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Tratamiento La Piquer. 1.- TEATRO HUELVA Rótulo: Isla Cristina, Huelva, 13 de Enero de 1958. El telón se abre y Concha Piquer comienza a cantar “Tatuaje”, el maestro Posadas, dirige en el foso a la pequeña orquesta, el público escucha y alguno hasta tararea silencioso la conocida canción. Su hermana Anitín, más joven que ella, observa muy atenta la actuación, un empleado del teatro se acerca hasta ella, le susurra algo al oído y Anitín, a regañadientes, se aleja del escenario. Llega hasta el pasillo que comunica los camerinos, coge el teléfono y habla “Si Antonio, ya esta acabando, se lo diré… no te preocupes, luego te veo en el hotel, adiós” Anitín pasa por los camerinos abiertos, todos están escuchando la canción en silencio, parece que el tiempo se ha detenido, el corrillo de las 1

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Tratamiento

La Piquer.1.- TEATRO HUELVA

Rótulo: Isla Cristina, Huelva, 13 de Enero de 1958.

El telón se abre y Concha Piquer comienza a cantar “Tatuaje”, el maestro Posadas, dirige en el foso a la pequeña orquesta, el público escucha y alguno hasta tararea silencioso la conocida canción. Su hermana Anitín, más joven que ella, observa muy atenta la actuación, un empleado del teatro se acerca hasta ella, le susurra algo al oído y Anitín, a regañadientes, se aleja del escenario. Llega hasta el pasillo que comunica los camerinos, coge el teléfono y habla “Si Antonio, ya esta acabando, se lo diré… no te preocupes, luego te veo en el hotel, adiós” Anitín pasa por los camerinos abiertos, todos están escuchando la canción en silencio, parece que el tiempo se ha detenido, el corrillo de las bailarinas, la sastra, el regidor, los tramoyistas, Anitín, según se acerca de nuevo al escenario, observa aquel ambiente que la rodea.

Volvemos con Conchita Piquer terminando la canción, el público aplaude entusiasmado, levantándose de sus asientos, en Concha hay agradecimiento, pero un leve gesto de preocupación y tristeza asoma en sus ojos, Anitín se percata de ello inmediatamente, cuando Concha sale del escenario cruza una mirada con su hermana, algo sucede pero no sabe que es.

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2.- TEATRO HUELVA CAMERINOS PASILLO

Concha se cuela en el camerino y cierra, Anitín va a entrar pero, sorprendida, se encuentra con que la puerta esta cerrada, extrañada llama; “Concha has cerrado la puerta sin darte cuenta, abre” pero Concha no responde. Dentro Concha esta mirándose al espejo, inquieta, nerviosa, siguen golpeando la puerta. ¿Hermana te pasa algo? ¡Concha abre por favor!

3.- CALLES VALENCIA 1916

Una Concha, niña adolescente temprana, corre nerviosa, sudorosa, inquieta, hacia un lugar que no sabemos, pasa por un reloj que marca una hora que ella mira aún más nerviosa para, al límite de sus fuerzas, seguir corriendo.

4.- TEATRO HUELVA-CAMERINO

Volvemos al presente. Concha sorda a las súplicas desde detrás de la puerta de la hermana, mira una fotografía donde se le ve a ella, a Ramona, su madre, a Carmen su otra hermana y a Anitín, mucho más jóvenes, Concha tenía en esa imagen menos de catorce años, la misma que en el recuerdo que acabamos de recrear. La cantante contempla la fotografía unos segundos más.

5.- TEATRO COLEGIO

Conchi, la niña adolescente, acaba de aparecer con la respiración entre cortada, al límite, sudorosa y pidiendo disculpas a dos monjas que cruzan una mirada de desconcierto pero al final una de las religiosas sale al escenario para anunciar la próxima actuación de una sus alumnas, que tiene una voz privilegiada y una manera de sentir la música muy especial, a Conchi aún le cuesta respirar, la gente aplaude para provocar la salida de Conchi, la cría recibe la sonrisa de la madre superiora dándole ánimos, Conchi se retoca el pelo, la camisa y sale al centro del escenario. El teatro está lleno de compañeros, de padres, de gente, la monja que la ha presentado esta ahora frente al piano y mira a Conchi para ponerse de acuerdo con ella y empezar al unísono.

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Conchi mira el escenario, a la gente, se hace el silencio, todos esperan que empiece, pero Conchi no parece encontrarse bien, la monja nerviosa de no recibir la mirada cómplice de la niña para empezar, arranca por su cuenta, la cría se mantiene callada, inmóvil, muda. No sabemos si arrancará a cantar o no.

6.- TEATRO HUELVA

Los golpes sobre la puerta rompen el ensimismado estado de Concha que, tranquila, se incorpora, acercándose hasta la puerta, abre, detrás esta Anitín y numerosos empleados de la compañía. “Por favor que toda la compañía se reúna en el escenario en cinco minutos, tengo que hablar con todos” Anuncia Concha Piquer.

El regidor sale raudo a obedecer las órdenes de la estrella, Anitín queda con ella, a solas, quiere saber qué le sucede, Concha mira la fotografía y pregunta a la hermana si se acuerda del día que la hicieron, Anitín niega con la cabeza, ella le dice que fue su madre quien pidió hacer esa fotografía justo antes de marchar a América, la madre quiso llevarse a Nueva York una fotografía de todas ellas juntas;- tenía miedo que se le olvidaran vuestras caras, ella tenía miedo de eso, y yo no tenía miedo de nada, ni de América, ni del viaje, ni del idioma, ni de la lejanía… era una maravillosa inconsciente, y ahora que lo tengo todo, sin embargo tengo miedo de muchas cosas, del fracaso, del olvido, de que no me quieran- La hermana quiere saber por qué dice esas cosas ahora, el regidor aparece para informar a Concha que toda la compañía esta esperándola en el escenario. Las dos hermanas dejan de hablar, Concha sale.

7.-TEATRO HUELVA- PASILLOS ESCENARIO

Concha atraviesa el pasillo que ramifica las diferentes dependencias del teatro, Concha mira hacia atrás, donde no hay nadie, solo un pasillo ahora vacío, del mismo le llega el sonido de la voz de una niña que tararea una canción, mientras se oye un rumor de chicas hablando y riendo en inglés, le llega otro sonido; ¡¿Conchita Piquer, quien narices es Conchita Piquer?! Concha mira un camerino vacío, allí, en un rincón, rodeada de bailarinas que cacarean alegres y nerviosas, alza el brazo una niña tímida y temerosa vestida de primera comunión para dejar escapar un bajo y leve “Yo”.

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Concha llega por fin al escenario, hay un silencio sepulcral, todos de píe miran expectantes y nerviosos a Concha Piquer, ella deja unos segundos de espera antes de hablar; “ Hoy han escuchado ustedes por última vez a Conchita Piquer” La extrañeza, la sorpresa y la perplejidad se adueñan del escenario, Anitín arquea las cejas confusa. Concha mira al patio de butacas, allí hay una niña, ella, con trece años mirándola, sonriente, la Concha mayor parece devolverle también la sonrisa, pero con cierto halo de amargura.

8.- BENICALAP, VALENCIA 1916.

Rótulo: Benicalap-Valencia 1916

En esos días Benicalap es un pueblo alejado del centro de Valencia, salpicado de pequeñas casas con sus huertas, al otro lado del Turia y al que atraviesa el tranvía, poblado de gente humilde. Por una de sus calles un grupo camina lento, es una familia vestida de negro, una madre, Ramona, y tres niñas, una de once años, Conchi,- Concha Piquer,- y las otras más chicas, Anitin y la pequeña, Carmen. La mujer apenada, arrastra a los crías junto a ella, también ellas acompañan en sus rostros a la madre en el dolor, alguna mujer se le acerca y hace un gesto de condolencia a la familia, ese gesto se sucede en un par de ocasiones más mientras el grupo familiar avanza hacia su sencilla casa, el último vecino en saludarlos, ya en la misma puerta, da el pésame a la madre, recordando lo buen hombre que era Pascual, padre y esposo. Las crías escuchan calladas y entran.

9.- CASA DE LA FAMILIA. BENICALAP.

La mujer deja la ropa de abrigo sobre una silla, las niñas imitan los gestos de la madre, ella se queda mirando una fotografía en blanco y negro del esposo y ella vestidos de novios, de épocas más felices. La madre quiere mostrarse entera ante sus hijas y les pide que se desvistan y ordenen sus cosas, la más pequeña tiene hambre y lo dice, la madre preocupada abre la despensa, no hay casi nada, mira en una oxidada caja de latón que tiene sobre un poyete y la abre, en su interior hay unas escasas monedas, con cierta angustia le da a Conchi una y le pide que vaya a comprar algo de pan, unas patatas y que le diga al tendero que si no le llega con la moneda, que mañana se lo paga. La niña agarra el dinero y sale. La madre ve la estampa de sus hijos mirándola y ella que les enseña una sonrisa nada convincente.

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10.- CALLES BENICALAP.

Ya en la calle, Conchi se dispone a hacer el recado de su madre, a los pocos metros de alejarse de la puerta, la hermana más pequeña, (6 años)se acerca hasta ella y le pide que traiga también membrillo, Conchi pone cara de que el dinero que lleva encima no da para tanto y que, además, la madre ha dicho bien claro lo que necesitan, la cría no se da por convencida e insiste, la hermana sigue su camino dejando a la hermana triste y nada segura que Conchi vuelva con su deseado membrillo.

11.- TIENDA VICENTE- BENICALAP.

Conchi entra a la tienda de,- Vicente, ultramarinos- una mujer esta comprando varias cosas y la niña espera, el dueño deja de atender un momento a la mujer y mira a la pequeña,- Siento lo de tu padre niña. Gracias,- responde con educación la cría- que pide su pan, sus patatas y también un trozo de membrillo. El hombre, Vicente, mira con cierta desconfianza a Conchi, le prepara todo y se lo da, la niña le paga con la moneda y el tendero mira el dinero, ¿Y esto? Conchi alza los hombros para después decirle al tendero que su madre le pagará el resto mañana, pero el tendero le deja claro que ya deben muchas cosas y que no puede ampliar el crédito, la mujer que estaba pendiente de ser atendida en la tienda, le pide al tendero un poco de caridad, a la niña se le acaba de morir el padre, Vicente se afianza aun más en sus razones para no dar crédito alguno, si el padre que era el que traía la mayoría del dinero a la casa y ya no está, quien le va a garantizar a él que le van a pagar lo que deben. El tipo se hace con las patatas y con el membrillo, esto último se resiste Conchi a devolvérselo, pero al final la fuerza del tendero puede más y se lo acaba quitando, Conchi sale de la tienda solo con el pan.

12.- CALLES BENICALAP.

Su hermana al verla venir, sale de la casa desde muy lejos, convencida de que Conchi trae consigo el preciado membrillo, enfadada con la situación y con ella misma, tiene palabras ásperas con su hermana que acaba sollozando al oír a su hermana y al comprobar que su membrillo no está.

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13.- CASA FAMILIAR. BENICALAP.

Todos comen alrededor de la mesa, el pan y una sopa donde no flota más que un agua manchada en algo de aceite y grasa, poco más. La madre, al ver el rostro de sus hijos, les anima diciéndoles que cuando cobre los pespuntes y reformas que le ha hecho al traje de los Cunis les va a hacer una tortilla de papas repleta de huevos. La más pequeña pregunta que cuando será eso, que si no podía ser la comida para la cena de esa noche.

Por la noche todos duermen, la pequeña tose y Conchi le arropa, todos los niños en la misma cama, la madre en otra pero en la misma habitación, el lecho de la madre está vacío, junto al hogar la mujer se ha quedado dormida en la silla cosiendo un traje, Conchi la observa unos segundos, mira por la ventana, la luna llena cuelga luminosa en el cielo. Sin hacer demasiado ruido, se pone una rebeca encima, se ata sus gastados zapatos y abre la puerta. Nadie se da cuenta que ha salido de la casa.

14.- BENICALAP- HUERTA VECINO.

En una de las muchas huertas que salpican la zona, Conchi se cuela sigilosa, cercadas para evitar los robos, la niña, diestra, por lo que se ve no es la primera vez, consigue entrar. Con un mandil que se ha traído de su casa, comienza a hacerse con los tomates de varias matas, algunas patatas, berenjenas, espinacas, lechugas, agarra todo lo que puede y cabe en su mandil, cuando esta a punto de abandonar el huerto, la luz de la casa se enciende abriéndose la puerta, Conchi se queda a centímetros de la puerta, sin poder moverse, si el hombre cruza el umbral de la misma la descubriría, el tipo, de rudo aspecto, mira desconfiado a su huerto, no descubre nada que le haga salir de la casa y vuelve a cerrar para tranquilidad de la cría. Con el mismo sigilo que entró sale ahora de la hacienda. Anda rápido por la calle desierta, evitando ser vista, con la respiración acelerada, llega hasta su casa y entra por la ventana que dejó abierta, las hortalizas robadas se le caen todas al suelo, la madre mueve la cabeza, pareciera que fuera a despertar, pero el cansancio puede con ella y cabecea somnolienta sobre la silla sin abrir los ojos.

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15.- COLEGIO MONJAS BENICALAP.

En el colegio, regido por unas monjas, entra en la clase la madre superiora, les explica a las crías que están organizando, para festejar a la patrona del centro, un sencillo espectáculo donde cantaran y representaran momentos de la vida de la Santa. Conchi parece encantada con la idea, las demás niñas se muestran también entusiastas, una de las hermanas seleccionara aquellas que mejor canten e interpreten.

16.-CALLES BENICALAP.

Conchi camina de vuelta a su casa, le siguen sus hermanos y hermanas, al pasar junto a la tienda de ultramarinos Vicente, en la pared de la misma, hay varias palabras escritas con pintura negra, el tendero, claramente enfadado, habla con otro tipo que mira confuso las letras que llenan la fachada del establecimiento, Vicente pide a éste que le lea lo que dicen, el otro le responde que no sabe leer, el tendero le replica que siempre ha ido presumiendo por el barrio de que sabía leer y ahora resulta que no sabe, el tipo analfabeto lo único que se atreve a decirle al enfadado tendero es que signifiquen lo que signifiquen aquellas palabras, seguro que no son nada bueno; VICENTE ERES RATA Y “MISERAVLE”, es lo que esta escrito en la pared, el tendero mira con cara de sospecha al grupo de niñas y sobre todo a Conchi, pero ésta pasa ante él sin desviar su mirada, las hermanas sin embargo, si miran al tendero algo asustados.

17.- CASA FAMILIAR. BENICALAP.

En la casa la madre esta cosiendo al lado del pobre fuego, ayudándose con una tijera de donde cuelga un pequeño lazo rojo, la hermana juega con un palo que simula ser a una espada, la otra hermana intenta quitarse de en medio a la pequeña, de gustos más masculinos en sus juego que la más mayor, que está intentado cuidar a una muñeca de trapo bastante deteriorada. Conchi está cantando mientras hace la cama donde duermen todos, la única habitación junto al comedor que hay en la casa. La madre por un momento deja de coser y sonríe al oírla cantar, la cría es evidente que tiene talento para el cante.

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Ramona la llama a su lado, le dice que en la representación del colegio será la mejor, que todos la aplaudirán a rabiar, Conchi parece encantada con los ánimos de la madre. Al fondo oímos la tos de la pequeña que se muestra muy presente en la conversación entre la madre y la hija.

18.- TEATRO COLEGIO- BENICALAP

Concha escucha a una niña que está terminando de cantar, las monjas, sentadas en el patio de butacas, la felicitan. Otra monja toca un rudimentario piano a un lado del escenario que acompaña a las niñas en los ensayos. Una de las monjas pide a Concha que se acerque al centro del escenario, ella camina lentamente, una leve sonrisa aparece en su rostro, le hace gracia el lugar donde se encuentra, lo que su vista contempla desde ese privilegiado lugar, durante unos segundos Concha pierde la noción del tiempo, mira a su alrededor; las sillas, los focos, la madera que pisa, una de las monjas le ha de llamar la atención para que vuelva a la realidad, le dice que canción va a cantar, y Conchi comienza a cantar una canción popular de la época, se va animando según avanza acompañándola con sentidos gestos, interpretando lo que canta, las monjas parecen encantadas con lo que escuchan y ven.

19.- CALLES. BENICALAP.

La cría se muestra plenamente feliz, corre hacia su casa para compartir su alegría con el resto de la familia. El tipo de la huerta se cruza con ella y la mira con desconfianza, Conchi, al encontrarse con el hortelano, le sonríe simulando perfectamente.

20.- FACHADA CASA FAMILIAR. BENICALAP.

Conchi está frente a la fachada de una casa abandonada donde está pegado un cartel del teatro Sogueros de Valencia y donde se anuncia un espectáculo de cante y danza. Lo contempla muy interesada, pensativa, permanece frente al cartel unos segundos para después dirigirse al encuentro de sus dos hermanas que están correteando en la acera de la calle, junto a la casa, ella entra feliz en la vivienda.

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21.- CASA FAMILIAR. BENICALAP.

Conchi entra con la alegría de pensar en el próximo espectáculo en el colegio, pero su optimismo choca con la de la madre que está llorando sola, tiene en su regazo un vestido a medio hacer, cuando la madre descubre a Conchi evita seguir llorando, Conchi pregunta si sucede algo, la madre responde que echa de menos a su marido, al padre y que no tienen casi dinero para subsistir, que a pesar de que se tira cosiendo casi todo el día, no les llega, y eso le angustia. Conchi no sabe muy bien qué decir, intenta calmar a la madre diciéndole que ella hará lo que sea pero que no pasen apuros económicos.- Si eres una chiquilla, qué vas a poder hacer tu,- remata con angustia Ramona.

Esa noche Conchi, es la única de las tres hermanas que permanece despierta, hay algo que imagina que la hace sonreír, ser feliz.

22.- TEATRO COLEGIO. BENICALAP.

Conchi canta feliz ante multitud de niñas y padres, acompañada al piano por la monja que ya conocemos, acaba la canción y todos aplauden entusiasmados, todos se levantan para mostrar un fervoroso entusiasmo, ella saluda encantada. La tos de la hermana interrumpe la grata visión de Conchi.

23.- CASA FAMILIAR. BENICALAP.

Esa imagen solo esta en la imaginación de Conchi, la tos de su hermana le ha devuelto a la realidad, la pequeña se despierta y abre los ojos, encontrándose con el rostro de Conchi que la mira, al despertar solo dice una frase; “Tengo hambre”

24.- BENICALAP- HUERTA VECINO.

Esta amaneciendo, Conchi se cuela en el huerto con la misma habilidad que la última vez, vuelve a meter todas las hortalizas que puede en su mandil.

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25.- BENICALAP. CASA FAMILIAR.

Alguien aporrea la puerta de la casa, la madre se incorpora asustada de la cama, las más pequeñas hacen lo mismo, Ramona se coloca una rebeca sobre sus hombros, la puerta la siguen aporreando aún con más fuerza, la madre abre alarmada, tras la misma esta Conchi agarrada por la oreja del propietario de la huerta, la cría se queja y llora del dolor que le produce el castigo, el hombre le dice a Ramona que ha pillado a su hija robándole en el huerto y que no es la primera vez, que es una ladrona y que merece un buen castigo, que si no, la denunciará a los civiles, Ramona se enfada con Conchi y le dice al hombre que su hija no es ninguna ladrona, que es la necesidad, el hombre echa entonces la culpa a la madre, sugiriendo que quizá sea la madre la que este provocando a sus hijas a ser unas delincuentes y que si eso llega a oídos de la autoridad igual se queda sin las crías, Ramona al oír aquello cambia de actitud y abandona el enfrentamiento con el hombre, le promete que trabajará todo el día para pagarle las hortalizas que su hija haya robado, que se lo jura por su difunto marido, el hombre queda satisfecho con la promesa de que en los próximos días recibirá algo de dinero por los hurtos sufridos en su huerta, además le promete Ramona que tendrá encerrada a su hija durante un mes sin salir, solo al colegio. El tipo, con la promesa del dinero y el castigo, se va más tranquilo. Ramona, ya a solas con su hija, le echa una buena bronca y le advierte que no saldrá a la calle en todo el mes, Conchi dice que eso no puede ser, que hoy es el concierto del colegio, que le aplique el castigo a partir de mañana, que tiene que actuar, que es su gran día, la madre se muestra severa y contundente, no saldrá.

26.- TEATRO COLEGIO. BENICALAP.

Unas niñas interpretan una especie de retablo de la santa del Colegio, las monjas miran inquietas el reloj, se preguntan dónde estará Conchita, la niña, que es la que mejor canta y la que va a poner la guinda en la actuación del centro, pero la niña no llega y ya, en nada, le toca salir.

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27.- BENICALAP- CASA FAMILIAR.

Conchi llora desconsolada, sus deseos se han visto rotos. La madre, desde su silla, y mientras da unos pespuntes a un vestido, la mira de reojo, parece arrepentida por el castigo. – Todavía te da tiempo,- Conchi cambia el gesto, pasa de la pena a la alegría y los nervios en solo un segundo.- Venga, date prisa, a qué esperas-, le anima la madre.

La cría no tarda nada en colocarse una camisa, secarse las lágrimas y salir por la puerta, vuelve para besar a la madre fugazmente, ésta le advierte que vaya al colegio dando un rodeo y que ni se le ocurra pasar delante de la huerta de Manuel, el tipo al que le ha robado, si te ve que no estás castigadas es capaz de llamar a los civiles, ella promete que así hará, y rauda sale pitando al colegio, al teatro. La madre sonríe al verla salir.

28.- TEATRO COLEGIO. BENICALAP

Las monjas ya dan por hecho que Conchi no se va a presentar, extrañadas por la ausencia, creían que a la niña le hacía mucha ilusión actuar y, además, ellas piensan que era, con diferencia, la mejor. Están actuando ya los últimos niños, después de éstos acabará el espectáculo.

29.- BENICALAP. CALLES.

Conchi corre con todas su ganas, está al límite de sus fuerzas, pero sigue corriendo. Es la misma imagen que hemos visto antes en la sec. 3

30.- TEATRO COLEGIO. BENICALAP

Los niños terminan su actuación, el público aplaude, la monja, la superiora, le ordena a la del piano que anuncie el final del espectáculo, la hermana que toca el piano le pide unos minutos más, la gente debe ver a Conchi cantar, está segura que será un éxito, la superiora dice que ya no puede esperar más, que salga y que se despida de todos agradeciéndoles su presencia, cuando la monja ya se dirige al escenario, Conchi acaba de aparecer con la respiración entre cortada, al límite, sudorosa y pidiendo disculpas. Las dos monjas cruzan una mirada de desconcierto pero al final la monja del piano sale al escenario para anunciar la próxima actuación de una de las alumnas, que tiene una voz

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privilegiada y una manera de sentir la música muy especial, a Conchi aún le cuesta respirar, la gente aplaude para provocar la salida de Conchi, la cría recibe la sonrisa de la madre superiora dándole ánimos, Conchi se retoca el pelo, la camisa y sale al centro del escenario, esta vez es la realidad y no una ensoñación. El teatro está lleno de compañeros, de padres, de gente, la monja se coloca frente al piano y mira a Conchi para ponerse de acuerdo con ella y empezar al unísono.

Conchi mira el escenario, a la gente, se hace el silencio, todos esperan que empiece, pero Conchi no parece encontrarse bien, la monja nerviosa de no recibir la mirada cómplice de la niña para empezar, arranca por su cuenta, la cría se mantiene callada, inmóvil, muda. La monja interrumpe las primeras notas, llama a la pequeña, pero Conchi sigue sin decir nada, la hermana vuelve a empezar pero la cría no acaba de reaccionar, no abre la boca, angustiada, se repite el mismo momento de la sec. 5.

Las primeras bromas y risas empiezan a sentirse por el patio de butacas, las niñas van a más con sus pitos, la superiora anima a la hermana música a que vuelva a intentarlo con el piano, pero Conchi se resiste, se ha quedado bloqueada, las chuflas de sus compañeras estallan ahora en risas y pitidos, Conchi no sabe muy bien qué hacer y sale del escenario con lágrimas en los ojos, seguidos por la mirada de las dos monjas.

31.- BENICALAP- CALLES.

Conchi atraviesa las calles de Benicalap llorando, sin darse cuenta que pasa junto a la casa del hortelano al que robó, éste que trabajaba en la huerta, al verla pasar, indignado, deja la azada en el suelo.

32.- ORILLAS DEL RIO TURIA.

A orillas del río, Conchi más tranquila, sentada, permanece pensativa, contemplando el agua pasar ante ella.

33.- FACHADA CASA FAMILIAR BENICALAP

Ante la casa de Ramona se presenta el hortelano y una pareja de guardias civiles. Ramona, asustada, los deja entrar.

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34.- BENICALAP. CASA FAMILIAR.

Cuando Conchi antes de atravesar la puerta de su casa, queriendo mostrarse feliz, cambia , aunque le cuesta, el rostro de tristeza por otro de felicidad, abre la puerta y la cara de júbilo se le trasforma al ver a los dos agentes, a su madre y al hortelano, y a su dos hermanas en un rincón con cara de susto. El guardia civil mira a la madre, que no hace nada: ¿Se la doy yo o se la da usted? Pregunta el civil a Ramona que ahora reacciona y, ante la sorpresa de Conchita, le arrea dos bofetadas tremendas, violentas, secas, duras, Ramona mira al guardia y el guardia al hortelano, el tipo, no muy convencido remata; ¡Un par de ellas así todos los días y verá el bien que le hacen, coño, es que no hay autoridad!

El agente deja salir al permanentemente indignado vecino, y deja claro a Ramona que la próxima vez se quedará sin sus hijas, y que sea consciente que a partir de ahora la pareja de civiles no les perderá ojo. Se cierra la puerta, Ramona mira a su hija, aún impresionada y dolida por las bofetadas, y le da otras dos más, ante la sorpresa de las otras crías y de la propia Conchita; “No voy a dejar que me separen de vosotras, te enteras, no lo voy a dejar aunque te tenga que moler a palos todos los días. Y ahora a la cama”

Cuando todas duermen, la madre se acerca hasta donde duerme su hija mayor, la arropa llorando y besándola en la frente, creyéndola dormida, cuando Ramona se separa de Conchita, nos damos cuenta que la cría esta despierta.

35. CASA FAMILIAR BENICALAP

A la mañana siguiente, a la hora de hacer el desayuno, la madre, mientras las niñas se visten, intenta hacer milagros con lo poco que tiene, el poco pan que le queda lo divide en tres, la ceremonia de ahorro la ve Conchi sin que su madre se dé cuenta.

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36.- BENICALAP- CALLES.

Las niñas salen a la calle camino del colegio, cuando se alejan unos metros de la casa familiar, Conchi le dice a Anitin que vayan ellas solas al colegio y le digan a las monjas que ella esta mala y que no ha podido ir, Anitin replica que a eso se le llama mentir y que es pecado, y que van a volver a venir los civiles, Conchi le dice que es un pecado pequeño, que tiene que hacer algo importante y que no puede ir hoy al colegio, Anitin a regañadientes y viendo que Conchi no va a dar su brazo a torcer, se lleva a la pequeña con ella y siguen camino del colegio, mientras Conchi se encamina en dirección contraria.

37.- PUENTE RÍO TURIA

Conchi cruza el puente del río Turia adentrándose en la ciudad de Valencia.

38.- FACHADA TEATRO SOGUEROS-VALENCIA.

Conchi mira la fachada del teatro Sogueros, está nerviosa, quiere entrar y ve que la puerta principal está cerrada a esas horas de la mañana, lo intenta de nuevo pero es evidente que no puede hacer nada, parece decepcionada, sin embargo se da cuenta que alguno de los artistas, que por su aspecto y manera de hablar se les identifica, se cuelan por una puerta que hay a un lado de la fachada, Conchi no duda ni dos segundos en seguir ese camino, sin embargo cuando va a cruzarla, un empleado del teatro, el encargado de velar por la entrada, la para preguntándole a donde piensa que va, ella muy convencida dice que tiene que hablar con el empresario, que viene a pedirle trabajo, el tipo se ríe de las pretensiones de la niña y la saca para fuera, pero Conchi no es una niña cualquiera y vuelve a entrar, y a exigir que hasta que no hable con el empresario no se moverá de allí y que si la echa volverá a entrar una y otra vez, el tipo comienza a desesperarse y a no saber cómo tratar a esa niña, al final acaba gritándole, tanto, que un tipo grande, que llega del corazón del teatro, viene a interesarse enfadado sobre lo qué esta pasando, los ensayos se han interrumpido por culpa de las voces, el empleado pide disculpas, y le explica lo que sucede, al final el empresario mira con curiosidad a la niña y le pide que pase, para enfado del portero. Conchi está de nuevo en un escenario, el empresario le dice que hay tiene el escenario, todo suyo, que cante y haga lo que ha venido a hacer, pero qué se

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dé prisa que no tiene todo el día. Conchi mira el teatro, este si es un teatro de verdad, grande, elegante, se queda sola, por unos segundos no sabemos si a Conchi le va a pasar lo mismo que la última vez y se va a quedar muda, silenciosa, parada, bloqueada. Soguero espera, cuando parece haber perdido la paciencia y va a decirle a Conchi que se largue, la niña comienza a cantar, y lo hace bien, y se mueve bien y comunica bien, el empresario encandilado le gusta lo que ve, el portero, atraído por la voz, se acaba también acercando a ver quién es y a descubrir que no es otra que la cría que antes discutía con él.

La actuación acaba, Conchi está nerviosa, pendiente de la reacción de Soguero, éste se acerca hasta la cría, la mira serio preguntándole su nombre, la niña responde inquieta que Conchita Piquer, el hombre por fin sonríe felicitándola, diciéndole que venga el domingo que viene, que le dejará cantar una canción entre dos números, la niña no termina de sentirse satisfecha, no se mueve, Soguero pregunta si necesita algo más, ella pregunta que qué traje le van a dar para actuar, el empresario le responde que no tiene trajes de su talla, que traiga ella uno bonito y ya está, cuando Soguero cree que la conversación ha terminado, la niña permanece aún en el sitio, le pregunta cuánto piensa pagarle, el empresario serio, pero agradablemente sorprendido, le responde que un duro por cada actuación, a Conchi se le ilumina la cara y sale pitando sin decir adiós.

39.- BENICALAP, CASA FAMILIAR.

Las tres niñas hablan en la cama, mientras la madre trajina en la cocina con los cacharros, están ya para dormirse. Anitin le pregunta a Conchi donde ha estado, pero Conchi le responde que es un secreto, que no puede decirlo todavía, Anitin reclama saber el secreto, es su hermana, si no se lo dice le dirá a la madre que ha hecho novillos, que no ha ido al colegio, que ha mentido y que está en pecado mortal. Conchi le calla la boca diciéndole que si no le pregunta más el domingo que viene le dará medio kilo de membrillo para ella sola, la sabrosa oferta hace reaccionar a la cría que deja de preguntar más pero quiere confirmar si es de verdad lo del membrillo, Conchi le promete que si mantiene la boca callada se lo traerá.

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40.- TEATRO SOGUERO VALENCIA

Conchita vestida impecable para su actuación en el teatro, todo el público espera que comience a cantar, el empresario a un lado del escenario la anima a hacerlo, cada vez más enfadado, pero ella mira a unos y aotro muda, silenciosa, la imagen se ralentiza, ve como el público se levanta para reírse y lanzarle todo tipo de objetos, el impoluto y blanco traje se llena de manchas de los muchos objetos que caen sobre su rostro, ella quieta comienza a cantar, insiste pero ya no hay nada qué hacer, el público ha desatado su irá y su crueldad y han arrojado sobre ella todo tipo de insultos , bromas y objetos, el empresario la agarra violentamente del brazo sacándola del escenario mientras ella canta y canta sin ser oída… La ensoñación acaba bruscamente.

41.- CASA FAMILIAR BENICALAP

La cría se despierta medio sudando y resoplando con ansiedad, la pesadilla le ha roto el sueño. Mira a sus hermanas dormir plácidamente y a su madre también, dormir tranquila, intenta calmarse y recuperar la calma.

42. CASA FAMILIAR BENICALAP

A la mañana siguiente, domingo, la madre mete varios trajes en una bolsa y le pide a Conchi que cuide de sus hermanas, tiene que irse a Valencia y estar todo el día fuera haciendo arreglos para una novia, les ha dejado un caldo calentándose en el fuego. En cuanto la madre se va, Conchi, rauda, abre un armario donde está envuelto como si fuera un valioso cuadro, su traje de primera comunión, las otras dos hermanas, cada vez más confusas, preguntan que si Conchi piensa hacer la primera comunión otra vez, Anitin advierte que ese traje es suyo y que mama lo reserva para su comunión dentro de dos años, que no se le ocurra ponérselo, pero Conchi hace oídos sordos a la hermana colocándoselo encantada, contemplando su aspecto en un costroso espejo que hay en el dormitorio, ve que más o menos le queda bien. Anitin se resiste a ver a su hermana con el traje que ella cree de su propiedad, pero Conchi menciona de nuevo la promesa del membrillo y la cría cae vencida otra vez.

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43. FACHADA TEATRO SOGUERO.

La madre, con aspecto cansado, pasa frente al teatro Soguero, que ya empieza a tener gente esperando para entrar y ver la función. Ni la madre, ni la hija, se dan cuenta que se cruzan, a solo unos metros, la hija lleva una bolsa donde está el traje de la primera comunión. Ramona se queda mirando unos segundos la fachada del teatro, parece recordar algo.

44.- BENICALAP. CASA FAMILIAR.

Por la tarde vuelve la madre, Ramona viene cansada, agotada, se encuentra con que Conchi no está, que ha dejado solas a sus hermanas, aunque se las han apañado bien y están ya en la cama. La madre quiere saber donde esta Conchi, pero una bien aleccionada Anitín responde que tampoco ella lo sabe, pero que debe de ser muy importante porque se ha llevado el traje de primera comunión. Ese dato desconcierta del todo a la madre que ya no sabe qué pensar, Anitín, para mejorar su chivatazo, adorna la información diciéndole a la madre que sea lo que sea, su hermana salió de casa feliz, o sea que no debía de ir a ningún sitio que le disgustara, que ella cree que ha conocido al príncipe de España por casualidad y la ha invitado a un baile, donde se enamoraran, y Conchi acabará siendo princesa de España, y que les llevara a todos a vivir al palacio con el príncipe y que se inflarán de comer y de jugar todos los días. Ramona no sabe qué hacer, ni qué pensar, por más preguntas que le hace a su hija ésta dice la verdad, no sabe nada y solo especula con su infantil imaginación.

45.- TEATRO SOGUERO.

En los camerinos, hay el caos habitual durante la actuación, chicas, lentejuelas, magos, ella, Conchi, en un rincón se acaba de colocar su traje de primera comunión, alguna de las bailarinas al verla así vestida, no puede evitar soltar alguna gracieta que ponen aún más nerviosa a Conchi. El regidor entra y busca con la mirada, sin encontrar, nos recreamos en la misma visión que tuvo Concha de mayor en la sec. 7 ¡¿Conchita Piquer, quien narices es Conchita Piquer?! Al segundo aviso, tímida, oímos la voz de Conchi y como alza el brazo entre el lío de bailarinas, para hacerse notar, el regidor, al ver a

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la cría, se sorprende pero al segundo la trata con la misma profesionalidad y cotidianidad que al resto; - ¡Conchita Piquer, al escenario, un minuto!-La niña está fatal, nerviosa, una de las bailarinas, Gloria, al verla en ese estado, se acerca hasta ella y le da ánimos;-A todas nos ha pasado la primera vez, pero en cuanto pisas el escenario y escuchas la música, todo cambia y sale lo mejor de ti, ya verás-. La cría agradece las palabras y sale del camerino común.

El alegre tipo que presenta el espectáculo la anuncia como a una niña graciosa, guapa y que es una maravilla cantando. Conchi sale al escenario con los nervios a flor de piel, la música comienza a oírse, los espectadores atentos a lo que haga Conchi, el empresario, en el patio de butacas, de pie, en un lado, la observa atento, la niña tarda en empezar, pareciera que lo sucedido en el teatro del colegio fuera a repetirse de nuevo, pero reacciona y comienza a cantar, primero algo cortada, pero le dura solo unos segundos, al instante se empieza a mover y desenvolver por el escenario con gracia, poder, al público le gusta lo que ve y oye y la anima con los aplausos y las voces, el empresario sonríe satisfecho.

46.- FACHADA CASA FAMILIAR.

La madre, como es habitual en ella, se ha quedado dormida cosiendo cerca del hogar, sus tijeras con el lazo rojo están en suelo, se le han debido caer sin darse cuenta. Llaman a la puerta, la madre esta convencida que es Conchi y abre con gesto enfadado, pero a quien se encuentra es al Guardia Civil, a madre cae presa del pánico y los nervios, a las preguntas del agente no puede disimular bien y éste, mosca, pide saber donde esta la niña Conchita. Ramona: Durmiendo, donde va a estar. El agente acostumbrando a mentiras mejor resueltas, entra al dormitorio y se encuentra con las tres crías durmiendo, incluida Conchita, para sorpresa de la propia madre, satisfecho el civil sale de la casa para tranquilidad de Ramona que entra al dormitorio. Mira a su hija, que se hace la dormida, con ganas de darle un par de tortas, se lo piensa mejor y lo deja.

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47.- CASA FAMILIAR BENICALAP A la mañana siguiente la madre, con prisas, les despierta a las tres, diciéndole a Conchi que cuando vuelvan del colegio quiere hablar muy seriamente con ella, que ahora no tiene tiempo porque tiene que volver a Valencia para acabar de una vez el traje de la caprichosa novia que le trae loca, pero que no crea que se le ha olvidado, a Conchi no le da tiempo a contarle nada, Ramona le dice a Conchi que se encargue de que sus hermanas se vistan desayunen y vayan con ella al colegio y que por la tarde hablará con ella.

Ramona sale y Conchi hace lo que le ha ordenado la madre, sin embargo las dos hermanas se dan cuenta que su hermana mayor gasta hoy una extraña sonrisa, poco habitual en ella, Anitin pregunta qué le pasa y Conchi dice que se siente feliz, las dos hermanas cruzan una mirada de curiosidad, Anitin pregunta si es por culpa del príncipe, Conchi no entiende la pregunta.

48.- BENICALAP. CALLES.

Las tres crías camino del colegio, en la misma fachada que semanas antes vio el cartel del teatro Soguero pegado, Conchi vuelve a pararse unos segundos para volver a contemplarlo más tiempo de lo normal, le dice a Anitín que un día saldrá su nombre en un cartel así, no más grande que ese, Anitin se ríe de las pretensiones y los sueños de su hermana, llamándole la atención para que se dé prisa, llegan tarde al colegio.

49.- BENICALAP. CASA FAMILIAR.

Por la tarde, cansada de estar todo el día trabajando y fuera de casa, Ramona entra en su hogar, se encuentra con Anitin en la cama, quejándose y llorando, doliéndose de un terrible dolor de tripa, Ramona quiere saber qué pasa y pregunta a la mayor, Conchi responde que Anitín está con dolor de estómago por glotona, se ha comido un kilo de membrillo ella sola, la madre pregunta de dónde han sacado el dinero para comprarlo, Conchi saca el resto del duro que le queda y lo pone sobre la mesa, la madre no termina de reaccionar, ve el dinero y mira a Conchi, preguntándole por la procedencia del dinero, la hija también deja sobre la mesa una entrada para la actuación del próximo domingo, Ramona agarra el billete mirándolo con perplejidad.

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50.- TEATRO SOGUERO. PATIO BUTACAS.

Ramona, en el patio de butacas, vestida con elegante modestia, contempla emocionada la actuación de su hija, que canta, baila y se desenvuelve sola en el escenario con más seguridad aun que la última vez, mientras entona La “Reina mora”. Al desconocido espectador que tiene a su lado, Ramona no puede evitar decirle que aquella niña que canta tan bien, es su hija.

51.- TEATRO SAGUERO. CAMERINOS, PASILLOS.

La madre mira curiosa todo el bullicio que rodea el escenario, las prisas, los arreglos, el ir y venir de unos y otros, intenta dar con el camerino y el lugar donde esta su hija, cuando intenta preguntar la premura de la gente le impide hacerlo, al final Soguero la descubre y se acerca hasta ella, presentándose como el empresario, le felicita por el talento de su hija y le recomienda que vaya a dar clases de cante con un profesor, Ramona pone cara de susto, y el otro, sabiendo lo que le pasa por la cabeza, le informa que cada domingo pagará un duro a Conchita y que con parte de ese dinero podrá pagarse a un profesor, le escribe un nombre y se lo pasa, ella agradece con la mirada y él le indica donde esta su hija cambiándose.

Ramona al entrar, sin que Conchita se dé cuenta, observa a su hija frente al espejo del camerino, esta sola, simula estar frente a un escenario, gesticula, hace que canta, se mueve y saluda al público oyendo unos inexistentes vítores. Ramona jamás la había visto así y con esa entereza y felicidad. La hija al descubrir a la madre se corta, la madre sonríe y la abraza a ella, Gloria, la misma bailarina que la animó el domingo anterior, felicita a la madre por tener una hija con tanto talento y arte.

52.- BENICALAP- CASA FAMILIAR

La madre explica a sus hijas lo bien que ha cantado Conchi y que en aquel teatro Soguero, fue donde su padre la llevo la primera vez que salieron juntos, que si su padre estuviera vivo estaría muy orgulloso de su hija.

Por la noche las tres hermanas duermen. Juntas, como siempre, pero los nervios y la curiosidad pueden más que el sueño, no dejan de preguntarle a

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Conchi los entresijos del teatro y que si puede decirle a sus amigas que su hermana es una estrella.

53.- FACHADA COLEGIO.

Conchi sale con el resto de sus compañeras del colegio, no se para ni a jugar ni a hablar, corre veloz calle abajo. Las amigas y la monja que custodia la entrada la ven alejarse. Cuando corre frena en seco al cruzarse con la pareja de civiles que la miran severos, ella, dócil, saluda respetuosa y en cuanto los pierde de vista, de nuevo se lanza a correr.

54.- CASA PROFESOR MÚSICA.

Conchi recibe los consejos de un profesor de música que modula la voz y le enseña a entonar y a leer la música. Conchi cada vez que se equivoca, repite con entereza, decidida a querer hacerlo lo mejor que pueda.

VALENCIA 1922, Imágenes de la época de archivo.- Paso de Tiempo.

55.- FACHADA TEATRO KURSAAL- VALENCIA

Un tipo recién llegado a los 40, con aspecto de galán, bigote, engominado y moreno, el maestro Penella, lee el periódico a las puertas del teatro, una atractiva chica se acerca hasta él, Penella le recrimina el retraso y que están a punto de empezar la función, abandona el periódico que leía, donde nosotros podemos leer en la portada que Mussolini y los fascistas italianos han emprendido una marcha sobre Roma.

56.- TEATRO KURSAAL- CAMERINOS- VALENCIA.

El regidor entra en el camerino común y avisa a Conchita Piquer que la próxima es ella, tiene 14 años, y ya muestra sus encantos físicos y una mayor seguridad, la modista del teatro intenta arreglar el traje de enfermera que lleva puesto Conchita que, nada conforme, reclama a la sastra que arregle mejor los bajos, la mujer replica que esta bien y que nadie lo va a notar, sin embargo el perfeccionismo de Conchita se acentúa respondiendo que ella sí que lo va a notar, que por favor lo retoque, el regidor vuelve a entrar para meter prisa a Conchita, menos de un minuto para salir, al final la sastra

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termina de coser mientras Conchita se dirige al escenario, andando las dos al mismo tiempo, una cosiendo y otra diciéndole cómo hacerlo, la sastra acaba el último pespunte justo para que Conchita salga animosa a cantar el cuplé “La Enfermera”

En el patio de butacas Penella agudiza su atención al verla, la chica que tiene a su lado se da cuenta del gesto,- Demasiado joven para ti- le advierte. Penella sonríe al comentario y sigue la actuación de Conchita, que llena su interpretación de pícaros gestos y medidos bailes.

57.- BENICALAP- TIENDA VICENTE

Conchi está comprando con más alegría que las últimas veces, en el negocio de Vicente, que la observa con cierta intencionalidad. Cuando va a pagar, el tendero, más simpático que nunca, le dice que las patatas se las regala, que se ha enterado que canta en el Kursaal de Valencia, que es una artista. Conchi paga por la compra y el tendero le agarra la mano, diciéndole que su madre tiene todo el crédito del mundo, y añade alguna frase que suena más a sucia insinuación, dando por hecho que al ser artista se le supone cierta ligereza de costumbres, Conchi, sin cortarse un pelo, responde con una buena bofetada.

58.- CALLES BENICALAP

Conchita va hacia su casa, caminando por la calle, con su bolsa de la compra recién hecha, los dos guardias civiles que ya conocemos se cruzan con ella, pero esta vez no se queda a gusto solo con el saludo, el cabo dice que pare que tiene que hablar con ella, Conchita se asusta, dice que la compra la ha pagado y que no ha hecho nada malo, el guardia mira severo, pero Conchita se sorprende al saber el motivo del interés del guardia por ella, quiere que le firme un autógrafo, una firma, una dedicatoria dentro de su tricornio, Conchita es la primera vez que le piden algo así y extrañada, agarra la pluma que le pasa el agente y entre nerviosa y perpleja, intenta con su elemental escritura hacer lo que le pide el funcionario. El tipo agradece a Conchita el gesto y presume ante su compañero de la dedicatoria. Conchita sigue su camino hacia casa, aún queriendo digerir lo que acaba de suceder.

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59.- BENICALAP- CASA FAMILIAR.

En la casa la madre arregla el traje de enfermera de Conchi, mientras Conchi canta y afina su voz con una infusión caliente y un poco de miel. La madre le pide que descanse, que se va a quedar afónica, Conchi responde que debe hacerlo aún mejor, las hermanas pequeñas imitan lo que hace la mayor.

60.- TEATRO KURSAAL- VALENCIA

El cuplé cantado por Conchita se repite entre los aplausos de la gente, en el patio de butacas descubrimos de nuevo a Penella, esta vez solo, observando muy atento la actuación de Conchita.

61.- TEATRO KURSAAL- DESPACHO SOGUERO

Penella habla con el empresario, el primero quiere llevarse a Conchita a Broodway donde Penella estrenará el próximo año una ópera, El gato montés, quiere que el empresario le ayude en la gestión, éste le dice que Conchita depende mucho de su madre y viceversa y que nada hace sin su madre y, además, es una joven de mucho carácter;- Si dice no, es no- Y el empresario remata diciendo que Conchita es una de las que más gustan al público y que tampoco él tiene ganas de perderla, o sea que poco o nada va a hacer para facilitarle el trabajo a Penella, todo esta advertencia dicha con cordialidad y carente de aspereza alguna. Penella acepta el reto.

Esa misma noche en el camerino y ante la cara de envidia de las bailarinas, Conchi recibirá varios ramos de flores, la adolescente reconoce que es la primera vez que alguien le regala flores, la madre y ella intentarán saber quien las ha enviado, pero no aparece tarjeta alguna. La bailarina Gloria advierte a Conchi que cuando vienen sin remite o son unos viejos verdes o están casados o a saber que defecto físico tienen, y que lo mejor es mirar tras el telón y seguro que lo descubre a los pocos segundos, y aún le lanza otra advertencia más, Gloria como chica experta que es en materia masculina, le aconseja a Conchita que no se crea nada de lo que le digan y prometan, siempre es mentira, ni viajes, ni regalos, ni que si se van a divorciar de sus mujeres, ni cruceros, nada, todas esas patrañas tienen un único objetivo, conquistarla, que nunca la tomen por tonta.

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Conchi le recuerda que solo tiene 14 años, Gloria responde con una leve sonrisa. Los consejos de su amiga bailarina quedan registrados. Conchi se coloca tras el telón, por un útil y pequeño agujero roto, mira las primeras filas, ninguno de los que hay sentados le gusta un pelo, unos son viejos, otros casi deformes, a todos saca defectos.

62.- FACHADA TEATRO KURSAAL- VALENCIA

Conchi espera en la entrada del teatro, sus compañeras de trabajo van saliendo y despidiéndose hasta el día siguiente, Penella se acerca hasta ella, Conchi le recibe con ásperas y secas palabras, Penella se descubre como el que ha estado enviándole flores éstos últimos días, ella lo mira de arriba abajo, él la felicita por su talento y se presenta como músico, como artista también y que está interesado en que vaya con él a América donde tiene apalabrada una ópera, ella le dice que si se cree que ella es tonta, la respuesta desconcierta a Penella. Ramona aparece para recoger a su hija, mira a un perplejo Penella que ve como las dos mujeres se alejan del teatro. Camino de su casa la madre pregunta a su hija quien era ese que estaba con ella a las puertas del Kursaal, ella responde que un conquistador de tres al cuarto.

63.- CALLES Y FACHADA CASA FAMILIAR BENICALAP

Penella, dentro de un lujoso vehículo, observa como Concha sale de la casa, recoge la ropa tendida en las ventanas mientras tararea alegre una canción, que por el gesto del músico, le agrada escuchar. Se corrige la corbata que anuda su cuello al ver a la madre salir con una silla para coser a la luz del día, a la puerta de su casa, Concha se cuela para dentro. Penella se presenta ante la madre, muy educado, correcto, Ramona lo observa sin saber muy bien como reaccionar, le recuerda del otro día y le responde a sus educados gestos que es el pesado que quería seducir a su hija, Penella intenta explicarse, Conchita, que escucha dese el interior la conversación, desde el piso de arriba, llena un cubo de agua y lo arroja hacia la cabeza de Penella que, mojado y perplejo, vuelve enfadado a su automóvil mientras las hermanas de Concha ríen junto a la madre. El coche se aleja de Benicalap con un empapado Penella dentro.

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64.- CAMERINOS- TEATRO KURSAAL

Conchita explica divertida a Gloria, como le tiro un cubo de agua a un pesado, siguiendo fielmente los consejos que la bailarina le había dado, así espanta a los seductores de medio pelo, cuando Conchita dice que se presentó ante ella como un tal Manuel Penella, la bailarina casi se atraganta, ella sabe quien es, un conocido y prestigios músico de Valencia que tiene prevista una gira en EE.UU. Al saber esa información, también acaba atragantándose Conchita. “Mierda” es lo único que a la adolescente se le ocurre decir.

65.- TEATRO KURSAAL- DESPACHO SOGUERO.

Penella arroja la toalla sobre Conchita, dice haberlo intentado pero esa familia esta loca. Soguero sabe que para Conchita ir a América y con una ópera, podría ser un paso de gigantes en su carrera, podría aprender y ver cosas que jamás haría en su vida de seguir en Valencia. Soguero, buen tipo, reconoce que para el futuro de Conchita ir a N.York sería una gran ventaja, ahora es él quien le pide a Penella un último intento, éste no parece estar muy por la labor.

66.- TEATRO KURSAAL. DESPACHO SOGUERO

En el despacho de Soguero aparece Conchita con su madre, quiere saber qué quiere el empresario hablar con ella y con su madre, pero descubren que también esta Penella, el empresario presenta oficialmente a éste como un compositor de éxito que tiene contratada una ópera en Broadway y que quiere que Conchita vaya con él. Conchita dice que ya lo sabía, Penella no entiende nada, si lo sabían porque le ha tratado tan mal y de esa manera.“Deje que le explique” dice una más suave Conchita, pero Penella dice que no tiene nada qué explicar, que hubiera entendido ese trato de ellas con él si no supieran quien era, pero sabiéndolo es evidente que Conchita y su familia están locos. Mejor dejarlo, dice Penella, ha sido una mala idea.

Conchita se rebela diciendo que efectivamente era una mala idea y que no pensaba de ninguna manera aceptar trabajar con alguien así de orgulloso. El regidor entra pidiendo la presencia de Conchita en el escenario, ella sale muy digna seguida de una madre menos digna y confusa.

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El empresario valenciano al ver el enfado de Penella, le recuerda que le aviso sobre el peculiar carácter de la adolescente.

67. TEATRO KURSAAL PASILLOS-VALENCIA

Conchita actúa como cada día, Penella se encamina hacia la salida, aún con el enfado en su rostro, pero la voz de Conchita se cuela en los aledaños del patio de butacas, por los pasillos, por el teatro, cuando parece estar a punto de cruzar el umbral de la puerta del teatro, para.

68.- TEATRO KURSAAL- ESCENARIO- VALENCIA

Conchita actúa y canta aún con más gracia que otras veces, inyectada por la rabia de la reciente reunión. Desde un lugar oculto a los ojos de ella, Penella la observa refugiado en la oscuridad.

69.- FACHADA TEATRO KURSAAL VALENCIA

La adolescente espera que la madre salga del teatro para volver juntas a casa, se repite el encuentro de la primera vez entre Penella y Conchita, él se acerca; “Volvamos a empezar, como la primera vez, como si no hubiera pasado nada de lo que ha pasado. ¿De acuerdo?” Ella afirma con la cabeza, él repite palabra por palabra lo que le dijo en ese mismo sitio la primera vez que se encontraron, la madre esta ahora presenta, callada y mirando confusa la escena. Conchita responde a la información de él, presentándose muy educadamente; - Soy Conchita Piquer y le agradezco su interés hacia mi persona, estaría encantada de trabajar con un músico con tanto “prestigiero” como usted- Penella sonríe al oír esto último, los dos comienzan a andar, el músico le cuenta sus planes sobre El gato Montes, la obra que ya tiene estreno en Nueva York, caminan y hablan seguidos por los perplejos ojos de la madre.

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70.- BENICALAP. CASA FAMILIAR.

Conchita, acostada junto a sus hermanas, no puede pegar ojo, nerviosa, pensando en lo que le ha propuesta Penella. A La madre también parece pasarle lo mismo.

71.- PUENTE TURIA- VALENCIA A la mañana siguiente, en el mismo lugar donde ya vimos en su día a Conchita pensativa, a las orillas del Turia, vuelve de nuevo al mismo rincón, con la cabeza dándole vueltas.

72.- BENICALAP- CASA FAMILIAR

La familia come alrededor de la mesa con más abundancia de la que nos tenía acostumbrados, el sueldo de Conchita se nota, las pequeñas tienen mejor cara, más color. La madre y la hija cruzan una mirada sin decidirse a hablar del tema, como si ninguna se atreviera a ser la primera en hincarle el diente, al final es Concha la que decide hablar; - ¡¿Qué?! La madre responde alzando los hombros, dudando, no sabe qué responder, Concha mira a sus hermanas que comen con apetito.- Por ellas no te preocupes,- dice Ramona,- estarán con la tía hasta que volvamos, enviándole dinero y con lo cariñosa que es, estarán bien-. Conchita no está del todo convencida, la madre la anima, es su carrera, su futuro, su vida, Conchita no termina de decidirse, no lo tiene claro.

73.- TEATRO KURSAAL- CAMERINOS- VALENCIA

Conchita se maquilla para salir a actuar, el grupo de bailarinas sale rauda al escenario dejándola sola frente al espejo, sigue preocupada, dubitativa, indecisa, por la puerta acaba de entra Soguero, ella lo ve reflejado en el espejo y el sonríe, le cuenta sus dudas, que no sabe qué hacer, que no quiere separarse de sus hermanas, ni de Valencia, ni de España, que quizá allí fracase, que no sabe inglés, tiene miedo al fracaso, a la distancia, al olvido. Soguero dice que por él no la dejaba salir del Kursaal en toda la vida, pero él no es Conchita, como es obvio, por lo tanto y si él estuviera en la piel de ella, no lo dudaría ni un segundo, es muy joven, tiene todo por delante y allí en

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España cada día que pasa las cosas están más duras y más raras, se refiere a la política, al clima de violencia que cada día va a más, a los extremismos, a saber lo que el futuro nos trae, pero él cree que nada bueno está por venir. De todos modos por encima de lo que pase en España ella debe de pensar en lo que quiere, y él está convencido de que ella lo que más le gusta es estar encima de un escenario, ella lo confirma con un rotundo si. Allí en EEUU podrá crecer como artista, aquí también, pero de otra manera, con otras limitaciones, le pide que antes de decir no, se lo piense un poco más, la conversación es interrumpida con la llegada de las bailarinas y el aviso del regidor para que Conchita se dé prisa, es la próxima.

74.- TEATRO KURSAAL- ESCENARIO

Conchita, antes de salir al escenario, mira al patio de butacas donde de nuevo esta Penella, esperando su actuación, ella lo observa desde la privilegiada posición de quien mira y no puede ser visto.

75.- ESTUDIO FOTOGRAFÍA- VALENCIA

La madre quiere tener una fotografía de todas ellas al completo, para llevársela a N.York. Un flash congela la imagen de las cuatro.

76.- BENICALAP. CASA FAMILIAR

Un par de pequeñas maleta atada con cuerdas, es todo el equipaje que la madre y la hija llevan consigo, en la puerta de la casa están medio llorosas; Anitín y la otra hermana, junto a la tía. Tanto a Ramona como a Conchita les cuesta separase de su familia, los abrazos parecen no acabar nunca. Un coche las espera. Se prometen escribir cada día, que en pocos meses volverán, que ellas enviaran dinero cada semana a la tía para que no les falte de nada, y las niñas deseando ir con ellas, que qué regalos le van a traer de allí, que no quieren quedarse con la tía… Por fin se cuelan en el coche y se alejan del pueblo, Conchita mira hacia atrás, viendo como sus hermanas la siguen corriendo tras el coche y como se alejan de su vista, mira las calles que la rodean, pasa frente al ultramarinos Vicente, frente al colegio donde muchas niñas esperan entrar, de la orilla del río donde acostumbra ir, se aleja de ese mundo, consciente de que se abre una época nueva en su vida y que aquel quizá sea la última vez que la acoja.

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77.- PUERTO. BARCO.

Imágenes de archivo de un puerto, un transatlántico que se aleja de Tierra y se adentra en el mar.

78.- NEW YORK

Imágenes de archivo de las calles de N.York en los años 20.

79.- HOTEL NEW YORK

Un botones deja las maletas de las dos mujeres en la habitación del hotel, les habla en inglés, explicándole todos los encantos de la habitación y las vistas que pueden ver desde las ventanas, Conchita solo saber responder yes, yes, yes, la madre más asustada que nadie, no entiende nada, al final el empleado del hotel espera la correspondiente propina, las dos mujeres no saben muy bien qué hace ese tipo allí parado y qué espera, nerviosas cruzan una mirada, incómodas, la madre le pregunta a Conchi discreta que por qué no se va ya, el empleado sonríe esperando, entra Penella, al ver la situación, entrega unas monedas al botones y éste agradecido vuelve a sonreír y se marcha, ante el desconcierto de las dos mujeres. Penella pregunta a la madre y a la hija si les gusta, la madre responde que está muy alto todo, que le da vértigo, Conchi sin embargo se muestra exultante, feliz, encantada, Penella les informa que en un par de horas las recogerá para ir al teatro, el músico deja a la madre y a la hija solas en la habitación, nunca habían visto nada igual, vienen de la pobreza, de una España en pleno subdesarrollo, de provincias, todo aquello les fascina. La madre muestra a Conchi su perplejidad al descubrir que su hija sabe inglés. Un periódico esta sobre una mesa de la suite, en el mismo vemos el rostro de Al Capone, la palabra Chicago también aparece para ilustrar la imagen.

80.- IMÁGENES ARCHIVO N.YORK BROADWAY

Se suceden emblemáticas imágenes de la famosa calle de N.York en el década de los 20.

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81.- PARK THEATRE N. YORK

Cuando Conchita entra al teatro, y según avanza por el escenario, oímos una música, un pasodoble, el famoso de El gato Montes… Con la música nos recreamos en varias imágenes de Penella dando instrucciones a las cantantes y técnicos, la madre, sentada, observa fascinada el trajín de unos y otros.

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