el día que gabo entrevistó a firmenich

Post on 02-Nov-2015

4 Views

Category:

Documents

0 Downloads

Preview:

Click to see full reader

DESCRIPTION

Reportaje de García Marquez a Firmenich

TRANSCRIPT

  • 3/6/2014 El da que Gabo entrevist a Firmenich

    http://www.perfil.com/elobservador/El-dia-que-Gabo-entrevisto-a-Firmenich-20140531-0038.html 1/7

    Martes 3 de junio de 2014 | 18:57

    El observador

    Segui @perfilcom

    ArchivoGuasRevistasBlogsEdicin ImpresaEscriba a la redaccin

    Ahora Actualidad Columnistas Economa Deportes Espectculos Ciencia Cine Mujer Turismo

    Temas del da Gestamp Horacio Gonzlez Abdicacin del Rey de Espaa Boudou a indagatoria La lista de Sabella Brasil 2014

    Opinin

    Alfredo Leuco

    Axel por Amado

    Carlos Gabetta

    Camino al abismo

    Tapa Perfil

    CFK orden bancar aBoudou | Ahora teme elefecto expansivo de lainvestigacin

    Belleza guaranPatty Orue es una de las

    mujeres ms hermosas deParaguay

    Cacho Castaa, al Coln

    Exitoina

    Perfil.com

    Ms ledas en Perfil.com

    1 . Sugestivo mensaje de Kunkel a Lijo por lacausa que complica al 'amigo' Boudou

    2. Los nerv ios de una diputada al respondersobre Vandenbroele

    3. Investigan a Anbal Fernndez porenriquecimiento ilcito

    4. Cristina con Mauricio Macri: "Ni pacto ninada, esto es sentido comn"

    5. Horacio Gonzlez: El tema de Boudou"produce angustia" y es "perturbador"

    6. Las ltimas horas de la v ctima de sumarido guardavidas

    7 . El plan de Boudou para enfrentar laindagatoria ante la Justicia

    8. Mi Sangre, desde la crcel, revel porqu los narcos eligen a la Argentina

    9. Locuras, escndalos y vergenzas de larealeza espaola

    10. Axel por Amado

    Ms Ledas Ms Comentadas Ms Votadas

    Hechos y personajes. El lder montonero daba la impresin, segn

    Gabo, de ser un hombre de guerra. Signos de una pocaconvulsionada que precedi al encuentro: Clarn y el crimen de

    Aramburu; Cmpora y Pern. | Foto: Cedoc

    Contenido relacionado

    Hechos y personajes. El lder montonero daba laimpresin, segn Gabo, de ser un hombre de guerra.Signos de una poca convulsionada que precedi alencuentro: Clarn y el crimen de Aramburu; Cmpora yPern.

    D'Onofrio: "Firmenich era incapaz de matar a una mosca"

    La mirada del escritor que quera narrar el poder, noencarnarlo

    Temas Gabriel Garca Mrquez Mario Firmenich encuentro entre Gabo y Firmenich Gabo

    Montoneros Dictadura

    11 1

    Por Gabriel Garca Mrquez | 31/05/2014 | 21:23

    DOCUMENTO EXCLUSIVO

    El da que Gabo entrevist aFirmenichPERFIL publica la charla que Garca Mrquez y el dirigente montonero mantuvieronen 1977 a bordo de un avin. Galera de imgenes.

    12 Comentarios | Este artculo fue ledo 32384 veces

    Lo primero que impacta es su

    corpulencia de cemento armado. Lo

    segundo, su increble juventud: 28

    aos. Ojos vivaces e intensos,

    risotada fcil que se abre sobre

    dientes marmreos y raleados,

    patillas de pelo spero, rojo y

    frondoso, y bigotes tan cuidados que

    podran, lo ms bien, ser postizos.

    De todos modos, tanto por el fsico

    como por el comportamiento, basta

    con verlo una sola vez para entender

    por qu es tan difcil desacovacharlo:

    parece un enorme gato.

    Hola, dice dndome la mano. Soy

    Mario Firmenich. Que es como

    decir: el secretario general del

    Movimiento Montonero, el hombre

    ms rastreado de las fuerzas

    represoras de la Argentina y uno de

    los ms perseguidos del mundo por

    los periodistas. Y, sin embargo, su

    porte es tan natural que hasta podra

    parecer, tambin, mampostera. Es

    por eso que comienzo la entrevista tratando de pincharlo, de irritarlo.

    La junta militar presidida por el general Jorge Videla hace ya un ao que est en el poder, le

    digo. Mi impresin personal es que este lapso de tiempo le bast para exterminar a la

    resistencia armada. Ahora ustedes los montoneros no tienen nada que hacer, al menos en el

    terreno militar. Estn despachados.

    Mario Firmenich no pierde la compostura. Su respuesta es seca e inmediata. Desde octubre

  • 3/6/2014 El da que Gabo entrevist a Firmenich

    http://www.perfil.com/elobservador/El-dia-que-Gabo-entrevisto-a-Firmenich-20140531-0038.html 2/7

    Videografa | Los planes de Cristinay Macri para "ordenar" protestas ycalles porteas

    Narcotrfico | Argentina podraconvertirse en el paraso de "lasdrogas del futuro"

    El blog del Contador LoCaneImpuestos, finanzas y otros temas.

    Perfil RadiosTodas las estaciones en un solo lugar.

    Perfil HDArchivo de los mejores reportajes

    Especialesde 1975, cuando todava Isabelita Pern estaba en el gobierno, ya sabamos que en un ao

    habra golpe. No hicimos nada para impedirlo porque, en definitiva, tambin el golpe formaba

    parte de la lucha interna del movimiento peronista. Pero hicimos nuestros clculos,

    clculos de guerra, y nos preparamos para sufrir, en el primer ao, un nmero de bajas

    humanas no inferiores a 1.500 unidades. Nuestra cuenta era sta: si logrbamos no superar

    este nivel de prdidas, podamos tener la seguridad de que, tarde o temprano, venceramos.

    Y qu pas? Pas que nuestras bajas fueron inferiores a lo previsto. En cambio, la dictadura

    perdi aliento, ya no tiene salida, mientras nosotros gozamos de un gran prestigio entre las

    masas y somos en Argentina la opcin poltica ms segura para el futuro inmediato.

    Es una respuesta arrogante, precisa y elocuente. Y, sin embargo, no termina de convencerme.

    Tengo la impresin de que subyazca un optimismo calculado. Se lo digo: Soy optimista y me

    gusta la gente optimista, pero de las personas que son demasiado optimistas desconfo. Por

    qu no pensar, por ejemplo, que tambin los militares hayan calculado con anticipacin sus

    propias bajas? Son presupuestos que nadie conoce.

    Probablemente, tambin ellos piensen que ganaron, por qu no?. Firmenich admite esta

    posibilidad, pero rebate muy rpidamente: Los militares, cierto, deben haber calculado que

    entre marzo y diciembre de 1976 podran aniquilar cualquier fuerza organizada que les fuese

    adversa, y poder dedicarse luego, en 1977, a cazar los ltimos desechos dispersos. Ms que

    clculos concretos eran tambin hiptesis polticas: quiz ni siquiera ellos lo creyeron de veras.

    Aunque si lo creyeron, peor para ellos; porque esto significa que no conocen la dialctica de un

    treinteno peronista.

    A pesar de tanta ostentacin de lucidez poltica, todava no logro escapar de la impresin de

    estar hablando, sobre todo, con un hombre de guerra. Y, de hecho, Mario Firmenich tuvo en su

    vida poco tiempo para dedicarse a otra cosa que no fuese la guerra desde que naci, en 1948,

    en Buenos Aires. Es hijo de un agrimensor que se gradu en Ingeniera a edad adulta: tpico

    producto de la clase media asalariada argentina. En 1955, cuando la cada de Pern, Mario

    Firmenich tena apenas 7 aos, pero nunca olvid la impresin que le caus ver pasar un

    camin cargado de obreros armados slo con palos para defenderse contra el golpe militar.

    Hasta aquel momento Argentina haba tenido, en menos de 22 aos, 14 presidentes de la

    Repblica, y ninguno haba terminado su mandato.

    El general Aramburu, el hombre que haba echado a Pern de la presidencia, estuvo en el

    poder por cuatro aos. Despus se retir a vida privada, y se encerr en un departamentito del

    octavo piso del nmero 1053 de la calle Montevideo, Buenos Aires, mantenindose

    aparentemente lejos de cualquier actividad poltica. El 29 de mayo de 1970, dos jovencitos

    vestidos con uniforme militar lo levantaron de su casa, a las nueve de la maana, con el

    pretexto de asegurar mejor su proteccin. Aramburu fue conducido hacia una vieja granja de la

    periferia de Buenos Aires, juzgado, condenado y fusilado.

    Alguien deba haberles dicho a los autores de aquella ejecucin capital que si hubiesen

    enterrado el cadver bajo 50 kilos de cal viva, no hubiesen quedado siquiera los huesos. En

    cambio, sucedi justo lo contrario: el cuerpo se conserv intacto y de all a poco tiempo aflor a

    la superficie y fue descubierto.

    El movimiento peronista que se atribuy la ejecucin de Aramburu era en aquel tiempo casi

    desconocido; llevaba un nombre que peg, Montonero. Mario Firmenich, que entonces tena 22

    aos, haba formado parte del comando que llev a cabo la operacin Aramburu. Pero no haba

    entrado en la casa de Aramburu. Se haba quedado en la vereda de enfrente, vestido de

    mariscal de polica, para vigilar que nadie viniese a mover el camioncito con el cual haba

    proyectado transportar al general, y que no haban podido estacionar bien. Antes de aquella

    empresa haba participado en otras 17 operaciones, pero su nombre no lo conoca nadie. El

    movimiento estaba por entonces compuesto slo por diez personas, y Mario Firmenich estaba

    tercero en el orden jerrquico. Es por esto que digo que tanto su formacin como su

    experiencia han sido sobre todo guerreras; pero cuando le hago observar que, a mi entender,

    lo que falta en Montoneros es la capacidad de operar decisiones polticas y que en la cabeza

    no tienen otra cosa que el aspecto militar del problema, Firmenich reacciona con mucha

    vivacidad. Yo insisto y le repito que, siempre segn mi entender, la solucin militar es la

  • 3/6/2014 El da que Gabo entrevist a Firmenich

    http://www.perfil.com/elobservador/El-dia-que-Gabo-entrevisto-a-Firmenich-20140531-0038.html 3/7

    extrema, estrechsima alternativa que les queda a los montoneros. Pero no, no es cierto, es

    todo lo contrario, me replica l de inmediato: Uno de los rasgos caractersticos de nuestra

    guerra revolucionaria es que no fue el foco guerrillero el que gener el movimiento de masas:

    es el movimiento de masas el que precedi a la guerrilla, y de un buen cuarto de siglo. El

    movimiento de masas en Argentina comenz en 1945 y el movimiento armado recin en 1970.

    En sntesis, su idea es que el movimiento de masas del peronismo avanza empujado por la

    dinmica misma de la propia conciencia y algunas veces precede incluso a la vanguardia

    poltica, cuando no hasta la suplanta. Dice que este movimiento tiene por objetivo la bsqueda

    de la justicia social, de la independencia econmica y de la soberana poltica de la Argentina.

    Es antiimperialista y antioligrquico, y dado que por 25 aos pudo accionar sin la vanguardia

    poltica, este mismo hecho lo ha transformado tambin en antiburocrtico, consecuencia de la

    traicin de sus burcratas. Hemos llegado a la lucha armada slo cuando se agotaron y

    perdieron sentido todas las otras posibilidades de lucha poltica, dice. A cierto punto no tuvo

    ms sentido el voto, no tuvo ms sentido la creacin de coaliciones electorales en compaa de

    candidatos no peronistas, no tuvieron ms sentido ni el voto en blanco, ni el proyecto de golpe

    de Estado populista y ni siquiera los tres sucesivos y todos prematuros intentos de guerrilla

    rural. No tuvo ya sentido siquiera el regreso pacfico de Pern. Lo que quiero decir: el proceso

    no comenz con los montoneros; los montoneros fueron su inevitable conclusin. Pero incluso

    la decisin de darse a la lucha armada ha sido, en s, una poltica de masas.

    De toda la conversacin que tuvimos, el tema que quiz ms lo fascin fue el de las

    modalidades absolutamente originales que tiene la guerra en la ciudad. Firmenich est

    persuadido de que el no poder disponer de zonas liberadas, en lugar de obstaculizar, facilita al

    revolucionario la gua poltica de las masas. Es decir, mientras el ejrcito est obligado a

    permanecer encerrado en sus cuarteles, los montoneros estn por todos lados, y navegan en

    las masas como peces en el agua. El de los montoneros es un ejrcito que tiene sus propias

    fuerzas en el territorio enemigo; un ejrcito que se desarma cada noche cuando sus militantes

    van a casa a dormir, pero que sigue estando intacto y viga incluso cuando sus soldados

    duermen.

    Sin que l se d cuenta, el anlisis poltico-militar de Firmenich asume de a poco tonos lricos.

    Y yo trato de empujarlo por este camino: le pregunto, de una, si no piensa que tantos aos de

    durezas, de peligros y de luchas hayan terminado por deshumanizarlo. El no se deja atrapar;

    responde: Nadie se deshumaniza en una lucha humanista. S, es una bella frase de un poltico;

    quiz hasta sea una frase verdadera, pero antes que nada es una frase que tiene un sonido

    literario. Y sin embargo, a Mario Firmenich, que termin regularmente la escuela secundaria y

    que curs por un par de aos la facultad de Ingeniera, la literatura no le gusta. Nunca ley una

    novela. Lee slo libros polticos y casi nunca llega al final. Busca slo en el ndice las cosas que

    ms le interesan, y va derecho.

    Naturalmente, me mueve a suponer que este modo suyo de leer se debe a la vida tumultuosa

    que lleva. Pero l sostiene que no. Una cosa es vivir escondido, dice; otra es vivir en la

    clandestinidad. Firmenich est en la clandestinidad, y esto quiere decir que sus enemigos no

    saben cmo encontrarlo, pero l igual conduce su rutina domstica, recibe visitas de amigos

    ntimos, asiste a ciertas fiestas muy privadas e incluso dedica ciertas horas del da a mirar

    televisin. El nico verdadero problema es andar por la calle: Firmenich puede hacerlo slo al

    precio de seversimas medidas de seguridad. Y as, lo que ms le disgusta es no poder ir al

    cine. En los ltimos siete aos vio apenas tres pelculas.

    Es natural imaginarse que un hombre que no sale de casa si no es para cumplir acciones de

    guerra haya estado muchas veces al borde la muerte. El, en cambio, tiene la impresin de

    haber corrido peligro slo una vez, y por un operativo que, considerado a distancia de tiempo,

    en el fondo ni siquiera vala tanto la pena. Fue en diciembre de 1970: l y un compaero

    disfrazado de camarero trataron de desarmar a un polica que estaba de guardia nada menos

    que en el portn de la residencia presidencial de Olivos. Le quitaron la metralla, pero no antes

    de que el polica lograse disparar y herir a Mario Firmenich en un dedo: Fue un milagro,

    cuenta l, con mucho buen humor, porque aquel dedo impidi que la bala me diera en el

    corazn.

  • 3/6/2014 El da que Gabo entrevist a Firmenich

    http://www.perfil.com/elobservador/El-dia-que-Gabo-entrevisto-a-Firmenich-20140531-0038.html 4/7

    De un pincelazo, como por error, me cuenta que uno de los placeres ms grandes de su vida

    es jugar con sus hijos. La noticia no me sorprende. La novedad ms sorprendente que, en

    efecto, encontr en los militantes montoneros es que incluso cuando van por el mundo en

    misiones difciles se llevan a los hijos. En sus refugios clandestinos los he visto cambiar

    paales, dar el bibern a los nios, mecerlos entre los brazos y, mientras tanto, participar en

    una reunin poltica. Es natural, comenta Firmenich, rindose con gusto: Terminaron los

    tiempos en que se pensaba que fuese justo prohibirnos tener hijos. Y agrega que si treinta

    aos atrs los vietnamitas hubiesen pensado de ese modo, no habran tenido a nadie ms

    para ganar la guerra. Los hijos son nuestra retaguardia, dice.

    El tema de los hijos lo trae otra vez a la situacin de la Argentina: el pas tiene el ndice de

    desarrollo demogrfico ms bajo del continente. Es un pas casi desierto, que debera duplicar

    su poblacin si quiere lograr consolidar su propia independencia y enfrentarse al futuro. Una

    familia tipo, en Argentina, hoy tiene tres hijos, dice Firmenich, es necesario que en el futuro

    tenga cinco. Dos para mantener en el mismo nivel el ndice demogrfico; tres para duplicarlo.

    Pero sus consideraciones no son slo de orden tcnico: por experiencia de militante sabe que

    quien tiene hijos milita de otra manera en comparacin con quien no los tiene. Entre otras

    cosas, porque est ms atento a s mismo y a su propia conservacin.

    No parece interesarle demasiado la pregunta que le hago, y que en estos tiempos es ritual en

    conversaciones de este tipo: Qu espera que haga (Jimmy) Carter respecto de Amrica

    Latina? Se limita a responder (creo que sin equivocarse) que la libertad no puede venir de

    afuera. En cambio, se vuelve todo radiante cuando le pregunto si se arriesga a hacer un

    pronstico sobre el futuro inmediato de su pas. Por supuesto, dice. Este ao terminar la

    ofensiva de la dictadura y, finalmente, se presentarn las condiciones favorables para

    nuestra contraofensiva final.

    Y, al mismo tiempo, se ver que la nica alternativa concreta a la dictadura es el movimiento

    peronista y montonero, que llevar a la creacin del partido montonero.

    Luego se pasar a la constitucin de un frente de liberacin nacional con objetivos

    antidictatoriales, antioligrquicos, antiimperialistas. Firmenich est convencido de que la

    burguesa nacional, gravemente golpeada en sus intereses por las multinacionales,

    descapitalizada por las empresas del Estado, entrar tambin ella a formar parte de la

    coalicin. Piensa que en el frente de la coalicin confluirn incluso los partidos radical,

    intransigente y comunista, que aceptarn una transicin al socialismo sobre la base de un

    programa aceptable para todos: expropiacin de los monopolios extranjeros y expropiacin de

    los monopolios nacionales. En definitiva, se encontrarn todos de acuerdo sobre un programa

    que respetar la propiedad privada de la pequea empresa y de la cooperativa, pero que

    tendr como objetivo la disolucin tanto de las grandes empresas extranjeras como de la

    industria monoplica de Estado. Firmenich est tan convencido de esto que atribuye la derrota

    de los intentos revolucionarios de los aos 60, en Amrica Latina, al error de no haber

    entendido el rol que tienen las burguesas nacionales como empuje decisivo hacia la sntesis

    entre lo militar y lo poltico. La revolucin argentina, concluye con un gran suspiro, ser la

    revolucin de Amrica Latina.

    Quiz tenga razn, pero no quiero darle la satisfaccin de cerrar el coloquio con un tono tan

    triunfalista. Y entonces le arrojo una provocacin algo dura de digerir para alguien nacido en el

    Ro de la Plata: Antes del Che Guevara, los argentinos no se sentan latinoamericanos. Ahora,

    en cambio, creen ser ellos los nicos latinoamericanos. El irrumpe con una esplndida

    risotada que desarticula completamente su inmensa cautela de gato. A punto de cerrarse la

    puerta a mis espaldas, trato de precisar un ltimo particular: Desde dnde fechamos esta

    entrevista?. Y l, hacindome un cordial gesto de saludo, me responde: Desde donde te

    parezca. Que es como decir: desde ningn lugar. Ms tarde, en el auto, mientras me voy,

    repasando mentalmente aquella conversacin de casi dos horas, de un trazo me doy cuenta de

    cul es la verdad: Mario Firmenich es el hombre ms extrao que haya encontrado en mi

    vida.

    Copyright LEspresso,

    Italia, 17 de abril de 1977.

  • 3/6/2014 El da que Gabo entrevist a Firmenich

    http://www.perfil.com/elobservador/El-dia-que-Gabo-entrevisto-a-Firmenich-20140531-0038.html 5/7

    Facebook Twitter Google

    enfermito8501-06-2014 | 08:20

    Reportar

    PAREDON A LOS MONTOS Q TRAICIONARON Y SE QUEDARON KON LAGUITA!!!! MONTO VIVO= MONTO TRAIDOR!!!!

    Dorban01-06-2014 | 06:42

    Reportar

    Que este hombre calculador, fro, doble agente, asesino, traidor a suscompaeros y a su patria camine impunemente libre por Barcelona, demuestraque lso argentinos somos unos cobrades de mierda.

    Juan Carlos02-06-2014 | 02:00

    Reportar

    APOYO TUS DICHOS, AMPLIAMENTE...SON MUCHOSLOS ASESINOS MONTONEROS QUE ANDANSUELTOS..ALGUNOS CON CARGOS OFICIALES.

    Dorban01-06-2014 | 06:41

    Reportar

    Un espanto.

    Facundo01-06-2014 | 05:03

    Reportar

    Faltara alguna nota sobre las reuniones entre Garca Mrquez y Pablo Escobarpara hacer negocios narco con los hermanos Castro: youtu.be/tcUE2F_mx8I

    Guillermo01-06-2014 | 02:00

    Reportar

    DOCUMENTO EXCLUSIVO Hace aos que esta publicado en los libros sobreobra peridistica de Garcia Marquez. Una de las ediciones fue del Diario Clarin.

    gag196301-06-2014 | 12:43

    Reportar

    Complemntenlo mirando "El Dialogo" (Hector Leis y Graciela FernandezMeijide) disponible on line.

    calavera106601-06-2014 | 12:37

    Reportar

    Estimadas Madres de Plaza de Mayo: Si quieren respuestas, ya saben a quienpreguntarle. Al entregador Nro. 1 M.E.F. (y a su jefe de inteligencia HoracioVerbitsky).

    Comentarios

    Coment en Perfil.com

    Para comentar debes estar logueado,ingres a travs de:

    Traduccin: Matas Marini.

  • 3/6/2014 El da que Gabo entrevist a Firmenich

    http://www.perfil.com/elobservador/El-dia-que-Gabo-entrevisto-a-Firmenich-20140531-0038.html 6/7

    Ofelia Noemi01-06-2014 | 09:40

    Reportar

    L LEER ESTE ARTCULO Y REMEMORAR AQUELLOS FATDIOOS AOS MEPREGUNTO CMO NO HEMOS APRENDIDO NADA LOS ARGENTINOS QUESEGUIMOS VOTANDO A LA MISMA MIER--DA

    sergiolarrain9901-06-2014 | 12:27

    Reportar

    recomiendo que lean http://www.33orientalesargentinos.blogspot.com.ar/

    a56juarez31-05-2014 | 10:02

    Reportar

    A CONFESION DE PARTE,RELEVO DE PRUEBA...GOLPISTADEL76,TRAIDOR,SE AFANO LOS 60 MILLONES DE LOS BORG,OBSECUENTEDE MASSERA,AGENTEPRORUSO,JUNTO A KUNKEL,PERDIA,VACANARVAJA,GULLO BAH...BASURA FUE SIEMPRE

    Juan Carlos02-06-2014 | 02:02

    Reportar

    TOTALMENTE DE ACUERDO, MUCHOS EXTERRORISTAS OCUPAN CARGOS OFICIALES EN LAACTUALIDAD.

    Revocansobreseimiento de AbalMedina y Scoccimarroen una causa contraClarn

    Marianela Mirra siguesu cruzada contra Rial

    Durn Barba: del elogioa Hitler a la depresin

    La Seleccin tiene suav in para v iajar alMundial

    Ocaa no cree en laposibilidad de un juiciopoltico: "Boudou deberenunciar"

    Cristina con MauricioMacri: "Ni pacto ninada, esto es sentidocomn"

    Rihanna, transparenciashot en un evento

    Investigan si el cuerpohallado en Ceamse es deuna mujer chaquea

    Rihanna, transparenciashot en un evento

    Locuras, escndalos yvergenzas de la realezaespaola

    Conmocin por fotos deun profesor desecundaria desnudo

    Una colombiana es laMiss Mundial de Ftbol2014

    Prximos 10

    ltimas noticias

    Fotogaleras

    Pgina 99

    La soledad de la reina

    Hablemos de Infertilidad

    Una ley a la que le cuestacaminar

    Te lo juro por Louis Vuitton

    La reina de la camisablanca

    Astrocoach

    Punto de equilibrio

    Detrs de la muralla

    Otro atentado en Xinjiang

    Blogs

  • 3/6/2014 El da que Gabo entrevist a Firmenich

    http://www.perfil.com/elobservador/El-dia-que-Gabo-entrevisto-a-Firmenich-20140531-0038.html 7/7

    Noticias | Fortuna | Caras | Hombre | Luz | Ma | Semanario | Look | SuperCampo | WeekEnd | Parabrisas | Joker/Crucigrama | LunaTeen

    Institucional | Canales RSS | Contctenos | Mediakit | Privacidad | Quines somos | Reglas de Participacin | Fundacin Grupo Perfil

    Perfil.com 2007-2014 - Todos los derechos reservados

    Columnistas

    Ceferino Reato

    Guas

    Empresas

    Hoteles en Argentina

    Restaurantes en Argentina

    Mapas

    Telfonos

    Humor, por Omar Bello

    Jorge Porcel Jr. v s MximoKirchner

    Matas Al v s. Nicols Cabr

    Maradona v s. Messi

    Los jv enes v s. los chicos de la

    Cmpora

    Graduados v s. la Cadena

    Nacional

    Citas

    Vot los mejores "cristinismos"

    Vot las mejores "anibaladas"

    Vot los mejores "juecismos"

    Vot los mejores

    "menemismos"

    Las frases ms polmicas deMaradona

    Ping Pong "Chiche Gelblung"

    Sociedad

    A 1 0 aos de la masacre deAv ellaneda

    Quin es quin en el Standupporteo

    Locos por las Bicis

    La cocina de los cocineros

    Nacionales

    Los 60 aos de Canal 7

    El bnker de Pern

    Juv entudes polticas

    Recuerdos de Malv inas

    Internacionales

    Aniv ersario accidente de

    Chernoby l

    Antes y despus del terremoto

    en Japn

    El barco de Hitler

    Entrev istas a los embajadores

    Deportes

    Julio Grondona: una v ida

    llena de escndalos

    Los campeones del "Coco"Basile

    Palermo: "Titn del gol"

    Los 50 aos de Diego

    Maradona

    Cultura

    Esperando la Carroza

    El fuey e argentino

    Salud

    Ser celaco

    El regreso del Dengue

    Turismo

    Especial Turismo

    Vacaciones de inv ierno

    Portfolios

    Guillermo Cantn

    Jos Luis Cabezas

    Eduardo Lerke

    Mariano Solier

    Nstor Grassi

    Especiales

top related