azusa-street-espanol

16
Renacer El ¿A dónde nos llevó? b b De la Calle Azusa Gratis

Upload: yoly-ballcee

Post on 30-Jun-2015

243 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

Page 1: azusa-street-espanol

RenacerEl

¿A dónde nos llevó?b b

De la Calle Azusa

Gratis

Page 2: azusa-street-espanol

2 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 3

William J. Seymour caminó por el suelo

cubierto de aserrín del sencillo edificio de la Calle Azusa y se paró en el estrado, en el centro del cuarto. Poniendo sus manos en la tela liza de algodón que daba dignidad al púlpito, dio una mirada a la hilera de bancas que servían como asientos. Una profunda satisfacción llenó su alma y con una esperanzada anticipación, se preguntó lo que la tarde traería. Pronto el lugar estaría lleno de gente de toda raza y camino de vida, bebiendo en el espíritu del renacer. Seymour mismo, estaba asombrado del fenómeno. Noche tras noche, semana tras semana, mes tras mes, la Azusa Street Mission (Misión de la Calle Azusa) había estado latiendo con canciones, testimonios y clamorosas proclamaciones de

lo que estaba rápidamente convirtiéndose en un movimiento espiritual con dimensiones globales. Y todo había comenzado aquí, en estos cuartos humildes, a través del ministerio de este hombre humilde, hijo de esclavos en la plantación de Louisiana.

El pastor Seymour reposó su cabeza en el primitivo púlpito y comenzó a orar fervientemente por el servicio de esa noche, para que el Espíritu Santo les visitara William J. Seymour

¿A dónde nos llevó?

RenacerEl

De la Calle Azusa

Page 3: azusa-street-espanol

2 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 3

con su poder. El tenía un ardiente deseo que el milagro de Pentecostés venga nuevamente a la tierra. El tenía el deseo genuino, de que el regalo del Espíritu Santo diera la posibilidad a hombres y mujeres a vivir vidas santas y promover unidad en la iglesia, incluso derrumbando barreras raciales y económicas. Lo que se dice, de los que conocían a William Seymour, era que él daba la bienvenida a la participación de todos, así sean blancos o negros, mujeres u hombres, ricos o pobres, viejos o jóvenes. Él no se sentía amenazado por los dones de otros. Todos tenían la libertad de traer una canción, o un testimonio, o un mensaje así sea comprensible o de alguna lengua desconocida. A menudo el rehusaba a predicar un mensaje, si pensaba que a través de otros participantes en el servicio, Dios ya había dicho todo lo que quería decir. El quería que Dios guiara su pueblo.

No era la primera vez en la historia y tampoco sería la última, que gente sincera, gente con respeto a Dios, habían anhelado la restauración de la vida vibrante de la iglesia del primer siglo, la cuál habían leído en el Nuevo Testamento. Hay muchos

ejemplos de hombres y de los movimientos que ellos inspiraron, desde los Catarsios y los Waldensianos en los años 1100 hasta los Anabaptistas de los años 1500, el gran despertar de los comienzos de los años 1700 y 1800, el renacer de Gales al inicio del siglo 20, y hasta el Jesus Movement (Movimiento de Jesús) en los finales de los 60s y en los inicios de los 70s. A pesar, que todos estos movimientos fueron

diferentes, unos de otros en sus doctrinas y formas, pero en un punto muy importante todos fueron parecidos: la gran desilusión

que causaron sus caídas. La novia no estaba lista, y el Hijo de Dios no regresó a la tierra para reclamarla.

En efecto, después de tres años, el renacer de la Calle Azusa, había llegado al final de su existencia. La unidad que William Seymour había anhelado y por la que había orado, nunca llegó a ser realidad. Frank Bartleman, uno de los amigos y apoyos más fieles de Seymour, comentó tristemente sobre la condición del Azusa y las misiones pentecostales cerca del tercer año del renacimiento: “Las misiones habían luchado entre ellas

Page 4: azusa-street-espanol

4 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 5

apenas sobreviviendo. Quedó poco amor.” Sus amigos más cercanos, decían que cuando su amado pastor había muerto en el año 1922, se encontraba con su corazón roto a causa de la división del movimiento que él mismo había ayudado a establecer. Esto se moría debido a cuestiones raciales, doctrinales y económicas.

No significa que el movimiento pentecostal terminó con la muerte de William Seymour. Por el contrario, continuó creciendo grandemente y se convirtió en una fuerza eclesiástica considerable. Hoy en día hay más de 12,000 denominaciones pentecostales/carismaticas, que se jactan de sus 600 millones de miembros

alrededor del mundo, casi el 10% de la población mundial.

Se dijo que el puñado de discípulos del primer siglo “trastornaron al mundo” (Hechos 17:6). En esa época ellos se componían tal vez del 0.03% de la población mundial. ¿Te has preguntado alguna vez cuáles serían los efectos, si más de medio millón de personas estuvieran llenas del Espíritu Santo? En resumidas cuentas... ¿Cuál fue el propósito de dar el Espíritu Santo, de acuerdo a las escrituras?

“Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, les enseñará todas las cosas y les hará recordar todo lo que les he dicho.” (Juan 14:26)

“Pero les digo la verdad: Les conviene que me vaya porque, si no lo hago, el Consolador no vendrá a ustedes; en cambio, si me voy, se lo enviaré a ustedes. Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.” (Juan 16:7-8)

“Pero cuando venga el Espíritu de la verdad, él los guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propia cuenta sino que dirá sólo lo que oiga y les anunciará las cosas por venir. El me glorificará porque tomará de lo mío y se lo dará a conocer a ustedes”. (Juan 16:13-14).

“Yo les he dado la gloria que me diste,

El Renacer de la Calle Azusa

Page 5: azusa-street-espanol

4 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 5

para que sean uno, así como nosotros somos uno:yo en ellos y tú en mí. Permite que alcancen la perfección en la unidad, y así el mundo reconozca que tú me enviaste y que los has amado a ellos tal como me has amado a mí.” (Juan 17:22-23).

“Pero cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder y serán mis testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra.” (Hechos 1:8)

Si eres una persona que considera las cosas, probablemente ya te habrás

preguntado, por qué ocurre que mientras más proclama la gente, el haber recibido el Espíritu Santo y el haber sido bautizados,

más divisiones trae en las iglesias. Nosotros hemos meditado sobre esto profundamente, y creemos que hemos descubierto un secreto sobre las obras del Espíritu Santo — un secreto que ha estado allí mismo en las

páginas de la Biblia todo este tiempo, aunque ha sido eludido durante años. Esta es una revelación radical y revolucionaria, y con todo nuestro corazón queremos compartirla contigo. ¿Estás interesado? ß

Los discípulos del primer siglo “trastornaron al

mundo” (Hechos 17:6). ¿Te has preguntado alguna vez

cuáles serían los efectos, si más de medio millón de personas estuvieran llenas

del Espíritu Santo?

Page 6: azusa-street-espanol

6 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 7

“¿Has considerado alguna vez por qué el efecto inicial de la venida del Espíritu Santo, en el día de Pentecostés, fue el hablar en otras lenguas? ¿Podría ser que Dios tenía algo muy importante que decir a la multitud de personas, de diferentes naciones, que se reunieron para este festival?”

Está claro en la crónica de Hechos 2:4-11 que los discípulos no estaban diciendo habladurías incoherentes, porque hombres de muchos países escucharon “las obras maravillosas de Dios” dichas en sus propias lenguas na-tales. De hecho la obra más maravillosa recién comenzaba, tan solo unos pocos judíos que eran sus discípulos, entre el-los algunos sin educación, podían hablar de este milagro. Entonces el poder del Espíritu Santo vino sobre ellos para ser sus testigos en Jerusalén como su Mae-stro había dicho en sus últimas palabras para ellos.

“Pero recibiréis poder cuando el Espíritu Santo venga sobre vosotros; y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra.”

Fue la ocasión perfecta en que el Espíritu Santo les otorgó el poder para que en ese día pudieran hablar en len-guas que jamás habían conocido, y así los miles de visitantes de otros países pudieran escuchar y comprender com-pletamente las buenas nuevas. Pero un milagro más grande estaba a punto de ocurrir, que respondería al mensaje que las personas escucharon en ese día. Y no fue simplemente el hecho que tres mil personas hayan sido penetrados en sus corazones y clamaron por la salvación.

¡PERO EL MAYOR MILAGRO FUE LO QUE OCURRIÓ DESPUÉS!

Todos los que habían creído estaban juntos y tenían todas las cosas en común; vendían todas sus propiedades y sus bi-

El Mayor Dondel E S P I R Í T U S A N T O

Page 7: azusa-street-espanol

6 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 7

enes, y los compartían con todos, según la necesidad de cada uno. Día tras día continuaban unánimes en el templo y partiendo el pan en los hogares, comían juntos con alegría y sencillez de corazón, alabando a Dios y hallando favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día al número de ellos los que iban siendo sal-vos. (Hechos 2:44-47)

La congregación de los que creyeron era de un corazón y un alma; y ninguno decía ser suyo lo que poseía, sino que todas las cosas eran de propiedad común. Con gran poder los apóstoles daban testimo-nio de la resurrección del Señor Jesús, y abundante gracia había sobre todos ellos. No había, pues, ningún necesita-do entre ellos, porque todos los que poseían tierras o casas las vendían, traían el precio de lo vendido, y lo depositaban a los pies de los apóstoles, y se distribuía a cada uno según su necesidad. (Hechos 4:32-35)

No existe una demostración más grande del poder del Espíritu Santo, que personas estén viviendo juntas, en completa unidad compartiendo todo lo que tienen, cubriendo las necesidades de cada uno. En realidad, lo que dice es,

que todos los que creyeron estaban jun-tos y todos eran de un mismo corazón y alma y no había ningún necesitado en-tre ellos, era el comienzo de la intención original de Dios para su pueblo, que “no debería haber ningún pobre entre ellos1 y que tenían un solo corazón y un solo

camino”. 2 En verdad es lo que la gracia de Dios produce, y eso es “el testimonio real de la resurrección” — la evidencia que Jesús resucitó de los muertos, subió a los cielos y envió al Ayudador para que

los discípulos pudieran recordar y hacer todo lo que Él mandó:

Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, Él os enseñará todas las cosas, y os recor-dará todo lo que os he dicho.

Fue claro que el Espíritu Santo estaba ayudando a sus primeros discípulos, no solo para hablar en otros lenguas, sino que para hacer discípulos a todos aquellos que escuchaban, también enseñándoles a obedecer todo lo que el Maestro les había mandado,3 co-menzando con la entrega total de sus vidas. De la misma manera que Pedro

1 Deuteronomio 15:4 2 Jeremías 32:39

No existe una demostración más grande del poder del Espíritu Santo, que

personas estén viviendo juntas, en completa unidad

compartiendo todo lo que tienen, cubriendo las necesidades de cada uno.

Page 8: azusa-street-espanol

8 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 9

El Mayor Don del Espíritu Santo

amado. Habían recibido el don más grande, para permitirles obedecer el mandamiento más grande y así poder satisfacer el anhelo más profundo del corazón de Dios:

Un mandamiento nuevo os doy: que os améis los unos a los otros; que como yo os he amado, así también os améis los unos a los otros. En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si os tenéis amor los unos a los otros. (Juan 13:34-35)

Su deseo fue siempre formar un pueblo de personas que le represen-taran aquí en la tierra haciendo que su nombre sea engrandecido,6 a través de la expresión del amor en sus vidas sacri-ficadas, para el cuidado de los unos por los otros, en demostración, que Él está en la unidad de aquellos que se niegan

y los otros discípulos habían dejado todo para seguirle en obediencia al evangelio,4 tal cuál como ocurrió, con aquellos que recibieron sus palabras en el día de Pentecostés. Y solo aquellos que obedecieron al evangelio recibieron el don del Espíritu Santo. Esto es lo que Pedro explicó a los líderes religiosos en Jerusalén los cuales estaban molestos por los milagros que ocurrían en ese lugar:

Y nosotros somos testigos de estas cosas; y también el Espíritu Santo, el cual Dios ha dado a los que le obedecen. (Hechos 5:32)

Obviamente, el Espíritu Santo había derramado su amor en sus corazones,5 porque ahora podían amarse unos a otros tal como el Maestro les había

Page 9: azusa-street-espanol

8 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 9

a sí mismos. Después de todo, fue por eso que su Hijo unigénito oró antes de su muerte.

La gloria que me diste les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno: yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfeccionados en unidad, para que el mundo sepa que tú me enviaste, y que los amaste tal como me has amado a mí.

(Juan 17:22-23)¿Existe alguna mane-

ra para medir la unidad entre el Padre y el Hijo?, ¿Tendrán diferencias doctrinales?, ¿Estarán conformes de no estar en acuerdo?, ¿Habrá uno rico y otro pobre?, ¿O compartirán todo en común?7, ¿Acaso, no es que tienen un solo corazón y un solo camino? Entonces, si el Espíritu del Padre y del Hijo es derramado sobre aquellos que son salvos, ¿Cuál sería el efecto? ¿Qué sucedió en los comienzos?, ¿Acaso hubo alguna equivocación o fue solo para esos tiempos? ¿Es posible que solo levantemos nuestros hombros en señal de resignación a la división tan ob-via y el disparate económico que existe

entre los cristianos hoy en día? Dirás, “Es la naturaleza pecadora del hombre y nada cambiará hasta que Jesús vuelva.” Pero el apóstol Pablo concluye:

Porque los que viven conforme a la carne, ponen la mente en las cosas de la carne, pero los que viven conforme al Espíritu, en las cosas del Espíritu. (Roma-

nos 8:5)¿Qué es lo que el Es-

píritu desea? Nosotros creemos, que el deseo del Espíritu es exacta-mente lo mismo que el Padre y el Hijo desean: una novia virgen,8 sin mancha ni arruga, lista por su esposo.9 Y sabemos que el novio

no vendrá hasta que su novia esté pre-parada.10 Por eso ella necesita el Espíritu Santo, con sus dones y gracia para ser purificada11 y crecer a la medida de su estatura, llegando a ser compatible con Él en cada aspecto, para que Él pueda volver por ella. Para eso los dones del Espíritu Santo son dados,12 y el mayor de estos es el AMOR.13

El amor no es un sentimiento o un concepto. El amor es dar tu vida por los

3 Mateo 28:19-20 4 Marcos 10:28; Lucas 14:26,33; Mateo 13:44-46 5 Romanos 5:5 6 Malaquias 1:11 7 Juan 16:15 8 2 Corintios 11:2 9 Efesios 5:27 10 Apocalipsis 19:7-8 11 1 Juan 3:2-3 12 Efesios 4:8, 11-16 13 1 Corintios 13:1-13; Romanos 5:5

¿Es posible que solo levantemos nuestros

hombros en señal de resignación a la

división tan obvia y el disparate económico que existe entre los

cristianos hoy en día?

Page 10: azusa-street-espanol

10 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 11

14 1 Juan 3:16-17; Santiago 2:15-17; Hebreos 3:13; Hechos 2:46-47 15 Apocalipsis 22:17

El Mayor Don del Espíritu Santo

que tú amas. El amor produce comuni-dad porque al amor le encanta amar a otros. El amor produce unidad, porque el amor no es orgulloso. Aquellos que aman unos a otros viven en unidad. Son la personificación del amor. Son el cuerpo de aquel quien es el amor. Él dio su vida por ellos, entonces ellos dan su vida unos por los otros cada día.14 Y así es como su cuerpo, su no-via, es formada y perfec-cionada:

… sino que hablan-do la verdad en amor, crezcamos en todos los aspectos en aquel que es la cabeza, es decir, Cristo, de quien todo el cuerpo (estando bien ajustado y unido por la cohesión que las coyunturas proveen), conforme al funcionamiento adecuado de cada miembro, produce el crecimiento

del cuerpo para su propia edificación en amor. (Efesios 4:15-16)

Tal como sucedió en el día de Pen-tecostés, casi dos mil años atrás, el verdadero derramamiento del Espíritu Santo produce el fruto del amor — un

pueblo de personas viviendo juntas en unidad, amándose unas a otras así como su Maestro les amó. ¿Qué más que esto, puede expresar adec-uadamente el corazón, de aquel cuyo Espíritu les llena? ¿Quién más podría tener la espe-ranza de ser llamado

su novia? Esta es nuestra esperanza, y deseamos que vengas y veas por qué la tenemos. Y el Espíritu y la esposa dicen: Ven.15 ß

Tal como sucedió en el día de Pentecostés, casi

dos mil años atrás, el verdadero derramamiento

del Espíritu Santo produce el fruto del amor — un pueblo de personas viviendo juntas en unidad, amándose unas a otras así como su Maestro les amó.

Page 11: azusa-street-espanol

10 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 11

Como un joven aspirante, graduado en una escuela bíblica,

fui a servir en las Assemblies of God (Asambleas de Dios) del distrito de Nueva York, una de las denominaciones que surgió del renacer de la Calle Azusa 100 años atrás. Una de las 16 verdades fundamentales, proclamadas audazmente por el movimiento pentecostal, es una experiencia, que se dice, es para todos los creyentes en Cristo. Con esta experiencia, la iglesia comenzaría a ver lo mismo que los discípulos vieron en el día de Pentecostés, como se refiere en el libro de Hechos 2:43, “Todos estaban asombrados por los muchos prodigios y señales que realizaban los apóstoles.”

Esto aconteció 2000 años atrás, cuando ellos recibieron lo que el Señor Jesucristo había prometido en Lucas 24:49; “Ahora voy a enviarles lo que ha prometido mi Padre; pero ustedes quédense en la ciudad hasta que sean revestidos del poder de lo alto.”

Por más de ocho años me dediqué al ministerio a tiempo completo. Cinco de los cuáles estuve pastoreando una congregación de las Asambleas de Dios. Pensé que este regalo prometido del

“poder de lo alto” era específicamente para el beneficio personal de cada

creyente, ayudándole a vencer el mal, reforzándole en el Espíritu. Pero durante años pasé por alto lo que Lucas dijo en los próximos versículos de Hechos 2, donde habla del resultado inmediato que hubo cuando los apóstoles

recibieron el poder de lo alto y la

plenitud del Espíritu Santo:

“Todos los creyentes estaban juntos y tenían

todo en común: vendían sus propiedades y posesiones, y compartían sus bienes entre sí según la necesidad de cada uno. No dejaban de reunirse en el templo ni un solo día. De casa en casa partían el pan y comían juntos con alegría y sencillez de corazón. Alababan a Dios y eran estimados por todos; y cada día el Señor

¿Has recibido el Espíritu Santo, con la evidencia de...?

Page 12: azusa-street-espanol

12 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 13

añadía al grupo de los que iban siendo salvos.” (Hechos 2:44-46)

Esto tuvo que haber venido del poder de lo alto — el vivir juntos cada día, compartiendo sus bienes entre sí, para que así todas las necesidades sean cubiertas, y cuidando y perdonándose unos a otros contínuamente. ¡Wow! ¿Acaso era esto lo que estábamos experimentando en nuestra congregación, junto con el poder, de hablar en lenguas? No. Pero no debería ser esto lo que estaríamos experimentando, si es que en verdad habíamos recibido el poder de lo alto. ¡Por supuesto! Pero en vez, nosotros vivíamos nuestras vidas muy parecidas a las de los no-creyentes, trabajando para nuestro propio sustento. Esto va totalmente en contra de lo que Jesús dijo a sus discípulos en Mateo 6:31-33;

“Así que no se preocupen diciendo: ‘¿Qué comeremos?’ o ‘¿Qué beberemos?’ o ‘¿Con qué nos vestiremos?’ Porque los paganos andan tras todas estas cosas, y el Padre celestial sabe que ustedes las necesitan. Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas.”

Pero aparte de esto, ¡por favor considera el asunto más importante para el Señor Jesucristo!

¿Has recibido el Espíritu Santo, con la evidencia de que estás viviendo una

vida de amor, amando a tus hermanos y hermanas, entregando tu vida cada día, como ellos comenzaron a hacer en el día de Pentecostés?:

“En esto conocemos lo que es el amor: en que Jesucristo entregó su vida por nosotros. Así también nosotros debemos entregar la vida por nuestros hermanos. Si alguien que posee bienes materiales ve que su hermano está pasando necesidad, y no tiene compasión de él, ¿cómo se puede decir que el amor de Dios habita en él?” (1 Juan 3:16-17)

Estoy eternamente agradecido de haber encontrado a verdaderos discípulos, que poseen esta evidencia primordial del poder de lo más alto, que el Señor había prometido. Solo de esta manera, Él podrá retornar al pueblo por el cuál Él entregó todo:

“mientras aguardamos la bendita esperanza, es decir, la gloriosa venida de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo. Él se entregó por nosotros para rescatarnos de toda maldad y purificar para sí un pueblo elegido, dedicado a hacer el bien.” (Tito 2:13-14)

La esperanza de que Él regrese abriendo los cielos, nunca podría cumplirse, sin que Él tenga su novia (Apocalipsis 19:7). Esta se está preparando, al entregarse al fuego purificador, que viene de la vida en común que el Espíritu Santo estableció

¿Has recibido el Espíritu Santo, con la evidencia de …?

Page 13: azusa-street-espanol

12 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 13

en Hechos 2, donde muchos eran añadidos cada día, porque estaban siendo salvos verdaderamente. Este proceso de ser salvo, solo puede tomar lugar, por medio de una vida de amor, que viene de haber recibido su poder de lo alto.

Esta vida de amor en común es la evidencia que se requiere para hacer un fallo. Solamente hechos históricos, acerca de la vida de Jesucristo, nunca podrán por sí mismos, exigir un fallo que haga al mundo responsable. Pero el Espíritu Santo desea poder condenar al mundo, a través de la evidencia auténtica de su pueblo viviendo en la unidad por la que Jesús pidió a su Padre fervientemente. (Juan 17:23; I Juan 3:16). Él prometió el poder del Espíritu Santo, para que pudieran obedecer sus mandamientos, amarse unos a otros, así como Él les amó, entregando sus vidas unos por otros cada día. (Juan 13:34-35). Unicamente esto demostrara la evidencia autentica de ser su discipulos al mundo, la verdadera evidencia de haber recibido el Espiritu Santo y lo que esto produce.

Esta misma vida está ahora emergiendo, una vez más en la tierra. Después de haber sido decepcionado por años por mis experiencias en el movimiento pentecostal, ahora estoy tan agradecido de haber encontrado

personalmente la real evidencia de la misma vida en común que empezó en el día de Pentecostés, casi 2000 años atrás — una vida diaria de amor y perdón entre su pueblo reunido. Hemos estado juntos durante más de 30 años, creciendo desde una casa pequeña de discípulos, entregados, hasta formar una cadena fuertemente atada de 50 comunidades en los Estados Unidos, Canadá, España, Francia, Alemania, Inglaterra, Australia, Brasil y Argentina. En cada lugar vivimos juntos, trabajamos juntos, alabamos juntos y compartimos todo en común, igual que los primeros discípulos pudieron alcanzar a través del poder del Espíritu Santo que les fue dado en el día de Pentecostés, que está descrito en Hechos 2 y 4.

Ven a ver por tí mismo. Si de verdad quieres hacer su voluntad, no serás decepcionado.

Page 14: azusa-street-espanol

14 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 15

En los días de Juan el Bautista

y del Hijo de Dios la lengua que

preservaron los judíos devotos era

el hebreo. Así que cuando el ángel

Gabriel trajo las buenas nuevas a la

virgen hebrea, Miriam (María), quien

daría a luz al Salvador del mundo, le

dijo el nombre que le habría de

dar,¿en qué lengua supones que

le habló? Hebreo desde luego. Y

ciertamente Miriam y Yosef (José),

le dieron el nombre que el ángel les

había mandado, Yahshua.

En Mateo 1:21, en tu Biblia

probablemente dice: “… y tú le

llamarás Jesús porque salvará a

su pueblo de sus pecados”. Pero el

nombre Jesús es una adaptación

moderna al español, que procede

del nombre griego Iesous, lo cual

es una degeneración del nombre

original Yahshua. El nombre Jesús

o Iesous no tiene significado por

sí mismo1, pero el nombre hebreo

YAHSHUA literalmente significa

salvación de Yahweh.

Esto da sentido a lo que el ángel

dijo en Mat. 1:21, “... le llamarás

Yahshua (salvación de Yahweh)

porque Él salvará a su pueblo de sus

pecados.”

También es interesante saber

que en Hechos 26:14-15 dice que

el apóstol Pablo escuchó el nombre

del Hijo de Dios pronunciado en la

lengua hebrea por el mismo Hijo de

EL NOMBRE QUE ES SOBRE TODO NOMBRE

Page 15: azusa-street-espanol

14 — El renacer de la Calle Azusa El renacer de la Calle Azusa — 15

1 Yah es el nombre personal de Dios y shua viene de la raíz hebrea que significa “salvar”, Dios se identificó a Moisés como Yah que quiere decir “YO SOY” en Éxodo 3:14 y en el Salmo 68:4 que dice “Cuyo Nombre es Yah” y como en la palabra Aleluya (“Alabad a Yah”) y en Juan 5:43 y 17:11 Yahshua dice que Él vino en el Nombre de su Padre “el Nombre que me has dado”, así que no es una sorpresa que el nombre del Padre esté incorporado en el nombre del Hijo Yahshua.

Dios, así que seguro que no escuchó

el nombre griego Iesous o el nombre

español Jesús sino más bien el

nombre hebreo, el nombre que

está por encima de todo nombre

— YAHSHUA

Prefiero llamar al Hijo de Dios,

mi Salvador, por su verdadero

nombre, el Nombre por el que le

llamaba su propia madre Miriam,

su padre Yosef, y todos sus amigos

judíos.

No sólo he descubierto

cuál es su verdadero nombre y

su significado sino también su

verdadero Cuerpo en la tierra. Estoy

agradecido de haber encontrado

finalmente verdadero descanso

en el verdadero Salvador. Por favor

busca tiempo para leer todos los

otros artículos de este periódico. Si

quieres visitarnos serás bienvenido

en cualquiera de nuestras

comunidades. ß

Page 16: azusa-street-espanol

����������������������������������������������������������������������������������������������������������������

�����������������������������������������������������������

��������������������

��������������������������������

�������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ����������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ����������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ��������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ���������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ����������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ���������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ����������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������ % ����������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ����������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ��������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ���������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ��������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������ % ������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������ % ����������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ���������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ��������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������% ���������������

�������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ��������������

���������������������������������������������������������������������������������������������������������� % �����������������

�������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ����������������

������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % �����������������

��������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ������������������

��������������������������������������������������������������������������������������������������������������������% ������������������

��������������������������������������������������������������������������������������������������������������% ��������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ����������������

�������������������������������������������������������������������������������������������������������� % ���������������������������������������������������������������������������������������������������������������������� % �����������������