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de pesca con moscaLA CAÑA

Por Gabriel Luis Paccioretti

Parte II

En la nota del mes pasado co-menzamos a conocer la caña de pesca con mosca a través de algunos de sus aspectos más simples, ahora vamos por los más complejos.

Eque nos faltan sobre la caña de pesca con mosca

5) El peso de línea que son capaces de manejarSi bien la línea (las que antes eran llamadas co-las de ratón) será algo que trataremos en la nota dedicada exclusivamente a ella, debemos adelantarnos algo sobre ese tema porque tiene estrecha relación con la caña. Es muy importante ver la correspondencia que hay entre ambos elemen-tos porque, recuerde, aquí lanzamos la línea (que tiene el peso que necesita la caña para el lanzamiento) y no la

mosca. Las líneas están clasificadas por su peso con una serie de números que van desde el #1 (la más liviana) al #14 (la más pesada), y ese número corresponde a un estándar convenido por los fabricantes que lo acordaron hace bastante tiempo para tipificar el peso de los pri-meros 9 metros de la línea. Por ejemplo, los primeros 9 metros de todas las líneas #8 deben pesar idealmente 210 grains (1 grain equivale a 0,0648 gramos) aunque tienen un rango de toleran-cia entre 202 y 218 grains. Si no pesan eso, no son una línea #8.Esos primeros 9 metros de las líneas contienen el

peso que necesita, teóri-camente, la caña de

mosca para el lanza-miento. Y, aunque

todos digamos en forma coloquial (y todos nos entendamos), que “esa es una caña #5”, es erróneo decirlo de esa manera. Lo correcto sería decir que “esa

es una caña para línea #5”, porque lo que determina el “número” de la caña es el “número” de la línea o, dicho de otra manera, las cañas están diseñadas para lanzar un determinado peso de línea (#5, #6, #7, etc.) Simplificando, una caña para línea #5 lo es porque está pensada para lanzar el peso correspondiente a una línea #5.En este punto hay algo interesante de ver a la hora de comprar una caña. Como dijimos, cuando un fabri-cante dice que tal caña es para línea #8 está indicando que fue diseñada y fabricada para lanzar una línea de ese peso (entre 202 y 218 grains), pero esto no quiere decir que esa caña no sea capaz de lanzar una línea #7 ni una #9, porque de hecho podrá hacerlo pero se convertirá en una caña más rápida con la línea #7 y en más lenta con la #9 (lo de “rápido” o “lento” lo comprenderá cuando veamos el tema acción). Pero, acépteme un consejo, usted recién está empezando y todos esos experimentos déjeselos a los que ya tienen experiencia o espere a te-

nerla. Si el fabricante le dice que su caña es para línea #8, usted comience usando líneas de ese peso por lo menos hasta que tenga la experiencia para jugar con los márgenes. Es bastante común ver cañas económicas que dicen ser para varios pesos de línea, por ejemplo: se suele leer en la vara “#7-8” o peor aún “#7-8-9”, esto indica que el fabricante no sabe para qué línea es… ¡los chinos son bárbaros copiando! pero no saben demasiado de pesca con mosca. Con esto no quiero decir que sea una mala caña y, es más, quizás sea una buena caña… solamente es evidente que se trata de una copia de un diseño de alguna otra marca y que el fabricante no se anima a decir para cuál línea es. Si compra una de esas cañas, usted mismo deberá averiguar para que línea fue fabricada.Espero que a estas alturas no esté confundido. Seamos más prácticos y no se aflija… Usted no tiene que memorizar la cantidad

LOS DATOS QUE FIGURAN EN LA VARA DE ESTA CAÑA NOS INDICA QUE ES UNA CAÑA DE 9 PIES DE LARGO, QUE PESA 4 ONZAS Y 7/8, ES PARA LÍNEA 9 Y ES AC-CIÓN TIP-FLEX

LA TAPA DE ESTE TUBO NOS INDICA QUE ALBERGA UNA CAÑA PARA

LÍNEA #1, FULL-FLEX, DE 7 PIES Y 6 PULGADAS DE LARGO, Y QUE PESA 1

ONZA Y 3/8

n este artículo avanzaremos sobre dos temas muy importantes para

comprender y maximizar el aprovechamiento de una caña de mosca, como son: la noción de peso de la línea en relación a la caña y la acción de ella. Pero también son temas controversiales porque han despertado mil discusiones entre los mosqueros, que somos raros bichos amantes de los debates bizantinos. Como lo hemos advertido en la nota anterior, al final de la nota podrán encontrar mi mail personal para poder evacuar preguntas sobre estos u otros temas. Pero si usted es un viejo mosquero y tiene ganas de polemizar, por favor absténgase porque ese no es el objetivo de la presente nota. Este artículo, como todos los del presente curso a distancia, están al servicio de los que recién comienzan en la mosca y se expresa según la per-sonal forma de entender que tiene el escribiente y a su experiencia pedagógica en el tema… con todas las subjetividades que esto acarrea, como no podría ser de otra manera. Como dicen los viejos: “cada maestrito con su librito…”Sigamos, entonces, con el tratamiento de los puntos

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de grains que pesan los primeros 9 metros de todas las líneas desde la #1 a la #14. Simplemente le dirá a su vendedor de confianza “flaco, vendeme una lína #8” (ojo, no se esfuerce en tratar de pronunciar el # porque no tiene sonido… es como la H).Y si usted recuerda la nota de hace dos meses titulada “Los equipos, los peces y los ambientes”, dijimos que la línea es lo que permite lanzar la mosca, y el peso de esa línea está en estrecha relación con la potencia del equipo (cuanto más pesada la línea, más potente será la caña que la lance). Y, a su vez, esto se vincula con todas o algunas de las siguientes cuestiones: la delicadeza de la presen-tación, el tamaño del pez a pescar, la distancia a lograr, el tamaño de la mosca a lan-zar, etc. Si relee la primera y segunda nota de este curso lo verá muy claramente… pero vamos a retomar, entonces, algunas nociones que tocamos en las notas anteriores.Los mosqueros llamamos “presentación” a la forma en que cae la línea al agua y la delicadeza con que se posa la mosca en el agua, y es obvio que a mayor peso de la línea menor delicadeza en la presentación. Con los grandes peces cazadores como el dorado esto no es importante, pero sí lo es con las truchas que comen insec-tos y debemos imitarlos con moscas que deben posarse delicadamente sobre el agua y sin hacer demasiado disturbio. Si hablamos del tamaño del pez a pescar o del tamaño de mosca a usar (cosa que casi siempre están relacionadas porque los peces grandes generalmente exigen moscas grandes), es obvio que

necesitamos equipos más potentes cuando deseamos lanzar moscas grandes y queremos pescar peces grandes; pero no es algo tan claro si hablamos de la distancia a lograr. Cuando hablamos de lograr mayor distancia, es indiscutible que se lanza más lejos un equipo #6, #7 u #8 que un equipo #2 simplemente porque en los primeros tenemos varas más potentes que lanzan líneas más pesadas, de la misma manera que se lanza más lejos un señuelo más pesado que uno más liviano. Pero esto tiene un límite que fija la realidad: la comodidad y la fuerza física del pescador, por esto no necesariamente se lanza más lejos con un equipo #14 que con uno #8.Como dijimos (y no redunda repetirlo) a mayor peso de la línea, mayor será el tama-ño y peso de las moscas que podremos lanzar; así como será mayor también la distancia del lanzamiento y potencia de nuestro equipo (podemos pescar peces más grandes y peleadores). Pero menor será la delicadeza en la presentación del artifi-cial (cosa importante en la pesca de truchas) y menor la sensación de lucha.A menor peso de la línea podremos lanzar y presen-tar moscas más delicada-mente y sentir mucha más sensación de pesca, pero lograremos menos distancia y será dificultoso vencer los vientos o tirar moscas grandes. Generalmente las cañas de numeración baja se utili-zan para peces difíciles de engañar que exigen una muy buena presentación de la mosca, o para magnificar peces chicos buscando tener mayor sensación de pesca. Las cañas de numeración alta ordinariamente se

utilizan para peces grandes que presentan dura lucha y lugares donde es necesario lograr largas distancias o lanzar moscas grandes. Para sintetizar, reveamos el gráfico que le presentamos en una nota pasada:

GRÁFICO Nº1.No se asuste. Todo esto no quiere decir que es necesa-rio tener muchos equipos, solo estamos hablando de optimizar las situaciones de pesca. Como ya dijimos en notas anteriores, la elección del primer equipo debe ser hecha pensando en los peces y lugares donde más común-mente usted pesca. Segura-mente, al principio, usted pescará con un solo equipo todas las especies y en todos los ambientes, pero algún día se planteará la necesidad de adecuarse a otros lugares que visita menos frecuen-temente.

6) La acción o índice de flexión de la caña de pesca con mosca.Llamamos acción al tipo de flexión que experimenta la caña en el lanzamiento y demás situaciones de pesca. Este tema ha sido expli-cado de muchas maneras e, inclusive, diferentes marcas fabricantes han desarrollado sus propias nociones sobre el asunto; aunque no hay demasiadas variantes. Pero en lo que a mí respecta, existen básicamente 3 tipos de acciones: full flex (flexión total), mid flex (flexión media) y tip flex (flexión de

punta).Las tip flex (también lla-madas de acción de punta) son aquellas que, sobre todo para el lanzamiento, se curvan la parte superior (correspondiente a la punta). Son muy rápidas y permiten

desarrollar gran velocidad y energía en el lanzamiento.Las mid flex (también lla-madas de acción media) son las que en el lanzamiento trabaja la mitad de la caña. Son medianamente rápidas y tienen gran ductilidad.Las full flex (designadas también como de acción to-tal y antiguamente llamadas parabólicas) son aquellas que en el lanzamiento se curva toda la caña. Son suaves y lentas, especiales para presentaciones delica-das.Veamos los tres tipos de ac-ciones esquematizadas en el GRÁFICO Nº2.

También podríamos explicar la acción de la siguiente manera: la rapidez con la que una caña es capaz de recuperar su posición inicial luego de ser flexionada, por eso los mosqueros hablamos de cañas rápidas y lentas. Llamamos rapidez o lentitud a la velocidad que tiene una caña para volver a su posición original luego de la flexión. Como es obvio, las cañas full flex serán lentas y las tip flex serán rápidas. Por eso decíamos que es la capacidad de recuperación que posee la vara, por su-puesto que esto será en base

al material con que están construidas y a su diseño.Es cómico ver en los ne-

gocios a los compradores tomando las cañas por el grip (mango) y sacudirlas como si estuvieran haciendo esgrima con un florete, lo único que logran haciendo eso es sentir muchas vibra-ciones como si se tratara de un juguete de placer femenino. Lo más cercano a la verdadera acción de una caña (aunque en forma muy deficiente) es tomarla del mango y flexionarla SOLO una vez en forma enérgica para ver el comportamiento posterior. Pero si verdadera-mente se desea conocer la acción de una caña, la única manera es probándola con una línea y haciendo varios casts (lanzamientos) en un piletón o en una canchita de fútbol. Los negocios verda-deramente responsables del rubro no solo se lo per-miten, sino que con gusto lo acompañan a hacerlo.La elección de la acción es, en gran medida, realmente algo personal que tiene mucho que ver con el tem-peramento del lanzador. Los casters (lanzadores) tem-peramentales suelen sentirse más cómodos con cañas rápidas, mientras que los tranquilos suelen inclinarse por cañas lentas. Aunque no todo se reduce a esto porque también es importante pensar en qué tipo de pez usted pescará. Por ejem-plo, para pescar dorados y

peces de boca ósea y dura, se necesitan cañas tip flex para poder clavar la mosca

convenientemente porque usando una caña full flex la flexión de la vara absorberá la clavada amortiguando la penetración del anzuelo en la mandíbula. Por el con-trario, para pescar peces de bocas blandas o que exigen moscas muy chicas con tippets muy delgados como en muchas veces lo exigen las truchas, una caña full flex es lo indicado porque su flexión ayudará a proteger el tippet y evitar el desgarro de los labios del pez.Nuevamente, no se asuste… la cosa es más simple de lo que parece: las buenas mar-cas indican que tipo de ac-ción tiene la caña. De todas maneras rara vez encontrará cañas full flex para líneas mayores de la #7 o tip flex menores a #3.

7) Cuidados de una caña de mosca.Dado que no se usan

enchufes de metal y ambas partes (macho y hembra) son los extremos de los tra-mos de la vara, es muy im-portante que los tramos es-tén siempre bien enchufados porque de lo contrario esto puede provocar rajaduras longitudinales en el enchufe hembra. Cuando los tramos están bien enchufados, las paredes del enchufe macho y las del enchufe hembra es-tán en contacto absoluto sin ningún tipo de juego. Pero si están flojos, se produce un movimiento en el cual el enchufe macho hace palanca apoyándose en el borde de la hembra y el interior de la misma partiendo la vara a lo largo. Recuerde que debe revisar que sus tramos estén bien enchufados cada media o una hora.Otro aspecto a considerar es el de evitar la abrasión en los enchufes. Como dijimos más arriba, los enchufes no son de metal y son del mis-mo material que la vara por lo que su desgaste acorta la vida útil de la caña. Debe-mos cuidar que los enchufes estén libres de polvo o arena para evitar el desgaste por abrasión.También es importante revisar de vez en cuando el estado de los pasahilos para evitar el desgaste innecesa-rio de las líneas. Sucede que los pasahilos se desgastan con el roce de la línea y es necesario cambiarlos (sobre todo el puntero que es el primero que se roe y el más fácil de cambiar) porque luego éstos, una vez maltrechos, desgastan a la línea. Cambiar un pasahilo

puntero es muy económico, pero cambiar una línea es más costoso.Otro cuidado importante y simple a tener en cuenta para evitar roturas, es transportarla siempre en su tubo para evitar golpes y aplastamientos. Casi todas las marcas venden sus cañas en un tubo que las contiene y protege, pero si su caña no tiene tubo puede comprar un caño de PVC para desagües con sus respectivas tapas en una ferretería… y listo.Cuando la caña esté armada, transpórtela siempre por el mango (grip) con la vara ha-cia atrás para evitar roturas por tropezones o enganches en árboles y, cuando se esté cobrando un pez, no la agarre de otro lado que no sea el mango. Algo impor-tante también es no arquear la vara al desenchufar los tramos.Por último, cuando arrime su pez-cado (como decía el negro Gomariz) no arquee excesivamente la caña, este es un momento crítico que debe aprender a manejar. Al principio, utilice copos u otros utensilios que no lastimen al pez pero le den seguridad de no destrozar su caña en la primera pesca cual abnegada kamikaze.Si sigue estos consejos, ten-drá caña por muchos años. Recuerde que la caña es el elemento central del equipo, el que le brindará más satis-facciones y que le asegurará confianza en el río. Mucho mejor si elije una caña de buena calidad, con garantía y de marca recono-cida. Sepa que hay marcas que tienen garantía de por vida ante cualquier tipo de rotura, lo que les confiere gran valor de reventa. Pues-tas así las cosas, una buena caña, además de brindar tranquilidad en el río, es una inteligente inversión

Por dudas o consultas: gpaccioretti@yahoo.com.ar

Rincón de los que recién empiezan

Grip: mango de la caña

Tip: se llama así a la punta de la caña

Cast: en inglés, lanzamiento

Tippets: es la parte del leader más fina que oficia de fusible del equipo. Con peces de muy buena visión, exigentes y en aguas muy claras, además se utiliza para hacer “invisible” la conexión de la pequeña mosca con el resto del equipo.

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JUNIN DE LOS ANDESunín de los Andes es, fue y será la capital nacional de la trucha. Las razones fueron sobra-

das cuando le pusieron ese título, pero en los últimos años se suman nuevos motivos para renovar ese histórico apodo.Para la pesca con mosca criolla y muy especialmente para los de mi generación de pescadores, esta ciudad tiene algo mágico… una mezcla de realidades para los nuevos mosqueros, nostalgias para los viejos e historias de los pi-oneros del fly en la Argentina.Esa ciudad de la dura estepa patagónica enclavada junto al mítico Chimehuín, es dueña de una espectacular lista de posibilidades de pesca que hace realidad los sueños de cualquier pescador avezado o principiante. En un radio de 50 o 70 kilómetros a la redonda, menos de una hora en auto, tiene muchas y diferentes posibilidades para degustar y quedar satisfecho: pesca fina y técnica en el famoso Malleo, las flotadas en los gigantes Aluminé y Collón Cura, el delicado Quiquihue, los salmones del Curruhé Grande, las apacibles pescas en float-tube en el Curruhé Chico, el borrascoso Tromen, la famosa “boca” que no pierde su encanto a pesar de los años y todo el “Chime” a pocos minutos de la cabaña. Mil posibilidades al alcance de todos para llenarse de escamas.Pero Junín, además de presente, tiene una muy rica historia en la pesca con mosca argentina. Los pioneros, aquellos que “trajeron” el fly a estos arrabales del mundo, eligieron a esa ciudad y sus ríos como nido donde real-

FLY-EXPO Y LOS PRIMEROS PIQUES DE LA TEMPORADA EN:

Texto: Gabriel Luis PacciorettiFotos: Leandro Dela Croce y Dardo Tussi

mente se incubó la modalidad en nuestro país. Los nombres como Bebe Anchorena, Alan Fraser, Radziwill, Ginés Gomariz, Eliseo Fernández y tantos otros siguen sonando desde una época donde todos los caminos eran de ripio y muy pocos los locos que pescaban con anzuelos em-plumados.Y así crecimos muchos, so-ñando con aprender a pescar truchas con mosca viendo las revistas y leyendo los libros que nos hablaban de la famosa boca del Chimehuín y los submarinos que sacaban allí. Así, en esas décadas de sueños donde todo costaba un Perú, pacientemente aprendía-mos de los más avanzados y acumulábamos ganas hasta que los ahorros nos permitían poder viajar para cumplir los sueños de pescar como en las revistas. Jamás olvidaré mi primera trucha en el Chimehuín, en el primer viaje de pesca con mi hermano Ariel, y con una mosca que me regaló Héctor: una matona que me dio mi

primera arco iris patagónica. Me acuerdo de todo esto y, les juro, se me pone la piel de gallina. Fly-Expo 2010Desde hace algunos años, un grupo de soñadores y amantes de Junín de los Andes anda con la maravillosa y loca idea de hacer un homenaje a los pioneros de la pesca con mosca en nuestro país bajo la forma de una especie de centro cultural dedicado al fly fishing. Este lugar contaría, entre otras cosas, con un museo y un bar temático dedicado a los mosqueros argentinos. Esto será un gran aporte, no solo a la pesca con mosca, sino a toda la pesca deportiva nacional y, sobre todo, al patrimonio turístico y cultural de toda la patagonia, donde la pesca con mosca es un elemento fundamental de su perfil deportivo y turístico.Este grupo de soñadores y amantes del fly se ha dado a llamar “La Hermandad de la Mosca”

y han gestado la Fly-Expo con el objetivo de recaudar los fondos necesarios para el proyecto del museo. La Fly-Expo es una exposición anual del fly fishing, lanzamiento y atado de moscas que cada año congrega a más participantes: asociaciones de mosqueros, fabricantes, importadores, flyshops, operadores turísti-cos, oficinas de turismo municipales y provinciales de todo el país, etc. Inclusive entidades científicas abocadas a la biología acuática.Dentro de las actividades, los participantes pudieron aprovechar conferencias, demostraciones, presentación de novedades y un concurso de lanzamiento de distancia y pre-

cisión. Todas actividades de alto interés y gran valor técnico para el deporte en general y para la modalidad en especial. El evento se de-sarrolló en el mejor ambiente de camaradería e intercambio digno de pescadores.Debo rescatar, entre las tantas conferencias, algunas de importancia superlativa como las dos desarrolladas por im-portantes cuadros científicos: una sobre la peligrosa alga que amenaza nuestros ríos y otra sobre el manejo racional de la pesca. Sobre la primera, es importantísimo recordar a todos los pescadores que irán a pescar a la patagonia, que cada vez que entren en un nuevo río o ambiente deben desinfectar sus waders y botas de vadeo, tal como lo piden las autoridades para man-tener sanos nuestros ríos y sus truchas. Solo de nosotros depende que podamos seguir pescando las truchas que los extranjeros nos envidian. Solo a título informativo para quienes hace poco que comienzan en la pesca de tru-chas, son varios los enemigos que acechan la incomparable calidad de nuestras aguas y su pesca, pero los más peligrosos son: la enfermedad del torneo que es un mal que ataca al sistema nervioso de los peces y la temible alga conocida como Moco de la Roca. Esta alga que está causando desastres en varios países,

no afecta directamente a las truchas sino que cubre los fondos de los cursos de agua imposibilitando la vida de los insectos y demás seres vivos que son el alimento de los salmónidos, impide el desove de las truchas, asfixia los ale-vinos, etc. Una vez que el río fue contagiado y colonizado por el alga, es imposible su desinfección. Esta alga no está lejos, y de hecho hay muchos cursos chilenos infectados. En nuestro país ya se la ha visto en dos ríos pero es funda-mental evitar la propagación. Solo depende de nuestra responsabilidad ser o no propagadores involuntarios de estas amenazas. Por favor lea con detenimiento el cuadro informativo específico que se encuentra junto a esta nota.

Una salidita al MalleoMi buen amigo y mejor guía de pesca, el sanrafaelino Dardo Tusi, nos llevó a visitar el espectacular río Malleo y testearlo a principios de temporada. Grande entre los grandes, este río es objeto de mi más ferviente pasión… y como muestra basta un botón: mi perro lleva su nombre y mi hijo zafó de llamarse así solo por la firme oposición de mi esposa. Este río me ha dado algunas de las mayores satis-facciones de mi vida pesca-dora, dentro de las cuales se

halla una inolvidable marrón de 4,800 kg que algún día le contaré con más tiempo.El río estaba alto y caudaloso por el deshielo y las lluvias tardías, como era de esperar en toda apertura de tempo-rada, pero con agua muy clara que lo habilitaba para tener una linda pesca. Dardo fue tajante: “Está está alto pero lindo para pescar… vamos Malleo abajo porque arriba se pone bravo…” Para quienes no conocen el río, les explicamos el dictamen de Dardo por algunas cuestiones bastante importantes, tanto para conocer este curso y como para aprovechar la pesca en otros similares. Este río tiene dos fisonomías total-mente distintas: arriba de los puentes carreteros (el denomi-nado “Malleo Arriba”) sus márgenes están mayormente cubiertas por sauces o ñires y suele encajonarse con fre-cuencia en vallecitos angostos y riberas altas, mientras que aguas abajo de los mismos (el llamado “Malleo Abajo”) tiene márgenes más libres de vegetación y más bajas. Esto hace el río más accesible y más fácil castear.Efectivamente las truchas estaban en las márgenes, al resguardo de la fuerte corrien-te y al acecho de la comida. Cuando el río está con cauce normal, se ubican en las zonas profundas pero en estas condiciones estarían muy

JDidymosphenia geminata o moco de la roca: lo que no se puede desconocer.Esta especie y otros peligros biológicos pueden permanecer durante varios días adheridas al calzado, equipos de pesca, ruedas de trailers, embarcacio-nes, etc.Por favor, colabore siguiendo las siguientes acciones preventivas:1. RETIRAR restos de veg-etación, barro, algas, sedimento o agua de sus equipos y embar-caciones antes de abandonar lagos o ríos. 2. REMOJAR todo lo que estuvo en contacto con el agua durante AL MENOS UN MINUTO en un recipiente con agua con lavan-dina (200ml cada 10 litros de agua), en agua caliente a más de 60º o en agua con sal al 5% (500grs cada 10 litros). Si los equipos absorben agua (por ejemplo un chaleco) dejar en remojo 30 minutos.3.SECAR, si la limpieza no es posible, dejar secar totalmente los equipos al sol y esperar 48hs antes de volver a usarlos.Ayude a proteger nuestros ambi-entes acuáticos de organis-mos invasores. Sus waders, botas de vadeo y embarcaciones pueden transportar accidentalmente esta alga y otros agentes peligro-sos. Sea responsable y siga las medidas de sanidad ambiental sugeridas por las autoridades y científicos.Fuente: Dirección de Pesca Continental de la Provincia de Chubut.

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lejos de la alimentación que les trae la correntada. Si usted recién comienza en la mosca, debe recordar que las truchas se alimentan básicamente de insectos (cualquiera sea su es-tado de metamorfosis: larvas, pupas, ninfas o adultos) y ese alimento es el que les acarrea la corriente.La pesca fue divertida y nos dio marrones y arco iris entre los 500 gramos y el kilo. Las marrones estaban en mejores condiciones físicas porque, al haber desovado antes, tuvieron más tiempo para recuperarse, pero esto es algo que no sorprende y que ya sabemos sobradamente, aunque para nuestra asombro las arco iris no estaban tan flacas como esperábamos. La diversión fue por la forma en que pudimos pescar-

las. Íbamos por el camino donde faldea el río y Dardo, conocedor como pocos del Malleo, nos las indicaba con ojo clínico; luego nos ubicábamos aguas abajo lanzando de manera tal que la mosca le llegara llevada por la corriente. Se usaron moscas secas y ninfas pequeñas, un verdadero lujo.A modo de síntesis, el Malleo está hermoso y se avizora una temporada linda para la pesca fina… como es común en este maravilloso santuario de la pesca con mosca.

Flotar en noviembreComo no podía ser de otra manera con Dardo, acepta-mos la invitación de flotar el enorme Collón Curá, río que recibe como tributarios a muchos otros cursos de una extensísima cuenca que arras-tra agua desde el norte, en los pagos de Aluminé y Villa Pehuenia: Pulmarí, Quillén, Malleo, Aluminé, Catán Lil, Chimehuín… y mil arroyos más. Este normalmente ancho curso que desagua en la repre-sa Alicurá, en noviembre está muy alto y cargado de mucha agua con motivo del deshielo, lo que obliga a pescarlo de manera diferente que en el resto de la temporada. Dardo optó por navegar con la balsa por los brazos menores que

son estacionales y que son fruto del desborde, lo que permitió evitar la corriente excesiva y pescar con más tranquilidad. Estos brazos también podrían pescarse va-deando, aunque con alcance mucho más limitado.La pesca fue buena y el Collón Curá pagó muy bien con muchas truchas entre los 500 gramos y el kilo y medio. Como era de esperar, las arco iris todavía estaban un poquito flacas pero dieron buena pelea. En la pesca dominaron los streamers y las ninfas con droppers obtenien-do piques alternados, tanto en la ninfa como en la seca que oficia de strike-indicator (indicador de pique). Sobre el uso del dropper, que muchos consideran antideportivo, este año tenemos la novedad que es aceptado por el reglamento en la provincia del Neuquén; quizás porque es una técnica muy usada por pescadores ex-tranjeros que vienen a pescar. Nosotros usamos grandes Elk Hair Caddis como indicado-res de pique y ninfas ligera-mente lastradas.Un lugar digno de ser des-tacado, fue la desembocadura del Chimehuín en el Collón Curá, donde nos apeamos para pescarla con más deteni-miento. Este lugar resultó ser magnífico y dio muy buenos resultados pescarlo en las aguas tranquilas de las már-genes, por las mismas razones ya explicadas más arriba.

Para seguir flotando, pero esta vez por medios propios, Dardo también nos invitó a pescar al Curruhé Chico, un lago cercano a la ciudad y de pequeñas dimensiones, enclavado entre bellísimos bosques que nos dieron un paisaje muy diferente a las dos pescas hechas en los días anteriores.Pescar en float-tube es una experiencia muy particular que trato de no perdérmela cuando aparece como posi-bilidad. Pescar desde el lago en ese pequeño flotador es experimentar el paisaje de manera profunda y pescar entre las truchas que se ven nadar junto a uno mismo. Pescamos las costas con juncos que dieron fontinalis y percas con líneas de hun-dimiento usando streamers verde oliva e imitaciones de ninfas de odonatos. Es algo para no perderse. Mirando hacia adelante en la temporada, por lo que vimos y si no pasa nada extraño, la cantidad de agua en los ríos será buena, lo que permite pensar en una buena tempo-rada de pesca Agradecemos a Dardo TusiT. (02972) 492601www.pescapatagonia.com.arpesca@jdeandes.com.arinfo@pescapatagonia.com.ar

Rincón de los que recién empiezan en la pesca con moscaWaders: son botas enterizas que pueden ser hasta la cintura como pantalones o hasta el pecho.Botas de vadeo: son los zapatos especiales que se usan con los waders cuando no tienen las botas unidas a ellos.Droppers: es cuando se usan dos moscas, una seca y una ninfa, en tándem. La ninfa va en el extremo del leader y pesca por debajo de la superficie, y la seca se coloca más arriba en el leader que, además de pescar como una seca tradicional, funciona como indicador de pique (como una boyita para decirlo más simplemente) pero también sosteniendo a la ninfa a una determinada distancia de la superficie y evitando que vaya demasiado cerca del fondo.Strike-indicator o indicador de pique: es un pequeño elemento flotante de corcho, madera balsa, foam, etc. que oficia como una pequeña boyita e indica cuando una trucha toca la ninfa.Float-tube: también conocido como belly-boat, es un flotador para pescar solo, como una goma de camión que usan los niños en los ríos para jugar donde uno va sentado en su centro.Odonatos: es el grupo de insectos que agrupa a los aguaci-les, caballitos del aire, libélulas. Son de aguas sin corriente (lagos, lagunas, pozones de los ríos, etc.)