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MARA INS GARCA Y OCTAVIO SNCHEZ. MSICA E IDEOLOGA: LOS IMAGINARIOS DE NACIN EN LOS DISCURSOS

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Msica e ideologa. Los imaginarios de nacin en los discursos

sobre msicas populares cuyanas en Mendoza.

Mara Ins Garca

Octavio Snchez Facultad de Artes y Diseo, Universidad Nacional de Cuyo

Resumen: Las producciones musicales estn generalmente atravesadas por las ideologas que circulan en nuestras sociedades, especialmente aquellas msicas vinculadas con la construccin de identidades locales, participando de universos de sentido en los que los imaginarios de nacin han jugado un papel decisivo. El presente trabajo aborda las msicas populares cuyanas de base tradicional, especficamente las producidas en la provincia de Mendoza (Argentina), que han circulado ampliamente por nuestro pas compartiendo espacios tradicionales y mediatizados, desde las cuales se han construido sentidos de identidad sociocultural. En las primeras dcadas del siglo XX se produjo la necesidad de construccin de una argentinidad basada en los bienes culturales provincianos, sealados por la intelectualidad argentina de entonces como los contenedores de las esencias de la nacin, propiciando la llegada de msicos del interior a Buenos Aires. As, los objetivos de un nacionalismo que buscaba homogeneizar culturalmente a la heterognea poblacin del pas luego del desembarco de millones de inmigrantes, estuvieron en sintona con las esperanzas de los artistas que anhelaban triunfar en la Capital haciendo circular sus msicas por la radiofona y la industria discogrfica. Por otro lado, desde principios de la dcada de 1960 comenzaron a consolidarse tendencias estticas dentro de los cultores de msicas cuyanas, que impulsaban una renovacin de los contenidos sonoros y literarios, y simultneamente imaginaban una nacin con valores alejados de aquel nacionalismo en el que se inscriban los ms tradicionalistas. Nuestro objetivo es desentraar la red de construcciones ideolgicas que se tejen entre estas msicas populares y los imaginarios de nacin. Considerando la cancin como nuestro texto de estudio, en este trabajo nos centraremos en el nivel metatextual, es decir, focalizaremos nuestro anlisis en las producciones discursivas acerca de estas msicas, considerando especialmente las de los propios cultores (productores u oyentes), las de la musicologa y la prensa. Palabras claves: ideologa - nacin - identidad - prcticas musicales - semitica Abstract: Musical productions are generally embodied by the ideologies in our societies, especially those musics related to the construction of local identities, taking part of universes of sense in which the imaginaries of nation have played a decisive role. This work is about popular musics from Cuyo with a traditional basis, specifically those produced in Mendoza (Argentina), that have widely circulated around the whole country sharing traditional spaces and others biased by media, from which senses of socio-cultural identity have been built. A need for the building of an Argentinidad appeared in the first decades of the twentieth century. This was based on the cultural goods from the provinces, which were labeled by the Argentine intellectuals of the time as the containers of the essences of the nation, in this way


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propitiating the coming of musicians form the rest of the country to the capital. Thus, the objectives of a nationalism that wanted to culturally homogenize the heterogeneous Argentinian population after the arrival of millions of immigrants were in tune with the hopes of the artists that longed to succeed in the capital with the circulation of their music through the radio and the recording industry. Likewise, aesthetic tendencies started get consolidated since the beginning of the sixties by the users of music from Cuyo. They impulsed a renewal of the contents in terms of sound and literature, and imagined simultaneously a nation with values that were far from those of that nationalism in which the traditionalist were in. Our objective is to unravel the net of ideological constructions that is made between popular musics and the imaginaries of nation. In this work we will center at a metatextual level, considering the song as our study text. We will focus our analysis in the discursive productions in these musics, taking especially into account the ones form the users (producers or listeners), the ones from musicology and the press. Key Words: ideology - nation - identity - musical practices - semiotics I. Introduccin

Esta presentacin es parte de un proyecto de investigacin de mayores proporciones que estamos realizando en la Universidad Nacional de Cuyo (Mendoza, Argentina) y que acaba de ser aprobado para su financiamiento por la Agencia Nacional de Promocin Cientfica y Tecnolgica. Se inscribe en una lnea de investigacin que venimos desarrollando cuya problemtica central gira en torno a gneros musicales populares cuyanos y sus procesos de configuracin, cristalizacin, circulacin, mediatizacin, recepcin y de construccin de significaciones, en relacin con diferentes contextos. A lo largo de esta exposicin presentaremos el proyecto en general, e iremos acotando nuestra argumentacin con la intencin de recortar uno de los problemas a los que intentamos dar respuesta en nuestra investigacin. Nuestro foco est centrado en las producciones musicales de la provincia de Mendoza, integrante de la regin de Cuyo. Nos referimos en particular a las msicas populares cuyanas de base tradicional que durante todo el siglo XX circularon ampliamente por nuestro pas y desde las cuales se han construido sentidos de identidad sociocultural. Como gran parte de los bienes culturales, estas msicas se han visto atravesadas tanto en sus aspectos sonoros como literarios por las ideologas que han circulado en nuestras sociedades, especialmente por las que tocan aspectos tan sensibles como las referidas a las identidades locales y a sus maneras de construccin, universos de sentido en los que los imaginarios de nacin han jugado un papel decisivo a la hora de construir modelos de identidades socioculturales. En esta direccin, nuestro primer objetivo general es: desentraar la red de construcciones ideolgicas que se tejen en las msicas populares cuyanas de base tradicional, especialmente aquellas relacionadas con la construccin de los imaginarios de nacin; en particular, nos interesa identificar la articulacin que estos universos de sentido han tenido y tienen con las prcticas de los cultores -productores y oyentes- y con las estructuras sonoras y literarias de las propias msicas. Se impone, en consecuencia, un segundo objetivo general: estudiar desde distintos niveles semiticos (textual sonoro y literario, paratextual, metatextual y


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contextual) las producciones musicales cuyanas de distintas pocas a lo largo del siglo XX.

II. Niveles de anlisis y Marcos contextuales (ideologas y periodizaciones)

La hiptesis del proyecto general plantea que las msicas populares cuyanas de base tradicional, como consecuencia de las construcciones ideolgicas por las que estn atravesadas, contienen sonidos, estructuras, texturas, armonas y timbres asociados al tradicionalismo, que connotan conceptos como nacionalistas y viejos. Por otro lado, existen estructuras que connotan moderno y que cuando estn presentes en las prcticas de produccin y de recepcin nos alejan de posiciones asociadas con el nacionalismo esencialista. Parte de estas connotaciones estn implicadas por los discursos que tanto artistas, como investigadores y periodistas han realizado acerca de las msicas cuyanas, es decir, por los metatextos. En la presente ponencia deseamos mostrar algunos de los avances obtenidos en este sentido. Queda claro que esta distincin entre niveles (textual sonoro y literario, paratextual, metatextual y contextual) es una construccin realizada con fines analticos, y que solamente ser fructfera si los distintos anlisis se cruzan, es decir, si nos permitimos saltar de un nivel a otro con la finalidad de tener diferentes perspectivas en la construccin y estudio de nuestro objeto. Por ejemplo, nos resulta interesante ver qu huellas del contexto pueden hacerse visibles en los metatextos, o estudiar el grado de porosidad o permeabilidad de textos y metatextos, en relacin con los contextos ideolgicos. Al respecto, hemos identificado y determinado distintos contextos histricos, geogrficos, sociales y culturales en los que se han desarrollado vinculaciones entre, por un lado, msicos y gneros musicales cuyanos y, por otro, tendencias polticas nacionalistas u otras construcciones ideolgicas referidas a la idea de nacin durante el siglo XX: - el paradigma nacionalista constructor del ideal de nacin oficial (dcadas del 30 y

40) - los contextos de los populismos locales y nacionales (dcadas del 20, 30, 40 y 50) - el renovador modernizante y latinoamericanista (dcadas del 60 y 70) - el de las dictaduras recientes (dcada del 70) - el del neoliberalismo menemista (dcada del 90) Adems, la capital significacin que los cultores de msicas populares cuyanas de base tradicional le otorgan a la circulacin de sus producciones por los caminos propuestos por la industria cultural, nos llev a proponer la construccin de un marco histrico a partir de criterios de periodizacin que toman en cuenta, por un lado, la relacin de artistas y msicas con estos espacios, y, por otro, la responsabilidad o protagonismo de estos msicos en el proceso de conformacin de los gneros. En este sentido, hemos identificado tres periodos: cristalizacin, consolidacin y continuacin. En la siguiente


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figura intentamos dar cuenta de esta periodizacin.

Fig. 1. Periodizacin de Msicas Populares Cuyanas de base tradicional.

Considerando ambos marcos: esta periodizacin de msicas cuyanas por un lado y, por el otro, la identificacin de los contextos histrico/ideolgicos, expondremos algunos de los avances conseguidos, focalizndonos en primer trmino, en la produccin metatextual de los msicos de la cristalizacin y por ltimo en los metatextos de los continuadores que asumieron una posicin crtica o renovadora frente a la tradicin.

III. Los metatextos producidos por los msicos cristalizadores

Aunque dotadas de una profundidad histrica que puede rastrearse retrospectivamente hasta mediados del siglo XIX, estos gneros musicales especialmente cuecas y tonadas adquirieron una notable masividad en la Argentina desde la dcada de 1930, al aprovechar para su circulacin los modernos carriles que la naciente industria cultural ofreca a las msicas populares locales. La necesidad de construccin de una argentinidad basada en los bienes culturales provincianos, connotados de puros e incontaminados y sealados por la intelectualidad argentina de esas dcadas como los contenedores de las esencias de la nacin, haba propiciado la llegada de msicos del interior y de sus cantos y bailes a la Capital Federal. De esta forma, los objetivos de un nacionalismo que buscaba homogeneizar culturalmente a la heterognea poblacin que contena el pas, luego del desembarco de millones de inmigrantes en el puerto de Buenos Aires, estuvieron en sintona con las esperanzas de los artistas que anhelaban triunfar en la Capital, haciendo circular sus msicas por la radiofona y la industria discogrfica. Esta vinculacin entre las prioridades de la clase hegemnica y los intereses de los artistas del interior del pas que se dio en particular en la cristalizacin de los gneros musicales cuyanos contemporneos, marc estas msicas y sus cultores con tal fuerza que todava perduran en el presente relaciones de sentido con respecto a distintas modalidades de los nacionalismos, asociaciones que son defendidas con orgullo por algunos o, por el contrario, que son evidenciadas por otros hasta de manera peyorativa. Es decir, el protagonismo de estos artistas fue tan fuerte que no slo propici la cristalizacin de estructuras musicales y maneras performativas, sino que tambin cristaliz connotaciones ideolgicas en relacin con esas sonoridades.


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Aunque la temtica patritica ha estado siempre presente en la obra de los cristalizadores, en realidad no aparece con gran frecuencia en sus producciones musicales. La gran mayora de las piezas hace referencia al mundo rural laboral, es decir, al vino y a la vitivinicultura, a lo amatorio y al paisaje1. Ms que en las composiciones en s, la sintona con el ideario nacionalista se hace explcita en el discurso metatextual que construyen acerca de los gneros musicales cuyanos. Repasaremos textos de dos de estos artistas, Ismael Moreno (1891-1968) y Alberto Rodrguez (1900-1997), que tambin tuvieron protagonismo como recopiladores. Sus cancioneros fueron elaborados durante los turbulentos aos conocidos en la Argentina como la dcada infame, periodo inaugurado con el primer golpe militar a un gobierno democrtico y que signific el retorno de los conservadores al poder en 1930. En este sentido, hemos analizado el Cancionero Mendocino del msico Ismael Moreno, publicado en 1936. De las veintiocho composiciones2, tres estn referidas al paisaje regional y el resto son amatorias; ninguna con connotaciones a la patria o la nacin. Sin embargo, estos contenidos son muy frecuentes y explcitos en los prrafos explicativos de la obra. Desde el proemio, en recuadro destacado, Moreno manifiesta sus intenciones:

Entrego estas voces del corazn criollo que fue como el cordaje de una guitarra inmensa tendida bajo el dosel del cielo cuyano; esto volcaron nuestros abuelos en el corazn de la patria! herencia sagrada en la que se disean trenzadas las palmas de la guerra y las inquietudes del alma (...) Cantad conmigo la cancin nativa, poniendo la serena emocin de la raza como una corona de lauros en el frontal de los siglos por donde ha de pasar victoriosa la Argentina de maana3.

Pginas adelante, en la exposicin que el artista mendocino hace acerca de los distintos gneros musicales argentinos, se refiere a los recopiladores norteos Manuel Gmez Carrillo y Andrs Chazarreta:

Ellos, que compenetrados de la responsabilidad de la hora, en esta poca de crudo materialismo que se han alzado sobre la estrechez del ambiente para poner la grandeza de la cancin nativa, como una bandera en el combate frente a la invasin del cosmopolitismo que amenaza con arrasar todo lo que fue bajo

1 Por ejemplo, en el caso del gnero cueca cuyana, nos parece significativo sealar que sobre un corpus

de 128 composiciones recopiladas para nuestra tesis de maestra, solamente 5 se refieren a temticas patriticas. Este contraste se acrecienta para el caso de las tonadas, gnero en el que los autores han priorizado temas como el amor, la belleza, la mujer, el desengao amoroso, e inclusive la amistad. El compositor que ms importancia le otorg a la temtica patritica en sus composiciones fue Hilario Cuadros, aunque estos temas representan alrededor del 6% de su produccin; de todas formas, pensando ms cualitativamente, habra que ponderar la gran popularidad que an goza entre todos los cuyanos un xito como Los sesenta granaderos.

2 El cancionero de Moreno consta de: tres cuecas, tres gatos, tres tonadas, dos valses, dos zambas, dos chacareras, dos estilos, una refalosa, un triunfo, un bailecito, ms la letra de ocho canciones recopiladas por l.

3 Moreno, Ismael. 1936. El Cancionero Mendocino. lbum de canciones para canto y piano. Mendoza. Peuser. p: 4.


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el sol patrio musa del gaucho y pasin de la raza.4

La cita al discurso de Ricardo Rojas es muy clara; el prrafo de Moreno gira en torno de los dos conceptos que el autor de La restauracin nacionalista (editado en 1909) identifica en su diagnstico acerca de la sociedad argentina de principios del siglo XX; la prdica nacionalista de Ricardo Rojas ...apunta a rectificar las desviaciones que a su juicio provienen del excesivo cosmopolitismo y materialismo que se haban instalado en la sociedad5.

Por su parte, el msico Alberto Rodrguez en el captulo introductorio de su Cancionero Cuyano, de 1938, aclara que esta publicacin es parte de un trabajo de compilacin de mayor envergadura, poniendo en evidencia tambin una conexin con Rojas, no slo desde lo conceptual, sino tambin en la vinculacin institucional:

...como anticipo de mi coleccin compuesta de ms de ochocientas canciones antiqusimas, cedida al Instituto de Literatura Argentina de la Facultad de Filosofa y Letras, publico este pequeo lbum, formado por veinticinco piezas, en las que mis coterrneos, en imborrables reminiscencias de nuestro querido acervo tradicionalista, revivirn con emocionado patriotismo, pocas de legendaria heroicidad o de sencillas costumbres patriarcales.6

Recordemos que Rodrguez fue discpulo de Carlos Vega, fundador de la musicologa argentina, quien realiz gran parte de sus investigaciones a partir de 1933 desde el citado Instituto de Literatura Argentina dirigido por Ricardo Rojas, a quien Vega dedicara una de sus obras de mayor trascendencia7. Aunque el mendocino Alberto Rodrguez, toma distancia del marco terico difusionista de su maestro, los conceptos del nacionalismo, tienen una fuerte continuidad en su discurso. La cueca autnticamente cuyana (...) se enseorea en la gracia de la mujer cuyana, que se ufana orgullosa de clausurar las tradicionales fiestas familiares con que los hogares criollos rinden culto a nuestra gloriosa nacionalidad.8 Otra de las expresiones musicales tratadas por Rodrguez en su Cancionero es el gauchito, de nula circulacin en la actualidad (inclusive en 1938), pero reivindicado por el investigador al sealar la vigencia del gnero en la poca de la preparacin del Ejrcito Libertador:

Esta danza es conocida en Cuyo desde tiempos antiqusimos, de ella puede decirse que es un baile netamente criollo. Su nombre bien lo afirma: Gauchito.

4 Ibdem. p: 6. 5 Ramaglia, Dante. 1998. La formacin del espiritualismo argentino. Proyecto y discurso en Ricardo

Rojas. Cuyo. Anuario de Filosofa Argentina y Americana, Volumen 15, Ao 1998, Mendoza. Instituto de Filosofa Argentina y Americana. p: 41.

6 Rodrguez, Alberto. 1989 [1938]. Cancionero Cuyano (Canciones y Danzas Tradicionales). Mendoza. Numen. p: 24.

7 Vega, Carlos. 1944. Panorama de la Msica Popular Argentina. Buenos Aires. Losada. 8 Rodrguez Op. cit. p: 115.


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Expresin cariosa, simboliza toda la gloriosa epopeya de nuestra nacionalidad. (...) Se impregn de patria, tomando el aliento pico y guerrero de las gloriosas jornadas de la libertad, cuando el genio de San Martn, moviliz todas las fuerzas vivas aprovechables para la organizacin y preparacin de las huestes libertadoras en el histrico campamento del Plumerillo.9

Sin embargo el texto del gauchito recopilado es ms de corte picaresco/amatorio; narra las vicisitudes de un soldado que se escapa de su guardia a la hora de la siesta a buscar flores para su enamorada y termina arrestado por un sargento granadero, es decir, un texto muy alejado de lo eminentemente patritico. A pesar de esto, afirma: A travs de estas letras y de muchas otras, se advierte el noble sentimiento nacionalista del gaucho...10. Es el discurso acerca del gauchito el que est construido en tono nacionalista, ms que la composicin en s. A lo largo de la historia, algunos artistas han sido funcionales a los intereses del poder hegemnico, colaborando en la construccin de imaginarios culturales, buscando inclusive legitimar su obra presente citando los episodios heroicos del pasado y empleando el aparato simblico patritico que la educacin oficial se ha encargado de ensearnos. En ciertos casos, esta funcionalidad puede haber sido irreflexiva o, por el contrario, comprometida; aunque de todas formas comprensible, pensando en la fuerza de penetracin que tuvieron las ideas nacionalistas en la primer mitad del siglo XX.

IV. Los metatextos producidos por los continuadores crticos

El segundo contexto en relacin a la idea de nacin que tomamos en nuestro trabajo es el de la dcada del 60, un contexto renovador, modernizante y latinoamericanista. Considerada la dcada de las ideologas, en esos aos naci el movimiento hippie, la juventud europea se manifest en lo que se conoci como el Mayo Francs y los movimientos sociales adquirieron cada vez mayor importancia en Amrica Latina. En los ltimos aos de la dcada de 1950, la Argentina atraves un acelerado proceso de expansin econmica e industrial, debido a la existencia de un clima propicio para las inversiones extranjeras. A este crecimiento de la actividad industrial se sum un cambio en las polticas del Estado argentino, relacionadas con la investigacin cientfica y la produccin intelectual, promovidas tanto desde mbitos oficiales como privados. Para principios de la dcada del 60, el clima de prosperidad y crecimiento econmico se reflej de manera evidente en la vida cultural. En este sentido, a principios de los sesenta Mendoza tena una vida intelectual y cultural muy rica, contando con importantes representantes de la literatura y el arte; con este contexto se relacionan los personajes que van a constituir el movimiento del Nuevo Cancionero que nace en Mendoza con el marco del proceso del boom del folclore de los 60. En febrero de 1963

9 Ibdem. p: 107. 10 Ibdem. p: 108.


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lanzaron pblicamente este movimiento con un concierto y la explicitacin de un manifiesto. Estas declaraciones, proveniente de los propios cultores, es uno de nuestros metatextos de anlisis para el presente trabajo. No podemos dejar de hacer referencia a algunos procesos que dan marco a este movimiento, entre otros, la migracin interna que modifica el perfil social de las grandes ciudades hacia los aos 40, el cosmopolitismo creciente con el auge de gneros musicales norteamericanos y latinoamericanos trados por la radio, el disco y el cine, como tambin, una mayor conciencia de lo regional en crculos intelectuales. Esto va generando un aumento en la prctica y consumo de la msica de raz folclrica. Pablo Vila seala que en la base del auge del folclore en los 60 est el proceso de nacionalizacin de la clase media urbana11. Durante la dcada peronista fueron los migrantes internos quienes sostuvieron la difusin de esta msica, con algunos cantores que cumplieron con una funcin de socializacin de ese proletariado reciente12. Con la cada del peronismo, el sector obrero pierde sus canales de participacin y vuelve a ser marginado, mientras la clase media urbana vive un proceso de nacionalizacin, lo que gener una apetencia por conocer y comunicarse con el pas real, es decir, el interior y no slo la capital o las grandes urbes, expresndose en el descubrimiento de la literatura argentina y el encumbramiento a que es llevado el folclore. La elevacin del nivel potico, musical e interpretativo de la cancin folclrica permiti su aceptacin por el sector medio urbano13. Estos rasgos se reflejan en el movimiento al que nos referimos. El texto del Manifiesto del Nuevo Cancionero14 se ocupa de varios aspectos, dos de ellos centrales en su discurso: la renovacin del cancionero por un lado, y la concepcin de una msica nacional, por el otro. En relacin a lo primero, el escrito hace referencia a una primera etapa, tradicionalista y recopilativa del cancionero nativo, en la que el respeto del canon tradicional era un valor central. De este celo por las formas originarias y puras, sobrevendrn luego los vicios que quieren hacer del cancionero popular nativo, un solemne cadver, dir el manifiesto. No obstante, se le reconoce su funcin y justificacin en el proceso de conformacin y rescate del patrimonio vernculo, pero la fijacin de este estado degener en un folklorismo de tarjeta postal cuyos remanentes an padecemos, sin vida ni vigencia para el hombre que construa el pas y modificaba da a da su realidad15. Sealan a Buenaventura Luna y Atahualpa Yupanqui como los iniciadores del empuje renovador. En cuanto a la concepcin de nacin, seala que la bsqueda de una msica nacional de contenido popular es uno de los ms caros objetivos del pueblo argentino16, 11 Vila, Pablo. 1982. Msica popular y auge del folklore en la dcada del 60, Crear en la Cultura Nacional.

Buenos Aires, ao II N 10. p: 26. 12 Nos referimos especialmente al cantante Antonio Tormo. 13 Loc.cit. 14 Manifiesto del Nuevo Cancionero, Mendoza. Diario Los Andes, 11 de febrero de 1963. 15 [Loc.cit.] 16 [Loc.cit.]


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expresando que esa msica es la que representara al pas en su totalidad humana y regional17. Esto se explica por el planteo que realiza el Manifiesto en relacin a la hegemona que siempre ejerci Buenos Aires sobre el resto del pas, afirmando que esta deformacin geosociolgica18 que provoc en todos los rdenes de la vida del pas, tambin alcanz a la msica. Al denunciar que el interior del pas, como hombre, paisaje y circunstancia histrica19 queda relegado, denuncia un orden poltico y social imperante que determina las relaciones de poder internas. Por lo tanto, est planteando un pas real con una problemtica concreta, por lo que la construccin de Nacin que ello supone es tambin concreta, real, contrapuesta con la construccin de nacin idealizada de los cultores del tradicionalismo, funcional al ideal oficial de nacin. El manifiesto considera el auge del folclore que se estaba dando en esos aos (el boom del folclore) como una toma de conciencia del pueblo argentino. El auge de la msica folklrica es un signo de la madurez que el argentino ha logrado en el conocimiento del pas real, lo que coincide con la interpretacin ya comentada de Pablo Vila. Las expresiones del Manifiesto apuntan a postular un rol activo para este Nuevo Cancionero. Propone: - Aplicar la conciencia nacional del pueblo, mediante nuevas y mejores obras que lo

expresen. - Rechazar todo regionalismo cerrado y expresar al pas todo en la amplia gama de

sus formas musicales. - Rechazar y denunciar producciones burdas y subalternas que, con finalidad

mercantil20, atenten contra la inteligencia y moral del pueblo. - Buscar la comunicacin e intercambio con todos los artistas y movimientos

similares del resto de Amrica. - Luchar por convertir la adhesin del pueblo argentino hacia su canto nacional en

un valor cultural inalienable. Queda claro, a travs de estas proposiciones, el valor esttico y social otorgado a la msica por este Manifiesto. Se buscan nuevas y mejores obras21, pero estas deben ser portadoras de una identidad nacional; por otro lado el imaginario de nacin es de una nacin mltiple, compleja, compuesta por diversas regiones con sus propias expresiones y an abierta al intercambio con otras naciones. Este imaginario se acerca entonces a la realidad concreta de un pas o nacin. V. Algunas conclusiones preliminares

17 [Loc.cit.] 18 [Loc.cit.] 19 [Loc.cit.] 20 [Loc.cit.] 21 [Loc.cit.]


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Podemos plantear que la primera posicin, representada por los cristalizadores del folclore cuyano de la primera mitad del siglo XX, fue funcional a los conceptos nacionalistas que haban impregnado el campo intelectual argentino, respondiendo a una necesidad de la clase dirigente de construir una nacin y una identidad nacional homognea22. El protagonismo que tuvieron los artistas del perodo llamado de la cristalizacin fue tan fuerte que no slo propici la cristalizacin de estructuras musicales y modos performativos, sino tambin cristalizaron connotaciones ideolgicas en relacin con esas sonoridades. De este modo, fueron funcionales a los intereses del poder hegemnico, colaborando en la construccin de imaginarios culturales; inclusive buscaron legitimar su obra a travs de este imaginario construido. Reforzando el carcter de construccin, evidenciamos en la produccin de los cristalizadores esta divergencia entre el discurso de los textos y el de los metatextos. Para los renovadores, lo nacional deba representar el pas real, cotidiano, formado por sus diferentes expresiones, en cuyo concepto ocupan un lugar importante las reivindicaciones sociales del sector popular, planteando una identidad renovada y comprometida. El movimiento del Nuevo Cancionero fue denostado por los msicos tradicionalistas locales, quienes lo atacaron desde el punto de vista musical con la crtica de que eso no es folklore. Los discursos de algunos cultores y estudiosos otorgaron a la msica nativa valores de tradicin, autenticidad y perdurabilidad que significaran una representatividad cristalizada desde el punto de vista de los gneros y los valores que encarnan. La apropiacin de los gneros estaba en discusin, como tambin el concepto de lo nacional. Para expresar este importante debate que se plantea desde ambos lados, hemos tomado un metatexto de Jorge I. Segura23, periodista e historiador. En l se ocupa de los centros tradicionalistas de Mendoza, encargados de promover las actividades nativistas y folclricas, en especial la Federacin Cultural Tradicionalista, como la mxima institucin de este tipo. Dice:

Otro de los objetivos de la Federacin es restablecer y mantener la autenticidad de las expresiones folklricas regionales.() La Cueca y el Gato se bailan con la precisa modalidad cuyana. Trata ahora de que la Tonada retorne al viejo cauce vernculo, sustrayndola a las tendencias extranjerizantes que en materia musical priman entre la juventud, a la vez que defiende el patrimonio musical que nos viene del pasado contra las apropiaciones de msicos y cantores inescrupulosos24.

22 Snchez, Octavio. 2005. Nacionalismos y msicas tradicionales cuyanas: negociaciones en dos

momentos del siglo XX, Revista Argentina de Musicologa, N 5-6 (Miguel A. Garca, editor). Buenos Aires. Asociacin Argentina de Musicologa. p: 93.

23 Jorge I. Segura fue periodista e historiador. Segn datos obtenidos, fue un entusiasta cultor y divulgador del folclore criollo, a travs de peas y asociaciones por l organizadas.

24 Segura, Jorge. 1970. Entidades tradicionalistas folklricas de vigencia actual en Mendoza 1967. Msica y msicos de Mendoza. Desde sus orgenes hasta nuestros das (Autor: Otero, Higinio). Buenos Aires. Ediciones Culturales Argentinas. p: 178.


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