2011- tecnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biologicos exhumados de la fosa comun del...
Post on 03-Dec-2015
12 Views
Preview:
DESCRIPTION
TRANSCRIPT
-
TRABAJO DE INVESTIGACIN
TCNICAS FORENSES APLICADAS AL ESTUDIO DE
LOS RESTOS BIOLGICOS EXHUMADOS DE LA
FOSA COMN DEL MONTE COSTAJN
(ARANDA DE DUERO, BURGOS).
ACERCAMIENTO A UN INTENTO DE IDENTIFICACIN.
MARINA MARTNEZ DE PINILLOS GONZLEZ
Dirigido por:
JOS MIGUEL CARRETERO DAZ
-
Dibujo de la portada realizado por el artista Mecco Leone y el anatomista Francesco Bertinatti,
titulado Elementi di anatomia fisiologica applicata alle belle arti figurative, Turn (1837-39).
U.S. National Library of Medicine.
-
UNIVERSIDAD DE BURGOS DPTO. DE CC. HISTRICAS Y GEOGRAFA
REA DE PALEONTOLOGA
TRABAJO DE INVESTIGACIN
DIPLOMA DE ESTUDIOS AVANZADOS
2011
TCNICAS FORENSES APLICADAS AL ESTUDIO DE
LOS RESTOS BIOLGICOS EXHUMADOS DE LA
FOSA COMN DEL MONTE COSTAJN
(ARANDA DE DUERO, BURGOS).
ACERCAMIENTO A UN INTENTO DE IDENTIFICACIN.
MARINA MARTNEZ DE PINILLOS GONZLEZ
Dirigido por:
Dr. Prof. Jos Miguel CARRETERO DAZ
Facultad de Humanidades y Educacin de la Universidad de Burgos
Departamento de Ciencias Histricas y Geografa
Laboratorio de Evolucin Humana
rea de Paleontologa
-
TCNICAS FORENSES APLICADAS AL ESTUDIO DE
LOS RESTOS BIOLGICOS EXHUMADOS DE LA
FOSA COMN DEL MONTE COSTAJN
(ARANDA DE DUERO, BURGOS).
ACERCAMIENTO A UN INTENTO DE IDENTIFICACIN.
TRABAJO DE INVESTIGACIN
DIPLOMA DE ESTUDIOS AVANZADOS
2011
MARINA MARTNEZ DE PINILLOS GONZLEZ
Dirigido por:
Dr. JOS MIGUEL CARRETERO DAZ
VB
Fdo. Jos Miguel Carretero Daz
-
La guerra es una masacre entre gentes que no se
conocen, para provecho de gentes que s se
conocen pero que no se masacran
(Valerie)
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
AGRADECIMIENTOS
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Deseo expresar la ms sincera gratitud a mi director, el profesor y doctor de
paleontologa de la Universidad de Burgos, Jos Miguel Carretero Daz quien no slo
ha sido capaz de despertar mi inters por la antropologa, sino que adems ha confiado
en mi capacidad para investigar.
A mis compaeras Laura Rodrguez y Rebeca Garca, agradecerlas infinitamente
su tiempo prestado ayudndome a realizar el anlisis estadstico presente en este trabajo,
sin cuyo esfuerzo habra sido ms que difcil llevarlo a cabo.
Reconocer a Asier Gmez su desinteresado apoyo a la hora de elaborar ciertas
correcciones que tanto me han ayudado a avanzar en mi investigacin.
De forma especial a mis compaeros y ex-compaeros del Equipo de
Investigacin del Laboratorio de la Evolucin Humana -Amalia Prez Romero, Laura
Juez, Elena Santos, Ana Delia Rodrguez, Ana Gutirrez-Avellanosa, Ciarn Brewster y
Ana Isabel Ortega- que siempre me han ofrecido su comprensin y dedicacin en cada
momento.
Destacar la importante labor histrico-investigadora de Mara Bores Ureta, sin
cuyas apreciaciones este trabajo no hubiera sido igual.
En particular, quisiera agradecrselo a Restituto Velasco sin cuyo empeo y
tenacidad todo esto no hubiera salido adelante.
A la Universidad de Burgos, al Departamento de Ciencias Histricas y
Geografa y a los miembros del tribunal por el tiempo dedicado a la lectura de este
trabajo.
A las maravillosas personas y excelentes profesores y compaeros del
Mercyhurst College of Erie de Pennsylvania -en especial a Luis Cabo- que tanto me
aportaron y ensearon durante mi estancia en Estados Unidos.
A todos mis amigos de las excavaciones de Atapuerca que durante aos
llevamos veraneando juntos en la Sierra.
A mis siempre amigos messineses y a mis amigos de toda la vida por
recordarme una vez ms el valor de tenerles.
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Por ltimo, ms all de agradecer, quisiera dedicar este trabajo a toda mi familia, en
primer lugar a mis padres y a mi hermana por ser como son, sin cuya paciencia, su
apoyo y su cario nada tendra sentido. A mi abuela que durante todos estos aos ha
sido otra madre ms para m. Y de forma especial a Rafa, por ensearme que en la vida
no hay un da sin importancia. Sin vosotros nada sera lo mismo.
A todos, GRACIAS.
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
NDICE
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
1. INTRODUCCIN .................................................................................................. 17
1.1- Qu es la Antropologa Forense? ................................................................ 19
1.2- La Antropologa Forense y su aplicacin al estudio de restos seos procedentes
de fosas comunes ........................................................................................... 20
1.3- Objetivos y metodologa.................................................................................. 23
2. MATERIAL ............................................................................................................ 25
2.1- Historia del descubrimiento ........................................................................... 27
2.2- Material de estudio ........................................................................................ 29
3. MTODOS DE LA ANTROPOLOGA FSICA FORENSE ......................... 33
3.1- Estimacin del sexo ...................................................................................... 35
3.2- Determinacin de la edad anagrfica ............................................................ 40
3.3- Estimacin de la estatura .............................................................................. 59
3.4- Determinacin ideal del peso corporal de un individuo ............................... 67
3.5- Diagnsticos paleopatolgicos ..................................................................... 69
4. RESULTADOS Y DISCUSIN .......................................................... 77
4.1- Sobre la estimacin del sexo ......................................................................... 79
4.2- Sobre la edad anagrfica ...................................................................79
4.3- Sobre la estimacin de la estatura ............................................................... 119
4.4- Sobre la estimacin del peso en vida ......................................................... 154
4.5- Sobre diagnsticos paleopatolgicos .......................................................... 157
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
5. CONCLUSIONES ................................................................................................ 165
6. APNDICE ........................................................................................................... 171
6.1- Tratamiento de los restos en el laboratorio ................................................. 173
6.2- Otros diagnsticos paleopatolgicos .......................................................... 176
7. BIBLIOGRAFA ................................................................................................... 183
8. ANEXO (CD adjunto)
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 17
INTRODUCCIN
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 18
Madre con hijo muerto, uno de los nueve smbolos representados en el Guernica (Pablo Picasso, 1937) para ser expuesto en el pabelln espaol durante la Exposicin Internacional de Pars.
Museo Reina Sofa, Madrid.
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 19
1.1. QU ES LA ANTROPOLOGA FORENSE?
Consideramos que la definicin de Antropologa Forense que ms se ajusta a
nuestro criterio, es la dada en 1994 por Rodrguez Cuenca que la defiende como una
disciplina dentro del campo de la Antropologa Biolgica cuyo principal cometido consiste
en investigar, mediante la aplicacin de distintas tcnicas, la identidad de un individuo del
que slo se conserva su tejido seo.
Para ello, los especialistas en este campo, basndose en su conocimiento acerca de
la variabilidad humana y de los procesos biolgicos que la han originado, se encargan,
entre otras cosas, de diagnosticar el sexo, la edad y la raza que tuvo ese individuo en vida.
Adems de estimar su estatura, reconstruir su morfologa facial o encontrar variantes
anatmicas y/o patolgicas que lleven a una identificacin positiva. Todo esto, que
constituye la base de nuestro estudio, es lo que actualmente se conoce como Biologa
Forense del esqueleto.
Hoy en da, esta disciplina tiene su aplicacin en diversos campos como son el
policial, judicial, mdico-legal, etc. Gracias a ello se han podido identificar innumerables
victimas desaparecidas en los mltiples genocidios acaecidos mayoritariamente durante el
siglo XX. De este modo es por lo que, desde comienzos de los aos 80 del pasado siglo, la
Antropologa Forense ha visto incrementada su labor mediante los intentos de exhumacin
e identificacin de los desaparecidos. Tanto es as que en 1970 el antroplogo P.J. Matte
defini esta disciplina unificando varios criterios: la ciencia forense es el estudio y
prctica de la aplicacin de la ciencia a los propsitos de la ley (Matte, 1970:332).
Nueve aos ms tarde el Dr. T. Dale Stewart en su Essentials of Forensic Anthropology,
define la Antropologa Forense como: la rama de la antropologa fsica que, con fines
forenses, trata de la identificacin de restos ms o menos esqueletizados, humanos o de
posible pertenencia humana (T. Dale Stewart, 1979:152).
En 1981, M. Isan habl de esta disciplina como el peritaje forense sobre restos
seos humanos y su entorno y Amnista Internacional en 1994 defini la antropologa
forense como: el estudio de asuntos mdico-legales relacionados con una persona
fallecida, por medio de examen y el estudio de los restos del esqueleto para, entre otras
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 20
cosas, tratar de determinar la identidad de la persona, la forma y la causa de su muerte.
Ya en el ao 2000 Douglas Ubelaker dijo que se trataba de el estudio de la biologa
esqueltica en contextos mdico-legales (Parra y Palma, 2005).
1.2. LA ANTROPOLOGA FORENSE Y SU APLICACIN AL ESTUDIO
DE RESTOS SEOS PROCEDENTES DE FOSAS COMUNES.
Muchas son las asociaciones que se han ido conformando a lo largo del siglo XX
en el intento de dar respuesta a aquellas personas que viven en la incertidumbre por el
paradero real de algn amigo o familiar desaparecido. Es la causa de que hoy en da los
antroplogos apliquen sus conocimientos a las violaciones de los derechos humanos que
suceden en el mundo y que van ms all de la violencia humana y su hostilidad.
La historia de la antropologa forense en Norteamrica ha estado desde sus
comienzos estrechamente ligada a otras ciencias como la biologa, la medicina y la
odontologa. De este modo, en la actualidad existe un importante lazo de unin entre sta y
las Ciencias Jurdicas y Biomdicas. Esta disciplina cuenta con expertos como D.H.
Ubelaker, T.D. Stewart, M. Iscan, D. Thompson, C. Snow y muchos otros que han
trabajado en diferentes asociaciones y grupos creados para la defensa de los derechos
humanos. Sin embargo, en los pases de Amrica del Sur esta disciplina, a pesar de haber
sido introducida gracias a la escuela norteamericana, posee un enfoque distinto ya que la
necesidad de la misma ante los hechos que se estaban sucediendo, producto de los
regmenes polticos dictatoriales, as lo requera. Es decir, la Antropologa Forense en los
pases latinoamericanos [] no se puede limitar solamente a su aspecto biantropolgico
[] sino que el perito (antroplogo) forense debe conocer el contexto social en que se
producen las muertes violentas con el fin de obtener informacin ms amplia sobre las
circunstancias de la desaparicin de las vctimas. (Rodrguez Cuenca, 2004).
La desaparicin forzada de miles de personas como forma de represin llevada a
cabo por ciertos gobiernos dictatoriales sudamericanos fue el motivo por el cual, en 1978,
la Asamblea General de las Naciones Unidas pidi a la Comisin de Derechos Humanos
que investigase tales hechos, constituyndose dos aos despus el llamado Grupo de
Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias designado para tal fin. (Parra y
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 21
Palma, 2005). Por otro lado, gracias al Dr. Clyde C. Snow y a su experiencia en el campo
de la antropologa forense, en 1986 se funda el primer equipo antropolgico forense en
Amrica Latina: el Equipo Argentino de Antropologa Forense (EAAF). Dicha
organizacin cientfica, no gubernamental y sin nimo de lucro, comenz las labores de
bsqueda de los desaparecidos durante la dictadura Argentina conocida como el "Proceso
de Reorganizacin Nacional" que tuvo lugar entre los aos 1974 y 1983. Poco a poco la
experiencia del Equipo Argentino de Antropologa Forense se fue extendiendo a otros
pases de Amrica Latina, frica, Asia y Europa del Este. Entre los ms destacados de
Amrica del Sur se encuentran:
Asociacin Latinoamericana de Antropologa Forense (ALAF)
Fundacin de Antropologa Forense de Guatemala (FAFG)
Equipo Peruano de Antropologa Forense (EPAF)
Centro de Anlisis Forense y Ciencias Aplicadas (CAFCA-Guatemala)
Centro Andino de Investigaciones Antropolgico Forenses (CENIA-Per)
Equipo Forense Especializado (EFE-Per)
Equipo Colombiano Interdisciplinario de Trabajo Forense y Asistencia
Psicosocial (EQUITAS)
En Espaa, aunque desde 1850 la Medicina Legal y Forense es considerada una
disciplina cientfica independiente, el Ministerio de Educacin y Ciencia entiende la
Antropologa Forense como una subdisciplina dentro de la Antropologa Fsica (Prieto y
Snchez, 2003). Con todo, la Antropologa Forense ha adquirido en los ltimos aos un
mayor protagonismo, cuyos estudios se imparten en diferentes universidades espaolas
como la Universidad Complutense de Madrid, la Universidad de Alicante, la de Valencia,
Granada, Zaragoza, la del Pas Vasco y la Autnoma de Barcelona.
En los ltimos aos, la idea de reivindicar los cuerpos de los que fueron asesinados
y enterrados en fosas comunes tras el alzamiento militar de 1936 ha cobrado un mayor
alcance, hasta el punto de convertirse para muchos en una necesidad tica.
Anteriormente, cuando se queran recuperar los restos de un familiar deba hacerse
de un modo clandestino, levantando la tierra y sacando unos huesos que, mezclados con
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 22
muchos otros, podan pertenecer o no al individuo en cuestin. Sin embargo en el ao
2000, la excavacin de la fosa comn de Priaranza del Bierzo (provincia de Len) supuso
un antes y un despus en el proceso de exhumacin de los cuerpos. Diferentes especialistas
en antropologa forense, paleopatologa y arqueologa trabajaron bajo una metodologa
arqueolgica hasta el momento nunca utilizada en excavaciones de este tipo. Fue
considerada la primera intervencin de carcter oficial con propsito de recuperar los
restos de las vctimas fusiladas durante la guerra civil espaola. Todo ello gener en
Espaa la aparicin de diversos colectivos Foro por la Memoria, Asociacin para la
Recuperacin de la Memoria Histrica, etc.- nacidos en el seno de la sociedad civil con el
fin de ayudar y crear las bases judiciales necesarias para actuar en tales situaciones.
A comienzos de septiembre de 2003 Jos Mara Rojas Ruz, afiliado a la Izquierda
Republicana de Aranda, y Restituto Velasco Mat, vecino y ex edil de la misma localidad,
se proponen intentar localizar el mayor nmero de fosas comunes prximas a Aranda de
Duero. Gracias a la desinteresada ayuda de dos vecinas del lugar, llegan a descubrir los
restos seos de un joven fusilado y enterrado all, lo que facilit la autorizacin para
comenzar el largo proceso de excavacin, con el posterior estudio de las numerosas fosas
comunes que rodean la localidad arandina. Este primer esqueleto sirvi para concienciar a
las autoridades municipales sobre la importancia de colaborar en la recuperacin de
aquellos que fueron asesinados y enterrados en la zona. Para ello se abri un registro por el
que los familiares de los desaparecidos pudiesen solicitar la exhumacin de los restos por
parte de un equipo cualificado y ser posteriormente trasladados al cementerio de Aranda de
Duero. En el ao 2003, el equipo de investigacin del Laboratorio de Evolucin Humana,
bajo la direccin del Profesor Jos Miguel Carretero Daz, llev a cabo la excavacin de la
primera fosa comn en el monte Costajn; fue denominada la Rastrilla, debido al
topnimo del paraje en el que se encontraba, y en ella se recuperaron un total de 81
individuos en conexin anatmica.
Debido a la importancia del asunto y a la repercusin moral generada, un ao ms
tarde se firma un convenio entre el Ayuntamiento de Aranda de Duero, la Universidad de
Burgos y la empresa constructora TCA, con el fin de localizar ms fosas comunes cuyas
exhumaciones permitiesen el estudio de todos y cada uno de los restos hallados en las
mismas. Entre ellas se encuentra la fosa comn relacionada con nuestra investigacin.
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 23
1.3. OBJETIVOS Y METODOLOGA
La finalidad ltima del presente estudio es aportar pruebas fehacientes que faciliten
el posterior intento de identificacin de las vctimas exhumadas del monte Costajn. Para
ello, lo primero que hemos de hacer es una comparacin metodolgica entre las distintas
tcnicas, que nos permita obtener el mtodo de estimacin para los diferentes parmetros
biolgicos que mejor se ajuste a nuestra muestra. Una vez conseguido se aplicar a cada
uno de los individuos, haciendo mayor hincapi en la estatura y en la edad como factor
clave a la hora de lograr su identificacin.
Los datos de nuestra investigacin han sido obtenidos gracias a un gran nmero de
estudios previos de los restos seos y materiales (antropomtricos, comparativos,
restauracin, etc.) llevados a cabo por los profesionales de investigacin del Laboratorio
de Evolucin Humana, bajo la direccin del Profesor Jos Miguel Carretero Daz, as
como de la informacin contenida en los documentos aportados por los familiares de las
vctimas. Los objetivos especficos y primordiales en nuestra investigacin sern:
1.- Estimar diferentes parmetros biolgicos (edad, estatura y peso corporal) de los
individuos objeto de nuestro estudio de la manera ms precisa posible, pudiendo llegar a
elaborar frmulas de regresin propias y especficas para ellos.
2.- Comparar la metodologa existente entre las distintas tcnicas de estimacin
aplicadas a nuestro caso concreto, para analizar y evaluar la precisin y exactitud de los
resultados con el fin de lograr el rango de estimacin con menor margen de error posible.
3.- Valorar la influencia de los mtodos utilizados en base a los resultados
obtenidos, llegando as a discutir y estimar la mejor tcnica para los individuos de nuestra
muestra.
4.- Intentar conseguir la mayor aproximacin posible de los datos, para acercarnos
con la mayor precisin a la identificacin positiva de los individuos.
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 24
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 25
MATERIAL
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 26
A Human Skeleton, pintura en leo realizada por el artista romntico ingls James Ward (1769-1859).
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 27
2.1. HISTORIA DEL DESCUBRIMIENTO
Al sur de la provincia de Burgos se encuentra el trmino municipal de Aranda de
Duero, cuya poblacin actual es de 31.247 habitantes en un espacio de 127 Km2. El lugar
de los hechos, clave para nuestro estudio, es el monte Costajn, un bosque abierto de
encinas y robles situado al norte de dicho trmino municipal. En su zona Este se empez a
llevar a cabo en agosto del 2002 un proyecto de urbanizacin que, ante el hallazgo de una
fosa comn de la Guerra Civil Espaola, hubo que posponer.
Fig.1 Mapa de Espaa, de la provincia de Burgos y de la localidad de Aranda de Duero.
Durante los primeros meses del ao 2003, Jos Mara Rojas y Restituto Velasco,
con la ayuda testimonial de diferentes familiares, iniciaron una bsqueda para la
localizacin de las fosas comunes de Aranda de Duero. Tras el hallazgo de los primeros
restos seos la bsqueda se intensific y el Ayuntamiento de dicha localidad, con Luis
Briones Martnez como alcalde, solicit al equipo de la Universidad de Burgos que
colaborase en las labores de excavacin y exhumacin de todos los materiales
arqueolgicos y antropolgicos encontrados. Por su parte, Restituto Velasco elabor una
lista, a lo largo de los aos, en la que rene buena parte de los desaparecidos de Aranda y
de los pueblos de alrededor. Segn sus cifras, un mnimo de 108 vecinos de Aranda de
Duero pudieron ser asesinados en el segundo semestre de 1936.
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 28
Las previsiones hablaban de la existencia de dos fosas comunes donde se
encontraban enterrados los individuos fusilados a comienzos de la Guerra Civil, finalmente
el nmero de las mismas ascendi a seis. Todas tienen una orientacin Este-Oeste,
alargadas, angostas, de escasa profundidad y con fondo irregular, situadas sobre una
superficie arenosa, lo que facilita la interpretacin de que pudieron haber sido hechas de
forma manual con herramientas comunes como el pico y la pala (Eduardo Cristbal
Villanueva, 2003).
Para facilitar el proceso de estudio y entendimiento de los restos exhumados con
respecto a la excavacin, se crearon dieciocho tandas correspondiendo a las seis fosas
comunes finalmente documentadas. Pero a comienzos del mes de junio de 2006, se
comunic el hallazgo de nuevos restos seos humanos cercanos a las fosas denominadas
aos antes como D y E. En aquel momento, el equipo de la Universidad de Burgos,
comenz limpiando los bordes del manchn que delimitaban la zanja para rebajar el
terreno y retirar los sedimentos de la misma. Finalmente, se lleg a la conclusin de que la
nueva zanja se encontraba situada en el extremo oriental de la antigua fosa B, pudindola
localizar exactamente entre sta y la fosa D (vase Figura 2).
Esta nueva fosa fue pasada por alto en la primera intervencin arqueolgica del ao
2003, al estar oculta bajo el testigo existente entre las Unidades de Excavacin A y C. Fue
denominada como fosa G, aunque hemos de aclarar que lo que en la actualidad es
considerado como fosas B, D y la nueva G, no sera sino un nico enterramiento con la
misma orientacin que las dems pero de casi 23 metros de longitud. A pesar de esto y
para evitar posibles confusiones, la distribucin de las fosas excavadas queda tal y como se
clasific en el ao 2003, as como la nueva fosa G. De este modo, la Fosa B alberga en su
interior tres tandas diversas con veintids individuos enterrados; la Fosa D, cuatro tandas
con catorce sujetos; y la nueva e intermedia Fosa G, se compone de una sola tanda con tres
individuos registrados con las numeraciones 82, 83 y 84.
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 29
Fig.2 Esquema de las fosas encontradas en el monte Costajn (Aranda de Duero)
2.2. MATERIAL DE ESTUDIO
Con todo ello podemos documentar la existencia de 7 fosas comunes dentro de las
cules, agruparamos en 19 tandas a los 84 individuos fusilados en los primeros momentos
del alzamiento de la Guerra Civil Espaola. Sin embargo, hay que hacer hincapi en la
necesidad de continuar con las anteriores enumeraciones dadas a las fosas ya que, de no
ser as, podramos caer fcilmente en dudas y equvocos que dificultaran la comprensin
de la metodologa anterior. Quedaran, por tanto, distribuidas de la siguiente manera:
Unidad de Excavacin A
-Fosa A: Tanda 1 1 individuo
Tanda 2 5 individuos
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 30
-Fosa B: Tanda 1 7 individuos
Tanda 2 6 individuos
Tanda 3 9 individuos
Unidad de Excavacin B
-Fosa C: Tanda 1 5 individuos
Tanda 2 4 individuos
Tanda 3 1 individuos
Tanda 4 1 individuos
Tanda 5 1 individuos
Tanda 6 7 individuos
Tanda 7 8 individuos
Unidad de Excavacin C
-Fosa D: Tanda 1 3 individuos
Tanda 2 2 individuos
Tanda 3 7 individuos
Tanda 4 2 individuos
-Fosa E: Tanda 1 4 individuos
-Fosa F: Tanda 1 8 individuos
Nueva Fosa G : Tanda 1 3 individuos
El material de estudio consta de 84 individuos exhumados de siete fosas comunes
excavadas en la localidad de Aranda de Duero (Burgos). Nuestro propsito es conseguir la
determinacin ms exacta posible mediante comparacin de mtodos- en cuanto a la
estatura, la edad, el peso y el sexo de cada uno de ellos, lo que puede verse favorecido por un
buen conocimiento patolgico y una correcta interpretacin de posibles enfermedades
existentes en vida.
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 31
Tabla1. Unidades de excavacin, fosas e individuos hallados en el monte Costajn entre los aos 2003 y
2006.
Unidad de
Excavacin A
Unidad de
Excavacin B Unidad de Excavacin C
Nueva Unidad de
Excavacin
Fosa A Fosa B Fosa C Fosa D Fosa E Fosa F Fosa G
I-A-1 I-B-7 I-C-29 I-D-56 I-E-70 I-F-74 I-G-82
I-A-2 I-B-8 I-C-30 I-D-57 I-E-71 I-F-75 I-G-83
I-A-3 I-B-9 I-C-31 I-D-58 I-E-72 I-F-76 I-G-84
I-A-4 I-B-10 I-C-32 I-D-59 I-E-73 I-F-77
I-A-5 I-B-11 I-C-33 I-D-60 I-F-78
I-A-6 I-B-12 I-C-34 I-D-61 I-F-79
I-B-13 I-C-35 I-D-62 I-F-80
I-B-14 I-C-36 I-D-63 I-F-81
I-B-15 I-C-37 I-D-64
I-B-16 I-C-38 I-D-65
I-B-17 I-C-39 I-D-66
I-B-18 I-C-40 I-D-67
I-B-19 I-C-41 I-D-68
I-B-20 I-C-42 I-D-69
I-B-21 I-C-43
I-B-22 I-C-44
I-B-23 I-C-45
I-B-24 I-C-46
I-B-25 I-C-47
I-B-26 I-C-48
I-B-27 I-C-49
I-B-28 I-C-50
I-C-51
I-C-52
I-C-53
I-C-54
I-C-55
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 32
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 33
MTODOS
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 34
Primer boceto conocido de Charles Darwin sobre el rbol de la vida dibujado en su Cuaderno Terico de
Notas B (1837), en el que muestra la relacin entre grupos de organismos.
Cambridge University Library.
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 35
3.1. ESTIMACIN DEL SEXO
Para saber el sexo de los individuos de nuestro estudio han sido aplicados los
criterios de Ferembach et al. (1979). Las zonas del esqueleto que aportan mayor fiabilidad
a la hora de determinar este aspecto son la pelvis y el crneo, aunque si no se dispone de
dichas partes, se deber tomar cualquier referencia posible que nos permita acercarnos de
un modo ms o menos eficaz a lo que sera el sexo del individuo.
Segn estudios de Juan Luis Arsuaga y Jos Miguel Carretero, en los humanos -al
igual que en la mayora de los primates- el dimorfismo sexual suele ser evidente entre
machos y hembras, sin embargo existen individuos denominados alofisos cuya
caracterstica reside en poseer rasgos poco definidos o medidas propias de ambos sexos,
dificultando as la labor de determinacin sexual. Es por ello que, desde hace ms de dos
siglos, diferentes cientficos tratan de determinar el sexo segn la apariencia, la forma y el
peso de los huesos humanos. En 1972 fue convocada una reunin en Praga a la que
asistieron diversos antroplogos europeos, con el fin de redactar una serie de postulados
que ayudasen al investigador a identificar el sexo y la edad del individuo (Krenzer, 2006).
En lo que se refiere a las diferencias bio-morfolgicas, hay que sealar que entre
los sexos se manifiestan ms en esqueletos adultos que en subadultos, las cuales quedan
patentes debido a la influencia de hormonas que controlan el desarrollo y crecimiento de
los huesos. De este modo, las mujeres finalizan su desarrollo antes que los varones,
quienes modifican su apariencia de forma drstica en la pubertad. El problema est en que,
en numerosas ocasiones, se dispone nicamente de una parte del esqueleto, a lo que a
veces se suma la complejidad de estar fragmentado y/o alterado por diversos agentes,
entorpeciendo as an ms su clasificacin. En los casos de esqueletos incompletos
podemos obtener una mayor o una menor seguridad en cuanto al sexo del individuo
dependiendo del tipo de hueso que se conserve. De esta manera, los porcentajes de
fiabilidad segn el antroplogo R.S. Meindl et al. (1995) seran los que mostramos en la
siguiente tabla:
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 36
Tabla 2. Porcentajes de fiabilidad que permiten conocer
el sexo del individuo segn Meindl et al. (1995)
La pelvis es la regin anatmica ms diagnstica y que ms informacin nos aporta
sobre este aspecto, ya que las diferencias sexuales existentes estn directamente
relacionadas con la adaptacin de las mujeres al parto. Dicha circunstancia tiene como
consecuencia que el sacro se halle ms desplazado hacia atrs en las mujeres que en los
hombres y, que a su vez, los coxales presenten una mayor apertura, estableciendo as que
las diferencias plvicas entre un macho y una hembra no sean tanto de tamao sino sobre
todo de morfologa (Arsuaga y Carretero, 1999). Por lo general, el sacro femenino tiende a
ser ms ancho y corto que el masculino, existiendo una mayor curvatura entre las ltimas
vrtebras lumbares y las primeras sacras. A su vez, otra caracterstica diferencial es el
dimetro transverso de la superficie articular superior del sacro, siendo en las mujeres ms
pequeo que en los hombres. Por lo tanto, podemos concluir diciendo que las pelvis
femeninas son ms ligeras y anchas, y poseen un hueso pbico ms largo, as como una
escotadura citica y un ngulo subpbico ms abiertos. Todo esto hace que el canal del
parto sea ms amplio, por lo que la dimensin predominante en la pelvis femenina es la
horizontal, mientras que en la masculina es la vertical (Arsuaga y Carretero, 1999). De esta
manera, los elementos en los que nos basaremos a la hora de realizar el anlisis son:
1. Ausencia o presencia del surco preauricular
2. Mayor o menor ngulo de apertura de la escotadura citica (una de las
caractersticas ms importantes para determinar el sexo del individuo)
3. Morfologa del pubis
HUESOS LARGOS 80%
CRNEO 80-92%
HUESO COXAL 96%
CRNEO + PELVIS 97%
ADN 99,9%
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 37
Abajo mostramos una tabla con las principales diferencias morfolgicas que
permiten llevar a cabo una correcta identificacin sexual.
Tabla 3. Comparacin entre las caractersticas plvicas de los hombres y de las mujeres. (Antropologa
forense Reverte Coma, 1999)
CARACTERSTICAS PLVICAS
MASCULINAS (ANDROPIGIA)
CARACTERSTICAS PLVICAS
FEMENINAS (GINOPIGIA)
Pelvis tiende a ser estrecha y alargada Pelvis tiende a ser ms ancha y corta
Coxales ms grandes y pesados Coxales de menor tamao y espesor
ngulo de la escotadura citica ms cerrado (forma de
mango de paraguas)
ngulo de la escotadura citica ms abierto (forma de
mango de bastn)
ngulo subpbico agudo (menor de 90) ngulo subpbico recto (igual o mayor de 90)
Snfisis pbica ms alta Snfisis pbica ms baja y corta
Cavidad acetabular o cotiloidea de mayor tamao Cavidad acetabular o cotiloidea de menor tamao
Agujero obturador ms ancho y ovalado Agujero obturador ms estrecho y triangular
Carilla articular ms larga y de superficie cncava Carilla articular menor y de superficie convexa
Surco preauricular inexistente Surco preauricular profundo (5-10 mm)
Tuberosidad isquistica ms basta y rugosa Tuberosidad isquistica ms fina y grcil
Cresta ilaca muy rugosa y contorneada Cresta ilaca ms fina y aplanada
Fosas ilacas internas ms estrechas y cerradas Fosas ilacas internas ms anchas y abiertas
ngulo sacro vertebral menos pronunciado ngulo sacro vertebral ms echado hacia adelante
Promontorio pbico escaso, generando una menor
probabilidad de sufrir lordosis lumbo-sacra
Promontorio pbico ms marcado, pudiendo provocar
lordosis lumbo-sacra
En el crneo, las diferencias sexuales se aprecian en la robustez y el tamao del
mismo, as como en la mayor prominencia de la cresta supraorbitaria y de las apfisis
mastoides. Pero hemos de tener cuidado a la hora de clasificarlo, puesto que el aspecto
craneal de un individuo masculino va configurndose poco a poco, y lo que nos pueda
parecer un crneo con rasgos femeninos, quiz no sea ms que las caractersticas propias
del crneo de un varn juvenil en proceso de formacin, lo que sin duda puede ser motivo
de confusin.
Hay, por lo general, otra diferenciacin bsica que en ocasiones facilita la
determinacin sexual del individuo; las mujeres suelen mostrar una frente recta y plana en
oposicin a lo que se conoce como frente huidiza, caracterstica propia de los hombres y
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 38
que se aprecia por proyectarse ms hacia atrs. Diremos tambin que en cuanto al hueso
mandibular, los hombres tienden a mostrar una mayor anchura y un mentn ms robusto
que las mujeres.
A continuacin detallaremos de un modo simple las diferencias sexuales ms
significativas en lo que respecta al crneo de hombres y mujeres.
Tabla 4. Diferencias claves entre los rasgos craneales masculinos y los femeninos. (Antropologa forense
Reverte Coma, J.M., 1999)
RASGOS CRANEALES MASCULINOS RASGOS CRANEALES FEMENINOS
Crneo ms pesado y anguloso Crneo menos pesado, ms fino y redondeado
Crneo tipo parietal Crneo tipo frontal
Frente huidiza Frente ms plana y recta
Zona supraorbitaria ms prominente Zona supraorbital sin apenas relieve
Arcos zigomtico ms anchos Arcos zigomticos finos y estrechos
Bveda craneana de mayor espesor (8-10 mm.) Bveda craneana con menor espesor (4-6 mm.)
Mayor volumen craneal (+1.300 cc.) Menor volumen craneal (1.300 cc.)
Gran relieve y rugosidad en las crestas temporales,
escama occipital y base del crneo
Menor relieve y rugosidad de las crestas temporales,
escama occipital y base craneal
Apfisis mastoides grandes y robustas Apfisis mastoides ms finas
Cndilos occipitales que no sobresalen ms que las
apfisis mastoides
Cndilos occipitales ms salientes que las apfisis
mastoideas
Gran protuberancia occipital externa (POE) Protuberancia occipital externa sin apenas relieve (POE)
Malares ms robustos y macizos Malares ms pequeos y delicados
Huesos nasales ms grandes Huesos nasales de menor tamao
Apertura nasal ms alargada Apertura nasal ms baja y redondeada
Espina nasal anterior de mayor tamao Espina nasal anterior ligera y menor
Fosa canina de mayor profundidad Fosa canina menos profunda
Cavidad glenoidea ms profunda Cavidad glenoidea menos profunda
Mandbula de mayor espesor, peso y altura Mandbula de menor espesor, peso y altura
Cndilos mandibulares ms grandes Cndilos mandibulares grciles
ngulo mandibular tiende a ser recto (90) ngulo mandibular mayor de 90
Mentn ms cuadrado y robusto Mentn ms saliente y afilado
Paladar ms ancho y profundo Paladar estrecho y menos profundo
Dientes de mayor tamao Dientes de menor tamao
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 39
Si contamos con la existencia de los huesos de las extremidades superiores e
inferiores, haremos uso de ellos sabiendo que, por lo general, los de los varones son ms
pesados, fuertes y largos, y sus epfisis ms anchas y robustas. Las rugosidades existentes a
causa de las inserciones musculares se encuentran bastante marcadas en los individuos
masculinos, mientras que en los femeninos stas son suaves y disipadas.
Los huesos de las manos (metacarpos, carpos y falanges) y de los pies (metatarsos,
tarsos y falanges), en los hombres se caracterizan por ser ms grandes, largos y pesados,
mientras que en las mujeres son ms pequeos, finos y delicados, facilitando por tanto la
diferenciacin entre unos y otros.
Las clavculas, de los hombres suelen ser ms largas, robustas y pesadas, aunque
no siempre debemos guiarnos por este aspecto ya que el estrs ocupacional y la lateralidad
del individuo producido por el tipo de trabajo realizado durante su vida, puede producir
variaciones en las caractersticas anteriormente descritas.
Otro de los huesos que nos puede ayudar a determinar el sexo es el omplato,
siendo ms pequeo y ligero en las mujeres y cuya cavidad glenoidea es ms estrecha. As
mismo, la espina escapular y el acromion suelen ser, en la mujer, partes ms delicadas que
en los individuos de sexo masculino.
Si hablamos del trax como nico elemento a tener en cuenta para estimar el sexo
de un individuo, en los varones ste se encuentra ms desarrollado, es decir, la
circunferencia que podemos trazar alrededor de la caja torcica es mayor en los individuos
masculinos que en los femeninos. Ello es debido a que las hormonas de los hombres
(testiculares) influyen en el desarrollo de la zona torcica, mientras que las hormonas
femeninas (ovricas) actan en el crecimiento de la zona plvica; lo que explicara, en
parte, que los hombres se caractericen por tener una espalda ancha, mientras que en las
mujeres dicho desarrollo se centra en la zona de la pelvis con el consecuente
ensanchamiento de las caderas.
Desglosando las diferentes partes de la caja torcica, es decir, costillas por un lado
y columna vertebral por otro, podremos determinar el sexo de un individuo sabiendo que,
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 40
en las mujeres las costillas son ms ligeras y poseen una altura y un espesor menor que las
de los hombres. Esto tambin ocurre en la columna vertebral, donde los individuos
masculinos presentan un mayor tamao y robustez en sus vrtebras que los individuos del
sexo opuesto. Adems, si se conserva la primera vrtebra cervical -conocida con el nombre
de Atlas- la identificacin se har de un modo ms fiable, ya que la anchura de la misma es
mayor en los varones que en las hembras, debido a que en aquellos las apfisis transversas
de dicha vrtebra son ms gruesas que las de la mujer.
3.2. DETERMINACIN DE LA EDAD ANAGRFICA
El esqueleto humano es un sistema vivo y dinmico compuesto por diversas
estructuras vivas como son los huesos y los dientes que se desarrollan, crecen y degeneran,
reflejndose en ellos el paso del tiempo. Las etapas de la vida son seis, englobadas en dos
grandes campos: subadultos y adultos. Dentro de los subadultos se encuentran: la infancia
(de 0 a 3 aos), la niez (de 3 a 12 aos) y la adolescencia (de 12 a 20 aos); mientras que
en el grupo de los adultos estaran: la edad adulta (de 20 a 40 aos), la madurez (de 40 a 60
aos) y la edad senil (ms de 60 aos).
Tabla 5. Etapas de desarrollo de un individuo.
ETAPAS AOS
SUBADULTOS Infancia 0 a 3
Niez 3 a 12
Adolescencia 12 a 20
ADULTOS Edad adulta 20 a 40
Madurez 40 a 60
Edad senil ms de 60
La estimacin de la edad anagrfica o edad de la muerte, es uno de los aspectos
ms importantes -junto con el sexo y la estatura- de todo estudio antropolgico. Los
mtodos para determinar la edad de la muerte varan segn el grupo de edad que se trate
(Reverte Coma, 1999). Sin embargo, pueden dividirse en criterios de formacin y criterios
de degeneracin (Burns, 1999). Siempre que sea posible hay que intentar combinar ms de
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 41
un mtodo, puesto que la estimacin de la edad de la muerte de un esqueleto es un rango
ms o menos amplio dependiendo del estado de conservacin del mismo.
Conocer el momento aproximado en el que los huesos comienzan su estado de
fusin es bsico para llegar a determinar, con mayor o menor exactitud, la edad de un
individuo en su etapa de adolescencia. Por ello, es tambin importante saber que los
centros de osificacin se clasifican en tres: los centros de osificacin primarios o
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 42
diafisarios, los secundarios o epifisarios y los conocidos como grmenes dentarios que
sern los que posteriormente conformen los dientes, tanto deciduales como permanentes. A
continuacin mostramos una tabla con los principales centros de osificacin segn reflejan
los antroplogos W.M. Krogman e M.Y. Isan en su clebre The Human Skeleton in
Forensic Medicine (Krogman e Isan, 1986):
Tabla 6. Centros secundarios de osificacin segn Krogman e Isan (1986)
CENTROS SECUNDARIOS DE OSIFICACIN (rango de edades aproximadas expresadas en aos)
ESCPULA
Acromion: 18-19
Margen vertebral: 20-21
Angulo inferior: 20-21
PELVIS
Elementos primarios: 13-15
Cresta ilaca: 18-19
Tuberosidad isquistica: 19-20
CLAVCULA
Terminacin esternal: 25-28
Terminacin acromial: 19-20
FMUR
Cabeza: 17-18
Trocnter mayor: 17-18
Trocnter menor: 17-18
Epfisis distal: 17,5-18,5
HMERO
Cabeza: 19,5-20,5
Epfisis distal: 14-15
Epicndilo medial: 15-16
TIBIA
Epfisis proximal: 17,5-18,5
Epfisis distal: 15,5-16,5
RADIO
Epfisis proximal: 14,5-15,5
Epfisis distal: 18-19
FBULA
Epfisis proximal: 17,5-18,5
Epfisis distal: 15,5-16,5
Calcneo: 14,5-15,5
ULNA
Epfisis proximal: 14,5-15,5
Epfisis distal: 18-19
MANO
Metacarpianos: 15,5-16,5
Falange I: 15-16
Falange II: 15-16
Falange III: 14,5-15,5
PIE
Metatarsianos: 15-16
Falange I: 14,5-15,5
Falange II: 14-15
Falange III: 14-15
Para determinar la edad en individuos infantiles hemos de utilizar mtodos
sistemticos de crecimiento, mientras que para establecer la edad en esqueletos adultos
hemos de hacer uso de criterios degenerativos, ya que es en esta etapa cuando el tejido
seo comienza a remodelarse para pasar posteriormente a iniciar un proceso de
decadencia. En estos casos nos fijaremos en la obliteracin de las suturas craneales, en la
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 43
superficie esternal de las costillas -particularmente en la cuarta costilla derecha-, en la
fusin esterno-clavicular, as como en el desarrollo de la snfisis pbica y de la faceta
auricular del ilion, siendo estas ltimas las de mayor fiabilidad. No obstante, tambin se
puede utilizar el desgaste dental como mtodo para la estimacin de la edad en sujetos
adultos, aunque hemos de tener en cuenta que ste siempre nos va a proporcionar una edad
relativa, y no la edad concreta que se obtiene de aquellos individuos en los que la etapa de
desarrollo dental todava no ha llegado a su fin.
3.2.1. CRNEO
- Suturas craneales
El crneo no es un hueso nico y compacto, sino que son varios unidos por
lneas de divisin, conocidas con el nombre de suturas. Los huesos de la bveda
craneal estn formados por dos capas -tbula interna y tbula externa- separadas
por una zona esponjosa conocida con el nombre de diploe, la cual, a partir de los 50
aos comienza a ser reemplazada por hueso compacto y no esponjoso.
Al nacer, los huesos del crneo se encuentran completamente separados y,
por tanto, no ser hasta la edad adulta cuando comience el proceso de unin de las
suturas, producindose
propiamente en la vejez el
grado mximo de fusin
(sinostosis). Para la mayor
parte de los antroplogos, la
obliteracin de las suturas
comienza generalmente de un
modo endocraneal y sigue
exocranealmente, as como
del centro a la periferia.
Fig.3 Frontal y parietal de inmaduro
(Scheuer & Black, 2000)
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 44
H.D. Schmidt en 1888 advirti que la sutura basilar del esfeno-occipital se
una en torno a los 18-21 aos aproximadamente, retrasndose en ocasiones hasta
los 21-23 aos. Por su parte, las suturas de la bveda craneana emprenderan su
obliteracin hacia los 25-30 aos, cerrndose por completo sobre los 40-60 aos.
Ya a comienzos del siglo XX, los antroplogos K. Pearson y G. Box (1905)
afirmaron que en las mujeres la obliteracin craneal sola producirse aos ms tarde
que en los varones. De forma general, la sinostosis endocraneal no suele comenzar
antes de los 30 aos edad en la que comienzan tambin el cierre de las suturas
coronal y sagital- llegando a alcanzar su fusin mxima hacia los 50 y 60 aos.
Aos ms tarde, el antroplogo alemn J. Frdric (1905, 1909-1910),
estableci cinco categoras diferentes a la hora de determinar la edad de un
individuo en base a la obliteracin de las uniones faciales y de la bveda. Ide la
siguiente escala: 0 = sin cerrar, 1 = menos de la mitad cerrado, 2 = la mitad
cerrado, 3 = ms de la mitad cerrado, y 4 = obliterado o cerrado por completo.
Siguiendo los estudios y la escala de valores del investigador alemn
Frderic, en 1924 los antroplogos T W. Todd y D.W. Lyon llegaron a crear su
propia frmula sin encontrar diferencias en cuanto a raza y lado craneal. A travs
de ella dividan las suturas sagital, coronal y lambdoidea en secciones diferentes, de
tal modo que la primera
estara formada por la zona
bregmtica, vrtica,
oblica y lmbdica; la
segunda por la bregmtica,
complicata, estefnica y
ptrica; y la tercera se
dividira en lmbdica,
media y astrica.
Fig.4 Divisin de las suturas coronal, sagital y
lambdoidea (Todd y Lyon, 1924).
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 45
En 1957, T.W. McKern y T.D. Steward siguiendo a los investigadores
Todd y Lyon- propusieron la divisin craneal en cinco estadios diferentes segn los
grados de obliteracin. As las suturas sagital y
coronal quedaran divididas en cuatro partes,
comenzando su proceso de obliteracin por la
primera y ltima seccin. Mientras, la sutura
lambdoidea, compuesta tan solo de tres partes,
comenzara su fase de cierre por la primera
seccin. Por su parte, la sutura palatina se
fusionara entre los 45 y 50 aos y la apfisis
basio-occipital comenzara a unirse con la basio-
esfenoidea hacia los 17 aos de edad, apareciendo
completamente fusionadas unos cinco aos ms
tarde.
Las ltimas investigaciones sobre la relacin existente entre el cierre de las
suturas craneales y la edad, fueron llevadas a cabo por los antroplogos R.S.
Meindl y C.O. Lovejoy en 1985, segn ellos la sinostosis de las suturas se podran
dividir en dos grupos: las que se encuentran en la bveda craneal -1, 2, 3, 4, 5, 6 y
7-, y las que se sitan en la zona latero-anterior del crneo -8, 9 y 10-. De este
modo descubrieron que las regiones que comenzaban y finalizaban antes el proceso
de obliteracin eran el obelion y el pterion, y que el resultado del anlisis y estudio
de las suturas latero-anteriores era mucho ms preciso que el obtenido del cierre de
las localizadas en la bveda. Finalmente concluyeron que la raza y el sexo no
contribuan ni influan de manera alguna en la determinacin de la edad.
1 = Midlambiodal 6 = Midcoronal
2 = Lambda 7 = Pterion
3 = Obelion 8 = Esfeno-frontal
4 = Sagital anterior 9 = Esfeno-temporal inferior
5 = Bregma 10 = Esfeno-temporal
Fig.5 Suturas palatinas (IN=incisiva,
AMP=intermaxilar, PMP=interpalatina
y TP=palatomaxilar)
Fig.6 Puntos ectocraneales para el anlisis de la obliteracin (Meindl & Lovejoy ,1985).
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 46
A modo de conclusin podemos afirmar que el periodo ms difcil a la hora
de determinar la edad de un individuo, en base al grado de obliteracin de las
suturas craneales, se encuentra entre los 29 y 50 aos, producindose los cambios
de un modo lento y paulatino. Mientras que es a partir de los 50 aos cuando la
morfologa craneal experimenta una mayor y ms visible modificacin.
- Dientes
Para determinar la edad en individuos subadultos se establecen varios
mtodos. El de mayor exactitud es la denticin, ya que sabemos que el ritmo de
formacin y erupcin es fijo y suele estar poco influenciado por el medio ambiente.
Existen marcadores del desarrollo constante, donde cada pieza dentaria, corona y
raz, se forman en momentos concretos. Esto significa que cada diente tiene una
trayectoria de crecimiento y desarrollo relativamente independiente.
Hay dos tipos de dientes: deciduales o de leche (veinte) -primeros dientes
que se forman en la vida de un individuo- y los definitivos (treinta y dos) -dientes
permanentes que sustituyen a los deciduos-. Mediante la denticin podemos
diagnosticar la edad en base a diversos aspectos como:
- grado de erupcin
- grado de mineralizacin de los dientes
- aposicin de la dentina y cementos secundarios
- grado de desgaste oclusal
- grado de desgaste interproximal
- enfermedades dentarias
- prdidas dentarias
La erupcin dentaria es el criterio ms fiable a la hora de conocer la edad en
subadultos, puesto que una vez que las piezas dentarias han erupcionado, el
problema radica en que la edad proporcionada por dicho mtodo es la mnima y
posiblemente no la real.
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 47
En el caso de los adultos, definidos por defecto como un individuo en quien
se ha completado la formacin del tercer molar, los dientes han de ser considerados
no por su desarrollo sino por el desgaste de su corona, criterio que goza de menor
precisin que el anterior. Desde que P. Broca a finales del siglo pasado propusiera
una escala basada en cinco grados de alteracin dental, diversos autores han tratado
de medir el desgaste teniendo en cuenta la diferencia de seis aos entre la erupcin
del primer molar respecto al segundo y del segundo respecto al tercero.
Fig.7 Sistema del desgaste dental por Lovejoy con exposicin de la dentina en negro.
Edades estimadas por White (2000)
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 48
Diversos anlisis permiten observar cmo la morfologa de la estructura
dentaria puede ser modificada con el paso del tiempo. Los motivos o las causas
pueden ir desde la erupcin y cada de los dientes deciduales para dar paso a los
definitivos, hasta diversos tipos de calcificaciones y atriciones dentarias, as como
modificaciones en el esmalte, la pulpa o la dentina. Todo ello nos permiten
acercarnos con mayor precisin a la edad de un individuo.
El antroplogo G. Gustafson, en 1950, cre una ecuacin regresiva que le
permiti conocer la edad de una poblacin tomando nicamente como muestra los
diversos cambios morfolgicos en los dientes de sus individuos.
El desgaste de los dientes, a pesar de existir en las zonas interproximales -
contacto mesial y distal-, afecta principalmente a la superficie oclusal del diente,
llegando en los casos ms extremos a la cavidad pulpar destruyendo por completo
la corona. Dicho desgaste puede producirse de dos formas: mediante la atricin o
contacto directo de diente contra diente, y/o a travs de la abrasin o el roce del
diente con materiales extraos. Adems de estos dos factores, existen otros como
son el bruxismo o desgaste durante el sueo, los hbitos alimenticios y las
costumbres culturales (mascar tabaco, agarre de objetos, etc.).
3.2.2. CINTURA ESCAPULAR
- Escpula
En la escpula se pueden observar tres centros diferentes de osificacin: el
acromion, cuya unin se inicia sobre los 18 aos de edad hasta los 23 aos
aproximadamente, el margen vertebral y el ngulo inferior, caracterizados estos
ltimos por un proceso de osificacin que va desde los 20 y 21 aos hasta los 24
(Isan y Krogman, 1986). A su vez, W.M. Krogman afirm que la sinostosis del
omplato comienza a producirse, de un modo general, hacia los 25 aos.
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 49
El antroplogo Stewart (1968) analiz las modificaciones acaecidas en la
escpula con el paso del tiempo, mostrando la existencia de una fase de osificacin
seguida de un proceso artrfico. El problema est en que tales modificaciones no
son capaces de determinar la edad de un individuo mayor de sesenta aos. La fase
de osificacin empieza sobre los 35 aos, con la formacin de excrecencia sea
alrededor del margen de la cavidad glenoidea, para comenzar, cinco aos ms
tarde, a aparecer en la zona de la articulacin del acromion con la clavcula.
Posteriormente, el acromion se prolonga unos milmetros ms debido a la
existencia de una superficie sea por debajo de l. Finalmente, en la quinta dcada
de la vida, la zona baso-vertebral de la espina escapular experimenta una especie de
demarcacin. De este modo, el proceso artrfico es caracterizado por el
plegamiento seo de determinadas zonas y por la reabsorcin del tejido trabecular
del hueso.
- Clavcula
De la clavcula se sabe que, a pesar de ser el primer hueso fetal en comenzar
el proceso de osificacin, es el ltimo en completar su total fusin epifisal. Existen
dos centros principales de osificacin: uno primario o medial cuya fusin comienza
a partir de la sptima semana intrauterina, y otro secundario o esternal que inicia su
formacin sobre los 10-12 aos y comienza su fusin seis aos despus para
terminar soldndose por completo hacia la edad de los 26 30 aos.
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 50
Fig.8 Etapas del cambio en la clavcula (J. Szilvassy, 1988)
A la hora de estimar la edad mediante la clavcula hemos de tener en cuenta
que para los individuos prepuberales es mucho ms fiable y apropiado tomar la
longitud diafisaria del mismo, mientras que para los postpuberales los cambios en
la morfologa de la epfisis esternal nos acercarn mucho ms a la edad aproximada
del mismo. Por ello para nuestro estudio hemos utilizado los principios bsicos que
Sue Black et al. (1996) definieron en su artculo Age changes in the clavicle: from
the early neonatal period to skeletal maturity, en el que nos da las pautas a seguir
tanto para sujetos adultos como para subadultos. De este modo, para calcular la
edad de todos aquellos individuos que no supere los 16 aos tomaremos la longitud
diafisaria de la clavcula, teniendo siempre en cuenta que la izquierda es
ligeramente ms larga que la derecha. Para los sujetos cuya edad se estime entre los
16 y los 30 aos, el mtodo ms fiable y aproximativo a la edad real del individuo
es mediante el estudio de los cambios morfolgicos de la epfisis esternal
clasificados en cinco fases (Sue Black et al., 1996):
1 FASE: se pueden observar crestas y ondulaciones que nos indican
una vigente actividad vascular metafisal.
2 FASE: permanecen las crestas y ondulaciones de la fase anterior,
aunque ya se puede observar el principio de un relleno.
3 FASE: aparece una suave capa epifisal que comienza a fusionarse
con la superficie visible de la metfisis.
4 FASE: la capa epifisal empieza a expandirse por toda la zona
articular, aunque permitiendo distinguir todava una perfecta lnea
de demarcacin entre epfisis y metfisis.
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 51
5 FASE: en esta fase la etapa de fusin ya ha llegado a su grado
mximo, pudiendo observar perfectamente la epfisis medial
clavicular definitiva.
3.2.3. CINTURA PLVICA
- Snfisis pbica
En los individuos jvenes los bordes de la snfisis pbica se encuentran
poco definidos y la superficie se caracteriza por ser una textura de granulado fino -
que con el tiempo va ganando densidad y rugosidad- con alternancia de surcos y
crestas transversales ondulantes. Por el contrario, en los individuos de mayor edad
se observa un proceso erosivo de los mrgenes de la snfisis pbica, terminando por
aparecer una nueva formacin sea errtica o excrecencia sea anormal en los
bordes de la misma. La formacin sea de la snfisis pbica sigue un orden
continuo, comenzando por los bordes -primero el dorsal y despus el ventral- hasta
llegar al centro de la superficie. Adems, en la zona ventral, y de arriba hacia abajo,
se produce un fenmeno seo conocido como rampa ventral.
Entre los diferentes estudiosos en este mbito, debemos destacar a figuras
como McKern y Stewart (1957), Brooks y Suchey (1990) y Todd (1920). En 1957,
los antroplogos T.W. McKern y T.D. Stewart estudiaron un grupo de individuos
masculinos sobre los que pudieron observar tres componentes diferentes a la hora
de determinar la edad. Estos eran: una zona dorsal, una rampa ventral y el borde
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 52
sinfisal. Establecieron seis fases evolutivas para cada componente y concluyeron
que los cambios eran mucho ms patentes en el tercer componente que en los otros
dos.
Aos ms tarde McKern y Gilbert (1973) establecieron estas mismas
hiptesis en un grupo poblacional femenino, percatndose de que su teora gozaba
de mayor fiabilidad en los hombres, quienes adems, alcanzaban su completo
desarrollo sinfisal y formacin aproximadamente diez aos antes. Esta teora fue a
su vez justificada por T.D. Stewart, demostrando que las mujeres son ms
propensas a sufrir cambios morfolgicos en la snfisis pbica debido a la
maternidad.
En 1920, T.W. Todd defini a la snfisis pbica como un valo dotado de
una superficie con una zona ventral, otra dorsal o meseta, una extremidad superior
y otra inferior. Gracias a ello ide diez fases morfolgicas -distribuidas entre los 18
y los 50 aos- con la mnima variacin posible. Aos despus, reorganiz todas las
fases en grupos de tres, sin encontrar diferencias entre sexos (ver ilustracin).
Fig.9 Cambios en la faceta auricular segn T.W. Todd (Buikstra & Ubelaker, 1994)
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 53
Valindose de las fases de Todd (1920), los antroplogos S.T. Brooks y
J.M. Suchey en 1990 establecieron seis fases diferentes y afirmaron que, para los
individuos de sexo masculino las estimaciones de edad conseguidas eran bastante
ms fiables que las obtenidas en los de sexo femenino. Las seis fases establecidas,
se caracterizaban por:
- I fase (15-23 aos en hombres y 15-24 aos en mujeres): una snfisis pbica
ondulante con crestas y surcos, en donde no se han formado con total
claridad las extremidades superiores e inferiores.
- II fase (19-34 aos en hombres y 19-40 aos en mujeres): las ondulaciones
comienzan a desaparecer y empieza a distinguirse con mayor claridad la
extremidad superior.
- III fase (21-46 aos en hombres y 21-53 aos en mujeres): comienzo de la
formacin del extremo inferior y de la rampa ventral y completa formacin
de la zona dorsal pero con ausencia an del lipping en el borde.
- IV fase (23-57 aos en hombres y 26-70 aos en mujeres): una ms
completa formacin del contorno oval aunque existiendo an un salto en la
zona superior del margen ventral. Se empieza a intuir levemente el lipping
dorsal, observndose una clara separacin entre el tubrculo pbico y la
propia cara de la snfisis, lo que permite delimitar perfectamente la
extremidad superior.
- V fase (27-66 aos en hombres y 25-83 aos en mujeres): margen
completamente formado, con lipping dorsal y excrecencia sea en la zona
ventral debida a los ligamentos existentes. La cara sinfisal comienza a sufrir
una ligera depresin.
- VI fase (34-86 aos en hombres y 42-87 aos en mujeres): la superficie
sinfisal avanza en su estado de depresin, comenzando a generar
porosidades que le dan un aspecto tosco y rugoso. Los mrgenes empiezan a
erosionarse y los ligamentos ventrales aparecen mucho ms marcados.
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 54
Un modo de resumir todas estas caractersticas podra ser: en los individuos
menores de 25 aos la cara sinfisal presenta profundas crestas y estras; en los
menores de 31 aos comienza la formacin de ndulos de osificacin pero sin
existir todava la rampa ventral; en los menores de 41 aos la rampa ventral ya est
formada pero de un modo no completo.
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 55
- Faceta auricular
La faceta auricular tambin sufre cambios morfolgicos notables de carcter
degenerativo con el paso del tiempo que permiten determinar, de un modo ms o
menos riguroso, la edad del individuo. El antroplogo Lovejoy et al. (1985)
estudi la faceta auricular del illium de individuos pertenecientes a la coleccin de
T.W. Todd y estableci que:
. De los 20 a los 24 aos, la faceta auricular presenta un aspecto ondulado
y de textura fina.
. De los 25 a los 29 aos, comienzan a disiparse las ondas de la faceta,
pero el aspecto de la misma sigue siendo joven.
. Desde comienzos de los 30 hasta los 34 aos, las ondas que an podan
persistir pasan a adquirir un aspecto de estras.
. De los 35 a los 39 aos, se caracteriza por una granulacin tosca.
. De los 40 a los 44 aos, la granulacin tosca pasa a mostrar una
fisonoma densa en toda la faceta auricular.
. Desde los 45 hasta los 49 aos, la granulacin desaparece por completo.
. Durante la dcada de los 50 aos, la granulacin pasa a tener un aspecto
rugoso y spero.
. Ser a partir de los 60 aos en adelante, cuando en la faceta auricular
pueda aparecer una especie de reborde o cresta conocida como lipping
marginal (breakdown).
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 56
- Cresta ilaca
McKern y Stewart (1957) observaron cmo la cresta ilaca comenzaba su
etapa de fusin hacia los 17 aos, llegando a alcanzar la obliteracin total cerca de
los 23. Por otro lado, vieron cmo la unin de
los tres huesos que conforman el coxal -ilion,
isquion y pubis- localizada en el agujero
obturador del acetbulo se produca, por lo
general, a los 13 aos en la mujer y los 14 en
el hombre.
3.2.4. CAJA TORCICA
- Costillas
Otro mtodo de estimacin de la edad de un individuo es mediante la
topografa de la superficie esternal de las costillas. Aquellas que se unen con el
esternn presentan una zona excelente para analizar el cambio morfolgico
continuo que acontece durante el desarrollo vital, pasando de ser suave y liso en
individuos jvenes a irregular y rugoso en los adultos.
Segn el antroplogo Michelson (1934) existe un notable dimorfismo
sexual en la calcificacin del cartlago costal, hecho que casi nunca tiene lugar
antes de los 11 aos de edad y que avanza de la costilla al esternn. A su vez,
afirma que es a partir de los 15 aos, hasta bien pasada la etapa de la madurez,
cuando el gnero masculino experimenta una mayor calcificacin. Este hecho se
desencadena la mayora de las veces durante la segunda dcada de la vida en ambos
sexos y razas -aunque en la raza negra este hecho sucede de un modo mucho ms
rpido-, y disminuyendo su ritmo a partir de los 40 aos de edad.
Mckern y Stewart (1957) observaron que, al igual que suceda en los
cuerpos vertebrales, las tres primeras costillas y las tres ltimas -1, 2, 3 y 10, 11,
12 respectivamente- experimentaban una calcificacin prematura, mientras que en
las intermedias -4, 5, 6, 7, 8 y 9- dicho proceso tena lugar poco despus.
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 57
Los antroplogos Loth e Isan (1984) analizaron los cambios morfolgicos
acaecidos en la articulacin costo-esternal de la cuarta costilla derecha,
estableciendo un mtodo de nueve
fases diferentes en base a cambios
referentes a su formacin, forma de
la cavidad, textura del hueso, etc.
Mostraron cmo en la mujer los
cambios morfolgicos se sucedan
de una forma ms rpida desde los
14 hasta los 28 aos, ralentizndose
con el paso del tiempo. Sin
embargo, mientras que para los
hombres los cambios morfolgicos de las costillas podan tener lugar desde los 17
hasta los 85 aos, para las mujeres esta fraccin de tiempo se ampliaba desde los 14
hasta los 90 aos.
Para los antroplogos Kunos et al. (1999), los cambios morfolgicos
patentes en las primeras costillas en base a su forma y textura, tanto de la superficie
como de los mrgenes, estn completamente relacionados con el paso de los aos y
la edad.
- Columna vertebral
Conforme el individuo avanza en edad, la columna experimenta un
desarrollo evolutivo que hace que las vrtebras vayan adquiriendo su morfologa
correspondiente. De esta manera, las vrtebras de los recin nacidos se caracterizan
por la existencia de tres partes bien diferenciadas: un cuerpo y dos arcos laterales
que comienzan a unirse hacia los 4 aos. Ya en la adolescencia (12-20 aos)
aparecen estras radiales en los mrgenes del cuerpo que, a comienzos de la edad
adulta (20-40 aos), van desapareciendo como consecuencia de la unin de las
epfisis anulares. Ser entrando en la madurez (40-60 aos) y en la edad senil (ms
de 60 aos) cuando comience el proceso propiamente degenerativo, apareciendo
cambios morfolgicos como excrecencias seas -osteofitos y picos de loro-,
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 58
ndulos de Schmrl, diversos grados de anquilosis, etc., que nos ayudan a saber
ante qu etapa de la vida nos encontramos.
3.2.5. HUESOS LARGOS
- Extremidades superiores e inferiores
Mediante el estudio de los huesos
largos podemos establecer otro sistema de
determinacin de edad en individuos
inmaduros. Hemos de fijarnos por un lado
en el tamao de los mismos, ya que
sabemos que con la edad se genera un
crecimiento de la difisis de forma
sistemtica, y por otro en el grado de
fusin de las epfisis con la difisis. Los
antroplogos plantean una edad constante
de unin para cada hueso, pudiendo
diferenciar as entre infantiles (cuyas
epfisis no estn fusionadas), subadultos
(la unin se ha producido en unos huesos
pero no en otros) y adultos (con fusin
completa o prcticamente completa, para
lo que es necesario utilizar otros
mtodos).
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 59
3.3. ESTIMACIN DE LA ESTATURA
Para este estudio es necesario entender el trmino regresin. Regresin es aquel
procedimiento mediante el cual se trata de determinar si existe o no relacin de
dependencia entre dos o ms variables. Las frmulas de regresin son modelos
matemticos mediante los cuales conociendo los valores de una variable independiente
(por ej.: longitud del fmur, longitud de la tibia, etc.) podemos estimar los valores de una o
ms variables dependientes (por ej.: estatura, peso, etc.). De este modo, el objetivo
primordial de toda regresin es intentar predecir un dato desconocido de una variable
partiendo de los datos conocidos de otra variable, para as determinar la relacin de
dependencia existente entre ambas.
Para la estimacin de la estatura en nuestra investigacin, hemos usado diferentes
modelos matemticos, entre los cuales destacamos por su fiabilidad el mtodo anatmico
elaborado por Fully y Pineau (1960) y las frmulas de regresin llevadas a cabo por
diferentes autores (Pearson et al. 1899, Trotter y Gleser 1952, Feldesman et al. 1990,
Dupertuis y Hadden 1951, Tibbetts et al. 1981, y Telkk et al. 1950) en base a la longitud
de los huesos largos de las extremidades inferiores. Todas las frmulas han sido calculadas
en centmetros, excepto las de Tibbetts et al. cuyas medidas se han expresado en
milmetros.
Debido a su utilidad en el estudio de restos incompletos, el mtodo ms
comnmente empleado tanto en contextos forenses como bioarqueolgicos son las
frmulas de regresin. Aunque hemos de tener en cuenta que estas tampoco estn libres de
riesgos, ya que la exactitud y precisin para la estimacin de la estatura puede verse
afectada por diferentes factores biolgicos. Por ello, la frmula de regresin que se utilice
ha de ser cuidadosamente seleccionada, dependiendo del contexto especfico de la
poblacin a estudiar.
Las medidas de los restos seos no fragmentados han sido tomadas empleando los
materiales antropomtricos clsicos como son el calibre vernier y el calibre digital de 200
mm, la tabla osteomtrica y el comps de ramas curvas de 300 mm.
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 60
La utilizacin del mtodo anatmico, a pesar de ser la que mayor fiabilidad aporta a
la hora de estimar la estatura de un individuo, conlleva un problema metodolgico de
elevada importancia, y es que para su desarrollo es indispensable disponer de todos los
restos seos del esqueleto. Es por ello por lo que en la mayora de las investigaciones
antropolgicas este mtodo carece de funcionalidad, hacindose necesario utilizar las
diferentes frmulas de regresin, cuya exactitud depende de la similitud de las
proporciones del cuerpo entre los individuos a analizar y aquellos que han sido utilizados
para elaborar la frmula de regresin.
Otro factor que ha de tener en cuenta un antroplogo a la hora de determinar la
estatura de un esqueleto, es saber si dicho individuo es adulto o subadulto, lo que en
ocasiones se complica por la existencia nicamente de fragmentos seos aislados. Por otro
lado, tal estimacin ha de ser calculada teniendo en cuenta todos los factores de los que
depende, como son la raza y el sexo, con los que est ntimamente relacionada. Como
curiosidad diremos que en ocasiones se han dado casos de asimetra en la longitud y grosor
de los huesos largos, lo que posteriormente se ha visto relacionado con la lateralidad del
individuo, es decir, zurdo o diestro.
Con todo, a menos que existan anomalas que afecten directamente al crecimiento,
la estatura final de un individuo de raza blanca se alcanza aproximadamente alrededor de
los 21-23 aos para los hombres y de los 18-20 aos para las mujeres. Es a partir de los 40-
50 aos cuando la estatura comienza un estado de progresiva regresin, acelerndose con
el tiempo hasta poder llegar a disminuir unos 0,06 cm. al ao (Reverte Coma, 1999). Por
todo ello, hemos credo conveniente tomar como referencia la longitud mxima de los
huesos largos, siendo el fmur, de entre todos ellos, el de mayor fiabilidad.
Para la determinacin de la estatura destacamos el mtodo anatmico, cuyo
precursor estadounidense Dwight (1894) ya lo utilizaba a finales del siglo XIX dejando
constancia de ello al ser aplicado casi un siglo despus por el antroplogo Stewart (1979).
Por su parte, Fully (1956) y Fully y Pineau (1960) propusieron una tcnica semejante a la
de H. Dwight pero algo ms simplificada: sin necesidad de colocar anatmicamente cada
hueso -como suceda anteriormente con la tcnica de Dwight- se suman nicamente las
dimensiones de ciertas partes del esqueleto mediante las cuales, y aplicando un sistema de
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 61
correcciones estipulado, se conoce la estatura aproximada de un individuo en vida. Su
estudio se bas en 164 esqueletos masculinos - 45% franceses, 27% italianos y 28% otras
nacionalidades europeas- provenientes de diferentes campos de concentracin de la II
Guerra Mundial, con edades comprendidas entre los 18 y 65 aos y con estatura variable
entre 151 y 188 cm, lo que sin duda se aproxima a nuestra muestra (XVII Simposio de
Investigaciones Arqueolgicas de Guatemala, 2003).
Despus de una importante evaluacin de la tcnica de Fully (1956), Raxter et al.
(2006 y 2007) desarrollaron una versin ms avanzada de dicho mtodo que permita
perfeccionar las medidas que deban de ser tomadas. Las dotaron de mejores factores de
correccin para los tejidos blandos y aportaron explicaciones a los cambios de la estatura
relacionados con la edad. Esta nueva tcnica estima la estatura en vivo del individuo en
base a la altura del esqueleto, mediante dos frmulas en las que se utiliza la edad del
individuo dependiendo de si se conoce o no. Segn Raxter et al. (2007), aunque la
estimacin de la edad mediante los restos bioarqueolgicos suele ser inevitablemente
imprecisa, es aconsejable incorporarlos a la hora de calcular la estatura en vivo, con el fin
de evitar errores sistemticos en individuos jvenes. Hemos de indicar que esta frmula de
Fully (1956), modificada por Raxter et al. (2007), es la que nosotros hemos utilizado en
nuestro estudio.
Tabla 7. Frmulas de regresin Fully (1956) y de Fully y Pineau (1960)
basadas en individuos masculinos europeos.
En nuestra investigacin hemos diseado varias frmulas de regresin que
permiten estimar la estatura de los individuos en base a la longitud de los huesos largos.
Partiendo del mtodo anatmico de Fully -con la correccin de Raxter et al. (2006 y
2007)- se ha estimado la estatura en vida de todos aquellos individuos de nuestra muestra
cuyo clculo pudiese ser elaborado mediante dicho mtodo para as, posteriormente y en
FULLY (N:164)
F1 = 1,009 * altura del esqueleto 0,0426 * edad + 12,1
F2 = 0,996 * altura del esqueleto + 11,7
FULLY Y PINEAU (N:164)
FyP1 = 14,62 + 0,98 * longitud anatmica
FyP2 = 42,67 + 2,09 * longitud fmur + alturas lumbares
FyP3 = 48,63 + 2,32 * longitud tibia + alturas lumbares
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 62
base a esos datos, poder crear una frmula de regresin propia para nuestra muestra que
nos permitiera obtener la estatura de aquellos cuyos restos seos se encontrasen
fragmentados. Con todo, tendremos que evaluar la precisin y exactitud de las estaturas
obtenidas mediante nuestra frmula de regresin, respecto a aquellas obtenidas de las
frmulas utilizadas normalmente para las poblaciones europeas.
Las variables aplicadas en nuestras frmulas de regresin han sido: 1) longitud
mxima del fmur; 2) longitud bicondilar del fmur, 3) longitud mxima de la tibia, 4)
longitud bicondilar de la tibia, 5) longitud mxima del peron, 6) longitud bicondilar del
peron, 7) longitud mxima del hmero, 8) longitud bicondilar del hmero, 9) longitud
mxima del cbito, 10) longitud bicondilar del cbito, 11) longitud mxima del radio y 12)
longitud bicondilar del radio. De este modo, las frmulas de regresin elaboradas por
nosotros para estimar la estatura han sido las siguientes:
a. Estatura = 44,6581 + (2,6673 * longitud mxima del fmur) 2,520997009
b. Estatura = 44,1597 + (2,7032 * longitud bicondilar del fmur) 2,631782569
c. Estatura = 61,27523 + (2,81416 * longitud mxima de la tibia M1) 2,709782316
d. Estatura = 65,82080 + (2,65272 * longitud mxima de la tibia M1a) 2,786778158
e. Estatura = 68,07605 + (2,64158 * longitud mxima de la tibia M1b) 2,840215402
f. Estatura = 68,6032 + (2,6757 * longitud bicondilar de la tibia) 2,823885370
g. Estatura = 64,193 + (2,7742 * longitud mxima del peron) 2,823885370
h. Estatura = 65,6392 + (2,7496 * longitud bicondilar del peron) 2,579763535
i. Estatura = 40,8254 + (3,8498 * longitud mxima del hmero) 2,960576628
j. Estatura = 36,3056 + (4,0603 * longitud bicondilar del hmero) 3,276989965
k. Estatura = 51,5823 + (4,4179 * longitud mxima del cbito) 4,658360804
l. Estatura = 58,8047 + (4,7546 * longitud bicondilar del cbito) 4,559676363
m. Estatura = 53,9493 + (4,6736 * longitud mxima del radio) 3,942515811
n. Estatura = 61,8413 + (4,5987 * longitud bicondilar del radio) 4,359482829
-
Tcnicas forenses aplicadas al estudio de los restos biolgicos exhumados de la fosa comn del monte Costajn.
Acercamiento a un futuro intento de identificacin.
Pgina | 63
Por otro lado, el matemtico y estadstico britnico Karl Pearson llev a cabo en el
ao 1898 diversas investigaciones que le ayudaron a idear una ecuacin regresiva que, con
sus consiguientes correcciones numricas, le permiti estimar la estatura de los individuos
en base a los huesos largos del lado derecho (Pearson, 1899).
Tabla 3. Frmulas de regresin de Pearson (1899) en base a individuos masculinos franceses.
(Las inciales F, H, T y R corresponden a fmur, hmero, tibia y radio)
PEARSON (N:50)
81,306 + 1,880*F
70,641 + 2,894*H
78,664 + 2,376*T
85,925 + 3,271*R
71,272 + 1,159*(F+T)
71,441 + 1,220*F + 1,080*T
66,855 + 1,730*(H+R)
69,788 + 2,769*H + 0,195*R
68,397 + 1,030*F + 1,557*H
67,049 + 0,913*F + 0,600*T + 1,225*H - 0,187*R
En 1952, los estadounidenses M. Trotter y G.C. Gleser se propusieron analizar las
relaciones entre la estatura de un individuo y las medidas de sus huesos largos. Para ello, y
tomando como muestra soldados americanos muertos durante la II Guerra Mundial,
crearon diferentes frmulas de regresin -tanto para individuos de raza blanca como para
los de raza negra- con el fin de elaborar una tabla que determinase la estatura a partir de la
longitud de los huesos de las extremidades (Trotter y Gleser, 1952). Seis aos despus, y
tras la informacin antropolgica recogida de los soldados mexicanos del ejrcito
estadounidense, antes y despus de morir en la Guerra de Corea, se propusieron mejorar
sus anteriores ecuaciones de regresin, para afinar la precisin a la hora de estimar la
estatura de un individuo (Trotter y Gleser, 1958). De esta manera obtuvieron las siguientes
frmulas derivadas de las anteriores:
Tabla 4 y 5. Frmulas de regresin de Trotter y Gleser (1958) en base a individuos masculinos americanos
de raza blanca (Las inciales F, H, T, R, P y U corresponde a fmur, hmero, tibia, radio, peron y lna)
TROTTER Y GLESER (N:5517)
TROTTER Y GLESER (N:5517) (individuos entre 18 y 30 aos)
63,05 + 1,31*(F+P) 3,62 3,08*H + 70,45 4,05
-
Trabajo de investigacin. Diploma de Estudios Avanzados, 2011.
Marina Martnez de Pinillos Gonzlez
Pgina | 64
67,09 + 1,26*(F+T) 3,74 3,78*R + 79,01 4,32
65,53 + 2,32*F 3,94 3,70*U + 74,05 4,32
75,5 + 2,60*P 3,86 2,38*F + 61,41 3,27
81,93 + 2,42*T 3,37 2,52*T + 78,62 3,37
78,1 + 2,89*H 4,05 2,68*F + 71,78 3,29
79,42 + 3,79*R 4,32 1,30*(F+T) + 63,29 2,99
75,55 + 3,67*U 4,32 1,42*F + 1,24*T + 59,88 2,99
67,97 + 1,82*(H+R) 2,99 0,93*H + 1,94*T + 69,3 3,26
66,98 + 1,78*(H+U) 2,99 0,27*H + 1,32*F + 1,16*T + 58,57 2,99
En 1951 C.W. Dupertuis y J.A. Hadden, al estudiar la coleccin osteolgica de
Hamann-Todd, encontraron una frmula de regresin mediante la cual se pudiese
averiguar la estatura de un individuo, con el nico conocimiento de la longitud de su
top related