cuy dorado

Huamanga. Una compra inesperada, un sueo misterioso, pero sobre todo una fe inmensa y una buena sazn fueron los primeros ingredientes que utiliz Gloria Mara Zaga para fundar hace 30 aos Las Flores, el mejor restaurante tpico de Ayacucho.Sin embargo, el camino para llegar a tal sitial no se present alfombrado con ptalos de rosas. Tipos con rostros cubiertos con pasamontaas y dueos de restaurantes empachados de envidia quisieron quebrar este negocio familiar, pero lo nico que lograron fue fortalecerlo, tanto que ahora la duea est pensando en dar el salto e ir a conquistar la capital con su cuy en la bandeja.LA MULTIPLICACIN DE LOS CUYESLa historia de este negocio comenz con la compra de 135 cuyes, carne tpica de nuestra gastronoma, durante un encuentro misterioso precedido de un sueo. Doa Gloria, mujer piadosa, asegura que la ayuda divina tuvo que ver con esa inesperada adquisicin, ya que ella no saba siquiera cmo criar ese roedor andino. Tres de sus cuatro hijos trabajan hoy en el negocio, mientras que la cuarta le ayuda a rezar, pero desde un convento en Nicaragua.La mano derecha de Gloria es la hija que lleva su nombre. Ella administra el negocio familiar y lo ha convertido en un restaurante de tres pisos con mirador hacia un hermoso valle. Tan rentable es el rubro gastronmico que en los ltimos cinco aos otros trece restaurantes que ofrecen el mismo producto han abierto en la zona. La competencia ha aparecido en los ltimos aos. Eso nos ha impulsado a crecer y mejorar la atencin. Esto lo aprecian los clientes que vienen aqu, afirma Gloria hija.Para mejorar la atencin al cliente, Las Flores recibe pagos mediante tarjetas de dbito y crdito y, adems, sus ambientes han crecido al punto de tener capacidad para unas 200 personas. Por si fuera poco, ya empez a operar el servicio delivery.PASEMOS A LA COCINALa carta de Las Flores no es variada, pero al pblico no le importa. Todos van por el cuy a la lea, preparado bajo estrictas medidas de higiene y siguiendo un proceso definido de coccin. En la cocina se guarda como secreto de confesin la combinacin de ingredientes usados para aderezar el cuy.Pocos son los que vienen aqu y no comen cuy; para ellos tenemos truchas, chicharrones y lechn. Pero la mayora no se resiste a la tentacin de probar el cuy; la presentacin del plato vence los ltimos resquemores, sonre la hija de Gloria.El proceso que acaba en el plato del vido comensal no comienza en la cocina sino en el criadero de cuyes de la familia, as como en las comunidades campesinas cercanas, que proveen exclusivamente al restaurante.Son las tres de la tarde de un viernes y la gente no deja de llegar a Las Flores. As como de la cocina de Gloria no dejan de salir los cuyes a la lea que saciarn el hambre ms intenso.