. Fiscal.- Observ, su Seora, lo ha hecho de nuevo. Bertolt.- Por favor, eso fue un aparte, moliere ya lo haca. Fiscal.- Otro rebelde. Juez.- No ha lugar, su comentario, Fiscal. Justifique ms claramente sus accines, Brecht.

Bertolt.- Antes quisiera aclarar que yo he sido vctima de la empata del pblico, seor. Ella era una enajenadora de mentes, estaba humillando a su hermana la razn, no la dejaba reflexionar y por medio de trapas y chantajes estaba convirtiendo a la respetabilsima emotividad en sentimentalismo barato. Debo afirmar que la ha terminado corrompiendo. Fiscal.- Y cmo, especficamente, esto lo daaba a usted? Bertolt.- Soy Dramaturgo de profesin seora. Mi oficio es parecido al de un sacerdote vud, ya que consististe en dar vida a vocablos inertes, casi muertos. Fiscal.- La palabra esta para servir al humano, y no el humano a la palabra. Bertolt.- No se da cuenta de lo desconsiderada que es su sentencia. (A pblico) Quieren una cancin?! Fiscal.- Seora, mrelo! Eso no es un aparte, es un crimen. Interroga al pblico. Juez.- Djese de cinismos, seor Brecht. Bertolt.- No lo puedo evitar, es parte de mi estilo. Juez.- Si vuelve a cometer un crimen dentro de este recinto, ser encarcelado. Bertolt.- Slo una cancin, Seora Juez.- Qu dice? Bertolt.Las palabras al nacer se sentan orgullosas, conocan su deber de poder nombrar las cosas. Slo ellas conocan Ese mgico conjuro, Que rezaba slo es suyo Lo que al nombrar aprehendan Fiscal.- Haga el favor de callarse. Bertolt.- No. Que no ve que la audiencia comenzaba a emocionarse. Juez.- Descarado! Bertolt.El hombre ao tras ao Las fue desporalizando Les quit el valor de antao. Muy lento las fue matando.

(Dos guardias apresan a Bertolt.) Juez.- Callen esa msica, esto es un juicio! Fiscal.-Para qu seguir, ya ha demostrado sus crmenes en plena corte seora. Juez.- Prefiero estar aqu que aburrido en mi casa. Contine seor Brecht. Pero en prosa y si utiliza msica, por favor que sea incidental. Bertolt.- Las palabras ya haban perdido su elemento vital, si alguien se daba la oportunidad de apreciarlas era dentro de los libros, como literatura, palabras aprisionadas a una hoja. Algunas lo aceptaron, otras no eran tan bellas, ansiaban salir a la vida camuflajeando su ficcin de realidad, yo les di esa oportunidad. Fiscal.- No ha lugar. Juez.- Qu tiene que ver esto con el caso? Bertolt.- Luego lo ver su seora. Fiscal.- He aqu mi primera prueba. Bertolt, reconoce estas armas? Bertolt.- Cmo no las reconocera, son mis eternas compaeras. Fiscal.- Explique su funcionamiento. Bertolt.- Esta es la dialctica suspendida. Creo que aqu todos estamos de acuerdo en que el teatro necesita un espectador pensante. Fiscal.- Que distinga los protagonistas y el mensaje de una obra por supuesto. Bertolt.- Usted si me entiende. Por lo tanto, s le damos toda la informacin requerida lo estamos subestimando. (A pblico) No es as? Juez.- Seor, Brecht, est dentro de una representacin escnica. Hagame el favor de respetar las leyes de esta ficcin. Bertolt.- Es usted maravilloso, seor Juez. Nunca pens que usara tan bien mis armas. Juez.- Qu quiere decir? Bertolt.- Esa es mi favorita, mi obra maestra. Todos los procesos que ustedes llaman criminales fueron para abrirle un espacio en el panorama. Juez.- A qu se refiere? Bertolt.- El elemento distanciador. El pblico no es idiota, cuando va al teatro sabe conscientemente que est viendo una representacin. Entonces por qu esa terquedad de los teatristas en hacerle creer que lo que est mirando es cierto? Fiscal.- Es su derecho. Van a ese recinto sagrado para entrar en el mundo de ficcin, identificarse con el otro en su humanidad, ejercitar sus emociones

Bertolt.- Y su cerebro. Juez.- Su juicio. Bertolt.- Eso es seora. Sin embargo, Cuntos de ellos salen conmovidos hasta las lgrimas pero sin captar el mensaje? Juez.- Fiscal.- Bertolt.- Y no es su culpa, los actores y directores le prestan tanta atencin a la emocin desde que lleg ese tal Stanislavski que la razn se ha ahogado en un mar de lagrimas. Fiscal.- Por fin, metforas. Li-te-ra-tu-ra. Bertolt.- No lo niego, la retorica siempre est presente en una buena obra, pero no es la retorica lo que la hace ser buena. Juez.- Quiere llevar a algn punto concreto sus ideas? Ya ha dejado dos en el aire y no concretiza nada. Bertolt.- Es parte del plan, su seora. En eso consiste mi dialctica suspendida. Nosotros no debemos llegar a una conclusin, sino el pblico. Nosotros slo damos la semilla, ellos la cosechan. Al interrumpir una idea antes de concretizarla estamos haciendo que el espectador participe del dilema, cree sus propias soluciones. Fiscal.- Pero ese no es su trabajo, sino el del dramaturgo. Bertolt.- Por qu no les pregunta si a ellos les gusta participar? Fiscal.- Se sentiran atacados. Bertolt.- Por favor, ustedes trabajan para la justicia. Bien saben que con sonrisas hipcritas y buenos tratos no se llega nunca a la verdad. Juez.- Pero hablbamos del distanciamiento. Bertolt.- Esprame, gey. Vamos a hacer intermedio, se me olvido mi puro afuera. Fiscal.- Qu chingados haces? Ests sobre la escena! Bertolt.- No puedo ser Bertolt Brecht sin mi abano. Juez.- (Refirindose al pblico. En secreto.) Nos estn viendo. Bertolt.- No que no los veas. Esa cuarta pared no existe. Eres actor, siempre ests consciente de que te estn viendo. Fiscal.- Pero tambin somos personajes. Bertolt.- Y por lo tanto pueden entrar y salir de la ficcin cuanto sea necesario.

Juez.- Es un insulto para ellos. Bertolt.- No veo por qu. Mralos, se estn divirtiendo. Fiscal.- l no. Bertolt.- Hay de pblicos a pblicos. Juez.- No ha lugar. Usted es un rebelde, se burla de todo y todos, no tiene el ms mnimo respeto por lo sagrado. Bertolt.- A eso le llamo Elemento irreverencia o Elemento blasfemia? No s an no me decido. Fiscal.- Lo ve. No tiene remedio, su seora. Bertolt.- Pero eso de que no tengo respeto por lo sagrado es una gran falacia. Yo escribo en defensa de lo sagrado o al menos de lo que yo considero sagrado. Escribo para denunciar las injusticias, para dar voz a los marginales, para que no salgan sin culpa aquellos que no respetan los derechos humanos, para que la sociedad los juzgue y se ponga en accin. El arte de denuncia no resuelve los conflictos reales, slo es una invitacin a tomar conciencia. Por eso me dirijo a ustedes, respetable? pblico. Los conozco. S que cuando les hablan sin mirar a los ojos ustedes se hacen los desentendidos. S que acostumbran esconder el rostro cuando una lagrima evidencia su humanidad. Son cobardes, por eso no los hago llorar en pblico, sino contener su sufrimiento, para que no expiren sus culpas y se lleven el remordimiento a casa. Slo ese horrible sentimiento es el que los moviliza, les incita a salir de su posicin de confort, y as de verdad tomar parte. Qu si juego con la vida de la ficcin? S, pero es ms digno que jugar con la dignidad humana. Qu si asesin a la empata y la emotividad? S, y lo merecan. Tenan enajenado al espectador. S, soy irreverente por qu el humor nos ayuda a ver nuestros ms crudos problemas desde una distancia que permite analizarlos, reflexionar sobre ellos. Son un ser de carne, hueso y nervios y siento un gran dolor al ver a la humanidad autodestruirse, y ahora no soy Bertold Brecht ablando, tampoco soy el actor. Soy el dramaturgo, un joven estudiante que sesenta y dos aos despus de la muerte del Gran Maestro ha tenido la oportunidad de ver los alcances de su descubrimiento, y a forma de homenaje le dice sin duda que an sigue siendo vanguardia. Fiscal.- Esto es intolerable. Seora, su sentencia.

Juez.- Seor Brecht, no es personal. Usted me ha abierto los ojos, pero vivimos entre ciegos. Este veredicto no lo doy yo, lo hago citando a un discpulo suyo del futuro, que estoy seguro de que igual le admira. Fiscal.- Basta de palabrera. Juez.- Bertolt Brecht, se le encuentra culpable de haber matado la empata y emotividad en la escena, destruir la cuarta pared y causar lesiones severas a la ficcin. Este tribunal citando a Richard Viqueiria anuncia su sentencia. Fiscal.- Brecht cre su teatro pico para cambiar el mundo y lo ms que consigui fue cambiar el teatro mismo. Bertolt.- A poco no se puede salvar a nada ni a nadie por completo? (A pblico.) Tenemos que conformarnos con las revoluciones infinitesimales o ni siquiera con eso? Juez.- (Hacia la cabina del tcnico.) Compaero, apaga la luz. Esto ya se acab. No quiero que me vean. No estoy precisamente orgulloso. Oscuro. Final.

2.- Galileo Galilei y el gnero didctico. Para dar fin a este ensayo slo falta cumplir con su objetivo, justificar por qu Galileo Galilei es un ejemplo del gnero didctico. Los elementos principales de este gnero son: I.-Estructura lgica: Tesis + Anttesis = Sntesis. Estos tres momentos los encontramos en la obra en el siguiente orden. Tesis: Galileo experimenta, filosofa y expone todos los puntos que apoyan su teora heliocntrica. Representa el ideal de El que sabe la verdad y la niega es un criminal Anttesis: Representada por el Vaticano, la inquisicin y los antropocntricos. Su ideal se expresa as: S una verdad incomoda hay que encontrar el precio de su silencio Sntesis: Se da en la penltima y ltima escena. La verdad saldr siempre a la luz, a pesar de la fragilidad ante la corrupcin de quienes la defienden II.- Personajes simblicos. Los personajes representan ideas concretas, unas veces con intencin de defenderlas, otro con la clara intencin de ridiculizarlas. Dado la gran cantidad de personajes que contiene la obra, analizar la simbologa de uno por uno sera una tarea titnica, as que me limitar a separarlos por bandos. Galileo: Representa la voz de la ciencia, ms concretamente es Albert Einstein disfrazado. Sus valores son la verdad y la resistencia y el escepticismo. Sus principales cmplices son: Andrea Sarti, Sagredo, Federzoni y los conversos del otro bando, Pequeo Monje y Padre Cristoforo Calvilius. Todos ellos representan al sector social a favor de la difusin de la verdad. Por otro lado tenemos al Cardenal Inquisidor y el Papa Urbano VII que representan la censura a favor del control del orden establecido.

A su favor estn: Ludovico Marsili, Un monje muy delgado, Seor Priuli, Sagredo, Dos secretarios espirituales, El telogo Filippo Mucius, El filsofo Seor Gaffone, El matemtico, Un funcionario, nios, etc. El tercer colectivo sera aquel que representa al pueblo que se encuentra dubitativo en bsqueda de su postura ante los inminentes cambios, encabezados por la Seora Sarti y Virginia. Ellos son: Seor Priuli, Cosme de Mdici, Mayordomo Mayor de la Corte, Un cantor de romances, Vanni, Dos monjas, Un prelado gordo, Un campesino Hombres, mujeres. De este modo, Brecht simplifica la realidad humana en grupos regidos por idiosincrasias comunes y as logra un anlisis ms objetivo del tema. III.- Espacio y tiempo extraordinarios. El autor usa la vieja tctica de recurrir al pasado para distanciar al espectador, y tener como punto de apoyo para su tesis una realidad histrica comprobada. Bertold en realidad estaba hablando sobre los nuevos descubrimientos de Einstein sobre la separacin del tomo. Galileo fue el pretexto perfecto para dar su opinin sobre el tema. IV.- Lenguaje simblico. La obra recurre constantemente a metforas para ejemplificar sus hiptesis y tesis. Sin embargo el simbolismo en su lenguaje radica en la parbola de la realidad social vivida en la contemporaneidad de autor, reflejada en la Europa renacentista. Toda la obra es en realidad una parbola de una noticia que cambi para siempre el mundo: La desintegracin del tomo. V.- Tono melodramtico. Aqu nuestro querido dramaturgo casi se rebela contra las leyes de su gnero predilecto, pues a pesar de simplificar la realidad en dos bandos, el final de su historia rompe el tono melodramtico para llevarlo a la pieza, pues su protagonista termina derrotado por el medio. Sin embargo, al final la idea resulta, en cierto sentido vencedora.

Bibliografa y Fuentes Galileo Galilei de Bertolt Brecht, ediciones Losanje, Buenos Aires. 1956Brecht sobre galileo y la responsabilidad del cientfico, Francisco Fernndez Buey.

http://es.wikipedia.org/wiki/Bertolt_Brecht http://ec.aciprensa.com/quees.htm Enciclopedia Catlica. Anlisis del drama. Claudia Cecilia Alatorre.