las herramientas - la montaña, 23 de abril de 2015
Post on 17-Jul-2015
409 Views
Preview:
TRANSCRIPT
La Montaña, 23 de abril de 2015.
“Las Herramientas”
Buenos días mis semillas:
Este es un rinconcito del
“Renacer”, es un rinconcito donde os
espero, hoy vamos a compartir.
He entrado en el taller,
nosotros lo llamamos “botiquín”,
para los que están acostumbrados que
van a la Casa Templaria, y hay
especialmente una italiana, una gran
dama, una señora, no digo su nombre
porque se reconocerá, el botiquín
cuántas veces lo ha puesto en orden y
cuántas veces lo pondrá de nuevo. Al
entrar las herramientas estaban en
reunión.
“¡Herramientas!” No me escucharon porque ellas estaban
concentradas en lo que estaban haciendo. El martillo era el jefe del taller,
empezó a hablar y dijo “¡Tenemos que organizarnos!”, el tornillo le
contestó “¿Por qué eres tú el director? si el martillo hace mucho ruido y
cuando pega hace mucho daño”, todos los instrumentos y las herramientas
dijeron: “¡Sí, sí, es verdad!”, miraron al tornillo y le dijeron: “Amigo
tornillo, ya sabes que a ti a medida que vayan dando vueltas, vueltas y
vueltas, también haces mucho daño y se pierde mucho tiempo contigo”,
todos dijeron: “¡Sí, sí, estamos de acuerdo contigo!”; y salió la lija, es ese
papel que cuando se frota raspas mucho, lija, “¡Yo, yo, yo, yo!
Herramientas he decidido que os voy a hablar y vamos a organizar”,
“Amada lija, solamente de lejos ya sentimos tu áspera caricia y si te
acercas nos rozarás y se gastará hasta el hierro”, se sonrojó un poquito y
todos se pusieron a mirar, buscando quién sería y cuál de ellos que fuera
dulce, tranquilo, suave, que pudiese verdaderamente estar en armonía con
todos. La sierra les dijo: “¡Momento, momento!” Cuando la vieron todas
las herramientas “¡Ahhhh!”, “Nooo, tranquilos solamente venía a deciros
que cada herramienta podemos ser muy fuertes, podemos dar vueltas,
podemos cerrar, lijar, clavar clavos, atentos a lo que os voy a enseñar,
¿Quién viene, quién utiliza las herramientas? Las manos de ése hombre,
ese hombre puedes ser tú estrellita, puedes ser tú semilla, podéis ser todos
vosotros, todas, hoy en día las estrellas son muy manuales y saben hacer
muchísimas cosas, subir a la Montaña, dar masajes, casi igual que los
hombres, “¡Tranquilas!” Repitió la sierra, “Paremos un momento y
admiremos las manos de este carpintero que ha venido, Él está aquí, no
nos oye, admirar y observar, tener los ojos abiertos, los oídos bien limpios
y estar atentos. El carpintero cogió un trozo de madera muy áspera, seca y
empezó a lijar, a lijar, a lijar hasta que se quedó nueva y brillaba, fina,
preciosa cogió su tornillo y empezó a girar, a girar a girar y fue añadiendo
las cuatro patas, unos
cajones, la mesa superior e
iba lijándolo, iba dejando
redondito, bonito, le faltaban
unos clavos muy pequeñitos,
cogió su martillo,
delicadamente lo clavó, cuando terminó todas las herramientas le miraron
y dijeron: “Mirar, estas manos, este hombre, de una madera grosera y
rústica ha hecho una maravilla, de todos nosotros, parecía que tenía
violines en las manos, que tenía instrumentos de música tan delicados y
con un sonido, adecuado a cada uno”. No es lo que somos, porque todo el
mundo oís lo mismo, los defectos, “ésta no lleva la moda, aquella es
perezosa, el otro no comprende nada, el más allá no sabe hacerlo”
siempre nos gusta ver los defectos o tirar la piedra ¿Y las cualidades, y las
cualidades?
Mis semillas amadas, me quedo con las
cualidades de los seres que viven aquí y que han
hecho de este jardín un paraíso que han hecho una
pirámide extraordinaria que podréis vivirla, que
está el Rincón de Buda, el
Rincón del Iniciado Jesús,
el del Universo, el del Ángel de la Guarda,
Nuestra Señora de Guadalupe, que los ángeles,
que es el Arco Baleno, que es el arco que cubre
toda esta Montaña, el Ángel Guardián que está en
la esquina, no nos quedemos en los defectos, no nos quedemos en ese lado
que también hemos heredado y que vive con nosotros pongámonos gafas y
veamos más claro esas cualidades que cada ser humano tiene tan grandes,
tan maravillosas y esa nobleza que tenéis en el corazón, esa nobleza tan
maravillosa que solamente la Madre de los Cielos os acaricia, igual que si
os acariciara la cara ¡Dios Mío, esa dulzura, esa dulzura! Retenerlo bien,
las cualidades pesan más que los defectos, el mundo iría mucho mejor, el
trabajo lo haríamos mucho mejor. Si
tenéis que colocar un toldo y o sabéis el
modo de empleo, pensar en esas manos
de ese hombre que hizo un mueble,
buscar los instrumentos quizás los
encontréis, meditar un poco, pedir
consejos, si tenéis miedo ¿Quién no se
ha equivocado, quién no ha puesto una
pieza al revés? Todos, sólo la Luz Divina nos hace perfectos, sólo la Luz
Divina nos da la vida en el Átomo, ¡Os quiero tanto y sois perfectos!
Qué lástima, que cuando somos pequeños las primeras palabras
siempre son la culpa, no lo hagas y está prohibido, pero es el amor de
nuestros padres y la buena educación, ahora somos adultos, tenemos el
libre albedrío ¡Ánimo mis semillas, las cualidades! Y todos tenéis para dar
y vender, las herramientas ya están en orden y todas tienen su función, no
es el dolor o el daño, al contrario, la belleza de la Obra que está hecha y
aquí en La Montaña os puedo decir que han hecho una Obra Maravillosa,
poneros alas y venir, os espero.
Con todo mi Amor y mi corazón,
La Jardinera
Recordar vuestras cualidades, dejaros los defectos, esos defectos ya
sabéis que los tenéis pero mirar el resultados, un camino que es un
sendero, es el sendero de vuestra vida, una pirámide que es el alfa y el
romeo ¿Por qué, por qué os quedaréis simplemente con vuestras
preocupaciones, con esos celos y esas envidias si no os servirá para nada?
Llenaros el corazón de alegría y de buena esperanza y que sois perfectos,
acordaros del martillo y del tornillo, no podemos vivir sin ellos, que os
quedéis en paz.
top related