anecdota de mi viaje

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MI VIAJE A GUAYAQUIL (Ecuador) Era una mañana del mes de marzo de año 1998 esperaba el autobús que me llevaría hasta Ipiales y posteriormente abordar otro autobús que me llevaría has ecuador. Ese día me levanté más temprano que de costumbre, porque estaba muy emocionado, era la primera vez que viajaba hasta ese país y me sentía, sin embargo muy triste, debido a que nunca me había separado de mi familia, pero no dejé que eso me arruinara el viaje y seguí con mi ánimo como siempre. -¡Llegó el auto bus!- y mis nervios se elevaron hasta el cielo. Subimos ordenadamente al transporte y al abordar me dijeron en que silla me tocaba y dirigí hasta donde estaban los asientos de atrás. Yo, me senté junto a la ventana y cuando se empezó a mover el autobús me alegré mucho. Ya había viajado repetidas veces, pero esa fue una de las más significativas para mí. Cuando íbamos por carretera nunca había visto esos abismos y cuando el bus daba la curva me asustaba mucho recuerdo que hacía mucha fuerza hacia el lado contrario porque pensaba que el bus se iba a caer, ya que no veía los abismos con mucha frecuencia. Cuando íbamos llegando a pasto recuerdo que los demás pasajeros sacaban sus abrigos y yo me preguntaba por qué ya que desconocía el frio tan abrumador que hacía en esa ciudad, se me empezaron a partir los labios el frio era tan espantoso que lo único que pude hace fue sacar un buso que llevaba y colocarme encima del otro cuando llegue a Tulcán Ecuador como en ese tiempo la moneda colombiana valía mucho me compre un abrigo que me costó 85000 sucres que fue lo único que pude hacer para afrontar el frio hasta llegar a Quito.

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Page 1: Anecdota de Mi Viaje

MI VIAJE A GUAYAQUIL (Ecuador)

Era una mañana del mes de marzo de año 1998 esperaba el autobús que me llevaría hasta Ipiales y posteriormente abordar otro autobús que me llevaría has ecuador. Ese día me levanté más temprano que de costumbre, porque estaba muy emocionado, era la primera vez que viajaba hasta ese país y me sentía, sin embargo muy triste, debido a que nunca me había separado de mi familia, pero no dejé que eso me arruinara el viaje y seguí con mi ánimo como siempre. -¡Llegó el auto bus!- y mis nervios se elevaron hasta el cielo. Subimos ordenadamente al transporte y al abordar me dijeron en que silla me tocaba y dirigí hasta donde estaban los asientos de atrás. Yo, me senté junto a la ventana y cuando se empezó a mover el autobús me alegré mucho. Ya había viajado repetidas veces, pero esa fue una de las más significativas para mí.

Cuando íbamos por carretera nunca había visto esos abismos y cuando el bus daba la curva me asustaba mucho recuerdo que hacía mucha fuerza hacia el lado contrario porque pensaba que el bus se iba a caer, ya que no veía los abismos con mucha frecuencia. Cuando íbamos llegando a pasto recuerdo que los demás pasajeros sacaban sus abrigos y yo me preguntaba por qué ya que desconocía el frio tan abrumador que hacía en esa ciudad, se me empezaron a partir los labios el frio era tan espantoso que lo único que pude hace fue sacar un buso que llevaba y colocarme encima del otro cuando llegue a Tulcán Ecuador como en ese tiempo la moneda colombiana valía mucho me compre un abrigo que me costó 85000 sucres que fue lo único que pude hacer para afrontar el frio hasta llegar a Quito.

Bajamos del autobús e inmediatamente me fui a buscar un hotel. Cuando entre al edificio y me asignaron mi habitación al primer lugar al que fui fue al baño porque me sentía fastidiado por el largo viaje claro, era un lugar muy amplio y radiante, todos los era lujoso, desde los servicios hasta las llaves de agua y los dispensadores de jabón, supongo que para que no toques nada, después de eso me dirigí hacia la ducha donde al abrir la llave me queme porque no gradué la llave que era caliente y fría después Caminé por las calles y fue un poco confuso debido a que es muy grande, de hecho me perdí varias veces del hotel donde me hospedaba, pero aún así fue una gran experiencia.

Cuando Llegamos a la ciudad de Guayaquil Ecuador me dirigí a la casa donde se estaba hospedando mi primo, al llegar me dieron un gran recibimiento pues ya me esperaban… recuerdo que el primer día llegue a descansar en la noche salimos a pasear por el centro… a los locales comerciales grandes, subíamos y bajábamos por las escaleras eléctricas viendo muchas cosas Al día siguiente nos dirigimos donde la pasamos muy bien de hecho nos tomamos fotos para esa época no

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existía la tecnología de ahora y así fueron transcurriendo día tras día mi estadía en tan maravilloso país, quería estudiar medicina ya que ese país el estudio era muy económico realice un pre medico pero por andar de fiesta en fiesta con mi primo y unos amigos me gaste toda la plata que llevaba para mis estudios.

Esta fue unas de mi más gran experiencia que he tenido y a la vez muy divertida.