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7/23/2019 ADIÓS AUGUSTO POLO CAMPOS...

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ADIÓS AUGUSTO POLO CAMPOS:

EL PAQUIDÉRMICO COMPOSITOR DE

CANCIONES PATRIOTERAS Y EL ÚNICO AUTOR

EN EL MUNDO QUE SE ENORGULLECE DE SU

IGNORANCIA Y MEDIOCRIDAD

* Carlos Alfonso Rodríguez

EDICIONES PROYECTO FUTUR



Augusto Polo Campos: Se está despidiendo de Lima, del Perú, de la música,

del criollismo, de la vida, de sus mujeres, de la farándula, de todos y cada uno de

sus enredos que no fueron pocos. En realidad se está quedando solo, porque

prácticamente toda su generación se ha ido de este mundo: Oscar Avilés (1924-

2014), Mario Cavagnaro (1926-1998), Luis Abelardo Núñez (1926-2005), Manuel

Acosta Ojeda (1930-2015), Juan Mosto (1936-2014), Félix Pasache (1940-1999),

Ángel Aníbal Rosado (1942-2008).

Augusto Polo Campos está despidiéndose públicamente, así fue su vida.

Actualmente tiene 85 años, pero él dice que son 86, porque suma los nueve meses

que estuvo en el vientre de su madre, acaso uno de sus escasos aciertos. También

se puede decir que se está despidiendo de los canales de televisión en donde se

movió como un pez en el agua. Es común ahora encontrarse con una entrevista

del polémico compositor. Este compositor que ha regado la historia de que su

papá de niño lo estimulaba a escribir versos y que su mamá era una aficionada a la

música, que le arrulló desde la cuna con cantos. El padre un militar nacido en Lima

y su mamá una bella dama nacida en Chiclayo, pero él nació en Puquio, Ayacucho,

el 25 de febrero de 1930. A 3,214 metros sobre el nivel del mar, pero pareciera

que él se había olvidado durante mucho tiempo de ese pequeño dato sobre su

vida, tal vez porque lo avergonzaba el hecho que se conociera: ¿Cómo el más

limeñísimo de los compositores de Lima nació en la sierra? ¿Cómo el autor de

“Limeña”, “Vieja limeña, “Limeño soy”, “Si Lima pudiera hablar” había nacido en

uno de los montes o cerros más altos de la cordillera de los andes? Pero desde

luego, cuando se volvió el cantor del Perú, el afamado y laureado compositor,

entonces recordó que por azar o por designio del destino nació en las cumbres



peruanas, en los puquios más altos, en la cima de la cordillera. Ahora sí, le

convenía decir a los cuatro vientos que era más peruano que el olluco, el maíz, la

quinua y la papa.

Autor de cantos maravillosamente memorables como “Cuando llora miguitarra” o “Regresa”, pero también de bodrios literarios como “Paquete de té” o

“Limeña” ese que dice “limeña que tienes alma de tradición, repica las

castañuelas de tu tacón, pasito a paso vas caminando”. En la nove la Conversación

en la catedral de Mario Vargas Llosa. Dice Zavalita el personaje que encarna en la

ficción: “Un nuevo vals las limeñas tenían alma de tradición. ¿Por qué cada vals

criollo sería tan, tan huevón” (después Mario Vargas Llosa lo contratará o Augusto

Polo Campos, o él se le ofrecerá para hacerle el “Himno” del movimiento Libertad).

Una de las primeras canciones escritas por Augusto Polo Campos fue “La

jarana de Colón” una fantasía musical, pues Don Cristóbal Colón nunca estuvo en

Lima bendita, ni tampoco escuchó en ésta ciudad ninguna jaranita. Pero hubo unacantante que apareció entre los años 60 y 70: Lucha Reyes, la morena de oro de la

canción criolla, que le grabó algunos valses, entre ellos el vals llamado “Regresa”

que se convirtió en un himno de los despechados, de los amantes que rompían su

historia amorosa por un viaje, por una aventura o porque se les venía en gana. Por

aquellos tiempos, también empezaba a producirse una gran inmigración de

peruanos a los Estados Unidos de Norteamérica, unos se iban para Nueva Yersey,

otros para Nueva York, San Francisco, los Ángeles, Miami, llevándose en la

memoria la voz de la negra Lucha Reyes y los versos de Polo Campos que para esos

días empezaba a ser popular: “Pero regresa para llenar el vacío que dejaste al irte,



regresa aunque sea para despedirte, no dejes que muera sin decirte adiós…” Y

Augusto Polo Campo, “Augustito”, se había encumbrado no como el mejor

compositor peruano, pero por lo menos era el más popular, el más conocido, el

más pintoso y el más visible. Un mulato de gruesos labios a quien Tulio Loza le

decía “El zambo rubio”. Augusto Polo Campos tenía la sangre caliente de la gente

del norte y la eterna zalamería limeña, mezclada con la zambería cimarrona de

abajo el puente y malambo.

Augusto Polo Campos, era como Augusto Ferrando, un líder de opinión, un

personaje público por el éxito de sus canciones, por la conquista de sus mujeres;

pero también la tribuna de la pantalla lo convirtió en un móvil de hábitos,

conductas, un modelo de “peruanidad”, en el arquetipo mediático por excelencia.

La generación de compositores de Augusto Polo Campos tiene grandes

nombres; pero para la televisión, la radio, la prensa amarilla, roja y blanca, solo

existía Augusto Polo Campos, la obra y la vida pública de Polo Campos nace demodo paralelo con la aparición de la televisión en el Perú en el año de 1958.

La gran tribuna de la televisión se convertirá en el escenario de este

polémico personaje de la cultura peruana en el siglo XX y XXI. Esa será la conexión

de un matrimonio que solo se cancelará con el espectáculo de la muerte del actor

en pleno escenario. Y él que vivió por años en ese lóbrego mundo se dice que ya

se encuentra negociando su entierro, que como todo duelo mediático suscitará

nuevos acontecimientos ceremoniales. Esa misma prensa que cuando muera (“y e

día no está lejano”, como dice un verso de Porfirio Barbajacob). Dirá: “¡Se nos fue

el más grande compositor peruano!”, “¡Murió Augusto Polo Campos!”, “¡Se nos



fue el poeta de la canción!”. No ha de extrañar a nadie que el duelo de Polo

Campos sea uno de los más fastuosos, espectaculares y pintorescos, como lo

fueron los de Lucha Reyes, Augusto Ferrando, Chacalón o Lucho Barrios.

Pero la verdad desnuda es que Augusto Polo Campos, no fue el mejorcompositor de música peruana, tal vez haya sido el autor más mediático, el más

auto promocionado, el más cortesano, el más oficial y hasta el más sinvergüenza,

porque hizo pública su relación con cantantes, bailarinas, vedets, actrices,

bataclanas de muy poco talento artístico, pero de gran mañosería política a las que

el autor de valses chauvinistas y neonacionalistas encumbró o asesoró a los más

altos curules politiqueros, más las asesorías de Augusto Polo Campos nunca fueron

gratis, sino contantes y sonantes.

Fue compositor y libretista de varios programas de televisión, en especial de

los programas humorísticos de alta sintonía, pues le escribió libretos a Augusto

Ferrando, a Tulio Loza, a Carlos Álvarez. “Los amores de Polo Campos” suman

oficialmente siete mujeres en quienes tuvo siete hijos, que quizá sean sus mejores

canciones, ha de saberse que su número cabalístico y místico era, por supuesto el

siete.



Se está despidiendo Augusto Polo Campos, pero no fue el mejor compositor

del Perú, porque no logró superar la obra de Daniel Alomías Robles, Alfonso de

Silva, Felipe Pinglo Alva, Chabuca Granda, Mario Cavagnaro, Manuel Acosta Ojeda,

Juan Mosto, Félix Pasache, Miguel Alberto Gil Mallma “El Picaflor de los Andes”,

Ernesto Sánchez Fajardo “El Jilguero del Huascarán”, Jacinto Palacios, César

Romero Martínez, Carlos Huamán, Ricardo Dolorier, Ranulfo Fuentes, Manuelcha

Prado, Walter Humala o Martina Portocarrero. ¿Quizá alguien se pregunte, pero

por qué se están mezclando papas con camote? Yo respondería que papas y

camotes forman parte del menú autoral criollo y que todos estos autores forman

parte de la música criolla, matices más o matices menos, es el folclore que nace en

las urbes de las distintas regiones o ciudades del país, es la poesía que se mezcla

en una variedad indefinida de ritmos, tonos, letras y compases. Y que mejor

ejemplo para demostrarlo que el propio Augusto Polo Campos, que nació en la

más alta cumbre.

Habrá muerto quizás el compositor más extravagante, prolífico,

exhibicionista, estrambótico y público. A propósito ha vendido su vida para una

serie de televisión: “Los amores de Polo” una ficción para el olvido y para olvidarse

de ella. Otra de sus facetas es la de gran promotor artístico; pues les vendió sus

canciones a gobiernos como los de Juan Velasco Alvarado, Francisco Morales

Bermúdez y Fernando Belaúnde. Cuenta que fue el Presidente Juan Velasco

Alvarado quien lo mandó a llamar el año de 1974, “en un tiempo en el que muchos

le ofrecían himnos y loas”—dice Polo Campos—Entonces el presidente Juan

Velazco le propuso que hiciera una canción para la selección de fútbol. Y Augusto

Polo Campos escribe la canción “Y se llama Perú”. Y se le puede creer a un



profesional de los versos o de las décimas, pero no al de las mentiras,

exageraciones y tremendismos; en todo caso créanle quienes muy mayores aún se

siguen chupando el dedo. Tengo la ligerísima sospecha que el canto mencionado

ya lo tenía entre sus archivos y se la ofreció al piurano Juan Velazco Alvarado que

cayó en el cuento como un pajarito.

Cosechando mis mares

Sembrando mi tierra

Quiero más a mi patria.

Mi nación que luchando

Rompió las cadenas de la esclavitud.

Yo también me llamó Perú.

Con P de patria

La E del ejemplo

La R del Rifle

La U de la unión

“Y se llama Perú” es una canción demagógica, patriotera, coyuntural y

oportunista, que terminó siendo bandera del gobierno de facto; pero que muchos

peruanos se la saben de memoria y de paporreta. No precisamente por la belleza

de la historia de la canción, sino porque se propalaba en prensa, radio, televisión yen cancioneros populares. De tal suerte que terminaron asumiéndola como un

emblema de nacionalismo, peruanidad y patriotería. Bien dijo Anatole France: “S

cien millones de personas creen una tontería, sigue siendo una tontería”. ¿Qué era

eso de con P de Patria? A qué patria se refería el poeta de marras; ¿o la E del



ejemplo? Acaso a la ejemplar vida de Polo Campos, Tulio Loza, Velasco o sus

ministros; ¿a la R del rifle? ¿A cuál rifle? A la del ejército, a la de Polo Campos

como policía; o es que el afamado libretista, humorista y compositor se refería al

miembro viril de los machos uniformados o no uniformados, que dicen ser tan

machos machotes machines como un cañón. Y finalmente, qué era eso de la U de

la Unión, cuando el Perú entonces era un país dividido en regiones incomunicadas

y en permanente conflicto. Es verdad que le pagaron una buena suma de dinero

por esa canción, exactamente cobró diez mil dólares en los años 70. Cuando le

dijeron por qué cobraba tanto, el autor y libretista argumentó que los presidentes

de la República también cobraban. Y él no estaba incurriendo en ninguna falta,

porque de esta manera se estaba “profesionalizando”. Pues cobraba por su

trabajo; pero la verdad, es que realizaba un trabajo de ideologización nacional, un

trabajo de adoctrinamiento regional. Y sus composiciones eran parte de esa

orquestación política, de ese sutil lavado de cerebro para hacer creer a los

habitantes del país en sus lugares más remotos, alejados y olvidados, que existíaun gobierno que se encontraba en plena gran tarea de unidad nacional; pero toda

esa maquinaria constituía solamente una hermosa ficción. Más no contento con

eso el autor Augusto Polo Campos se puso al servicio del nuevo gobierno de turno,

aquel que suplantó a Juan Velasco Alvarado, encabezado por Francisco Morales

Bermúdez Cerruti, un militar que actualmente se encuentra siendo procesado por

diversos cargos políticos durante su gobierno entre 1975-1980. Otro gran

“ejemplo” de patrioterismo que cuando ganaba la selección de fútbol agitaba a las

masas arropándose con la camiseta de la selección y confundiéndose entre



abrazos con los jugadores de fútbol. A ese gobierno le escribe otra canción

patriotera: “Contigo Perú”.

Cuando despierten mis ojos y veo

Que sigo viviendo contigo Perú

Emocionado doy gracias al cielo,

Por darme la vida contigo Perú.

Eres muy grande y lo seguirás siendo,

Pues todos estamos contigo Perú.

Sobre mi pecho llevo tus coloresY están mis amores, contigo Perú.

Unida la costa, Unida la sierra,

Unida la selva contigo Perú.

Es decir el Perú de la noche a la mañana había quedado mágicamente unido

a través de estos cantos que nuevamente se propalaron por prensa, radio y

televisión. Cumpliendo la misión de lavarle la conciencia a cientos de miles de

oyentes en todo el territorial nacional, que estaban unidos a través de una canción

escrita a sueldo por el “genio” Augusto Polo Campos. Por este tema recibió otros

diez mil dólares, aunque pidió quince mil dólares. Hasta aquí estamos

descubriendo que nunca tuvo mucho de genio; pero sí bastante de mercenario de

arte, el estado y del gobierno. Luego vendría “Esta es mi Tierra” así es mi Perú,

raza que al mundo le diera la historia viril del imperio del sol enarbolada flamea la

bandera bicolor, mientras la montaña espera quien la vaya a conquistar, el orgullo



de mi raza es la historia del Perú y quiero que este tondero con sabor a gratitud se

escuche a los cuatro vientos en el norte, centro y sur.

Sabía el autor, libretista y compositor Augusto Polo Campos, ¿Qué era el

Perú? ¿Las regiones que lo conformaban realmente? ¿Las lenguas y dialectos quese hablaban y hablan? La verdad es que no conocía ni Puquio, el lugar en el que

por azar nació, aunque en realidad nada en el mundo ocurre por azar. Nació en

Puquio porque no podía haber nacido en otro lugar que aquel que le había tocado.

Augusto Polo Campos recién conocerá Puquio a los 80 años cuando la fuente de la

inspiración se le estaba agotando lentamente. Todo indica que en esos años se

consumía, se tragaba mejor verborrea y en eso ocupó un lugar cuasi sin

precedentes, lamentablemente con algunos sucesores. Luego vino “Cuenta

conmigo Perú” para el gobierno del Arquitecto Fernando Belaúnde (1980-1985). Y

aún no estaba del todo conforme con esa veta patriotera que había iniciado en

serie, pues también creó: “El grito” es como un grito desde el fondo de mi alma

siento que me llama mi patria el Perú, te necesito quiero a todos mis hijos, a todos

unidos me grita el Perú la vida diera si por nuestra bandera hoy mismo se uniera el

norte, centro y sur. Si eres peruano, si eres mi hermano, reacciona y comprende,

no se compra ni se vende nuestro amor al Perú, la patria no es un color, la patria

no es un partido…

Otra canción de su cosecha con menos suerte que las anteriores, pues no

se difundiría como una canción parroquial de modo masivo en un plan de

masificación regional o nacional, porque no muchos intérpretes la cantaron y muy

pocos la conocieron, pero era la misma historia de las anteriores que terminaban



con el norte, centro y sur, pues porque no tenía nada nuevo que contar. ¿Pero ésta

saga de cantos patrioteros fue realmente original? Es decir se necesitaban con

urgencia, o sea, nunca antes compositor alguno había escrito siquiera uno de estos

cantos. No. Pues existe el antecedente del compositor chalaco Manuel “Chato”

Raygada Ballesteros (1904-1971) que escribió el vals: “Mi Perú”, una canción que

le nació del alma, del más profundo sentimiento personal. Manuel “Chato”

Raygada, se encontraba en Chile, en una gira artística o en una aventura artística y

se inspiró esta hermosa canción que es más bella que todas las canciones que hizo

en su tormentosa o atormentada vida don Augusto Polo Campos.

MI PERÚ

Tengo el orgullo de ser peruano y soy feliz

de haber nacido en esta hermosa tierra del Sol.

Donde el indómito inca prefiriendo morir

legó a su raza la gran herencia de su valor.

Ricas montañas, hermosas tierras,

risueñas playas ¡es mi Perú!

Fértiles tierras, cumbres nevadas,

ríos quebradas ¡es mi Perú!

Así es mi raza noble y humilde por tradición,

se ve rebelde cuando coactan su libertad,

entonces uniendo alma, mente y corazón,

rompe cadenas aunque la muerte vea llegar.



EL TRIUNFO DEL COMPOSITOR TAMBIÉN FUE EL DE SUS INTÉRPRETES.

Así llegó el triunfó el compositor de valses, marineras, tonderos y con e

soberano éxito del músico autor también vino el de sus más próximos e íntimos

intérpretes: Jesús Vásquez, Edith Barr, Oscar Avilés, Arturo “El zambo” Cavero,Lucha Reyes, Lucía de la Cruz, Eva Ayllón, Cecilia Bracamonte, Bartola.

¿Para qué han servido las canciones patrioteras de Augusto Polo Campos?

Recuerden las elecciones en el año 2001 en la cual postulaban Alan García y

Alejando Toledo, mientras que García Pérez tenía como fondo musical “Y se llama

Perú” cantada por el mastodóntico Arturo “El zambo” Cavero. Toledo contaba en

su campaña con la música, sones y compases de “Esta es mi tierra” en la versión

de Eva Ayllón. Es decir tres décadas consecutivas creyendo que esas letras

sensibleras representaban a treinta millones de peruanos. ¿Estos cantos sencillos,

en algunos casos bien intencionados han servido también para saber a ciencia



leñador”. También “El pirata” (cuya letra está basado en el poema “Mar de

sombra” del poeta peruano Luis Berninsone), que durante largas décadas se le

adjudicó la autoría a la primera guitarra nacional Oscar Avilés (1924-2014),

gozándose las regalías en vida con el permiso respectivo del gremio de autores

vigente.

El libretista, compositor y bufón, Augusto Polo Campos, había inaugurado la

canción como un producto de consumo oral gratuito, porque ya el gobierno le

había pagado por todos sus oyentes hasta su quinta y enésima generación.

Entonces aquel viejo canto que construyeron muchos antiguos poetas y músicos

populares en el callejón, en la calle, en el barrio, en la bohemia, en la quinta, en la

chacra. Terminó convertida en una arenga patriotera en el caso de los cantos

nacionalistas y en una melosa balada que satisfacía el gusto mediocre de la

burguesía nativa y de la pequeña burguesía huachafa, petulante casi por

naturaleza, pero ávida de un mensaje que envaneciera sus eternas frustraciones

amorosas, generalmente historias de corazones rotos, o de heridas que se abren y

nunca cierran. El amoroso y romántico compositor, que en la vida real era un

mujeriego crónico, incorregible, insaciable y goloso. Por esos años compone una

serie de cariñitos: “Cariño bueno”, “Cariño malo”, “Cariño bonito”, tan

sentimental, tan tierno, tan religioso y tan infiel. Uno de los máximos

representantes de toda esa cultura superficial o banal: Augusto Polo Campos, que

se vanaglorió hasta en sus últimos días de su energúmena ignorancia, incultura e

improvisación. “Cuando el presidente me encomendó una canción. Yo la hice en

tres minutos”. Un autor que dice eso es porque le dieron hasta la letra y él solo

puso la tonada. Recordemos que a Velasco Alvarado le gustaba la poesía, los



poetas, las poetisas y garabateaba de vez en cuando algunos de sus discursos. Y

para hacer una de esas letras no se necesitaba más cerebro que el de un policía o

el de un soldado.

Augusto Polo Campos, policía de investigaciones de profesión en la época deManuel Apolinario Odría (1896-1974) y Alejandro Esparza Zañartu (1901-1985)

Ministro de Gobierno, equivalente a Ministro del interior transportado y traducido

a estos tiempos. ¿Quién entonces era más corrupto, el que compraba, o aquel que

se vendía? Si el que compra es un inescrupuloso, el que se vende es un repugnante

aprovechado, porque se suponía “el mejor” compositor; pero en la práctica solo

era el más oportunista y servil de los autores locales. Hay que recordar la escena e

imagen en la que Alberto Kouri recibía dinero de Vladimiro Montesinos en el vídeo

del año 2000. ¿Quién era más culpable aquel que recibía el dinero o quien pagaba

por oscuros y nefastos servicios? Sin duda ninguna que ambas partes forman parte

de una cadena, sistema o estado de cosas, razones más que suficientes para

merecer condena presidiaria en cualquier país en el que se luche contra la

corrupción.



lista es extensa, un verdadero clásico de la canción popular peruana,

latinoamericana y universal. En Finlandia “Cuando llora mi guitarra” está

considerado el himno a la guitarra.

Sin embargo, siempre será una incógnita cómo un compositor que no tocabaningún instrumento musical, que no cantaba ni una sola nota, que nunca tuvo una

instrucción cultural por lo menos amplia o académica. Y que la verdad sea dicha es

que entonaba mal, se consideraba el mejor compositor de música en su mejor

momento. Era algo que en gran medida resultaba contraproducente. Pero, ése era

Augusto Polo Campos, el personaje pintoresco del folklore nacional, el gendarme

sacalagua de la farándula peruana, el puquiano que compuso en son de vals,

tondero, marinera, balada y cumbia, miles de tonadas.

LA HISTORIA DEL PERÚ.

La República del Perú recién nace el 28 de Julio de 1821 vía el General Don José de

San Martín, pero que se consolidó el 9 de Diciembre de 1924 en la batalla de

Ayacucho en donde los héroes fueron el General Córdova, el General La Mar, el

General Orbegoso, el General Antonio José de Sucre, a esa batalla nunca llegó el

General San Martín ni Don Simón Bolívar, quien debió estar al lado de Manuelita

Sáenz que era la reina de sus batallas nocturnas. Tanto el General San Martín y

Simón Bolívar estaban al servicio de Inglaterra y lucharon para que los ingleses se

apoderaran del poder económico, social y político de estas tierras. Por lo menos,

así fue en esta parte del continente. De esta manera, el poder militar ingresó a

tener el poder económico, político, social en cada uno de estos países del área

andina. Esas mismas luchas, batallas y cambios, en el caso del Perú se refrendan en



el Combate del 2 de Mayo en el año de 1866, cuando el gobierno de España

intenta recuperar Lima con una tripulación que ataca el puerto del Callao, en esa

batalla el héroe fue el civil José Gálvez Egúsquiza y uno de los combatientes e

escritor y periodista Ricardo Palma.

Antes había existido el poder colonial y feudal, porque España que era la

corona que gobernaba hasta el momento en que vencieron las luchas y batallas

independistas, mantuvo y conservó el sistema económico, político y social que

trajo de Europa a estos lares y territorios del “Virreinato de La Nueva Castilla” que

es como se denominó al Virreinato cuya capital era Lima, o sea que “El Virreinato

del Perú” solamente existió en los manuales y libros de la “Historia del Perú”

patrocinados por el gobierno.

Y muchos antes de todo eso existió el “Tawantinsuyo” que era un gobierno de

las cuatro regiones, pero al interior de ese mítico territorio se encontraban

antiquísimas sociedades: Nazcas, Paracas, Chimúes, Mochicas, Aymaras,Amazónicos. Hay un vals de Mario Cavagnaro, que cuenta esto : “Que viva el Perú

señores”, que tiene solo una versión, pero que ha entrado a ganar mucho terreno

en el sentimiento nacional, precisamente porque es un canto integrador. Hay que

entender que es una de las últimas composiciones de Mario Cavagnaro (Arequipa

1926-Lima 1998), un canto escrito en el otoño de su vida:

Desde que era niño aprendí a querer

a esta tierra hermosa que me vio nacer y aprendí

la historia de mi gran nación que llena de gloria nuestro corazón.



Morales Bermúdez, de Fernando Belaúnde Terry, de Alan García Pérez, de Alberto

Fujimori, de Alejandro Toledo y Ollanta Humala Tasso.

Pero la canción “Qué viva el Perú señores” también cumplió un rol en un

proceso de concientización nacional o de encubrimiento social, pues estabadecidida en convencernos que la “operación Chavín de Huantar” había sido

exitosa, correcta, necesaria y justa. Aquella operación es la que ejecutó la siniestra

dupla de los 90 Fujimori-Montesinos para arrasar con los rebeldes de la Embajada

de Japón en abril de 1997, en Lima.

LA TELEVISÓN, EL CINE Y EL TEATRO.

La televisión aparece en el Perú en 1958, quienes la hacen realidad en su

calidad de empresarios, emprendedores y dueños son la familia Delgado Parker,

como representantes del monopolio mundial de la televisión. La televisión en e

Perú mató el teatro, el cine, el circo y desplazó a la radio a un segundo lugar. A

partir de su aparición la televisión acapara toda tipo de producción creativa,

artística, musical y dramática; pero también borra la Historia del Perú, ya no

existen ni han existido: Incas, Chimúes, Nazcas, Paracas, Vicus, Aymaras,

Amazónicos, pues para el mundo de la televisión existen solo “comerciales”,

“publicidad”, ”ficción”, “raiting”, “marketing”, “tall shop”, “Telenovelas”, “Fútbol”,

“Espectáculo”, “Entretenimiento” y “Diversión”, es decir la televisión bazofia en

organización completa, con bastante respeto a la basura que es y puede ser

reciclable.



El Perú no tuvo Cine en los comienzos del siglo XX ni podía tenerlo, porque

entre las primera películas peruanas: Gallo de mi Galpón (Lima, 1838), Kukulí

(Cuzco, 1961), solo fueron bellos intentos fílmicos que se perdieron en el mar

productivo de la filmografía mexicana. México y su producción cinematográfica se

apoderó de la producción en América Latina, aunque lo más exacto es decir que

fue la industria mexicana del cine que se encontraba al servicio de los intereses

económicos e ideológicos de los Estados Unidos de Norteamérica, pues si

recordamos la doctrina Monroe que en síntesis decía “América para los

americanos”, o sea las tres Américas para los norteamericanos. Tenía como

vehículo de consumo el cine producido por la industria mexicana que se convertía

en el ideal somnífero para el resto de países del área andina, quienes padecían la

explotación de sus riquezas auríferas, petroleras, caucheras y agrícolas por los

Estados Unidos, mientras gobiernos como los de Augusto Bernardito Leguía,

avalaba las políticas del Tío Sam, emulados posteriormente por el General Luis

Miguel Sánchez Cerro, Oscar Benavides, Manuel Prado y Ugarteche, ManueApolinario Odría hasta el de los actuales días. De este modo se puede comprobar

cómo la política se convierte en un permanente puente de ideologización a través

de todos los medios de masas.

Para no dejar la falsa impresión que no me gustan las canciones que evoquen

un sentimiento nacional o regional, confesaré que una de las cantos viejos que

siempre me han gustado y aún me siguen gustado son dos cantos de Chabuca

Granda (1920-1983), mujer también nacida en las más altas cumbres andinas, para

ser más exactos en Cotabambas (4, 800 msnm.) en el departamento de Apurimac.

Isabel Granda Larco, poeta de sentimientos políticos muy conservadores. Sin



bello durmiente que sueña frente al cielo.

Hay otro canto de Chabuca Granda que complementa el anterior: “Dueño

ausente”. Y me agrada sobremanera en la versión de Carmina Cannavino, por

encima de la interpretación de la misma autora y compositora. La súbita muerte

de Chabuca atravesó mi fugaz adolescencia como un mito vivo que se desprendía

para siempre de la cotidianidad, más no de de la vida ni del tiempo. Pues, Chabuca

Granda tiene un espacio en la ciudad insoslayable, también en el país. Hay que ir a

su tierra, a su región para comprender que la leyenda de Chabuca Granda es

mucho más grande que sus versos, sus historias y sus personajes. Hay algo de

misterio y de magia en la fecha de su muerte, pues se va para la gloria y eternidad

el 8 de marzo de 1983, tal vez por eso se enclavó en la memoria de las gentes y del

público. A riesgo de ser cursi y anticuado, yo también creo que las damas y las

mujeres deben ser siempre primero.

Paisana de mis alturas

ingenua niña serrana

la de mejillas de rosa

y largas trenzas endrinas.

De tu techo colorado

Engastado a tus montañas

¿Qué ilusiones te arrancaron

bajando de esa tu altiva montaña?

Tu dueño sirve a la patria

y te dejó a tu cuidado,



su maizito y los trigales,

y la quinua ya sembrada

en su tierrita escondida

al fondo de una quebrada.

A la dulce Chabuca Granda, nunca pudo desplazarla Augusto Polo Campos,

aunque lo intentó mil veces. Sin embargo, cuando se vaya Polo Campos algún

bohemio en la soledad de la más alta noche gritará embriagado: “Pero regresa,

para llenar el vacío que dejaste al irte. Regresa aunque sea para despedirte…”

Pero ese vacío solo será físico, pues se cumplirá el viejo refrán: “a rey muerto, rey

puesto”. Deja que llene la copa de tu despedida con los momentos más gratos que

nos dio la vida. Y al momento de partir alza tu copa, porque te voy decir con la voz

rota: Adiós Augusto, le pido al cielo que te bendiga.



*CARLOS A LFONSO RODRÍGUEZ:

Nació en Lima-Perú. Estudió primaria en la escuela Enrique Guzmán y Valle de Lince. Y la

secundaria en la Institución Educativa José Baquíjano y Carrillo, también de Lince. Egresó de la

Facultad de Comunicación, Turismo y Psicología de la Universidad San Martín de Porres, en Jesús

María. Estudió programación de radio, televisión, relaciones humanas y expresión verbal en el

Instituto Superior La Palabra de Carlos Quintero Arroyave, en Medellín-Colombia. Ha participado en

talleres de periodismo avanzado y científico en el Centro Internacional de Estudios Superiores para

América Latina (CIESPAL), en Quito-Ecuador.

En los años 90 fue uno de los fundadores del grupo literario “Gaviota”, “Obraje” y “Aedosmil”,

que se reunían en la cafetería de la A.N.E.A (Asociación Nacional de Escritores y Artistas). Fue

asesor literario, cultural y ejecutivo de varias editoriales entre ellas: Dolorier, Navarrete, Cultura

Peruana y Temática Editores.

Ha ejercido el periodismo radial, escrito y virtual en Perú. Es colaborador permanente de las

revistas: Fastos (Lima-Perú). Defensa de la palabra, Unión de Voces, Arquitrave, Babel y el periódico

Literario El Gaviero de Colombia.

Ha publicado los siguientes libros de poemas: “Cantos a la vida” (1988,1990); “Chocho, e

buen amigo de los niños” (1992, 1993); “El grito, poemas de una generación” (1994); “Diez poemas

de amor para mayores y menores de 12 años” (1998); “Poemas Públicos” (2005); “Un puerto en el

Paraíso, motivos para cantar y otras breves historias” (2008, 2010, 2012). Autor del Libro de

Comunicación Social: “Hable en público” (Medellín, 2006).

Primer Puesto con el poema “Mi madre, mi vida” en el Distrito de Lince (1985). Primer Puesto en el

Concurso Periodístico El rol del Comunicador Social para el advenimiento del siglo XXI con e

Ensayo: “El Comunicador debe alentar más diálogo y menos gritos” (1998); Primer puesto en el VIIConcurso Literario “Los Sueños de Luciano Pulgar” con el Ensayo “La rebelión de los lectores”

(2005); Primer puesto en el género de Poesía en el XII Concurso literario “Los Sueños de Luciano

Pulgar” (2009). Actualmente reside en Medellín-Colombia.

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