amalgama nº9

Amalgama Diciembre 2012 Nº9

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Sumario Nº 9

1. Obituarios (pag. 2) 2. Noticiero (pag. 4) 3. Nuestras vidas (pag. 10)

Eduardo Navarro Jiménez, Manuel López Martínez, Doroteo Fernández Pérez, José Rienda Burgos, Juan A.

Narváez Sánchez, Alfonso Ros López, Fernando Usero Cerdán y Rafael Fernández Budia.

4. Colaboraciones (pag. 37) -Los Profesionales y Abengoa (Miguel Toral).

- Ética y moral (Antonio Ramírez Mena)

- Aprendiz de ética (Pedro Mora Figueroa)

- Algunas curiosidades sobre la Sierra de Cazorla (Alfonso Ros).

- Reflexiones de un safista (Antonio Molero García)

- Padres de Amalgama ( Francisco Carpio, Antonio Jiménez y Juan López)

- La educación en España (entrevista a A. Ramírez Mena)

- Los niños de la SAFA (Miguel Ligero Conejero)

- El rincón de la poesía ( Andrés Martínez, Ramirez Mena y A. Garrido Romero)

5. Comunicación abierta a los AA.AA. de la SAFA (pag. 59)

Eduardo Jiménez Torres reúne en una entrevista memorable a “los tres magníficos” del fútbol SAFA de

finales de los cincuenta: Morilla, Garrido Romero y Garrido Colchero (Úbeda, 4 de mayo de 2012).

Eduardo, safista hasta la médula, hizo un magnífico reportaje del último encuentro cuyo vídeo, facilitado

por Canal 9 la Loma, puede verse en la web de Pepe Aranda (safa.tvsa.es). Gracias Eduardo por todas

tus atenciones y por recordarnos mil veces las palabras de D. Juan Pasquau:

“ No digáis safa que suena a plástico, decid Escuelas Profesionales de la Sagrada Familia”

AA.AA. Profesionales SAFA (Úbeda)


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1. Obituarios María Jaén Martínez

Siempre la conocimos por “Mari Baras”, La verdad es que aún hoy, no se cuales son sus apellidos, pero eso tiene poca importancia, lo que es cierto, es que nuestra entrañable y querida amiga Mari, se nos ha ido. Recordando aquellos años en los que estábamos estudiando en Úbeda, cuando empezaron a salir Antonio y Mari, todo el grupo éramos partícipes de aquellos paseos por la ciudad los días festivos que podíamos salir. Era una muchacha alegre, simpática, abierta, dicharachera y que aportaba al grupo todas esas particularidades suyas, se hacía querer y respetar por todos. El grupo cambió cuando Mari se incorporó a él. Desde entonces hemos mantenido esa amistad y aunque nos veíamos muy de tarde en tarde, esa llama se ha mantenido por encima de la distancia y el tiempo. Cuando el lunes 24 me dieron la noticia de que había sido atropellada por un coche con las consecuencias que todos conocemos, tanto a mi mujer como a mí, nos impactó y entristeció, porque no esperábamos ese fin para nuestra amiga Mari, pero ya sabemos que la muerte es imprevisible, nos acecha y cuando menos la esperamos se presenta. Esperamos de corazón que Dios la halla acogido y esté gozando con todos los dichosos de la presencia del Padre. Antonio, tu te has quedado aquí, te deseamos que tengas entereza y paciencia, porque te espera un tiempo de soledad no elegida, que a veces se hará insoportable, pero que esperamos que sepas sobreponerte, muchos ánimos tanto para ti como para tus hijos, porque ellos también lo estarán pasando mal, porque han perdido lo mas grande que hay en este mundo, han perdido a su madre. A todos os deseamos que Dios os de fuerzas y os reconforte. Un abrazo de vuestros amigos Catalina y Juan.

Juan López Ruiz

Mari era de los nuestros, en aquellos tiempos de

adolescencia y debido a su trabajo en el estudio fotográfico

Baras, la SAFA era su casa y los chicos de los jesuitas sus

camaradas, sus amigos. Nuestro compañero Antonio Sáez,

se hizo dueño de su amor y desde entonces vivieron en

familia.

Mari era activa, inquieta y emprendedora. Durante los

encuentros desde 2008 hizo de anfitriona de las esposas y

las acogía contándoles cómo era aquella vida en el

internado. Muestra de aquella actitud de acogida son estas

palabras que pronunció en el IV Encuentro con motivo de la

presentación del libro “Nuestra SAFA”, escrito por la

promoción 60 de Profesionales:

“Es para mi un honor dirigir unas palabras a las

féminas. Probablemente me hayáis elegido por mi

cercanía a la SAFA ¿y por qué digo cercanía? Porque

en esta Casa hice mi Primera Comunión, aquí me

casé y aquí os conocí a todos, a los que no están y a

los que se fueron.

Aunque nosotras no hayamos aportado mucho a la

realización del libro, os hemos acompañado en los

Encuentros, os hemos apoyado en la idea y os hemos

animado a que se llevara a cabo. Los pasados

Encuentros han servido para conocernos y, a veces,

hemos tenido tiempo para contarnos nuestras

batallitas acaecidas a lo largo de tantos años unidas a

un safista.

Creo que todas tenemos un pequeño lazo de unión

invisible, pues sin saberlo, hemos coincidido en esos

lugares comunes a los que nos llevaban nuestros

maridos al recordar su paso por el colegio. Recuerdos

que, aunque dispersos, hoy afloran con más

intensidad y que para más inri, nos hacen volver la

mirada a nuestra juventud.

Amigas, ha sido un inmenso placer conoceros a todas

y espero que esta ocasión no sea la última. Como no

soy parienta de Séneca, ya está ¡un abrazo y hasta

siempre!”

P. Mora

El 23 de septiembre de 2012, cuando volvía a casa después de

hacer la caminata diaria con las amigas, fue atropellada por un

automóvil, causándole la muerte. Descanse en paz.


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Vicente Theotonio Cáceres

Nace en Sevilla el 13 de mayo de 1935 e ingresa en la

Compañía de Jesús en 1951, en el Noviciado de El Puerto de Santamaría. Los dos primeros años estudia como novicio y los tres siguientes, hace Humanidades en el mismo Noviciado, alcanzando el

grado de “Junior”. A continuación pasa a Alcalá de Henares donde estudia los tres años de Filosofía establecidos por la Compañía.

La etapa de “Maestrillo” la ejerce en la SAFA de Úbeda donde se incorpora en el verano de 1959. Allí pasa el primer curso (59/60) a cargo de la 1ª División de Magisterio, el segundo (60/61) junto con

el P. Nieto, se ocupan de la 1ª División de Magisterio y de nuestros 16 compañeros que hacen 1º de Maestría. En el siguiente curso (61/62), esta labor la comparte con el Padre Rivas que se incorpora

ese año a la SAFA como nuevo “Maestrillo”. Mientras ejercía de Maestrillo en Úbeda, comenzó la carrera de

derecho bajo la orientación pedagógica de D. Juan Herrera Catena. La licenciatura la obtuvo en la Universidad de Granada y años

más tarde alcanzaría el grado de Doctorado.

Terminado el curso 61/62, es destinado a la Cartuja de los jesuitas en Granada, donde cursa los cuatro años de Teología reglamentarios. En el tercer año, 1966, se ordena sacerdote.

Su paso por Úbeda lo recordaba así:

“El trienio que pasé en Úbeda, en mi etapa de magisterio, fue un tiempo de una convivencia humanamente profunda y honda. Mayor relación tuve con los alumnos de Magisterio. Pero sí recuerdo la relación con los Profesionales en el curso

61-62. En general aduzco como índice de calidad de nuestra convivencia educativa, la revista que cada curso editaba y en las que todos sus alumnos escribían. Era una educación personalizada. Ciertamente la disciplina era rígida, y aunque la práctica religiosa fuera intensa, nada de ello obstaculizaba

las relaciones interpersonales sinceras e intensas. Ciertamente ningún alumno se me atravesó en mi función, ni creo que tampoco me atravesé en la vida de ninguno de mis alumnos. Por ello, mi recuerdo de aquella convivencia es

grato, sereno y agradecido a todos”.


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2. Noticiero

“De la Ratio Studiorum a la ruina politicorum”

Ante situaciones adversas solemos reaccionar básicamente de dos maneras: unos lloran y se lamentan, los otros se aferran a la esperanza con ánimo para superar la mala racha. Estas dos formas de ser las podemos ver reflejadas en los sabios griegos Heráclito y Demócrito. El primero con su río siempre cambiante, solía mostrarse grave, con los ojos inundados por las lágrimas ante la desgracia común. Demócrito, descubridor de los átomos como la partícula más pequeña de la materia, aparecía con semblante risueño ante las adversidades. Y eso que ambos compartían lo lamentable de la condición humana. No es cierto que los dirigentes catastrofistas se preocupen más de los problemas que nos aquejan como es la crisis sistémica que nos envuelve y sus efectos sobre la economía. Los de ánimo alegre

pueden mantenerse más alerta, despiertos e inspirados para dar con soluciones válidas. No conocemos a fondo el temperamento de “nuestros tres compañeros de estudios”, pero si nos dejamos llevar por las apariencias, da la sensación de que nos hallamos ante dos heráclitos y un demócrito ¡Que no nos pase nada! P.Mora

Fernando Usero Cerdán

(Oficialía 1967), ha presentado el

quinto tomo de su serie “Sevilla

visita a visita”.

Este tenaz villanovense se ha

enamorado de Sevilla y pretende

descubrir sus secretos artísticos,

pero Sevilla es toda una mujer

¿lo conseguirá?

Nuestro compañero Paco Carpio, nos facilita esta noticia:

Desde 2002, Radio SAFA de Écija emite por radio FM y por

Internet: [email protected]

Deseamos larga vida a la experiencia iniciada por nuestros jóvenes

compañeros, ¡son otros tiempos!

¿Lograrán entenderse estos tres exalumnos de jesuitas unidos por la política?

Representan intereses diferentes, Mario Draghi, presidente del BCE tiene en sus manos sacar

de apuros a sus compañeros de estudios Mariano Rajoy (jJesuitas de León) y Mario Monti

(Jesuitas de Milán).

Cabe preguntarse cómo influirán en sus decisiones los principios que les fueron inculcados en

la juventud. Confiemos en que perdure en ellos, al menos, el de justicia.


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Reparto de Amalgama

Hemos establecido un modo nuevo de reparto de las revistas con objeto de fomentar los encuentros a lo largo del año, especialmente en aquellas ciudades donde viven varios ex alumnos, pasen o no por los encuentros de Úbeda. Esperemos que dé buenos resultados. Pedro Puentes, citó a los madrileños en la Casa de Campo. Aunque fueron pocos, tuvimos la suerte de ver después de 50 años a Narciso Marín y José Luis Anguita. En la foto: Francisco Carpio (prom. 60), Narciso Marín (prom. 59), J. Luis Anguita (prom. 59), Pedro Puentes (prom.60), Alejandro Jiménez (profesor 1958) y Pepe Aranda (prom. 70).

Esta familia crece y crece. Cada dos meses se reunen en los

locales de la Fundación Pedro Arrupe, se saludan, charlan y

celebran una comida de hermandad. En su VI encuentro del 10

de octubre pasado, se repartieron la revista Amalgama y

comentaron las anécdotas del último encuentro en Úbeda el

pasado mayo y el dolor por la muerte de Juan Nuño el mismo

día que llegaban al colegio.

Antonio Viñuelas recordó sus orígenes en Portacoeli y su

trayectoria en Úbeda durante los años cincuenta.

Miguel Ligero propuso hacer la historia de los gratuitos de

Portacoeli.

Miguel Laserna evocó su paso por portacoeli y por Úbeda. Comentó su colaboración con el Padre Sobrino, autor de la letra del

himno de la SAFA.

En Linares se reunieron Valentín Perales, Rafael Codina, Antonio Molero, Doroteo Fernández y Juan Gámez.

En Barcelona, Marcelino Florido entrega las revistas a Manuel Gómez

Luna que se encargará de repartirlas entre sus compañeros de curso.


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Siguieron las intervenciones de Castroviejo,

Tarragó, Portal, Valverde, Garrido Colchero y

Federico Piña.

Manuel Huertas realizó el reportaje fotográfico e

informó haber sufrido un infarto y que será

intervenido a mediados de enero. Te deseamos que

superes este pequeño trance porque tienes que

continuar con tu cámara haciendo esos magníficos

reportajes.

Gabriel Martínez Cardosa fue nombrado

coordinador de los encuentros.

Una aclaración importante Este es el equipo de 1º de Magisterio Escolar e Industrial (3ª División). Fue el mejor equipo en el curso 1954-55. En aquellos años, había una liguilla entre todos los cursos de Magisterio E/I, seis equipos en total. Les ganamos a todos menos al formado por 6º, 7º y 8º, porque tenían muchas marrullerías, tantas como años. Lo pasábamos bien en aquellos años con la rivalidad por el futbol. El hincha más destacado que teníamos, era el padre Sánchez. Alineación: D. Diego, Tomás Rejón, Sanz, Gámez Molina, López Ruiz, Tarragó, P. Navarrete y D Eduardo

Bangueses. Abajo: Nono, Bordés, Morilla, Blas Pastor (portero), López Pedrosa Y Ortuño.

Juan López Ruiz

Don Bernardo López pasa estos primeros días de diciembre en el hospital, vigilado por los médicos, para evitar riesgos a consecuencia de su elevado nivel de creatinina. Todo empezó con un cateterismo rutinario que se complicó por efectos del producto para el contraste. Ha vuelto a casa estos días de fiesta y el próximo martes, día 11, los médicos estimarán la necesidad de someterlo a unas sesiones de diálisis para controlar el nivel de creatinina. Esperemos su recuperación en los próximos días porque nos tiene que mandar esas hermosas felicitaciones por Navidad, como en años anteriores.


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Pepe Aranda (Oficialía 1970 y Maestría 1972) es nuestro particular arquitecto en Internet. Construye ladrillo

a ladrillo un edificio para la información de los AA.AA. de la SAFA de Úbeda. Para los que posean conexión

a Internet y no hayan entrado a consultar esta información, exponemos aquí cómo lo pueden hacer.

Gracias Pepe por todo lo que haces por la causa de los antiguos alumnos.

- La dirección de la web de Pepe es

safa.tvsa.es

- Al entrar se muestra la primera página

en la que en la barra superior aparecen

los enlaces a otras secciones. Si

pinchamos en Publicaciones, por

ejemplo, aparecerá esta página con

revistas, libros y artículos que podremos

ver pinchando en cada uno de ellos.

- Si pinchamos en Blog y WEB de

safistas, aparecerá una relación de

nombres titulares de esos blogs a los

que Pepe ha “alquilado” una sección y

en la que también podremos entrar y

consultar lo que hay. Para poder

publicar algo en estos blogs, es

necesario solicitarlo al titular de ese

blog que es quien dispone de las claves

de acceso al mismo.

- Recientemente ha creado dos nuevos

blogs: García Mauriño para amigos de

la ética y AASAFA para que todos

podamos ir aportando lo que deseemos

respecto al encuentro del próximo mayo

en Úbeda.

- A los que no hayan empleado esta

web aún, los animamos a que lo hagan,

quedarán gratamente sorprendidos del

trabajo de recopilación de Pepe. Hay

fotos antiguas, vídeos antiguos y

recientes, y muchas cosas más.


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Presentación del libro: “ESTADO LAICO IGLESIA LAICA”

José María García-Mauriño Sevilla, 2 de Octubre de 2012

Todos percibimos de alguna manera que vivimos

en una sociedad bastante inmadura, bastante infantilizada, y en el origen de esta infantilización está la continua expansión del Estado, con su tutela hiperproteccionista. Todo está en sus manos y de él dependemos tanto para lo bueno como para lo malo. El Estado se ha convertido en un padre omnipresente y omnímodo, y a nosotros se nos relega a la condición de hijos menores, desamparados e inermes, dóciles y dependientes, eternamente niños. El ideal laico implica una cultura de la autonomía de juicio, basada en el principio de la razón.

Buscamos construir una sociedad laica en un

Estado laico: Este es el reto en la actualidad.

Proponemos esta reflexión desde la ciudadanía. Y

todos sabemos que el laico no se define por oposición

a clérigo, es una distinción clerical.

1.- La sociedad laica: La Laicidad tiene por objeto “la independencia del

individuo, la sociedad o el Estado respecto a

cualquier organización o confesión religiosa”

(Diccionario RAE) Esa independencia descansa en dos

principios esenciales: la libertad radical de conciencia,

y la igualdad jurídica y política de los ciudadanos. De

ellos se deduce necesariamente el respeto y la

aceptación de los otros en plano de estricta igualdad,

sin distinción de sexo, cultura, religión o ideología….

Es decir, las bases de la democracia y de la fraternidad

social.

Ser laicos, entonces, equivale a ser

ciudadanos adultos, personas libres,

defensores del pluralismo y de una auténtica

democracia. En modo alguno esa independencia

significa espíritu antirreligioso o actitud de hostilidad

contra la religión o las iglesias. El laicista puede ser

ateo, pero también una persona muy creyente.

Para fomentar esos valores y actitudes

necesitamos, además de un modelo educativo plural,

una nueva ley de libertad de conciencia y de

libertad religiosa que garantice igualdad de trato a

todas las creencias religiosas y concepciones

filosóficas. Pues en una sociedad laica y plural caben

distintas religiones, distintas convicciones, distintas

maneras de pensar, todas las cuales deben convivir en

igualdad de oportunidades.

Buscamos la construcción de la laicidad en

España. El laico es el ciudadano de a pie Aprender a

ser laico significa entrar en un proceso de maduración

y adultez humanas, capaz de ver la realidad, siendo

honestos con la realidad y querer cargar con la

realidad. Y la realidad hoy es tremenda, está

El sistema económico-financiero que domina hoy el

mundo, es decir, el sistema capitalista neoliberal, busca a toda costa ocultar el sufrimiento que genera, dejando en silencio los gritos de las víctimas. Sin embargo, esos gritos han de ser recogidos por una conciencia de laicidad que afronta la realidad, pues están proclamando que ese sistema es un enorme fracaso humano. El sufrimiento de las víctimas deslegitima de raíz el Imperio del Dinero. No sólo eso. Ese sufrimiento injusto pone en cuestión cualquier política o ideología, cualquier religión o espiritualidad que se desentienda de él o lo trivialice.

Estudiar las consecuencias humanas de las

decisiones, analizarlas y tenerlas en cuenta es condición necesaria para cualquier laico, es decir, ciudadano o ciudadana que quiera ser consecuente con su ciudadanía, que quiera progresar en su adultez. Si el poder político se desentiende del sufrimiento de las víctimas, siempre terminará doblegándose a las leyes del mercado, al modelo de producción y consumo sin límites y a la competitividad total. Esta es la tremenda realidad que nos invade. La política mundial será, cada vez más, rehén del poder financiero y de sus exigencias. Dejaremos el mundo globalizado en manos de un sistema ciego, anónimo e irresponsable que seguirá deshumanizándonos a todos.

2.- La laicidad del Estado En consecuencia con lo anterior, se entiende como

laicidad del Estado la independencia y separación efectiva entre el Estado y las iglesias, entre los planos secular y religioso. En clave histórica, diríamos que es la autonomía de lo político y civil respecto a lo religioso. Esa separación de esferas afecta tanto al orden económico y político como al doctrinal y moral.

En nuestro país dicha autonomía tiene muchas aristas, pues venimos de etapas históricas de plena identificación entre la Iglesia y el Estado. Pero desde 1978 vivimos en unas coordenadas en las que, según nuestra Constitución, el Estado español es aconfesional, es decir, no se adscribe a ninguna confesión religiosa. Ello no quiere decir que sea contrario a la religión, ni que profese varias confesiones a la vez. Significa simplemente que es laico, independiente de todo credo religioso. Estado aconfesional es equivalente a Estado laico.

El Laicismo, aparece históricamente como uno de

los principios básicos de toda democracia, vinculado al reconocimiento de la libertad de pensamiento, a la igualdad entre la ciudadanía, en derechos y deberes y, por tanto, a la no discriminación por razón de sus ideas y creencias. Su contenido no es otro que el establecimiento de las condiciones jurídicas, políticas y sociales idóneas para el respeto y desarrollo pleno de la libertad de conciencia, uno de los pilares fundamentales de los

Derechos Humanos.


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Los autores de este libro quieren presentar un Estado laico, que sea independiente de la Iglesia y organice la sociedad al margen de toda moral religiosa, sea católica o de cualquier otra confesión. Estamos en un Estado aconfesional. Propugnamos una separación total de Iglesia y Estado. Y una Iglesia laica, quiere decir que la Jerarquía de la Iglesia católica no pretenda influir en el Estado de manera que quiera gobernar a la ciudadanía con criterios y valores de su moral. Denunciamos repetidamente los Acuerdos de la Santa Sede y el Estado Español de 1979 en el que concede muchos privilegios a la Iglesia católica en detrimento de otras confesiones. Este libro quiere ser una sencilla aportación al tema de la laicidad. Deseamos contribuir a crear una conciencia colectiva, propia de una sociedad que poco a poco va superando la mentalidad tradicional, propia de años del nacional-catolicismo. Y nos empeñamos en actualizar, en la sociedad y en la Iglesia, la vigencia jurídica de un Estado aconfesional que lentamente se va abriendo paso en la historia de nuestro país. Esperamos que más pronto que tarde sean anulados los Acuerdos entre la Santa Sede y el Estado español de 1979 que privilegian a la religión católica y

van en contra del principio de Igualdad y de justicia.

El camino hacia la Laicidad efectiva, en la sociedad y el Estado, exige una serie de medidas, reivindicadas cada vez más por distintos sectores de la sociedad, que afectan de modo esencial a la Iglesia Católica, dado su estatus preferencial frente a otras confesiones. Entre ellas, señalamos las siguientes,

a) La denuncia y supresión de los Acuerdos de 1979 entre el Estado español y la Santa Sede. Tales acuerdos, también conocidos como el nuevo Concordato, suprimen los anteriores de 1953 y 1976, son de carácter preconstitucional, suponen la legalización de privilegios injustificables y comportan un tratamiento discriminatorio para el resto de los ciudadanos no católicos.

b) La autofinanciación de la Iglesia

Católica, que nunca debería hipotecar su libertad evangélica por conseguir ingresos a través de la mediación del Estado.

c) La retirada de la enseñanza

confesional de la religión de los centros educativos públicos o concertados. La religión, fuera de la escuela. La Educación pública nunca debe ser una Catequesis.

d) La eliminación de los símbolos

religiosos en los actos públicos, así como la supresión de símbolos y representaciones del poder civil y militar, en cuanto tales, en los actos religiosos. Para hacerlo posible necesitamos un Estatuto de laicidad en todas las Administraciones Públicas.

Y, por supuesto, la separación de esferas entre iglesias y Estado exige una Ética laica frente a cualquier Moral religiosa. La ética laica, como fundamento de convivencia ciudadana, se ha de basar en la dignidad de la persona, los Derechos Humanos y

los valores fundamentales recogidos en el art. 1 de la Constitución. Corresponde al Estado regular esa convivencia social sobre principios, normas y valores asumibles por todos los ciudadanos. La Moral cristiana, en cambio, se regirá por los valores del evangelio, y será aplicada por quien libremente decida aceptar esos valores, sin que en ningún caso pueda ser impuesta al resto de la ciudadanía.

3.-El Cristianismo, una religión laica: De hecho, el Cristianismo es una religión laica.

Jesús de Nazaret fue un laico. No perteneció a ninguna familia sacerdotal ni fue miembro de ninguna organización religiosa o de la clase clerical que detentaba el poder religioso. Al contrario, se mostró muy crítico con muchos de los fundamentos del judaísmo: con los lugares y los tiempos sagrados (el sábado está al servicio del ser humano, no éste al servicio del sábado); con el cultualismo (el culto no son sólo los ritos; es sobre todo un compromiso con la vida y no es válido si no va acompañado de la práctica de la justicia); con el Templo de Jerusalén, símbolo del poder, de la recaudación de impuestos…etc.; y, sobre todo, con la Ley, núcleo de la religión judía que Jesús incumple y corrige… En definitiva, Jesús no fundó una Iglesia, ni una religión, sino un movimiento de fe abierto a todos los seres humanos.

Finalmente, con este libro deseamos contribuir a la

construcción de un modelo de laicidad basado en el reconocimiento de la diversidad y la atención a las razones de todos los sujetos públicos que intervienen en la vida española. Es más, la laicidad la concebimos como una cultura de la cooperación de sujetos e instituciones que desde su identidad y diversidad se esfuerzan en aprender unos de otros e intentan colaborar en acciones para el bien común del país.

ESTADO LAICO, IGLESIA LAICA José María García-Mauriño Antonio Moreno de la Fuente Editorial Punto Rojo, Sevilla 2012 263 páginas

Animaos a comprar el libro y pasad vuestros comentarios a

José María. Seguro que le gustará conocer nuestra postura en

este tema.


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3. Nuestras vidas

D. Eduardo Navarro Jiménez

Nací un 3 de julio de 1931 en Baena (Córdoba). Como es lógico viví “la guerra” como niño y la

posguerra en mi adolescencia. Me quedé huérfano de padre en el 1942, con tres hermanos y con una madre maravillosa junto con un santo varón (hermano de mi madre) que hizo de padre.

En septiembre de 1942, ingresé en SAFA que se había inaugurado el 15 de mayo. Hice el ingreso de Bachiller y después de obtener una beca del Ayuntamiento, hice el Bachillerato en la Academia Gonzaga

SAFA (Baena). Aquí me acentuaron los principios religiosos que recibí de mi familia a través de retiros espirituales, el rezo diario del santo rosario, la asistencia a la sabatina de los sábados…

Mi juventud pasó entre estudios y mi gran afición por el deporte a nivel local, provincial y la culminación al participar en los Campeonatos Nacionales de Gimnasia Rítmica, con el equipo de Córdoba, representando a Andalucía, que tuvieron lugar en La Coruña.

Como el estado

económico de mi familia era precario, D. Juan Maldonado junto con el P.

Medina (ambos Directores) hablaron con el P. Villoslada y me

ofrecieron un puesto de educador y para dar clase

en una sección de la Graduada en el internado de Vva. del Arzobispo.

Un 5 de octubre de

1949, llegué a Villanueva, solamente, con una maleta llena de

ilusiones que pronto se quedó medio vacía por la realidad que me

encontré. Era un joven de dieciocho años que

venía del mundo del deporte y que, de pronto, se encierra en un internado con 70 alumnos en régimen

En el VI Encuentro de los Profesionales en Úbeda, celebrado en

mayo de 2012, tuvimos la satisfacción de contar con la

presencia de Don Eduardo. Después ha manifestado que se

sintió como en una nube viviendo lo que allí sucedía atrapado

por un shock emocional. Nos dijo en una breve locución: “Soy

una persona de acción y no me gusta extenderme en

palabras; lo que aquí siento es muy hermoso, me habéis dado

vida”

Don Eduardo ha dedicado su vida profesional a la SAFA, la

Institución es su vida. Se incorporó al Internado de Villanueva en

1949 con dieciocho años; después vino Úbeda, Poblado de

ENIRA , Baena y Alcalá la Real, donde ahora vive, precisamente

en la calle de la Sagrada Familia.

Sus vivencias son incontables por su extensión y su intensidad, pero le

hemos pedido que nos aporte algunos de sus recuerdos y este es el

resultado.


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permanente. He de reconocer que más de un día, en mis ojos, afloraron lágrimas y el deseo de volverme a

mi casa, pero mi patrona la Virgen de Guadalupe, me iba abriendo horizontes para volver a llenar esa maleta medio vacía ¿Qué milagro ocurrió? El gran santo de Andalucía, Padre Villoslada, en los encuentros

personales y claustrales, nos iba inyectando ilusión, entrega, desinterés y sacrificio, para entregarnos, en cuerpo y alma, a la educación y formación de aquellos alumnos que venían de los reformatorios de Madrid y de un internado de monjas del pueblo de Vera (Almería). Eran chicos que tenían unos corazones

inmensos de agradecimiento hacia la más mínima muestra de cariño.

Podría contar anécdotas maravillosas de aquel internado. Una de tantas era el encontrarme alumnos sentados en la cama, a altas horas de la madrugada, recitando la jaculatoria milagrosa “Corazón de Jesús en Vos confío” porque el P. Villoslada necesitaba la fuerza de la oración para conseguir ser escuchado y

atendido en los distintos ministerios de Madrid y, así, conseguir recursos económicos y materiales para la SAFA.

En aquel Centro es donde me di cuenta de la trascendental obra del P. Villoslada y que merecía la

pena entregarse en cuerpo y alma por ella. Fui, plenamente, feliz en aquel Centro.

¿Qué puedo decir del P. Villoslada? Para que tengan una idea aquellos que no le conocieron, en

persona, cuento lo que me ocurrió: En junio de 1951 llegó de paso hacia Madrid y, como de costumbre, todo el personal teníamos que pasar por su despacho.

Cuando me tocó a mí (el de menos méritos en el Centro) entré llorando. El motivo era una carta que había recibido de mi madre en la que me comunicaba

que mi hermano de trece años tenía tuberculosis y que estaban arruinados porque todo se lo habían gastado en curarlo. El P. Villoslada, cuando terminé de

exponerle mi angustia, me contestó que no tenía fe. Él no podía hacer que lo ingresaran en el Neveral (Jaén) por no tener catorce años que era la edad mínima exigida. Que me fuese a Baena los quince días de vacaciones que teníamos y que esperase su contestación. A los pocos días recibí una carta del

Ministerio de la Gobernación, junto con una suya, en la cual me comunicaba que me había conseguido, en el Centro Antituberculoso de Campanillas (Málaga) una plaza para mi hermano. Se curó. El P. Vil loslada se

había preocupado en resolver mi gran problema, a mí que no era nadie, a pesar de los asuntos trascendentales que tenía. No acabaría si contase todas las experiencias únicas que viví cerca de él.

Fueron años intensos en donde empecé a estudiar la carrera de Magisterio con libros prestados y, por libre, en las frías madrugadas de Villanueva, con vivencias irrepetibles de las que guardo un gratísimo recuerdo de todos mis compañeros, de los padres jesuitas y de todo el personal del Centro.

En septiembre de 1952, al finalizar la

Asamblea Pedagógica, que los maestros teníamos en Úbeda, fui a despedirme del P. Villoslada para incorporarme a mi Centro

de Villanueva y cual fui mi sorpresa cuando me dijo que me quedara con él en Úbeda. Allí todo era enorme, distinto, pero tenía el

factor común de los Principios SAFA que bien podían resumirse en espíritu de

trabajo, sacrificio y disciplina, entre otros. Estuve dos cursos como educador y profesor en la Preparatoria de Magisterio

junto con D. Juan Pasquau. Hice un paréntesis al incorporarme al servicio

militar en Sevilla. Una vez finalizado mi compromiso con la “mili” volví a Úbeda. El P. Gómez me reclutó para intentar conocer

y formar a los futuros trabajadores de España. Me encontré con unos jóvenes de

El equipo de 2º de Oficialía antes de un encuentro celebrado el pasado octubre del 57. De izda a dcha de pie: el manager D. Eduardo Navarro, Sáez, Lucena, Salazar, Bautista, Ibáñez, el capellán P.Mauriño y Barrera; en cuclillas, Gámez, Mora, Puentes, Vela, López Ruiz y Carpio.

El Padre Villoslada condecora a Don Eduardo con la

medalla de plata, a sus veinticinco años de servicio.


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una gran calidad humana, preparados para toda clase de sacrificios y muy bien dotados intelectualmente. Fui conociendo sus problemas, los de sus familias, la realidad del mundo del trabajo por sus vivencias familiares. Esa ilusión de querer trabajar en ese medio nunca se me ha ido de la cabeza.

¿Qué puedo decirles a los lectores de

“AMALGAMA” de mis años, muy felices, en este Centro? Vosotros los alumnos del 1952-1959 los conocéis mejor que yo. Mi memoria

me va fallando. Algunas anécdotas me las habéis recordado en el encuentro de mayo de 2012 en Úbeda.

Mi agradecimiento a todos los

compañeros que me ayudaron a ser mejor. Guardo un gran recuerdo de todos: profesores, administrativos y de todo el

personal del Centro. Y ¿qué decir de los jesuitas? He conocido a todos los rectores,

prefectos, padres espirituales y “maestrillos”. Todos me han dejado una huella profunda. Del P. Bermudo tendría para escribir un libro;

no digamos del P. Sánchez; de mis compañeros de inspección: Galofré, García Mauriño, Nieto,…y mi padre espiritual y director el P. Gómez. Jamás olvidaré que fui el último que le ayudó a sacar la moto del colegio, la tarde del 18 de marzo, y que, al día siguiente, el 19, lo saqué del coche fúnebre.

Como comprenderéis me haría demasiado extenso si contase mis vivencias con cada uno de ellos.

Solamente digo: “Gracias a todos”. A la muerte del P. Gómez quise trabajar fuera del internado. Me trasladaron, en septiembre de

1959, a mi querido pueblo de Baena. Allí tenía a mi madre, a mi tío (hizo de padre), a mis hermanos y, muy especialmente, a mi novia, hoy mi querida mujer que tanto me ha ayudado en los momentos difíciles

de la vida. Me recibe con gran cariño mi antiguo profesor y director D. Fernando Campos y el resto de los

compañeros ya conocidos. En Baena, aparte del trabajo en mi Colegio, tengo la primera experiencia al colaborar en el campo de lo social como miembro de la HOAC. Fueron tiempos difíciles de un fuerte compromiso.

En julio de 1962, recibo una carta del P. Bermudo diciéndome que me casase. Me había encontrado

un puesto de trabajo que me llenaría plenamente y esperaba mi respuesta aceptándolo. Se trataba de la Dirección de unas escuelas que se iban a abrir en el Poblado Obrero de la E.N.I.R.A. de la estación Linares-Baeza. Como siempre he tenido fe y confianza en mis superiores me casé y me encontré, de la noche a la

mañana, en aquel bonito poblado para poner en marcha unas escuelas. En aquel poblado encontré la realidad que había soñado: convivir y compartir alegrías y penas en

un ambiente plenamente obrero. Desde el primer momento, me di cuenta de que no se trataba, solamente, de educar a los niños, sino de adentrarse en los grandes problemas de aquellas familias en

todos los aspectos. Pronto se abrió una cooperativa de consumo, un hogar del productor, una escuela de preaprendizaje, una biblioteca y una sala de juegos infantiles. Todo se realizó en seis meses. ¿Cómo pudo ser? Aparte de una estrechísima relación y predisposición entre la Dirección de la Empresa y la Escuela

tuve la suerte de encontrar a un contramaestre llamado Pepe Roldán que compartía las mismas ideas y sentimientos que los míos. Por supuesto, que encontré el apoyo y el cariño de mi mujer cuando estaba

deprimido por no poder conseguir nuevos proyectos. Fue allí donde nació mi hija María Capilla que creció durante dos años en aquellas inolvidables tierras.

Al cierre de la empresa de E.N.I.R.A. me cuestioné mi traslado y entre los centros que me ofreció el

P. Bermudo se encontraba el de Alcalá la Real. Pensé, junto con mi mujer, que sería un lugar bueno como paso hacia Granada. En septiembre de 1964 nos trasladamos a dicha localidad.

Descubrí el carácter acogedor y la amabilidad del pueblo alcalaíno y, sobre todo, el gran amor y la fuerte devoción de todos sus habitantes hacia la Virgen de las Mercedes. Me dije: “Este es el pueblo que

En la plaza de Santamaría con otros compañeros profesores.


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sintoniza con mi forma de ser”. Tanto fue que el último destino académico lo tuve en Granada al que

renuncié por quedarme en SAFA de Alcalá la Real. Aquí nació mi segundo hijo José Eduardo y aquí me llegó la jubilación.

En el Centro de Alcalá la Real he pasado

27 años. Por mis clases he conocido a varias

generaciones de jóvenes tanto a nivel de E.G.B. como de Oficialía Industrial. He tenido

el honor de dar clase a los hijos de antiguos alumnos. Compaginaba mis clases de E.G.B. con las de profesor de Educación Física tanto

en el Centro SAFA como en el Instituto Alfonso XI. Hicimos muchos kilómetros en largos meses de campeonatos en diferentes deportes

a nivel local, provincial y regional. Un periodo de actividad intensa hasta que en el año 1980

me dio una trombosis que me impidió continuar con la Educación Física. El Tribunal Médico de Jaén me incapacitó para esta

actividad; en la actualidad tengo una valoración del 66% de invalidez.

Seguí con mis cursos de E.G.B. y con pequeñas ligas deportivas entre el alumnado de mi clase.

Imborrables recuerdos.

Tuve la suerte de encontrarme con grandes profesionales de la enseñanza. Formábamos un gran

equipo, una gran familia. De todos ellos aprendí algo bueno. Muchos nombres se agolpan en mi recuerdo:

mi primer Director del Centro D. Sebastián Talavera (lo conocía de años atrás cuando era seminarista en Villanueva); D. Pascual Baca; algunos Padres Espirituales: P. Huelín, P. Arcelus, P. Flores,… El recuerdo

me va trayendo a hombres y mujeres de gran valía de todos los sectores profesionales de esta SAFA de Alcalá la Real.

Una vez jubilado ayudé a poner al día el archivo parroquial de las Angustias, mi parroquia. En Cáritas Interparroquial ejercí como voluntario impartiendo clases de refuerzo a un grupo de niños gitanos

del barrio de Las Cruces, hasta que me fallaron las fuerzas al no poder subir la fuerte pendiente en la que se encontraban sus viviendas.

Estoy orgulloso porque mi hija cuando terminó la Licenciatura quiso trabajar en este Centro y hoy es profesora del mismo. Mi hijo es el Director del

Instituto Hermanos Machado en Montequinto (Sevilla). A ambos les pido que se entreguen de lleno a la

educación y que, cuando acabe el día, les quede la conciencia tranquila de haber cumplido con su deber. Nos han dado cinco nietos que son nuestro orgullo y,

tanto para mi mujer como para mí, constituyen el estímulo para seguir viviendo.

Tras el encuentro de mayo de 2012, he vuelto a sentir la juventud y la ilusión perdida entre los

vericuetos de la edad. De nuevo, me ha embargado un fortísimo entusiasmo al reencontrarme con tantos compañeros que me habéis devuelto muchos años de mi vida, oleadas de felicidad en esta última etapa, imágenes y recuerdos que permanecían dormidos en

mi mente esperando que alguna voz amiga los despertara. No pude disfrutar al máximo porque estaba en una nube. Iba saludando a unos y a otros, como un robot, sin ser muy consciente de quien era cada cual,

intentaba reconstruir el puzzle uniendo rostros, nombres y recuerdos. Tras la lectura de la revista “AMALGAMA” me he enterado de los que asistieron y siento una fuerte desazón porque me hubiese gustado intercambiar impresiones más profundas. Pido perdón por mi torpeza pero en mi corazón os llevo

a todos. En mis oraciones pido al Señor por los presentes y por los que nos dejaron en el camino. No sé si tendré otra oportunidad de abrazaros, pero sabed que tenéis un amigo que os ama.

Eduardo

Antonio Soler entrega a Don Eduardo el diploma en el

acto de homenaje a los profesores. Úbeda, mayo de 2012.


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Entrevista a Manuel López Martínez, alumno fundador y más tarde profesor de comercio.

Marcado con la flecha, Manuel con un grupo de profesores en los años setenta.

P.- Entre el 41 y el 46 estuviste haciendo primaria con los jesuitas en las primeras escuelas de La Corredera y el palacio de los Medinillas. ¿Cómo recuerdas la incorporación de alumnos en aquellos años? ¿Cuál era su procedencia?

R.- La mayoría de los primeros alumnos venían de Madrid-me suena algo así como Yeserías – y también entramos bastantes de Úbeda. En el 45 tuve de compañero de banca a un madrileño que se llamaba Orlando Arias Blanco.

P.- ¿Cómo era la vida en el internado de la plaza López Almagro y cuantos alumnos había?

R.-Si, primero fue el palacio de Dª Rosa Izpizúa y luego añadieron unas casillas que había al lado, entre el palacio y Correos. Cuantos no te puedo decir, pero el comedor se llenaba y era bastante grande. En esta época fue cuando vino el Padre Hermoso.

P.-¿Quiénes eran tus compañeros de curso?

R.-Los dos primos Domingo Molina, José Mª y Juan Linares, Teobaldo, Orlando Arias, Juan Ruiz, Gabriel Molina, Manolo Ferrer, Manolo Martell,…

P.-¿Qué recuerdas de los jesuitas de esos años y de los profesores?

R.- Me acuerdo de un Don Francisco que era futbolista del Real Jaén y luego lo sustituyó Paco Ocaña. Don Benjamín también fue de los primeros…

P.-Se produjo el traslado al nuevo colegio en 1946, ¿qué uso se le dio a los talleres inicialmente?

R.- Yo estuve en mecánica y carpintería. El primer Maestro de ajuste fue Emilio “el del hielo”, que tenía una fábrica de hielo en el Ejido de San Marcos. En carpintería empezó Pérez y otro que no me acuerdo y que se quedó de Maestro cuando se fue Pérez. Se hacían trabajos para el colegio y por encargos de particulares.

P.-En 1977 te incorporaste como profesor de la Rama de Secretariado, ¿cómo era la SAFA en esos años de transición política?

R.- En el colegio no se notaba la inquietud por los cambios políticos. Mi Director era Paco Moya y con los alumnos sólo tratábamos de las materias de estudio. Personalmente sí que tuve protagonismo ya que había pertenecido al C.D.S. y me incorporé a A.P. donde me

propusieron como candidato a la alcaldía. Los del P.S.O.E. de Jaén me llamaron para pedirme que me presentase con su lista y me garantizaban que sería alcalde.

P.- ¿Viviste la salida de los jesuitas a un piso privado? ¿Cómo afectó ese cambio a la vida del colegio?

R.- Prácticamente no se notó, ya que pasaron a vivir en los pisos de detrás de la iglesia y en uno del Ejido de San Marcos, o sea, como en casa. Yo por entonces estaba en la A.P.A. porque era el cabeza de familia y mis dos hermanos pequeños estaban en el colegio.

P.- Tenemos entendido que hubo conflictos con algunos alumnos por cuestiones políticas, ¿afectó este hecho al tradicional estilo de convivencia?

R.- No me consta. Yo sólo tenía un alumno díscolo que me dijo que quería ser Disc-Jockey, pero como yo no sabía qué era eso, le mandé al psicólogo de Magisterio.

P.- Con tu título de alumno fundador, ¿cómo ves los recientes encuentros de AA.AA. en Úbeda?

R.- Muy bien y muy recomendables ya que avivan los recuerdos y estimulan los más nobles sentimientos de compañerismo y familia.

P.- El pasado cuatro de mayo tuvo lugar en Úbeda un encuentro de alumnos de Primaria con algunos de tus compañeros del 42 y otros más jóvenes que salimos de la SAFA hace cincuenta o sesenta años, ¿cómo intuyes el futuro de la SAFA? ¿Se mantendrá este espíritu de familia?

R.- Se debe mantener y creo que para ello es muy importante que los AA.AA. sigamos dando ejemplo de unidad y alegría en nuestros encuentros en el colegio. Pienso presentarme en el colegio a preguntar cómo van las distintas ramas y fomentar el “safismo”.

P.- Te agradecemos la luz que nos has proporcionado con tus respuestas y te pedimos que añadas aquellos asuntos de interés que consideres oportunos para completar esta sinopsis histórica de la SAFA.

R.- La memoria ya hace aguas pero puedo contar alguna anécdota inolvidable por las marcas y objetos que conservo de la época. En el taller de ajuste con Emilio el del hielo, hice una aguja de coser pleita; para hacer el agujero la sujetaba José Mª Linares y, sin saber cómo, me clavé la punta y me llevaron al hospital a ponerme la antitetánica. La aguja la conservo. También recuerdo que al volver de unas vacaciones en 1947, fui a saludar al perro Tigre y me mordió dejándome como recuerdo la marca de sus colmillos en la muñeca.


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Doroteo Fernández Pérez (Rama Eléctrica, promoción del 59) TRAYECTORIA PROFESIONAL

Ingreso en Abengoa en julio de 1959 donde trabajo hasta finales de 1961 participando en distintos trabajos de montaje por diferentes ciudades. En diciembre de 1961 ingreso en el

Cuerpo de Correos hasta mi incorporación al servicio militar donde coincido con Cárceles Heredia. Mi capitán me sugiere que ingrese en la Guardia Civil o en la Policía Armada, sugerencia que no me llegó a motivar porque la vida castrense no me acababa de convencer como solución para mi vida.

En 1963 tras ser licenciado me incorporo a la empresa montajes eléctricos de mi tío que trabaja entre otros para Santana. En agosto de este año me traslado a Almuradiel (Ciudad Real) para hacer la instalación eléctrica del hotel Hogar del Cazador; una vez terminada esta obra vuelvo a Santana a la división de Maquinaria Agrícola.

En este tiempo me veo en situación de provisionalidad y me entero en agosto de 1964 que

se prepara un curso de cableadores en Stándard Eléctrica, pero mientras estoy a la expectativa

de este curso, me incorporo a la empresa de montajes SEDE. Surgen unos trabajos de cierta importancia en Valencia y Barcelona, y

allí me voy. Al terminar estos trabajos regreso a Madrid donde me nombran ayudante del Encargado General con la misión de llevar el aprovisionamiento de

materiales a todas las obras de la provincia de Madrid y pagar las nóminas quincenalmente.

En cierta ocasión, la empresa tuvo

necesidad de cubrir un puesto de montador con experiencia, le avisé a mi compañero y amigo Miguel López y le ofrecí el trabajo en Sevilla. Mi sorpresa fue que Miguel le avisó de la oportunidad de trabajo a Pedro Ponce quién también se presentó.

En 1970 dejo la empresa de montajes y empiezo a trabajar en una empresa de carpintería

metálica, propiedad de un cuñado mío, pero a los dos meses no veo clara la viabilidad del trabajo y decido volver a Madrid donde tengo varias posibilidades de trabajo y, además, mi

Nací en Linares el día 25 de mayo de 1940. Con cinco años

ingresé en el parvulario de las Escuelas de Santa Engracia y a los siete inicié la Primaria en el mismo centro donde acabé a

los doce años. Pasé a continuación al grupo escolar de La Sagrada Familia. En el centro de Linares de la SAFA ya

existían los talleres, pero no es hasta el curso 1955/56 cuando se organiza la enseñanza por cursos y yo empiezo en

ajuste, también continuo el siguiente con esta especialidad. En el curso 57/58 paso al Internado de Úbeda donde

permanezco dos años haciendo la especialidad de Electricidad


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novia, hoy mi esposa. Contacto con un amigo José Domínguez que me debía algo de dinero y me ofrece trabajar para él; acepté y me he mantenido durante veintisiete años hasta el cierre de la empresa y mi acogida a la jubilación.

TRAYECTORIA FAMILIAR

En 1973 me casé con mi novia

de siempre, Joaquina. Hemos

tenido dos hijos, Juan Francisco y María Isabel. Hemos pasado por el

dolor de perder a Juan Francisco a

sus 33 años, pero como la vida se encarga de compensar las experiencias más adversas, ahora nos sentimos muy ilusionados esperando un niño de mi hija María Isabel.

MIS RECUERDOS DE LA SAFA Tengo hermosos recuerdos de mi paso por la SAFA, primero en Linares y más intensos los

dos años que pasé en el Internado de Úbeda donde la convivencia con los compañeros era durante las veinticuatro horas. Recuerdo las clases con Don Juan Antonio, disfrutaba especialmente con la Tecnología y las Prácticas de taller. Mi curso era una pequeña familia, éramos compañeros y hermanos. En la foto estamos con Don Juan Antonio, Miguel López, Juan

Ramón Ramírez, Pedro Ponce y yo. Con camisa blanca, Juan Manuel Ruiz, cuñado de Miguel López que asistía solo a clases de taller.

Ahora he disfrutado rencontrándome con muchos de mis compañeros en Úbeda después

de cincuenta años. Me hubiese gustado que Miguel López hubiera podido venir este año desde Mallorca, pero no ha podido ser. Don Juan Antonio, Ramón Ramírez y Pedro Ponce ya no están con nosotros.


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José Rienda Burgos

Nací en Motril (Granada), ingresé en Úbeda en 1956 y terminé Oficialía Mecánica en el verano de 1961, pertenezco por tanto a la promoción del 61.

Aquel verano participé en un cursillo

intensivo de ALEMÁN con la SAFA de Andújar; allí nos juntamos unos veintidós

jóvenes ilusionados a la espera de lo que el padre Bermudo nos había contado que sería nuestro primer trabajo. Él se había encargado de contratarnos con la casa

M.A.N. como una experiencia novedosa y para nosotros una prueba de fuego ; mis padres se hacían ilusiones pensando que la economía familiar mejoraría considerablemente en cuestión de poco

tiempo, pues en Alemania si eres un buen profesional y con el contrato que nos habían conseguido te hacías millonario en cuatro

días: justamente todo al revés .Nos hicimos el pasaporte y con una maleta de madera hecha a

medida nos metimos en el tren, para que os hagáis una idea, como el AVE de hoy.

Del colegio de Úbeda íbamos en aquella expedición Juan Nuño (promoción del 59), Miguel Cachinero y Diego Álamo (promoción del 60) y yo que soy del 61.

El 9 de septiembre del año 1961 ya teníamos el sello de la policía de Nüremberg; nos pusieron a vivir en unos barracones de madera cuyos

techos se aprovechaban para hacer carreras de motos y otros menesteres de ocio. La empresa muy grande, tan grande como Úbeda, en los primeros días iba tan despistado que no

encontraba la entrada a la nave de trabajo y eso que las máquinas eran grandes. Nos entregaron unos tornos con más palancas que un tractor y nos

esforzábamos por trabajar a la perfección. Pero ese era el error, porque al no entender las

instrucciones que acompañaban a los planos no supimos que las medidas no debían ser precisas ya que las piezas se sometían a un tratamiento térmico posterior y quedaban alteradas: nuestro primer alemán no daba de sí para tantas exquisiteces.

En estos tiempos de crisis el idioma más demandado por los

estudiantes españoles y jóvenes en paro es el alemán: la

historia se repite y ya se cuenta por decenas de miles los

jóvenes que en este 2012, se abren paso en Alemania.

José Rienda nos cuenta su experiencia en Nüremberg, hace

50 años. Y es que la abundancia de trabajo es semejante a

una nube que se moviera caprichosamente por la Tierra.

Hace unos años tan solo, pasó por aquí, por nuestra fatigada

España.


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A los pocos días un tal Cañedo de El Padul sufrió un accidente y volvió a casa con una mano magullada, por cierto, nunca he sabido de él, si puede y quiere contactar aportando sus propias experiencias sería interesante. Creo recordar que otro compañero rompió tres tornos en una

semana y lo cambiaron de trabajo. A mi me ofrecieron trabajar con un alemán en un torno muy grande, los ejes que se torneaban valían en aquella época un millón de marcos; había que trabajar y rezar para que no se estropeara un eje de aquel tamaño, pues de ser así iríamos derechos al TRULLO.

La vida en los barracones era muy variada: ir de compras preparar comidas que le harían

vomitar a un perro, fregar, lavar la ropa y todas las demás tareas domésticas. La dificultad para dormir en invierno era infinitamente mayor que la de nuestra querida

“Siberia”. Había que freír las palabras para hacerlas descifrables.

Cuando nos enteramos que el

padre Bermudo –era un gran hombre- venía a visitarnos, me dispuse a preparar un cocido y los dichosos garbanzos no se ponían tiernos por más tiempo que estuvieron hirviendo. Al final jugamos con ellos pues parecían bolas de rodamiento. A pesar que mi madre me dijo cómo tenía que hacerlos, no sirvió de nada, acabamos comiendo huevos ¿fritos? y patatas salteadas una si y otra no, era

Tratando de llevarme bien con este pequeño torno alemán.


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muy divertido. No se por qué, pero apostaría que aún quedan muchos que no se atreven a freír un huevo. Si de aquella experiencia pudiéramos reunir todas las opiniones creo que pasaríamos un buen rato muy entretenidos.

Al cabo de trece meses de estancia en Alemania, volví a casa con muchas ilusiones, muchos conocimientos, bastante soltura como tornero y sin un duro en el bolsillo, cosa que mi madre no llegó nunca a entender. A nuestra edad, nos fundíamos todo el jornal. Sí recuerdo cómo un bonito deseo la ilusión y la alegría que se vive cuando te entregan tu primer jornal, fruto del primer trabajo. Ya en mi pueblo, empecé a aplicar en los talleres de mecánica todos los conocimientos y ganas de trabajar que traía recientes de Alemania más los conocimientos técnicos aprendidos en la SAFA y, cómo no, respeto, comportamiento, responsabilidad, etc, etc.

Me casé en Baza con una chica de Úbeda que

conocí precisamente cuando volvía de

Alemania. Pasé por la SAFA y el padre Marín,

en una visita a un grupo de la VANGUARDIA

me abandonó a mi suerte y allí surgió el

chispazo que hasta hoy me sirve y DIOS

quiera dure muchos años más. Mi noviazgo

duró cinco años, tuve dos hijos cuyas fotos

aparecen en medio del escrito, el mayor

mantiene en brazos al único nieto que con su

inocencia y juegos consigue que me olvide del

MARRÓN que nos han traído los presuntos

gobernantes que juraron la CONSTITUCIÓN y se la pasaron por….

Hice la mili en la LEGIÓN y me vine a trabajar a Valencia el año 1972 a la construcción y reparación de buques hasta que me he jubilado . Os dejo descansar y tomaros un café y os prometo contaros otro capítulo de mi vida en Valencia que no vais a quedar descontentos. Como pistas, las huelgas vividas en los distintos gobiernos, los accidentes mortales del 1997 por las prisas, mi implicación en las oenegés y el equipo de fútbol que hoy tenemos de senegaleses con un pié aquí y otro en su tierra.

Un saludo para todos de

José Rienda


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Juan Antonio Narváez Sánchez ( Maestría, rama del metal, 1964)

Nací en 1946 en Úbeda

(Jaén) y muy pronto

comenzó mi

vinculación con las

Escuelas Profesionales

de la Sagrada Familia. En 1952 iniciaba en 3º de Párvulos

mi andadura en el Colegio.

Al curso siguiente pasé a Primero de la Graduada, en el

demolido edificio del Grupo Escolar. Guardo un recuerdo

particular del curso 1953-54 porque el 6 de junio de 1954

hice mi Primera Comunión en la vieja capilla situada en

los bajos del edificio de dormitorios y al lado de los

comedores; me preparó D. Francisco Díaz. En la graduada estuve además: el curso 1954-55 en 2º;

el curso 1955-56 en 5º y el curso 1956-57 en 6º con D.

Mateo, que nos dio clases extraordinarias a un reducido

grupo de alumnos con vistas a prepararnos para acceder al

examen previo al ingreso en el curso Preparatorio de

Bachillerato. Efectivamente, el curso 1957-58 hice el

Preparatorio de Bachillerato; a lo largo de este curso tuve

oportunidad de tratar al Padre Marín, que era el director

espiritual de nuestra división. Entre los eminentes

profesores que tuve ese año cabe reseñar, por su destacada

personalidad, a D. Juan Pasquau.

El curso 1958-59 cambió el rumbo de mis estudios: por

graves dificultades económicas en el Colegio las clases no

comenzaron hasta mediados de enero. Para entonces ya

estaba matriculado en la Escuela de Maestría Industrial de

Úbeda. En este centro cursé el primer año de

Preaprendizaje y los tres años de Oficialía Industrial en la

especialidad de torno, para concluir con la Reválida en el

verano del 1962. Aquí tuve como profesores, y luego los

volvería a tener en Maestría, a D. Juan Herrera y a D.

Diego Fernández, que era, además, Jefe de Estudios y

luego Director de la Escuela de Maestría Industrial.

Mi regreso a las Escuelas Profesionales de la Sagrada

Familia se produjo en el curso 1962-63 para iniciar allí los

dos años de Maestría Industrial, rama mecánica, y

finalizar en julio de 1964 tras el correspondiente examen

de reválida.

El domingo 23 de agosto de 1964 comenzaba mi etapa

profesional. Ese día emprendía el viaje hasta Alquife

(Granada). Allí permanecí, durante dos años, trabajando

en The Alquife Mines, una de las sociedades mineras que

existían en dicho pueblo.


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D De prácticas en las instalaciones de CAF (Beasain), en 1969. Tuve que introducirme en las entonces

modernas técnicas de control de calidad

como eran los ultrasonidos, (basados en

el fenómeno piezoeléctrico que posee el

cuarzo y el titanato de bario consistente

en transformar los impulsos eléctricos en

ondas ultrasónicas y viceversa,) y que se

aplicaba por ejemplo para detectar, en

los ejes de los coches y vagones de los

trenes, defectos internos de fundición o

posibles fisuras producidas por la fatiga

del acero debido al esfuerzo del rodaje.

En 1966 di el salto a Madrid, a la empresa Patentes Talgo S.A. Después de varios meses de trabajos

diversos en los talleres de Aravaca emprendimos la apasionante tarea de la creación del Departamento

de Verificación (Control de Calidad). Cursos en la Asociación Española de Control de Calidad y en los

Talleres Generales de Renfe de Valladolid (ensayos no destructivos). Pocos años después tuve la suerte

de que incorporaran también a este Departamento a José Antonio Sánchez Poveda, de Úbeda, y

Maestro Industrial (1967). Cuando yo me marché en 1974 él se quedó a cargo y tras duros años de

esfuerzo, trabajo y estudio adquirió un prestigio reconocido a nivel nacional e internacional. De 1974 a 1986 trabajé en diversas empresas y diversos campos ajenos casi por completo a lo que

había estudiado: impartí clases, hice trabajos de delineación y, principalmente, me introduje en temas

administrativos de oficinas. Fue realmente un cambio de rumbo importante.

De más envergadura, sin embargo, fue el emprendido en 1986: tres años de estudio me convirtieron

en Master en Asesoría de Empresas. Desde entonces y hasta la jubilación, en 2011, estuve inmerso

como profesional autónomo en los aspectos fiscales y

contables del mundo societario y de las fundaciones, tema en

el que también me especialicé.

Paralelamente fui desarrollando una actividad literaria, que

como mera afición había comenzado a los 14 años, centrada

de manera particular en el teatro, radio, narrativa juvenil, y

biográfico. Fue un gran estímulo estrenar en 1964,

precisamente en Alquife, una pieza corta de teatro y alcanzar

en 1965 mi primer galardón en un certamen poético,

naturalmente para escritores noveles. En 1966 hice mi primera

aparición en la radio (Radio Granada) con una obra corta de

carácter dramático: Mi hijo Eddy.

Finalista en el Primer Concurso de Guiones, convocado

por Radio Nacional de España, con la obra Partida de mus,

fue estrenada el 23 de julio de 1979. En la Tercera edición de

dicho Concurso quedé finalista con las obras La luz que

llegará y Como las viejas piedra de la ciudad, que llevaba

implícito también el estreno de dichas obras, pero que no se

llevó a efecto por la supresión del cuadro de actores de Radio

Nacional.

También he escrito diez títulos para una colección juvenil:

breves (40-50 páginas) biografías de santos o temas

doctrinales. El primero de ellos fue traducido al portugués. Ya

para un público más amplio preparé una biografía divulgativa

de la figura de Edith Stein y otra sobre El doctor Ortiz de

Landázuri, que lleva dos ediciones en España y la primera en

su traducción al italiano.

La vida continúa y, aunque a otro ritmo, sigo colaborando

dentro del campo del voluntariado en temas contables y, en el

terreno literario, enviando a la prensa digital y de papel

escritos cortos, generalmente relacionados con el mundo de la

cultura, y aunque no existe una periodicidad fija a veces se convierte en semanal, por lo que rondará el

medio centenar, ya que algunos de estos escritos son publicados por dos o tres medios.

Indudablemente tengo que volver al comienzo, es decir, a los años en las Escuelas Profesionales de la

Sagrada Familia, donde adquirí la formación profesional, humana, doctrinal y espiritual que me ha

capacitado para su posterior desarrollo y sobre la que se ha asentado el transcurso de mi vida.

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PROMOCIÓN DEL 62

(Oficialía 1962, Maestría 1964) La larga despedida de la SAFA

JUAN ANTONIO NARVÁEZ SÁNCHEZ

__________________________________________________________________________________________

En el recuerdo, al menos del que escribe estas líneas, quedan una serie de episodios que podrían

justificar el título de este artículo. La despedida de la SAFA por parte de los que finalizamos los estudios

de Maestría Industrial, allá a mediados del mes de julio de 1964, no fue un adiós (o un hasta luego)

repentino, precipitado o inesperado, sino que más bien fue un a-d-i-ó-s deletreado a lo largo de varios

meses.

El retorno a las aulas y a los talleres a

comienzos de 1964, después de la pausa

navideña, tuvo una notoria novedad y es

que tras la fiesta de Reyes se nos invitó a

participar en los Ejercicios Espirituales

que cada año tenían lugar, de forma

habitual en el colegio de Úbeda, pero que

en esta ocasión se celebraron en la casa

de Ejercicios habilitada en el conjunto del

Noviciado de Córdoba, en la conocida

Carretera de El Brillante. Era como un

colofón magistral a esa formación

ascética y religiosa que habíamos

recibido a lo largo de los años y un

afianzar y marcar la particular huella que nos permitiera vivir una

auténtica vida cristiana en lo sucesivo, pero de manera especial en

esa penetración e inserción en el mundo laboral al que íbamos a

tener acceso en breves meses.

No recuerdo el nombre de los dos padres jesuitas que nos

predicaron y convivieron con nosotros aquellos días, pero su imagen

perdura en la foto que nos hicimos al final de esas jornadas. Y antes

de regresar a Úbeda se realizó una visita a los talleres de la sociedad

Abengoa, que entonces constituían una referencia empresarial

paradigmática y el sueño profesional de muchos.

Se reanudó el ritmo académico habitual y el siguiente episodio lo

constituyó la fiesta de San José Obrero, el día primero de mayo. Se

aprovechó el consiguiente puente para organizar la tradicional

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verbena de los de “profesionales”. Unas sencillas casetas, banderolas, cadenetas de papel, el bar y la

tómbola. Muy significativo era que la mayoría de los regalos de la tómbola consistían en muñecos

vestidos de las más diversas formas, todas diferentes. Esta variedad tenía su origen y era fruto de la

imaginación y generosidad de nuestras madres, hermanas, novias o amigas a las que semanas antes les

habíamos entregado unos cuantos muñecos completamente desnudos para que los vistieran de pies a

cabeza. El eterno femenino puso lo demás. Hubo auténtica rivalidad para lograr llamar la atención: la

seda, el bordado, la puntilla o la lana lograron auténticas obras maestras de la costura, de las que todavía

hoy despertarían simpatía y admiración,

y que entonces nuestras madres,

hermanas, novias o amigas fueron

correspondidas con un simple “gracias”

como reconocimiento a su labor. Labor

que redundaría en incrementar nuestro

fondo común con vistas a hacer un

hipotético viaje de estudios y del que

hasta la fecha no se había hablado lo más

mínimo.

El mes de mayo transcurrió con la

mirada puesta en la Virgen, menos de lo

que a Ella se le debe, porque donde

teníamos realmente puesta ya la mirada era en los exámenes finales, orales y escritos, que se

adelantaban para después tener un margen de estudio y preparar la temida reválida final de carrera en la

primera quincena de julio. Simultáneamente las posibles salidas profesionales comenzaban a perfilarse y

de vez en cuando éramos convocados para entrevistas o pruebas en los talleres por parte de algunos

delegados de empresas como Santana de Linares, o de las Minas de Alquife en la provincia de Granada.

Se sucedieron los días de los exámenes finales con el estrés consiguiente y del que nos sobrepusimos

rápido, sobre todo después de obtener las notas y comprobar que todos habíamos pasado el listón.

La ceremonia de fin de curso, general para todo el colegio, se celebró en la explanada de entrada

teniendo como decorado la portada de la Iglesia de Cristo Rey, en la que todavía se celebraban los actos

religiosos del colegio. Hubo entrega de diplomas a los más destacados de

cursos y asignaturas. Como colofón, y en tan espléndido marco rebosante

de magnificencia, los alumnos de magisterio representaron el auto

sacramental de Calderón de la Barca “El gran teatro del mundo”.

El curso terminaba pero quedaba nuestro examen de reválida y a él

nos dedicábamos todas las horas del día. Junio ya mediaba y el

consiguiente calor se hacía sentir. De pronto saltó la chispa: ¿Por qué no

ir de viaje de estudios a Madrid? Se hicieron todo tipo de conjeturas: si el

viaje se dejaba para después de la reválida, en la segunda quincena de

julio, era muy probable que algunos no pudieran asistir y se pretendía que

el viaje fuese de todos y para todos. ¿Por qué no ir al partido de fútbol

más trepidante del momento: la final de la Copa de Europa de Naciones


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entre España y la U.R.S.S.? Aquello parecía inimaginable, pero en cuestión de horas pareció

imaginable. Varias cabezas pensantes y con capacidad de organización se pusieron en marcha. El

colegio ofreció facilidades para que nos acompañaran, en calidad de responsables, entre otros el Padre

Marín. Pero el tema principal era conseguir a unas horas del partido una treintena de entradas. Se utilizó

hasta la vía diplomática, que fue la que resolvió el tema en última instancia. El viaje estaba tan en el aire

que, personalmente por residir en Úbeda y ser alumno externo, el sábado 20 de junio salí de casa

diciéndo a mis padres que si no volvía a la hora de la comida es que estábamos camino de Madrid. Y así

fue, a primeras horas de la mañana quedó todo resuelto y emprendimos aquella aventura de viaje.

Era un autobús contratado expresamente para este viaje y con un conductor joven que sintonizó

bastante con nosotros. Hicimos una parada para comer en plena llanura manchega y luego proseguimos

directos hasta la calle Campanar de Madrid, en el Hogar del Trabajador, que es donde nos

alojaríamos. No había que pensar en habitaciones, sino que la situación precaria en la que íbamos, así

como el lugar, todo lo que nos permitió fue utilizar el gimnasio que estaba en la planta sótano y extender

por el suelo las colchonetas que los deportistas utilizaban para mitigar las caídas. No hubo objeciones

para conciliar el profundo sueño que la tensión y el viaje no proporcionaron.

Amaneció el domingo 21 de junio cargado de nubes, que no se sabía en qué podían acabar. No

obstante nuestro día fue bastante completo: después de la Misa y del desayuno emprendimos un viaje

turístico al Valle de los Caídos y a El Escorial. Eran los dos lugares por excelencia que se hacía

imprescindible visitar en aquellas fechas. De ambas visitas quedó también testimonio gráfico.

A primera hora de la tarde

emprendimos el regreso a la capital y

ya próximos al estadio Santiago

Bernabeu comprobamos el gran

ambiente que había en los alrededores.

Al fin accedimos al estadio y el

espectáculo que se podía admirar era el

de ciento veinte mil personas (la

capacidad de entonces) cantando y

gritando. La lluvia había hecho acto de

aparición en algún momento de la tarde

y lo hizo también durante el partido,

pero poco importaba.

Se recogen dos párrafos significativos aparecidos en la prensa del día posterior: “Alineaciones.-

ESPAÑA (jersey y pantalón azul, medias negras con vuelta de nuestra bandera): Iríbar; Rivilla,

Olivella, Calleja; Zoco, Fusté; Amancio, Pereda, Marcelino, Suárez, Lapetra.” “Goles.- A los seis

minutos, jugada de Suárez, que avanza por el lateral derecho, centra, falla el corte el defensa Mudrik,

que deja el balón flotando en el área, al que entra Pereda en tromba para “fusilar” el tanto a Yashine.

Es el primer gol de España. A los ocho minutos, Khusainov recoge un balón y contraataca con gran

espacio libre, y se produce, al mismo tiempo, el fallo de Olivella en la entrada al extremo ruso, el

punterazo de Khusainov y la media salida de Iríbar, y la pelota llega a la red. Es el empate. A los

treinta y nueve minutos del segundo tiempo, jugada por el ala derecha del ataque español, con pase

http://www.juegalaroja.com/el_gran_papel_de_butragueno-fotos_de_la_seleccion_espanola-igfpo-1412425.htm


25

corto de Suárez a Pereda, centro de

éste y remate inverosímil de cabeza

de Marcelino, que coloca la pelota

junto a un poste y por bajo, y llega

a la red sin que Yashine tenga

tiempo para hacer ningún intento.

Es el gol de la victoria española.”

Y es el histórico gol de Marcelino,

que la Promoción del 64 pudo

contemplar en directo.

Saboreando las mieles del triunfo y la fuerte lluvia que caía regresamos a nuestro lugar de residencia,

donde recibimos con gran alborozo la noticia de que el viaje se prolongaba un día más. Se habían

logrado algunos fondos y concretado algunas visitas, que se hicieron al día siguiente: a la factoría de

Pegaso, y a la factoría de Standard Eléctrica.

Todavía hubo otra prórroga más, el martes 23, en que visitamos las instalaciones de la Junta de

Energía Nuclear (JEN), incluido el único reactor nuclear existente entonces en España. Unas horas

libres permitieron hacer planes diversos: el Museo del Prado, visitar el centro de la capital o ver por

televisión la corrida de toros de la plaza de las Ventas y luego presenciar el ambiente a la salida, ya que

estaba relativamente cerca; aquella tarde se celebraba la Corrida de Beneficencia, con toros de don

Atanasio Fernández para Andrés Hernando, Manuel Benítez “El Cordobés” y Gabino Aguilar, que

tomaba la alternativa.

Aquel atardecer sí que se hizo irremediable el retorno. Después de cenar recogimos las cosas y

viajamos por la noche para llegar al colegio de madrugada. Nuestra aventura madrileña se había visto

bien colmada.

Vuelta, pues, a la mesa de trabajo y al repaso hasta los primeros días de julio en que se celebraron los

exámenes de reválida. Días tensos de nervios e incertidumbre hasta que, corregidos los exámenes y

celebrado el correspondiente claustro de profesores para calificar, pudimos respirar profundamente al

comprobar que todos habíamos aprobado.

Aquello sí que representaba el final de nuestra estancia en la SAFA de

Úbeda. Frases de despedida y promesas de seguir en contacto

intercambiando experiencias.

El horizonte, de pronto, se aproximó en exceso a nuestras vidas y

teníamos que traspasarlo. Para eso estaba la semilla que durante años

esparcieron generosamente sobre nuestra juventud profesores, padres

jesuitas y tantas personas que hicieron posible que aquella semilla

fructificara y que el colegio sea ahora para nosotros, no un recuerdo de

nuestra adolescencia y juventud, sino la piedra angular, el sólido

basamento de granito, sobre el que hemos construido nuestras vidas.

http://www.muchomundial.com/wp-content/uploads/2012/04/marcelino-gol-de-rusia.jpg


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5ª Promoción de Maestría

Rama Mecánica Narváez Sánchez, Juan A.

Aceituno Valderas, Diego* Ojeda García, Francisco

Acosta Camacho, Francisco Palomares López, Ángel Beltrán Pérez, Manuel Pérez Ortega, Santiago Espinosa Rescalvo, Juan Reina García, Antonio*

Galán Rueda, Francisco Ruiz Cuesta, Antonio* Herrera Medina, Manuel Utrera Cardeñas, Diego* Herrera Moreno, Antonio Vivas Baena, José Jaldo Plata, Juan Zambrana López, José Mª

Jiménez Muñoz, Tomás López Ayala, Francisco López Matiola, Manuel* Rama Eléctrica Manzanares Díaz, Alfredo Cubero López, Agustín* Martínez Ramírez, José García Godoy, Manuel *. Martínez Rueda, Luis Gómez Medina, Manuel*

Mengíbar Morillas, Antonio* Ruiz Martínez, Antonio*

Los alumnos marcados con * cursaron Oficialía en Úbeda, los restantes proceden de otros centros

Relación de alumnos que terminaron 2º de maestría

Curso 2º de Maestría Industrial (1963-64). De izquierda a derecha

Tercera fila: MANUEL GÓMEZ MEDINA, MANUEL SANTOS GARCÍA GODOY, FRANCISCO ACOSTA CAMACHO, ALFREDO MANZANARES DÍAZ, JOSÉ

VIVAS BAENA, ANTONIO RUIZ CUESTA, MANUEL HERRERA MEDINA, FRANCISCO GALÁN RUEDA y LUIS MARTÍNEZ RUEDA.

Segunda fila: MANUEL LÓPEZ MATIOLA, AGUSTÍN CUBERO LÓPEZ, JUAN ANTONIO NARVÁEZ SÁNCHEZ, ANTONIO HERRERA ROMERO, JUAN

ESPINOSA RASCALVO, JOSÉ MARTÍNEZ RAMÍREZ, SANTIAGO PÉREZ ORTEGA, FRANCISCO OJEDA GARCÍA y DIEGO ACEITUNO VALDERAS.

Primera fila: ÁNGEL PALOMARES LÓPEZ, JUAN JALDO PLATA, JOSÉ MARÍA JIMÉNEZ ZAMBRANA, DIEGO UTRERA CARDEÑA, FRANCISCO LÓPEZ

AYALA, ANTONIO MENGÍBAR MORILLAS, ANTONIO RUIZ MARTÍNEZ, MANUEL BELTRÁN PÉREZ y ANTONIO REINA GARCÍA.

En esta foto falta TOMAS JIMÉNEZ MUÑOZ.


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Alfonso Ros López (Promoción de Oficialía 1964 -fresador- y Maestría, 1966, rama del metal)

_____________________________________________________

Nací en CAUDETE (Albacete) el 16 de mayo de 1946, a las 00h00’ por lo que estuve a un tris de

que me pusieran Isidro, aunque no me termino de creer que mi padre renunciara a que su

primogénito llevara su nombre y el del abuelo paterno. Os aseguro que a mi no me pidieron opinión.

TRAYECTORIA PROFESIONAL

Oficina de Ordenación Urbana de Alicante.- Delineante. En espera de irme a la mili.

MACOSA (Valencia). Empresa ferroviaria, en la sección de locomotoras como delineante oficial y

delineante proyectista, 1969 a 1971.

SMITH KLINE & FRENCH (SK&F) que con distintas fusiones de empresas se transformó en

SMITHKLINE BEECHAM (SB) y en 2000 en GLAXOSMITHKLINE (GSK). Empresa

farmacéutica multinacional. (Delegación de Valencia).

Delegado. Varios cursos de farmacología y ventas. Desde

finales de 1971 hasta la jubilación.

TRAYECTORIA FAMILIAR

Me casé en 1971, con Conchita Puche, mi novia de toda la

vida. Hemos tenido tres hijos: Mª Luisa (1971), Alfonso (1974

y fallecido en 2002) e Inma (1979). Tenemos una nieta

preciosa (Paula, 2009) de mi hija Inmaculada.

RECUERDOS DE LA SAFA

Son innumerables. Absolutamente todos agradables, hasta alguno que en aquel momento no lo

fuera tanto.

El problema radica en que después de tantos años muchos detalles se van perdiendo, de ahí la

importancia de que en las revistas Amalgama y en Recreo vayamos dejando constancia de ellos antes

de que se olviden del todo y se pierdan. Los recuerdos personales de uno pueden ser completados y

complementados por los compañeros que tuvieron esas mismas vivencias, aunque en algunos

detalles pudieran, incluso, ser antagónicos. Ya se sabe que las cosas varían según el color del cristal

con que se mira.

Con vuestro permiso iré contándolos según prepare su narración, al igual que según vaya

encontrando fotos las iré publicando, (me faltan un montón). Pero, para empezar por el principio, os

contaré cómo fue el ir a parar a las Escuelas Profesionales de la Sagrada Familia.

Cómo llegué a la SAFA

De pie: Julio Montoro Álvarez, Alfonso Ros López y Jurado

Agachados: Manuel León Álvarez, Galindo y Caro

(Con nombre y apellidos pongo los de mi curso; a los demás

no pongo nombre por no recordarlo. Jurado creo que era de

Magisterio, posiblemente en prácticas en mi curso. Galindo y

Caro de un curso inferior).


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Mi padre estaba destinado en Cazorla desde el año 1956 en el que volvimos de Marruecos –

trabajaba en Explotaciones Forestales de Renfe- Estuve matriculado en la Academia “Cristo del

Consuelo” donde realicé Ingreso, 1º y 2º de Bachiller Elemental. Después pasé al Instituto Laboral

donde estudié 3º y 4º de Bachiller Laboral, bueno… para ser justo debería decir que lo que hice fue

no estudiar, hice el gandul hasta tal punto que mi padre tuvo que tomar cartas en el asunto. No le

quedaba más remedio, me suspendieron solo siete –sí, SIETE-.

La fortuna, el destino, se puso de mi parte. En el verano de 1960 mi padre transportó en el camión

víveres para el Campamento que la SAFA tenía en la Sierra de Cazorla y como “intendente” iba el

Padre Marín. Salió a relucir mi “brillante carrera” y por ello la invitación del P. Marín a mi padre

para que me presentara a los exámenes de ingreso en las Escuelas para el próximo curso. Ese verano

no tuve piscina… quiero decir balsa o alberca, ni tanta salida con los amigotes, solo clases

particulares. Mis padres no querían que pasara aquella ocasión en balde, aunque tuvo que ser un gran

sacrificio para ellos el pago de esas clases.

Aprobé y a primeros de octubre tuve que irme a Úbeda con la ropa que decían que había que

llevar. Toda ella marcada con el número 180.

En mi recuerdo queda que hubo una despedida rara. Era la primera vez que me separaba de mi

familia y entraba en un mundo desconocido, con los curas, que llevaba alguna connotación que no

sabía descifrar pero que oí que aquello tenía algo que a muchas personas… como que no les

gustaba.

Una vez despedida la familia y ya en régimen de internado nos llevaron con nuestros bultos a “La

Siberia”. Recuerdo que mi primer conocido, mi “primer amigo” en aquel tumulto de chiquillos fue

Fernando Cárdenas Martínez. Él venía de Jaén capital… y su deporte favorito era patinar. Fuimos

compañeros de curso durante toda la estancia en Úbeda… hasta 1º de Maestría, incluido; Maestría

Industrial la terminó fuera de SAFA.

Todos los componentes de esta

foto somos del mismo curso. En

1º o 2º de Maestría

De pie, izq. a dcha.: Sebastián

Polo Mingorance, Mario

Fernández Martínez, Manuel

Martínez Molina, Víctor Moreno

Marín, Julio Montoro Álvarez,

Miguel Serrano Rodríguez y

Alfonso Ros López

Agachados: Ángel Iglesias

Flores, Rafael Serrano de la

Rosa, Marcos Sarmiento

Martínez, José Peinado Matiola,

Daniel Vivian Cano, José Antonio

Pozo Rodríguez y Juan Yuste

Palomeque (†)

En negrita, cómo nos llamábamos.


29

Después de dejar en la asignada “camarilla siberiana” la ropa y... el ordenador, no puede ser; el

móvil, tampoco,... a lo mejor era la “Play Station”, nos bajaron al comedor para cenar. No recuerdo

el menú, pero creo que no era de Ferrán Adriá ni de Arzak, en esa ocasión... Si Fernando Cárdenas

llega a leer esto, como cenamos juntos, a lo mejor lo recuerda y nos lo cuenta.

El comentario anterior sobre la primera cena me da pie para contar mis recuerdos de cómo nos

repartíamos la comida. Antes de explicarlas hay que decir que estábamos en mesas de ocho y

siempre ocupábamos los mismos el mismo lugar en la mesa. Y esto no ocurrió recién llegados, ni

mucho menos, sería en cursos adelantados, algo mayorcitos. Yo diría que siendo ya un poco bordes.

Usamos, en tiempos distintos, al menos dos modalidades: la que imperaba el “Reparto Justo” y la

“Sálvese quien pueda”.

Vamos a la primera, el llamado “Reparto Justo”.

Por riguroso orden, cada día repartía uno el primer y segundo plato –si lo había-. Nadie tocaba

nada hasta estar servidos todos los platos. El que seguía al que había repartido elegía el plato que

más le convenía, el siguiente igual de los que quedaban, así hasta que solo quedaba un plato que era

para el que había servido. Ya teníamos que espabilar cuando nos tocaba el turno de repartir para que

el reparto fuera muy igual en todos los platos porque el peor, más vacío o peor “acompañado” se

quedaba, indefectiblemente, para el repartidor.

El segundo sistema de reparto, “Sálvese quien pueda”, era terrible para el último, o últimos, en

servirse. Igualmente cada día empezaba uno y por riguroso orden se servía cada uno en su plato. El

primero se ponía todo, en cantidad y calidad, que quería; el segundo lo mismo de lo que quedaba; el

tercero igual,... así sucesivamente hasta que al último, o últimos, podía quedarles nada. Normalmente

eso no solía ocurrir, pero claro, el primero al día siguiente era el último y si había abusado de su

“autoridad” el día anterior podía quedarse en ayunas. Como es aquello... “La venganza se sirve en

plato frío”.

Les llama mucho la atención a mis hijos –hijas y yernos- que siempre dejo el plato limpio. Nunca

me dejo nada en él. ¿Serán reminiscencias de la Edad de Piedra... o mejor dicho de la Edad del

Hambre? Es por decir algo. Hambre, lo que es hambre no recuerdo haber pasado. Que habría comido

más en muchos momentos... ¡Seguro!

En Úbeda, una tarde de domingo, hechos

unos gentlemen.

De izqda. a dcha.:

Luis Rosales Piñas, Manuel Ceballos López,

Alfonso Ros López y Mario Fernández

Martínez.


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Y termino estos comentarios de hoy con un último recuerdo en relación con lo anterior: Un dicho

que decíamos y que le atribuyo la autoría, con dudas, a Francisco Florido o a Julio Montoro:

-“Comer no comeremos, pero lo que es joder... ¡Joder que hambre pasamos!”

Reunión de curso en Úbeda, 1998

Desde Sevilla, por iniciativa de Budia y León principalmente, se organizó esta primera Reunión

de Hermandad de los que en algún momento pertenecimos al curso. Son veintidos los asistentes, la

mayoría con sus esposas. Los que faltamos fue porque no se pudo contactar o por fuerza mayor (en

mi caso surgida a última hora). Algunos estaban realmente lejos. Estábamos todavía en activo,… De

todas formas un gran éxito de asistencia.

El recuerdo que permanece en los asistentes, en todos, es de una gran satisfacción y alegría por

haber estado y convivido de nuevo con los antiguos compañeros de curso. Satisfacción compartida

por las esposas. Tan es así que existe una gran ilusión de volver a compartir otras jornadas como

aquellas. Incluso hubo quien ofreció su casa para celebrar la siguiente.

3º de Oficialía (1964), de izq. a dcha. y de arriba abajo:

1ª fila: Víctor Moreno Marín, Sebastián Martínez Santiago, Julio Montoro Álvarez, Manuel Martínez Molina, Marcos Sarmiento Martínez, Manuel Ceballos López, Rafael Fernández Budia y José Sánchez Cervera. 2ª fila: Juan Torres Blanco, Fernando Cárdenas Martínez, Manuel Javier Martínez, Luis Rosales Piñas, Alfonso Ros López, Facundo Molina Trillo y Diego Báñez Páez 3ª fila: Francisco Florido Carrasco, Sebastián Vera Sanjuan, Mario Fernández Martínez, Antonio Godoy Pérez, Manuel León Álvarez, Miguel Serrano Rodríguez, José Antonio Alfaro Rincón, Rafael Serrano de la Rosa y Sebastián Polo Mingorance.


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Dentro de año y medio será el 50º aniversario de nuestra promoción de Oficialía y hay que

celebrarlo, pero hay tantas ganas de vernos de nuevo que me están proponiendo que haya reuniones

previas a la de aniversario.

Otros recuerdos y anécdotas

Con el Maestro Tiznajo:

D. José Garrido Mendoza, conocido como “Maestro Tiznajo”, era el responsable de la fragua, donde se hacían buena parte de las herramientas de corte que se usaban en los talleres, además de donde se daban los tratamientos térmicos a esas herramientas y otras piezas. Casi todas las herramientas las hacía él pero con

mucha frecuencia, cuando íbamos a la fragua, nos dirigía y explicaba el cómo y el porqué de las cosas y así también nosotros nos hacíamos nuestras cuchillas. Bien. En una ocasión en la que estaba yo con él, mientras ponía el carbón de la fragua bien encendido para que la barra de acero cogiese su color y temperatura para trabajarlo, volviéndose, me mira y me dice: “Alfonso, ¿Cómo estarían ahí

unos trocitos de pollo?”

1998 en Úbeda. De izda. a dcha y de arriba abajo:

1ª fila: José Luis Pereda García (ha quedado fuera de foto), Víctor Moreno Marín, Sebastián Martínez Santiago, Juilo Montoro Álvarez, Manuel Martínez Molina, Marcos Sarmiento Martínez, Manuel Ceballos López, Rafael Fernández Budia y José Sánchez Cervera. 2ª fila: José Peinado Matiola (queda fuera de foto), Ángel Iglesias Flores, Juan Torres Blanco, Luis Rosales Piñas, Facundo Molina Trillo, Manuel Macías Camacho, Pedro Carpintero León y Diego Báñez Páez. 3ª fila: Mario Fernández Martínez, Manuel León Álvarez, Miguel Serrano Rodríguez, Rafael Serrano de la Rosa y Sebastián Polo Mingorance.


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Con D. Agustín Santabárbara de Sicilia:

D. Agustín me apreciaba. No tengo ninguna duda. No sé cuántos kilos, o litros, o metros, pero me apreciaba mucho. Os cuento una pequeña anécdota que recuerdo de mi relación con él. Primer día de clase de… ¿Tecnología? ¿Física?.... es lo de menos, posiblemente en 3º de Oficialía por donde estaba el aula. ¡Qué digo primer día de clase! ¡Primer minuto de clase! Me pregunta sobre el tema de la primera lección. Me levanto en mi lugar y sin irme a la pizarra le digo: -“D. Agustín, no lo sé. No he abierto siquiera el libro.” Se me

queda mirando unos segundos, vuelve su mirada a sus hojas y se ve perfectamente como escribe en mi casillero “0” Me indica que me siente. Dirigiéndose a la clase hizo un panegírico de mí que no sabía si estar enfadado por haberme ganado un 0 a las primeras de cambio, o contento por ganarme un, poco menos, que el premio Nobel de la Paz. Vino a resaltar mi honradez por no perder el tiempo queriendo arreglar con palabrería lo que en realidad no sabía y reconociendo mi falta por no haber estudiado…. En todo

el trimestre me volvió preguntar nada. Llega diciembre y los exámenes del primer trimestre. En clase los reparte, ya corregidos, y ve que levanto el brazo. Dirigiéndose a la clase dice: “El Sr. Ros

quiere hacer una reclamación. Yo ya sé lo que quiere. Quiere que le ponga un

10, que seguramente su examen merece, para que la media del trimestre le salga a 5 y así obtener un

aprobado. Pero como yo le aprecio, le pongo un 9’5 y así lo tengo otro trimestre estudiando la asignatura

como un loco para aprobarla.” Y así fue. Para aprobar esa asignatura ese año estudié más que nunca sabiendo, además, que no me iban a

preguntar en todo el 2º trimestre. No recuerdo la nota de fin de curso, pero se da la circunstancia que sería de las más bajas que saqué (seguro que algo más de aprobado raspado) y sería el año que más sabía de ella.

_________________________________________________________________________________

Fernando Usero Cerdán

(Promoción Oficialía 67, Electricidad) Nací en Villanueva del Arzobispo en el año 1950. Entré en la Safa

de Úbeda siguiendo los pasos de mi hermano Juan (él lo había hecho

dos años antes) en el año 1962 y allí cursé dos años de

Preaprendizaje y tres de Oficialía Industrial en la rama de electricidad.

Después de Úbeda hice Ingeniería Técnica de Telecomunicaciones en

Universidades Laborales y como casi todos fui a Madrid a buscar

trabajo. Allí empecé a trabajar para la ITT en sus empresas CITESA y

Standard Eléctrica S.A. y más tarde Alcatel. En las empresas

citadas estuve algo más de 19 años en Madrid, Bilbao y Sevilla,

ciudad a la que llegué en el año de 1974. Standard

Eléctrica tenía entonces la fabricación de centrales

telefónicas urbanas casi en exclusiva y las centralitas

privadas las fabricaba CITESA (Compañía Internacional

de Telecomunicación y Electrónica).

Con motivo del lanzamiento al mercado de una nueva

gran central privada llamada Pentomat 1000T para

grandes empresas y Hospitales, un grupo de ingenieros

técnicos fuimos formados en el conocimiento del nuevo

equipo que se empezó a instalar en Empresas como El

Corte Inglés en su sede central de la calle Hermosilla de

Madrid, grandes bancos, estaciones de Renfe… donde

fuimos adquiriendo formación práctica. Terminado el


33

período de formación, a mí me tocó ir a Bilbao donde solamente había una central de este tipo en la

empresa Wabco-Wilcox. Como me sobraba tiempo, me encomendaron impartir un curso de centralitas

pequeñas que yo no conocía, por lo que por las tarde me estudiaba la materia que tenía que explicar al día

siguiente y las dudas se las consultaba a un compañero con más experiencia. El compañero que había

venido a Sevilla se puso enfermo y me propusieron el traslado a esta ciudad para sustituirle cosa que

acepté encantado. Aquí había dos centrales Pentomat 1000T, una en el hospital Macarena y otra en la

Base Aérea de Tablada, más una tercera en Astilleros Españoles de Puerto Real que estaba pendiente de

montar. Además tuve que impartir otro curso del mismo tipo que en Bilbao

En 1977 me proponen hacerme cargo de la delegación regional para Andalucía y Extremadura. Abrí

oficinas en todas las capitales de provincia, ya que esa era entonces la política expansionista de la

empresa. Aquél cargo lo ocupé hasta 1993, año en que con las fusiones de Standard y Citesa y la compra

por Alcatel, sobraban miles de empleados. Aquí acabó mi paso por las multinacionales del sector.

En el mismo año de 1993 monté junto a otros compañeros una pequeña empresa también de

telecomunicaciones con oficinas en Sevilla y Córdoba, aunque nos desplazábamos a todas las provincias.

Empezamos a comercializar equipos de Ericsson y la empresa se llamó Andaluza de Cables y

Telefonía, yo era el gerente, y mis ocupaciones eran múltiples, aunque la principal era la de comercial.

Esta actividad duró casi catorce años porque en el año 2007 tuvimos que cerrar por mis problemas de

salud que me ocasionaron la jubilación anticipada. Tuve que dejar una ocupación que me gustaba y en la

que en muchos casos los clientes terminaron siendo amigos. Mi mayor preocupación fue dejar la clientela

bien atendidos y pasamos el fondo de comercio a otra empresa de Madrid.

Desde mi obligada jubilación le faltan horas a mis días. Me dedico a leer, escribir y conocer Sevilla ,

ciudad de la que estoy enamorado desde que la vi por primera vez. He escrito seis libros sobre mis visitas

por la ciudad, de los cuales se han publicado cuatro, así como uno sobre el habla de mi pueblo que no he

publicado aún y otro sobre los oficios de antaño también de Villanueva. Este sí está publicado y se pueden

ver todos en www.bubok.es. También colaboro en varias revistas culturales y tengo algún que otro libro

sin publicar. Desde hace poco tiempo me siento atraído por la investigación y Sevilla para eso tiene gran

número de bibliotecas y archivos. Entre otros artículos he escrito uno llamado: Tratado inútil de mi

síndrome de menière.

3º de Oficialía, junio de 1967

http://www.bubok.es/


34

Mi mujer también es de

Villanueva. Nos casamos en

1975 y tenemos dos hijos y

una preciosa nieta (como todos

los nietos son para sus

abuelos), los tres sevillanos y

yo siempre digo que soy

sevillano de adopción pero

villanovense y jiennense de

corazón.

Mi paso por la SAFA fue decisivo para mi vida posterior y considero que

recibí una formación sólida para el futuro tanto académica como humana.

Recuerdos tengo para escribir otro libro, después de cincuenta años de mi

llegada a Úbeda, aunque ya llevaba otros siete en el colegio de Villanueva.

Los recuerdos, numerosísimos. Las primeras noches en los dormitorios de

“la Siberia” (y como se oían algunos lloros después del silencio en los

primeros días), luego modificada con dormitorios de ocho camas con los colchones de corcho; en los que

dormíamos en pleno invierno con las ventanas abiertas; Dolores la encargada de la enfermería que era un

poco la madre de todos; las naves de los talleres en cuyos jardines nos revolcábamos jugando en 1º de

preaprendizaje. Los diferentes talleres, (en una de cuyas naves estaba el cine), ajuste, torno y fresa,

electricidad, carpintería…Además de la formación académica recuerdo las enseñanzas de cómo “pasear”;

como utilizar los cubiertos y normas de urbanidad que hoy se echan de menos. Las clases públicas y las

lecturas de notas eran algo peculiar. La misa diaria y las pláticas vespertinas en el estudio; las sabatinas,

el Pange Lingua y el Tantum Ergo… En cuanto a profesores los recuerdo todos y la huella que dejaron en

mí muchos de ellos, que durante toda mi vida he recordado y referido con mi familia con la expresión:

“Esto lo aprendí en Úbeda”.

En 1992 nos reunimos dos docenas de compañeros para conmemorar el 25 aniversario de nuestra

promoción y hablamos de seguir haciendo reuniones periódicas que nunca se llevaron a efecto a pesar de

los buenos propósitos. Perdimos el contacto casi como en el 67. Hubo algunos profesores como don

Agustín Santabárbara, don Jaime Roselló, el Padre Bermudo, y nuestros antiguos compañeros

Gervasio Agudo y José Carrascosa que ya llevaban años como profesores en la Institución.

El año pasado me reencontré con mi amigo y compañero Julio Torres Manjón y él me dio noticias de

Ciriaco Cruz Guijarro así como las direcciones de correo electrónico de algunos compañeros. También he

recuperado el contacto con José María Rodero. El último hallazgo ha sido hace unos meses a través de la

revista Amalgama en la que escribía don Juan Cabrerizo que lo tuve como profesor de lengua Española y

como inspector en Primero de

Oficialía y ya hemos

intercambiado algunos correos y

en abril conocí a mi paisano

Pedro Mora Figueroa gracias

al cual estoy ahora dirigiéndome

a todos los que lean Amalgama.

Mi dirección de correo es

[email protected]. No

doy el teléfono porque soy

incapaz de oírlo. Después de

toda mi vida laboral dedicada a

la telefonía. Son cosas de la

vida.

1º de Preaprendizaje, mayo del 63, en el patio de talleres.

mailto:[email protected]


35

Rafael Fernández Budia (Promoción 3º Oficialía 1964, Electricidad)

Estancia en la SAFA

Yo entré en la SAFA en el año 1955 con 8 años y todo fue

por las casualidades de la vida ya que en el verano de ese año

estaba con mi padre en el colegio Potaceli de Sevilla, esperando para hablar con el Padre Luque, que

era el responsable del colegio gratuito y realizar la inscripción para el próximo curso, pero mira por

donde aparece el Padre Cristóbal Sánchez que era paisano de mi padre y compañero de mi tío cuando

estudiaban en El Palo. Mi padre le comenta para lo que estábamos allí y entonces el Padre Sánchez le

propone que me vaya a Úbeda, que él estaba de Prefecto y además estaba su hermana y cuñado,

encargado de la huerta del colegio y también estaban sus sobrinos Aurelio y Fernando en el Grupo

Escolar.

Como podréis deducir a mi padre le pareció la idea genial y en el mes de septiembre ya estaba yo

en Úbeda.

Lógicamente con la edad que tenía, estuve varios años en el Grupo Escolar y un año de

preparatorio antes de empezar el Preaprendizaje. Durante ese periodo de tiempo yo dormía en la

enfermería junto con los sobrinos del Padre Sánchez y los hijos de Herminia.

Como veréis mi estancia en la SAFA ha sido de 9 años, los cuales recuerdo con mucho cariño y

que si pudiera volver a repetirlos no lo dudaría.

2º de Preaprendizaje en 1961

1º de Preaprendizaje, mayo del

63, en el patio de talleres.


36

Trayectoria profesional

En el verano de 1964 y los pocos días de llegar a casa después de hacer la revalida de oficialía,

recibí una carta de Abengoa en la que me indicaban que si estaba interesado en trabajar en dicha

empresa me presentase en el departamento de personal para firmar el correspondiente contrato, cosa

que sin dudar realicé y pasé a formar parte de la empresa en la División de Taller, fabricación de

cuadros eléctricos, a partir del 20 de julio de dicho año.

Como el horario de trabajo era de 7 a 15, aproveché las tardes para hacer la Maestría en la escuela

de Maestría y Peritos industriales de Sevilla, en los cursos 64-65 y 65-66.

En Abengoa entré de Especialista hasta cumplir los 18 años que pasé a oficial de tercera y dos

años después a oficial de segunda.

A los 21 años, y como todo hijo de vecino, me fui al servicio militar, lo hice en Aviación en la

base de Morón de la Frontera, pero al tener la suerte de estar enchufado por el Coronel de la Base,

tan solo iba dos días al cuartel y aprovechando esta circunstancia continué trabajando, aunque pasé a

la Oficina Técnica con la categoría de Auxiliar Técnico, las categorías profesionales eran distintas en

taller y oficina.

En la Oficina Técnica he realizado el resto de mi vida profesional hasta el 4-4-2012 que me he

jubilado con la categoría de Jefe de 1ª Técnico – Administrativo.

En el año 1996, Abengoa hizo modificación en sus diferentes Divisiones y éstas pasaron a ser

empresas autónomas, pasando nosotros a pertenecer a Inabensa.

Trayectoria familiar

En el año 1971 me casé con Pilar Amador Olmo y hemos tenido 4 hijas, Pilar (1972), Mónica

(1973), Raquel (1975) y Laura (1979), todas están felizmente casadas y nos han dado 8 nietos, 6

niñas y 2 niños.

En el año 2004 mi esposa tuvo una operación de columna y quedó parapléjica teniendo que usar

desde entonces silla de ruedas.

Foto familiar en 2008.

Ahora tenemos cuatro

nietos más.


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4. Colaboraciones

Los profesionales y la empresa Abengoa Miguel Toral Almagro

Mis recuerdos sobre la 5ª Promoción

Una vez realizado el último examen (el examen de reválida) que hacía el curso 3º de Oficialía,

primer curso en esta modalidad de Formación Profesional, implantado por el Gobierno; todos sus

componentes estaban pendientes del resultado de dicha prueba.

Los exámenes eran en la Escuela de Maestría Industrial, -centro estatal-, situada en el Paseo del

Mercado (el nombre de esta Plaza, ha cambiado tanto como el pensamiento del gobernante de turno).

Dada la importancia que Abengoa tuvo en el inicio profesional de muchos de nuestros compañeros, hemos recurrido a Miguel Toral Almagro, uno de nuestros mejores

activos en lo que a “banco de memoria” se refiere, para iniciar una serie de artículos donde aquellos pioneros nos cuenten su experiencia. Nos cuenta Miguel que su promoción fue la 5ª que ingresó en la empresa. Él recuerda a algunos de las promociones anteriores y les pide que se pongan en contacto con Amalgama para continuar estos relatos de los “niños de los jesuitas”, como allí les llamaban. 1ª Promoción (1956): Francisco Valverde Carrillo y otros 2ª Promoción (1957): Antonio Fé Muñoz y otros 3ª Promoción (1958): Rafael Ramírez Baena, Antonio Cárceles Heredia, José Rueda López y otros. 4ª Promoción (1959): Doroteo Fernández Pérez y Miguel López Martínez.

En el verano de 1956, algunos de los Profesionales que terminaron sus estudios en Úbeda, se

incorporaban a la empresa Abengoa, en Sevilla. Se iniciaba así una colaboración entre la SAFA y esta

empresa dedicada a montajes eléctricos, colaboración que continuaría durante mucho tiempo. Al año

siguiente, se instaló el taller de Electricidad en Úbeda, cuya dotación inicial (cuadro, grupo electrógeno,

instrumentos de medida y herramientas) fue aportada por la empresa. Don Alejandro Jiménez Blanco fue el

primer profesor de esta especialidad.

Algunos datos sobre la historia de la empresa Abengoa Abengoa se fundó en Sevilla, el 4 de enero de 1941 por los ingenieros Javier Benjumea Puigcerver y José Manuel Abaurre

Fernández-Pasalagua, con un capital social de 180.000 pesetas (1082 euros). Su objetivo inicial era fabricar contadores eléctricos, aunque la situación económica de la época impidió el proyecto. Sin embargo, la empresa comenzó a dedicarse a la elaboración d e proyectos, estudios técnicos y montajes eléctricos.

Entre 1941 y 1950, comenzó su extensión al resto de Andalucía, siendo la facturación, por aquel entonces, de unos

45 millones de pesetas (270.456 €). En los años cincuenta continúa su expansión por el resto de España, iniciando en los años sesenta su internacionalización. En 1966, en su 25º aniversario, la facturación de la compañía fue de 4.880 millones de pesetas (29.329 391 €).

Actualmente, Abengoa desarrolla su negocio en los sectores de la energía y medioambiente, a través de las actividades de

ingeniería y construcción, infraestructuras de tipo concesional y producción industrial. La compañía es una multinacional que está presente en más de 70 países. La facturación en 2011 ascendió a 7.000 millones de € y cuenta con una plantilla de 25.000 trabajadores.

http://es.wikipedia.org/wiki/Sevilla

http://es.wikipedia.org/wiki/Javier_Benjumea_Puigcerver

http://es.wikipedia.org/wiki/Energ%C3%ADa

http://es.wikipedia.org/wiki/Medioambiente


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Cristóbal Gómez

Salvador González

Juan J. Jurado

Isidro Nieto

Pedro Puentes

Francisco Suárez

Miguel Toral

El viernes 24 de Junio de 1960, se informa del resultado que había sido

esperado con tanto anhelo: no han suspendido a nadie de la SAFA, ni qué

decir tiene la alegría de los estudiantes. Y también la satisfacción del

personal docente y directivo de la SAFA, aunque éstos ya estaban

acostumbrados porque los de Magisterio, siempre “cortaban orejas y hasta

rabos” en los exámenes para Maestro Nacional. Y se toman diversas

decisiones, unos seguirán los estudios y harán Maestría, otros empezarán la

lucha por abrirse camino en la vida del trabajo.

Dicen que los que han estudiado Electricidad, los colocarán en

Abengoa, pero después del 18 de Julio, por la cuestión de la paga extra, (no

ha sido así, se colocaron unos días antes del 18). Buen detalle de Abengoa.

Efectivamente, así es, reciben una carta del Dptº de Administración, en la

que se les indica que deben incorporarse al trabajo (qué bien) el día 11 de

Julio de este año 1960. Cristóbal Gómez Salazar le propone a Miguel Toral

hospedarse en una casa particular situada en la calle Conde de Cifuentes, o

Capitán Vigueras -no recuerdo- muy cerca de la Estación de San Bernardo,

porque él conocía o tenía parentesco con la dueña de la misma. Toral llega

antes a Sevilla, se encuentra desorientado, era la primera vez que viajaba

solo, todavía no había cumplido los 18 años, y se encuentra con aquello que

para él era un gran caos, mientras lo piensa o no lo piensa, mezclado con su

“mijilla” de indecisión, se van todos los taxis, entonces se le acerca un

cochero y le propone llevarlo a donde quiera, de manera que por 0,15€ (25

pts) –trato cerrado- ahí tenemos a Toral como un turista, en coche de

caballos, eso sí con maletas de cartón aseguradas con cuerdas. El problema

era que no sabía la dirección porque Gómez Salazar no se la había dado.

Problema planteado, problema solucionado.

-Vaya usted al colegio Portacoeli- le aconseja el cochero.

Y se presenta al recepcionista diciéndole que viene a hacer un curso (no

me acuerdo qué se inventó) y que si podía dejar las maletas hasta que

vinieran los demás compañeros y decidieran el asunto del hospedaje ¡Con lo

fácil que hubiera sido dejar las maletas en Consigna, pero el que no sabe es

como el que no ve! Y lo catetísimo que era el pobre, ya veréis. Estuvieron en

esta casa un día o dos, hasta que se juntaron con los demás, y se fueron

todos cerca de la Gran Plaza.

El 11 de Julio, se presenta en las oficinas de Abengoa, en Sevilla, casi

todo el curso de electricidad, Cristóbal Gómez Salazar, Salvador

González Gómez, Juan José Jurado Rodríguez, Isidro Nieto Nieto,

Pedro Puentes Alcántara, Francisco Suárez García y Miguel Toral

Almagro.


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1. Pedro y Cristóbal hacen el

hoyo

2. Levantando el poste

3. Retacando la base del

poste

4. Izando un tornapuntas

Se les contrató con la categoría de Of. 3ª, esto supuso un agravio

comparativo, porque no era fácil en aquellos tiempos ser Oficial, y se

hablaba de “los niños de los jesuitas” con cierto retintín. Y comenzaron

un curso de formación, teniendo como tutor a un perito, Martínez Grasa

y como monitores a diversos mandos, todos muy cualificados (Pepe de

la Rosa para líneas, Venegas para soldadura eléctrica y autógena, y

Villagrán para “cable armado”).

El jornal era –por todos los conceptos- 0,24€ (40,25 pts), y al ser tan

escaso, se cambiaron de la pensión que estaba cerca de la Gran Plaza,

que costaba 0,21€ (35 pts), a otra del centro –en la calle Francos- porque

costaba 0,19€ (32 pts) ¡dos céntimos diarios de ahorro!. Y le pidieron al

patrón que los pusiera a todos en la misma habitación, eran cinco, y el

patrón tan contento, allá se las apañaran.

Empieza el periodo de formación de la empresa

La primera labor –mejor dicho formación- se realizó en un campo

llamado “Punta del Verde”, cerca de la “Térmica”, en la zona conocida

como Guadaira, consistía en hacer el tendido de una línea telefónica con

diez o doce postes de madera, unos enterrados directamente, otros con

zancas (esos soportes de hormigón pretensado –tipo viguetas castilla-

que quedan enterrados la mitad y la otra mitad sirven para fijar a ellos los

postes). El trabajo era completo: abrir los hoyos, levantar los postes,

retacar la tierra de alrededor para que quedara firme, alinearlos, y

“vestirlos”. ¿Qué es vestir un poste?, hacer una cata en lo alto para

encastrar en ella la cruceta, montarla, arriostrarla con tirantillas al poste,

y poner todos los aisladores, dejándolo todo muy rígido. Y todo esto

hacerlo con “trepolines”, que son unos artilugios fijados con firmeza a

las piernas, y de los que sobresale un pincho un poco por debajo de los

tobillos, y que son comodísimos para los profesionales, (se pueden llevar

todo el día puestos), pero para estos novatos eran un suplicio.

Toral, cabezón él y un poco torpe, se cayó dos veces de un poste

estando casi arriba del todo, clavó un pincho del trepolín –muy mal

clavado- en una grieta del poste, y al desclavar el otro para subir, bajó y

bastante rápido. Esta es la torpeza, y ahora la cabezonada, cómo iba a ser

tan torpe un “niño de los jesuitas”, arriba otra vez, los mismos pasos los

mismos fallos, la misma bajada, y arriba otra vez, pero en mitad del

camino lo pensó mejor y bajó, pero ahora más lento, paso a paso. El

maestro encargado de la formación, que ya era bastante mayor –y un

gran profesional y una gran persona-, venía el hombre apurado a ver qué

le había pasado, no comprendiendo cómo este chaval se caía, se

levantaba, volvía a subir y volvía a caer y quería subir otra vez.


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5. Tornapuntas terminado

6. Vistiendo el poste con doble cruceta

7. Toral escalando el poste

8. Toral sentado en la cruceta, dispuesto a lanzar una cuerda

para subir herramientas.

A título de cuadro de costumbres. En esta época, y en Abengoa

también, se llamaba a los ingenieros D. Antonio, D. Miguel y así, a

los peritos Sr. García, Sr. López, incluso los administrativos también

tenían este tratamiento, pero los del mono de trabajo eran “operarios”,

de suerte que cuando en la oficina preguntaron por el Sr. De la Rosa

Parra, nadie sabía quién era, hasta que alguien cayó en la cuenta y

dijo, sí, Pepe de la Rosa el operario, (¡ah ya!), todos lo conocían.

Aquí acaba la formación en líneas, ni qué decir tiene que fue

mucho más de lo contado, pero no hay que ser demasiado prolijo (que

no he sido poco). Ahora tendrán formación en soldadura eléctrica y

autógena. Abengoa disponía de un gran local en la calle Fernando

Tirado, utilizado como almacén principal de herramientas. Éste fue el

lugar donde aprenderían estos temas.

José Venegas Távora, un gran soldador y muy pedagogo, fue el

maestro que les enseñó a soldar, haciendo gala de una paciencia

infinita, les fue haciendo partícipe de los “secretillos” que él había

aprendido después de muchos años de trabajo. Esto no tiene precio,

aquello de que “cada maestrillo tiene su librillo” era cierto y en la

mayoría de los casos era un secreto guardado celosamente; pero no

para Venegas, con absoluto desinterés les enseñó todo lo que sabía

hasta lo más arcano. Así aprendieron a soldar en plano, ascendente,

bajo techo, en cornisa, etc. Ninguno llegó a ser un gran soldador, pero

en Citroën Hispania, en Vigo, Toral estuvo unos meses dedicado

exclusivamente a soldar estructuras y soportes para las instalaciones.

El último tramo de la formación fue en los astilleros Elcano, allí

había que hacer unos trabajos relacionados con el “cable armado”,

éste es un cable cuyo aislamiento es a base de papel impregnado en

aceite especial, posteriormente enfundado en plomo y por último

protección de fleje de hierro y una envuelta en cáñamo con alquitrán,

para poder ser enterrado directamente. El maestro era Manuel

Villagrán Cepero, muy entendido en el manejo de este tipo de cable.

Aunque se las prometían muy felices porque en esta ocasión, no solo

aprenderían del maestro que tenía un cierto renombre, sino que el

trabajo quedaría, es decir que iba a servir.

Hubo un accidente que sufrieron, Salvador y Juan José. Entonces

se utilizaba para soldar plomo una lamparilla de gasolina (lo mismo

que las de butano de ahora), y que por exceso de presión a

consecuencia de mucha temperatura, y no tener válvula de seguridad

(era un modelo muy antiguo), cedió por algún punto débil


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y deflagró al expandirse su contenido. No explotó, pero las

quemaduras que sufrieron pudieron haber sido funestas si no es

por un marinero que rápidamente salió en su auxilio y los

embadurnó con una pasta amarilla de no se sabe qué cosa pero

que fue mano de santo.

A finales de Septiembre Salvador y Miguel en

representación de los demás fueron a las Oficinas Centrales con

la intención de hablar con D. Miguel Ángel Puch Peña que era

el Director, para pedirle que los dejaran en Sevilla y de esta

manera podrían estudiar Peritaje; no los recibió, y su secretario

dijo que esos no eran los planes de Abengoa, aunque reconocía

que era una cosa muy loable.

Y aquí acabó la fase de formación.

Los primeros trabajos de Nieto y Toral y no sé si de alguno

más, fue la instalación de viviendas en el barrio León XIII,

justito al lado del Orfelinato de S. Fernando en La Macarena

(donde la chiquillería abundaba, y no poco; no comprendo –que

ahora se está destapando- eso de robar niños en esos años). El

encargado era Padilla un electricista de mediana edad, muy

miope, y que los dirigió razonablemente bien, y no exteriorizaba

nada de “los niños de los jesuitas”, no les enseñó mucho porque

no había mucho que enseñar en instalaciones domésticas. Se

guarda buen recuerdo de él.

Entre unas cosas y otras solo quedaron Nieto, Puentes,

Suárez y Toral y los demás se fueron de la empresa. Suárez

quedó en Sevilla, principalmente en Talleres y otros trabajos.

Desgraciadamente lo perdimos muy joven, fue el primero de esta

promoción que nos dejó. Una lástima. Nieto, Puentes y Toral

pasaron directamente a Montajes, estuvieron algo desperdigados,

pero coincidieron en Vigo en la factoría Citroën, vivían en el

barrio de Las Traviesas, en la calle Pastora, (era una pensión

familiar) José García Ruiz (de la 1ª promoción, también se nos

fue, gran persona) y un compañero de la Delegación de Cádiz

(Mario Sánchez Jura) compartían una habitación, otra Antonio

Cárceles Heredia (de la 3ª promoción) y Puentes Alcántara, y la

otra Toral y Nieto (de la 5ª promoción).

Pasados algunos meses Toral recibió destino, Puentes

también y se quedaron en Vigo Nieto y Cárceles que tuvieron un

buen impulso profesional.

¿Qué era ser cateto?, atiende. En su pueblo había unos autobuses a los que llamaban “Alsinas”, eran unos armatostes propios de esos tiempos, para cerrar la puerta de los pasajeros había que tirar con mucha fuerza del asidero, lo normal era que al cerrar gritaran los viajeros “más fuerte” porque de la primera difícilmente se cerraba bien, a no ser que el que cerrara fuera un “porrúo” y daba tal portazo que el autobús se bamboleaba, y entonces venía el asentimiento general “ahora”. Bien a esto era a lo que estaba acostumbrado. Vamos a Sevilla, estamos en “La Pasarela”, esperamos el Nº 6? , hacia La Macarena, una cola de gente de aúpa, hora punta mañanera, y por fin llega el autobús, pero casi lleno, intentan subir unos cuantos, se oye un gran soplido y la puerta se cierra atrapando a uno que a duras penas consiguió pasar al interior. Al amigo Toral se le pusieron los ojos como platos. Lo malo no es que la puerta estuvo a punto de matar al pobre viajero, lo malo es que la gente se quedó tan indiferente. Estaba tan desconcertado que al llegar el siguiente autobús y cuando a él le tocaba subir dejó pasar a los demás diciendo que no tenía prisa, que estaba esperando a un amigo; de esta manera sería el primero para el próximo autobús. Al llegar éste y abrirse la puerta salió disparado con tanta fuerza que al no haber nadie en la plataforma trasera topó con el lateral izquierdo, y le dice el revisor, -que vas a salir por la ventana muchacho; y con mucha suficiencia le respondió, -ya, ya, pero a mí no me coge la puerta-. De esto como es lógico, por un cierto pudor, nunca dijo nada, pero ahora, qué más da.

50 años después, Nenito explica a

Miguel Toral lo de los autobuses

sevillanos.


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Aquellos chavales que se enfrentaron

a su ”bautismo de sangre” en la

empresa Abengoa, viviendo en

pensiones y ajustando sus exiguos

sueldos que a penas cubrían los niveles

de subsistencia, llevaban en sus

mochilas el conocimiento y una actitud

suficientemente positiva como para

superar muchos de los obstáculos que

aparecieron en el camino, dispuestos a

promocionar en la profesión

simultaneando el complicado trabajo

con estudios de ingeniería, la mayoría

de ellos.

Para hacernos una idea del nivel de

conocimientos impartidos en la SAFA,

reproducimos el programa de tecnología eléctrica, 3º de Oficialía, curso 1959/60.

Tema 1º.-Montaje de línea aérea.- Postes.- Postes de madera.- Postes de acero.- Postes de hormigón armado.- Torres de acero.- Hoyos para los

postes.- Tratamiento de la parte inferior de los postes.- Elevación de los mismos con aparejo.- Colocación sobre terrenos flojos.- colocación sobre

rocas.- Crucetas.- Cruceta doble.- Pernos.- Cáncamos con tuerca.- Herrajes para la sujeción de los postes.- Colocación de crucetas en los

postes.- Riostras para crucetas.- aisladores.- Fijación de los alambres a los aisladores.- Cables aéreos, ventaja de su instalación.- Ranas.

Tema 2º.-Líneas subterráneas.- Línea de conductor.- Sistema de cable directamente enterrado.- Agujero de hombre.- Caja terminales para

uniones.- Cuadro de distribución.- Cuadro de distribución para derivaciones.

Tema 3º.-Aparatos de maniobras para Alta Tensión.- Desconectadores.- Interruptores de aire comprimido.- Interruptores de gas denso.-

Interruptores en baño de aceite.- Fusibles.- Relés de sobrecarga y de mínima tensión.- Relés indicadores y de puesta a tierra.- Diferentes relés y

sistemas según funcionamiento.- Relés auxiliares.

Tema 4º.-Alternadores y motores.- Construcción de los alternadores.- Bobinas.- Ruedas polares.- Ventilación.- Motores asíncronos.- Rotor.-

Puesta en marcha de un alternador.- Motores con rotor en cortocircuito.- Motores de polos conmutables.- Motores de rotor con anillas colectores.-

Motores de c.a. monofásica.- Motores universales.- Dispositivo para sacar cojinetes de los motores.- Funcionamiento de las fundaciones para

motores.- Colocación y entretenimiento.- Averías, causas y remedios.

Tema 5º.-Transformadores.- Arrollamiento primario y secundario.- núcleo.- Clasificación de los transformadores.- Refrigeración de los

transformadores.- Valor aislante dl aceite.- regulación de los transformadores.- Potencia de los transformadores.- normas para la carga de un

transformador en baño de aceite.- Manipulación.- Montaje sobre postes.- Generalidades.- Disposición de los postes y de los herrajes necesarios.-

Montaje de transformadores en casetas.- Transformadores de intensidad.- transformadores de tensión.

Tema 6º.-Rectificadores y convertidores.- Rectificadores termo-iónicos.- Aplicaciones.- Rectificadores de arco de mercurio.-Rectificadores

diversos.- Óxido de cobre y selenio.- Rectificadores electrolíticos.- Convertidores.

Tema 7º.-Acumuladores.- Acumuladores de plomo.- Características.- Sulfatación.- Rendimiento en cantidad.- Rendimiento en energía.

Tema 8º.-Aparatos de medida.- Accesorios para efectuar medidas eléctricas.- clasificación de los aparatos de medida.- Instrumentos para cc.-

Instrumentos para ca.- Instrumentos para cc y ca.- Instrumentos de hierro móvil.- Instrumentos térmicos.- Instrumentos electrodinámicos.-

Instrumentos de inducción.- Instrumentos electrostáticos.- Errores de lectura.- Conexión de los aparatos.- Contadores de Activa y de Reactiva.

Tema 9º.-Instalaciones con tubo de acero.- Manguitos y codos para tubos.- Cajetines para tubo de acero.- Sujeción para los tubos de acero.-

Manera de curvar los tubos de acero.-herramientas y útiles para curvar tubos de acero.- Llaves y escariadores para tubos.- Secciones de los

conductores para diferentes intensidades.

Tema 10º.-Nociones de luminotecnia.- Calefacción, tracción eléctrica.- Luminotecnia.- Lámpara de arco.- Lámparas fluorescentes.- Lámparas de

vapor de mercurio.- Calefacción eléctrica e industrial.- Locomotoras de minas.- Transporte eléctrico rápido.- Tranvía eléctrico.- Trolebuses.

Tema 11º.-Nociones de radiodifusión.- Instalación de radiorreceptores.- Célula fotoeléctrica.- Soldadura eléctrica.


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Ética y moral

Antonio Ramírez Mena ( Promoción del 59, Mecánica)

Este artículo al que he bautizado con tan pomposo nombre, no pretende sentar unas bases de comportamiento sino más bien de esclarecer o al menos intentarlo, sin morir en el intento, la actuación y el comportamiento ante el pueblo que los eligió de nuestra selecta y anacrónica clase política dirigente (léase gobierno, partidos políticos, patronal y sindicatos) entiende lo que para ellos es la ÉTICA y la MORAL aplicada a sus fines, es decir, en beneficio propio. Y al que a veces no es ajeno el PODER JUDICIAL.

Nuestro PAÍS, es como un animal infectado de garrapatas que necesita imperiosamente un rapado al cero y un desinfectado completo con el fin de extirpar de él a tan asquerosos bichejos.

Es un monstruo de diecisiete 17 y dos apéndices que entre todos y sálvese quién pueda hemos creado. Europa asiste incrédula al despilfarro de los 17 VIRREYES y del GOBIERNO CENTRAL cuya ética se basa en el conocido "todo para uno” y que aclaran con su peculiar demagogia cuando salen a la palestra los monagos y palmeros de turno.

Hay que ver con que desfachatez gastan el dinero público; el de todos cuando mediante una MORAL “Sui Géneris” crean sus propias agencias de colocación para enchufar mediante la “Democracia” a los amiguetes, parientes, colegas y demás allegados y mangantes al reparto del "Maná” público que incluye sus vacaciones, viajes, coches y demás prebendas además de "banquetes pantagruélicos” y jubilaciones millonarias, mientras que el pueblo llano pasa hambre, necesidades y calamidades y el espejo de la desolación ennegrece su vida y su futuro.

Es patético y terrible ver cómo el pueblo asiste atónito, cómo las cuatro Administraciones del Estado: la Central, la Autonómica, la Provincial y la Municipal no dan más de sí para emplear a sus acólitos y demás "Celestinos“, han creado una red de empresas y fundaciones públicas todas ellas deficitarias y a costa del Presupuesto del Estado, en las que sus compadres y compinches viven a cuerpo de rey, dando el menor golpe posible y disfrutando de la vida a mayor gloria del amigote y bondadoso político elegido por el pueblo. Los más de 2000 millones que derrocha la Generalidad Catalana, no es un hecho aislado porque en las 17 cabezas del Monstruo ocurre más o menos lo mismo. Superamos con creces los 5 millones de funcionarios y empleos públicos y la Casta Política por no llamarla de otra forma supera los 500 mil.

Nuestros ineptos políticos tanto por exceso como por defecto, ignoran que tanto la ética como la moral, tratan en

general de las acciones del hombre en orden a su bondad o malicia y que conciernen única y exclusivamente al fuero interno individual y per tanto al respeto humano, cosa o aspecto que a su libre interpretación o libre albedrío no contemplan. Su ética es per tanto inmoral, ya que ésta tiene una gran relación o dependencia con el deber de proteger social y económicamente al pueblo del cual salieron. Claro que ellos ya no son pueblo; están per encima del bien y del mal: son "elegidos". Pero la paciencia del pueblo tiene un límite, una especie de línea roja y un punto de no retorno que no es aconsejable franquear. Esto me lleva a recordar la época de les tiranos griegos. También ellos fueron elegidos por el pueblo. Pero por su forma de actuar basada en la tiranía, la corrupción y el engaño, fueron derrocados por ese mismo pueblo que les eligió y enviados al Infierno de la Historia para que el pueblo descubriera e implantara una verdadera democracia en la que con el pueblo y para el pueblo sea la razón de ser de todo gobernante elegido.

La tiranía económica, social y financiera en les albores del siglo XXI, puede desencadenar una explosión social de incalculables consecuencias de las que serían responsables las oligarquías que en los poderes político, económico y financiero nos gobiernan.

‘La Caridad bien entendida empieza per une mismo“. Vergonzosa interpretación de lo que para la clase dirigente es la Ética y la Moral. Nuestro País tiene un reto y un gran problema al que debemos enfrentarnos. Pero nuestros abnegados políticos no son parte del problema: ¡¡ son el problema!!. No tienen alma ni cara son solo puro y duro cemento.

Europa asiste con la boca abierta, sin dar crédito a lo que ve: al despilfarro nacional y autonómico en el que aplaudimos a rabiar los aeropuertos sin aviones convertidos en el "tontódromo popular" desde la aviesa mirada del político que los mandó construir, de nuestro AVE sin pasajeros, de nuestros raíles sin trenes, de nuestro consumo sin consumidores, de nuestras aspiraciones olímpicas, del regreso de los hijos por falta de medios al hogar familiar, de la emigración de los más de 300 mil cerebros que el País necesita, de la fuga de capitales, del premio a les defraudadores y de la inyección de dinero público a esa "Cueva de Ali Babá" que son les bancos para engrosar el pastel que más tarde como aves de rapiña entre todos se repartirán.

Solo me queda clamar y recordar con rabia e indignación aquello de: ¡¡¡OIGO PATRIA TU AFLICCIÓN ...!!!.


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Aprendiz de ética Pedro Mora Figueroa

(Promoción del 60, Electricidad)

Atravesamos una época de pérdidas y no estamos acostumbrados

a caer, a retroceder. Nacimos en una sociedad de pobreza, de

carencias y a lo largo de nuestra vida solo hemos conocido el

crecimiento: cada vez más medios materiales, más posibilidades, más

comodidades, más tecnología. Ahora sentimos la amenaza de la

pérdida y esto nos inquieta, más por nuestros hijos que por nosotros

mismos. Durante los últimos meses, la queja y el poner la lupa en las

instituciones nos genera todo un catálogo de defectos atribuibles a los

responsables políticos, financieros, judiciales, etc. Nuestra clase

dirigente ha abdicado de sus responsabilidades para con la población y

se ha ocupado más de su egoísmo, su rapiña particular, su

acumulación y del ejercicio malsano de su poder circunstancial. El

ciudadano medio primero se asombra al ver que tras muchas

instituciones solo hay mentira y rapiña, más tarde, se ve impotente

porque no tiene a quien recurrir, no existe un tejido social suficiente

como para retomar otra organización de las cosas, porque hemos

venido delegando todo en los dirigentes políticos y ahora nos vemos

“colgados de la brocha y sin escalera”.

Lo inmediato es buscar culpables y nunca como ahora se ha oído

tanto la falta de ética de éstos o aquéllos. Pero ¿sabemos bien qué es

la ética? Tras buscar un poco por ahí, me confieso aprendiz de ética y

tengo el propósito de ilustrarme un poco más sobre esta rama de la

filosofía desde que Aristóteles sistematizó esta disciplina con su “Ética

para Nicómaco”.

En nuestro tiempo de aprendices para la vida estaba claro el

corpus preceptivo de la moral cristiana y sabíamos distinguir lo bueno

de lo malo y la virtud del vicio, pero los tiempos cambian y nuestras

generaciones jóvenes quizá no lo tengan tan claro: ellos han estudiado

ética (nosotros no llegamos estudiarla), la presencia de la religión en la

escuela ha ido decayendo, incluso los escolares han presenciado la

retirada del crucifijo de las aulas y muchos habrán pensado “que si lo

quitan por algo será”. Los chavales han asistido, supongo que

sorprendidos, a una pelea entre sus mayores: las autoridades que

guían sus vidas.

En el lenguaje común va desapareciendo el uso de la palabra

moral y sus contundentes derivadas inmoral y amoral, mientras son

sustituidas por ética, claro que ésta, por ser más joven y que su

morfología no se presta mucho, solo han desarrollado términos

comparativos por cantidad: ”esto es poco ético”, “ ese señor carece

de ética”, etc. Nadie se ha atrevido a proponer los neologismos

“inética o aética”. Los medios de comunicación ¿trabajan? este relevo

y a menudo se observa la confusión sobre estos dos conceptos.

Muchas personas con cierto nivel de formación (políticos, periodistas,

tertulianos, etc.) las emplean como sinónimos y esto confunde al más

pintao. La ética se muestra como una “capa buena” que tapa la

inmoralidad, porque lo que tenemos en España es amoralidad e

inmoralidad a raudales.

Yo, como aprendiz de ética, he llegado a la

conclusión que la mayoría no sabe de lo que

habla; luego hay una minoría ilustrada que ha

estudiado esta rama de la filosofía, que sí, y

parte de esta minoría sustituye moral por

ética, a conciencia, porque quiere

distanciarse de las raíces religiosas de la

moral cristiana con el propósito de “descontaminarla” y así crear un

nuevo corpus ético laico, no intervenido por las religiones. A mi, esto no

me parece mal, en principio, porque lo que nos ha sucedido aquí es que

al barrer la Religión Católica nos hemos llevamos la moral por delante y

ahora tendemos a la amoralidad, y así nos va. Es hora de recuperar la

moral aunque sea laica (no laicista) y esa es una tarea que la ética

debe retomar, apartándose nítidamente del relativismo moral que tanto

daño hace. ¿Pero tiene la ética actual capacidad y disposición para

pilotar el rearme moral que necesitamos? Paso esta pregunta al blog

de “Amigos de la ética”, nuestros vecinos en la web de Pepe Aranda.

Un poco de historia: ética proviene del griego ethos que

inicialmente significaba lugar en que se habita. Más tarde, Aristóteles la

dotó de un segundo significado, carácter o modo de ser. La ética es

una rama de la filosofía que se ocupa de explicar los fundamentos de

los actos morales y cómo se vinculan en la determinación de la

conducta humana. La palabra moral se deriva del latín mos (plural,

mores) que significa costumbres. Griegos y romanos utilizaban ethos y

mores indistintamente, aunque los romanos, más adelante, integraron

el concepto mores maiorum como modos de ser y costumbres que nos

han transmitido nuestros mayores y, por tanto, deben respetarse

porque son justos y beneficiosos para la sociedad. El mores maiorum

constituyó, más tarde, una fuente del derecho romano.

Ética y moral son dos caras de la misma moneda en tanto que se

ocupan de hallar los mejores cauces para la conducta humana: la

primera estudia, relaciona y valida los principios morales y la segunda

propone las normas de conducta concretas. De otro modo: la ética es la

teoría y la moral es la práctica. El pensador español, José Luis López

Aranguren (Ávila 1909, Madrid 1996), resumía diciendo que la ética es

moral pensada y la moral, moral vivida.

Hasta aquí, la exposición de los hechos tal y como los veo. Está

claro que las creencias deben ir por un lado y los principios éticos y las

conductas morales, por otro. La transmisión de todos es potestativo de

la familia, célula básica y más limpia de la sociedad porque siempre

quiere lo mejor para los hijos. Solo cuando el individuo alcanza la

madurez y se incorpora a la sociedad, ésta y el Estado en su

representación, le ofrecerán alternativas que él, haciendo uso de su

libertad, podrá adoptar. Pienso que así debería ser, pero la televisión

se ha metido en casa y tiende a tomar la iniciativa: se está convirtiendo

en la educadora real. El reto de este tiempo es cómo atenuar la

influencia de este medio que inculca el tener y no el ser. ¿Qué

pensarían hoy Marcel, Stahelin y Fromm?


45

lgunas curiosidades sobre la Sierra de Cazorla

Alfonso Ros López

Estimados amigos y compañeros AA.AA de SAFA:

Leyendo en “Amalgama, nº 8” vuestra excursión por el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y las Villas se me ha ocurrido dar unas pinceladas complementarias, si me lo permitís.

Yo llegué a SAFA como vecino de Cazorla, mi padre trabajaba en Explotaciones Forestales

de Renfe, y aquellas sierras las recorrió mil veces y conoció y convivió con muchas personas que vivían allí de forma permanente y que seguían manteniendo sus costumbres y formas de vida, por lo que de forma más o menos cercana y directa, o transmitida por mi padre como vivencia suya o referidas a él por esas personas que conoció, sé historias de esa zona.

Empezaré diciendo, por si alguno no lo sabe, que ser Parque Natural, este caso, es distinto a ser Parque Nacional (Covadonga, Ordesa,… por nombrar a los dos primeros proclamados a principios del s. XX). La diferencia está en que en el primero se permite la continuidad de explotaciones clásicas (ganadería por ejemplo) y ciertas actividades humanas (hoteles,

restaurantes, camping); en el segundo, las explotaciones y actividades humanas no están permitidas, incluso el número de personas que lo visitan está regulado de forma más restrictiva. En definitiva, el Parque Nacional está más protegido de la influencia externa no natural.

El Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas abarca, de forma oficial, la extensión comprendida en la provincia de Jaén en toda la franja oriental, pero realmente, de forma natural, se prolonga más allá del contorno jiennense; por el norte y girando hacia el este, en la provincia de Albacete, la Sierra de Segura enlaza con las Sierras de Alcaraz, Calar del Río


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Mundo, Río Madera y Yeste y las sierras de Nerpio; por el este hacia el sur con la provincia de Granada (Puebla de D. Fadrique, hasta otro Parque, el de Castril en el sur que se une a la Sierra de Cazorla). Este P. N. comprende unas 215.000 has., creo que es el más extenso de Europa (dudas) y seguro que el mayor de España. Solo contando lo oficial, o sea, no entran lo de otras provincias.

Un tema que compete a este territorio, sobre todo a la Sª de Segura, es realmente curioso y sorprendente. En el

siglo XVIII fue declarada ¡¡¡“Provincia Marítima de la Armada”!!! Parece mentira pero de ahí salieron muchos barcos. La madera de estas sierras ha sido explotada desde tiempo inmemorial. Me

explico.

Si observáis un mapa, veréis que los ríos Guadalquivir y Segura nacen al sur del Parque, transcurren de forma paralela

hacia el norte (más o menos) y solo los separa un hilo de montañas hasta un punto en que el Guadalquivir gira hacia el oeste, hacia el Atlántico, y el Segura al este, hacia

el Mediterráneo. En estas sierras se iba haciendo la “corta” o la “tronza” de forma rotatoria por sectores, se cortaban los árboles desde cierto diámetro mínimo y se respetaban los árboles menores y más jóvenes, así al cabo de unos años cuando se llegaba de nuevo al lugar, aquellos se

habían hecho adultos y ya se podían cortar o tronzar. Se preparaban de forma adecuada y flotando por el río se llevaban los troncos hasta Sevilla o hasta Cartagena, según se eligiera un río u otro, a los astilleros que tenía la Armada en esos lugares. Se dice que muchos barcos de la Armada Invencible salieron de esos árboles cortados en estas sierras.

Puente de la Herrería Descenso de las navatas


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REFLEXIONES DE UN SAFISTA

Afortunadamente no he dado un salto brusco entre la década de los 50 y

el siglo XXI, de haber sido así, estoy convencido que en ese cambio tan

violento no hubiera tenido capacidad de adaptación. Hubiera quedado

perplejo ante el tuteo al profesor y de haber sustituido, en general, el usted

por el TU cuando previamente no ha existido ninguna relación entre ambos.

En la cultura japonesa está prohibido "pisar la sombra de tu mayor". En la

española... Traigo a mi memoria un ejemplo muy manido y que por si

mismo no tiene gran transcendencia, me preocupa, sin embargo y mucho, la

tremenda transformación social que en el plano educacional ha

experimentado la sociedad española actual.

Me pregunto, a veces, si los Diez Mandamientos siguen existiendo o la corriente de la

civilización actual ha suprimido gran parte de ellos que históricamente han constituido la base

moral para nuestra convivencia. En nuestro colegio y en la época que cito, fundamentalmente

se FORMABA, al tiempo que se informaba a través de las distintas asignaturas. En este

momento lo que de verdad pervive es la FORMACIÓN que recibimos: el respeto por los demás,

la caridad por el prójimo, la satisfacción del trabajo bien hecho, el cumplimiento del deber, el

sacrificio en momentos necesarios.

¿Se imparten esas enseñanzas en la SAFA actual? ¿Sentirían satisfacción nuestros

antecesores Padre Villoslada, Gómez, Sánchez, Bermudo...? ¿O teniendo en cuenta las

conductas actuales pensarían que los objetivos de la Institución son otros?

Comprendo que hay que evolucionar con los tiempos que corren, que hay más "parejas"

que matrimonios, que los paseos ya no se producen por las tardes si no a partir de las 12 de la

noche. Que los jóvenes no regresan a sus casas después de los paseos vespertinos, sino al día

siguiente tras los "botellones". Ahí están esas conductas que obedecen a la permisividad de los

mayores y ante las que finalmente hemos tenido que claudicar.

Las sociedades evolucionan, “pendulean” y se pasa bruscamente del blanco al negro sin

transitar por el gris. Estoy convencido que esta sociedad dará, en su día, otro golpe de péndulo

en sentido contrario.

No estoy defendiendo ( como fue en nuestro caso ) que vayamos en fila y en silencio por los

pasillos del colegio ni que comamos en silencio excepto jueves y domingos, no se trata de

volver al pasado pero tampoco dar un

salto en el vacio sin red y sin mesura.

Para mi que la formación intelectual me

ha permitido defenderme razonablemente

en la vida no es el pilar fundamental que

me regaló la SAFA para mi fue aquella

formación que adaptada a los tiempos que

entonces corrían me ha servido como

pilar básico en las actuaciones de mi vida.

Por todo ello mi más profundo

agradecimiento.

Antonio Molero García

En 1954: Molero (Magistero I.), Martín (Comercio), P.Navarrete, Ogallar

(Magisterio, Fuentes (Comercio) y…..


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Algunos padres de Amalgama emergen de las tinieblas

Los chicos de la primera promoción de Maestría

parieron AMALGAMA, pero el parto resultó algo

traumático y la abandonaron, abdicaron de su

obligada paternidad. Ahora, desde el fondo de sus

atormentadas conciencias, emergen dispuestos a

reconocer a la hija

A PROPÓSITO DE AMALGAMA

Cuando el otro día recibí el número 8 de la revista Amalgama y lo junté con los siete anteriores, de pronto se me revolvió un poco el estómago y pasado ese instante, me produjo una grata sensación. Inmediatamente mi mente se traslado al curso 1960-61 en la Safa cuando cursábamos 1º de Maestría.

Y es que, de pronto se me vinieron a la cabeza distintas escenas

de la gestación de la Revista Amalgama. Y sobre todo se me vino a la

cabeza el empeño de una persona en sacar adelante el proyecto,

quizás por una sana envidia que le producía la serie de revistas y

escritos que llevaban adelante los de Magisterio. Tanto nos quería.

Me refiero naturalmente a nuestro querido Padre Nieto, quien nos

despertaba los fines de semana por las mañanas a ritmo de marcha

militar con un altavoz colocado sobre una silla al final del pasillo de los

“cuartos”, justo delante de su dormitorio.

Ese hombre de carácter, amigo entrañable y espíritu de legionario,

tomó como un reto, remover nuestras no entrenadas mentes en

acciones literarias y sacar a la luz algo de lo poco o mucho que todos

sin duda llevamos dentro.

En ese curso éramos solo 16 alumnos en 1º de Maestría y no

parecía muy difícil extraer algo de nuestra mente. Al fin y al cabo todo el

mundo tiene algo que decir.

Pero quiero recordar que el “embarazo” fue largo y el parto

“doloroso”. De lo que tardamos en escribir cada uno de nosotros el

obligado artículo para incluirlo en la revista, algunos compañeros que

estaban en el “ajo” más que yo, tal vez puedan dar más completa

información. Lo que si ocurrió es que, después de muchas

conversaciones y reuniones con todos y entre todos, por fin el Padre

Nieto consiguió su objetivo.

Y fue que “Los Profesionales de la Safa pusimos “un huevo” a

semejanza de las “numerosas polladas” ya incubadas por nuestros

compañeros de Magisterio.

Y esta rememoración del interés que el P. Nieto tenía en editar una

revista de Profesionales, de la que solo sacamos un numero y

quedamos exhaustos, fue la que me produjo el chispazo en el

estomago. Inmediatamente pensé ¡que diría ahora si viera que un “no

alumno de Maestría en aquel año en Úbeda”, nuestro querido amigo

Pedro Mora ha continuado su obra cumplidamente!

Sin dudarlo sentiría lo que sentimos todos. Una enorme alegría

porque “esto” sigue a pesar de los 50 años transcurridos. Y por nuestra

parte un enorme agradecimiento hacia Pedro que, sin decírnoslo, no

para de removernos las neuronas y sugerirnos indirectamente nuestra

colaboración. Es decir, nuestro segundo Padre Nieto.

Gracias Pedro.

Francisco Carpio Gómez


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Con nostalgia positiva

Leer el nº1 de la revista AMALGAMA, me traslada al inicio de la fructífera andadura en nuestro querido colegio de la SAFA de Úbeda.

Con qué ilusión y cariño exponíamos nuestro

sentimientos y vivencias transmitiendo ilusión sentido de responsabilidad y ganas, muchas ganas de aprender y formarnos para el día de mañana.

Ahora desde la lejanía de la escuela, con nuestras

familias seguimos unidos por esa semilla que creció en nuestros corazones gracias a esa gran familia que se llama SAFA. Pasan los años pero no olvidamos nuestras raíces formativas, el sentido de compañerismo, la amistad, el sentimiento de pertenencia, el no sentirse aislado, el comprobar que año tras año nos seguimos saludando en fechas señaladas, el sentir como propio la desgracia física del compañero o la de su familia.

Todos tenemos compañeros de estudios en otras

carreras o en el trabajo, sin embargo no tienen la fuerza de unión que existe entre los que con esfuerzo y dedicación estuvimos juntos durante los cursos que realizamos para adquirir la formación que nos transmitieron los diferentes profesores para ejercer nuestra profesión.

Hoy al escribir estas líneas siento una gran satisfacción

porque me parece que estoy hablando y manifestándome a los compañeros y al mismo tiempo recibiendo sus comentarios como si estuviéramos presentes. Los encuentros en el Colegio que de vez en cuando realizamos por iniciativa de otros compañeros son eslabones que nos unen cada vez más.

La vida sigue, nuestras familias crecen al compás de

nuestras satisfacciones por estar y disfrutar con ellas, el colegio nuestro colegio de la SAFA sigue ahí en su labor de formar a personas en lo humano y profesional, ¡que hermosa labor! . Los que hace muchos años salimos del colegio lo seguimos sintiendo como propio y queriéndolo sin ningún atisbo de de enojo. Gracias SAFA y un fuerte abrazo para todos que aún nos sentimos niños de aquella andadura.

Antonio Jiménez Fernández

Primera revista Amalgama.

Corría el año 1961, por el mes de

abril o mayo, a uno de nuestro curso,

creo recordar que fue a Pérez Santos,

se le ocurrió la idea de que, antes de

las vacaciones del verano, hiciéramos

una revista entre todos los del curso,

para continuar en el siguiente curso editando algún número más.

La primera reunión que tuvimos, la dedicamos para

ponernos de acuerdo, sobre el nombre que debía llevar la

revista, se propusieron varios nombres, pero los que más

partidarios tenían eran los de “ALEACIÓN” y “AMALGAMA”.

En la última votación, salió “AMALGAMA” como ganadora.

Después vino lo más complicado, escribir cada uno sobre un

tema, para que resultara amena.

A mi, siempre me ha costado trabajo escribir algo para

publicarlo y no sabía el tema a elegir, alguien me dijo que

escribiera sobre música, pero no lo tenía muy claro. Cumplía el

tiempo en que teníamos que entregar los trabajos y con un

empujoncito, empecé a meterle mano.

Al leer 50 años después el artículo que hice, no me cuadra

mucho, en cuanto a mis preferencias y gusto sobre la música

de los años 60. Entonces a que viene esa crítica a la música

clásica.

Después de recordar un poco el ambiente musical que

teníamos en el colegio, creo que he dado con la causa y razón

de esa crítica.

Por esa época, se había abierto en el colegio una sala de

música, en la que solo entrábamos los cursos últimos de

“magisterio” y los de “maestría”. El que primero entraba en la

sala, como es natural, elegía la música que le agradaba. Si

llegaba primero uno de “maestría”, casi siempre nos encantaba

poner música de zarzuela, que llegaban antes los de

“magisterio”, música clásica, la misma sinfonía, un día y otro, así

que tenías dos opciones, llegar primero y elegías tus

preferencias, o aguantar la de otros.

Aprovechando la revista, quise hacer una crítica a la música

clásica, aunque creo que no muy convincente y con pocos

argumentos.

Un saludo para todos.

Juan López Ruiz


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La educación en España

Entrevista a Antonio Ramírez Mena

(Promoción del 59, mecánica)

- Para empezar, resúmenos tu trayectoria profesional aunque ya lo hiciste con extensión en el nº 3 de Amalgama.

De nuevo estoy aquí pluma en ristre para tratar de esclarecer el momento educativo que a todos en tanto que padres y abuelos nos interesa. Naturalmente que no pretendo que todos estéis de acuerdo con mis reflexiones. Ellas se basan en mi experiencia de casi cuarenta años en los tres sistemas educativos.

Pedro me pide que describa de nuevo mi trayectoria profesional que ya hice en la revista “AMALGAMA” nº 3. Pasaré rápidamente sobre ella.

-1960………Metalúrgica SANTANA. -1960/64…. Continuación de estudios y S. Militar. -1964/66…. Formación de adultos en Brozas y Alcántara (Cultural

y Mecánica) -1966/71…. Instituto Laboral Femenino de Bailén. Profesor de

Inglés y Matemáticas. -1971/74…. Universidad de la Sorbona y París VII. -1974/85…. Profesor de Lengua y Cultura en el I.E.E. para

emigrantes españoles en la R.F.A.(Concurso de Méritos). Traductor del C. de Europa, B. Wutenberg.

-1985/2004…. Profesor y responsable para la enseñanza de la Lengua y Cultura Españoa dependiendo de D.K.M.(Ministerio de Cultura Alemán) en land REHINLAND-PFALZ.

-2004……… Jubilación.

Entre los años 1971/80, hice los estudios que detallo.

1971/74: Diploma del I.I. de estudios franceses. Diploma en C. de la Educación. Diploma en C. Políticas y Sociología. Diploma General de E. Franceses.

1974/80: Licenciatura en C.Políticas y Sociología (U. de Estrasburgo). Diploma (D.E.U.G.) en Historia del Arte y Arqueología. Matrise en C. Políticas y Sociología. Matrise en C. de la Educación. Doctorado en C. de la Educación y Sciogía con la tesis “LA

TRANSPLANTACIÓN ESCOLAR: LOS PROBLEMAS DE LA ADAPTACIÓN

Y BILINGÜISMO EN LOS HIJOS DE LOS EMIGRANTES ESPAÑOLES EN LA R.F. DE ALEMANIA”

En 1987 y debido a mis nuevas responsabilidades en el S.E.A.,

tuve que hacer un curso de Lengua Alemana en el Goethe Institut. Durante mi trayectoria en la enseñanza formé parte, unas como miembro y otras como ponente, en más de cien Claustros y Cursillos Internacionales para la Formación del Profesorado.

- ¿Cuál es tu valoración del plan educativo que

recibiste en la SAFA? Diferencia, si te parece bien, entre la instrucción y la formación.

Mi valorización del Plan Educativo recibido en la SAFA tiene dos

vertientes: La primera se basa en la necesidad y circunstancias educativas de la época. La segunda se basaría en la noción del fin de la educación o para qué enseñamos.

Creo que la formación, instrucción y educación que recibimos fue

una apuesta valiente y osada sobre todo por parte del P. Bermudo que con su fuerte personalidad influyó en la preparación de les profesores y en su dedicación que más tarde redundaría en nuestro rendimiento escolar. La autoridad indiscutible del profesor fue esencial. No olvidemos que la disciplina fue un pilar en la enseñanza y educación de todos. La formación dualista que recibimos escuela-taller, puede equivaler en la actualidad a la que en Alemania se llama Formación Escuela-Empresa. De ahí que nuestra formación fuera adelantada para su tiempo. La unión de asignaturas técnicas con asignaturas de letras junto con la disciplina férrea jesuítica, fueron fundamentales para todos.

Gran parte de nuestros recuerdos en la SAFA pivotan sobre la educación recibida en aquel colegio donde

convivimos varios años y al que tanto nos referimos. La mayoría de nosotros nos hallamos muy satisfechos

de lo que allí pasó.

Cuando se educaron nuestros hijos, con mayores medios, muchos de nosotros tuvimos la sensación de

que su aprovechamiento no estuvo a la altura de lo esperado. En estos años, nos llegan noticias aún más

desesperanzadas cuando conocemos los resultados de los informes PISA (acrónimo del inglés Program for

International Student Assessment) donde los estudiantes españoles de quince años quedan situados hacia

la mitad de los 65 países que se someten a la prueba de aptitud. Por otra parte, España duplica la tasa de

fracaso escolar de la UE, cuya media es del 14 por 100 y el nuestro del 28 por 100 (33% los chicos y 23%

las chicas). Consecuentemente, la mitad de los jóvenes españoles pertenecen a la generación “nini”: ni

estudian, ni trabajan.

¿Ha fracasado el sistema educativo en España cuando en los diez últimos años se ha duplicado el

presupuesto?

Para darnos luz en este doloroso asunto, recurrimos a Ramírez Mena, sociólogo y educador cuya vida

profesional se ha desenvuelto en el escenario educativo europeo.

Estrasburgo


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La segunda responde a una pregunta que todo sistema educativo debe hacerse: ¿educamos para la sociedad o para el alumno?. A esta dualidad, yo añadiría otra: la humanidad. Entre las tres opciones no hay una que de por sí sola sea válida. Son las tres unidas las que interfieren en la enseñanza, educación y formación del alumno. Se le educa, se le enseña, se le instruye para nacer de él un ser capaz de comunicar, de entender y de hacerse comprender en la sociedad.

Dices que diferencie entre instrucción y formación. Yo los definiría

como conocimiento y competencia. Esta es el empleo que el alumno hace sobre todo exteriorizándose del conocimiento e instrucción recibidos. Considero que no son dos realidades distintas ya que una y otra se interfieren para dar al educando el conocimiento y la competencia o la instrucción y formación que conlleva todo Sistema Educativo.

- Entiendo que el hecho educativo es cosa de dos: por un lado el “hambre” del alumno, motivación, interés, etc. y por otro, la calidad del sistema, es decir, profesores, plan de estudios e ideario del centro. En este sentido, ¿piensas que la actitud de los alumnos ha cambiado?, ¿y la de profesores y planes de estudios?

Es bien cierto que el hecho educativo es cosa de dos: educando y

educador. Pero te olvidas de otro muy importante: la familia y la sociedad en la que el educando se desenvuelve; ya que en principio ellos son los primeros educadores. El gran problema que presenta todo hecho educativo, es que no es el alumno el que debe entrar en el sistema, sino el sistema en el alumno. Y ahí entra el profesor, el pedagogo que poco a poco con su buen hacer se ganará la confianza y la simpatía del alumno que sin darse cuenta irá entrando en el sistema.

El profesor no ha cambiado, le han cambiado las autoridades

educativas al quitarle el principio de autoridad. En cuanto a los planes de estudio es algo que filósofos, pedagogos y sociólogos no se ponen de acuerdo. Las nueve veces que hemos cambiado el S.E. lo demuestran.

Creo que toda educación se debe mover dentro de los parámetros

que conviven en la sociedad del país y de las necesidades de éste. No todo el mundo debe tener un bachiller; antes bien el S.E. debe canalizar con arreglo a su C.l. y aptitudes. La enseñanza global no es mal sistema, siempre que se racionalicen los planes de estudio de forma que los objetivos mínimos exigidos se cumplan. Con arreglo a esos objetivos el S.E. debe ramificarse para ofrecer a los alumnos un plan de estudios que completen su enseñanza y educación para proyectarlo al futuro. Por supuesto que este plan de estudios diversificaría el sistema según las aptitudes de los alumnos que en él se incluyeran, Para el profesor, la pizarra es algo que conlleva la enseñanza porque hará que el alumno se motive al ver el esfuerzo del profesor para transmitir el apego y el hábito al estudio. Jamás vi un profesor de la SAFA que no tirara de pizarra para cumplir el objetivo del tema a explicar y enseñar.

- Cómo valoras tu experiencia concreta en Estrasburgo separando los factores de la pregunta anterior, es decir, actitud de los alumnos, profesorado y plan de estudios.

Primero Paris, luego Estrasburgo y más tarde Alemania fueron para

mí como la visión para el ciego. No por no poder ver sino por hacerme ver y comprender el atraso tan enorme que arrastrábamos tanto en educación como en lo social y económico. La disciplina escolar, los

planes de estudio basados en las programaciones y avances del curso anterior para corregir los posibles fallos, el reciclado permanente y obligatorio del profesorado, la participación de los padres como cooperadores necesarios en la educación, el control de escolaridad, la autodisciplina del alumno y la autoridad del profesor llevan al S. Educativo francés tanto como al alemán a tasas de superación muy altas del alumnado.

Nuestro S. Educativo siempre ha pecado de impreciso de ahí que

los planes de estudio reflejen la imprecisión del sistema. Todo S.E. para implantarse debe analizar las necesidades del

alumnado al cual va dirigido. Yo señalaría tres apartados fundamentales:

a) Se le enseña, se le educa como lo que es: un niño. Con los límites que eso conlleva

b) Se le enseña, se le educa para que adquiera unos hábitos de estudio, de trabajo, de respeto y por tanto de disciplina escolar y social.

c) Se le educa, se le enseña para que mediante los hábitos de trabajo y de disciplina adquiridos mediante su formación, hagan de él un ciudadano; un hombre responsable de sus actos en la sociedad que ante él se abre.

Es así de fácil; pero al mismo tiempo así de difícil. - Te comentaba hace unos días que inicié estudios de

pedagogía pero que los abandoné a los seis meses. Perdona, tuve la sensación de que los pedagogos eran una plaga patológica para la enseñanza, ¿cuál es tu visión al respecto?

Creo que el pedagogo nace y poco a poco se hace. Tienes cierta

razón en cuanto te refieres al “coñazo" de la Pedagogía. La Pedagogía es en un principio el arte de enseñar, educar y de instruir. Este arte comporta algo muy importante: comprender al alumno, hacerse comprender y de interesarlo. Este arte no se enseña ya que enseñando se hace el pedagogo. Según mi experiencia en los tres S.E., creo que sólo hay una Pedagogía y multitud de formas de aplicarla.

La Pedagogía lo mismo que el enseñante no pueden ser objetivos

puesto que no podemos enseñar sin educar y eso es precisamente lo que debe hacer el pedagogo; enseñar y educar. ¿Es posible hacerle un bien al alumno aunque éste no quiera? Cuando un educador, el enseñante se interroga sobre el fin de su acción sobre el alumno, lo hace en tanto que filo-pedagogo puesto que lo hace con conocimiento de causa. Sólo nos bastaría con leer a Montaigne, Erasmo, Rousseau, Kant, Dewey, Nietzsche etc.


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La Pedagogía y por tanto la educación revisten formas diferentes

según eduquemos y enseñemos: por y para la sociedad o por y para el alumno. Lo que hoy se llama la nueva Pedagogía a la que se suman grandes pedagogos como Claparede, Montessori, Decroly, Dewey, Freinet, etc. Sus métodos son algo diferentes pero como antes expuse todo tipo o forma de pedagogía tienen ciertos principios en común. Estos principios son:

- La función crea el órgano. - El interés, es decir, interesar al alumno. - Autodisciplina. - Necesidad de aprender. - Participación. Sinceramente creo que el pedagogo, el filósofo, el sociólogo y por

último el enseñante, deben adaptar los planes de estudio para que al mismo tiempo que enseñen y transmitan conocimientos, eduquen y por tanto canalicen las enseñanzas que el educando es portador como pueden ser las familiares o las de la sociedad en las que el alumno se desenvuelve.

- ¿Cuáles son a tu juicio las cosas que se han hecho

rematadamente mal en España para llegar a lo que hemos llegado?

Mi experiencia de cuarenta años en el S.E.E., el S.E.A. y el S.E.F.

me permiten extrapolarme a los tres sistemas educativos. Si bien tu pregunta no es fácil de responder, voy a mojarme.

- Adaptaría el S.E.E. a las necesidades sociales y del mercado de trabajo proponiendo cuatro tipos de enseñanza con los objetivos que sería necesario alcanzar mediante pruebas de actitud al terminar los ciclos.

- Canalizar a los alumnos mediante un examen al terminar el primer ciclo. Esto nos llevaría a una enseñanza laboral, industrial y universitaria. Los grupos resultantes serían homogéneos y por tanto ideales para aplicarles el plan de estudios adecuado.

- Obligar al profesorado a un reciclado continuo mediante claustros y cursillos a fin de ponerlos al día mediante ejercicios orales y prácticos para corregir los posibles problemas de comunicación con el alumnado. Además mediante una evaluación continua del profesorado, obligarlo a presentar las programaciones correspondientes al plan de estudios establecido.

- Quitar a las A.P.A. el poder que en la actualidad tienen, dejándolo a nivel de consulta de quejas, comportamiento y aprovechamiento del alumno.

- Mediante un examen completo al final de cada ciclo, controlar las aptitudes, la comprensión y la expresión del alumnado; es decir su conocimiento y competencia.

- Suprimir los exámenes de septiembre y no pasar de curso con asignaturas pendientes. Tanto los profesores al preguntarse a diario por su acción de comunicar y de enseñar (Pedagogía) como los alumnos en cuanto a su interés y aprovechamiento se verían obligados unos y otros a corregir fallos en el sistema.

- Incentivar al profesorado revistiéndolo de la autoridad y competencia que su cargo de enseñante y educador conlleva además de incentivos económicos ligados a resultados y a su interacción mediante programaciones y prepuestas educativas.

- El Director del Centro Escolar debe estar en posesión de una Licenciatura en letras y de al menos un Ciclo de Pedagogía. El Director no puede ser elegido por el Claustro de Profesores del Centro. Deberá ser nombrado per la autoridad educativa que tenga la competencia.

No olvidemos que el movimiento de mayo del 68, no comenzó por

una contestación de los poderes políticos y públicos, sino de los profesores,

de su autoridad y del medo de ejercerla, de la institución que

representaban y finalmente de la sociedad y de la civilización en sí.

- ¿Cómo explicas el que la FP sea secularmente la

hermana pobre de la enseñanza en España?

El cambio del S.E. según el partido en el gobierno, siempre perjudicó no solo a la enseñanza sino también a la educación. La gran equivocación de unes y otros fue no tener en cuenta los logros del S.E. anterior para hacer del hecho educativo un completo plan de estudios, un sistema de enseñanza, educación e instrucción que redundara en beneficio del alumnado, y no un “brindis al Sol" a mayor gloria del partido en el gobierno.

Come antes di a entender, es imposible enseñar sin educar, por

tanto, es indispensable en todo S.E. conocer las aptitudes de les alumnos y para elle es necesario someterlos a un C.I. a su debido tiempo. Así se pueden formar grupos homogéneos para que mediante un adaptado plan de estudios se puedan alcanzar les objetivos que se pretenden. Estos objetivos serían marcados per el S.E. dentro del plan de estudios y por tanto del tipo o forma de enseñanza que se quiera alcanzar.

Desarrollar la FP, ampliarla y adaptarla a las necesidades del

alumnado puede y debe ser una vía importantísima en la enseñanza. Pere por desgracia jamás se le dio la importancia que ésta requería y poco a poco se convirtió en el pariente del que nadie quiere hablar ni quiere tener. Un sinónimo de luto familiar que nadie quiere vestir. Es urgente que el S.E. analice el fracaso escolar para poder corregir los fallos educativos que a él nos han llevado. El actual S.E., E.S.O. y Bachiller creo que pueden de nuevo llevarnos per el buen camino si se acoplan les planes de estudio y de formación a las necesidades del alumnado y del país.

Vuelvo a repetir que el S.E. debe replantearse la F.P. mediante un

minucioso plan y darle la misma importancia que a los Estudies Universitarios. Nos va en ello el futuro de les que hoy son niños.

- ¿Debe entrar la política en la escuela? Si es que sí

¿Hasta donde y de qué modo? La política no puede funcionar sin políticos, y a éstos es la

escuela la que debe formarlos y educarlos. La educación es inseparable de la política, es decir, de la vida

de la ciudad, de los aspectos económicos y sociales y de la forma de gobierno ya que toda educación depende de la acción política y de lo que la sociedad espera de ésta. En realidad es un aspecto importantísimo puesto que de la formación de una generación, dependerá la siguiente.


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Creo que las deficiencias de la política o de los políticos se reflejan

en la educación. El S.E. no puede ignorar este punto. Enseñar la realidad política sin que ello sea sinónimo de adoctrinamiento es indispensable en toda educación que se pregunte ¿educar para qué?

- Por último, ¿qué corregirías, a grandes rasgos, en el sistema educativo español? Se trata de reconducir los malos resultados recogidos en los informes PISA y rebajar sensiblemente la tasa de fracaso escolar.

La educación es la acción que permite a un ser humano desarrollar

sus aptitudes intelectuales y físicas así como sus sentimientos sociales, éticos y morales a fin de cumplir de la mejor forma posible su destine de hombre.

Si la crisis de la educación es directamente la de la civilización, es en el S.E. donde podemos encontrar la solución. Si una, sociedad quiere ser democrática es en la escuela donde esa democracia debe implantarse primero. Pere la democracia no es solo la tan cacareada igualdad política sino también igualdad social.

Tanto la enseñanza como la educación incumben a des instituciones: la familia y la escuela y también a un producto de ambas al que llamamos sociedad. Unas y otras se interfieren para que se alcance el fin para el cual enseñamos y educamos. Si una de ellas falla y no lo corregimos, es muy posible que una generación se pierda. Es exactamente le que en este momento nos está ocurriendo.

A grandes rasgos mejoraría en el S. Educativo: a) Ne se puede educar y enseñar sin el recurso a la autoridad.

Devolvería la autoridad al profesor para darle un poder legítimo dentro de la función que él representa y de la misión de enseñar y educar que debe cumplir.

b) Interesar y desarrollar en les alumnos el principio de iniciativa y cooperación con el profesor haciéndoles protagonistas, partícipes y miembros activos del curso mediante una pedagogía "sui generis" con el fin de alcanzar los objetivos propuestos en el plan de estudios. El conocimiento y la competencia del profesor basados en una buena preparación de la clase, son necesarios. Tengamos en cuenta que la instrucción se enseña. La educación se aprende por medio de la acción del profesor.

c) Una vez analizados los problemas que han llevado al fracaso a nuestro S.E. volvería en cierto modo a la “pedagogía jesuítica“ premio/castigo, es decir, hacer de la educación una experiencia vertical en la que la opinión del Claustro de profesores fuera determinante en la enseñanza y educación del alumnado. En las actuales circunstancias, el profesor no se siente libre de enseñar y

educar aplicando la pedagogía necesaria y conveniente para alcanzar los objetivos propuestos por el plan de estudios. La presión a la que es sometido todo enseñante por las asociaciones de padres de alumnos a las que el Estado les encomendó ser juez y parte, se lo impiden al no verse protegido por ese Estado que le encomendó la misión de educar y de enseñar. No puede dejarse la enseñanza y la educación al libre albedrío del alumno. Eso sería arruinar la enseñanza y por tanto la educación. En suma, hacer de la educación un derecho y un deber pero haciendo que todos cumplan lo que eso implícito conlleva.

d) Recuperar por parte del Estado Central las competencias en Educación con el fin de evitar en lo posible los 17 Sistemas Educativos que actualmente rigen en nuestro País. Si esto no fuera factible por completo, el S.E. deberá implantar para todos unas asignaturas de base que fueran comunes a todas las Autonomías· En el caso de la Lengua Vernácula de algunas Autonomías, ésta deberá enseñarse en las mismas condiciones de igualdad que la Lengua del Estado. La educación bilingüe y no la inmersión en la L. Vernácula, deberá ser un factor y no un inconveniente que redunde en beneficio del alumno, en su educación y en su enseñanza.

Como antes indiqué, la enseñanza y la educación no deben ser un

factor de adoctrinamiento ante la realidad lingüística del país. Antes bien, éstas deben ser democráticas y no hacer del hecho diferencial un baluarte de nacionalistas radicales. De esta forma y por medio de la educación, se construye un país, lo contrario sería destruirlo.

Señores gobernantes. No tiren por la borda del poder lo que

configura el futuro de un país. La enseñanza, instrucción y educación de sus ciudadanos es innegociable, puesto que de ELLAS depende nuestro SER o NO SER.

El informe PISA es un resultado muy negativo para nuestro S.E.,

pero no tiene en cuenta la realidad social de un país. España pasó de ser un país de emigración a un país de inmigración. Esto debió implicar una acción preventiva del S.E. que no se llevó a cabo. De ahí los resultados negativos obtenidos. Sin embargo este mismo informe PISA no tiene en cuenta los varios cientos de miles de profesionales que terminaron con éxito sus estudios y que desgraciadamente, como siempre ocurrió serán acogidos con los brazos abiertos por los países de siempre y que todos conocemos.

España invierte en educación entre ocho y nueve mil euros por

alumno y año. Dinero suficiente y equivalente a la media europea. Pero ¿por qué falla nuestro S.E.? Al para qué educar y enseñar, yo añadiría para quién…..

En el Parlamento Europeo

de Estrasburgo con los

alumnos de Selectividad,

curso 82/83. A mi derecha,

los profesores J. A. Romero

y Gloria Jimeno.


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Los niños de la SAFA

Miguel Ligero Conejero

(3º de Oficialía 1961, Electricidad)

_________________________________________________________________________

El tren, tan cansado como nosotros, llegaba sobre las cuatro de la

mañana a la estación de Linares-Baeza, que, como es natural, ni está en Linares, ni está en Baeza, sino en un lugar oscuro y nocturno, que nunca llegaríamos a ver de día. Veníamos los niños de El Puerto de Santa María y Sevilla, con destino a Úbeda, al Colegio de la Sagrada Familia, regentado por los jesuitas. Allí permanecimos durante cinco años, sometidos a un tratamiento de educación, adiestramiento y aprendizaje, creo, que, en general, con mejores resultados que peores. Desde El Puerto habíamos salido sobre las 10 de la mañana del día anterior y el tren pasaba por Sevilla, por la estación de San Bernardo sobre las 12 ó 13 horas del mediodía, según recuerdo. Eran muchas horas de viaje, normalmente en el tren “rápido” Sevilla-Cádiz. Sin embargo los niños de Sevilla, también podían tomar el que se conocía como el “catalán” un tren, también rápido que salía de Sevilla con dirección a Barcelona y que no pasaba por Madrid, pero sí por la estación de Linares – Baeza.

Éramos niños, que hoy, se diría de nosotros que éramos pobres,

pero entonces no era así exactamente. Ser pobre era lo normal, las clases medias apenas existían, porque se montarían sobre gente como nosotros, pasados unos cuantos años. Éramos los más listos del colegio portuense o sevillano, donde estábamos estudiando y donde nos sorprendió la noticia, el regalo de la providencia, de que nos íbamos a estudiar a Úbeda, que íbamos a aprender mucho y que saldríamos hechos unos hombres de bien y con un buen oficio, porque lógicamente todos éramos chicos, las mujeres aún debían estar preferentemente en casa ayudando a sus madres. Entonces teníamos entre doce y trece años. Sin nosotros ni nuestras familias saberlo, los curas habían hecho una selección de los mejores alumnos de sus propios colegios, en la parte de enseñanza gratuita. Entonces, los colegios de los jesuitas tenían una parte para niños de pago, los ricos, y otra gratuita, adjunta, para los niños de familias no tan favorecidas. En los colegios de pago se estudiaba el bachillerato elemental y el superior, con sus reválidas correspondientes, según el plan oficial de entonces. Con lo que los jesuitas sacaban de los colegios de pago y otras donaciones se pagaba el colegio gratuito, que solo tenía enseñanza elemental.

En aquella estación de Linares-Baeza, esperábamos en un bar con

cerramientos de cristales, que nos protegían del frío y donde esperábamos que saliera el tranvía con destino a Úbeda, sobre las siete de la mañana. Mientras, el que podía tomaba un café y si no, un vaso de agua. Íbamos con el dinero justo, racionado para cada semana, no para

todo el trimestre, que no eran tiempos de pago por adelantado, ya se nos enviarían los famosos giros postales a su debido tiempo. Y a otros cajas de zapatos con viandas, que, generalmente se compartían con los compañeros.

Todos los niños éramos de pueblo, excepto los de Sevilla, que eran

“de capital” y se notaba por su desparpajo, iniciativa y su espíritu de grupo. Sí, formaban grupo, los demás teníamos que ir haciendo amistades, y así, surgían las interprovinciales, como más frecuentes y por encima, siempre el grupo de Sevilla.

Las dimensiones del colegio eran descomunales a nuestros ojos

de poco ver colegios distintos a los nuestros, mucho más pequeños. Allí se estudiaba Magisterio, con el bachillerato elemental y reválida que se requerían para cursar dichos estudios, y Formación Profesional, estudios para aprender un oficio, con muy buenas prácticas, creo que era así.

Los estudios de formación profesional eran más cortos que los de

magisterio, lógicamente. Pero la mayoría de nosotros, sin un análisis previo o consulta sosegada con nuestros padres, parece que íbamos destinados a la formación profesional, nuestros padres no podían soportar demasiados años el sacrificio de sostener los gastos, aunque modestos, de tenernos sin aportar nada a la economía familiar. Yo, al menos, cuando me preguntaron, elegí formación profesional sin pensarlo, por un sentimiento de que era lo que tenía que hacer. Sin embargo, cuando salimos del colegio, la mayoría se emancipó de sus padres, porque salíamos con un puesto de trabajo asegurado. Abengoa absorbía la mayor parte de nosotros. La familia Benjumea eran patronos de la fundación o patronato de la SAFA, y sabía que se llevaba muy buenos profesionales, con cualificación muy superior a la media y con buenos principios morales, al menos de inicio.

Para nosotros era un misterio lo que íbamos a hacer en Úbeda,

pero pronto nos adaptamos al diario quehacer de clases, estudio, recreo, deporte, todo organizado, controlado, con nuestra ropa numerada para recogerla en lavandería sin problema, con un sistema de notas mensuales en las que en las de conducta, lo normal era obtener un 10, ya que una nota inferior quería decir que habías hecho algo indebido, muchas veces conllevaba la visita al padre prefecto que imponía el castigo adecuado a nuestra fechoría, que, esperábamos muchas veces que fuera la expulsión, que era lo peor que nos podía

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pasar. El resto de notas de asignaturas de ciencias, sociales y humanas debían ser altas, pero no tanto. La verdad, torpes, torpes, no había, aunque lógicamente sí había diferencias de comportamiento y también de entendederas.

Mi experiencia de la vida en el colegio fue más o menos feliz.

Pensábamos o así nos hacían pensar que éramos unos privilegiados, por estar en un colegio tan importante, ya quisieran nuestros amigos y vecinos estar allí en lugar de nosotros, así que teníamos la responsabilidad de esforzarnos para no cometer la injusticia de ocupar un lugar injustamente, porque había muchos niños deseando tener la suerte que teníamos nosotros.

No fuimos allí solamente a estudiar un oficio o aprender mucho

de las materias necesarias para las futuras ocupaciones laborales, sino que íbamos a educarnos, a quitarnos nuestros primarios instintos de niños de la calle, aunque no todos éramos así. Cada cura tenía sus propias obsesiones de cómo debían de educarnos. Según sus propias creencias y sueños de directores de almas juveniles. Así, mientras había curas que nos enseñaban a amar la música, el cine o a la misma humanidad, como fue el padre Bermudo, otros nos hacían cantar canciones de legionarios, absurdas y violentas, pero el cura “inspector” tenía plena autonomía para endorsárnoslas. Nosotros nos tragábamos todo lo que nos echaban encima. También, entre tanta canción fascistoide, se nos enseñaron otras vascas y gallegas del folklore tradicional, que seguro aún recordamos todos los que lo sufrimos.

El primer día de la vida en el colegio fue un día de descubrimientos:

dónde estaban las clases, los campos de fútbol, los comedores, nuestros dormitorios, la capilla pequeña del interior del colegio, la antigua capilla, como la llamaban los veteranos, la nueva iglesia, en el exterior, con su campanario, su gran reloj, y la cripta donde serían enterrados todos los curas que por allí iban pasando, situada en un sótano anexo. También empezamos a conocernos entre nosotros. Lo primero que nos sorprendía era la distinta forma de hablar de los otros. La jota de Jaén empezamos a oír su pronunciación jiennense, y no dejaría de sorprendernos hasta que nos fuimos del colegio. Muchos cambiamos nuestra particular forma de hablar, aunque todas las hablas eran andaluzas, las diferencias eran muy notables, diferencias que al final del colegio, eran mucho menos. Los del Puerto, por ejemplo, ceceaban, provocando la risa del respetable, pero al final no había alumno que pronunciara mejor las eses y ces, zetas, con distinción perfecta, aunque no todos, el grupo mayoritario de los sevillanos, lograba mantener su especial gueto bastante inmune a las influencias ajenas en el habla y así vemos cómo hoy siguen con su particular seseo, por otra parte, tan personal e identificativo del grupo.

La primera noche dormimos en un dormitorio común, que sería

nuestro todo el curso, los de Preparatoria, o dicho de otra forma, los de la Cuarta División, que era como nos organizaban para las actividades comunes, como recreos, comedores, salidas, deportes. La cuarta eran los pequeños, y así eran tratados por los demás, con bastante paternalismo, sobre todo por los mayores, que eran ya los de la Primera División, que, por supuesto se afeitaban, llevaban pantalones largos y algunos, se dice, salían con alguna chica de Úbeda o tenían novia en su pueblo. Los pequeños, con sus doce o trece años, llevaban pantalones cortos, algunos bombachos, pero todos llevábamos nuestros trajes de domingo o de diario, incluida corbata.

Esa primera noche se oyó más de un sollozo contenido dentro del

embozo de la cama. Se echaba de menos a los padres, los hermanos, nunca habíamos salido de nuestra casa, así que cuando llegó la noche y en la soledad de la cama, aunque muy cerca estaba la otra y la otra, ello no pudo evitar que en ese momento nos sintiéramos tan solos. Es justo decir que ya no volvió a ocurrir nunca más, desde el día siguiente

y durante muchos meses y años, aquellos compañeros, curas, profesores, serían también nuestra familia. Incluso incorporamos nuevos e importantes miembros familiares que serían muy influyentes para nosotros, y que nos acompañarían en momentos a veces muy particulares. Los santos personajes eclesiásticos, entre los que destacaban la Virgen María, Jesucristo y los principales jesuitas como Ignacio de Loyola, Francisco Javier, etc., cuyas vidas conocimos muy bien en los anuales ejercicios espirituales que, en régimen de absoluto silencio, hacíamos durante tres días, por cuaresma y, en los que se nos amenazaba con lo peor de los infiernos si se nos ocurría morir en pecado mortal. Más de uno de nosotros fue de madrugada a confesarse por si acaso, ante la mirada comprensiva y somnolienta del padre espiritual.

Entonces estábamos hechos de una pasta muy moldeable, desde

los doce o trece años hasta los diecisiete, fuimos formados, educados, animados a dar testimonio de nuestra fe en el mundo que nos esperaba, comandado por el mismo diablo. Recordaremos nuestra canción de despedida, cantada en el patio del colegio años después:

Entonces estábamos hechos de una pasta muy moldeable, desde

los doce o trece años hasta los diecisiete, fuimos formados, educados, animados a dar testimonio de nuestra fe en el mundo que nos esperaba, comandado por el mismo diablo. Recordaremos nuestra canción de despedida, cantada en el patio del colegio años después:

“Aunque avance rugiendo la tormenta y en mi mástil arribe el huracán feliz con tu recuerdo soberano desafío las olas de la mar Me arrollarán quizás entre su espuma Pero negar que me amaste y que te amé Negar que fui tu hijo y que en tus brazos Se pasó como un sueño mi niñez, Eso nunca lo haré madre querida Eso nunca, nunca lo haré, Eso nunca lo haré”

La música sería muy importante para nosotros a lo largo de

nuestra formación en la SAFA. Todos los domingos ensayábamos la misa gregoriana y alguna pieza más que íbamos a cantar en la misa de esa misma mañana, acompañando al fantástico coro que tenía el colegio y que escuchábamos con orgullo y deleite desde el lugar del coro, es decir en la parte superior y trasera de la iglesia, en donde había un órgano y todo ello bajo la dirección y el impulso de D. Isaac, el profesor de música. Lógicamente había clases de música y algo aprendimos, pero más como cultura general que como especialización. Todos los actos religiosos obligatorios eran cantados, como las sabatinas, ah, y aquel inefable rosario de la aurora, maravilloso paseo por el mes de mayo, a primera hora de la mañana, por los caminos de la granja del colegio, mientras las vacas y las gallinas nos miraban


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sorprendidas por nuestra extraña y ruidosa presencia. Pero hay que acentuar en aquellas mañanas maravillosas de mayo, con el olor a hierba fresca y húmeda, aquel ambiente limpio que nos refrescaba la cara y nos hacía cantar los himnos a María con tanta gana y devoción. Nunca olvidaremos aquellas mañas de mayo, todos en fila.

Bueno, en fila india transcurrían nuestros días en colegio, para

todo teníamos que formar, en fila para ir al comedor, en fila para ir a misa o a las duchas, en fila, para confesarse, bueno esa era otra fila, la de los pecadores. Y por supuesto, que nadie metiera las manos en los bolsillos, al parecer, podía ser ocasión de pecado. Y por Dios, que mucha veces no se podía seguir esta norma, porque en Úbeda hacía un frío del carajo. Raro era quien no tenía sabañones, en los pies o los dedos de las manos o las orejas. En Úbeda todos los inviernos nevaba, era algo que a nuestras familias sorprendía mucho, y que nosotros contábamos como algo especial.

Nosotros aún no sabíamos nada de la vida. Sí sabíamos de las

dificultades de nuestros padres para sacarnos adelante, vestirnos, alimentarnos, darnos educación, la que podían, que era ciertamente escasa. Por ello, la oportunidad de irnos a Úbeda fue beneficiosa para las maltrechas economías de nuestras familias, una boca menos suponía un reparto menos escaso cada día en casa. Pero nosotros no nos hacíamos estas cábalas en aquellos años. En el colegio no nos faltó nunca nada de lo necesario. Aunque sabíamos que también el colegio sufría estrecheces, porque a veces nos decían que pidiéramos en nuestras oraciones por el Padre Rector que estaba haciendo gestiones en Madrid para conseguir dinero para mantener el colegio. A mí me pareció siempre aquello un gesto de sinceridad y humildad digno de resaltar como muy meritorio.

También sabíamos que nuestras familias no estaban bien, porque

en las vacaciones de Semana Santa la mayoría de los alumnos que éramos de más lejos, como Sevilla o El Puerto, nos quedábamos en Úbeda. Ello nos permitió conocer la ciudad mucho mejor que los demás, que solo podían salir los sábados y domingos. Y hay que decir que Úbeda es una ciudad maravillosa y muy bella, con obras arquitectónicas de gran valor, con una presencia más que notable del gran artista y arquitecto Andrés de Vandelvira, el más importante de toda la provincia de Jaén, y que nos dejó joyas como la iglesia del Salvador en la maravillosa plaza de Santa María, o el hospital de Santiago, que seguía siendo hospital y donde fueron operados algunos de nuestros compañeros, a mí me parecía que todos se operaban del aparato digestivo. Hoy día el hospital de Santiago está dedicado a funciones más relacionadas con actividades culturales del ayuntamiento de Úbeda, pero ya no es queda rastro del antiguo hospital.

En la misma plaza de Santa María estaba la iglesia del mismo nombre, con estilos distintos en el exterior, creo que neoclásico y el interior gótico, y donde asistíamos los que nos quedábamos sin “vacaciones” en Úbeda, las madrugadas de los viernes, y en su interior pasábamos ratos de recogimiento y penitencia, como todos los oficios religiosos por aquellos años, en latín. Eran las únicas noches en las que podíamos entrar tarde en el colegio. Hacíamos grandes amistades en aquellas fechas, pues era posible una mayor capacidad de selección de las personas de nuestra preferencia. Hay que recordar al joven José López Barrera, uno o dos cursos anteriores a los de nuestra promoción, gran gimnasta y mejor persona, que casó con una ubetense, Pepi, y tuvieron varios hijos. Se quedó de profesor en los Profesionales del Colegio. Como muchos otros de los sevillanos era del Cerro del Águila. A él debemos las expresiones: “Tiene mucho mérito” referidas a los innumerables monumentos que teníamos ocasión de ver a cada paso por las calles de Úbeda en la Semana Santa. Siempre quedará en nuestro recuerdo tan entrañable amigo.

Como decíamos antes, nosotros no éramos conscientes de lo que

estaba pasando en nuestro país. Estuvimos cinco años como fuera de nuestro mundo real, el de nuestra familia, nuestro barrio o pueblo. En general, fuimos felices en Úbeda, y salvo excepciones, aprovechamos la oportunidad que la vida nos ofreció. He dicho excepciones, pero no conozco ninguna realmente.

Mientras, en España, y, especialmente en Andalucía se estaba

pasando muy mal, tanto económicamente, como socialmente y no digamos políticamente. Aquí había una dictadura, aunque nadie se atrevía ni a decirlo por temor a ser oído, porque entonces sí que era verdad que las paredes oían. Y eso era peligroso. Así que nosotros no sabíamos que aquí había una dictadura, ni sabíamos que vivíamos en un régimen económico que se llamaba autarquía, y que no podíamos comerciar con ningún otro país. Entonces sí había hambre, necesidades de todo tipo, recordamos los remiendos que llevaba la gente en los pantalones, las “culeras”, las coderas, parches para tapar rotos o los desgastes de una ropa más que usada.

Pero nosotros estábamos como en una burbuja. Bueno, es justo decir

que los peores años ya habían pasado, los terribles cuarenta, los años del hambre y la posguerra. La propia existencia de los colegios tipo SAFA, eran indicativos de algo estaba cambiando. Había gente que quería cambiar la situación de alguna manera, entonces no había llamadas a solidaridad de la población, eso habría sido considerado como política y estaba prohibido. Por ello, las soluciones habían de ser individuales. Los jesuitas decidieron que había que ayudar a levantar el país. Eso era cristiano y las escuelas de la Sagrada Familia iban a ser una gran experiencia de sacar a muchos jóvenes capaces, si tenían una oportunidad y fuimos nosotros entre otros muchos los que la tuvimos.

Fuera de España, sin embargo, eran los años 50 y 60 del pasado

siglo, los más prósperos que jamás había conocido Europa, gracias al Plan Marshall y a la reconstrucción europea de todo lo cual España había quedado excluida. En términos de hoy podemos decir que había pleno empleo, en general entre el 1-3% de desempleo, Alemania, por ejemplo, no pasaba del 0,3% de paro. Ello permitió a muchos compatriotas y, especialmente andaluces a emigrar a Europa. Ellos contribuirían al desarrollo económico de España, como nosotros también lo hicimos, si no hagamos recuento de nuestra propia historia.

Cuando salimos del colegio, las cosas ya estaban cambiando

bastante, ya había bases americanas a cambio de ayuda económica, los tecnócratas del Opus estaban a la tarea de hacer funcionar sus planes económicos de desarrollo, España había sido admitida en la ONU y empezaba una incipiente apertura al exterior, todo lo cual acabaría pasando los años en la salida definitiva o casi, de España de su postergación secular.

Pero, volvamos al colegio, hay muchas cosas que recordar y contar. Seguiremos


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El rincón de la poesía

Andrés Martínez (Promoción del 60)

Aunque parecía mentira

fue verdad y en buena hora, vino a verme Pedro Mora hasta la ciudad de Alzira.

Después saludos y abrazos, pregunto por los amigos y a escribir algo me obligo aunque sean unos trazos.

Mis recuerdos de Jaén de Úbeda siendo concreto, la verdad, no es un secreto de que lo pasé muy bien.

De compañeros y amigos, profesores de enseñanza ahora tengo la añoranza que dando gracias bendigo. Tras el cambio de impresiones de nuestro libro lectura, no es ninguna locura que saque mis conclusiones. Todos tenemos razones la familia o el trabajo, hablamos con desparpajo del transcurrir de la vida, la experiencia recibida comenzando desde abajo.

La religiosa experiencia no la tratamos ninguno, pero seguro que alguno la mantiene en su conciencia, porque además de la ciencia también aprendí que Jesús, nuestro guía y nuestra luz estuvo al lado del pobre y por esta causa noble murió clavado en la cruz.

El que se siente cristiano o se muestra solidario, no es un revolucionario cuando defiende a su hermano

y luchando mano a mano contra el poder del dinero por el mandato primero o la fe que nos empuja por aquello de la “aguja” palabras del “Carpintero”.

Legítimas aspiraciones de prosperar en la vida, pero se queda escondida buscar otras soluciones, sin atender a razones porque nos parece loca, o bien cerramos la boca cuando vemos una ofensa, sin salir en la defensa pensando, a mi no me toca.

El cura Gómez primero tuvo una gran virtud, inculcó a la juventud el honor de ser obrero, pero el poder y el dinero nos desvían del camino y nos importa un pepino seguir su sabio consejo.

Hoy que me siento viejo voy cumpliendo mi destino.

Esto no es ninguna estafa me lo traje de la SAFA. Qué lástima que Rajoy haya puesto el culo en popa y dirigentes de Europa le digan por ahí te doy.

Yo que muy tonto no soy aunque poco de paleto, pido un poco de respeto y no exijo nada raro, solo que se solucione el paro siendo prioritario objeto. Hay que ser claros, conscientes a semejante dilema, la solución al problema es concienciar a las gentes, enclavijando los dientes como cosa principal, combatir el capital de la pobreza la causa, siendo constantes, sin pausa como meta e ideal.

Apretarse el cinturón exige el capitalismo y nos lleva hasta el abismo tanto banquero ladrón pues son de la condición aunque el dinero les sobre, de aprovecharse del pobre (esto es cosa muy seria), llevándolo a la miseria y dejarlo sin un cobre.

Que si al son de los mercados o por el riesgo la prima, ellos llevan a la sima al gobierno y los estados y les tienen asustados con lo de la precisión, aprovechan la ocasión para imponer su criterio, nos mandan al cementerio si no hay Revolución.

Cuando interviene la Hacienda y nos suben tanto el IVA todo va patas arriba y la cosa no se enmienda el problema recomienda que se cambie de sistema porque ante este dilema nos quedamos sin cultura y la sanidad futura como todo se nos quema.

Recortes y más recortes, lo impone la economía, ante tan loca manía se destruyen los soportes, y si faltan los soportes (paga solo el que trabaja) nos preparan la mortaja, sin dejarlo para luego yo no entro en ese juego y romperé la baraja. Han preparao una patraña agencias americanas, capitalistas, con ganas de que se hunda España.

A esta altura, no me engaña ni la prima ni su hermana del riesgo, esa fulana que solo por su codicia nos oprime, nos asfixia sin esperar a mañana.


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A LA VIDA

El verano se ha marchado, dejando un tinte otoñal, la vida sigue, transcurre, abriendo un camino más. Los amigos del pasado, se han marchado, ya no están, dejan atrás sus vivencias, que no volverán jamás. Un canto alegre a la vida, que un día se apagará, se va renovando el tiempo, y con él la soledad. Solo en el tiempo, en el alma, espero la Eternidad, no la contemplo con miedo, sólo tengo, tengo paz.

Sin saber por qué llegué, a este mundo sin piedad, fue como un canto a la vida, que la muerte sesgará. Un frío viento del norte, que no es un viento otoñal, sopla en mi alma cansada, en mi alma que se va. Vuela buscando otra vida, que no sabe donde está, vaga mi espíritu inquieto, en busca de la verdad. Canta el poeta en su obra, un canto de libertad, sueña cambiar el destino, y también la sociedad. Sigue escribiendo poemas, Y no mires nunca atrás, canta al mundo lo que piensas, y enséñanos a soñar.

Antonio Ramírez Mena

EL HIJO VOLVIÓ

En esa blanca mañana que lleva un antifaz de niebla, un alma está en tinieblas a esa hora temprana. Y es que llega abatido con sus pasos retardados, cansado y abrumado y evitando un gemido. Un día de casa marchó para el mundo conquistar, se fue sin cartera ni ajuar la juventud sólo llevó. Madre, por mi tú no llores pronto volveré al hogar, le dijo alegre al marchar pensando en volver con honores. Besó su frente dolorida agitó a lo lejos su boina, y doblando la última esquina dejó a su madre querida. Y las nieves lo azotaron el sol lo quemó en la llanura, y a aquella alma tan pura su nobleza le robaron. Pero no siente esos dolores no siente la espalda herida, sólo piensa que en su huida dejó todos sus valores. La guerra para él terminó ya se encamina a su hogar, temeroso está de llegar sabiendo el dolor que dejó. Ya divisa la torre de la ermita el pulso se ha acelerado, y a ese rudo soldado su corazón alocado palpita. Por la calle solitaria de su pueblo adormilado, camina de lado a lado rezando mudo una plegaria.

Toca la aldaba de la puerta a su madre no quiere despertar, esa puerta quisiera derribar y entonces ve que está entreabierta. Muchas noches en vela lo espera pero ella esta noche sabía, que su hijo pronto llegaría y que no moriría antes que lo viera. Y allí a su madre encontró de penas su rostro cruzado, en sus sienes cabellos plateados que tantas veces en sueños besó. ¡Ya llego madre, ya llego! ¡Ya terminó tu soledad! es mi regalo de Navidad todo el amor que te entrego. Y la madre de rodillas cayó ya sus ojos tienen otra luz, rodea su cabeza al trasluz una aureola de paz y de amor. De aquella casa se apartaron los fantasmas del pasado, se olvidó todo lo llorado y nuevas ilusiones brotaron. De pronto una estrella apareció a coro los ángeles cantarían, una hermosa y tierna melodía y todas las heridas curó. Y los bellos ángeles del cielo a la madre abrazaron, de felicidad la colmaron antes de alzar el vuelo. Fue una Navidad de resplandor para esa madre que sufrió, por el hijo que marchó buscando gloria y honor. Aquella casa se transformó en un Portal de Belén, las campanas tañen también celebrando que ya, el hijo volvió.


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5. Comunicación abierta a todos los AA.AA. de la SAFA

Amigos safistas:

Varios de nosotros venimos cambiado impresiones sobre la convocatoria para mayo de

2013 y parece que va cristalizando la idea de instituir el”día del antiguo alumno”, tanto de

Magisterio como de Profesionales. Por tanto, esta comunicación es para todos.

1) Asunto de la fecha. Fijar el segundo viernes de mayo para los años sucesivos. Así será más fácil para todos el

recordarlo y planificar con suficiente antelación.

2) Encuentros del viernes El viernes se dedicará a reunión y comida por cursos. Así podremos pasar todo el día con los que más afinidad tenemos. En esta convivencia pueden tratarse los proyectos de la

promoción propia y los comunes a todos los AA.AA. Interesa que cada curso nombre un representante que se encargue de organizar los actos del viernes (lugar de reunión, comida, alojamiento, etc.)

3) Encuentro común del sábado. Entre el grupo de representantes, con anterioridad, habrán elaborado el programa de actos para la asamblea general del sábado.

A modo de orientación se puede celebrar el cincuentenario de la promoción que corresponda, intervenciones individuales (cortas, entre cinco y diez minutos), exposición de proyectos comunes, paneles de intercomunicación (blog, web, revista), etc.

Por último, con objeto de anticipar la convocatoria de 2013 os ruego que paséis este documento a todos los conocidos y devolváis vuestras propuestas, comentarios correctores

y nombre del representante de cada curso a Paco Bordés ([email protected]) que será el representante general para el encuentro de mayo de 2013. Los más familiarizados

con Internet, podéis aportar vuestras sugerencias y datos al nuevo Blog instalado por Pepe

Aranda para este fin AASAFA. Nota: Con objeto de facilitar el trabajo a Paco Bordés y Pepe Aranda, interesa canalizar vuestras respuestas a través del representante de curso (edil como entonces). Vamos siendo muchos e interesa organizarnos.


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Manuel López Promociones 48-52

Úbeda

Antonio Molero Promociones 53-57

Linares

José Rueda López Promoción 58

Sevilla

M.Serrano Portal Promoción 59

Sevilla

Juan López Ruiz Promoción 60

Córdoba

Gabriel Martínez Promoción 61 Sevilla

Antonio Ruiz Promoción 62 Aldaia (Valencia)

Ramón Villar Promoción 63

Madrid

Alfonso Ros Promoción 64

Valencia

Promoción 65

Podéis ayudar a la búsqueda de un

representante de esta promoción.

Manuel Mora Promoción 66

Jaén

Fernando Usero Promoción 67 Sevilla

Pedro Montoro Promoción 68 Villacarrillo

Elías Gallardo Promoción 69

Huelva

José J. Aranda Promoción 70

Madrid

Casiano Nieto Comercio Úbeda

Francisco Bordés Rpte de Profesionales

Úbeda

José Mª Berzosa Rpte de Magisterio

Úbeda

Pretendemos instituir el “Día del antiguo alumno” y celebrar encuentros anuales en Úbeda. Parece

conveniente recurrir a los tradicionales ediles para organizarnos por cursos. Así que, en principio,

proponemos a los siguientes como representantes de curso o grupos para que ellos organicen el

encuentro del próximo mayo. (Los cursos de Profesionales serán coordinados por Paco Bordés y los

de Magisterio por José Mª Berzosa. ¡¡Buena y feliz gestión, dignidades!!

Feliz Navidad

amalgama nº9

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