Biblioteca M.A.O. Mis Archivos HflOPertenece a: Vctor Fco. Carrasco Ferrada

lnvestigador OVNIEn Scribd me encuentras en/comoVictor Francisco Carrasco Ferrada,en VICUFO, en VICTOR o VICUFO2

EDITORTAL

HACIA UNA NUEVA CONCENCIAL ejemplar que hoy tienes en tus manos, amigo lector, constituye. el primgro de un segundo ciclo de 72,tal como explicamos en nuestro anterior editorial, con el que MAS ALLA DE l CIENCIA pretende ini-ciar un lento proceso de reconversin que, de manera paulatina, iremos introduciendo. Y ello porque lapropia evolucin as lo exige. La gran mayora de nuestros lectores ha madurado notablemente en es-tos seis aos de presencia en los kioscos y hoy su nivel de informacin y conocimiento, al igual que el

nuesto, es sin duda muy superior al que poseamos al inicio de esta singular travesa conjunta. Es necesario,consecuentemente, elevar nuestro nivel de conciencia y abrir an rys nuestra mente. Durante este tiempo he-mos hecho nfasis en la primera parte de nuestro nombre: MAS ALL{ a partir de ahor incidiremos ms en la se-gunda: DE l-A CIENGIA Y as, procuraremos demostar que todo aquello que hoy se considera "paranormal" es,lisa y llanamente, algo completamente -normal". Que los an denominados fenmenos parapsicolgicos pueden-y deberr ser esfudiados desde la Ciencia convencional. Que las creencias, leyendas y mitos de muchas civiliza-ciones antiguas tenan una base slida que hoy es posibte defender y retrendar racional y cientficamente. Que lapoca de los lderes, de los gurus, de los fanatismos re.tigiosos y politicos, de la manipulacin por los denomina-dos poderes fcticos y de los dogmas divinos interpretados por los "intermediarios" de Dios con los hombres seha acabado. Que Dios est dentro de nosotros y no fuera. Que el ser humano es libre y alfallecer slo respondeante su propia conciencia. Que en realidad nadie muere porque somos inmoales y que ese hecho no implica enmodo alguno la obligatoriedad de creer en Dios. Que el universo est plagado de trillones de galaxias y el sentidocomn indica que deben ser miles de millones los planetas habitados, muchos de ellos con civilizaciones muchoms antiguas y desarrolladas que Ia nuestra. Que en nuestra sociedad todos los hombres tenemos que tener, deverdad, Is misrnos derechos y obligaciones. Que ningn hombre es ms que otro si no hace ms que otro. Quelas fronteraso las patrias y los ejrcitos son un invento diablico, en tanto concepto "disgregador", y no tienen ca-bida en el mundo de maana. Y que nadie

-incluido el Estade tiene derecho a manipular las mentes de sus ciu-dadangs hastq convertirlos en seres programados con creencias uniformes. Y mucho ms...

nS nLL, en definitiva, asume un Compromiso muy ambicioso que desarrollar con eltiempo. Y, desde Iue-go, confa en que de esa labor de desprogramacin, desideologizacin y desadoctrinacin nazca un ser humanoms lbre, ms consciente, ms abierto, ms solidario, ms integrado con su entorno y, en suma, ms sabio. Oialeste deseo se convierta en realidad.

staff

Q li[i:3al: :xfli?'.if : 5mes de Diciembre que JosepGuiiarro hizo al contactadoperuano Carlos Paz Wells, enla que se afirmaba que la Mi-sin Bama no ha concluido to-dava. Es de agradecer quehayan trado a las pginas desu revista a un personaje demqyor crdito que su hermanoSixto Paz, qien hace unosaos pregon que dicha Mi-sin haba finalizado. Estoyseguro de que, en su momen-to, Sixto malinterpret las indi-caciones de los guas espiri-tuales, puesto que no esposible que un proyecto tanamoroso y mesinico y con laenvergadura de Misin Ramapudiera acabarse de hoy paramaana sin haber conseguidotodos sus objetivos. Los Her-manos Mayores deseabanconseguir de los grupos Ramala elevacin espiritual, para loque inteligentemente disminu-yeron la oleada de avistamien-tos de sus naves, efectundo-se entonces Ia desbandada ydeserciones dentro de los gru-pos. De esta forma slo que-daron los que en realidad ten-an fe en las enseanzas,primndose la calidad sobre Iacantidad. De hecho, la etapams importante de la MisinRama todava est por llegar ytiene que ver con los terriblesacontecimientos que aguar-dan a nuestro planeta y laoperacin de rescate masivodel gnero humano por partede nuestros Hermanos.

Juan P, Goncepcin Prez(Las Palmas)

G U revista ha sacado ya va-)r'o" arucuros sooie SnSathya Sai Baba en los quese dedican a hablar mal deeste personaje. Dicen, porejemplo, que sus milagros sontrucos de magia, lo que es to-talmente falso. A Sai Baba lohan filmado y fotografiado mi-les de veces en todas las par-tes del mundo, y nadie ha vis-to que lo que haga seantrucos. Adems, un grupo decientficos llevan ms de diez

aos investigndole, .han que-dado asombrados y tampocohan visto los susodichos tru-cos, llegando a la conclusinde que lo que l hace no tieneninguna explicacin. Ustedeshablan mal de Sai Baba por-que llevan aos detrs de lpara que salga en su revista yno lo han conseguido ni loconseguirn nunca. Sin em-bargo, s hablan bien de aque-llos que s se dejan entrevistarpor ustedes, como el DalaiLama, Jetsun Kusho, SwamiNityananda, Yogui Bhajan oel Lama Gangchen. Djenmedecirles que todos estos per-sonajes slo buscan publici-dad, dinero y estn metidosen politica. Creo que sus pri-meras revistas fueron muybuenas, pero que ahora sededican a escribir la basuraque vende y gusta a la gente,la que hace ganar ms dinero.Puedo asegurar que he confir-mado que Sai Baba tiene unafuerza extraordinaria que hade experimentar cada uno. Yno tengo nada contra ustedes;todo lo contrario: deseara queen verdad escribieran buenosadculos. Un amigo.

Jess Bocos Antn(Benidorm)

Todu pareue indicar quoha qusdado uoted muy ofen-dido u raf dsl rlltimo r6pr-taje eobra ai aba, Sin em-bargo, R ntntrumosnrtiv$ prd su lffltacin,yd qu l tisrn strbr s-rit pr un profuelonal in-dependlonte que plaumabuen uu trubajo, on 6l rfityorroupoto, lss dos psibl6$lucturau de lu figura de uiBuba. Hn urnt u lu fllma-

ein subrs loo "preuuntuotru" du Sal Bubu, &uta nohu sido slaborudu pr 6tdrevleta, sino por la televisininda; nouotror n homoelimitudo a informar de la pu-lmicu surgida sbr 6l t6-ma. ai Babu ha upareodocun frgcueni 6n nu$tr$pdginau por su 6ran oignif-cucin en la oupiritualldadcontemporn, gu6 nunonadiu lo neg, y loe difsron-tee reportujes han eldo olu-borados pr utrss ffiuydisparos, ulgunow mlombroede la propiu orguniracin de$ai Baba y, pr tafit, lr-ments favorubles hacla 1.Pur ltimo, luu puruonuu queusted citu rfi su srt hrndemoetrado su honorabili-dad a lu lurgo de lou afioe,Lo rsourdam qu6 lu poormunord de defendur fidi6os la de rugf tds lsqus n pienuan rom ust6d.

Rf:,'"'fl"'tr"ff[i: 3:Diciembre sobre la Regenera-cin hologrfica, me gustaraque me informaran sobre loslibros que traten de las investi-gaciones de Harold S. Burrsobre el cuerpo etrico, las deRobert Becker y Ia electrote-rapia en general. Tambin qui-siera conocer, si es posible, ladireccin del seor OctavioRomero, entrevistado porGoncha Labaa en el repor-taje titulado Un museo inspira-do por espritus. Les sugiero laposibilidad de que, al final decada reportaje, citen algunabibliografa o direcciones deinters para los que queramosprofundizar en los temas. Fra-ternales saludos para todos.

Juan M. Trabado(Bilbao)

Fuedeu ritd$r ri -tavio Ftomero en la dlrscclnol Privado de Tulu, n , Sta.Murfa Malindlo, Axmpt-eulco, M6xic n, F, Hn cuan*to a la ducurnuntacin quaoollcltue, loo trabalou de am*bos autorog dpurtsn en logllbro& The Flelde o{ Uf6 (H,, Burr), Bulluntlno Bookw,Nueva York 10721the lructurrsnt ystsm; a llnk but-

w6tn th6 envlronmunt andtho organium {H, Becker},New York Journal of Medici-n6, 16ili An Appllcation oflraut 6urrent Neural ye-torfls t psyhlc phenomcna(H. Beoker), Ptychoenerge-tlc Systsm vul.4, 1977; y Thebody oluctrlcl olectromag-tisfii and thu foundatlon ofllfo (Bucker y G. Seldan), ed.Wllllum Murrow and o. lnc"Nueva York l8"

I rACE ahora unos nueverl.eses, mientras estabaen casa escribiendo unas no-tas, dej mis manos quietasdurante unos minutos y mepuse a mirar la televisin. Culno sera mi sorpresa cuandomi mano comenz a escribir"sola" frases repetidas y sinmucho sentido. Puesto quepens que se trataba de escri-tura automtica, desde enton-ces he ledo todo lo que hepodido sobre este tema, perola verdad es que mi confusinha ido en aumento. Desde queme ocurri esto me encuentromuy deprimida y necesitaraque me ayudaran. Es mi ex-periencia algo positivo o nega-tivo? Gracias por adelantado.

Olga Prez Palmedo(Sevilla)

Tods exprieili Bs slsffi-pr positiv prqus e snse-a. En unt su s0, elfenmeno sB rstl, lo ha ex-prrnMd muuhu Sdflt yn verns motlvo ptrd udepresln, La esorltura au-tomtlcu, 6 ulquir eso,pudd deburge fl uH proe6tgornBntul (un munuaJe de rueubconsclento al coneeien-te), u unu cornunlcaeln te-leptloa (un merusaie mldopr tru prsofr qu ust6dno $pt snscl6ntmfltsprr &u rn6nt decodlfloamedluntu 6st slt6ttl, t un

ENIGMAS EN LA ASTRONOMIA HUBO UIDA INTELIGEI{TE E}I MARTE?

Bajo el nombre de Problemasclave de la Astronoma tuvo lugaren Santa Cruz de Tenerife elpasado mes de Enero un encuen-tro organizado por el /nsffufo deAstrofsica de Canarias y la Fun-dacin BBV, en el que los msdestacados cosmlogos y astr-nomos del momento Plantearonlos enigmas que presenta el estu-dio del Universo en este fin desiglo, que podran agruparse enfes grandes bloques:

materia oscu/a es el obieto debsqueda de /os asfrqnomos definales de siglo XX, del mismomodo que /os astrnomos de/sigb XIX buscaban el tef' .

El segundo gruPo de Proble-mas trat sobre la morfologa Yorigen de la fuente de energa delos ncleos de las galaxias acti-vas, que segn los astrnomosconstiiuyen autnticas "sealesorientativas" para construir la his-toria del universo.

DE FIl{ DE SIGLO Martepudohaberestadohabitadopor seresinteligen-tes hacemiles deaos,segn unartculopublicado en la prestigiosarevista Nature por cientficos bri-tnicos y estadounidenses. Trashaber analizado el meteoritoAllan Hills 84001, que se separdel planeta rojo y cay sobre elcontinente Antrtico hace aPro-ximadamente doce mil aos, losinvestigadores concluyen queMarte tuvo atmsfera, agua 1lun clima hmedo con tempera-turas entre 0 y 80oC, condicio-nes necesarias para la aparicin

de la vidatal y comose mani-fiesta enla Tierra.

Los cien-tficos opi-nan queMarte per-di su at-msferatras coli-

sionar con un gran cometa o aste-roide gigante. El panorama des-cnto por los expertos indica que,tericamente, es posible recrearen aquel planeta un clima ade-cuado para la vida humana Pormedio del bombardeo de gas queenfria la atmsfera, con el que sedescongelara el agua contenidaen sus casquetes polares l rocas,operacin que posibilitara la"colonizacin" de Marte por loshombres en los prximos siglos.

CONCIERTO DE M$CA DEVOCIoI{ALPARA ABRIR EL CORfiZON

El primero abarca las propieda-des globales del Universo.Tamao y edad estn determina-dos en la actualidad por la 'bons-tante de Hubble., que esiablece lavelocidad a que se alejan unasgalaxias de otras; si nos atenemosa ella, deberiamos calcular la edaddel universo en 20.000 millones deaos. Pero los astrnomos creenque en el futuro ser posible ajus-tar esta fecha con un margen deenor de tan slo el 10 por ciento.El contenido, la composicin qu-mica y la naturaleza de la materiaoscura se trataron tambin en esteapartado y, al respecto, el profesorHubert Reeves declar que "/a

Por ltimo,el tercer bloque dediscusin fueron los agujerosnegros. Los astrnomos destaca-ron la absoluta conviccin sobre suexistencia, al menos los de tiPoestelar, y aseguraron que el sis-tema V404 de la Constelacin delCr.sne sigue siendo el candidato aagujero nEro con ms Posibilida-des. La astronomia extica tambintuvo cabida en la reunin. As, elruso lgor Novikov llen de escepti-cismo a sus colegas al Plantear laposibilidad terica de viajar por eltiempo a travs de agujeros negrosconectados en los llamados aguje-ros de gusano. En su opinin, nohay ninguna ley fsica que loimpida, aunque la aventura daralugar a paradoias. Tambin se cali-fic de extica la interpretacin deGeoffrey Buidge, de la Universi-dad de La Jolla (California), sEnel cual algunos qusares estaranasociados a galaxias de un uni-verso estacionario en el que nuncotuvo lugar la explosin del BigBang. Y no fue menos sorpren-dente la intelencin del astrofsicoMartin Reeves, que afirm no des-carlar "la existencia de otros univer-sos parale/os a ste".

El prximo 15 de Marzo secelebrar en el club El Espeio(Madrid), un concierto de msicadevocional que reunir, por pri-mera vez en Espaa, a dosgrandes artistas conocidos en elpanorama de las nuevas msi-cas. De este lado del ocano,Eduardo Laguillo, compositorverstil, voz, guitarra, teclados,percusin y autor de una msicauniversal y comprometida, plas-mada en su primer disco en soli-tario con el ttulo Hay algo en elalre. Desde el otro lado delAtlntico (Berkeley, USA), SilviaNakkach, terapeuta, composi-

tora y cantante, Percusin Yteclados, reconocida internacio-nalmente por sus innovadorastcnicas de exploracin en elterreno de la voz, Ia msica Y laconciencia, y autora de cincodiscos hasta la fecha. El singulardo presentar una msicacomunicativa, espontnea Y degran profundidad, e intentarnrecrear, a travs de la voz yotros instrumentos, un mundomgico y aorado que vive en elinterior de todos los seres. Params informacin, Ilamar al ClubTranspersonal El Espeio al tel-fono (91) 553.94.49.

AL DECUBIERTO UN PO$tsLE FRAUDE OVNIEl contactado mexicano arlos Daz, qrien para probar sus contactos onextraterrestres haba prescntado una extensa"coleccin de videos y f9t9'grafas de VNls, na bdo colocado en la.picota por investigadores de larganizaein MutualUF$ Network (MUFN)' que han descubierto un posi'ble fraude en aste material.

Las espectaculares fotografas presenta- (Mutual UFO Network), la ms importanie or-das com aval de sus expriencias con los ganizacin dedicada al estudio de los OVNls.--tr.t.i ;;;l;.i;Oo mJiiCano " Un artculo publicado recientemente por elCarlos Daz puden ser un fraude, segn un uflogo Antonio Hunneus en la revista FAIEreciente estdio efectuado por Jeff Sainio, avivaba la polmica en torno a este cotac-analista de fotografa y videb de la MUFON tado mexicano, que fue presentado en Espa-

a por otro clebre contactado, GiorgioBongiovanni, durante la celebracin de uncongreso en Balaguer, Lrida.

Las primeras fotografas de Carlos Diazfueron tomadas en 1969, en Coyoacn, se-gn el seor Daz mientras l se'encontrabasolo. Hasta '1981 el contactado de Tepoz-tln haba declarado haber mantenido msde un centenar de encuentros. El caso, sinembargo, no transciende hasta ms tarde.En Diciembre de 1993 Carlos Daz participaen un maratn televisivo de siete horas enel que da a conocer sus fotografas, aunqueya con anterioridad algunas haban sidomostradas por el periodista televisivo Jai-me Maussan, quien para promocionar elcaso lo ha comparado con los contactos deAdamskio Meier.

Segn ha revelado a HS nu-n el uflogomexicano Oscar Garca, en '1978 Cados D-az se present en la redaccin de la revistaContactos Extraterrestres para publicar susfotografas. Su director Hctor Chavarra pi-di los clichs y, ante la negativa delcontac-tado, la direccin de la revista decidi no pu-blicar el material, mismo que tampoco fuedel inters de otro respetable uflogo, PedroFerriz, quien en 1988 tild de fraudulentaslas instantneas.

Las fotografas tomadas por Daz reflejannaves sumamente espectaculares y que fue-

Junto a esfas fneas, el cantactadamexicano Carlos Daz (a ta izda.) iunto ale sti g m atizad o G i org i o Ba ng iovann idurante su intervencin en el Congresoufolgica de Balaguer {Lrida).

ron bautizadas como "plasma" en alusin asu aspecto. El propio Daz ha manifestadoque las naves espaciales que inmoaliza ensus fotos a veces son slidas, pero en otrasocasiones son nubes de luz. Durante sucomparecencia en Lrida, Daz declar quesus tomas fueron analizadas por Jim Dilet-toso, un dudoso analista que vende produc-tos para la NASA y que ha jugado un papel,rrportante en otros presuntos casos fraudu-ientos como el de Amaury Rivera, o el delsuizo Edward B. Meier. Dilettoso calculque para realizar un fraude que se pareciera

al resultado de las instantneas de Daz, senecesitara una maquinaria valorada en200.000 dlares.

Otro de los organismos que analiz el ma-ierial grfico del contaciado fue el Cenfrouniversitario "Grupo So/', en concreto el li-cenciado Vctor Quezada, quien afirm enun programa de televisin que los OVNIs deDaz estaban hechos con "bioingeniera ge-ntica" y algn " material plasmtico" (sic).

Ahora, las pesquisas de los investigado-res han revelado que Daz no es slo un fo-tgrafo profesional, sino que es dueo de la

empresa Seryiclos Tcnicos Fotogrficos,dedicada a proporcionar asistencia a labora-torios mdicos, ingenieros, etc. En otras pa-labras, Daz dispone de material y conoci-mientos suficientes como para poder realizarun fraude.

El antes mencionado Jeff Sainio manifestel pasado mes de Septiembre, ante un nutri-do auditorio en New Hampshire, que el"plasma" de las imgenes de Daz podra ha-ber sido realizado con una lmpara de vaporrojizo a cierta distancia de la cmara. Segnrecoge Hunneus en FAIE, el contactado "s-lo precisaba una cmara, una lmpara de ca-lor y una lnina de cristal", y aadi que "nose requiere ninguna percia ni ningn presu-puesto elevada", en alusin a las estimacio-nes de Dilettoso.

Si ya de por s el anlisis de las fotograf-as resulta complicado, hay que aadir que eluflogo argentino afincado en Los AngelesAlex Chionetti afirm, contra todo pronsti-co, haber protagonizado junto a Daz, unaconocida actriz de Hollywood, y un ex mi-nistro extranjero que desean permanecer enel anonimato, un avistamiento con uno delos "OUN/s de Plasma" en la zona de Tepoz-tln. Al parecer, el objeto sobrevol durante25 segundos al grupo y "desapareci comosi entrara en otra dimensin", recuerdaChionetti.

Queda por ver el papel que Maussan hajugado en todo el caso y qu le mueve en lapromocin del mismo, aunque en este sen-tido algunas fuentes hayan apuntado suevidente inters en incluir los testimoniosgrficos de Daz entre las ms de mil filma-ciones recogidas a travs de televisin yvendidas en una serie de videos titulada Lu-ces en el Cielo.

Sobre esfas !neas, fotagrafa de una de lds presunfos "OtVis de plasma"

Nueuos datos sobre el OYHI del I de Mayo

tri IffiATM'T$N }ffo UAT EruORME DIGO ITMIruOO ENu{ pAmA,rE mEt TMlruo DE JlrtilLL& {luIUnGIA}

Hacia las diez y media de la noche del pa-sado 1 de Mayo, un extrao fenmeno lumino-so asombraba a cientos de personas -muchasde las cuales alertaron a los medios de comu-nicacin-, torres de controlde vuelo y estacio-nes meteorolgicas (ver [/AS ALLA n" 66). Y,como de costumbre, surgi el "debate" entrelos uflogos. V. J. Ballester Olmos manifesta-ba que el objeto era un blido, mientras que J.J. Bentez, Vicente Moros o JoaqunAbenza, entre otros, no tenan tan claro que elfenmeno que cruz la costa levantina de Nor-te a Sur fuera un meteorito.

Segn las declaraciones de mltiples testi-gos, el objeto se compona de una bola (gneade color verde en la parte posterior, que arras-traba una larga cola. Para unos se asemeiabaa una gran bengala; para otros, a una estrellafugaz.

A la hora antes citada, las 22,30, el matri-monio formado por Jos Mara Samper y Ro'sa Garca se diriga por una solitaria carreteraque discurre entre Slena de Enmedio y Sierradel Carche (en la parte sur-oriental del trminode Jumilla), en direccin a su domicilio en No-velda cuando, de repente, al tomar una curva ala derecha, se encontraron con un gigantescodisco Iuminoso detenido aproximadamente so-bre la Casa de la Ermita, a algo ms de qui-nientos metros de donde se encontraba el ve-hculo.

En aquel instante J. M." Samper redujo lavelocidad del coche. Ambos quedaron atnitosfrente al espectacular fenmeno. Segn suspropias palabras, a una distancia inferior aunos 500 metros de altura, sobre la citada ca-sa de campo, vieron un enorme disco de msde doscientos metros de dimetro, de coloramarillo y que contenia en su interior una seriede ckculos de colores variados -amarillos, ver-des, azules, naranjas-, que se encendan yapagaban constantemente. Tras siete u ochosegundos, el obieto se apag de repente y de-sapareci por completo ante los testigos. Peroantes de que stos pudieran reaccionar, el ob-jeto volvi a reaparecer en el mismo lugar. Enesta ocasin no pudieron ver los crculos decolores, sino que el disco apareca por com-pleto con un color amarillento. En aquel instan-te, del centro del objeto sali un haz de luz ha-cia arriba que se abri formando una especiede "cola de pavo real", de mltiples colores yde tamao gigantesco. Segn sus declaracio-nes, la cola sera cuatro o cinco veces superioral dimetro del disco, llegando a alcanzar lasproporciones totales del objeto alrededor deun kilmetro de longitud.

Nerviosos y excitados por el miedo que"aquello" les infunda, Jos M" Samper y su

esposa pudieron ver, por ltimo, cmo eldiscoluminoso se desplazaba a una velocidad devrtigo en direccin sur. El matrimonio creyen un principio que el "aparato" se estrellaracontra el monte del Carche, En aquel instanteRosa se tap los oios y comenz a gritar presadel pnico, Pero no hubo cotisin alguna y, alparecer, el OVN| desapareci por una pequeavaguada del monte.

A estas alturas de las investigaciones seconfirman las sospechas de que el polmicoobjeto avistado por cientos de personas en lanoche del 1 de Mayo y el que pudieron obser-var Jos Maria Samper y su esposa, son elmismo. La teora del "blido" parece cuantomenos absurda, ya que desde cundo unmeteorito realiza los "prodigios" anteriormentedescritos?

F3osa arca

Juan Francisco Valero

Jas {Vlara SarnPer

UANDO nos disponemos a leer un libro,uno de los aparrados con los que primeronos encontramos es ei de "agradecimien-tos". Generalmente se trata de un reco-

nocimiento que el autor dedica a aquellas personasque ms han influido en l o en la obra que el lec-ror tiene ente las manos.Y qu duda cabe que to-dos nosotros -cientos de miles de personas en todoel mundo- tenemos una deuda de agradecimientocon aquellos que, ya desde principios de siglo,abrieron nuevos caminos en el conocimiento delhombre, caminos no hollados anteriormente y que,precisamente por ser desconocidos, suscitaron ine-vitablemente el rechazo de las instituciones esta-blecidas, ya fierar' religiosas o cientficas.

Y es muy posible que si no hubiera sido por esos"adelantados", por esospioneros que se movieron enla vanguardia de la Ciencia y de1 conocimiento, enla frontera de la verdad oficialmente aceptada y es-tablecida, ninguno de nosotros, investigadores yIectores, incluyendo a quienes hacemos esta revis-ta, estara en estos momentos en disposicin decompartir el fruto de sus investigaciones y refle-xiones. Ocros pioneros, igualmente transgresoresde lo convencional, se convirtieron simultnea-mente en dir-ulgadores de su obra y de su pensa-miento, consiguiendo que algunos de aquellos he-rejes rompieran el muro de la ortodoxia y semodificaran las bases de las m variadas discipli-nas cienrficas. Pero a la vez, y de forma simult-nea, encendieron eI fuego de la curiosidad y la in-quietud por todo lo inslito, lo desconocido, lodesconcertante... en suma, por todo aquello para loque la Ciencia an no tena explicacin.

Y as, probablemente muchos de ustedes se inte-resaron en su da por las huellas que aParentementehaban dejado sobre la Tiera clllizariones supues-tarnenre r.enidas de las estrellas; y, seguramente, eseinters les vino de la mano de hombres como Erichvon Dniken o Brad Steiger. O tal vez su intersse centr en e1 misterio de la muerte, un campodonde la doctora Kbler-Ross y, Posteriormente,Raymond Moody, entre otros, hicieron solPren-dentes y revolucionarias investigaciones sobre el te-ma. O qtiz el despertar de su inqetud personaltuviera su origen en los libros de Lobsang Rampa,que abrieron a ios nefitos incalculables posibilida-des de conectar con otras rElidades, independiente-mente de que este enigmtico escrito fuera un per-sonaje literario creado por un fontanero ingls o un

verdadero lama tibetano encarnado en dicho opera-rio, como l mismo afirm en una de sus ltimasobras. Algo que, en realidad, no importa demasiado'Porque lo cierto es que los caminos que finalmentenos han llevado a todos hacia una mayor apertura deconciencia y a comprender que la realidad es muchoms compleja de Io que siqera imaginbamos, hansido y son inumerables.

Ya a finales del siglo XIX y principios del XX,personas como Helena Blavatsky

-con obras co-mo lszi sin rcla o La docuina recreta-, AlexandraDavid Nel -{on sus experiencias e investigacio-nes en los lamasterios del Tbet- o Gurdiieff--con sus influencias orientalistas-, contribuyerona la difusin del pensamiento trascendente, quevivia su poca de mayor desarrollo a partir de lasegunda mitad del siglo XX.

No obstante, a principios de nuestro sigio el inte-rs por tales temas se mantena en crculos bastantecerrados, especialmente por las reacciones que podasuscitar la diluin de artculos o libros cuyo conte-nido pudiera alterar, siquiera de refiln, la verdadcientfica convencionalmente aceptada, especialmen-te la filosfica, o los cimientos del poder poltico oreligioso. Por ello ei conocimiento se transmita b-sicamente, en muchos pases, mediante conversacio-nes privadas. a travs de cartas enrre amigos o gra-cias a libros prohibidos comprados en el extranjero.

Tras la Segunda Guerra Mundial, sin embargo, seprodujo una mayor eclosin de los sentimientos dor-midos en el se humano. Pateca como si el horrorde la contienda hubiera provocado en los hombresun deseo ms profundo de hallar otro tiPo de res-puestas a sus inqerudes. I leccin haba sido muydura. Y, sin embargo, a Pesil de los millones demueftos que cayeron

-tal les decan- en nombre dela libertad, el hombe continu llevando puestos losgrilletes del dogmatismo y la intransigencia. I vi-rulencia de las ideas polticas, que haban desembo-cado en el mayor conflicto blico de la historia de lahumanidad, no slo no se modificara, sino que ade-m en muchos pases dej paso a la viruiencia de lasideas religiosas. En pases como Espaa, donde el"fascismo redencor" se haba afzado en armas aosantes contra el "comunismo ateo",la influencia reli-giosa fue mucho ms patente, marcando decisiva-mente las costumbres familiaes, la ciencia, la cultu-ra y la organizacin social y poltica.

Sin embargo, en toda Europa, y probablementecomo reaccin a las restricciones impuestas en ma-

teria de libertad de pensamiento, algunos hombressintieron la necesidad de reencontrar las fuentes desu esencia, buscndolas incluso por caminos insli-tos. Con el tiempo, de Ia euforia producida por lavictoria se pas a la cruda realidad de una Europadestruida y sin recursos. Slo Estados Unidos pare-ca mantener el suficiente vigor econmico comopara atrastran e1 tren hasta el fin del siglo, aunquefuera a cambio de comulgar co sr anwican way oflife. Sin embargo, tres lustros despus de la san-grienta cootienda mundial se produjo un aconteci-miento que pondra en cuestin todos los pilares so-bre los que se asentaba la sociedad y del que sio losms informados tenan conocimiento: el planetaTiera entraba, despus de 10.000 aos de oscuri-dad, de guerras y de odios, en un periodo de su exis-tencia conocido como Era de Acuario.

Hay que explicar a los menos avezados en estatemtica que este hecho csmico, de gran trascen-dencia, tuvo lugar al entrar la Tierra

-segn pare-ce a principios de los aos 60- dentro del anillo deinfluencia de la estrella Alcin, la ms brillante delas Plyades, siendo los primeros en notar su bene-ficiosa accin energtica los seres humanos. Demltiples maneras, empezara a manifestase eIembrin de Io que aos ms tarde se conocerancomo nueuos paradi gm.as.

Fue el momento en que los primeros divulgado-res de lo inslito en esta nueva etapa de Ia postgue-rra desempolyaro El libro de los condenado deCharles Fort (1874-1932), peculiar personaje quededic gran parte de su tiempo y su dinero a reco-pilar todos aquellos acontecimieotos inslitos deIos que se haca eco la prensa, tanto de su pas co-mo extranjera. De aquella atpica hemeroteca bebe-ran los ms prestigiosos investigadores y los msinquietos buscadores.

Posteriormente, El retorno d ks brujw de Los Pa-wels y Jacques Bergier macara en el mundo, deforma deflnitiva, e1 punto de partida que despert lamayor pafte de las mentes adormecidas de su largoletargo. Enue ellos, nombres hoy tan conocidos comolos de Aim Michel, Jacques Valle, Peter Kolo-simo, Fulcanelli, Josep Ibrahim, M)Lrius IJeget,Fabre D'Olivet, Ian Stevenson, J. B. Rhine,Krishnamurti, Rosso de Luna, Andreas Faber-I(aiser, Sri Aurobindo, l'ilhelm Reich, AntonioRibera y un largusimo etctera, todos ellos adeian-tados buscadores a ravs de diferentes caminos, con-vergentes en un nico punto: el se humano.

La historia de este ltimo sigio se podr contardesde mltiples puntos de vista. Sin embargo, uncambio tan dramtico como el que se nos viene enci-ma no podr ser recogido sino por aquellos juglaresque siten su mente por encima del espacio y deltiempo. Toynbee y Sorokin, prestigiosos investiga-dores del devenir del hombre, tendrn que dejar pasoa personajes como los mencionados o a los que de al-guna forma han seguido sus huellas si quieren llegara comprender que el hombre de la segunda mitad delsiglo XX no slo se ha movido entre coordenadasmacroeconmicas, variables del mercado internacio-nal o vaivenes polticos. El ser humano que pretendeentrar en el siglo XXI es un hombre marcado mspor sus ideales y creencias que por realidades catesia-nas continuunente sometidas a revisin.

Quiz muchos de los planteamientos formuladospor los pioneros mrs intrpidos resuenen hoy a his-torias de ciencia ficcin, pero no por ello deben sercondenados al olvido. No podemos olvidar que elconocimiento cientfico actual ha sido posible gra-cias a las atrevidas hiptesis formuladas por los"herejes" del saber humano, no por quienes repitencomo cotorras Io aprendido sin profundizar ni in-vestigar en nada, y que muchos de sus imaginati-vos sueos hoy ya son realidades.

Desde esras pginas vamos a intentar rescatar,durante los prximos nmeros, a todos aquellosque han sido de alguna manera nuestros "padri-nos" en el momento de entrar al templo del cono-cimiento. Somos conscientes de que corremos elriesgo de cometer alguna injusticia, por cuantoquedarn sin mencionar -sin duda alguna- perso-nas que han podido ser punto de referencia paramuchos. Y ello aun cuando trataremos de se loms rigurosos posible, trayendo a nuestras pginasa todos aquellos que aglutinen en s mismos lascorrientes de pensamiento, las investigaciones olos descubrimientos que, de alguna manera, nosayudaron a enconrrarnos con nosotros mismos ycon quienes andamos. aunque sea por caminos pa-ralelos, hacia el mismo futuo.

Retomemos, pues, las palabras del principio yformulemos desde aqu nuestro AGRADECI-MIENTO, as, con maysculas, a todos aquellosque rompieron moldes en pos de un ideal tan al-truista como ei de quebrar las cadenas del oscu-rantismo y el desconocimiento de nuestras otrasrealidades. Gracias, pioners.

Itttls grnifss

IOS NUHYO PANAMIGfrTASODOS los pueblos de la Tierra han p-racticado,desde dempbs inmemoriales, rituales de renova-cin, cereonias iniciticas, bautismos y toda

precedido de vrias dcadas de crisis profundas. Y du-iante los aos en que esa catarsis se produce saltan he-chos pedazos los pilares en los que se sustentaban las ins-titucitnes que hasta entonces hiban ostentdo el p.oder.As, al igui que el crecimiento del cuerPo fsico obliga.aste a p-asar ior sucesivas etapas crticas, el emerger deu.r .ru.,ro hombre, como parte integrante de una socie-dad distinta, produce t"*^bi, alterciones de todo- tipoen el teiido social donde se desenvuelve. En la adoles-cencia .i .r.rpo crece durante ciertos periodos de formad.rrr-ini.r,'pr'r., hay excesiv, ,..r.iir, hormonal dedeterminadrt ghndulrt que producen trastornos de dis-tinto tipo (pieT, huesot,

""tt?l"go., etc.), sin olvidar los

cambios psicolgicos que se originan en la personalidaddel individuo qr.re sufre el proceso. Sin embargo,-todossomos conscientes de que se trata simplemente de unaetapa normal dentro del desarrollo de ese ser y los cam-bioi, a veces desagradables, se soPortan con esfoicismo.

gica se hace irreversible en muc-hos aspectos, cmo- la inco-unicacin, la soledad y los suicidios aumentan de formaalamante, cmo surgen ca da nuevos conflictos blicosque asolan ms pass, cmo el desarraigo y la decepcinhacen perder la onfianza depositada en insriruciones eco-nmicas, polricas, sociales y ieligiosas... No slo es el cora-zn delt.i hu-*o el que pide el cambio, sino tambin elpropio planeta, que necsit sacudirse para eliminar las car-gas negatiyas que le afectan como ser vivo que es.- Fritlof Capi", et tu libro ElPunto Crucial(Ed. Kairs),,..og la ofinin del historiador J. Toynbee, segn Iacw).*"...cuaid.o una ciuilizacin llega a su duge tiende a per-der el rnpetu culrural lt a dcaer Srg,in parrcr, un elemento

suerte de liturgias encaminadas a producir saltos cunti-cos significativos en el camino de su evolucin.

Las religiones institucionalizadas no han perdido tam-poco ese ..t rit. y han hecho a lo largo del tiempo un, sin-^fin de promesas evanglicas ofrecien-do una nueva vida.

Y .r'qu. el impuiso de evolucionar, de mejorar, de"..r."rr a la perfeccin es -a1go consustancial

con el serhumano y, p^o.ot sorprenderia que un da se descubrie-ra que esa energa impulsora se encuentra impresa en suspropias clulas.' Ei hombre siempre ha mirado hacia adelante desean-do un mundo t r.jo ms justo, ms bello, ms equili-brado. Un mund'o ms libre, capaz de regirse por el

Probablemente esa seala forma de encarar elfuturo: no hay posibiii-dad de ir hacia atrs,luego es absolutamenteimprescindible que nosfocalicemos en construirlas nuevas etapas quenos esperan, tratando deplanificarlas de formaque no volvamos a caer

amor y capazambin de abolirla ignorancia, losmitos y el miedoal futuro. Unmundo capaz dedesterrar los mis-terios que hanencadenado a losseres humanosdurante siglos,sumindole en lasupersticin y ladependencia delos que crea mspreparados.

Todo saltocualitativo llega

en los errores del pasado.El cambio es una necesidad

ya imperiosa que demandanmuchos hombres y mujeres queven cmo mueren de hambre ymiseria 40.000 nios diariamen-te, cmo la degeneracin ecol-

0^teserucial de esa decadncia es la faha dz flexibilidad. Cuandolas estructuras sociales y los modelos de comportamiento setorndn tan rgidns que la sociedad ya no puedc adaptarse al.os cambios d.e b euolucin cultural, la sociedad se drrum-ba y, euentualmente, se desintegra,...; la prdida dr flrxibili-ddd dr una ciuilizacin decadente se acompaa dr unafabade arrnona general entre sus elementos, io qu, ineuiiabte-mente dniua en conflictos y discord.ias socials". S1o tene-

lucin Neoltica, que revolucion Ia forma de vida delhombre primitivo.

S.g.n parece, el nuevo hombre, el hombre emergente,ser un ser ms racional, capaz de manejar de modo mscoherente su libre albedro; funcionar por debe por au-torresponsabilidad; intentar descubrir i Dior, a la energlacreadora, a la fi.renre de donde proviene, no a travs de lafe, sino del conocimiento de sus manifestaciones.

Esta idea entronca con lo que propugnaba el filsofo exis-tencialistaJaspers hace algunos aos cuando haca referenciaa la necesidad de que "...e1cambio ya no pnede estar asentadnen und reuelcin, sino que ha dz prouenir dt k Cisnci/t'.

Pero no de la ciencia n.wtoni*, y mecanicista que nosha servido de modelo desde e.l siglo XVII, ya.que sta darpaso a nuevos conceptos ms integradores basados en laciencia relativista de Einstein, en la mesnica cuntica y enla teora del universo hologrfico. T as fronteras entre ener-ga y materia se vern continuamente revisadas y la energade fusin se impondr como reflejo de las tendencias filo-sficas del hombre emergente.

En definitiva, se tender a la eliminacin de barreras yfronteras de todo tipo, a la erradicacin de conceptosopuestos (bien-mal, material-espiritual, ciencia-religin).

mos que obser,ar losacontecimientos que seestn sucediendo ennLrestros das paracomprobar que ias pa-labras de Tor-nbee, msque una reftlexin, pa-recen una proieca.

Sin embargo, si-guieado e1 razonamien-to de1 presrigioso histo-riador. "...durante el?rocso dz dtsintegracinde lt sociedad sta nopia'de del todn su creati-

uidad, esto es, su habilidad pararesponder a los impulsos. A pesardz que l corriente cubural d ma-yor enuergauruz se lta paralizadnafenndose a idza: fias 7 a modr-bs ngidu d.a compotamiento, uana surgir otras minoras creatiuasque lleuarn adlnnte elproceso de'estmulo y respuesta'. Naturalrueit -te, Lts instituciones sociales donti-nantes se negarn a entregdr lu riena%^ de/ podzr a esds nue-uas fuerzas cuburales emergentl Pero uuL t'iejas instituciones(lase Vieja Era) estn dutinadas a decaer y a dtsintegrarse yls minoras creatiuas quiz puedan transformar los uiejoselemerutos, dndoles urud naeut configuracin. Entonces el?roceso d euolucin cultural podr continuar, dunque connueaos ?rotdgonistas I en nueuas circunstancids".

El cambio que se avecina ser de una envergadura talque trastocar todos los cimientos que han servido de baseal hombre actual. Cambio quizs comparable con la revo-

Sabemosque esta con-cepcin de larealidad -msholstica e inte-gadora- de to-das las facetas yaspectos de lavida tarda d-cadas en im-plantarse. Por-que un modelotan revolucio-nario como elque se estr ges-tando necesia-n de varias ge-

neraciones para lograr su total implanacin. Sin embargo, ellono nos orime hoy, a fiales del siglo )O( de ir dando los prime-ros paso's para acercamos a los nuevos paradigmas que, paulati-rrarnente, inn cambiando todas las concepciones del hombre, afin de aproximarse un poco ms a su origen, meta que penna-nece hoyen elhorizonte como aliciente del impulso irrefrenablede evolucin que formaparte de la esenciadel ser.

A lo largo de los prximos meses hablaremos breve-mente de ello.

fui*r{a Firar &4erino

:3

]EE:i'

Yffifuffiffifu&ffiY& ffire ffiEn su easerta expedi#in tr Esipts el *rup* de trab*o Eie dir-ge el hipn*logo ffi*ard ru y qile a*Ldi para *r!finuar lair'*ve*tga*sffies *bre as re*puestas sneras que emiten !*sreerltss pirarmdal *me estmul*s s?usicalesu ha logradof*tografiar l* que pare una a.tntiea t*eplastia, apareeidan*ei*rte"cente en ura de las paredes de la pirrnide de Ke*ops. N din**t*r de equp* e cnLestra e*s:vencldo de que s-ta ha apareed* cor& respueet* * *s *xperimentos efeetua-dos en su anterisn viaje 3, cree que en breves sen'lanas apare*carn *tra*, que ye s* intuyer: lever::ente, scbre Ia piedra.

jI

N nuestra anterior expedicin alas pirmides egipcias haba-mos intentado comprobar la in-

fluencia de stas en las capacidadesparanormales de los seres humanos,pero, como recordarn los lectores(ver MAS ALLA DE l-A CIENCIA n'69)descubrimos con sorpresa que, trasemitir un sonido previamente extradode una antigua inscripcin de la GranPirmide, podamos or en el recintouna especie de respuesta en formade murmullos. Lo cierto es que detec-tamos el mismo tipo de sonido en to-das las tumbas que visitamos, as quenuestra cuarta expedicin tena comoobjetivo profundizar en esos mensa-jes con intercambio de sonido; sinembargo, y de nuevo, nuestro equipose encontr con algo inesperado enlas paredes de estos impresionantesmonumentos: unas teleplastias!

Puedo asegurar que las caras noestaban allen el viaje anterior, por loque era inevitable deducir que habansurgido en los ltimos meses; perocul era la razn de su repentinaaparicin? Al intentar contestar a estapregunta vimos, con asombro, queeran las mismas paredes que ennuestra anterior expedicin habandemostrado ser ms sensibles al so-nido y emitir una respuesta ms fuefte-situadas en las cmaras interiores delas pirmides- donde ahora se mos-traban las espectaculares teleplastias.

T'LEPLST. IfiIVC&A DEF*RI*A PAEAP&EJIE

Antes de proseguir deberamos de-cir que, desde el punto de vista d laParapsicologa, se entiende por tele-plastia la aparicin de imgenes, deforma inexplicable, en cera, paredes ocualquier material slido, atribuyndo-se su origen princlpalmente a la inter-vencin de espritus de difuntos o a lacapacidad de algunos psiquicos paraplasmar mentalmente una imagen sinintervencin de instrumento alguno.6B

En Espaa todos asociamos la pala-bra teleplastia con las famosas carasde Blmez, pero lo cierto es quemientras en ese caso la aparicin delas caras no pareca tener una raznaparente, nuestra experiencia en laspirmides puede considerarse un ca-so especialmente distinto ya que die-ra Ia impresin de que las teleplastiashubieran sido literalmente invitadas asalir a partir de las experiencias pa-rapsquicas que realizamos con soni-dos en nuestra anterior expedicin.Recordemos que cuando proyectba-mos la msica obtuvimos slo comorespuesta un sonido incomprensible;y, sin embargo, al cabo de cuatro me-ses encontramos este nuevo y miste-rioso mensaje en forma de imgenes.

Debo decir que la mayora de lasteleplastias estn an definindose yque, como puede comprobarse enlas fotografas, se trata de un conjun-to mural de personajes y animales detorso incompleto

-en algunos casos-que cabe esperar estn totalmentedefinidos el prximo verano. Ennuestro prximo viaje podremos dar-les cuenta de ello.

MT*TA Y LUE ru LAPIRMI*E A&*ARA

Tras esta primera parada en laGran Pirmide de Keops el grupo vi-sit otros lugares, como Saqqara,donde se halla la famosa pirmideescalonada de Zoser, la pequea pi-rmide de Unas o la gran pirmidede Snefru, en Meidum.

El viaje a Saqqara, a pocos kilme-tros de El Cairo, permite divisar unbrazo del Nilo donde el tiempo pare-ce realmente haberse detenido. Lascasas de adobe (mezcla de barro ypaja), los animales en libertad, lasmujeres lavando en el ro y los nioscorreteando por todas partes hacenque la imaginacin se remonte fcil-mente a los tiempos faranicos.

Una vez en la planicie de Saqqara

I Gm&ru pm&ffiEnos dirigimos, pasando por su templo,a la pirmide de Unas, normalmentecerrada al pblico. Con los permisospertinentes entramos en su interior. Suacceso es bastante asequible en com-paracin con las grandes pirmides yel recinto, enormemente bello, presen-ta un gran contraste. Elconjunto de re-lieves esculpidos y pintados en la c-mara mortuoria del faran y elsarcfago de basalto azul se encuen-tran en buen estado; en cuanto a lasinscripciones que relatan el viaje del Ka(alma) que efecta elfaran conservanIas tonalidades originales rojas, verdesy amarillas.

Una vez dentro conectamos nues-tros equipos especiales -uya tecno-loga habamos mejorado despues delltimo viaje- y realizamos experienciasde concentracin, sonido y mantrasreverberantes. Esta pirmide da real-mente la sensacin de ser una tumba-an, cuando como saben nuestroslectores, jams se ha hallado momiaalguna en ninguna de ella, poniendoas en entredicho la versin tradicionalde que eran monumentos funerarios-y tenamos muchas expectativas; peroa pesar de nuestros esfuerzos no en-contramos nada paranormal en lasrespuestas delsonido, a excepcin deciertos haces de luz que surgan alemitir los mantras desde el sarcfago.Sin embargo

-al parecer siempre he-mos de sorprendernos en Egipto-,unas fotos tomadas mientras experi-mentbamos mostraban una imagende paisaje rocoso en el sarcfagoaunque ste presentaba en realidaduna superficie completamente lisa; co-mo es lgico, estas fotos pasaron deinmediato a formar parte de nuestroarchivo de "fenmenos misteriosos".

VGAS DE MADERAMMIFICAA

El intento en la pirmide escalonadade Zoser, como en otras zonas deSaqqara, tambin fue interesante peropoco. productivo en cuanto a la obten-cin de resultados. Afortunadamntean quedaban, segn nuestro progra-ma, dos pirmides para experimentar:la gran mastaba de Snefru, en Mei-dum, y despus, en la misma zona deFayoun, la pirmide de adobe de Ame-

Aniba, a la izda., Ricard Bru muestra latelesplastia aparccida en la Cmara de!lnframunda de la pirarnide de Keops. Al lada,la cara silueteada can ardenador. ebajo, ala izda., srimer p{ana de las teleplastias en laparod; a su dcha", supuesta cara de un pen"a.

69

A la izda., el extrao "efecta cristal" praducida durante una meditacin en el sarcfago dela pirmde de Keaps, recogido par la cmara. obre estas lneas, el extrao paisaierocaso que apareci en el sarcfaga de la pirmide de Unas. A la dcha', Ricard Bru

muestra las inscripcianes que sobre el viaje al ms all puede tlerse en la misma pirmide.

I

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nothep lll, justo enlazona que Hero-doto llam el laberinto. As que deja-mos Saqqaray regresamos a El Cairo.

La maana siguiente, muy tempra-no, iniciamos el itinerario hacia la zo-na de Meidum. El viaie dura unas treshoras y la carretera es bastante acci-dentada. Desde el camino se divisaperfectamente la gran pirmide deSnefru, cuyo tamao y esplendor escomparable al de las grandes pirmi-des. Snefru fue un faran anterior aKeops al que se atribuyen dos pir-mides en la zona de Daschur. Unavez en Meidum pudimos apreciarperfectamente la construccin pira-midal y decidimos probar all las tc-nicas de sonido en busca de nuevasexperiencias.

El acceso a esta pirmide es muycomplicado. El pasadizo acaba enuna cmara real pequea y con faltade aire, donde se nota perfectamenteel sndrome piramidal (interferenciade los sentidos y subjetividad deltiempo). Una vez mnimamente insta-lados realizamos las experiencias sinluz y sin sarcfago, pues ya no se en-cuentra en su interior; despus mira-mos con detenimiento todas las pare-des, en las que, como ocurre en lasgrandes pirmides, tampoco hay ins-cripciones. Sin embargo, antes dedescender a la cmara hay una vigade madera descubierta en los traba-

jos de restauracin efectuados en laantigedad durante la dinasta XXVI.La madera se conservaba en perfectoestado despus de miles de aos,pero cuando un pequeo trozo de es-ta viga fue expuesto al aire del exte-rior se sec y empez a descompo-nerse, algo que confirma sin duda elefecto momificador de las pirmides.

Slo decir que despus de una ho-ralarga en el interior de esta pirmidelos miembros del grupo empezaron asufrir un fuerte y persistente dolor decabeza, por lo que abandonamos lavisita y nos dirigimos hacia Fayoun.

INUNDAOIONESYCONTAMTNACN EN LAPHMIDE DE AMENOTHEP ItI

En Fayoun encontraramos la pir-mide de adobe de Amenothep lll, in-teresante por su tcnica de construc-cin y por estar cerca del famosolugar donde Herodoto describe laubicacin de un laberinto utilizado enpruebas iniciticas que jams ha sidolocalizado: "en el ngulo que terminaen laberinto

-dice Herodoto- se en-cuentra una pirmide de 40 brazasdecorada con grandes figuras escul-pidas y un camino subterrneo queconduce a su interior". Lo cierto esque nada queda del laberinto; slodunas y algunas piedras de arenisca

con enigmticas inscripciones en for-ma de Y, cuyo significado an no hasido descifrado.

Nos dirigimos, pues, al interior dela pirmide, ya que contbamos conel permiso pertinente para visitarla,pero nos llevamos una desagradablesorpresa ya que sta se hallaba total-mente anegada por el agua de unafluente cercano del Nilo y apenaspudimos recorrer en su interior unasdocenas de metros. Desgraciada-mente el peligro de derrumbe en esteedificio es una realidad palpable quepuede impedir la opcin de futurasinvestigaciones.

Otros lugares de Egipto son tam-bin vctimas del agua, como las ca-tacumbas de Alejandra, donde yacasi no puede avanzarse ms que enel primer piso. Otros templos, comolos de Dendera o Hatseput, se en-cuentran totalmente deteriorados porla falta de conservacin; y el mismoValle de los Reyes tiene la mayora desus tumbas cerradas a causa de la

an definindose. Como puede vetse en las fotografas setrata de un conjunto mural de perconaies y animales deI

I

1irlrl

toso incompleto, en algunos:asos, que prcbablementeestn totalmente definidos el proximo verano."

70

5n esfa ;sgina,abaja, pirmid*de Amen*ttt*plll, ubicadacerca de!farass/abernfoini*itica sabreel que habiLter*d*t*.*&re elia,irstantn*a enla que Rlcard6ru r:csnuesfra ura delas piedras qu*pudier*n haber{*rrnado par{*de lac*nstru*cndel labsrinto.Ji"rla a esfasfneas, el gnspa

investigacinfre*te a lapirmide deSne{ru enMeidun.

contaminacin. El inagotable Egiptohistrico puede extinguirse muy pron-to en algunos lugares sin una ayudadecidida del mundo occidental.

EN LA CMARA M *- fi'{.&El da 4 de Enero de 1995, a las

01.00 horas, entramos en la cmara

subterrnea de Keops. En esta oca-sin me acompaaban Gloria Rosell,Marga Orenga, Montserrat Bach,Lola Xaxo, M. Garmen MasiP, Mar-garita Bosch, Jos Salud, JosPascual, Jordi Ambrs, AlbertoMontserrat y Gonzalo Gnez. Hede decir que contbamos tambincon la ayuda tcnica de los inspecto-

res egipcios lbrahim y Naser Y de lasensitiva britnica Mara Golding. Y,juntos, nos dirigimos a la cmara delinframundo. En la primera experienciaempezamos con el sonido Y la medi-tacin, pasando acto seguido a expe-riencias de concentracin. En la c-mara empez a sentirse con claridadla respuesta y pronto nos dimoscuenta de que haba algo que no es-taba en la anterior expedicin: las te-Ieplastias.

A partir de ese momento, obvia-mente, el objetivo de la experienciacambi y escudriamos las Paredesde toda la cmara observndolas condetenimiento. As pudimos compro-bar que en una de ellas se formabanms caras que en los otros muros. Entotal haba once y, por sus incipientesrasgos, llegamos a la conclusin deque estaban simPlemente "nacien-do". De hecho, slo cuatro mesesatrs ningn miembro de la exPedi-cin haba advertido su presencia apesar de haber fotografiado y miradotodas las paredes. Bastante emocio-nados por todo ello, subimos Por elcorredor ascendente hasta la segun-da gran cmara, conocida por la "C-.maia de la Reina". All pudimos ver elestado de las obras que realiza el De-partamento de Antigedades egipciointentando hallar una nueva cmara,tanto en la zona superiol como en eltnel inacabado. Se aprecia en con-junto que las obras han deterioradobastante la cmara Y Puede verseparte de la nueva cmara desde unode los corredores, aunque lo nicoque pude divisar desde mi Posicinfue un espacio vaco. Una vez insta-lados en ella

-en la que tambin bus-camos caras, Pero no las encontra-mos- se pudieron escuchar vocesfemeninas de gran,reverberacin' Un

#, a vez ms

-na*a Ricard Bru- el sndromepiramidal gistgrsiofQ nyeslrl. e?saci! S!91 _tiempg vperdimos una hora sin que na/ie hasta la fecha puedqrecordar qu- sucedi dyrante ese tiempo, lunqye Wosnos sentimos muy extraos en aquellos momentos,"

71

ffif"merosos tugares de Egipto son vctimas de ta

mala conseruacin: el agua inunda las catacumbas de4lslpr:lrie, !-"-rnlgt ggry9 PgIIpr o Ui!*evt.p!errvx!-qjprisrglp: v pt rypryg Yelp le tet eir.: !9ry l,mayora de sus monumentos cerrados."

componente del grupo, M. CarmenMasip, entr en trance y qued muyafectada por la experiencia, tanto co-mo para no acompaarnos al da si-guiente, como luego explicaremos.

vAJ ATmL ffiF* Le enngmam K*ps?

Hacia las cuatro menos cuarto dela madrugada llegamos a la Cmaradel Rey, donde realizamos una nuevaexperiencia de intento de viaje astral,basndonos en los antiguos textosegipcios que se referan al viaje delKa (alma).

As, y con las luces de la pirmidecompletamente apagadas, iniciamosla experiencia formando un crculoalrededor del sarcfago. Eran lascuatro de Ia madrugada y, nada msempezar, el grupo tuvo una fuertesacudida y diferentes sensaciones

de movimiento. Una hora y veinteminutos ms tarde (a las cinco yveinte), cuando acab de sonar lacinta especial que habamos llevado,todo el mundo se sobresalt al mirarel reloj ya que no habamos tenidoen absoluto consciencia del tiempotranscurrido. La cinta duraba exacta-mente veintinueve minutos y tena,por tanto, que parar a las cuatro yveintinueve; ello nos daba como re-sultado una hora de tiempo perdido.Al parecer, una vez ms el sndromepiramidal haba distorsionado nues-tra sensacin temporal; de hecho,nadie hasta este momento puede re-cordar qu sucedi durante esa horaque habamos "perdido", aunque to-dos recordamos habernos sentidomuy raros, inquietos, en aquellosmomentos.

El segundo da queramos realizaruna experiencia conjunta repartindo-

nos por las tres pirmides. Y nos dis-ponamos a emprender la nueva ex-pedicin cuando M. Carmen Masip,que como antes explicramos se ha-ba desvanecido en la Cmara de laReina, nos dijo que empezaba a re-cordar algo de la hora perdida la no-che anterior. Unas fuertes convulsio-nes y una sensacin de terror seapoderaron entonces de ella, provo-cando su, desvanecimiento y la inter-vencin del equipo mdico. Despertun rato despus y le pedimos que nointerviniera en las siguientes experien-cias y que permaneciera en el hotel.En cualquier caso, al despeftar de sudesmayo volvi a tener, como el restodel grupo, una amnesia total respectoa aquella hora perdida.

EXPERIENCIA CONJUNTA EN LASTRES GRANDES PIRMIDE

Para realizar la segunda experien-cia el grupo se distribuy de la si-guiente forma: tres en la pirmide deKeops (Lola, Gonzalo y Jos); cuatroen la de Kefrn (Gloria, Marga, JordiAmbrs y la sensitiva britnica); y, fi-nalmente, otros tres en la de Miceri-nos (Margarita, J. Salud y Albert).Pretendamos durante esta experien-cia intensificar la bsqueda de carasy comprobar la potenciacin de co-municacin psquica que se daba es-

A k izda., mues-tm de cma lasaguas inundanaunos de /osmonumentas deAfejandra y quepueden dexpa-recer er] pacatiempa. Junta aestas lneas, unade las integnn-tes del grupadurunte la medi-tacin en el sr-cofryadelapira-mide de Kefin;afuja, Ritmrd Bnten el Tempb &bndsah.

I,

lll 72

ore estas lrneag a/gunos ds /os miembros del grupo de lnvestigacin durante larnedrfacrdn realizada en la pirmide de Kefrn;baio estas lneas, el grupa en la cmara

tigado pues, expoliado por los brit-nicos y enviado a lnglaterra, el barcoque lo transportaba naufrag a cau-sa de una tormenta a pocos kilme-tros de Valencia, por lo que se en-cuentra en el fondo del mar en aguasterritoriales espaolas. Los haces decolor fueron, pues, la mxima nove-dad en este experimento nocturno;he de decir adems que, en algunosmomentos, aquellos haces parecie-ron jugar con nosotros, envolvindo-nos caprichosamente.

Tambin debo decir que es la pri-meravez desde que estudio las pir-mides en que tuve plena concienciadel nivel espiritual que las rodea. Encualquier caso, record al rabeMaqrizi (1360), gran investigador delas pirmides, quien describe una an-tigua leyenda sobre ellas en la que secuenta que "cuando todo estuvoconcluido, las pirmides fueron rode-adas por espritus inmateriales. El dela pirmide sur es una mujer con lar-gos dlenfes, encanta a los hombresgue se atreven a entrar en ella de no-che; la pirmide del norte es un dia-blo rojizo con largos dientes y estdesnudo; la pirmide pequea es unviejo que sostiene un incensario paraquemar perfumes".

Sea o no una leyenda, los miem-bros de mi expedicin pudieron gra-bar voces y sentir la presencia de untipo de energa que slo pareciera te-ner explicacin si sta tuviera un ca-rcter espiritual.

A modo de resumen, no puedo de-jar de decir que el equipo situado enla pirmide de Keops presenci unaserie de fenmenos elctricos incom-prensibles; por su parte, Gonzalo, altomar una fotografa, sinti una fuertedescarga; y estando en el sarcfago,Lola Xaxo apreci una estructura decristal que evidentemente no estabaall antes.

Tambin en Micerinos MargaritaBosch tuvo, antes de que llegara elgrupo, la completa sensacin de es-tar siendo observada por algo o al-guien invisible; y, en Kefrn, Gloria yJordi Ambrs sintieron caricias sobresus rostros mientras, por su parte, lasensitiva Mara Golding estableci undilogo de cantos con respuesta co-mo si ello fuera la cosa ms normaldel mundo. En fin, todos parecamosvivir en otra dimensin o en otro esta-do donde tan extraa fe-nomenologase aceptaba como algo normal. De-cir, por ltimo, que en la pirmide deMicerinos el grupo entero pudo ob-servar bolas de color azulado en lacmarareal.

En fin, es es todo. Pero creo, sin-ceramente, que este viaje es el princi-po de un camino al final del cual ha-llaremos respuestas claras al enigmade las pirmides.

Ricard Bru

73

de/ tsey de la pirmide de Mcerinas.

tando en el interior de las tres pirmi-des. Y acordamos que, una vez fina-lizadas las pruebas, nos reuniramostodos en la pirmide de Micerinospara acabar la experiencia. Debo de-cir que en esta segunda jornada loms destacable, segn los respon-sables de cada pirmide, fueron loshaces de luz que pudieron verse cla-ramente en las pirmides; tambindescubrimos por filmacin que, al in-sistir en el sonido, se forma una au-

reola de color rojo en las pirmidesde Keops y Kefrn, mientras que enla de Micerinos el color es azul inten-so. Nuestra conclusin sobre estoshaces de colores es que pueden es-tar relacionados con el color de lospropios sarcfagos que, tanto en Ke-ops como en Kefrn es rojo (granitorojo), mientras que el antiguo sarc-fago de Micerinos era de basaltoazul. En cualquier caso este ltimono puede ser por el momento inves-

{"rrque en ta'cmara de ta Reina' no encontramos

caras, pudieron escuchas,e voces femeninas de granneverberacin. Un componente delgrupo, M. CarmenMasip, entro en trancey qued muy afectada."

"*a'i-"4*x-,* a";*w,.r*;" \{'; ,,{q1. 4 :. ,o..

.

* Hola, soy una amiga de1B anos. Me apasiona el mun-do de la magia natural, el taroty los distintos modos de adi-nacin. Si compartes mis gus-tos, escrbeme: quiz Puedaaprender algo nuevo.

Vanessa. c/ Isabel la Carli-ca, 21, 3". (10300) Navalmo-ral de la Mata. Cceres.

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