visita atapuerca 24 de octubre de 2014. parte 1: los yacimientos

Objetivo «Atapuerca»

I24 de octubre de 2014

I.E.S. La Cabrera

[FYC-PSI]

Departamento de Filosofía

Día soleado; temperatura ideal. Viaje sin incidentes: ¡Listos para la

visita de los yacimientos!

… A la entrada de la «trinchera». Por motivos de seguridad, tuvimos que protegernos nuestra principal «herramienta de trabajo»…

Esperando los gorritos y el casco. (¡Qué horror: los peinados corren peligro…!)

Se nota que son de 2º de Bachillerato: gente seria y responsable.

Estrechanzo lazos… de amistad.

¡Sonrían, por favor!

Un pequeño ejército de “cascos blancos”Se adentra por la trinchera, en buscade sus orígenes.

Se excavó estatrinchera para un pequeño ferrocarrilminero que apenas prestó servicio

Cascos blancos:visitantes.

Casco rojo:Rosana (nuestraexcelente guía)

Corte donde seaprecian los estratosSima del elefante

La Gran Dolina (donde aparece el Homo Antecessor) tiene 18 metros de sedimentos con 11 niveles: restos desde hace 1.000.000 de años hasta hace 200.000.

¡Mirad, mirad!

Huesos que hablan y cuentan muchas y apasionantes historias: hay que ser un especialista para interpretar lo que nos dicen.

«Ser o no ser» con una réplica del cráneo de «Miguelón» en las manos.

Una infección en un diente acabó con su vida.

Otros de su especie cuidaron de él: ¡había conductas sociales!

Miguelón

Andamios, un destornillador, un cepillo de dientes, una brocha… y mucha paciencia e ilusión.

«Excalibur» (réplica): el famoso bifaz de los yacimientos de atapuerca

«Excalibur»: la navaja suiza del paleolítico: servía para todo.

Pudimos contemplar el original en el Museo.

Atentos, alumnos y alumnas siguen las originales explicaciones

Atentos, alumnos y alumnas siguen las originales explicaciones

Nuestra guía cuenta con la asistencia de algunas alumnas y alumnos colaboradores

Alumno y alumnas de Psicología con su profesor…

Alumno y alumnas de Psicología con su profesor, de cuerpo entero

De los yacimientos, nos fuimos a Burgos: un paseo, comida y, por la

tarde, nos queda otra visita interesante… (2ª parte)