Argentina y Brazil se mueven hacia la legalizacion de droga.Hace varios meses, ambas cortes, la de Argentina y Brazil han desestimado los cargos contra personas con posesin de droga, en pequeas cantidades, para su uso personal.Una corte de apelaciones en So Paulo Brazil declaro que la posesion de drogas para su uso personal no es una ofensa criminal. Varias cortes menores lo haban reglamentado de la misma manera previamente, pero la reglamentacion de la cmara Criminal sexta del Tribunal de Justicia de So Paulo a marcado por primera vez que una corte de apelaciones habia encontrado all que la ley de drogas de Brazil era inconstitucional en lo concerniente a la posesion simple de drogas.Ronaldo Lopez fue arrestado con 7.7 gramos de cocana en tres bolsas separadas en la noche antes que el festival comenzara en el ao 2007. Lopez reconoci que la droga era de el y para su uso personal. Lopez fue senteciado como traficante de drogas a 2 aos y medio en prisin, pero los jueces de la corte de apelaciones desestimaron los cargos de traficante desde que esto fue basado en una queja annima, seguidamente desestimaron los cargos de posesion argumentando que era inconstitucional.El juez Jos Enrique Rodriguez Torres, dijo que la ley de criminalizacin de posesion de drogas para uso personal era invalida por que violaba los principios constitucionales de dao ya que no hay dao a terceros y la privacidad es una opcin personal al igual que la posesion de alcohol no es un crimen. Uno no puede admitir cualquier intervencin del estado, principalmente represivo y del carcter penal en el reino de la eleccin personal, especialmente cuando viene a legislar la moral, dijo.Hace dos ao Brazil cambio la ley de drogas-despenaliza pero no descriminaliza-la posesion de droga para uso personal. Bajo esa ley la posesion de droga sigue siendo una ofenza criminal, pero las penalidades son limitadas a multas, cuotas de educacin y servicio comunitario. Ese fue un paso a la direccion correcta pero la reglamentacin en el caso de Lopez va un paso mas alla.El jubilado juez brasilea Maria Lcia Karam me dijo: Yo no pienso que podamos esperar que la politica de los lideres de Brazil legalicen la posesion de droga para uso personal. Pero realmente espero que si el caso llega a la suprema corte, quizs tengamos la mayora de sus justicias confirmando la declaracin de inconstitucionalidad de la ley federal que la criminaliza.Es un remarcable momento en la historia judicial de Brazil, dijo. Esta es una decisin de gran significado. Esta es la primera vez que una corte de apelaciones de Brazil a indicado claramente que una ley que criminaliza la posesin de droga para su uso personal contradice la constitucin y la declaracin internacional de derechos humanos. Esta es la primera vez que una corte de apelaciones de Brazil a indicado claramente que la posesin de droga para uso personal es un comportamiento que concierne solamente al individuo para su privacidad y sus opciones personales. Esta es la primera vez que una corte de apelaciones de Brazil a indicado claramente que el estado no esta autorizado para interferir dentro de la esfera de la privacidad. Esta es la primera vez que un tribunal de apelacin brasilea ha indicado claramente que el individuo ser libre de ser y hacer cualquier cosa que quiera ,mientras este comportamiento no afecta ningn derecho de otros.En Argentina una corte federal a descriminalizado el consumo personal de droga. De acuerdo a la reglamentacin de la corte, el castigo para los consumidores de droga.Crea solamente una avalancha de casos que apuntan a consumidores sin escalar hacia arriba en el liderazgo de los traficantes de droga.La decisin se aplico al caso de dos personas jvenes detenidas por la polica por pesesion de mariguana y tabletas de extasis cuando ellos fueron a una celebracin de msica electrnica en Buenos Aires, en mayo del 2007.Aunque la pregunta deba ser resuelta en el Tribunal Supremo, la decisin del tribunal de Buenos Aires est de acuerdo con la poltica del Gobierno de Cristina Fernandez de Kirchner a favor de reformar las leyes para legalizar el consumo de la droga.El mes pasado en una reunin de la O.N.U. en Viena el Ministro de justicia de Aregentina, Anibal Fernandez dijo que la poltica de castigar alos consumidores de droga fue un fracaso total.Esta es la primera vez en 30 aos que Argentina a tomado tan fuerte posicin contra los Estados Unidos sobre la aplicacin de la poltica de droga .Dos de los mas grandes y poderosos pases de sur america pareciera que se separan de la fracasada poltica de la prohibicion de droga hacia una mas sensible legalizacin, regulacin y control de esta. Bravo!

Final del formularioPanorama de las leyes de drogas y las tendencias legislativas en BrasilTendenciaCon el Gobierno de Dilma Rousseff, Brasil est en vas de convertirse en un referente regional para temas de seguridad. El pas asume cada vez ms tareas regionales en el terreno de monitoreo y rastreo del cultivos de coca y trfico de cocana con instrumentos y tecnologas de alto nivel, en las que tienen un papel destacado las fuerzas policiales y militares. A la vez, Brasil se encuentra una vez ms en medio de un debate sobre la reforma a la legislacin vigente de drogas. En el Senado de la Repblica se discuten cambios fundamentales al Cdigo Penal, que incluyen nuevos artculos sobre drogas. Tambin estn siendo revisados varios proyectos de reformas de la ley de drogas vigente. Hay un debate polemizado sobre la aplicacin de tratamientos forzados a usuarios de crack.LeyEn Brasil rige laLey de Drogas 11.343del 23 de agosto de 2006. Esta ley introdujo un importante cambio en la legislacin de drogas del pas al despenalizar el consumo y rechazar las penas privativas de la libertad para el consumidor, incluso en los casos de reincidencia. El artculo 28 de la ley prev medidas alternativas como pena. Si bien la ley de 2006 ampli la diferencia legal entre consumidores y traficantes estos ltimos enfrentan altas penas de prisin no define de forma estricta quin puede encajar en cada una de estas categoras. (Vase:A lei na prtica)Para las ltimas noticias sobre la reforma de la legislacin sobre drogas en Brasil hagaclic aqu.

Leyes de drogas y tendencias legislativas en BrasilLa legislacin de drogas brasilea estuvo fuertemente influenciada histricamente por las convenciones de drogas de Naciones Unidas. En virtud de las convenciones, Brasil se comprometi a luchar contra el trfico y a reducir el consumo y la demanda con cualquier medio a su alcance, incluido el ms drstico de todos: el control penal. Adems del compromiso oficial con el sistema internacional de fiscalizacin de estupefacientes, las estrechas relaciones diplomticas y comerciales entre Brasil y los Estados Unidos condujeron a la adopcin de un enfoque prohibicionista en consonancia con el modelo norteamericano de guerra contra las drogas.Legislacin vigenteEn Brasil existen diferentes instrumentos legales que rigen el trato penal de las sustancias controladas: laLey de Drogas 11.343del 23 de agosto de 2006, y el Cdigo Penal. Adems, los llamados Crimes hediondos (Ley 8.072/90 de 1990) consideran delitos de drogas que suspenden ciertos beneficios y derechos - como la libertad en espera de juicio. En ese sentido, la Ley de 2006 represent un avance.Entre los principales aspectos destacables de la ley de estupefacientes, est el reconocimiento expreso de principios como el respeto de los derechos fundamentales de las personas, especialmente en cuanto a su autonoma y libertad (artculo 4, I), el reconocimiento de la diversidad (artculo 4, II) y la adopcin de un enfoque multidisciplinar (inciso IX). Adems, la ley fija directrices destinadas a la prevencin del consumo de drogas mediante el fortalecimiento de la autonoma y de la responsabilidad individual en relacin con el uso indebido de drogas (artculo 19, III) y el reconocimiento de la reduccin de daos como resultados deseables de las actividades de naturaleza preventiva (inciso VI). La consideracin jurdica de estos principios es algo fundamental, ya que refleja un nuevo enfoque, que sigue la lnea del prohibicionismo moderado, especialmente con la adopcin de la reduccin de daos como poltica oficial.En relacin con el consumo de drogas, la ley de 2006 introdujo un importante cambio con la despenalizacin del consumo y el rechazo de penas privativas de la libertad para el consumidor, incluso en los casos de reincidencia, mediante el artculo 28, que slo prev medidas alternativas como pena.Adems de stos, hay otros aspectos positivos, como la equiparacin del cultivo para consumo personal al consumo personal en s, segn lo dispuesto por el artculo 28, 1. Un acto que, segn la antigua legislacin, era equiparable al trfico era el consumo compartido de drogas ilcitas. Tambin en este caso se han reducido las penas (artculo 33, 3), cuando el suministro es ocasional, se entrega a alguien que tiene una relacin con el sujeto en causa y no tiene afn de lucro. Esta situacin es diferente de la del traficante profesional por lo que se justificara la relajacin de la pena. Con respecto al consumidor, por lo tanto, estos cambios se pueden considerar como positivos ya que implican una reduccin del control penal y hacen una cierta diferenciacin entre conductas.Aunque en Brasil la detencin preventiva no es obligatoria, en casos de delitos de drogas, las cortes la aplican muy a menudo, independientemente de si se trata de delitos menores o mayores. Los delitos de drogas son clasificados como hediondos, delitos graves, junto con el asesinato, la violacin y el secuestro, sin importar el grado de participacin. Esto se ha convertido en una causa mayor de la sobrepoblacin de las crceles de Brasil. En 2012 casi el 40 por ciento de la poblacin carcelaria no tena sentencia, y una cuarta parte de esta poblacin estaba en la crcel por drogas.Adems, la ley sigue careciendo de una diferenciacin clara entre consumo y trfico. Segn los criterios legales, esta diferenciacin se debe determinar teniendo en cuenta la cantidad, la naturaleza (o calidad) de la droga y otros elementos, tales como el lugar y dems circunstancias objetivas, adems de subjetivas, como la existencia de antecedentes, circunstancias sociales y personales. Estos vagos criterios son tan difciles de aplicar que, en la prctica, la distincin depende de la autoridad correspondiente en cada caso.En lo que atae al trfico de drogas, la ley vigente reserva un trato penal bastante estricto para este delito, ya que la pena mnima se increment de 3 a 5 aos, si bien con la posibilidad de reduccin de la pena. El delito de trfico responde actualmente a la descripcin siguiente:Artculo 33: importar, exportar, remitir, preparar, producir, fabricar, adquirir, vender, exponer a la venta, ofrecer, almacenar, transportar, llevar consigo, guardar, prescribir, administrar, entregar para consumo o suministrar estupefacientes, aunque sea gratuitamente, sin autorizacin o en disconformidad con las disposiciones jurdicas o normativas. Pena: reclusin de 5 (cinco) a 15 (quince) aos y pago de 500 (quinientos) a 1.500 (mil quinientos) das-multa.En el 1 de este mismo artculo 33 se establecen ademstres figurasque se equiparan, o se asimilan al trfico, con el objetivo de abarcar toda la cadena productiva de la droga. De modo que est claro que la intencin de la ley es cubrir todas las conductas posibles que puedan tener cualquier relacin con el proceso de produccin, distribucin, comercio y consumo de drogas.Si bien la ley de 2006 ampli la diferencia legal entre consumidores sujetos slo a medidas alternativas y traficantes que se enfrentan a altas penas de prisin sta no define de forma estricta quin puede encajar en cada una de estas categoras. Aunque laLey 11.343representa un avance con respecto a la anterior, est an muy lejos de lo ideal. La ley revela an la preferencia del poder legislador por la pena de prisin, incluso para los pequeos traficantes. Para estos ltimos mejor sera aplicar una reduccin de la pena, ya que actualmente, aunque el juez pueda reconocer la poca relevancia de la participacin del acusado en el comercio ilegal de drogas, la ley prohbe la sustitucin de la prisin por penas alternativas. Ello a pesar de que la ley brasilea permite esa sustitucin en el caso de condenas de hasta 4 aos para todos los dems delitos perpetrados sin violencia o amenaza grave, como sera el caso del pequeo trfico de drogas.Impactos de la legislacin sobre la situacin carcelariaEl sistema penitenciario brasileo est superpoblado. Actualmente, hay un dficit de 230.000 plazas, lo cual supone unas condiciones de vida psimas para los internos. El pas sufre tambin de un problema bastante comn en los pases latinoamericanos: el exceso de presos provisionales. Es decir, personas privadas de libertad sin condena definitiva. El porcentaje nacional de presos provisionales en estos momentos se sita en torno al 38 por ciento (Diciembre 2012). La detencin preventiva para casos de drogas no es obligatoria, pero en la prctica se aplica a menudo, y es la segunda causa de encarcelacin.Segn datos de 2012, Brasil contaba en ese momento con un total de 548 mil personas privadas de libertad en su sistema penitenciario, incluidos los detenidos en comisaras. En 12 aos (de 2000 a 2012), la poblacin carcelaria creci ms del doble, pasando de unos 233.000 presos a ms de medio milln. Esta tendencia de incremento del encarcelamiento que se observa ya desde comienzo de los aos noventa, refleja los efectos de una poltica penal basada en el endurecimiento legislativo, la limitacin de las garantas y el acento en la represin.Dentro de este panorama general el total de condenados por delitos de trfico de drogas representa la segunda mayor incidencia de detenidos (133.946) en el sistema, despus de los delitos contra el patrimonio que ocupan tradicionalmente la primera posicin.La siguiente tabla* muestra el nmero de condenados por trfico de drogas (2005 2011) en relacin con la poblacin carcelaria total.AoTotal presosPresos/trficoPorcentaje presos/trfico

2005361.40232.8809,10%

2006383.48047.47212,38%

2007422.59065.49415,50%

2008451.21977.37117,50%

2009473.62691.03719,22%

2010496.251106.49121.46%

2011514.582125.74424.43%

* Fuente: Ministerio de Justicia, BrasilSegn estos datos, el nmero de condenados por trfico de drogas casi se duplic desde la entrada en vigor de laLey 11.343de 2006. As, la opcin a favor de las respuestas penales represivas contra el delito de trfico de drogas ha contribuido de forma eficaz al aumento de la poblacin penitenciaria brasilea en los ltimos aos, destacndose particularmente entre estos los pequeos comerciantes de drogas ilcitas condenados a largas penas de prisin, hecho que refuerza la marginalidad y el estigma a que estn sometidos. Otro aspecto destacable es la creciente participacin de menores de edad en los delitos de drogas.Legislacin y reformaEstos son los principales cambios de la legislacin penal brasilea sobre estupefacientes en las ltimas dcadas:

1940 - Art. 281 del Cdigo Penal establece el delito de comercio clandestino o facilitacin del consumo de estupefacientes. 1966 - La Ley 4.451 de 1966 incorpora como delito el cultivo de especies para la produccin de drogas ilcitas. 1967 - Decreto ley 159 de 1967 extiende la prohibicin legal a las anfetaminas y los alucingenos. 1968 - El Decreto ley 385, del 26 de diciembre de 1968 representa una nueva legislacin de drogas en el marco del rgimen dictatorial. 1976 - La Ley 6.368 de 1976, elaborada en plena apertura poltica, Ley de Estupefacientes, revoca el Art. 281 del Cdigo Penal y unifica todas las leyes de drogas bajo una nica ley especial. El consumo y el trfico de sustancias ilcitas representan un peligro para la salud pblica. 1990 - La Ley 8.072 de 1990, Ley de Delitos Graves, contribuy a aumentar el nmero de presos por delitos de drogas. 1995 - La Ley 9.099 de 1995 relaja las penas para el delito de consumo de estupefacientes. 1998 - La Ley 9.714 de 1998 revela una tendencia hacia cierto tipo de despenalizacin en el consumo. 2006- Actual Ley de drogas, abril de 2006. El Tribunal Supremo Federal modifica la interpretacin de la Ley 8.072. Creacin del SISNAD el Sistema Nacional de Polticas Pblicas sobre Drogas. Se centra en la prevencin del uso indebido de drogas.En estos momentos hay tres propuestas de reforma de la ley. Una de ella propone la internacin compulsiva para usuarios decracky el aumento de la pena para el trfico de drogas, y las otras dos proponen la descriminalizacin de la tenencia para el consumo personal, la tenencia de plantas para consumo personal, y una clara distincin entre traficante y usuario. Al parecer esta dos ltimas no cuentan con el suficiente apoyo poltico.Acompaada por una campaa pblica, se present unapropuesta de leybajo el nombre "Ley de drogas: es hora de cambiar", segn la cual este proyecto de ley, ms all de establecer criterios objetivos de diferenciacin entre distribuidor y usuario, determinando la cantidad de la droga aprehendida para un mximo de 10 das de consumo propio, cuya dosis diaria va ser definida por las instancias federales, apoya a instituciones que atienden a aquellos que sufren por el abuso de drogas, sin el temor de ser enviados a la crcel. La propuesta fue presentada a la Cmara de diputados por la Comisin Brasilera de Drogas y Democracia en agosto de 2012, acompaada con firmas de 110 mil personas.El segundo proyecto en camino es la reforma del Cdigo Penal, que fue trabajado durante siete meses por una comisin de juristas, resultando en la presentacin de unanteproyecto, entregado al presidente del Senado el da 27 de Junio, 2012. En la ambiciosa propuesta, que en s misma busca modernizar el Cdigo, tambin se considera la descriminalizacin de la siembra, cultivo y cosecha de plantas destinadas a la produccin de drogas para uso personal, el porte de drogas para uso personal, equivalente a una dosis para cinco das de consumo.Mientras tanto, las posturas opuestas a la tendencia humanizante de las polticas pblicas en materia de drogas se expresan con ms fuerza en el debate sobre la reforma: el internamiento compulsivo de usuarios decrackes un ejemplo de esta tendencia, que se comenz a aplicar hace poco en algunas ciudades, por ejemplo en Ro de Janeiro - como preparacin para ofrecer una imagen limpia y segura para la copa mundial y los juegos olmpicos - y Sao Paolo. El proceso para aprobar sus bases legales est en curso.

Diez motivos contra el proyecto de ley 7663/10 (agrandar)

El 12 de Diciembre de 2012, laComisso Especial do Sistema Nacional de Polticas sobre Drogas(Comisin Especial del Sistema Nacional de Polticas sobre Drogas), de la Cmara de Diputados, aprob por unanimidad un proyecto de reforma a la Ley de Drogas 11.343/06. Entre otras medidas, el texto define el papel de los municipios, los estados y del Estado federal en el combate a las drogas ilcitas; aumenta la pena para el trfico de drogas de alto potencial ofensivo como el crack y permite la hospitalizacin obligatoria de los usuarios hasta por seis meses. Actualmente, la ley prev la reclusin de 5 a 15 aos por trfico de drogas. El texto aprobado, elProyecto de Ley 7663/10del diputado Osmar Terra, establece un aumento de pena de un sexto hasta dos tercios ms de tiempo, si se trata de trfico de drogas de mayor potencial ofensivo, como el crack. En mayo de 2013 la Cmara de Diputados aprob este proyecto de ley con algunas reformas menores, a pesar de la frrea oposicin de algunos grupos de la sociedad civil en particular. Los crticos ven riesgos en los cambios que castigan de manera desproporcionada a los usuarios y comerciantes pequeos que venden para apoyar su propia adiccin, y cuestionan tambin el enfoque del tratamiento compulsivo. Le corresponde ahora al Senado decidir si la medida se convierte en marco legal en el Brasil.Otros mbitos de reformasPor parte del poder judicial tambin hay presiones a favor de reformas. En la prctica judicial existen varios ejemplos de fallos que buscan ampliar los mrgenes de la ley, en cuanto a la cantidad en posesin para uso personal y para la detencin preventiva.En septiembre de 2010 fueron cuestionadas ante el Tribunal Supremo Federal de Brasil la opcin legislativa a favor del aumento de la represin as como la opcin exclusiva por el encarcelamiento. El Tribunaldictamin un recursoa favor de una persona acusada de trfico de 13,4 gramos de cocana, y discuti la prohibicin de la sustitucin de la pena de prisin aplicada a un pequeo traficante de drogas por medidas restrictivas de derechos, contemplada en el prrafo 4 del artculo 33 de la Ley de estupefacientes. La mayora determin que esa prohibicin era inconstitucional y se estableci que la posibilidad de la sustitucin se deba estudiar caso por caso.En opinin de algunas autoridades, la aplicacin de tal decisin podra beneficiar a muchos otros pequeos traficantes y disminuir el tamao de la poblacin penitenciaria nacional, dado el gran nmero de pequeos traficantes encarcelados en Brasil.Brasil en el debate internacional sobre polticas de drogasEl Gobierno de Dilma Rousseff asume por lo general un perfil bajo en los escenarios y foros internacionales, y en los debates sobre reforma a las polticas de drogas, con la excepcin de la interdiccin, tema en el que Brasil est aumentando su influencia regional. Varios pases de la regin andina han firmado con Brasil acuerdos bilaterales policiales y militares de cooperacin, que parecen reemplazar o complementar el papel tradicionalmente ocupado por los Estados Unidos.Brasil fue muy activo en la defensa de las polticas de reduccin de daos en el mbito internacional, particularmente durante la primera gestin del presidente Lula da Silva (2003- 2007), pero en los ltimos aos ha perdido el papel de impulsor de reformas a las polticas de drogas. En el debate sobre polticas de drogas que se desarrolla en el marco de la OEA Brasil has estado prcticamente ausente.Brasil tiene una sociedad civil activa en la promocin de polticas alternativas, y es el pas de origen de uno de los principales representantes de la Comisin Latinoamericana de Drogas y Democracia, que luego se transform en laComision Global de Polticas de Drogas, el ex presidente Fernando Henrique Cardoso.

Brasil enva una misin buscando frenar legalizacin de marihuanaEn la recta final de la sancin parlamentaria de la ley sobre marihuana, una delegacin de alto nivel de Brasil se presentar ante la comisin de Salud del Senado para desaconsejar la aprobacin del proyecto.El martes 5 llegar a Montevideo el diputado federal Osmar Terra, quien coincide con la presidenta Dilma Rousseff en su rechazo a la legalizacin de cualquier droga, para plantear ante la comisin de Salud del Senado su preocupacin por el posible aumento del consumo entre ciudadanos de su pas tras la regulacin en Uruguay.Vendr acompaado, para reunirse con la comisin el mircoles 6, por dos personas de no menor relevancia en el ambiente poltico brasileo.Uno es el subprocurador general de Justicia para Asuntos Institucionales de Ro Grande del Sur, Marcelo Dornelles, y el otro es el asesor principal en materia de polticas de drogas del gobierno de Rousseff, Vitore Maximiano, que dirige la Secretaria Nacional de Polticas sobre Drogas (Senad) del ministerio brasileo de Justicia.Terra es diputado federal por el Partido Movimiento Democrtico Brasileo (PMDB), uno de los principales de Brasil, y con una orientacin de centro. Fue secretario estadual de Salud de Ro Grande del Sur durante ocho aos, compartiendo gabinete con la actual presidenta Rousseff, quien por entonces era secretaria estadual de Minas, Energa y Comunicaciones.Terra, mdico de profesin, es un dirigente cercano al vicepresidente brasileo Michel Temer, con quien trabaja desde hace aos.Este diputado brasileo tiene una posicin muy firme de restriccin del acceso a las drogas, por lo cual llegar a Uruguay con una preocupacin a flor de piel: la ley de liberalizacin del consumo de marihuana, que el Parlamento prev sancionar este mes.Terra plantear a los senadores de la comisin de Salud su preocupacin porque Uruguay "abra el camino a las drogas", y a la vez porque los brasileos especialmente del sur van a venir a Uruguay a conseguir la droga, dijo a El Pas un allegado al diputado federal.Terra tiene una posicin sobre la droga similar a la de la presidenta Rousseff, que tambin est en contra de la legalizacin de la marihuana.El 17 de mayo de 2012 cuando era candidata del PT a la Presidencia, declar al portal de noticias R7 que "una droga no est aislada de otra. El consumo de crack (en Brasil) se une al de otras drogas. Tenemos que tener cuidado para no llegar a una situacin de despenalizacin. Brasil no tiene las condiciones hoy en da para proponer una despenalizacin de cualquier droga".El diputado brasileo solicit ser recibido por la comisin de Salud del Senado mediante una nota que dirigi al presidente de la misma, el senador colorado Alfredo Solari, quien traslad la inquietud a los dems integrantes, siendo aceptada. Solari ya ha tenido intercambios con Terra. De ah surge que la preocupacin que hay en Brasil es "la asociacin de la marihuana con otras drogas, como el alcohol, el crack y la pasta base", indic a El Pas.Mensaje a Mujica.El 28 de agosto pasado, segn la pgina oficial del Congreso brasileo, el diputado Terra promovi el envo de una mocin de "preocupacin y contrariedad" al presidente Jos Mujica "respecto a la adopcin de una legislacin no totalmente compatible con el derecho internacional que limita el uso de narcticos, lo que incluye la marihuana".En Brasil hay mucha preocupacin por el consumo de drogas, particularmente la marihuana y el crack, que es un subproducto de la cocana que se forma una vez que en el proceso se le ha extrado una serie de lquidos y queda endurecido.En 2012, el mdico siquiatra Srgio de Paula Ramos, de la Universidad Federal de San Pablo (Unifesp) y conocido como uno de los profesionales ms destacados de Brasil en siquiatra, brind una conferencia donde present datos sobre la opinin de los brasileos en relacin con la legalizacin de la marihuana. El 75% est en contra (111 millones de personas), y el 11% est de acuerdo (16,3 millones).En Uruguay, una encuesta de Cifra revel que el 61% est en contra de la legalizacin.La delegacin brasileaOsmar TerraDiputado Federal PMDBEs mdico de profesin y tiene una postura coincidente con Dilma Rousseff en contra de la legalizacin de las drogas. Se reunir el mircoles 6 con la comisin de Salud del Senado para explicar los inconvenientes que causara la sancin de la ley del cannabis.Marcelo DornellesGobierno de Ro GrandeEs el presidente de la gremial del Ministerio Pblico de Ro Grande del Sur, y trabaja en la gobernacin del estado brasileo como subprocurador para Asuntos Institucionales. Es uno de los principales colaboradores de Terra en el tema.Vitore MaximianoAsesor de Dilma RousseffEs el principal asesor del gobierno de la presidenta Dilma Rousseff en el tema combate a las drogas. Brasil ha puesto el acento en su poltica contra la drogadiccin por considerar que el ingreso al consumo, aunque sea por la marihuana, abre el camino a otras drogas.Cannabis baja rendimiento estudiantilEl periodista Jairo Bouer, de O Estado de So Paulo, public en el sitio web de ese diario un estudio segn el cual una investigacin conocida en septiembre de este ao sobre el comportamiento de alumnos de escuelas privadas sugiere una relacin entre el consumo de marihuana y un mal desempeo de los estudiantes en la escuela Primaria.La pesquisa la llev a cabo el proyecto "Este Joven Brasileo", que lo viene implementando desde 2006 a travs del Portal Educacional, do Grupo Positivo, en 67 escuelas privadas pertenecientes a 16 estados de Brasil. En cuanto a la metodologa, cada uno de los 5.675 alumnos consultados respondi desde la sala de Informtica de su escuela una serie de preguntas on line en condicin de anonimato.Los datos que el periodista destac fueron los obtenidos gracias al cruce de respuestas sobre el rendimiento en la escuela vinculado con el uso de marihuana. En total, el 13% de los alumnos entrevistados haban sido reprobados en la escuela, y entre los que probaron marihuana el porcentaje subi a 31%, es decir un alumno de cada tres.Se presentaron tambin dificultades de concentracin en clase. Segn la compulsa, entre quienes usaron marihuana esa dificultad se acentu y lleg al 63%.En el artculo, el periodista afirma que "la pesquisa sugiere una posible relacin entre el consumo de marihuana y un mal resultado de los estudiantes y, tambin, entre el uso de la droga y las dificultades emocionales" de los estudiantes.

PUEDE QUE TE INTERESE Paraguay. Brasil. El 90% de la marihuana producida en Paraguay va a parar a Brasil Chile figura como el tercer pas de Sudamrica que ms consume marihuana despus de Brasil y Uruguay Saldr al mercado en Brasil helado de marihuana

La historia de la marihuana en BrasilMAC|Publicado:01/04/2012 19:00 CESTBreve resumen: La historia de la marihuana en Brasil tiene su propio comienzo con el descubrimiento del pas.La marihuana es una planta extica, no es un nativa de Brasil.Fue trada por los esclavos africanos, de ah su denominacin de humo-de-Angola.Su uso se extendi rpidamente entre los indigenas y esclavos negros, que empezaron a cultivarla.Siglos ms tarde, con la popularizacin de la planta entre los intelectuales franceses y los mdicos del ejrcito imperial britnico de la India, que llegaron a ser considerarla una excelente medicina indicada para muchos males.La demonizacin de la marihuana en Brasil comenz en la dcada de 1920 y en la Segunda Conferencia Internacional del Opio en 1924 en Ginebra, el delegado brasileo el Dr. Pernambuco, dijo a las delegaciones de otros 45 pases, la marihuana es ms peligrosa que opio. A pesar de los intentos anteriores, en el siglo XIX y XX, la persecucin de los consumidores de marihuana por la polica slo se convirti en constante y enrgica en la dcada de 1930, posiblemente como resultado de la decisin de la Segunda Conferencia Internacional del Opio.La primera encuesta en hogares de Brasil por el consumo de sustancias psicotrpicas, llevadas a cabo en 2001 mostr que el 6,7% de la poblacin entrevistada haba probado la marihuana al menos una vez en su vida, lo que significa que algunos millones de brasileos podran ser acusados y condenados a prisin por ese delito en contra de esta ley.En la actualidad, un proyecto de ley fue aprobado en el Congreso proponiendo la transformacin de la pena de prisinpor el uso / posesin de drogas (incluyendo marihuana) en medidas administrativas.