ciber abuela

Hola a todos, les quiero contar una historia

La mía comienzael 8 de noviembre de 1912

junto a mi papá Alberto Donoso Garcés mi mamá Marta Infante Infante

y al Tito, mi hermano mayor

tuve una infancia super feliz

la paséjugando con el Tito

después llegó la Julia

y Jorge, que fue mi regalón

poco a poco fui creciendo,y entré al colegio de las

Monjas Inglesas donde hicemi Primera Comunión

Pasaba los veranos en el campo que mi abuelo, el tata Mateo tenía en Talca.

Era una viña llamada San Antonio

Raúl apareció en mi vida, cuando recién cumplí los 17 años

¡era un gran bailarin!Ibamos al Crillón donde

bailábamos los foxtrot de moda“I’m in love with you”

“I’m dancing with tears in my eyes” y los tangos “Mocosita”, y “Aquel tapado de armiño”

Así, el pololeo no tardó en llegar.Raúl me regaló una pulsera

de coligüe que llegaría a ser el juguete predilecto

de todos los niños.

La “Visita de Estilo” fue grandiosa. Fuimos a la casa de Raúl donde Don Marcelino y misia Victoria

nos esperaban a almorzar

con un gran menú hecho por la Marta, la hermana de Raúl

el 21 de mayo de 1936 al fin llegó.

Raúl me puso la argolla en cualquier dedo

y comenzamos la maravillosa aventura

de formar nuestra familia

Primero vino Raulito… …después, la Marta Victoria

… y Eugenito

y Francisco Javier

y Pelayo

La familia crecía…

… y los niños también

Pero aún faltaban Alvarito …

la Moniquita…

regalona de la Marta Victoria

y de la mami Olgui

y Albertito… que fue el Benjamín

con la llegada de los nietos

desde la Fran hasta Alvarito

Pero la familia no se detuvo aquí… nos preparamos para seguir creciendo

que decir de los bisnietos…Desde Pablito a la Guadalupe

¡son tantos!

En fin, juntos hemos pasado algunas penas…

Nos dejaron sus sonrisas y su alegría de vivir

Nos dejaron sus sonrisas y su alegría de vivir

Nos dejaron sus sonrisas y su alegría de vivir

Pero el tiempo no ha pasado en vano me he ido poniendo algo vieja

Pero los tengo a todos en mi corazón,

en mi computador…

“En este día tan solemne y evocador de nuestras “Bodas de Oro”, queremos la Martita y yo, renovar nuestras oraciones, pidiéndole al Señor, a la Virgen María, a los Santos Ángeles Custodios y a la Juanita de los Andes, que nos protejan, vigilen y cuiden a nuestra familia y sus parientes, para que ninguno se aparte de nuestra santa religión, que todos tengamos en qué trabajar y ganarnos

honradamente la vida, que nos conserve la salud, la sencillez y la alegría de vivir, para mejor serviros, si es de vuestro agrado.

Danos valor y resignación para recibir y soportar los sufrimientos que nos mandes, aplicándolos por el bien de nuestras almas,

cumpliéndose ante todo tu santa voluntad”AMÉN

Oración del Tata Raúl y Abuelita Marta en sus bodas de oro

y en mis oraciones