cuidado con los consejos haya dé - jenny moix · 2015. 12. 12. · a la altura libros 'la...

2E( EL PAES SEMANAL

1. CUIDADO CON LOS CONSEJOS "Quien no haya sufrido lo que yo, que no me dé consejos" (Sófocles)

Estamos contando nuestro problema a alguien y cuando acabamos, o incluso >

d'@diepuede aportar 2cna bztena solución 1

PARA ESTAR A LA ALTURA LIBROS

'La aswtivHlad para gente extraordi- naria; de L Bach y A Forés. Piatafonna Editorial. Barcelona, 2008 'U arte de la felicidad; del Dalai Lama y H. C. Cutler. Grijalba Barcelona, 1999.

PEL~CU~AS 'Corazón salvaje; de David Lynch. 'Blade runnec de Ridley Scott. 'AdMna quién viene a cenar esta noche: de Stanley Kramer.

'Ernpatíacomprender a los áemá$ cuatro minutos de vídeo en YwTube con un mensaje que

'. .,_' . deberíamos tener siempre presente.

z antes, ya BOS am hacer. Antes de exponer aquello que no8 deta, prohblemmtcr hemm ata- do varias mcb SM do&, le *m &do mil w e h y todavia no sabemm c6m saldremos & la situacih. Y la otra persona, jzas! En cuatro segun& ya tiene la m1wi6n. En ocasiones, Ia persona que aconseja est& tan conven- cida de que su idoa es ac&a& que indum, aunque b as@praas que p &$:?:

~-A-=:l la hemos apl,glic&, insistirá, Conseja:

'%o que tendrias que hacer es hablar con W, Repu@&a: "Claro que he Wlarlo con 4, id no hago otra cm!". m&- ciBn del consejo: "Es que ns hm haMa- do sufkiente".

Al tratar con alguien a quien quere- mos ayudar a resolver su problema, no olvidemos que habri pensado mucho d i r e c8srio solucionarlo y q w proba- bhnente habrP emprendida v e o s caminos para -arlo. Antes de sugerir mlmiones, debemos preguntar sobre las pm.íbiii&de~ que se han barajado y los intentos de reparación emprendidos. Quizá nus sorprendamos y simplemen- te preguntando, la otra persona vea aspectos que antes no habh tenicb en cuenta y la solución se desprenda sola.

Es myior escucbar antes de aconsejar

Y sobre todo, recordmos que desde demás $e sientan más c6modos y enten- fuera todo se ve muy sencillQ, pero por didos. dentro no lo es tanto. Si lo fuera, nues- tro interlocutor ya habría llegado a ella. 3. NO RELATMCENlOS EL PROBLEMA

Convendremos que nadie puede DELOTRO aportar una buena soliici& a un pro- u i ~ ~ i ~ ~ que sienta dOr por b h a que no ha entendido. Por eilo, primero deberiamos entender y luego &S que mueren hambre? procurar que ei o to se sienta compren- YO si- d 0 h p ~ r dido. Si no es mi, nuestro consejo caen4 F ~ t ~ ~ ~ ~ n ~ en saco roto. Nunca se sigue un consejo gLRXT2% que @en eai las -

de alguien que no parece haber enten- montafías? Yo protesto. Pero el dida la sátuwi6n. Así que, no nos preci- m& tiefl~ ddm pitemos en aconsejar, mejor escuchar y pMOS: ni 4quiem tdas:b- preguntar mucho antes de hacedo.

No o t v i d ~ o s d w puntos obvios. causas buenas de este No sabemos si nuestro consejo será mundopueclenimpdirque correcto, henios de sugerirlo con *re- ~JOR p ~ i : m m r ~ e a : d d ~ "

" caucih. Y t e d a : los consejos no son ( M d Weshr, De$w b*nes. la Pemona tiene toda la hte un amigo que sUS+&iSte- libddelmundopara rag podemos caer m la trampa de

Y tengamas muy en cuenta que, en intentar que datidce: "Hay p n u que muchas ocasiones, simplemente debe- está peor que tú". Probablemente y& la mm &$tenernos de aconsejar. Nuestro mbe, pero eso no le consuela. Incluso inmlocutor quizá sblo quiere ser escu- puede s;entirse culpable por sentir@ chado y comprendido. mal sabiendo que existen seres h w -

2. EVITEMOS JüZCAR nos que se encuentran muchísimo peor. Mejor será que permitamos a

" S i ~ v ~ ~ ' ~ ~ a * nues, amigo que , queje y explote. com~render, ya no -0s A veces intentar relativizar es contra- j~~ (~n&%) producente.

Juzgar es un acto casi automhtico, Si alguien nos cuenta el trance que está sufriendo, nuestro cerebro extrae con- clusiones rápidas que suelen ser dicotó- micas, con pocos matims, del tipo: ha actuado mal o ha actuado bien. Por suerte, ~ o r i d s tiempo salemos mati- zar, pero nuestra mente tiene estos arranques.

Cuando alguien nw describa al&- na sltuacih dura por la que est4 atrave- sando, agradecen5 que nos pongamos en su nivel y que no la juzguemos. Algu- nas veces psdemos pensar: "Yo no hubiera cometido estos mres" . B una actitud muy humiuia, necesitamos creer que somos menos vulnerables que los demás. Si tenemos esos idgas, ia utra persona lo notara aunque no las verba- lícernos. Frenar nuestras impulso% de .juzgar y ser. humiEda ayudardi a que bs

4- RESUMIENDO: SIMPLEMENTE DEBEMOS COMPRENDER

"En tu rehci6n con cudquier p n s l , pierdes mucho si no te tom el tiempo necesario para comprdrlsl" ( ~ o b c;nold~t~n ) La comprensi6n as un bálslmo muy potente. Las peaonas con las que m& a gusto nos encontramos son las que nos comprenden. Si queremos que los demás se sientan cómodos y compren- didos por nosotros, simplemente escu- chemos sin juzgar; no aconsejemos con tanta facilidad; permitamos cualquier emoción sin intentar relativizarla; y pongámonos no 0610 en su piel, sino sobre todo en su coraz6n. Preguntbmo- nos: jen estos momentos, quikn nece- sita nuestra comprensión? 0