cuento de los números...cuento de los números el número 1 hace mucho tiempo vivía un hermoso...
Post on 30-Jul-2020
4 Views
Preview:
TRANSCRIPT
Cuento de los números
El número 1
Hace mucho tiempo vivía un hermoso príncipe que recorría regiones en busca
de una hermosa princesa. Un día llegó a un reino donde vivía un Rey muy sabio
bondadoso y noble; este rey había recibido los secretos del sol, de la luna y de
las estrellas, de los gnomos y las hadas que vivían en las profundidades de la
tierra.
En una linda tarde el Rey estaba en el jardín sentado en su bella silla de oro,
contemplando las flores, le gustaba salir allí todos los días para sentir su rico
aroma y observar sus lindos colores.
El príncipe se le acercó con mucho respeto, lo saludó con una venia y le
preguntó en qué pensaba. Entonces el rey le contestó: pienso en lo maravilloso
que es el universo y en las muchas cosas que hay en él: el sol, la luna, las
estrellas, las aguas, las montañas, los árboles, las flores, los animales, las
piedras, el ser humano, en fin son tantas sus maravillas. Y el príncipe le dijo:
Su majestad yo también quisiera saber sobre los secretos que hay en el
universo, y el Rey le dice: Así como el universo es uno y en él están todas las
maravillas; entonces deberás descubrir primero donde puedes encontrar el
uno en ti, si puedes descubrirlo, vuelve mañana a esta misma hora en la tarde
y podré revelarte un segundo secreto.
El príncipe se retiró muy pensativo y preocupado, pues quería seguir
descubriendo los secretos que el rey conocía. Al día siguiente le preguntó a los
criados y a los cortesanos de su castillo, pero ninguno le dió la respuesta. El
príncipe estaba un poco angustiado pues ya casi llegaba la hora de ir donde el
Rey. De pronto una luz brilló en su mente y se dió cuenta que él era uno, un ser
humano, y que en él, estaba el uno, que tenía una cabeza, una boca, una nariz
y un corazón, entonces llegó esa tarde corriendo feliz donde el rey y le contó
su descubrimiento. El rey se sonrió y le dijo que estaba muy orgulloso de él,
que era un joven muy listo y observador.
Verso
Uno es mi reino, uno soy yo
una es la tierra y uno el señor
una mi boca y uno mi corazón
todos en uno y en uno yo.
El número 2
El príncipe se sintió muy feliz por los elogios del rey, se arrodilló junto a él
dispuesto a seguir escuchando y aprendiendo de su sabiduría. Entonces
el rey le dijo: querido príncipe valiente, te felicito por tu gesto y tu interés
porque voy a decirte algo muy importante y revelador y solo el que escucha
con atención se dará cuenta de lo maravilloso que es, yo como rey me siento
cada día más agradecido y asombrado con las maravillas de este universo.
Mira por ejemplo el sol, cada día nos regala su radiante luz, nos abriga con su
calor, y en la tarde cuando se esconde por el occidente, entonces aparecen las
estrellas, los luceros, y un importante satélite llamado luna; ella nos refleja una
hermosa luz nocturna y con ella podemos disfrutar de las noches tan bellas que
terminan en un sueño profundo. Y al otro día, al amanecer, nos despierta de
nuevo el sol que se asoma por el oriente y nos indica que nuevamente empieza
bello día lleno de esperanza y amor.
El príncipe agradeció al rey y se despidió de él con una venia, pues lo admiraba
mucho por su nobleza y sabiduría, el rey le dijo que siguiera pensando en todas
las maravillas del universo, pero con alegría, gratitud y amor. Y el príncipe le
dijo que cada día se iba más feliz para su castillo.
Verso
Uno, dos, la tierra y el sol
lo blanco, lo negro,
El frío y el calor
dos somos tu y yo
dos somos tu y yo
tu y yo yo y tu
tu y yo, yo y tu
tu y yo, yo y tu
somos nosotros
Canción
Uno es el mundo, grande y profundo
uno es el sol, luz y calor
uno es el cielo azul y bello
uno eres tú,
uno soy yo,
uno eres tú,
uno soy yo
El número 3
Al día siguiente, muy temprano en la mañana, el príncipe se levantó para ver la
salida del sol por el oriente, así como se lo había dicho el sabio rey.
Se sintió tan contento que decidió dar un paseo por los jardines cercanos para
escuchar todos los sonidos que le regalaba la naturaleza y efectivamente,
escuchó el dulce canto de los pájaros, el canto de los grillos, el canto del
arroyo, siguió muy alegre y pudo ver y contemplar los hermosos colores de los
pájaros y las flores.
Luego muy atento dirigió su mirada hacia la madre tierra y pudo ver entre las
hierbas algo que brillaba, descubrió un bello cristal, lo sintió sólido, tenía
forma de pirámide, con la luz del sol se reflejaban en él tres colores que había
conocido cuando estaba niño, el amarillo, el azul y el rojo; fue tanto su
asombro que corrió rápido hasta el castillo del rey sabio para mostrarle la
maravilla que había encontrado.
El rey que estaba en su silla disfrutando de la naturaleza y de las flores como
todas las tardes, recibió al príncipe quien le contó lo sucedido y le mostró el
cristal. El rey se asombró ante este cristal maravilloso y el príncipe se lo quiso
regalar, pero el rey no se lo recibió, le dió las gracias y le dijo que lo debía
conservar y además lo debía guardar y como algo muy valioso en el baúl de los
tesoros.
Verso
Uno, dos, tres
María, el niño y José
familia sagrada
y mi cuerpo es tres
también en las plantas
tu veras el tres
y nosotros somos
yo, tú y él.
El número 4
El príncipe había guardado su tesoro tal como se lo había indicado el rey.
Pasados dos días, regresó al jardín del rey y después de saludarlo con la venia
que nacía de su corazón, le pidió que le contara una historia de su vida.
El rey le contó que un día debía cumplir una misión y llevar un documento muy
importante a otro reino. Pero para poder llegar al sitio indicado debía
atravesar un lugar por un camino largo y complicado, estaba acompañado de
sus soldados, atravesaron valles, montañas y ríos y un día en la tarde, cuando
se acercaba la noche, escucharon el silbido de los fuertes vientos y cuando el
viento cesó pudieron escuchar también un coro muy bonito, eran cuatro
enanos que cantaban alrededor de un centro de fuego, la fogata estaba cerca
de un hermoso y cristalino lago que estaba rodeado de hermosas flores de
infinitos colores.
El rey le dijo que en ese momento todos se quedaron asombrados y
maravillados pues era algo que nunca habían visto. Pasaron la noche muy cerca
de ese lugar sin que los enanos los vieran, luego continuaron su camino y al
tercer día llegaron a su destino.
En ese reino fueron muy bien recibidos, el rey de allí les contó que habían
pasado por un sitio encantado que tenía el nombre de los cuatro elementos:
tierra, agua, aire y fuego y que allí vivían los cuatro enanos.
En el rostro del príncipe se reflejaba gran alegría al escuchar esta historia y
descubrir este nuevo secreto.
verso
Cuatro elementos
son los que yo adoro
tierra, agua, aire y fuego
juntos son hermanos
como los cuatro enanos
El número cinco
Pasados dos días el príncipe regresó donde el rey sabio, no lo encontró,
entonces lo espero y cuando pasaron cinco minutos llegó, lo saludo con la
venia como todos los días, entonces el rey lo felicito por su cumplimento y el
principe le dijo que el ser puntual lo había aprendido desde niño.
El rey le contó de su viaje de regreso a casa, le dijo que al regresar se dirigieron
por otro camino, y que al llegar la noche tuvieron una experiencia maravillosa,
en medio del silencio pudieron escuchar el canto de las ranas, de los grillos y
de otros insectos del bosque.
Le contó que al llegar la medianoche vieron un hermoso reflejo, algo que
brillaba e iluminaba, era una hermosa estrella que al pasar de las nubes
permaneció brillando por mucho tiempo, así pudo observar que la estrella
tenía cinco puntas.
El príncipe estaba muy emocionado, quería seguir escuchando al rey y
descubriendo secretos del universo, pero el Rey le dijo que se iría de viaje, que
regresara en cinco días para continuar con las historias.
verso con movimiento
Levanto mi cabeza y firme quedará
mi mano derecha, comienzo a levantar
la sigue la izquierda, la quiere igualar
mis dos pies yo separo
muy fácil al saltar
es una linda estrella la que yo quiero formar
y así parado quedo hasta cinco contar: 1, 2, 3, 4, 5.
El número seis
A los cinco días el rey regresó de su viaje, y al siguiente día se sentó en el
jardín, su lugar favorito para descansar en todo el reino.
En la tarde llegó el príncipe lleno de alegría y el rey, le contó que estuvo en un
bello país llamado Israel donde lo recibieron con muchos honores, que fue
hospedado en un hermoso castillo con una linda torre desde donde pudo
observar la belleza del crepúsculo el sol ocultándose al atardecer.
Al día siguiente llegó un niño y le regaló un ramillete de bellas flores para que
los recordara siempre; entonces el rey visitó los jardines y de pronto vió una
llave de oro entre las flores, la recogió y la llevó a su habitación.
En la noche antes de dormir, el rey oró como todos los días para agradecer a
Dios por todas las bendiciones recibidas cada día y se durmió profundamente.
En el sueño se le presentó un ángel y le dijo que esa llave que había
encontrado, era para descubrir un tesoro que estaba en un baúl en el sótano y
que era un regalo del cielo para él, por ser un rey noble sabio y justo; que
trataba a todas las personas con amor y humildad, y que este tesoro lo llenaría
aún más de amor y bienestar.
Cuando el rey se despertó fue de inmediato al sótano y efectivamente
encontró el baúl, lo abrió con la llavecita dorada y encontró una brillante
estrella de oro puro, pero esta era diferente a la que había visto en el cielo,
esta tenía un triangulo con una punta mirando hacia arriba, al cielo, a Dios
padre, y otro triángulo con una punta mirando hacia abajo, hacia la tierra; esta
estrella tenía seis puntas y recibía el nombre de la estrella de David, y recordó
que algún día la había visto dibujada en la bandera de este país de Israel.
El rey la cogió y mandó a hacer un cofrecito para conservarla siempre como un
regalo del cielo. El príncipe después de escuchar ésta historia, se fue muy
animado a su palacio y la dibujó.
Verso
Seis puntas tiene la estrella
que ahora vemos brillar
una punta mira hacia el cielo
otra punta mira hacia el mar
una punta mira hacia el padre
y la otra a la tierra va
es la estrella de David
es la estrella de Israel
la que nos trajo un ángel
mucha suerte nos dará.
El número siete
Cuando el príncipe regresó al castillo del rey, le regaló el dibujo de la estrella
de David, la de seis puntas que había dibujado.
Ese día estaba nublado, sin embargo el rey invitó al príncipe a caminar hasta
una colina, empezó a lloviznar, ellos se estaban felices de poder sentir la lluvia,
el viento soplaba fuerte, les agradó mucho sentir el viento en su cara, hacia el
occidente aún se observaban unos rayos de sol, era un paisaje muy hermoso,
lleno de luz y color, los pájaros volaban hacia sus nidos para no mojarse y
proteger a sus polluelos.
Al regresar al castillo, pudieron ver en el cielo un inmenso y hermoso arco iris
que iba de un lado a otro y que tenía muchos colores, estaban muy felices,
entonces el rey le preguntó al príncipe que cuantos colores había visto en él y
el príncipe que era muy listo y observador le dijo que siete; el rey lo felicitó y el
príncipe se despidió muy agradecido porque el rey le enseñaba cada día más y
más cosas bellas y grandes maravillas del universo que él poco a poco estaba
descubriendo.
Verso
Siete días tiene la semana
siete fases tiene la luna
siete los colores del arco iris son
siete los enanitos de Blanca Nieves
siete las columnas del templo del rey salomón
siete los mares del mundo
siete los arcángeles de Dios
y siete cuerdas tiene la lira de Apolo
que da música a mi corazón.
El número ocho
Al día siguiente, el rey salió como de costumbre a descansar en su bello jardín,
se asombró mucho porque ese día el príncipe no llegó, lo esperó al día
siguiente, pero tampoco regresó. El día tercero, llegó un mensaje para el rey, el
príncipe, le envió una carta en la que le decía que estaba enfermo a causa de
una picadura de araña. El rey le envió unas frutas y le dijo que pronto iría a
visitarlo.
Dos días después el rey partió en su carruaje dirigiéndose al castillo del
príncipe; allí fue recibido con honores.
El rey se acercó a la habitación del príncipe, lo saludó y le dió un presente, se
sentaron a conversar, el príncipe le habló de lo maravillado que estaba con la
experiencia de poder observar los siete colores del arco iris y luego le contó lo
que le había sucedido, le dijo que estaba caminando descalzo por el bosque;
que pisó una araña que tenía cuatro pares de patas, ella lo picó y por causa de
su veneno había enfermado.
Verso
La araña de ocho patas
muy quietecita estará
escondida en la telaraña
muchos bichitos comerá.
El número nueve
Mientras estaba en recuperación, el príncipe aprovechó este tiempo para
conversar con su madre, ella era una reina muy hermosa y bondadosa.
Ella le narró muchas historias de su infancia, la que él recordaba con mucho
cariño y gratitud por tanto amor y cuidado y le pidió a su madre que le hablara
una vez más sobre su nacimiento.
La reina madre le contó que después de un tiempo de haberse casado con el
rey, Dios les concedió la gracia de un hijo, ella debió esperar que pasaran
nueve lunas llenas y le explicó las diferentes fases por las que pasa la luna:
cuarta menguante, luna nueva, cuarta creciente y luego luna llena y le dijo
también que estas fases duraban un mes cada una; cuando pasaron las nueve
lunas, llegó su nacimiento, y que ellos sus padres, estaban muy felices y
agradecidos con Dios, todo en palacio estaba listo para recibirlo y se preparó
con mucha alegría.
La reina le dijo que al nacer ella lo miró con emoción y devoción y le contó los
deditos de sus pequeñas manos que parecían estrellitas, y vió que estaban
completicas.
La madre le dijo que a partir de su nacimiento, reinó en el castillo la alegría, el
rey y la reina lo cuidaron y educaron con mucho amor, y que a pesar de sus
riquezas él tenía una cunita muy humilde para que siempre recordara y
aprendiera la virtud de la humildad y así pudiera crecer como un príncipe de
noble corazón.
Verso
Un día un ángel
a la reina visitó
una gran noticia
a ella comunicó
Nueve lunas llenas
la reina ha de esperar,
hasta que desde el cielo
un hermoso niño
sea llevado
a su hogar.
El número 10
El nacimiento del príncipe, causó mucha alegría, no solo a sus padres; si no
también a todos los empleados que trabajaban en palacio.
El Jardinero puso en todos los jarrones frescas y bellas flores, el cocinero
preparó una deliciosa cena, el rey invitó a toda la gente de los reinos cercanos
a que conocieran el nuevo príncipe.
El príncipe le preguntó a su madre, porqué había contado los deditos de sus
manos y ella le dijo que para agradecer a Dios que las tuviera completas con
sus diez deditos, ya que las manos y el corazón están estrechamente
conectados, y así muy pequeñito podría conocer el mundo a través de ellas y al
crecer también podría moverlas tejiendo, pintando, jugando, sumando,
restando, sembrando, creando y sobre todo para que expresara el amor y la
ayuda a los demás.
El príncipe agradeció a su madre por las historias que le contó.
Cuando se recuperó; el rey su padre, lo invitó a caminar por el bosque para
contarle también otras historias muy interesantes que le iban a gustar.
Verso
Diez son los dedos de mis manos
con ellos sumo y resto al derecho y al revés
Diez son los dedos de mis pies
con ellos corro una y otra vez
Mis manos bellas son
con ellas juego yo
toco un instrumento
y se alegra mi corazón
pinto, tejo, siembro y creo
Y también yo doy amor
Maestra: Liliana Espinosa Ayala
35 años de experiencia en la pedagogía Waldorf
Licenciada en filosofía y letras - Universidad Pontificia Bolivariana
top related