unidad didáctica vi fÍa del uaje - materiales de … · sobre la estructura del lenguaje oral, la...
Post on 02-Oct-2018
220 Views
Preview:
TRANSCRIPT
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
2
1. Conceptos de Lenguaje
1.1. El Lenguaje y la Comunicación Humana
Si encontrásemos un animal que hablase y pudiese comunicar sus pensamientos,
sus ideas y sus sentimientos a los seres humanos, dudaríamos que fuese puramente un
animal y le concederíamos, al menos, un alto grado de humanidad. El lenguaje es el
principal instrumento que tenemos los seres humanos para comunicarnos entre nosotros,
hasta el extremo de ser una de las características más netamente humanas de las que
tenemos. No sin razón Aristóteles calificaba al ser humano como “animal capaz de
hablar”, siendo para él la locuacidad una característica intrínseca y diferenciadora del
ser humano.
El lenguaje es uno fenómeno humano, como todos los fenómenos humanos,
sumamente complejo y que de siempre ha requerido la atención de la Filosofía. Esto se
debe a dos motivos, el primero es que la Filosofía utiliza el lenguaje como instrumento
de comunicación y como tal es sometido al pensamiento filosófico, y el segundo motivo
es que el lenguaje no es transparente, sino que tiene muchos elementos que pueden
propiciar la apariencia. La preocupación de la Filosofía por el lenguaje cuajó en el
nacimiento, a principios del siglo XX, de la Filosofía del Lenguaje.
A pesar de lo que hemos dicho en los párrafos anteriores, la comunicación por
medio del lenguaje no es una capacidad privativa del ser humano. Lo que si es propio
del ser humano es el alto de nivel de complicación que su lenguaje ha alcanzado, así
como la alta formalización que ha adquirido, pues emplea un conjunto de elementos que
no guardan ninguna relación con el objeto al que denotan.
1.2. Concepciones generales sobre el lenguaje humano
1.2.1. Origen divino del lenguaje
Se ha mantenido, en las tradiciones más antiguas, que el lenguaje era un regalo o
un don de la divinidad (o divinidades) a los seres humanos. Normalmente ser tenía la
idea que la divinidad transmitía un lenguaje perfecto que después se desvirtuaba por la
acción de los seres humanos.
1.2.2. Concepción lógico-especular del Lenguaje
Puede que éste haya sido el concepto que más trayectoria ha tenido y tiene de la
Filosofía del Lenguaje (naciendo en líneas generales con Platón y siendo retomado en el
siglo XX por Wittgenstein). Parte de la idea de que el Lenguaje refleja la realidad, es
decir, es espejo (speculum) de la realidad.
En un principio mantuvieron la isomorfía de todo el lenguaje con toda la
realidad, una postura que fue cayendo ya en la Edad Media, para centrarse en la
isomorfía entre las estructuras del Lenguaje, de la Realidad y de la Lógica. De tal forma
que el conocimiento de la estructura del Lenguaje conlleva el conocimiento de la
estructura de la realidad, y viceversa.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
3
1.2.3. Concepción convencional del Lenguaje
Ésta concepción del Lenguaje también puede encontrar su origen en la
Antigüedad, pero es a partir del siglo XX cuando se torna en la concepción dominante.
La relación entre el Lenguaje y la Realidad es una convención, un acuerdo, sin que haya
ninguna relación que no sea el mero acuerdo. La consecuencia es que el estudio del
Lenguaje solamente nos da conocimiento de éste, pero no de la realidad.
1.2.4. Concepción generativa del Lenguaje
El creador de esta concepción es el lingüista norteamericano Noam CHOMSKI.
Se mantiene que las estructuras profundas del Lenguaje son comunes a todos los seres
humanos, independientemente de las lenguas concretas que se conozcan y que se
hablen.
1.2.5. Lenguajes naturales y lenguajes artificiales
Los lenguajes naturales son creados a partir de un proceso histórico, mientras que la
creación de un lenguaje artificial se da en un momento concreto y por un autor o autores
determinados. Los lenguajes ratifícales tiene la ventaja de precisión semántica, permiten
la investigación de las estructuras y es susceptible de hacer “cálculo” con él.
1.3. Oralidad y Escritura
Para analizar la evolución del lenguaje en la sociedad vamos a partir de los
estudios que los lingüistas Eric Havelock, Walter Ong y Vladimir Llurya realizaron
sobre la estructura del lenguaje oral, la transición del lenguaje oral al lenguaje escrito y
el tipo de sociedad corresponde a las sociedades orales y a las sociedades con escritura
1.3.1. Oralidad primaria
Pilgram realizó un amplio estudio titulado El epíteto en Homero. Descubrió que
todos los epítetos no sólo tenían una función poética, sino también cognoscitiva, porque
realmente Homero recogía diversas tradiciones orales previas a su composición. De esta
forma la primera gran obra escrita de la historia de la literatura occidental se convierte
en una recopilación de obras literarias orales.
Havelock considera que la cultura mediterránea era predominantemente oral,
siendo símbolo del cambio de la oralidad a la escritura la obra de Platón. La obra de
Platón era fundamentalmente de estructura escrita, es decir, que no reproducían
sistemáticamente estructuras orales, aunque se configuren como diálogos.
Las características de un lenguaje estrictamente oral son:
- Lenguaje reiterativo: las composiciones orales repiten una y otra vez las mismas
estructuras y contenidos, para facilitar la memoria, ya que no poseían medios de
registro de los conocimientos.
- El lenguaje se configura de forma poética, pues la métrica y el ritmo posibilitan
también una mejor memorización.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
4
- Lógicamente la memoria tiene una gran importancia. La cultura que se tiene y los
conocimientos y habilidades son los que se saben de memoria, ya que no había
medios materiales que pudieran complementar y suplir lo que se olvide.
- El lenguaje oral huye de los conceptos abstractos, prefiriendo los adjetivos. Por
ejemplo, en vez de hablar de “bondad”, hablará de “hombre bueno”.
- El lenguaje es conservador y mantiene un vocabulario limitado, suficiente para
cubrir las necesidades sociales.
Las sociedades estrictamente orales son sociedades conservadoras, reiterativas
en sus tradiciones, situadas en torno a pequeños núcleos de población. La figura del
maestro es de capital importancia en todos los ámbitos de la sociedad, pues es él quién
tiene los conocimientos y es él quién los transmite a sus discípulos.
1.3.2. Sociedad de escritura
El paso a la escritura fue uno de los mayores adelantos tecnológicos en la
historia de la humanidad. Para hacer posible la escritura fue necesario desarrollar un
sistema abstracto de signos que no guardaban ya una relación “icónica” con sus
referentes en la realidad. Junto a ello aparecen los materiales sobre los que se escribe,
bien por rozamiento como por impregnación.
- El lenguaje deja de ser poético y se convierte en analítico: aparecen conceptos
abstractos.
- Al existir posibilidades técnicas de almacenamiento de conocimiento, la memoria y
el aprendizaje por medio del maestro pierden relevancia. Cuando se quiere
saber algo o bien se ha olvidado se recurre a los textos. El aprendizaje deja de ser
oral, pues los maestros y sus discípulos se preocupan por recoger en textos escritos
las enseñanzas tanto para que no se pierdan como para que no se tergiversen.
- La psicología que se genera es menos reproductiva y más investigadora, pues el
registro escrito de conocimientos permite seguir conociendo desde lo que ya se
conoce, y no emplear tanto tiempo en aprender de memoria todo el conocimiento
anterior.
- El lenguaje se convierte en lógica, esto es, las estructuras del lenguaje se
convierten en las estructuras del pensamiento correcto y válido.
- La sociedad del lenguaje escrito es una sociedad que se abre a la comunicación. Al
haber registros escritos de otras culturas, los textos se pueden trasladar a lugares
distantes y ser conocidos por otros grupos, sin necesidad de cambiar de lugar de
residencia ni de y aprender junto a un maestro.
1.4. La modificación lingüística de la realidad
El lenguaje condiciona nuestra construcción de lo que pensamos que es la realidad. De
hecho el “eufemismo” siempre ha existido para llamar con palabras amables a las cosas y
circunstancias más desagradables.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
5
Se parte del presupuesto de que la forma que tenemos para referirnos a las diferentes
realidades hace que éstas aparezcan de una forma o de otra ante nuestros ojos, de modo que el
cambio en la lengua conllevaría poder cambiar la realidad.
Los términos no son neutrales, sino que buena parte están marcados en un sentido
positivo o negativo o que son más contundentes o menos. De tal manera que podemos intentar
disfrazar la realidad por medio del lenguaje.
Pero lo mejor es verlo con algunos casos:
a) De lo que no se habla, no existe
No mencionar algo que se considera negativo y conseguir que desaparezca de los temas
de los que se habla, hace que desaparezca de la memoria y así se puede llegar a negar incluso su
existencia.
Entre los romanos existía una pena que se denomina damnatio memoriae. Consistía en
que era borrado el recuerdo del condenado de todo vestigio que hubiera dejado en su existencia.
El objetivo era reducirlo a la inexistencia.
Entre muchos, el emperador Domiciano, tras su deposición y asesinato, fue condenado a
esta pena y hay numerosos restos arqueológicos que muestran su nombre borrado de las
inscripciones.
La insistencia de los sectores feministas a favor del empleo de un lenguaje inclusivo no
se debe a desconocimientos lingüísticos, sino a que por “cosas de la lengua” el género femenino
no se emplea. No referirse a alguien es obviar su existencia.
b) Términos favorables para las cosas/personas favorables
A lo que se quiere fortalecer se le otorgan términos favorables, aunque no se entre en la
verdad de la proposición. Por ejemplo, para los españoles nuestra selección de fútbol siempre
tendrá una calidad técnica superior, aunque no se define qué es eso de la “calidad técnica” ni
cómo se mide.
c) Términos peyorativos para las cosas/personas desfavorables
Es lo contrario al anterior punto. Emplearemos términos peyorativos, negativos o
desfavorables para las cosas, circunstancias o personas desfavorables.
Un examen que se suspende es siempre un examen difícil, los que no piensan como
nosotros son ignorantes, los ejércitos de los que no son nuestros aliados son máquinas de hacer
la guerra o fuerzas de agresión y los ejércitos de nuestros aliados son fuerzas defensivas o de
liberación.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
6
d) La repetición consolida el mensaje
Decía el infame Goebbels que una mentira repetida un millón de veces termina por
convertirse en verdad. La repetición de una mentira sin contestación en contra llega por hacer
que se asuma como algo normal y luego como algo verdadero.
e) El uso de la negación
Negar una palabra tiene menos fuerza que emplear tu antónimo. En vez de hablar de
“decrecimiento” ahora se habla de “crecimiento negativo”; en vez de decir que uno “ha
suspendido”, dice que “no ha aprobado”.
f) Simplificación binómica
La adjetivación se reducen a binomios: bueno o malo, todo o nada, blanco o negro o
amigo o enemigo. Toda la realidad queda simplificada en una lengua binómica y por tanto
radicalmente simple; irrealmente real.
2. Lengua, Sociedad y Estado
2.1. Las variedades lingüísticas
2.1.1. Lengua, idioma y dialecto
La distinción entre lenguas o idiomas es común y también lo es la distinción
entre lengua o idioma y dialecto.
Una lengua, así denominaremos a los idiomas, es común a un grupo de hablantes
y está establecida en todos los niveles. La lengua representa la corrección y está
sostenida por un cuerpo de normas lingüísticas obligatorias.
Toda lengua tiene variedades a lo largo del territorio en el que se emplea, esas
variedades se presentan en todos o en algunos de los niveles y esas variedades reciben la
denominación de dialectos. Los dialectos son en consecuencia desviaciones de la
norma, esto es, variedades incorrectas de la lengua.
Además hay que tener en cuenta que hay factores subjetivos y circunstanciales
que afectan a la variedad de la lengua que se utilice. Se han detectado variedades
dependiendo de la condición social del hablante, los sociolectos; hay variedades dentro
de la lengua que se emplean según el contexto más formal o menos, escrito u oral de la
comunicación y reciben el nombre de registros.
En resumen. Hay una lengua que es la forma correcta de comunicación entre sus
hablantes, con un número de registros contextuales y, además, nos encontramos con
dialectos y sociolectos que forman variedades habitualmente incorrectas de la lengua.
Ésta es la descripción habitual y esperable de las relaciones entre las diversas
variedades lingüísticas. Pero no es la única descripción y explicación posible y desde
luego en la mayoría de los casos está lejos de ser la verdadera.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
7
Las lenguas no se implantan a partir de la nada, sino que normalmente son fruto
de la evolución histórica y cultural. Las variedades concretas que se hablan en cada
momento histórico dependen de las precedentes y no es raro que en una misma región
presenten pequeñas diferencias con las variedades más cercanas y solamente las
diferencias son grandes con las variedades más lejanas. A este fenómeno se le denomina
“continuo dialectal”.
No todas las variedades lingüísticas se encuentran en situación de igualdad. Si
una variedad es la hablaba en el lugar donde reside el poder, por los sectores con mayor
capacidad económica o por encontrarse más extendida es probable que tenga un mayor
prestigio que el resto de las variedades. El prestigio hace que una variedad sea vista
como mejor y más deseable que las otras y la sitúa en una situación de ventaja frente a
las demás. La ventaja es fruto de factores no lingüísticos, aunque algunas veces se viste
de argumentos lingüísticos.
Dentro de un continuo dialectal las, variedades más distantes entre sí presentan
problemas de intercomunicabilidad, de modo que en muchas ocasiones se busca una
forma de comunicación común a todos y se hace dándole preeminencia a una variedad
sobre las demás. La elección recae, salvo excepciones, en una variedad que previamente
tenga un fuerte prestigio.
2.1.2. Estandarización y oficialidad
2.1.2.1. Estandarización
Una variedad lingüística que tiene prestigio y que se impone a las demás
variedades como forma superior de comunicación entre los hablantes del continuo
dialectal o incluso de una entidad política determinada tiene que someterse al proceso
de estandarización.
La estandarización no es otra cosa que elegir qué normas habrá de regir en esa
variedad dialectal que ahora vamos a transformar en dialecto preeminente o variedad
estándar. Aunque hay ocasiones en los que no hay una sola estandarización sino dos
(como el valenciano y el catalán) e incluso más (como las admitidas para el inglés en los
principales países anglosajones).
Hay que darle un nombre a la variedad que se va a estandarizar. Parece obvio,
pero es igualmente complejo porque la denominación suele aludir a realidades sociales
y política y no solamente a procesos lingüísticos. Los pakistaníes llaman urdu a la
misma variedad que los indios llaman hindi. Nuestra variedad estándar es llamada tanto
“castellano” como “español” y hay cierta polémica entre quienes quieren sacar
consecuencias políticas del uso de una u otra denominación.
Después hay que optar por un modo de escritura concreto. Si la variedad que
se selecciona procede a su vez de un estándar escrito, lo normal será que adopte el
alfabeto de estar forma. La elección de la forma de la escritura tiene que una cuestión
técnica (el que mejor responda a las necesidades del estándar), pero también simbólica
ya que un alfabeto relaciona lenguas y formas de escrituras entre sí y crea una
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
8
conciencia de cierta comunidad. Podemos diferenciar en general escrituras alfabéticas,
silábicas e ideográficas.
Antes de la desintegración de Yugoslavia se consideraba que el serbo-croata era
la lengua que se hablaba tanto en Serbia, Bosnia-Herzegovina, Croacia y
Macedonia, así como conocida por los habitantes de Eslovenia y Macedonia.
Todos coincidían en que era la misma variedad estándar o lengua pero en el
norte del país se escribía en alfabeto latino y en el sur en alfabeto cirílico. Los
pakistaníes escriben el urdu-hindi con letras árabes, para reforzar su identidad
islámica, mientras que en La India se utiliza la escritura devanagarí. Tras el fin
del Imperio Otomano y la proclamación de la República en Turquía se adoptó el
alfabeto latino (con alguna peculiaridad) para el turco en sustitución del alfabeto
árabe hasta entonces empleado. El persa era escrito en su propia grafía, hasta que
ésta fue sustituida por la árabe, con algunas adiciones, pero en Tayikistán para el
persa se emplea el alfabeto cirílico también con algunas modificaciones
(previamente habían empleado un alfabeto latino adaptado de 1928 a 1939 y
antes de 1928 se hubo utilizado la alfabetización árabe).
Las diversas lenguas chinas utilizan la misma escritura ideográfica, que tomó
también el japonés antiguo, dándose el curioso fenómeno de que los hablantes de
diferentes lenguas podían entender por escrito pero no de forma oral.
Posteriormente hay que definir cada uno de los niveles de la lengua como son el
fonético-fonológico (pronunciación), la morfología (construcción de las palabras), la
sintaxis (construcción de las oraciones) y el nivel léxico-semántico (significado de las
palabras).
La pronunciación es una de las opciones más importantes ya que de ella
dependerá que los hablantes de las diferentes variedades para los que se les construye la
variedad estándar puedan comunicarse sin dificultades. De todas formas en la parte de la
lengua donde se dan más variedades es en la pronunciación proliferando los acentos
locales, regionales y sociales en casi todas las lenguas.
Tanto la morfología como la sintaxis exigen opciones fundamentales pues tocan
las entrañas de las variedades. En los procesos de estandarización se intentan tomar las
opciones más compartidas entre las diversas variedades, pero dado que no todas las
variedades tienen los mismos hablantes, prestigio o grado de elementos en común no
puede producirse, a veces intencionalmente, el soslayamiento de algunas variedades en
favor de otra u otras.
Lo mismo ocurre en el nivel léxico-semántico, aunque el recurso a la homonimia
mitiga este problema. En este nivel nos encontramos con dos cuestiones específicas: la
modernización y el purismo.
En el proceso de estandarización en muchas ocasiones hay que aumentar el
léxico para hacer apta a la variedad que se está estandarizando de responder a las
realidades actuales y también para convertirse en una lengua científica y técnica. La
modernización del léxico puede hacerse a través de préstamos de otras lenguas o por
medio de neologismos a partir de raíces propias.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
9
En este nivel es recurrente la aparición de movimientos puristas que intentan
eliminar las palabras de otras lenguas recibidas en préstamo, aunque muchas veces es un
ideal irrealizable porque el préstamo es un mecanismo de ampliación del vocabulario
absolutamente necesario.
Veamos el conflicto lingüístico noruego que gira precisamente en torno al
purismo. De 1521 a 1814, Noruega estuvo bajo el gobierno danés. Cuando
Noruega se separó de Dinamarca las diferencias entre la lengua hablada por ellos
y la hablada por los daneses eran mínimas, parecidas a las diferencias que había
entre los propios daneses.
Cuando finalmente Noruega se independizó en 1905, en este caso de Suecia, se
planteó la cuestión de cuál habría de ser el estandar escrito en Noruega. Todos
aceptaban la variedad dialectal en Noruega y nadie quería eliminarla, pero había
que encontrar una norma escrita común a todos.
Hubo dos propuestas para la norma escrita. La primera se le denomina Bokmål y
sigue las pautas de noruega-danés imperante en las zonas urbanas cuando
finalizó la unión con Dinamarca y que a finales del siglo XIX ya se enseñaba en
las escuelas. Treinta años antes el lingüista Ivar Aasen publicó una norma escrita
en la que dominaban los elementos que distinguían las variantes noruegas,
especialmente las de las zonas rurales del oeste del país con la intención de dotar
a la lengua noruega de una identidad propia, diferenciada de la danesa; recibe el
nombre de Landmål o Nynorsk.
Hubo un gran conflicto en el que las posturas fueron radicalizándose,
lingüísticamente, y aparecieron nuevos estándares escritos aún más distanciados,
como el Riksmål para el estándar cercano al danés y el Høgnorsk para el
estándar más autóctono.
El Parlamento y el Gobierno intentaron encontrar un vía intermedia eliminando
de ambas versiones lo que más les diferenciaba, pero sin demasiado éxito. El
intento de crear una norma escrita aceptable para todos, el Samnorsk, fue
abandonada en los años setenta del siglo XX.
La elección de qué estándar se enseña en las escuelas fue dada a ésta
primariamente y en la actualidad a los municipios. Ambos son oficiales, aunque
el Bokmål es seguido por el 85%-90% de los noruegos. Curiosamente ambas
normas tienen una misma autoridad reguladora. Para la lengua hablada se
considera estándar, especialmente para la enseñanza a extranjeros, la variedad
dialectal de Oslo.
Evidentemente no hay que crearlos de la nada porque la propia evolución de la
variedad lingüística de la que se trate habrá establecido esos niveles, pero ahora hay que
explicitar las reglas hasta ahora implícitas, hacer que estas reglas sean lo más general
posible, resolver dudas y tomar opciones importantes.
La principal opción que se toma a la hora de realizar la estandarización de una
variedad para que sea común a todo un continuo dialectal es si se va a utilizar una sola
variedad, si realmente se va a hacer con una variedad dominante y pequeñas
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
10
aportaciones de otras o bien la estandarización va a crear una nueva variedad a partir de
varias diferentes.
Un ejemplo del primer caso es el italiano estándar que es el toscano convertido
en lengua para toda Italia. Del segundo caso podemos citar varios ejemplos, el
más cercano es el vasco estándar que fue fruto de la estandarización del dialecto
guipuzcoano con añadidos de los otros dialectos vascos, que en ese momento era
la variedad vasca que contaba con más hablantes. El alemán es fruto de la
creación de una variedad que superara las diferentes variedades regionales y,
aunque en un principio se empleó preeminente el alto sajón, fue incorporando
elementos de casi todas las variedades alemanas hasta que a finales del siglo
XIX se cerró el proceso de establecimiento del Hochdeutsch o alto alemán.
La elección de las reglas en cada uno de los niveles es la clave del éxito de la
estandarización para darle un instrumento de intercomunicación a un continuo o para
imponer una variedad sobre las demás. El grado de cercanía a las otras variedades, el
prestigio de la variedad estandarizada y/o la fuerza jurídica son variables a la hora de
que el planeamiento lingüístico tenga mayor o menor éxito, pero de esto nos
ocuparemos más adelante.
Es habitual que la estandarización sea el paso previo a la oficialización o al
menos al respaldo jurídico de una lengua, pero primariamente es el mejor proceso para
poder conservar una lengua (entendida como conjunto de variedades de un continuo) ya
que crea una variedad para poder ser enseñada y aprendida sin necesidad de que sea
aprendida “maternalmente” y que no entraña en los hablantes los problemas que tiene la
fragmentación de variedades.
Además las variedades estándares suelen transformarse también en las
variedades literarias, de modo que es la forma de expresión que se emplea para escribir,
de modo que rápidamente comienza a generarse una cultura escrita a través de la
variedad estandarizada. Otro efecto que produce la estandarización es facilitar la
traducción a otras lenguas y la creación de diccionarios bilingües.
Un ejemplo claro de estandarización sin pretensiones de oficialidad y que ha
permitido la pervivencia de una lengua ha sido el yiddish. El yiddish o
judeoalemán (fruto de la síntesis entre variedades alemanas, con el hebreo y
algunos elementos eslavos) era la lengua usual de la mayoría de los judíos de
Europa Central y de Europa del Este y hablada por millones de personas.
En las primeras décadas del siglo XX un grupo de intelectuales fundaron el
YIVO, una institución que estandarizó el yiddish. Tras el Holocausto el hecho de
que el yiddish estuviera estandarizado permitió su conservación tras la pérdida
de las amplias comunidades que lo transmitían ordinariamente. Actualmente lo
hablan más de un millón y medio de personas hablan yiddish de los cuales
solamente el 10% lo ha aprendido como lengua materna.
Algunos autores establecen diferencias entre variedades estandarizadas y
variedades normadas, algo que nosotros hemos identificado. Para ejemplificar la
diferencia se refieren al castellano donde ha habido y hay estándares que no
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
11
corresponden con la norma, aunque en la actualidad se trabaja por acercar la norma a los
estándares.
2.1.2.2. Estandarización y revitalización
Cuando un continuo está compuesto por variedades no estandarizadas, que no se
aprenden en el sistema educativo, que no tienen ni protección ni mucho menos
oficialidad, donde no hay incentivos a que las personas aprendan y hablen esas
variedades y que incluso hubiera severos problemas de intercomprensión entre muchas
de las variedades del mismo continuo dialectal.
La posibilidad de enseñar y de aprender una lengua es “condicio sine qua non”
para que pueda sobrevivir y solamente se optimiza el esfuerzo y se empiezan a acumular
incentivos positivos si hay una estandarización común a la totalidad del continuo
dialectal. Que además haya una política de oficialización y de acción positiva es
determinante para la revitalización de una lengua.
La mayoría de las lenguas del mundo están en peligro de desaparecer: tienen
pocos hablantes, escaso prestigio y menos incentivos aún para aprenderlas y emplearlas.
Solamente razones muy fuertes que mezclan lo cultural con lo político posibilitan
movilizar los recursos precisar para acometer la revalitación de una lengua. Si esto es
cierto con las variedades más fuertes es fácilmente imaginable que la primera
desaparición se concentra en las variedades más débiles.
El caso del euskera
Uno de los mejores ejemplos en la revitalización de una lengua lo encontramos
en España, en concreto en la lengua vasca.
Modernamente se consideraba que había cinco variedades dialectales vascas
(suletino, navarro-labortano, labortano, guipuzcoano o central y vizcaíno u
occidental) y además cada uno de estos dialectos o variedades presentaba
subdialectos. Entre el suletino y el vizcaíno no había comprensión mutua.
Curiosamente estas variedades lingüísticas tenían registros escritos y algunas de
ellas abundante literatura oral y una pequeña literatura escrita.
En 1968 se inició el proceso de estandarización que terminaría con éxito. En los
años siguientes se publicaron varias obras de las normas lingüísticas hasta que
en 1982 vio la luz la gramática y nació lo que hoy se conoce como euskara batua
o vasco unificado.
El hecho de que dos comunidades, la vasca y la navarra, hicieran del vasco (en
su variedad estandarizada) su lengua oficial, se utilizase en los medios de
comunicación o lo introdujeran en la enseñanza e incentivaran su conocimiento
(condición para acceder a la función pública) ha producido un aumento del
número de hablantes, conocedores y del uso privado, social e institucional de
esta lengua. En la actualidad se estima que hay un millón de personas capaces de
comunicarse en vasco.
El caso del neohebreo
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
12
El hebreo desapareció como lengua de uso cotidiano mucho antes de la
destrucción del Segundo Templo en el 74 d.C. En Palestina, como en buena
parte del Oriente Medio se utilizaba el arameo y el griego. El hebreo se
transformó en una lengua no hablada, solamente escrita, para el culto de la
religión judía, para los escritos teológicos, académicos y literarios.
Con la aparición del movimiento Sionista, Eliezer Ben Yehuda propuso la
recuperación del hebreo como lengua propia de los judíos que habitaban en
Palestina. Ben Yehuda, asistido por un grupo de lingüistas, adaptaron el hebreo
bíblico a las necesidades que debía satisfacer una lengua moderna, pero los
préstamos adoptados procedían de otras lenguas semíticas y no lenguas europeas
pese a la procedencia de todos ellos.
El neohebreo se impuso al yiddish como lengua oficial del Estado de Isarael
porque no era propio de ninguna comunidad de la diáspora y porque ya era de
uso común en Palestina. Es el único caso en el que una lengua muerta durante
dos milenios vuelve a ser una lengua hablaba y con millones de hablantes que la
han aprendido como lengua materna y una cultura que la enriquece
continuamente.
2.1.3. El regulador lingüístico
El proceso de estandarización de una variedad no finaliza cuando se ha
establecido el corpus. La estandarización es un proceso continuo y en muchos casos ha
sido confiado a una institución lingüística, en ocasional con carácter oficial o oficioso,
nacional o internacional.
El primer modelo de regulador lingüístico que nos encontramos es el de
Academia, inspirado en la Academia Francesa. La academia es una institución estatal a
la que se encomienda la definición de lo que es la variedad estándar, que también es la
oficial, y ésta lo hace mediante la edición de gramáticas, diccionarios y otros textos
normativos.
A pesar de que la lengua francesa es oficial en numerosos países el regulador
sigue siendo únicamente la Academia Francesa, salvo en la provincia canadiense
de Quebec donde existe una oficina para la lengua francesa dependiente del
gobierno provincial.
La lengua castellana tuvo como único regulado a la Real Academia Española,
pese a la existencia de otras academias en los otros países hispanohablantes, hasta que
a finales de los años noventa del siglo XX se acordó asociarse y compartir la labor de
regulador lingüístico. La Academia de la Lengua Persa (Irán) cuenta entre sus miembros
a especialistas en lengua persona de los otros países donde se habla esta lengua
(Tayikistán, Afganistán y Uzbekistán).
Para el alemán o para el nederlandés se han establecido, a través de tratados
internacionales, órganos intergubernamentales para hacer de regulador lingüístico
para todos los Estados en los que se hablan estas lenguas. Por el contrario, para el
portugués hay un tratado, el Acordo ortografico, pero Brasil, Portugal, Mozambique,
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
13
Angola, Cabo Verde, Guinea-Bissau y Santo tomé y Príncipe mantienen su propios
reguladores estatales, aunque la norma común es establecida y revisada por medio de
tratados internacionales.
También se ha el caso contrario: un estándar con varios reguladores en
diferentes estados y que no operan coordinadamente. Un caso paradigmático es el
chino mandarín, que es lengua oficial en la República Popular de China, en la República
de China, Singapur y Malasia, que en cada uno de estos Estados tiene un regulador
propio y que actúa según sus propios criterios. Algo parecido sucede con el Swahili que
tiene dos reguladores (Tanzania y Kenya) o el sueco (en Suecia y Finlandia).
En otras ocasiones el regulador es una institución privada como es el caso ya
referido del yiddish y, incluso, entidades como universidades, medios de comunicación
o empresas editoras de diccionarios, gramáticas y otras obras de lingüística, como
sucede en el inglés.
2.3. Estandarización y motivaciones religiosas
Los misioneros cristianos que fueron a todos los lugares del mundo fueron,
aunque sin pretenderlo, agentes de estandarización de numerosas lenguas. Dadas las
necesidades de predicación, enseñanza y organización de las nuevas comunidades
cristianas, necesitaron aprender la lengua de los misionados y transmitir el
conocimiento. La estandarización de muchas de estas lenguas se realizó por esta
finalidad religiosa.
Un caso llamativo es el guaraní, oficial en Paraguay, Bolivia y la provincia
argentina de Corrientes. Los jesuitas establecieron un método de evangelización
de los indígenas basado en la separación de estos de los españoles, con la
intención de protegerlos de los abusos de los colonizadores. Toda la
evangelización se producía en la lengua indígena, salvo los actos de culto que
eran en latín.
Los indígenas vivían en ciudades en la zona selvática, edificadas por ellas,
gobernadas por ellos y en las que la lengua que se empleaba era un guaraní
común o unificado elaborado por los jesuitas a partir de las variedades
existentes. Pronto se imprimieron libros en guaraní y la estandarización permitió
la enseñanza de la lengua fuera de las sociedades tradicionales, la posibilidad de
que hubiera una tradición escrita y el prestigio social, que hace que actualmente
el 90% de los paraguayos sean bilingües guaraní/castellano.
Dentro de las lenguas muertas hay un fenómeno que son las llamadas lenguas
sagradas. Las lenguas sagradas son aquellas que eran lenguas vivas en un momento
determinado y que por ello se incorporaron a los textos sagrados y a los ritos religiosos
y que, pasados bastantes siglos, han dejado de hablarse perviviendo únicamente en el
ámbito relacionado con lo religioso.
El latín es un ejemplo paradigmático, pues hasta el siglo XX fue la lengua
universal de la mayor parte de la liturgia católica, en la que escribían la mayoría
de las obras teológicas y en la que se daban las comunicaciones internas, aunque
la mayoría de los católicos no supieran latín. El latín dejó de aprenderse como
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
14
lengua materna no por abandono, sino por evolución a partir de sus variedades
“vulgares”, perviviendo las variedades literarias como lengua sagrada o como
lengua científica (la Botánica sigue nombrando las especies en latín). El mismo
caso es el del griego o el arameo siriaco en el Cristianismo oriental, el eslavo
eclesiástico en las iglesias eslavas, el ge’ez entre los ortodoxos etiopes o el
copto entre los cristianos egipcios.
En el mundo musulmán el árabe clásico (al-fusha) es la lengua del Corán y se
emplea para cuestiones rituales y para escritos religiosos. Lo mismo sucede con
el hebreo dentro de la mayor parte del Judaísmo, pues es la lengua de la Torá y
de la liturgia sinagogal. Otros casos son el sánscrito y el tamil para el
Hinduísmo o el tibetano clásico para el Budismo de los lamas.
Las lenguas sagradas o litúrgicas se mantienen para separar el ámbito de lo
profano del ámbito de lo sagrado, de modo que a lo sagrado le corresponde una variedad
lingüística que solamente se utiliza en ese ámbito y que habitualmente tiene elementos
arcaizantes, lo que la hace menos reconocible. No lo reconocible, lo extraño y lo que no
se comprende se suele asociar a lo mistérico propio de los ritos religiosos.
Pero las lenguas sagradas o litúrgicas no solamente delimitan lo profano de lo
sagrado, sino que se establece también como una señal de identidad y, si la lengua
trasciende una comunidad cultural, es un medio para indicar el carácter “universal” o no
“nacional” al menos de la religión en concreto.
También tiene un función de apartar a los que no son fieles ya que un rito en una
absolutamente extraña refuerza su ajenidad y, además, divide a los creyentes entre los
conocedores de la lengua (los que tienen una posición preeminente) y los no
conocedores (que tienen una posición subordinada). Es un difícil rito iniciático para los
que quieren cambiar su posición dentro de la comunidad religiosa.
2.4. ¿Cuál es la diferencia entre lengua y dialecto?
Max Weinreich, uno de los más importante lingüistas del yiddish, a la pregunta
sobre cuál era la diferencia entre una lengua y una dialecto dijo “una lengua es un
dialecto con un ejército y una armada” (a shprakh iz a dialekt mit an armey un flot).
Weinreich lo que quería decir era que la diferencia entre una lengua y un dialecto es una
decisión política y no una decisión lingüística, por más que se hayan hecho propuestas
dentro de este campo.
2.5. ¿Cuándo dos variedades son dos lenguas diferentes?
Otra de las cuestiones más debatidas es cuando nos encontramos antes dos
lenguas diferentes. El criterio al que se suele recurrir más rápidamente es el de la
intercomprensión, pero éste es problemático porque no siempre la intercomprensión es
simétrica. Otra alude a diferencias de vocabulario o en la morfosintaxis, pero cuál ha de
ser la diferencia no está claro.
Que el castellano, el alemán, el chino mandarín y el aymara son lenguas
diferentes no plantea problemas, pero las dificultades se plantean entre variedades
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
15
donde las diferencias son escasas pero por alguna razón se quiere hacer una separación
idiomática.
Veamos algunos casos de “separatismo lingüístico”.
1) Dada la pretensión de parte del nacionalismo catalán por incorporar las tres
provincias valencianas a Cataluña, una parte importante de la polìtica valenciana
y del gobierno regional intentaron separar la lengua de aquella comunidad, el
valenciano, del catalán haciéndola una lengua diferente, contra la opinión
incluso de la Real Academia de la Lengua Valenciana.
2) Los dirigentes soviéticos tenían un gran temor a que se despertarse un
sentimiento nacional turco en las repúblicas soviéticas de Asia Central, muchas
de ellas con población de lengua turca. Para ello tomaron diferentes variedades y
las llamaron de forma diferente, dentro de estas variedades seleccionaron los
elementos más singulares y los hicieron obligatorios y a estos estándares los
hicieron idiomas oficiales de algunas de estas repúblicas. De esta forma querían
fragmentar la identidad turca en la zona soviética de Asia Central gracias a la
fragmentación de su lengua.
3) Antes nos hemos referido al serbo-croata en Yugoslavia. Después de la
fragmentación de este Estado, algunos de los nuevos Estados intentan
diferenciar su variedad del estándar serbocroata para hacerlo una lengua
diferente y de hecho en Serbia se dice que la lengua oficial es el serbio, el
Croacia el croata y en Bosnia-Herzegovina el bosnio.
Aunque no pueda llamarse estrictamente un caso de unionismo lingüístico sí es
interesante mencionar que los Estados nórdicos intentan mantener un alto grado de
intercomprensión entre sus lenguas (sueco, danés y noruego bokmal) intentando que sus
estándares no se separen tanto que haga imposible que un hablante de, por ejemplo,
sueco no pueda sentirse cómo visitando Dinamarca. Entre las lenguas escandinavas
también se da una fuerte intercomprensión entre el islandés, el feroense y el noruego
nynorsk.
2.6. Oficialidad
2.6.1. Concepto y tipos de oficialidad
A partir del Romanticismo nació el Nacionalismo y creó una mayor vinculación
entre identidad colectiva y lengua, de forma que los Estados comenzaron a declarar
oficiales lo que eran sus lenguas propias o nacionales.
Una lengua es oficial aquella variedad lingüística que es considerada propia por
un Estado y que declara obligatoria para que las personas sometidas a su jurisdicción se
relacionen con él. En ocasiones también se declara la obligatoriedad de la lengua para
todo tipo de relaciones públicas aunque en éstas no intervenga el Estado como son, por
ejemplo, los contratos civiles o mercantiles.
Normalmente los Estados establecen una lengua oficial (o varias) para la
totalidad de su territorio y es la lengua oficial la que se emplea en la mayoría de los
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
16
procesos exteriores a la vida privada y familiar. Es especialmente relevante si se
permiten medios de comunicación que no empleen la lengua oficial o si los medios de
comunicación del Estado pueden emplear otras lenguas diferentes de la oficial.
El hecho de ser recibir la formación en la lengua oficial ayuda a que sus status
no sólo sea jurídico sino social, algo muy importante cuando la lengua oficial no es la
lengua común o compartida por la mayor parte de la población.
No es raro que, junto a una lengua oficial que representa una variedad muy
extendida, existan variedades localizadas territorialmente y que éstas variedades hayan
logrado estandarizarse. Muchos Estados han optado por declarar oficial otras lenguas
pero con una oficialidad limitada a un territorio limitado. La oficialización de estas
variedades (las llamadas lenguas regionales o minoritarias) implica un alto grado de
protección y sobre todo de promoción porque crea incentivos para su aprendizaje y
empleo. Hay lugares de extrema complejidad lingüística donde buena parte de las
decisiones sobre la oficialidad está en manos de las autoridades locales, como sucede en
Bélgica.
Hay países donde se encuentran además las lenguas de los antiguos pobladores,
las lenguas indígenas. Estas lenguas han sido perseguidas o despreciadas en el mejor de
los casos, como sus hablantes. Actualmente se busca su conservación y en la medida de
lo posible su recuperación como lengua con futuro. Algunas de ellas han sido
estandarizadas, han podido acceder a la enseñanza y a determinados medios de
comunicación, así como a cierto grado de oficialidad (un ejemplo extraordinario es el
quechua en los países andinos).
Hay que señalar también que hay países en los que su ordenamiento jurídico no
establece la oficialidad de ningún idioma, aunque emplean el más extendido como si
fuera oficial. Por ejemplo en los Estados Unidos, para el gobierno federal no hay un
idioma oficial, lo cual se traduce en la posibilidad de relacionarse con éste en múltiples
idiomas, aunque algunas áreas como las Fuerzas Armadas sí tienen al inglés como
oficial, al igual que han hecho algunos de los estados.
2.7. Lenguas de intercomunicación: Lengua koiné o lengua común
Es habitual que la necesidad de intercomunicación no sea entre hablantes del
mismo continuo, sino entre hablante de diferentes continuos donde la intercomunicación
no existe.
Históricamente se han adoptado determinadas variedades o lenguas para ser
vehículo de comunicación. Las lenguas elegidas corresponden generalmente a las
lenguas con más prestigio vinculadas a la lengua del poder internacional o de los
principales actores económicos.
Estas lenguas de intercomunicación reciben el nombre de lenguas “koinés” o
lenguas comunes. La koinización de una lengua conlleva cierta simplificación como
evidencia el griego koiné frente al griego clásico, el latín clásico frente a las variedades
vulgares o actualmente la variedad controlada del “Simple English” frente al inglés.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
17
a) El arameo fue durante el primer milenio antes de Cristo la lengua común en
Oriente Medio y Mesopotamia y ha llegado como lengua viva, aunque
reducidísima, hasta la actualidad. El griego fue el lenguaje de intercomunicación
desde el siglo V a.C. hasta el siglo II d.C. Lo fue porque los griegos tenían el
predominio comercial en la cuenca mediterránea y su lenguaje se convirtió no
solo en la lengua del comercio sino en la de la literatura que quería llegar a un
público más amplio, especialmente en la versión simplificada del griego, el
griego koiné.
b) Ya en el primer siglo después de Cristo el latín se fue imponiendo como lengua
de intercomunicación, aunque su dominio no llegó hasta el siglo II. Su
expansión se debió a la estructura política del Imperio Romano, cuya lengua era
el latín y que fue arrinconando al griego cada vez a círculos más pequeños y
cultivados. La preponderancia del latín se mantuvo, en la lengua escrita, hasta el
siglo XIX, ya que era la lengua de la principal institución medieval, la Iglesia
Católica, y además era la empleada por las instituciones culturales,
singularmente por la Universidades. Con el movimiento nacionalista se
reivindicó la lengua de cada lugar como apropiada para cualquier tipo de escrito,
lo cual elevó estas lenguas, pero acabó con la fuerza del latín.
Paralelamente a la fortaleza del latín en los documentos oficiales y en los textos
escritos, en las relaciones internacionales se tomaba la lengua de la nación
dominante en cada momento, el castellano en el siglo XVI, el francés desde el
siglo XVII a principios del siglo XX, y el inglés desde la Segunda Guerra
Mundial.
c) En la actualidad el inglés no es sólo una lenguaje de intercomunicación
diplomática, sino que es lengua que se pretende que manejen bien todas las
personas, además de la propia. En todos los círculos científicos e intelectuales se
busca la publicación de obras en inglés como mejor medio para extender el
público, aunque en el campo en el que más se nota es en el de la música. La
fortaleza del inglés es pareja a la fortaleza de los Estados Unidos de América,
como la tuvo el ruso durante la existencia de la Unión Soviética.
d) Nos hemos fijado sólo en las lenguas del mundo occidental, pero ello no quiere
decir que sean las únicas de intercomunicación, ni siquiera para Occidente. En el
mundo árabe, el árabe clásico es la lengua de intercomunicación y del lenguaje
escrito. Como en La India hay una fuerte tendencia política para convertir al
hindi en la lengua de intercomunicación y en China el mandarín es la lengua
que cumple esta función, dada la diversidad lingüística existente en este país
(hay variedades con millones de hablantes que a su vez son lenguas regionales).
En el este de África el swahili es la lengua que conocen muchos habitantes para
relacionarse con etnias diferentes a la suya sin tener que recurrir a las lenguas de
las antiguas potencias coloniales.
e) El alemán, además de tener cierto predicamento como lengua de
intercomunicación en Europa Central y del Este, fue asumido como lengua
científica en numerosas disciplinas científicas hasta bien entrado el siglo XX.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
18
f) Lázaro Zamenhof creó en 1887 una lengua que pretendía que fuera la lengua
común de todos los seres humanos, el esperanto, sin que ello implicara la
renuncia a las respectivas lenguas maternas. En la actualidad es la lengua de este
tipo que tiene más hablante y que incluso posee un pequeño número de personas
que la tienen como lengua materna.
2.8. Jerarquización, prestigio y diglosia
2.8.1. Prestigio
La Lingüística hace muchas décadas que abandonó, con contadísimas
excepciones, la idea de que hay variedades superiores y variedades inferiores o, dicho
en otras palabras, que existen lenguas mejores o peores, prejuicio que muchos trasladan
a la diferencia entre lengua y dialecto.
Moreno Cabrera recopiló los principales argumentos en los que se apoyaba la
idea de jerarquización entre variedades o lenguas. Indicó que ninguna de ellos es
lingüístico, sino de otro tipo.
Los criterios que se suelen utilizar son los siguientes:
1) Oficialidad: es un criterio político, pero no lingüístico.
2) Número de hablantes: es un criterio demográfico o de utilidad, pero no
lingüístico.
3) Literatura: es un criterio literario, pero no lingüístico.
4) Escritura: una variedad lingüística no es ni mejor ni peor por estar escrita.
5) Antigüedad: que una variedad tenga raíces más antiguas que otras es un criterio
histórico, pero no lingüístico.
6) Complejidad/Simplicidad: este criterio, además de arbitrario, es enormemente
relativo, ya que la complejidad no es la misma en todas las partes de una
variedad lingüística y el mero hecho de ser más compleja o más sencilla una
variedad no la hace mejor ni más deseable.
7) Estandarización: que una variedad tenga una “norma” establecida o sea ella
misma la norma no quiere decir lingüísticamente que es mejor ni peor que otras
variedades lingüísticas.
Como ya hemos indicado anteriormente en varias partes el prestigio de una
variedad lingüística depende de un conjunto de factores que pueden tener un peso
diferente dependiendo de cada caso y circunstancia.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
19
La oficialidad, el número de hablantes, la tradición literaria, la escritura frente la
oralidad, la antigüedad, las características gramaticales o la estandarización no hacen ni
mejor ni peor una variedad en el plano lingüístico, pero sí le otorgan un prestigio o
consideración social que hace más apreciadas unas variedades que otras.
A los factores indicamos podemos señalar algunos factores más que incremente
el prestigio social de una variedad lingüística:
a. Funciones más prestigiosas: si una variedad es la empleada por quienes
realizan las funciones más valoradas en la sociedad, la variedad adquirirá el
prestigio de las funciones.
b. Grupos sociales más valorados: si una variedad es el sociolecto o dialecto de
los grupos sociales de mayor poder, capacidad económica y/o reconocimiento
social, entonces su variedad tendrá la valoración social que ellos tienen.
c. Idea de corrección: se tiende a valorar más la variedad más cercana al estándar.
d. Idea de pureza: se tiende a valorar más la variedad más cercana a las formas
más antiguas.
El prestigio puede ser abierto, como el expuesto más arriba, o encubierto ya que
muchas veces hay prestigios que se otorgan pero no se reconoce su otorgamiento. El
prestigio no es simétrico en todas las sociedades; el castellano es prestigioso en las
sociedades hispanohablantes frente a las lenguas indígenas pero cede en prestigio ante el
inglés en los Estados Unidos.
2.8.2. Diglosia
Hay lenguas o continuos que tienen una variedad alta y variedades bajas. Las
variedades bajas se aprenden en la familia y son el vehículo de comunicación para las
relaciones personales, familiares e informales. La variedad alta se aprende en la escuela
y se usa en contextos formales como son las relaciones jurídicas, los medios de
comunicación, los textos escritos sean literarios o técnicos y en todas las relaciones que
tienen cierta formalidad.
Se da el fenómeno de la diglosia (“dos lenguas”) en el que dependiendo del uso
una persona emplea una variedad u otra. La situación de diglosia suele ser estable. En
países donde el plurilingüísmo es mayor la diglosia puede ser triglosia o asistir a la
absoluta contextualización de cada variedad.
Por ejemplo en la Suiza se habla alemana en los contextos formales se habla
alemán estandarizado, común con peculiaridades a todos los hablantes del
alemán, pero en las relaciones informales se emplea el suizo-alemán que es una
variedad de difícil comprensión para la mayoría de los germanohablantes.
El caso paradigmático de diglosia se da en el árabe. El árabe culto, el árabe al-
fusha, está compuesto por el árabe coránico y el árabe culto (estándar árabe
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
20
moderno) es la variedad alta del árabe, mientras en cada país árabe hay al menos
una variedad propia que solamente cubre necesidades de la vida doméstica e
informal. De hecho las variedades nacionales no tienen siquiera forma escrita.
Junto al caso árabe, donde la diglosia se refuerza por el hecho de que la variedad alta es
también lengua sagrada o litúrgica, ha habido otro caso destacado de diglosia
“institucional”: el caso griego.
Cuando Grecia obtuvo su independencia del Imperio Otomano en 1830 se
planteó la cuestión de cuál habría de ser su lengua oficial. Los revolucionarios y
luchadores por la independencia habían estandarizado una variedad
(katherevoúsa) que depuraba la lengua habitual de los añadidos, especialmente
de los turcos y los eslavos, y se acercaba al griego clásico sin llegar a serlo. Por
el contrario los griegos en su vida hablaban griego demótico o griego popular.
La consecuencia de todo ello fue que en todos los contextos oficiales inspiraba la
variedad alta o katherevoúsa, viéndose casi reducida a una variedad escrita,
mientras que en los restantes aspectos de la vida imperaba el demótico. La
variedad katherevoúsa fue defendida por los sectores más conservadores y
establecidos de la sociedad y cada variedad se identificó con una tendencia
política. En 1976 se terminó esta diglosia institucional cuando una ley estableció
que la variedad oficial era el griego demótico, aunque modificado parcialmente
con reglas y palabras del katherevoúsa.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
21
3. Conceptografía
3.1. La necesidad de los conceptos
Los conceptos nos permiten acceder a una serie de conocimiento utilizando una
sola palabra, cuyo significado es el mismo para todos o casi todos los hablantes de una
lengua. Los conceptos son concisos, es decir, determinan un área de la comunicación,
del conocimiento y de la realidad en un elemento pequeño. Los conceptos fijan un
significado sin que pueda ser variado arbitrariamente y los hacen accesible a todos. Los
conceptos ahorran el trabajo de empezar desde la nada el conocimiento humano, nos
pone en el punto actual del conocimiento.
3.2. Morfología del concepto
3.2.1. Sentido y referencia
El pensador y lógico alemán FREGE distinguió dos elementos fundamentales en
todo concepto: el sentido y la referencia.
Sigamos el mismo ejemplo que propone Frege. Cuando nos referimos al
“Lucero del alba” y nos referimos al planeta “Venus” estamos hablando del
mismo objeto, pero con consecuencias diferentes. La diferencia estriba en que
tienen sentidos diversos, a pesar de tener la misma referencia.
La referencia es el objeto de la realidad al que denota el concepto. Mientras que
el sentido es el conjunto de cualidades que se atribuyen a ese objeto. Cualquier concepto
que quiera estar bien establecido tiene que tener sentido y referencia.
El problema fundamental que puede tener un concepto es tener sentido pero no
tener referencia. Este es el principal defecto que tienen los conceptos abstractos, como
son los que denotan a los colores. El sentido, aunque autónomo, se encuentra limitado
por la referencia, y por ello un concepto sin sentido es incontrolable, vago y
manipulable.
3.2.2. Noción absoluta o relativa de los conceptos. El fenómeno.
Antes de la irrupción Immanuel KANT, de una de las figuras más importantes
en la historia del pensamiento humano, se creía que los conceptos podían establecer y
poner de manifiesto la realidad de que la que hablaban. Se consideraba que si se hacía
correctamente el concepto describiría perfectamente la realidad que denotaba y lo hacía
de una forma con validez extrahistórica e inespacial.
En la obra fundamental de KANT, la Crítica de la Razón Pura, encontramos la
demostración de que el conocimiento humano siempre está condicionado por el tiempo
y el espacio. Esto quiere decir que los seres humanos no somos capaces de hacer
representaciones que no estén sometidas al tiempo y al espacio, no podemos imaginar
un acontecimiento sin tiempo y un objeto sin espacio. Todas las representaciones
humanas y, en consecuencia, todos los conceptos que podamos hacer, están sometidos
al espacio y al tiempo.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
22
De hecho los seres humanos intentamos, y lo hacemos, construir conceptos con
validez universal que no sean ni espaciales ni temporales. KANT demuestra que estos
conceptos permiten llegar a conclusiones contradictorias, que partiendo de uno de ellos
se puede demostrar un argumento y su contrario, porque son conceptos vacíos.
Todo ello no quiere decir que los conceptos no tengan ningún sentido. Los
conceptos son una forma de conocer que está dentro del conocimiento humano antes de
toda experiencia. Pero los conceptos deben someterse al condicionamiento del espacio y
del tiempo para no caer en contradicciones. Los conceptos que realizamos los hacemos
a partir de los fenómenos, esto es, de las representaciones espaciotemporales que
tenemos los seres humanos y por tanto se encuentran sometidos a ese mismo
condicionamiento.
3.2.3. Los límites de los conceptos: la metáfora.
NIETZSCHE y posteriormente HEIDEGGER han sido dos de los pensadores
más críticos con la noción de concepto. NIETZSCHE mantuvo que el concepto es una
metáfora que se ha olvidado de que lo es y se ha considerado representativa y normativa
respecto a la realidad a la que se refiere. Por su parte HEIDEGGER apuesta por la
vuelta, etimológica, al valor primigenio de las palabras, “desolidificando” unos términos
tan establecidos que han dejado de significar.
3.3. Formas de conceptualizar
La forma de conceptualizar no es única. Dependiendo del modo de
conceptualizar obtendremos unos conceptos y otros. Los diversos modos obedecen a
diversas necesidades, por lo que conviene ser conscientes de los límites y
potencialidades de cada uno de ellos.
El concepto establece los límites de una categoría, es decir, el conjunto de
objetos que cumpla con las exigencias del concepto formarán parte de la categoría
definida por el concepto.
3.3.1. Modelo de condiciones necesarias y suficientes
Aristóteles fue el primer autor en elaborar una teoría de la conceptualización. La
conceptualización aristotélica se funda en el mecanismo gnoseológico de la abstracción.
La abstracción consiste en eliminar, dado un conjunto de objetos, las características que
no son comunes y quedarse con las comunes a todos ellos.
Modernamente el modelo aristotélico ha sido denominado como “modelo de
condiciones necesarias y suficientes” (CNS). El CNS determina un conjunto de
características que son necesarias para que un objeto sea incluido en una categoría; si
ese objeto cumple esas condiciones, éstas son suficientes para que el objeto sea
considerado como perteneciente a la categoría definida.
El CNS es el método utilizado para la realización de diccionarios. Tiene la
ventaja de establecer con mucha claridad las características y los límites de la categoría,
pero esa claridad se vuelve en rigidez en algunas ocasiones, ya que existen conceptos
que no pueden definidos a través del CNS.
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
23
3.3.2. Modelo prototípico
El modelo prototípico surge a partir de las insuficiencias del CNS. Hay
determinados conceptos que son “intuitivos”, pero el verdadero problema es que hay
objetos que tradicionalmente se han integrado en una categoría que no presentan las
condiciones necesarias y suficientes. Este modelo generalmente se emplea en las
ciencias sociales y humanas.
Un prototipo es un primer modelo. Para construir un concepto y una categoría a
partir de un prototipo debemos elegir un objeto que consideremos el más representativo
de la categoría. Elegido este objeto, los otros objetos pertenecerán a la categoría en
función de que tengan algún parecido con el prototipo. Este modelo diluye los límites de
la categoría y ésta es tanto su virtud como su límite.
3.3.3. Modelo de aire de familia
Este modelo fue elaborado por el filósofo austriaco Ludwig Wittgenstein (en
Investigaciones Filosóficas). Parte de la idea de que los conceptos no establecen una
serie de patrones comunes a todos los objetos que forman una categoría, sino que la
categoría tiene una consistencia en sí misma, es decir, la unión de la categoría no
pertenece a un concepto primero, sino que pertenece a la misma categoría. Toma la
metáfora del “aire de familia” para indicar lo que une a todos los objetos de una
WTC CDJ WTC CPV LFC
Para definir el concepto “” tenemos que buscar cuáles son las
características suficientes y necesarias. De tal manera el concepto “”
tendrá las siguientes características: 1) conjunto de tres letras; 2) presencia en todos los conjuntos de la letra “C”; 3) nunca la letra “C” se encuentra en la posición central del
conjunto; 4) las letras se encuentran ordenadas alfabéticamente sea de
forma ascendente o descendente; 5) ninguno de los conjuntos tiene ninguna vocal. 6) la letra “C” no se repite
TCA
CWC
RDC
No entra en porque incumple la regla 5
No entra en porque incumple las reglas 3, 4 y 6
Sí entra en , porque cumple todas las reglas
Ejemplo de CNS
Filosofía del Lenguaje y Hermenéutica IES Luis de Camoens
24
categoría. De esta forma entre un objeto u otro de la categoría no tiene que haber una
característica común, ya que la hay entre los objetos que los conectan.
3.3.4. Modelo componencial graduado
El modelo componencial graduado es un modelo mixto entre el modelo de
condiciones necesarias y el prototípico. Para realizar un concepto y una consiguiente
categorización con este modelo ha de establecerse en primer lugar un prototipo y dentro
de éste debemos distinguir entre características necesarias (límite para establecer la
categoría) y características que mejoran el caso una vez superado el límite para
pertenecer a la categoría. Un objeto puedo pertenecer o no a la categoría, y después de
pertenecer puede ser un buen ejemplo o no de esa categoría.
Ejemplo de modelo componencial graduado
Concepto
Características necesarias - A - R - F
Características no necesarias
- D - G
- P
Objeto A, R, F, D, G
Objeto A, R, F
Objeto D, G, P
CN + D, G
CN + Ø
CN
ATR DFR SFT SWP QWI
R F S W
top related