editorial · 2019-04-10 · poderoso por la participación de tantos hijos espirituales que les ha...

2Editorial

Presidente Apóstol Dr. Sergio Enríquez

Directora

Licda. Paola Enríquez

Coordinador EditorialRafael Molina

Diagramación y Artes Internos

David Lima

Corrección y RedacciónKarina Estrada

Diseño de portada

Alfredo Ríos

Preguntas y [email protected]

Impreso enDinámica Gráfica S.A.

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EQUIPO DE TRABAJOCuando hablamos de cuadridimensión prácticamente estamos refiriéndonos a cuatro dimensiones. En lo natural se pueden apreciar únicamente tres que son: longitud, anchura y altura, pero cuando entra en ese esquema el número cuatro podemos ver la profundidad la cual ya es algo que va más allá de lo físico.

En la Palabra de Dios podemos ver ese cuarto elemento muchas veces, por ejemplo el libro de Ezequiel nos habla de cuatro medidas del río de Dios; el Cantar de los cantares nos habla de cuatro medidas de la amada; Proverbios nos menciona desde el principio, cuatro formas de llegar a la bendición y permanecer en ella; y así lo podríamos mencionar en todos los libros de la Biblia. Sin embargo ningún capítulo de la Biblia contiene tantas referencias a esa “cuadridimensión”, como el capítulo treinta de Proverbios en el cual aparecen por lo menos siete menciones, de las cuales trataremos de abordar seis de ellas en esta revista para poder descubrir el misterio de las seis “cuadridimensiones” del libro de proverbios.

En esta oportunidad El Señor nos ha bendecido con un grupo de más de ciento cincuenta escritores de la congregación que pastoreo dentro de los cuales tuvimos que escoger únicamente el 10% debido al corto espacio de la revista; sin embargo, mi corazón está agradecido con el Señor Dios todo poderoso por la participación de tantos hijos espirituales que les ha sido entregada una pluma para poder predicar las verdades preciosas de la Biblia por el medio escrito, invitándoles a que no cesen de hacerlo.

Sirva este pequeño mapa para conocer las seis cuadridimensiones de Proverbios 30.

Sergio Enriquez

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APOSTÓLICOConsejo “Todo lo que había sido cortado y su raíz

marchitado, en el Nombre de Jesús reverdecerá y dará fruto abundante”

3EDICIÓN 106 | ENERO 2019

Proverbios 30:11 describe a una generación que maldice a su padre. Se debe considerar que al referirse la Biblia a una generación, se refiere a: Un grupo de personas en un espacio de tiempo, que comparten una formación y educación, una influencia cultural y social semejantes, que se comporta de una manera similar, y que se pueden comparar en algunas características. Al referirnos a la generación que maldice a su padre, es una generación que involucionó, al grado de que no tiene capacidad de bendecir. Llegaron a ser una generación que su característica notable, es que no puede bendecir a las personas que los engendraron. A esta generación, la Biblia la describe como la de los últimos días, que entre sus características está el ser desobedientes, el ser rebeldes a los padres (2 Timoteo 3:1-4).

Actualmente, sobre la sociedad hay una influencia por los medios de comunicación; donde se proyecta una desvalorización hacia la figura paterna, al grado que le dan mayor énfasis a la figura materna.

La palabra “maldición”, es un compuesto de palabras que indican un “decir mal”; y según el diccionario Strong, el original es la palabra Calál (H7043), que significa: abatir, despreciar, tener en poco, ser insignificante, destruir. Cuando una persona pierde la capacidad de bendecir a su padre, abre una puerta para que su vida vaya en decadencia; al grado que alguien que maldiga a su padre y a su madre, su lámpara se apagará. A primera vista, se puede decir que el que cae en esta condición estará en una densa oscuridad, a tal grado que no puede distinguir el rumbo que toma su vida. Figurativamente, significaría caer en miseria, destrucción, tristeza y sufrimiento; de manera que aunque trate de ver, no encontrará el rumbo de su vida (Proverbios 20:20). Esta misma cita nos indica a alguien que pierde la capacidad de ver bien, dejó de tener visión 20/20, su vista dejo de ser perfecta, espiritualmente hablando .

El que a alguien se le apague la lámpara, también indica que se ha apagado su

espíritu. Esto deja ver que ha muerto espiritualmente, porque la lámpara en la Biblia, representa el espíritu del hombre (RVA 1989 Proverbios 20:27). Al apagarse el espíritu, no tendrá la capacidad de escudriñarse a sí mismo.

El no bendecir al padre y a la madre, porque se les desprecia o menosprecia, burlándose de ellos, hace perder la visión. Es decir, que no tiene una esperanza para su futuro, no tiene una expectativa de lo que espera de su vida; porque al deshonrar padre y madre, pierde sus ojos, como lo describe Proverbios 30:17.

Dios que es soberano y sabio, ha dejado su palabra, para abrir los ojos de aquellos que por alguna causa no tuvieron un buen ejemplo paterno o materno. Para los que vivieron la ausencia de alguno de sus padres, o que tuvieron padres irresponsables; lo cual provocó heridas graves en sus corazones, impidiéndoles poder bendecirlos. Ahora pueden acercarse a su palabra, para que por medio de su Espíritu Santo, puedan comprender que hay una bendición al ser restaurados de sus heridas; y por consiguiente, puedan perdonar a sus padres. Ya que quien recibe a Cristo en su corazón, recibe la capacidad de perdonar toda ofensa; y al ser libres de esa carga, puede proclamar una bendición para sus padres. Para que se cumpla en su vida esta promesa: ”Que tus días sean prolongados y te vaya bien en la tierra, porque este es el primer mandamiento con promesa, para los que bendicen a padre y a madre”. (Efesios 6:2).

Nuestro Dios es un padre, de tal manera que en esta faceta, él se manifiesta como: Padre creador(PDT Santiago 1:17); Padre amoroso (RVC Proverbios 3:12; Padre proveedor (NT-CAS Lucas 11.13); Padre de misericordias (BLA 97 2 Corintios 1:3); Padre compasivo (Salmos 103:13); Padre de huérfanos (BAD Salmos 68:5). Por eso cuando Jesús vino a esta tierra, una de las cosas que manifestó, es que él venía a cumplir la voluntad de su Padre. Nos mostró el camino al Padre, para que por medio de Él, recibamos un alto grado de honor, como es ser llamados “Hijos de Dios”. Al ser hijos de Dios, hay que comprender que Él nos está dando la capacidad de reconocer paternidad en Dios; al grado que toda orfandad se anula, y se cumple la palabra que dice“Porque

aunque mi padre y mi madre me hayan abandonado, el SEÑOR me recogerá”. (LBLA Salmos 27:10).

Dios es el padre de nuestro espíritu, los padres biológicos del cuerpo. También dejó una gran bendición en su iglesia, levantando ministros genuinos con una unción de paternidad; para que por medio de ellos, se pueda restaurar a todos aquellos que en mayor o menor grado, fueron dañados en la paternidad con sus padres biológicos. Al ser restaurados, pueden ser levantados, y alcanzar la plenitud que el Padre designó para cada uno de sus hijos. Por eso el Apóstol Pablo se refiera a Timoteo como: “verdadero hijo en la fe”, “amado hijo”, porque Dios lo utilizó para hacer una función paterna, ya queel padre biológico de Timoteo fue un griego. Esto significa que; lo que un padre biológico no pudo completar, el ministro que Dios levanta, termina la obra que Él empezó.

Citas bíblicas para estudio:

Filemón 1:10

Hebreos 12:9

Tito 1:4

1 Timoteo 1:2

2 Timoteo 2:1

2 Timoteo 1:2

América de Mohum

Jeanny Juárez

Manolo Ramírez

Mateo Pérez

Nohemí Méndez

Tamara de Salguero

Víctor Quezada

GeneraciónMaldiciente

Coordinador: Abraham de la Cruz

Redactores:

4 EDICIÓN 106 | ENERO 2019

Cuando hablamos de generación, nos referimos a un grupo de personas que han recibido el mismo material genéti-co, lo cual los hace tener parentesco de consanguinidad por ser descendientes de los mismos antepasados. El término generación también hace referencia al grupo de personas que nacieron en fechas cercanas y han recibido el mis-mo tipo de educación, o que han sido influenciadas cultural y socialmente de manera semejante.

Según la influencia que se haya tenido, cada generación adquiere un nombre es-pecífico; por lo que existen diferentes ti-pos de generaciones. Proverbios 30:11-14 nos habla de cuatro tipos de generaciones que fueron mal influenciadas. En este artículo hablaremos de la Generación Hipócrita:

“Gente que se tiene por pura, pero no está limpia de su inmundicia”. (Proverbios 30:12).

Durante su ministerio, el Señor Jesucristo confrontó de manera directa a los hipócri-tas de aquella generación, diciéndoles:

“¿Por qué veis la paja que está en el ojo de tu hermano, y no echas de ver la viga que está en tu propio ojo?” (RVR1960 Mateo 7:3).

“¡Hipócrita! Saca primero la viga de tu propio ojo y entonces veras bien para sacar la paja del ojo de tu hermano”. (RVR1960 Mateo7:5).

Como hijos de Dios, Él nos llama primero a ver nuestro interior; lo cual requiere una actitud humilde para reconocer nuestra naturaleza de hombre pecador, como lo hizo David al decir:

“Oh Dios, tú conoces mi insensatez, y mis transgresiones no te son ocultas”. (LBLA

Salmos 69:5).

Debemos recordar que todo lo oculto un día habrá de manifestarse (Lucas 8:17).

Muchas veces a causa de esa genética de hipocresía, podríamos estar acusando o juzgando a nuestro hermano, lo cual nos convierte en jueces. Sin embargo, dejar de hacerlo traerá bendición; pues en su pal-abra nos dice:

“Aquí estoy”. “Si quitas el dedo acusador y las palabras perversas”. (PDT Isaías 58:9).

En lugar de señalar y juzgar cruelmente a nuestro hermano, el Señor nos llama a restaurarlo; como escribió el Apóstol Pab-lo en Gálatas 6:1: “Si alguno es sorpren-dido en alguna falta, vosotros que sois espirituales restauradle con espíritu de mansedumbre, mirándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.” Una vez más nos manda a ver nuestro interior, así que parte del antídoto contra la hipocre-sía, es aprender a mirarnos primero a no-sotros mismos, antes de emitir un juicio.

¡Ay de ustedes, maestros de la ley y faris-eos, hipócritas! Que son como sepulcros blanqueados. Por fuera lucen hermosos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de podredumbre. Así tam-bién ustedes, por fuera dan la impresión de ser justos, pero por dentro están llenos de hipocresía y de maldad”. (NVI Mateo 23:27-28).

En la biblia podemos observar actitudes de personajes, incluso cercanos al Señor Jesús; que tuvieron actitudes que pare-cían puras, pero en el fondo eran inmun-das. El caso más conocido es el de Judas, cuando una mujer derrama perfume de nardo puro sobre Jesús. Judas entra a es-cena en el capítulo 12 de Juan y versículo 5 diciendo: “¿Por qué no se ha vendido este perfume por el equivalente al sala-rio de trescientos días, para ayudar a los pobres?”. Seguramente las palabras de Judas despertaron la misma duda en al-gunos asistentes que estaban en el entor-no, sin embargo, lo que movía a Judas no era algo que provenía de la luz, si no su insaciable amor por el dinero; que a través de la hipocresía lo revistió de bondad para parecer íntegro y puro.

Por ello se vuelve trascendental que día a día nos examinemos, y hagamos una in-trospección de lo que tenemos en nuestra mente y en nuestro corazón preguntándo-nos: ¿qué es lo que realmente nos mueve a hacer lo que hacemos? y suplicarle al Señor en nuestras oraciones que nos llene de humildad y revelación, como al Rey Da-vid en los diecinueve versículos del Salmo 51. Para pedir misericordia (Salmos 51:1), para orar como conviene (Salmos 51:2), para reconocer nuestra condición (Salmos 51:3), para declararle nuestras malas ac-ciones (Salmos 51:4), para alcanzar la sin-ceridad en lo íntimo delante de Él (Salmos 51:5), y si caímos; saber que hay esper-anza de empezar de nuevo con un nuevo corazón y con un espíritu recto e intach-able (Salmos 51:10). Recordemos que la levadura de los faris-eos es la hipocresía y que un poco de le-vadura fermenta toda la masa (Gálatas 5:9). Debemos pues limpiarnos de toda levadura, de toda hipocresía y de todo aquello que desagrade a Dios haciendo una evaluación de nuestro ser interior, y esto sólo se logra al exponernos a la Pal-abra de Dios ya que es más cortante que toda espada de doble filo, y penetra hasta lo más íntimo, discerniendo aún las inten-ciones del corazón. Esa misma Palabra nos ayudará a ser lavados:

“Entonces os rociaré con agua limpia y quedareis limpios, de todas vuestras in-mundicias y de todos vuestros ídolos os limpiare” (LBLA Ezequiel 36:25).

Así que si hemos detectado actitudes de hipocresía en nuestro interior, debemos buscar ayuda y limpiarnos constante-mente. “Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios” (Ma-teo 5:8).

Generación

HipócritaJeniffer Decaro / Jesser JuárezCoordinador: Hilmar Ochoa


El deseo de Dios es bendecir, cumplir sus promesas en nosotros y en nuestras generaciones. (Salmos 24:3-6). En este tiempo donde la amargura, la violencia, la muerte y la falta de amor, han gobernado en el corazón de muchos; es necesario cambiar la genética de nuestro ser integral. (1 Tesalonicenses 5:23).

¿Cómo empezaremos a cambiar? Inclinando nuestro oído a las palabras de nuestro buen Dios. Contando a la generación venidera las alabanzas de Jehová, su potencia, y las maravillas que hizo; para que no sigan el ejemplo de nuestros antepasados que era considerada una generación contumaz y rebelde (Salmos 78:1-8).

“Hay generación cuyos ojos son altivos.

Y cuyos párpados están levantados en alto” (RVR1960 Proverbios 30:13). Este texto habla de una generación de ojos altivos (otras versiones dicen: BAD: Se creen muy importantes, BLA95: Ojos despreciativos, NTV: Contemplan a su alrededor con soberbia, PDT: Se creen mejores que los demás). A través de la palabra de Dios, nos damos cuenta de que eso es pecado (Proverbios 21:4). Si queremos cambiar, debemos evangelizar a nuestras generaciones y llevarlas a Jesucristo. Si mantenemos esa actitud no agradaremos a Dios, porque Él aborrece los ojos altivos (Proverbios 6:16,17), la versión LBLA dice “ojos soberbios”. Viendo estos pasajes, nos damos cuenta de que no podemos tener mayor concepto del que debemos de tener (Romanos 12:3). Si no cuidamos la humildad en nuestro corazón, veremos a nuestros hermanos con desprecio; y podemos perdernos la oportunidad de ser edificados por los dones espirituales que Dios les ha dado. Incluso no recibir la bendición que Dios tiene para nosotros a través de un genuino

ministro.

Generación viene del H1755 Dor, que significa: Edad, era, linaje, morada, nación, descendiente, posteridad, siglo. Lot tuvo un hijo producto de su incesto, y se llamó Moab. De allí se desprenden los moabitas, y esta generación se caracteriza por su altivez. (LBLA Jeremías 48:29) habla de su arrogancia, de su altivez y de su soberbia. Espiritualmente podemos estar siendo influenciados por esta generación (obra de la carne); no podemos ser gobernados por la altivez o soberbia, debemos dejar que el Espíritu Santo transforme nuestro ser, para tener una mirada limpia, pura delante de Dios y delante de los hombres.

Ojo viene del H5869 Ayin, que significa: Agradar, entre otras acepciones. Comparándolo con la Biblia, vemos que Dios se agrada de nosotros como le pasó a Abel; pero también se puede desagradar como le sucedió a Caín (Génesis 4:4-5). Sabiendo que la Palabra nos enseña que la voluntad de Dios es buena, agradable y perfecta; debemos buscar la perfección (madurez), conociendo que el vínculo entre lo bueno y lo perfecto es AGRADAR, debemos buscar ser agradables quitando toda altivez de los ojos.

Altivo viene del H7311 Rum, que significa: Estar elevado, acrecentar, alabar, hacer alarde, aumentar, excelso, glorificar. La Palabra nos enseña que toda alabanza, toda gloria y toda honra sea solo para el único y sabio Dios. Cuando perdemos ese enfoque y lo ameritamos a nosotros mismos, estaremos en una posición de altivez y eso nos llevará a la humillación (RVR1960 Isaías 2:17, Lucas 14:11). Veamos algunos ejemplos de altivez.

Mical

“Cuando el arca de Jehová llegó a la ciudad de David, aconteció que Mical hija de Saúl miró desde una ventana, y vio al rey David que saltaba y danzaba delante de Jehová; y le menospreció en su corazón”. (RVR1960 2 SAMUEL 6:16).

La altivez de ojos va ligada con el corazón; por eso la Biblia dice sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón, porque de él mana la vida. Podríamos juzgar con altivez a los siervos que se gozan y alaban a Dios

con todas sus fuerzas; puede haber algo dentro de nuestro corazón que tengamos en contra de un hermano, porque es bendecido aún más que nosotros, por lo que Dios le ha dado.

Goliat

“Y cuando el filisteo miró y vio a David, le tuvo en poco; porque era muchacho, y rubio, y de hermoso parecer”. (RVR1960 1 Samuel 17:42).

Goliat tenía sus ojos llenos de orgullo, por esto miró con menosprecio a David; ya que se miraba más grande y más fuerte que el dulce cantor de Israel. Una de las razones por la que lo menospreció fue por su juventud. Podemos sentirnos más expertos, fuertes o hábiles que los jóvenes. Sabiendo esto, Pablo exhorta a Timoteo a no dejarse menospreciar por ser joven, ya que era un enviado que iba a dar instrucciones en Creta a personas mayores que él. El cuidado de un padre espiritual nos ayuda a no aceptar el menosprecio en nuestro corazón.

A los ricos se les insta a no ser altivos, según 1 Timoteo 6:17; la altivez tiene relación con la confianza en las riquezas. Todo proviene de la mano de Dios, si Él nos da la vida y la da en abundancia, toda gloria es para Él.

El Señor Jesucristo viene pronto, y nosotros como su amada debemos prepararnos para el encuentro con Él. Vemos en Cantares 5:12, que los ojos de la amada son como palomas junto a los arroyos de las aguas (Palabra), que se lavan con leche (Doctrina), y a la perfección colocados; es decir, al ser ministrados por la Palabra de Dios, seremos salvos de esta perversa generación.

Generación de ojos

AltivosJorge SaenzCoordinador: Willy Gonzáles


“Hay generación cuyos dientes son espadas, y sus muelas cuchillos, para devorar a los pobres de la tierra, y a los menesterosos de entre los hombres”. (RVR1960 Proverbios 30:14).

Al hablar de generación se hace referencia a un grupo de hombres, nacidos en fechas próximas, que recibieron estímulos similares; y por lo tanto, comparten comportamientos, intereses y tienen una formación intelectual semejante. (Vicente, 1990).

Metafóricamente, Proverbios 30:14, alude a un grupo de personas de las cuales define una característica sobresaliente: que tienen dientes y muelas. Usualmente en la Biblia, los órganos bucales se relacionan con armas de agresión.

“Un arma es una herramienta de agresión, y puede ser utilizada contra los seres humanos en tareas de ataque, defensa y destrucción, o simplemente como una efectiva amenaza”. Las escrituras establecen varios tipos de armas de guerra; las armas que tipifican a los dientes y a las muelas son espadas, cuchillos, lanzas, y/o flechas; y pertenecen al tipo de punzocortantes, que se caracterizan por la capacidad de cortar, herir o punzar. Asimismo, la boca es el órgano que juntamente con la lengua, los dientes y la garganta, emiten la voz y logran la pronunciación de las palabras. De aquí se puede generar la analogía, según la función que estos términos ejercen, siendo así: Órganos bucales es a palabras, lo que armas de agresión es a herir. En este sentido, se entiende que la característica de esta generación es que utilizarán las palabras para dañar, herir, atacar y destruir.

En el libro de Mateo también hay cuatro tipos de generaciones, y una ellas es la generación de víboras (Mateo 12:34); refiriéndose explícitamente a la generación que no puede hablar cosas buenas, porque son malos. Las palabras son las consecuencias de los pensamientos, y estos rigen el comportamiento.

Como se estableció anteriormente, el rasgo distintivo de esta generación es utilizar el habla como instrumento bélico; con el objetivo de devorar, consumir y matar al receptor. Las palabras como instrumento de agresión

(DHH Salmos 64:3-5). “Afilan su lengua como espada y lanzan como flechas palabras venenosas. Desde su escondite disparan contra el inocente; disparan por sorpresa y sin temor. Se animan entre sí a hacer lo malo”.

Este tipo de personas utilizan las palabras venenosas para atacar, es decir, su propósito es dañar con amargura. (NBL, “lanzan palabras amargas como saeta”), al inocente. En TLA Salmos 140:3 dice “Más que gente, parecen víboras; hablan, y sus palabras son venenosas e hirientes. A José le causaron amargura, lo asaetearon y lo aborrecieron los arqueros.

(DHH Proverbios 12:18) “Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada, pero la lengua de los sabios es medicina”.

Este tipo de personas lastiman adrede insultando cuando hablan, provocando heridas a los que escuchan. Un ejemplo es el rey Saúl, (NBLH 1 Samuel 20:30). NBLH)

(RVG Salmos 55:21 RVG). “Las palabras de su boca fueron más blandas que la mantequilla, pero guerra había en su corazón: suavizó sus palabras más que el aceite, mas ellas fueron espadas desvainadas”.

Estas personas tienden a hablar con deslealtad. Utilizando palabras que en apariencia son inofensivas y agradables, pero su trasfondo es engañar y traicionar. Regularmente, el rol del traidor consiste en dañar a personas cercanas, ya que estarán indefensas o no esperan ser atacadas (Salmos 55:12-14). Un ejemplo es Judas traicionando a Jesús.

(DHH Proverbios 11:9). “Las palabras del malvado destruyen a sus semejantes...”

Este versículo en la versión JBS, se traduce como: “El hipócrita con la boca daña a su prójimo”. Es importante señalar que a quienes se les dijo “generación de víboras”, fue a los religiosos de las corrientes de los fariseos y saduceos (Mateo 3:7). La hipocresía, es el comportamiento de un engaño deliberado al resto de las personas, característica de esta generación.

¿Quiénes son susceptibles a este tipo de agresión?

Los pobres y menesterosos. Un pobre es aquella persona que es escaso o falto en algo. Mientras que un menesteroso es un necesitado.

Las viudas (Mateo 23:14). Una viuda es aquella que ha perdido a su esposo, que representa a las personas que por una u otra razón, han perdido o dejado a su cobertura; por consiguiente son propensas a objeto de engaño por esta generación.

Los niños, (RVR1960 Isaías 13:18); los de recto proceder, (NTV Salmos 37:14); los inocentes, (DHH Salmos 64:4).

Y, ¿quiénes lo hacen?

(DHH Ezequiel 22:25). “Un país con gobernantes como leones, que rugen y despedazan su presa; que en su territorio devoran gente, le roban sus tesoros y riquezas y dejan viudas a muchas mujeres”.

Esto se refiere a gobernantes con genética de destrucción, que gobernarán con la disposición de engañar a las personas con lo que hablan, aun utilizando la palabra escrita (Isaías 10:1-2). Dictando leyes injustas y poniendo por escrito los decretos de maldad. Dejando sin protección a los pobres, robando a los pequeños sus derechos, dejando sin nada a la viuda, y despojando al huérfano. (BL). (DHH Proverbios 11:11) Describe que las palabras de los malvados tienen el poder de destruir una ciudad. Entonces aprovechan su poder para afligir a las personas, como Goliat; que con una lanza y sus palabras, desafiaba al ejército de Israel provocando turbación y miedo; la versión DHH dice les hacían perder el ánimo.

Esta generación devoradora tiene una genética de destrucción, que utilizará el habla como un arma para matar por medio del engaño. Por lo tanto, es necesario que no se ignore el valor de las palabras (1 Corintios 14:11), y la influencia que estas tienen. “No utilizar palabras groseras; sino un lenguaje útil, constructivo y oportuno, capaz de hacer el bien a los que escuchan”. (BLPH Efesios 4:29).

Generación que devora con

PalabrasLuisa IxmatulCoordinadora: Piedad De Gonzáles

Citas Bíblicas para estudio

Salmos 56:5 DHH.

Jeremías 9:8 (NVI)

Salmos 52:2 (DHH)

Mateo 12:35-36 (RV 1960)


En la Biblia podemos ver con la ayuda del Espíritu Santo, que en Proverbios 30:16 se describen cuatro dimensiones de la Insaciabilidad: “Tres cosas hay que nunca se sacian, y la cuarta nunca dice: “¡Basta!” El Seol, la matriz estéril, la tierra que no se sacia de agua y el fuego que jamás dice: “¡Basta!”. Según el diccionario Strong, el Seol es una región, un lugar físico que se llama: “el mundo de los muertos” (H7585). “Los impíos volverán al Seol, todas las naciones que se olvidan de Dios.” (LBLA Salmos 9:17). También es una potestad como se describe en Isaías: “Por tanto el Seol ha ensanchado su garganta y ha abierto sin medida su boca; y a él desciende el esplendor de Jerusalén, su multitud, su alboroto y el que se divertía en ella.” (LBLA Isaías 5:14). En la Biblia aparece con los nombres de Hades, Infierno, Seol y Abadón, que significa: nombre poético del mundo de abajo, denota simplemente la morada de los muertos; sin embargo, en la literatura rabínica se designa específicamente como el lugar de condenación y castigo. Cuando vemos todo lo anterior, y lo que significa el Seol, confirmamos sin lugar a dudas la misericordia del Señor hacia cada uno de nosotros, que hemos aceptado el plan de salvación y lo hemos reconocido como nuestro único y suficiente salvador. En la Biblia se menciona al profeta Jonás que llego a la región de los muertos, al Seol, y de allí Dios lo sacó para que cumpliera el llamamiento que le había hecho. “y dijo: En mi angustia clamé al SEÑOR, y Él me respondió. Desde el seno del Seol pedí auxilio, y tú escuchaste mi voz;” (LBLA Jonás 2:2). Vemos la omnipresencia de

Dios y su grande misericordia, dando una segunda oportunidad a Jonás.

Otro claro ejemplo en donde vemos la región de los muertos o el Seol, es en la parábola descrita como el rico y Lázaro. Una persona como el rico que había conocido la salvación, pero se alejó de los caminos del Señor; y de una persona que no tenía comodidades materiales, pero no se había apartado de Dios. Llega el tiempo en que los dos mueren y entonces se hace la diferencia, porque el rico se va al infierno y Lázaro se va al Paraíso. Vemos que las dos almas sienten y tiene un tipo de cuerpo, porque el rico pide agua; quiere decir que el Seol que es insaciable, tiene sus límites puestos por Dios.

Hay como apartados, en donde son colocadas las almas, dependiendo lo que alcanzaron mientras estaban en vida, por eso leemos: “Y gritando, dijo: “Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua y refresque mi lengua, pues estoy en agonía en esta llama.” (LBLA Lucas 16:24). Ahora entendemos de que nadie siendo cristiano, va a salir de ese lugar hasta que llegue su turno de resurrección y que haya pagado todo. “Reconcíliate pronto con tu adversario mientras vas con él por el camino, no sea que tu adversario te entregue al juez, y el juez al alguacil, y seas echado en la cárcel. En verdad te digo que no saldrás de allí hasta que hayas pagado el último centavo” (LBLA Mateo 5:25-26).

La derrota del Seol inició cuando el Señor Jesucristo murió en la cruz, y después fue llevado a las regiones profundas de la tierra, para dar cumplimiento a lo descrito en la Biblia como: “La Señal de Jonás”. La Biblia dice: “Y el SEÑOR dispuso un gran pez que se tragara a Jonás; y Jonás estuvo en el vientre del pez tres días y tres noches.” (LBLA Jonás 1:17). La señal encerrada debajo de la letra y que tendría que ser revelada por el Espíritu Santo

era: “Pero respondiendo Él, les dijo: Una generación perversa y adúltera demanda señal, y ninguna señal se le dará, sino la señal de Jonás el profeta; Porque como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches.” (LBLA Mateo 12:39-40). Dios ha vencido la muerte, la venció en su propio terreno, más allá del Seol, en el lago de fuego donde fue a pagar por nosotros la segunda muerte. La Biblia dice: “¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria?” (RVR1960 1ª. Corintios 15:55). Lo insaciable del Seol no pudo con nuestro Señor Jesucristo; él sacó la inmortalidad, y todos nosotros tenemos acceso para tener una vida inmortal permanente. Gracias a nuestro Señor Jesucristo, la muerte y lo insaciable del Seol no tienen potestad sobre nosotros. “Y que ahora ha sido manifestada por la aparición de nuestro Salvador Cristo Jesús, quien abolió la muerte y sacó a la luz la vida y la inmortalidad por medio del evangelio,” (LBA 2ª. Timoteo 1:10). ¡Dios es Bueno!

La insaciabilidad

del SeolGerson Alvarado / Nadia MijangosCoordinador: Ramiro Sagastume


Job 7:9-10Job 26:62 Samuel 22:5-7Salmo 6:5Salmo 86:13Salmo 88: 10-12


“El Seol, la matriz estéril, la tierra que jamás se sacia de agua, y el fuego que nunca dice: ¡Basta!” (LBLA Proverbios 30:16).

Cuando se habla de una matriz estéril, se relaciona directamente a la imposibilidad de tener hijos. En diversas culturas, el hecho de que una mujer no tuviera hijos, estaba relacionado incluso a una maldición que impedía la bendición de Dios. Era considerado un estigma, tanto para el hombre, pero principalmente para la mujer; provocando tristeza, amargura y conflictos en el hogar. En el diccionario de la RAE, la palabra estéril se deriva del vocablo latino: “terilis”; se emplea para identificar a aquello que no tiene producción o que no genera frutos. La palabra hebrea para matriz es la H7356 Rakjam, que significa: Compasión, vientre (como que acaricia al feto); corazón, entraña, misericordia. Para estéril se usa la palabra H6115 Ótser, que significa: Cierre, restricción, cárcel, tiranía. La Biblia nos enseña de siete mujeres que fueron estériles, y que en su tiempo Dios abrió esas matrices; siendo ellas: Saraí (Génesis 11:30); Rebeca (Génesis 25:21); Raquel (Génesis 29:31); La esposa de Manoa (Jueces 13:2); Ana (1 Samuel 1:2); La Sunamita (2 Reyes 4:14); y Elisabet (Lucas 1:7). Vale la pena mencionar que cada una de ellas recibió una promesa, una palabra dada por el Señor, a través de un ángel o bien a través de su esposo. Así que pueden pasar muchos años sin que veas las promesas del Señor cumplidas en tu vida; pero no debes desesperarte, debes de seguir orando y confiando pacientemente en Él. Analizaremos brevemente algunas de estas mujeres y lo que Dios hizo en ellas. Génesis 21:3 dice que Sara concibió a Isaac cuando tenía 90 años de edad, situación imposible ante los ojos de los hombres; un milagro de Dios que es contado con gran asombro hasta nuestros días. De esta pareja y su descendencia se forma una gran nación, un pueblo numeroso

como la arena del mar y las estrellas del cielo. En el caso de Sara, se podría deducir que Dios estaba resguardando su vientre, para que se cumpliera la promesa de Dios a Abraham (Génesis 20:1-2; y Génesis 26:7). Raquel tuvo que aprender a agradecer por lo que tenía, en su caso fue la esposa amada por Jacob. Ella deseaba hijos, pero no los tenía; Lea, su hermana, sí.(Génesis 29:31). Esto era motivo de envidia, la cual debía arrancar de su corazón. Fue entonces que: “Dios también se acordó de Raquel y le abrió su matriz”. (LBA Génesis 30:22). La esposa de Manoa, es figura para nosotros de que debemos cuidar nuestro cuerpo y nuestra alma, para ser purificados y consagrados a Dios; antes de que la semilla germine en nosotros, para que los frutos sean dulces y permanezcamos en sus caminos. Algo muy importante que debemos desarraigar de nosotros para dar fruto, es la amargura. Esto lo vemos en Ana, quien tuvo que sacar de su corazón, todos los sentimientos contrarios que había acumulado a través de los años, por no tener hijos y ser atormentada por Penina. Es por gracia y no por nuestra fuerza, que damos frutos; y la amargura es algo que nos aleja de ella (Hebreos 12:15). En cuanto a la Sunamita, en ella vemos un deseo de servir a Dios con humildad, y sin pedir nada a cambio; atendiendo a Eliseo. Sin embargo, ella tuvo que rendir a los pies del Señor sus pensamientos de autosuficiencia; aunque en lo material tenía todo lo que necesitaba, le faltaba lo que su corazón anhelaba: tener un hijo. En cuanto a Elisabet, uno de los significados de su nombre es: “El Dios de las siete”. En la Biblia no hay casualidades; es decir, Jehová es el Dios de las siete mujeres estériles. De Elisabet debemos imitar su confianza en Dios; pues a pesar de la avanzada edad que tenían, cuando el ángel del Señor les anunció que ella daría a luz; su esposo dudó, pero ella le creyó a Dios. Le dio la gloria por la bondad que mostró hacia ella quitando la esterilidad, pues la palabra de Dios dice: “…¿No te dije que si creías ibas a ver la grandeza de Dios?” (Juan 11:40). Cuando a causa de las pruebas sintamos desfallecer, recordemos las promesas que Dios nos ha dado. Aunque para nuestros ojos el tiempo siga pasando, y no veamos los

frutos que esperamos, Dios determinó un tiempo específico para que florezcamos y fructifiquemos. “Estando convencido de esto: que el que en ustedes comenzó la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Cristo Jesús.” (LBA Filipenses 1:6). En nuestro diario vivir, el Espíritu Santo nos guiará en un nuevo caminar; dejando la esterilidad atrás, y empezado a dar frutos agradables a nuestro Dios. Para que se cumpla en nosotros lo escrito en la Biblia: “Venga mi amado a su huerto y coma de su dulce fruto (Cantares 4:16 BLA). Dios dejó los cinco Ministerios primarios, para que sea quitada toda esterilidad en nuestra vida y fructifiquemos para Él. Debemos avanzar y evolucionar, para ser cambiados de nivel; y así poder ser arrebatados a las nubes, para nuestro encuentro con nuestro Señor Jesucristo.


Salmo 25:7

Números 23:19

Juan 4:14

Hebreos 11:17-19

Génesis 3:20

Salmo 127: 3-5

La insaciabilidad de

La Matriz Estéril

Ruth AlvarezJose ArriolaNadia MijangosSofía RafaelIris NoriegaCarol de Acevedo

Coordinadora: Ana Julia Sagastume

Redactores:


Cuando la Biblia habla de “la tierra que jamás se sacia de agua…” (Prov. 30.16), debemos saber que no se refiere únicamente a un aspecto literal, debemos considerar que se está hablando en un lenguaje figurativo, que puede enseñarnos muchas cosas.

En primer lugar, debemos considerar que según el contexto, el término tierra se está refiriendo al suelo el cual se define como: “la parte superficial de la corteza terrestre, biológicamente activa” (Wikipedia). El suelo está conformado por materiales orgánicos, materiales inorgánicos, aire y agua; siendo el agua una parte fundamental del mismo.

Esta relación entre la tierra y el agua está claramente definida en la Escritura, puesto que en el principio la tierra estaba sumergida en el agua, pero Dios dijo: “…que aparezca lo seco. Y fue así. Y llamó Dios a lo seco tierra…” (Génesis. 1.9-10). Interesantemente, la palabra tierra se traduce del hebreo ‘Erets (H776), que es el mismo término utilizado en nuestro texto base y nos deja ver que desde ese entonces, la tierra necesita la humedad a la que estaba acostumbrada para ser productiva.

En términos técnicos, la tierra tiene una capacidad máxima para retener el agua, la cual se mide por un término utilizado en la agricultura como: “Capacidad de Campo”, y consiste en lo siguiente: El agua circula hacia el suelo, (lo cual se conoce como infiltración) y dentro del suelo, entre sus espacios porosos (lo cual se conoce como percolación). De manera que la cantidad de agua retenida por el suelo puede variar, dependiendo de la disponibilidad y la capacidad inherente que este tenga para retenerla.

Ahora bien, la palabra saciar se traduce del término sabá (H7646), que significa: colmar, llenar o satisfecho. De manera que al hablar de una tierra que jamás

se sacia, podemos decir que se está hablando de su capacidad de campo. Sin embargo, cuando el suelo se satura de agua, o dicho de otra manera, cuando la tierra se sacia de agua; el excedente, al no poder penetrar entre las partículas del mismo, se mueve superficialmente para continuar con el ciclo respectivo.

Cabe recordar que en la Parábola del Sembrador, se describen diferentes tipos de suelo en los que se siembra la semilla, entre los cuales destaca la tierra buena por ser la única que da fruto. Cuando El Señor Jesús explicó esta parábola, comparó la tierra con el corazón de las personas que oyen la Palabra de Dios (Lucas 8.15); dándonos a entender que el corazón humano es semejante a la tierra. Así como la tierra necesita el agua para ser fructífera, el hombre también necesita el agua para vivir y ser fructífero, lo cual probablemente se debe al hecho que el hombre fue formado de la tierra (1 Corintios 15.47).

Como sabemos, el agua representa la Palabra de Dios (Efesios 5.25-27), pero también representa al Espíritu Santo (Juan. 7.37-39). De manera que la tierra que jamás se sacia de agua, nos habla del corazón de aquellas personas que siempre se consideran necesitadas de Dios, de su palabra y del Espíritu Santo (Salmos 143.6). Así como el cuerpo manifiesta su necesidad de agua por medio de la sed, el corazón humano también manifiesta su sed, por medio de la necesidad de Dios (Salmos 42.1-2).

Afortunadamente, el Señor ha dejado una promesa extraordinaria en su palabra: “Porque derramaré agua sobre la tierra sedienta y torrentes sobre la tierra seca; derramaré mi Espíritu sobre tu posteridad y mi bendición sobre tus descendientes.” (Isaías 44.3). Si acercamos la lupa a este texto, podemos interpretar que el Señor no derrama su agua en aquella tierra que no se considera sedienta; pero la tierra sedienta siempre será saciada con toda clase de bienes, y aún sus descendientes recibirán una bendición sobreabundante.

Por otra parte, es interesante que la Nueva Traducción Viviente (NTV), se refiera a la tierra insaciable como un “desierto árido”; puesto que en lo literal, un desierto árido

alcanza altísimas temperaturas debido a la escasa humedad de la atmósfera, lo que también provoca un enorme calentamiento del suelo durante el día, y un fuerte enfriamiento durante la noche. Esto tiene un gran significado, porque la atmosfera es una cobertura para la tierra; de manera que si la cobertura necesita la humedad del agua, la tierra también se mostrará sedienta.

Finalmente, es importante considerar las palabras de David: “En cuanto a mí, veré tu rostro en justicia; estaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza.” (BTX Salmos 17.15). En este versículo, la palabra despertar, se traduce de una raíz hebrea que expresa la idea de ser levantado abruptamente del sueño. Asimismo, la palabra satisfecho, se traduce del término sabá (H7646) utilizado en el texto base.

Esto significa que la única forma en que nosotros podríamos llegar a sentirnos saciados, es cuando seamos levantados de la tierra, habiendo sido hechos conforme a la imagen de nuestro Señor Jesucristo. Mientras ese momento llega, seguiremos siendo esa tierra que jamás se sacia de agua, porque siempre seremos necesitados de nuestro Dios, de su palabra y de su Espíritu Santo. ¡Maranatha!

La tierraInsaciable

Job Guzmán

Marlon Santos y Rossy de Santos

Coordinadores: Carlos Monterroso y Jorge Contreras

Redactores:


Son muchas las veces que podemos ver en la Biblia la palabra fuego, como manifestación propia del Espíritu Santo; el cual viene a purificar, probar y dar revelación, entre otras cosas. Vemos en el Antiguo Testamento cómo el Señor se manifestó al pueblo de Israel en diferentes facetas; como cobertura, muralla, e incluso hablaba en medio del fuego. Este fuego jamás se agotará, pero cada día debemos avivarlo, buscando la llenura de su Santo Espíritu. Con el Nuevo Pacto se nos concedió un gran privilegio: que ese mismo fuego bendito ya no iba ser manifestado externamente, como lo fue con el pueblo de Israel; ahora fuimos sellados y ese fuego habita dentro de nosotros.

El fuego de tu ofrenda. Un ejemplo lo podemos ver en Génesis 22:7, donde el fuego se presenta como figura, para probar el corazón de Abram al ofrendar lo que más amaba. En ningún momento Abram hizo su propio fuego o llevó fuego extraño, sino que Dios mismo le dio el verdadero fuego (Génesis 22:6), que cuidó durante todo el transcurso del camino, hasta llegar al momento de ofrendar.

Columna de fuego inagotable (NTV Éxodo 13:21). “El Señor los guiaba de día en una columna de nube, y de noche les daba luz en forma de una columna de fuego. Así podían viajar de día y de noche”. La Biblia hace referencia acerca del pueblo de Israel; que en medio del desierto, El Señor colocó una columna de fuego que siempre estuvo ardiendo; les servía como lumbrera en su camino y les permitía avanzar sin detenerse; como también ver en la oscuridad, si había algún tropiezo o algún asecho oculto. Lo que vivió el pueblo de Israel es figura para nuestra vida diaria: El poder escudriñarnos a la luz de la palabra y

corregir nuestro caminar (TLA Salmo 119:9), teniendo la certeza que el fuego del Espíritu es inagotable, y que nos ayuda en medio de la prueba, formando en nosotros paciencia (LBLA Santiago 1:3). Otra enseñanza que podemos ver, es que la columna de fuego servía al pueblo de Israel como cobertura sobre ellos; la cual los protegía de los terrores nocturnos y de toda fiera salvaje que los quisiera atacar. No sentían frío, ya que la columna no se consumía, era una señal de que Dios estaba con ellos y que en todo momento estaban protegidos.

Cuando vemos el Antiguo Testamento, encontramos varias manifestaciones del Espíritu Santo como fuego, desde el punto de vista de luz y cobertura, pero en Deuteronomio 4:15 dice: “Ustedes no vieron ninguna figura el día que el Señor les habló en el monte Horeb desde el medio del fuego”. Así que por nuestro propio bien, debemos ser cuidadosos de no caer en idolatría.

Muralla de fuego. Zacarías 2:5 dice: ”…y yo seré para ella… una muralla de fuego a su alrededor…” Vemos en este versículo una vez más, cómo el fuego del Señor es inagotable. Un fuego que nos envuelve formando una fortaleza, que ya no sólo nos protege desde la cabeza, sino que ahora su manifestación es alrededor.

Bautismo en fuego. Vemos que bajo el Nuevo Pacto somos bendecidos en el momento que aceptamos a Cristo en nuestros corazones, reconociéndolo como nuestro Señor y Salvador. Es en ese momento que se coloca un sello (fuego) en nosotros (PDT Efesios 1:13). Estando bajo un nuevo pacto por medio de Cristo Jesús, Él dijo que cuando Él se fuera no iba dejarnos solos, sino que enviaría al Consolador. Vemos que el Espíritu Santo se manifestó en el día de pentecostés, y bautizó en fuego, como lo había dicho Juan el Bautista (LBLA Mateo 3:11). Es así como el libro de PDT Hechos 2:3:dice: “Vieron algo parecido a llamas de fuego que se separaron y se colocaron sobre cada uno de los que estaban allí.”

Avivar el fuego. 2 Timoteo 1:6 dice:

“Por eso quiero que reavives el fuego del don que Dios te dio cuando te impuse las manos.” Se puede decir que en el caminar cristiano se va avanzando a diferentes niveles en cuanto a llenura del fuego de Dios, pero también nos puede suceder como a Timoteo: El fuego que Dios colocó a través del Apóstol Pablo en Timoteo disminuyó. Es una enseñanza para nuestra vida, que lo que hemos recibido de parte de Dios por gracia, muchas veces no somos buenos administradores y multiplicadores de lo que se nos ha confiado; dejando que se vaya apagando por distracciones de nuestro entorno, o por falta de iniciativa nuestra búsqueda de intimidad con el Señor y llegando a parecer a aquel siervo malo que escondió el talento que su señor le ha había confiado.

Conclusión: El fuego de Dios es eterno y nunca deja de ser, desde el tiempo antiguo estuvo con el pueblo de Israel de una manera externa y sobrenatural; pero nosotros estamos en Nuevo Pacto con Cristo Jesús, y tenemos el fuego de Dios en nosotros. Debemos de cuidar y fomentar el fuego del Espíritu Santo en nosotros, buscando cada día en intimidad al Señor, como también siendo buenos administradores de ese fuego y poniéndolo al servicio de la iglesia para edificación.

Fuego insaciabledel EspírituSantoJessica OcañaCoordinador: Sergio Licardie


2 Reyes 22:3-20Apocalipsis 19:2Mateo 15:19Romanos 1:18-32Romanos 8:7Efesios 2:15-16


(LBLA Proverbios 30:18-19): “Hay tres cosas que son incomprensibles para mí, y una cuarta que no entiendo: el camino del águila en el cielo, el camino de la serpiente sobre la roca, el camino del barco en medio del mar, y el camino del hombre en la doncella”.

La mayoría de versiones, traducen que el rey Salomón vio un águila volando en el cielo. Pero es interesante la forma en que lo traduce la versión Torres Amat:

“Tres cosas son difíciles de entender, o más bien cuatro; las cuales ignoro totalmente: El rastro del águila en la atmósfera, el rastro de la culebra sobre la peña, el rastro de la nave en alta mar, y el proceder del hombre en la mocedad” (BTA Proverbios 30:18-19).La palabra atmósfera significa: Capa gaseosa que envuelve un astro, especialmente la tierra (Según la RAE).

Pero esa palabra según la Strong, viene del H8064 Shamáyim, que significa: Ser elevado y da la idea de ser el cielo más alto, en donde giran los cuerpos celestes.

Tanto la versión Torres Amat como en LBLA, nos amplían el significado de la palabra atmósfera o cielo. Nos enseñan que el lugar en donde estaba volando el águila era en el cosmos; entonces podríamos pensar que Salomón tuvo una especie de visión, en donde vio a un águila volando. Pero no podía ser algo natural, porque estaba volando en el cosmos. Por esa razón, es que siendo Salomón reconocido como el hombre más sabio, tiene que declarar que no entiende lo que está viendo, porque era algo sobrenatural.

Si nos trasladamos al Nuevo Testamento, nos encontraremos con el siguiente versículo:

(PER Apocalipsis 8:13)

“Vi un águila volando por el cenit del cielo y oí que gritaba muy fuerte: ¡Ay, ay, ay de los habitantes de la tierra por los tres toques restantes que van a dar

los ángeles con sus trompetas!”.Ahora vemos al Apóstol Juan, quien es llevado al cielo por el Señor, para mostrarle las cosas que van a suceder en el final de los tiempos (Apocalipsis 4:1). Allí ve un águila que volaba en el cenit del cielo (de esa forma traduce la versión Peregrino).

La palabra Cenit según la RAE, significa: el punto más alto del cielo.

Según la Strong, viene del G3321 mesouránema, que significa: Mitad del cielo. Esta palabra se deriva del G3772 ouranós, que significa: eternidad, cielo (como la morada de Dios) y da la idea de elevación.

El Apóstol Juan también ve a un águila que vuela en el punto más alto del cielo, en donde está la morada de Dios (dando la idea que vuela en el cosmos). Pero también podríamos decir que ve a un águila que vuela hacia la eternidad, lo que nos enseña una vez más que él tampoco vio algo natural.

Todo parece indicar que tanto Salomón como el Apóstol Juan, recibieron la misma revelación; ya que ambos hablan de un águila que vuela muy alto, en el cosmos. Pero no están hablando de un águila común, lo que nos deja ver que es un misterio, al cual podríamos llamar: “El Misterio del Águila Volando”.

Entonces la pregunta es: ¿Quién es esta águila que vuela en el cielo o cosmos?

(LBLA Apocalipsis 12:1-2)

“Y una gran señal apareció en el cielo: una mujer vestida del sol, con la luna debajo de sus pies, y una corona de doce estrellas sobre su cabeza; estaba encinta, y gritaba, estando de parto y con dolores de alumbramiento”.

Una vez más el Apóstol Juan ve una señal en el cielo, (G3772, palabra que ya describimos) y es una mujer con dolores de parto, a punto de dar a luz en el cosmos.

La palabra mujer que aparece en este versículo, viene del G1135 guné, que significa: esposa, viene de la base G1096 gínomai, que significa: llegar a ser.

Si unimos ambos significados, diría que la mujer que aparece en el cosmos, es una que llegará a ser esposa.

Y si comparamos Apocalipsis 12:1 con Cantares 6:10, podemos ver que la mujer que llegará a ser esposa y que va a dar a

luz en el cosmos, es la iglesia del Señor Jesucristo.

Hemos aprendido que en Cantares 3:6-8, una vez más habla sobre esta mujer que es la iglesia, y dice que va rodeada de 60 valientes (figura de los 5 ministerios).

Entonces respondiendo la pregunta que hicimos con anterioridad, diríamos que el águila que vuela en el cielo o cosmos, es una entidad espiritual que está conformada por los ministros primarios, y por la iglesia que saldrá aprobada en el Tribunal de Cristo (2 Corintios 5:10; 2 Timoteo 2:15). Es importante remarcar, que tanto los ministros primarios como la iglesia que conformarán esta águila, deben salir aprobados en el Tribunal de Cristo; a ellos también les podemos llamar: Más que vencedores.

Llegando a la conclusión que lo que realmente vieron Salomón y el Apóstol Juan, fue a los Más que Vencedores siendo arrebatados hasta Dios y hasta su trono (Apocalipsis 12:5). Ellos fueron testigos del evento llamado Arrebatamiento.

Nosotros como parte de la iglesia del Señor Jesucristo, debemos anhelar intensamente su venida (Hebreos 9:28), y llegar a ser la esposa del Cordero (Apocalipsis 19:7-8; Apocalipsis 21:9). pero para alcanzar esta estatura, debemos mantener nuestras vestiduras limpias y vivir en santidad (1 Juan 3:3; 2 Corintios 7:1; 1 Tesalonicenses 5:23).

Maranatha

El camino del Águila en el

CieloYeimi Aguare

Coordinador: Juan Luis Elías


Efe 4:8-14Apoc 2,3Mat 14:6-121 Cor 11:3 1Tim 2:12


(NC Proverbios 30:18-20 ) “Tres cosas me resultan maravillosas, y una cuarta que no llego a entender: el camino del águila en los aires, el rastro de la serpiente sobre la roca, el camino de la nave en medio del mar, y el rastro del hombre en la doncella. Este es el obrar de la mujer adúltera: después de haber comido se limpia la boca y dice: Nada de mal he hecho.”

Hemos escogido la versión Nacar-Colunga, pues es la que más se apega al original en el contexto completo de los 3 versos.

Tratemos de comprender algunas de las palabras que se usan en estos versos:

Maravillas: Por implicación es maravilloso, algo muy grande, muy alto, escondido o bien difícil. Pero la raíz apunta a separar o distinguir. Es posible comprenderlo como: “tres cosas son distinguidas”, o “tres cosas son separables”

Conocer: Cerciorarse por vistaCamino: Un camino hecho al pisotear, al andar. Figurativamente un modo de vida o curso de acción, una costumbre.

Roca: Se puede entender como una roca, en general, pero también como acantilado, y figurativamente como refugio.

La reflexión del verso 20, es que hay cosas que pueden ser muy evidentes; pero que finalmente se olvidan, se menosprecian, o simplemente pierden importancia, aun cuando pueden ser hechos trascendentales. Hay sabiduría en detenerse a entender estas cosas, y ese ejercicio de “sabiduría”, produce un aumento de la realidad espiritual en cuanto a 4 temas importantísimos para la iglesia: El arrebatamiento, la obra redentora de Cristo, la sobrenaturalidad de Dios en medio de las tormentas, y la huella que deja el hombre (Geber) en la doncella (mujer virgen).

Sobresale que, de las 4 cosas, 3 son de naturaleza divina, y la cuarta se refiere a una relación humana. ¡Y esa es la que no se entiende! Parece que Salomón concibe como admirable, lo que Dios puede hacer por medio del hombre

valiente (Geber) en una mujer. Y esto tiene que ver con la vida misma de la mujer, su identidad, fortaleza, y sentido de valoración; que consecuentemente, tendrá una importancia suprema en la crianza de los hijos, de nuevos hombres y mujeres. Pasemos a explorar el verso que nos corresponde:

La Roca es Cristo. En 1ra Corintios 10:4, el Apóstol Pablo lo aclara, y dice que todo el pueblo de Israel bebió de la Roca la cual es Cristo. El Rey David también dijo que Dios era su roca y su castillo, y que por amor a su nombre, nos guía y nos encamina por el camino correcto (LBLA Salmos 31:3 ). Jesucristo durante su ministerio en la tierra, preguntó a sus discípulos sobre qué decía la gente acerca de quién era Él; el Apóstol Pedro por revelación del Espíritu Santo, le dijo que Él es el hijo de Dios, y en respuesta Jesucristo le indicó que sobre esa verdad (Roca) fundaría la Iglesia.

Ahora bien, la serpiente (el diablo) es considerada la más astuta de los animales del campo (Génesis 3:1). Desde los inicios de la creación adámica, ha trabajado para desviar a la humanidad de Dios, tratando que esta ande en el camino de perdición, que escogió abandonar al Padre. En este final de los tiempos ha intensificado su lucha, esto lo vemos al analizar algunos de los significados que también tiene la palabra camino; ya que este se puede traducir también como costumbre y conversación; lo que nos lleva a entender que la serpiente busca introducir sus costumbres sobra la roca, o sobre el pueblo que tiene a Dios como su roca. Busca introducir sus términos y conversaciones vanas, con el fin de engañar al pueblo de Dios a través de prácticas babilónicas. Satanás ataca en la prueba a los hijos de Dios, sabiendo que somos piedras vivas y como tales, construimos un templo de adoración a Dios (1 Pedro 2:5).

(LBLA Génesis 3:14-15) “Y el SEÑOR Dios dijo a la serpiente: Por cuanto has hecho esto, maldita serás más que todos los animales, y más que todas las bestias del campo; sobre tu vientre andarás, y polvo comerás todos los días de tu vida. Y pondré enemistad entre tú y la mujer, y entre tu simiente y su simiente; él te herirá en la cabeza, y tú lo herirás en el calcañar”.

Finalmente, la serpiente no pudo ni podrá tener ninguna influencia sobre la Roca. No podrá dejar huella sobre la Roca, no podrá dejar su legado, no podrá obrar para modificar, o cambiar la solidez de la Roca que es Cristo. Mas bien, la

obra de Satanás será destruida:

(LBLA Romanos 16:20) “Y el Dios de paz aplastará pronto a Satanás debajo de vuestros pies. La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros”.

Ninguna obra de Satanás podrá alterar la naturaleza de nuestro Dios, Él es nuestro refugio, la fuente de agua en el desierto, Él es perfecto:

(LBLA Deuteronomio 32:4) “¡La Roca! Su obra es perfecta, porque todos sus caminos son justos; Dios de fidelidad y sin injusticia, justo y recto es Él”.

Esperamos que esta reflexión toque su corazón, que le invite a profundizar en su tiempo de lectura y estudio bíblico. Dios le mostrará cosas que no conoce, así que no deje pasar la oportunidad de ejercitarse en el estudio bíblico. Dios le bendiga.


1 Corintios 10:13

Mateo 16:18

Salmos 18:2

Salmos 62:2

Colosenses 2:8-15

El rastro de la serpiente

sobre La Roca

Obed Lopez, William López, Karen Ortíz

Coordinador: Raymundo Rodríguez

Redactores:


En la biblia se mencionan distintos tipos de embarcación, y casi siempre se relacionan con la salvación, con protección, sustento, instrucción y enseñanza; funciones que identifican a la Iglesia del Señor Jesucristo. Por ejemplo Moisés siendo un niño, fue protegido por medio de un arca mientras navegaba a través del río Nilo (Éxodo 2:3).

Vemos entonces que: “Hay tres cosas que son incomprensibles para mí, y una cuarta que no entiendo: el camino del águila en el cielo, el camino de la serpiente sobre la roca, el camino del barco en medio del mar, y el camino del hombre en la doncella”. (Proverbios 30:18-19).

Partiendo de allí entendemos que si la Iglesia es un instrumento utilizado por el Señor para la salvación de muchos, esta se puede comparar con el arca construida por Noé; quien siguiendo las instrucciones del Señor, logró la salvación para toda su familia (Génesis 6:13-14). El mar por su lado, representa a los hombres impíos, las muchedumbres y sus lenguas (Isaías 57:20; Apocalipsis 17:15; Habacuc 1:14). Es por ello que su inquietud y falta de paz, es parte de sus características.

Respecto al camino; sabemos que el camino es Cristo (Juan 14:16), lo cual nos lleva a la conclusión más importante de nuestro estudio: la única forma de transitar a través del mundo, y tener la certeza de que llegaremos a nuestro destino eterno, es por medio de nuestro Señor Jesucristo. Él es la única garantía para que nuestra embarcación no zozobre, por lo tanto debemos confiar en su amor y su poder; porque si lo hizo por sus discípulos al ordenarle cesar a la tormenta (Mateo 14:24-28), así también lo hará por nosotros.

Por esa razón es que dicho camino es difícil de entender. Es maravilloso, especial y milagroso, según la traducción que se consulte (Proverbios 30:18), porque no se trata de la obra del hombre, de su fuerza o su intelecto; sino por el contrario, se trata de un verdadero milagro de parte de Dios. Por ello la biblia al referirse al evangelio, dice que para los hombres la palabra de la cruz es necedad, pero para nosotros es poder de Dios (1 Corintios 1:18).

Una vez en la barca, todo cristiano debe atender a la voz de su capitán, quien es nuestro Señor Jesucristo. Hay quienes buscan solamente el milagro de una sanidad, liberación o la satisfacción de una necesidad; este tipo cristiano se conforma con escuchar y esperar desde la playa, no se compromete (Mateo 13:1-3). Mientras que hay quienes sí atienden a la instrucción de Dios que incluye subir a la barca, (aceptar el ministerio) y remar hacia dentro del mar (Lucas 5:4).

Estos son los que enfrentan a los temores de la noche y a las tormentas, sabiendo que el Señor está con ellos en la barca (Mateo 8:24). Son los que buscan en la profundidad de la palabra aliento y vida eterna, como Pedro, cuando reconoció en Jesús la fuente de palabra de vida eterna (Juan 6:68). Por lo tanto, son los que ven cómo la autoridad de Dios se impone sobre las circunstancias, sin importar lo difícil que pueda ser (Mateo 17:20).

Ahora bien, una cosa es remar hacia las profundidades del mar, y otra es permanecer obedientes a su palabra. Cuando no se hace, las consecuencias nos pueden alcanzar, así como le sucedió a Jonás (RVA Jonás 1:3); lo cual nos lleva a reflexionar, acerca de la importancia de otro elemento de la navegación: Jonás subió a la barca pero quería hacer su voluntad, no la de Dios. Entonces, ¿qué pasa cuando desobedecemos al Señor? Recibimos instrucción, enseñanza, reprensión o disciplina (Jonás 1:4-5-15).

Al final, la perfecta voluntad del Señor se manifiesta; sin importar nuestra necedad, Él cumple su propósito en cada ministerio y en cada vida; porque su propósito es que nadie se pierda, sino que todos procedan al arrepentimiento (2 Pedro 3:9). Por eso es que dicho

camino es incomprensible y milagroso a la vez.

Cuando Pablo se embarcó hacia Roma, se desataron tempestades, que provocaron la necesidad de aliviar el peso de la embarcación; entonces sus tripulantes comenzaran a arrojar las cargas, y todas aquellas cosas innecesarias para continuar con el viaje (Hechos 27:18-19). Esto es figura de la iglesia que no ha podido dejar las costumbres y tradiciones del mundo, mismas que deben ser abandonadas en medio de la prueba; con el propósito de que seamos capaces de entender y comprender que para los que amamos a Dios, todas las cosas obran para bien (Romanos 8:28).

La Iglesia (barco) no debe detenerse en cuanto a la expansión del evangelio. Estamos viviendo tiempos en los cuales dicha embarcación debe navegar en medio del mar bajo la guianza de nuestro Señor Jesús, porque es mediante la obediencia de su palabra, que seremos partícipes de una abundante pesca; tan grande que no serán suficientes las congregaciones (Lucas 5:4-7). Si atendemos con diligencia sus instrucciones, Él nos librará de nuestros enemigos así como lo hizo con Faraón y sus carros, al destruirlos en medio del mar, mientras perseguían al pueblo de Israel. Así de maravilloso es el camino de la Iglesia, las aguas se abrirán delante de ella y en medio de cantos y danza, se proclamará la grandeza del Señor.

El maravilloso camino de

La Iglesia


Proverbios 31:14Proverbios 25:2Éxodo 14:23Jonás 2:1-3Salmo 107:22-25

Hebreos 12:2

Werner y Mariam de OchoaCoordinador: Fernando Álvarez


En el libro de Proverbios capítulo 30, se puede leer que a pesar de la sabiduría que Dios le había otorgado a Salomón, él llegó a la conclusión que no logró obtener toda la inteligencia humana; y que su conocimiento sobre Dios fue limitado. Al llegar a los versos 18 y 19, manifestó que había cuatro caminos que eran un misterio para él; el camino del águila en el cielo, el camino de la serpiente en la roca, el camino del barco en el mar, y el camino del hombre en la doncella.

Jesucristo nos dijo: “Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino es por mí” (RVR1960 Juan 14:6). Esto nos revela que el verdadero camino se llama Jesucristo, y este camino es el único que nos lleva al Padre; por lo que como hijos de Dios, debemos transitar por él para no desviarnos de nuestro objetivo; que es el encuentro con Señor Jesucristo en las nubes. Esto no significa que no vamos a encontrar diferentes caminos, pero algunos de ellos conducen a la destrucción y finalmente a la perdición eterna.

Ahora bien, el verdadero hombre se llama Jesucristo, eso lo confesó Pilato en el momento de entregar al Señor a los fariseos para ser crucificado, les dijo: “¡He aquí el Hombre! ». (RVR1960 Juan 19:5), porque al interrogarlo no le encontró falta ni pecado, llevándolo a la conclusión, que el verdadero hombre es aquel que se entrega por completo por lo que ama.

En este verso del libro de Proverbios 30:19, a la doncella podemos tomarla como figura de la iglesia novia, la iglesia que está esperando el momento de casarse con su amado; pues ella se guarda de todos los placeres para entregarse completa a Jesucristo. Conservándose

pura, sin manchas, esperando que su amado la conduzca a la alcoba, para tener amores y deleitarse con Él. Esto, en contraste a lo descrito en Proverbios 30:20, en donde Salomón llegó a comprender que el camino de la mujer adúltera, es comportarse infielmente con su marido; al punto de acostumbrarse que cada vez que falla, ya no tiene compunción de sus actos falsos.

Al escudriñar el original de la palabra “camino”, en el verso de Proverbios que nos atañe, nos damos cuenta que entre algunas de sus acepciones está: costumbre, conducta, carrera, marcha, conversación, etc. Por lo que esto nos permite entender que la iglesia doncella, debe adoptar las costumbres del hombre Jesucristo, y no seguir las costumbres de los pueblos, las cuales son vanas; (Jeremías 10:3) y dedicarse a buscar las cosas de arriba, en donde está sentado Cristo y no poner la mirada en la cosas de la tierra (Colosenses 3:1,2).

Entonces la iglesia novia debe verificar cuáles son las costumbres de un verdadero hombre, (desde el punto de vista espiritual) y adoptar dichas costumbres, con el fin de serle agradable. Al escudriñar las Escrituras, logramos identificar algunas de las costumbres del hombre, y estas costumbres son las que la doncella debe adoptar, entre las cuales están: reconocer autoridad (Mateo 8:9) ser justos y practicar la justicia (Mateo 1:19); ser intercesor (Mateo 17:14-16); soportar y saber llevar la prueba (Mateo 27:32); perdonar pecados (Marcos 2:10); alimentarse del pan espiritual (Lucas 4:4). Ya identificadas, la doncella debe practicar lo mismo, porque esta práctica es el camino (costumbre) del hombre en la doncella.

Si lo vemos desde el punto de vista “Conducta”, podemos analizar a la Reina Vasti (Ester 1). Quien por su mala conducta fue sustituida por la Reina Ester, pues se negó a comparecer ante la presencia del Rey Asuero; demostrando poca o nada de sujeción, e incluso rebelión. Ya que no debía tener fiesta distinta a la que el Rey celebraba, pues con eso ella estaba auto honrándose y quitando la honra que sólo el Rey tenía. Por lo que la doncella

debe tener una conducta agradable a Dios, ser sujeta a Dios, y por ende a sus autoridades; celebrar fiesta únicamente para el Rey de reyes y Señor de señores.

El apóstol Pablo en Hechos 20:24, manifestó que ya no se preocupaba por su vida, sino que para él era más importante finalizar la carrera, y el ministerio que recibió del Señor, lo cual logró (2 Timoteo 4:7). También en el libro de Hebreos, invita a la doncella Iglesia a despojarse de todo peso y todo pecado; y que corra la carrera con paciencia, para que al ganarla, obtenga la corona incorruptible. , Para poder ganar esa carrera, la iglesia doncella debe abstenerse de todo aquello que le impida correr.

La marcha nos habla de una doncella lista y entrenada para pelear, porque alcanzó la estatura adecuada para saber defenderse; esta es una doncella organizada, disciplinada y equipada con toda la armadura necesaria para entrar en batalla. Finalmente, la doncella en sus conversaciones únicamente debe estar hablando de su amado (Cantares 5:9,10), como lo hizo la Sunamita en el libro del Cantar de los Cantares. Para que otras se enamoren de su amado, y esperen su llamado diciendo: “Levántate, amada mía, hermosa mía, y ven conmigo”. MARANATHA.

El camino del hombre en la

DoncellaE. Obed Lopez M.Coordinadora: Louissette Moscoso


Mat 10:35; Mat

11:8; Mat 19:5;

Mat 19:10; Mat

25:24; Luc 7:25;

Luc 12:36; 1Co 7:1;

Efe 5:31.

Rom 5:15; 1Co

15:21; 1Co 15:45;

1Co 15:47; 1Ti 2:5.


La Biblia deja ver cómo hombres de Dios fueron probados en su corazón. También nos relata el caminar de aquellos siervos que llegaron a ser reyes, gobernadores o príncipes, como fue el caso de José, Daniel y David. La palabra del Señor en Proverbios 30:21-22 dice: “Por tres cosas tiembla la tierra, y por una cuarta no se puede sostener: por el esclavo cuando llega a ser rey, por el necio cuando se sacia de pan”. Este versículo es impresionante, porque nos demuestra que una persona puede evolucionar de un estado de esclavitud, a un lugar de preeminencia y de esplendor; que le permitirá dirigir y tomar puestos importantes en el ámbito que se desenvuelva o se desarrolle.

La Biblia nos habla de terremotos, conmociones y movimientos en la tierra producto de que un esclavo ascienda a puestos de preeminencia. Un ejemplo de ello lo podemos apreciar en Génesis 41:39-43 en donde dice: “Y dijo el faraón a José: –Después de haberte dado a conocer Dios todo esto, no hay entendido ni sabio como tú… Dijo además el faraón a José: –Yo te he puesto sobre toda la tierra de Egipto... Lo hizo subir en su segundo carro, y pregonaban delante de él: «¡Doblad la rodilla!». Así quedó José sobre toda la tierra de Egipto.” Los versículos anteriores nos muestran cómo José pudo evolucionar de esclavo y sirviente, hasta llegar a ser el segundo al mando en Egipto; pero antes de llegar a ese estado, fue necesario que fuera formado. Podemos apreciar que en el transcurso de la vida de José se dieron varias manifestaciones como: a) Llenura del Espíritu Santo, la cual es parte fundamental para obtener revelación de lo alto; como la que tuvo al tener sueños de lo que venía (Genésis. 37:5); o la explicación que le brindó a Faraón del sueño que le inquietaba (Génesis. 41:15). b) Ser entendido y sabio. La sabiduría se adquiere con un principio fundamental,

que es temer al Señor y escudriñar las escrituras; lo cual nos dará una mente experta y llena de sabiduría (Proverbios 1:7). c) Lo más importante, que Dios esté con nosotros. (Génesis 39:23).

Otro ejemplo impresionante sobre cómo una persona pudo pasar de esclavo a príncipe es el caso de Daniel; quien llegó a Babilonia por pedido del rey Nabucodonosor, siendo un esclavo. Sin embargo; a pesar de su condición de esclavo, propuso en su corazón no contaminarse con la comida ni el vino que el rey bebía. (Daniel 1:8). La Biblia nos relata cómo Daniel interpretó el sueño de Nabucodonosor; después de buscar a Dios, el Señor le reveló el misterio a Daniel para que se lo explicara al rey; luego sucedió lo siguiente: “Entonces el rey engrandeció a Daniel, le dio muchos honores y grandes dones, y lo hizo gobernador de toda la provincia de Babilonia y jefe supremo de todos los sabios de Babilonia.” (Daniel 2:48). Pero, ¿cuáles fueron las claves importantes de Daniel para pasar de esclavo a gobernador? a) Mantenerse íntegro delante de Dios (Daniel 1:8); b) Hablar prudente y sabiamente (Daniel 2:14); c) Ser un hombre de oración (Daniel 2:18); d) Buscar la revelación de Dios (Daniel 2:19); e) Dar la gloria siempre a Dios (Daniel 2:20).

Definitivamente, la vida de Daniel nos muestra elementos que debemos buscar en nuestra vida, para evolucionar y no retroceder a ser nuevamente esclavos del mundo o del pecado. Recordemos que antes de conocer a Cristo, éramos prisioneros del pecado, sin embargo, al ser liberados venimos a ser siervos de la Justicia (Romanos 6:17-18). Siendo maravilloso nuestro Señor, que no escogió a los nobles, ni poderosos, ni a los sabios a la manera de este mundo, sino que Dios escogió a lo necio para avergonzar a lo fuerte, y a lo vil y menospreciado, a fin de que nadie se jacte en su presencia (1 Corintios 1:26 -29). En palabras del Rey David, nos escogió como príncipes de su pueblo (2 Samuel 6:21), ya que Dios pone su mirada en lo olvidado y lo despreciado del mundo. En el caso de David, el más pequeño de sus hermanos; pastor de ovejas, olvidado y desechado; sin embargo, conforme el corazón de Dios; ya que Él no mira lo externo o lo fuerte a la manera del mundo, sino que ve lo más profundo del corazón (1 Samuel 16:7).

El Señor Jesucristo busca únicamente un corazón dispuesto, Él puede hacer una obra maravillosa en nuestras vidas; como sucedió en el caso de los primeros discípulos; que siendo pescadores, sin mayor educación y cultura, Él los escogió. Por ello, al estar llenos del Espíritu Santo, hacían proezas milagros y prodigios. En el caso de Pedro, las personas se admiraban de sus argumentos y su forma de hablar, que produjo la conversión de miles de personas en su primer discurso; como lo manifiesta Hechos 2:41. De igual forma, se admiraban del Señor Jesucristo, se quedaban atónitos y comentaban “¿No es este el carpintero, hijo de María, hermano de Jacobo, de José, de Judas y de Simón? ¿No están también aquí con nosotros sus hermanas? Y se escandalizaban de él.” (Marcos 6:3). El Señor Jesucristo es nuestro mayor ejemplo de evolución, y de cumplir con la obra que Dios tiene preparada para nosotros en esta tierra.

El sentir del pueblo del Señor, debe ser como el de José, Daniel, David y los apóstoles; que con su amor a Dios y su fidelidad, evolucionaron de una mentalidad de esclavos, a Príncipes de su pueblo. Es necesario que nosotros dejemos toda mentalidad de esclavitud que adquirimos en el mundo o que el mundo está tratando de imponernos, porque “Jesucristo, nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre, a Él sea gloria el imperio por los siglos de los siglos. Amén. (Apocalipsis 1:6)

El esclavo cuando llega

a ser SeñorJosé Marco Vinicio LópezCoordinador: Edwin Castañeda


1 Juan 3:9 1 Juan 5:18Romanos 8:3Santiago 1:15

Hebreos 2:14


En Proverbios 30:31 leemos que la tierra tiembla por un necio cuando se sacia de pan. Los terremotos, son movimientos abruptos que son capaces de abrir cárceles físicas o espirituales. (Hechos 16:26). La presencia del Señor produce un movimiento en la tierra que la hace temblar. (Salmos 114:7). Antes de Cristo éramos necios (Tito 3:3), hundidos en los placeres, atrapados por el pecado y la muerte; pero Jesucristo nos salvó cuando lo aceptamos en nuestros corazones. Al recibir la palabra de su evangelio y vivirla, (Deuteronomio 8:3) nos vamos llenado y la necedad que estaba dentro de nosotros se va disipando.

En el versículo 22, la palabra “necio” es Nabal (H5036), que significa: Estúpido, necio, vano, vil, insensato. En la biblia vemos que Nabal se negó a proveer para David y sus siervos cuando lo solicitaron (1 Samuel 5:3), Nabal dijo: “he de tomar de mi pan para darles” (1 Samuel 5:11). Nabal el insensato, antes de Cristo creyó tener pan, y estar saciado. Nosotros sin Cristo no teníamos nada, estábamos muertos; pero con su palabra vivimos, nos estamos limpiando de ese Nabal, para vivir eternamente con Jesucristo. (Juan 6:58).

La palabra Lechem (H3899), se traduce como pan y palabra de Dios; es el pan de vida que nos alimenta, (Mateo 4:4). Debemos buscar ser saciados de ese pan para abundar en él; porque los escribas y fariseos tenían el conocimiento de la palabra, pero no lo ponían por obra; tenían la llave de la ciencia, pero no entraban ni dejaban pasar a otros (Lucas 11:52). Busquemos ser como Esdras, quien se dedicó no sólo a saber de la palabra, sino que la estudió, la enseñó y

la puso por obra (Esdras 7:10). De igual forma Nehemías leyó la palabra de Dios, buscó el pan del cielo, y dice la biblia que al hacerlo así, él y el pueblo confesaron su pecado y adoraron a Jehová (Nehemías 9:3). Pero no fue sino hasta que leyeron la palabra de Dios con entendimiento, que recibieron la revelación de Dios y fueron capaces de ver que tenían pecados que confesar, siendo ya un pueblo escogido de Dios; hasta entonces pudieron adorar en espíritu y en verdad. (Juan 4:24). El pan también simboliza el cuerpo de Cristo, así que cada vez que tomamos Santa Cena, hacemos morir a ese Nabal interior.

La palabra de Dios en Proverbios 1:4 (DHH2001) nos dice que el pan de la palabra hace sagaces a los jóvenes e inexpertos, dándoles conocimiento y sensatez. Seguramente a muchos de nosotros nos pasó que antes de Cristo, éramos poco aptos; quizás nos sentíamos hasta algo tontos, no era fácil para nosotros entender o hacer ciertas tareas; o no nos iba bien en los estudios. Tal vez a algunos sus autoridades (padres, hermanos, maestros o tutores) les ministraron que eran incapaces e inútiles; pero al llegar a Cristo, podemos testificar que en Él, somos inteligentes. Su Palabra, su rhema, nos dice que somos pescadores de hombres, que somos no solo capaces, sino a veces mejores que algunos que sí estudiaron o se prepararon; porque fuimos hechos aptos para toda buena obra (Hebreos 13:21). Vemos cumplir en nosotros Proverbios 17:24, que dice que en nuestro rostro apareció la sabiduría, ya que el principio de la sabiduría es el temor de Jehová (Proverbios 1:7). Por la gracia de Dios, recibimos sabiduría del cielo, ella nos ayuda a llevar a cabo lo que nos encomienden, haciéndolo como para Dios. (Colosenses 3:23). Muchos, después de conocer a Cristo, aprendieron a expresarse mejor, con denuedo; tal como el apóstol Pedro y Juan lo hacían; maravillando a quienes los escuchaban, pues sabían que eran personas no letradas. (Hechos 4:13). Así se vuelve quien se sacia de la palabra de Dios; por eso cada día debemos buscar matar el corazón del Nabal interno, con la palabra de Dios, sabiendo que no es con poder o

fuerza, sino con el Santo Espíritu de Dios que vencemos (Zacarías 4:6).

La palabra saciarse, viene del hebreo Sabá (H7646), que también significa: Llenarse, colmarse, tener abundancia. No basta con haber conocido al Señor y ser salvos, lo cual es hermoso; pero para extirpar por completo el Nabal interior, debemos estar colmados del pan de la palabra y del Espíritu Santo. Hay que conocer, escuchar y obedecer esa palabra, decir como David: “sumamente pura es tu palabra y tu siervo la ama” (Salmos 119: 140). David dijo que con el pan de la palabra de Dios, sus pasos fueron ordenados, y la iniquidad no se enseñoreó más de él (Salmos 119:133). Al ser colmados del pan de Dios, sentimos cómo en lugar de insensatez, tenemos sabiduría; en lugar de iniquidad, tenemos justicia; en lugar de maldición, recibimos bendición en todo. (Deuteronomio 28). Salmos 119:9 dice que el joven limpiará su caminar con la palabra de Dios. Algunas veces se es joven en el evangelio, pero para volverse maduro hay que pedir sabiduría y gracia, para ser saciado de la palabra de Dios. Fuiste llamado por Dios para un gran propósito, en su tiempo Dios te usará para que la tierra tiemble, se estremezca y conozca que Dios es grande, que sólo Él hace portentosos hechos. Bendiciones.

Vilma Cruz


Efesiós 5:11Juan 15:5 Gál 5:22Gál 5:23

Heb 13:15Rom 7:23

El pan que quita

La Necedad


En el capítulo treinta del libro de Proverbios, se encuentran seis cuadridimensiones que demandan ser estudiadas. El verso veintitrés describe dos de las cuatro cosas que provocan que la tierra tiemble, una de ellas es cuando la mujer repudiada se casa. Esta mujer representa a la iglesia novia, que cuando sea redimida por el Señor Jesucristo, la tierra completa será sacudida. La palabra repudiada según el Diccionario Strong, es sané (H8130), que se puede traducir como: Aborrecer, aversión, contrario, enemigo, menospreciar, odiada.

En este artículo, se analizarán ejemplos de mujeres menospreciadas que se casaron; como una sombra de los que esperamos alcanzar la estatura de vivientes, y ser parte de la novia.

SÉFORA

Séfora, según el diccionario Hitchcock significa: Hermosura. Era la hija mayor de Jetro. María y Aarón, hermanos de Moisés, menospreciaron a Séfora a causa de su raza (Números 12:1). De igual manera la iglesia es aborrecida por su origen gentil. La Biblia dice que cuando estábamos separados del Señor Jesucristo, vivíamos alejados de los pactos de la promesa, sin esperanza y sin Dios en el mundo (Efesios 2:12); pero el Señor decidió morir para darnos la oportunidad de llegar a ser su amada.

LA MUJER DEL CANTAR DE LOS CANTARES

La mujer del Cantar de los Cantares, se describe menospreciada a causa del color de su piel, por ser de raza negra (Cantares 1:5-6); sin embargo, en el

final de su proceso, ella se convierte en la reina. Está mujer tuvo un proceso de transformación a lo largo de su historia, en el mismo su amado le hace referencia a sus cualidades: “Eres hermosa como Tirsa, amada mía, encantadora como Jerusalén, imponente como ejército con estandartes” (Cantares 6:4).

Según el diccionario Strong, Tirsa significa: Gracia; y según el diccionario Alfonso Lockward: Deleite.

En Séfora y en la mujer de Cantares, vemos cómo la obra de perfeccionamiento que Dios realiza en ellas, las conduce a convertirse en hermosas, y en el deleite de sus amados. Nosotros debemos anhelar que por la gracia del Señor seamos perfeccionados, para que El Señor nos vea como una iglesia hermosa, y en nosotros encuentre su deleite.

RUTRuth, es otra mujer que provenía de una raza bajo maldición, lo cual no le permitía ser parte del pueblo de Dios (Génesis 19:37; Deueronomio 23:3). También Nohemí, su suegra, amargada por la calamidad sufrida por la muerte de su esposo e hijos, la menospreciaba; sin embargo, Rut al tener la revelación e invocar el Nuevo Pacto, (Rut 1:16) y refugiarse a la sombra de las alas del Señor, logró encontrar gracia ante los ojos de Booz. -figura de nuestro Señor Jesucristo- (Rut 2:10). Llegó a convertirse en la dueña del campo, al casarse con Booz. Para convertirnos en parte de la entidad que es arrebatada para casarse con Él, debemos hacerlo por medio del Nuevo Pacto; arrancando toda raíz de amargura, para que la gracia que está siendo derramada, nos prepare para su pronta venida (Hebreos 12:15; 1 Pedro 1:13).

LEA

La Biblia narra en el capítulo veintinueve del libro de Génesis, cómo Jacob llega a la casa de Labán y se enamora de Raquel,

la hija menor. También como él dispone trabajar siete años, para poder casarse con ella. Al cumplirse el tiempo acordado, Laban le entrega por esposa a Lea, la hija mayor, la menospreciada o aborrecida (Génesis 29:31). Quien al final de su historia es tomada como una de las tres matriarcas, junto con Saraí y Rebeca, por los Israelitas. Lea es figura de la iglesia novia, que da mucho fruto, ya que tuvo seis hijos varones y una mujer: Rubén, Simeón, Leví, Judá, Isacar, Zabulón, y Dina (Génesis 29:31-35; 30:18-21). Al analizar el significado de los nombres de los hijos (frutos) de Lea, El Señor revela que debemos ser hijos que: Consuelan de la aflicción, que escuchan y obedecen al Señor, que en unidad, alaban a Dios, que se preparan para agradar al Señor; y en consecuencia recibir galardón o recompensa (Isaías 40:10; Hebreos 11:6); que buscan su morada en el Señor y que buscan la justicia del Señor (Mateo. 6:33; 1 Corintios 3:16).

Damos gracias a Dios por haber escogido a lo necio del mundo (1 Corintios 1:27), es decir a nosotros; para que lleguemos a ser reyes y sacerdotes para Él. Es tiempo que levantemos el rostro para deleitarnos en el Señor, y así seremos también su deleite, y nos tome por dignos para ser arrebatados (Job 22:6, Isaías 58:14; 62:4). ¡Maranatha!

La mujer odiada

Cuando se CasaNehemías Ríos GonzálezCoordinador: Oswaldo Gutiérrez


Lucas 11:38Lucas 18:10Hechos 26:5Mateo 3:7

Mateo 5:20Mateo 9:12Mateo 9:34


…Y por la sierva cuando hereda a su señora. (Proverbios 30:23).

La Biblia describe en Proverbios 30:21 que: “Por tres cosas se alborota la tierra, y la cuarta ella no puede sufrir”; se hará el énfasis en la última parte. Proverbios 30:23 que dice: “Por la sierva cuando suplanta a su señora”. Se puede observar un claro ejemplo de ello en Génesis 6:8, el cual lo describe así: “Y le dijo: Agar, sierva de Saraí, ¿de dónde vienes tú, y a dónde vas? Y ella respondió: Huyo de delante de Saraí mi señora”. Agar dio un hijo a Abraham, cuando Saraí vio por tardanza la promesa que Dios le había dado.

Más adelante en el versículo 21, Saraí dijo a Abraham: “Echa a esta sierva y a su hijo, porque el hijo de esta sierva no ha de heredar con Isaac mi hijo”. Se puede tomar en varios escenarios este mensaje, muchas veces las promesas que Dios da a sus hijos se tienen por tardanza; pero es necesario recordar que los tiempos de Dios no son los del ser humano. La desesperación de ver su cumplimiento, provoca tomar decisiones que traerán consigo grandes consecuencias, como lo plantea la Biblia en esta historia.

Otro escenario que podemos ver es la figura de los gentiles, como lo describe Mateo 7:24-30. La mujer cananea que deseaba que su hija fuese sanada; ese pan no le correspondía, sin embargo su fe alcanzó el milagro de la sanidad. Este ejemplo también hace posible la esperanza que hoy tenemos como

hijos de Dios; que la herencia que correspondía para el pueblo de Israel, puede ser alcanzada por un pueblo que era condenado a la perdición, sin posibilidades de ser heredero; tanto en alimento material como el espiritual. Tal como lo dijo Jesús en el versículo 28: “Entonces respondiendo Jesús, dijo: Oh mujer, grande es tu fe; hágase contigo como quieres. Y su hija fue sanada desde aquella hora”.

Otro ejemplo es el caso de la Reina Ester. Ella no tenía ni la menor idea que algún día sería esposa del Rey Asuero, pero los planes de Dios para su vida eran grandes, y de alguna manera ella substituyó a la Reina Vasti, (Ester 1:10,13). Ester, era una mujer israelita cautiva en el reino Persa (Ester 2:7), ella no tenía esperanza alguna, como el resto del pueblo, ya que estaban destinados a la erradicación (Ester 3:9-10); sin embargo, Ester fue escogida para participar entre un grupo de vírgenes de hermoso parecer, para sustituir a la reina Vasti. (Ester 2:2-5). Ester agradó y halló el favor de Hegaí, eunuco encargado de las mujeres; por lo que se apresuró a proveerle cosméticos, alimentos, siete doncellas escogidas del palacio del rey, y fue puesta en el mejor lugar del harén (Ester 2:7-9). Esta historia nuevamente brinda Esperanza a la Iglesia. En este caso, es la sierva quien no merecía tomar el nombre de señora, esposa y amada; sin embargo el rechazo de quien era la elegida, dio la oportunidad a la iglesia para tomar ese lugar, y alcanzar el ser llamada la esposa del Señor. Todo ello después vivir bajo la gracia del Señor, de dejarse guiar por el Espíritu Santo y sus siete espíritus, de dejarse equipar y edificar por los cinco ministerios (Apocalipsis 1:4; 3:1; 22:17; Efesios 4:11-13).

Notamos entonces a la luz de las escrituras, cómo muchos perdieron el lugar de realeza y señorío de su casa por desobediencia. Como en el caso de Vasti,

cuando no quiso presentarse delante del Rey, perdió su lugar de señora y reina. Es necesario analizar el camino que como creyentes hemos caminado, y preguntarle al Señor, si hemos dejado de alcanzar algo por desobedecer los mandatos e instrucciones descritas en la palabra de Dios. Como le sucedió a Saúl, que por desobedecer a Dios perdió su reino (1 Samuel 15:22,26), y le fue dado a David, quién llegó a ser señor y rey. La Biblia relata que David llegó a ser rey porque era conforme al corazón de Dios; “Pero ahora tu reino tiene que terminar, porque el SEÑOR ha buscado a un hombre conforme a su propio corazón. El SEÑOR ya lo ha nombrado para ser líder de su pueblo, porque tú no obedeciste el mandato del SEÑOR” (NTV 1 Samuel 13:14). Al referirse a ser conforme al corazón de Dios, es ser como Él es, parecerse a Él; Dios es fiel, guarda sus pactos (Deuteronomio 7:9). Dios es celoso y santo (Josué 24:19), se refiere a que cada característica de Dios debe de reflejarse en nosotros, pues la Biblia dice que llegará el dia que ya no nos veremos como somos, sino que seremos como Él, como un espejo cara a cara, y seremos semejantes a él (1Corintios 13:12, 18).

Por la Sierva cuando suplanta a su SeñoraJohana PaniaguaCoordinadora: Rita de Gutiérrez


1 Juan 3:9 1 Juan 5:18Romanos 8:3Santiago 1:15

Hebreos 2:14


“La sabiduría clama en la calle, en las plazas alza su voz; clama en las esquinas de las calles concurridas; a la entrada de las puertas de la ciudad pronuncia sus discursos”. (Proverbios 1:20-21). Sin lugar a duda, la sabiduría de Dios es Cristo (1 Corintios 1:28). La Biblia también dice acerca del Señor lo siguiente: “No clamará ni alzará su voz, ni hará oír su voz en la calle”. (LBLA Isaías 42:2). Al contextualizar estos tres pasajes con la vida del Señor Jesucristo, podríamos decir lo siguiente: El Señor Jesucristo como la sabiduría de Dios alzó su voz, más que con su boca, lo hizo con sus buenas acciones, demostrando así su sabiduría. Por tal razón las Escrituras nos enseñan: “¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Que muestre por su buena conducta sus obras en mansedumbre de sabiduría”. (LBLA Santiago 3:13). Partiendo de esto, un ejemplo también lo vemos en cuatro sabios, descritos en el Libro de Proverbios; ellos sin hablar como lo hacemos nosotros, demuestran su sabiduría con sus buenas acciones (Proverbios 30:24-28). En este estudio con la ayuda del Señor, hablaremos de la Hormiga.

PUEBLO SIN FUERZA

“Las hormigas, pueblo sin fuerza, que preparan su alimento en el verano”. (Proverbios 30:25). Ellas son insectos, pueblo que nos enseña sabiduría sin hablar como nosotros. Se dice que son un pueblo sin fuerza, pero capaces de hacerle frente a cualquier circunstancia adversa que se les presente, por tal razón la Biblia dice: “Y yo me dije: Mejor es la sabiduría que la fuerza; pero la sabiduría del pobre se desprecia y no se presta atención a sus palabras”. (LBLA Eclesiastés 9:16).

PUEBLO DE DIOS

Al hablar de Pueblo, hablamos de unidad por medio de la Sangre de Cristo, sin enemistad alguna (Efesios 2:13-15), hablamos también de unidad en el Espíritu (Efesios 4:3). Las hormigas son un pueblo capaz de hacer huir a sus enemigos, en medio de la unidad que Dios les permite tener y en un mismo sentir: “¿Cómo es que uno puede perseguir a mil, y dos hacer huir a diez mil, si su Roca no los hubiera vendido, y el SEÑOR no los hubiera entregado?”. (LBLA Deuteronomio 32:30). “Así que, no vayas a la guerra sin consejo sabio; la victoria depende de que tengas muchos consejeros”. (NTV Proverbios 24:6).

BUSCA ALIMENTO

“Ve, mira la hormiga, perezoso, observa sus caminos, y sé sabio. La cual, sin tener jefe, ni oficial ni señor, prepara en el verano su alimento, y recoge en la cosecha su sustento”. (LBLA Proverbios 6:6-8). La palabra “alimento” aquí es la H3899 Lékjem, se puede traducir como: “Pan”. El pan lo provee Dios, pero uno tiene que pedirlo y buscarlo en oración, esto fue lo que el Señor nos enseñó en la oración del Padre nuestro (Mateo 6:6). Este pan puede representar también el pan de la liberación para los hijos de Dios (Marcos 7:25-30). Todo aquel que es sabio, busca cada día el ser libre para agradar a aquel que lo ha llamado a libertad, por la Sangre de Cristo.

DILIGENTE Y NO PEREZOSO

“Ve, mira la hormiga, perezoso, observa sus caminos, y sé sabio. La cual, sin tener jefe, ni oficial ni señor, prepara en el verano su alimento, y recoge en la cosecha su sustento”. (LBLA Proverbios 6:6-8). Como bien lo mencionamos al principio, la hormiga sin hablar le enseña sabiduría al perezoso. “No seáis perezosos en lo que requiere diligencia; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor”. (LBLA Romanos 12:11). La diligencia es la posesión más preciada del hombre (Proverbios 12:27), ella es la que lo lleva a estar delante de los reyes (Proverbios 22:29). Uno de los propósitos por los cuales Dios liberó a Israel de Egipto, fue

para que le sirviera en el desierto (Éxodo 7:16). Pero ellos fueron perezosos para servir al Señor, en vez de servirle a él, le sirvieron a otras entidades: “Y si no os parece bien servir al SEÑOR, escoged hoy a quién habéis de servir: si a los dioses que sirvieron vuestros padres, que estaban al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa, serviremos al SEÑOR”. (LBLA Josué 24:16) En el contexto d estos pasajes, el Señor compara la idolatría de Israel con la pereza para servir. Seamos diligentes día con día sirviendo, haciendo todo como para el Señor y no para los hombres (Colosenses 3:23-24).

“Así que Josué les dijo a los israelitas: «¿Cuánto tiempo más serán unos cobardes perezosos? ¿Cuándo entrarán a tomar posesión de la tierra que les ha dado el Señor, el Dios de sus antepasados?” (PDT Josué 18:3) La pereza es algo que vuelve cobarde al que la posee, la pereza es algo que día con día tenemos que derrotar, es un enemigo que impide que entremos a Canaán, la Tierra en abundancia. Busquemos día a día con diligencia al Señor, si hemos sido faltos de sabiduría, pidámosla al Señor; y él en su bondad, nos la dará en abundancia (Santiago 1:5). Que por medio del aprendizaje de la sabiduría en la hormiga, nosotros podamos avanzar en el propósito de Dios en nuestra vida. ¡Amén!

Edwin Castañeda y Vilma CruzCoordinador: Pablo Enriquez



Heb 13:15Rom 7:23

Las Hormigas


“Cuatro cosas son pequeñas en la tierra, pero son sumamente sabias… Los tejones, pueblo sin poder, que hacen su casa en la peña”. (Proverbios 30:24-26)

Una de las formas en que el Espíritu y la novia le dicen “ven” al Señor Jesús, es mediante la preparación de su venida; lo cual no solamente implica purificación, sino que también los adornos que la novia debe llevar. Tal como lo hizo Ester, utilizando solamente lo que le dijeron para agradar al rey. Así mismo encontramos que la sabiduría es un adorno que debemos adquirir (Proverbios 4:9), y podemos aprenderlo de los tejones.

En 2 Reyes 22 encontramos a Safán, cuyo nombre significa: Tejón de las rocas. Él era un escriba que junto con el sacerdote Hilcías, encontraron el libro de la ley y se lo leyeron al rey Josías. Él logró comprender el mal que vendría sobre Israel, debido a la desobediencia. Tras humillarse delante del Señor, alcanzó misericordia y paz para su tierra. Por lo tanto, una de las características de la iglesia arrebatada; es que comparte las buenas nuevas y se humilla delante de Dios, para que su tierra alcance misericordia (2 Crónicas 7:14).

Otra de las características de los tejones, es que tienen su oído muy desarrollado, mientras que su vista es limitada; la mayor parte del día pasa en la tejonera, por lo que está acostumbrado a la visión nocturna u oscuridad. Esto nos enseña acerca de la fe, ya que esta viene por el oír la palabra de Dios (Romanos 10:17), y nos ayudará a caminar como viendo al invisible (Hebreos 11:27).

Estos animales habitan en lugares rocosos.

La palabra peña viene del hebreo Tsur (H6697), que significa: Roca, fortaleza, refugio y Dios. En la biblia se menciona 3 veces Bet-Tsur, que quiere decir: Casa de roca. Es lo que encontramos al hacer de Cristo nuestro refugio:

Josué 15:58, fue una de las ciudades que fue designada como territorio de Judá, es decir que este lugar se encuentra en la alabanza, y cuando esta es agradable para el Señor, tiene la función de una fortaleza (RVR1960 Salmos 8:2).

2 Crónicas 11:7, fue una de las ciudades que edificó Roboam, con el propósito de fortificar Judá. Roboam quiere decir: El que agranda el pueblo. Por lo tanto, en este lugar nos capacitan para la expansión del evangelio.

Nehemías 3:16, cuando se distribuyó el trabajo de restauración de la muralla, se menciona que Bet-Tsur era gobernada por Nehemías, que significa: Consolación de Jehová; por lo tanto en este lugar no solamente encontraremos el consuelo de Dios, sino que también podemos ser restaurados.

En Josué 20 también encontramos 6 ciudades que Dios estableció como ciudades de refugio, de las cuales 3 de ellas se encontraban en montañas, es decir que eran lugares rocosos: Cedes, en el monte de Neftalí; Siquem, en el monte de Efraín; y Hebrón, en el Monte de Judá.

Cedes viene del hebreo Quédesh (H6943), que quiere decir: Santuario, consagrar, dedicar, preparar y señalar. Ser sabio es refugiarnos en la roca que es Cristo, y esto lo alcanzamos cuando le dedicamos nuestra vida y nos consagramos para Él. Nuestro cuerpo, como morada del Espíritu Santo, se convierte en un santuario; dándonos la garantía de salvación (Efesios 1:14), y señalados como sus siervos (Apocalipsis 7:3).

El nombre de la ciudad de Siquem viene del hebreo shekém (H7926), que significa: Cuello (entre los hombros), como el lugar de llevar cargas, espalda y hombro. En este lugar son cambiadas nuestras cargas y en su lugar Cristo nos

da su yugo, que es el servicio, para que encontraremos descanso para nuestras almas (Mateo 11:29). Recordemos que el propósito de estas ciudades de refugio, era para que aquellos que habían cometido un asesinato accidentalmente; podían alojarse allí, y así el vengador de la sangre no podía hacerles daño; hasta la muerte del sumo sacerdote. Hoy, nuestro Sumo Sacerdote Jesucristo, nos dice en Mateo 11:28: “Venid a mí, todos los que estáis cansados y cargados, y yo os haré descansar.” Al refugiarnos en Él, sabemos que ya ha vencido la muerte y no morirá jamás, que el vengador no podrá hacernos daño mientras habitemos para siempre en Él.

El monte Hebrón era una ciudad importante de Judá, y su raíz primaria (H2266) se traduce como: Enlazar, hacer alianza, unión o pacto. Fue en este lugar, en donde todas las tribus de Israel fueron a hablar con David e hicieron un pacto; poniendo al Señor como testigo, para consagrarlo como rey de Israel (2 Samuel 5:1-5). De la misma manera lo hizo nuestro Señor Jesucristo. Mediante el Nuevo Pacto, con su sacrificio en la cruz y el derramamiento de su sangre, compró para Dios gente de toda raza, lengua, pueblo y nación; haciéndonos reyes y sacerdotes, para reinar sobre la tierra juntamente con Él (Apocalipsis 5:9-10).

Al aprender las características de los tejones y de los lugares donde habitan, podemos alcanzar esa sabiduría que nos ayudará a agradar al Padre (Proverbios 10:1). También recibimos el adorno que el Espíritu Santo, que nos prepara para el encuentro con nuestro amado Señor Jesucristo (Génesis 24:53).

Los

TejonesLaura IguardiaCoordinadora: Jimena de Enríquez


Proverbios 30:27 “Las langostas, que no tienen rey, pero todas salen en disciplinados escuadrones”.

Vemos que las langostas aun no teniendo un guía o líder, tienen el conocimiento de que en la unidad hay fuerza de trabajo; que así se llega a las metas, y se avanza hasta la consecución de la tarea encomendada. Aquí vemos que las langostas tienen como característica el ser disciplinadas, como escuadrones de ejército.

Ellas han aprendido a ser bien organizadas. Entonces si lo aprendieron… ¿de quién lo aprendieron si no tienen rey? Podríamos entonces intuir que les fue inculcado en su génesis, por el Dios creador.

Estos insectos van en unidad llevando una misión, y una visión en conjunto. Ahora bien, ¿cómo logramos aplicar estos criterios en nosotros como cristianos?

Vamos al nuevo testamento cuando Dios nos da una respuesta en Efesios 4:11 – 13.

“Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros,

a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo,

hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo”.

Quiere decir que nosotros como cristianos, deberíamos de dejar que sea implantada en nosotros la edificación, que viene de parte de los ministros designados por Dios, y que son cabeza nuestra. Esto para que podamos avanzar hacia la unidad perfecta, a la que somos llamados de parte de Dios.

(NBLH Efesios 4:3)

Es tan sólo en la unidad del espíritu que lograremos desvirtuar los ataques del enemigo, que quiere

quitarnos esa paz. Por eso, debemos de ser esforzados para mantenernos unidos

como cuerpo de Cristo, y así avanzar; destruyendo las posiciones del diablo.

(NBLH Colosenses 3:14)

Sabemos que el amor supera todo y soporta todo; por eso, pese a nuestras obvias diferencias como personas, seremos capaces de actuar en unidad, sobrellevando los defectos del prójimo. Al verlo con amor, como nos ve el mismo Dios, y haciendo esto en sinergismo, llegaremos a obtener la perfección en la unidad.

Sinergismo: Es la acción combinada de varias sustancias químicas, las cuales producen un efecto total, más grande que el efecto de cada sustancia química separadamente.

(NBLH Juan 17:23)

Es el deseo latente de Dios vernos unidos a él, como lo están el hijo y el padre. Esta unidad nos llevará por un proceso de transición, que nos hará estar unidos con él y en él. Por lo tanto, hermanos, esforcémonos para conservar nuestra unidad, y que esa sea también una unidad en el Espíritu Santo.

(NBLH Romanos 13:8)

En estos versos se denota que es el amor, la fuerza de unión que está sobre la ley, y nos lleva a una génesis de cumplimiento, la ley del amor unitario.

De nuevo somos exhortados a estar en constante esfuerzo, para amarnos los unos con los otros, y conseguir esa unidad que nos vuelve fuertes; haciendo de nosotros una banda de langostas, que destruyen los campos del enemigo. De hecho, en el mundo se dice: “La unión hace la fuerza”.

Es mucho más sencillo lograr un objetivo, si nos apoyamos en la ayuda de un grupo de personas, que emprender la tarea en solitario. Trabajo en equipo: Es un conjunto de individuos que colaboran entre sí para conseguir un fin

común. Trabajar mano a mano con otras personas, puede ser por gusto o por necesidad. Hay gente que no soporta realizar una función en soledad, por lo que recurren a la compañía de otros con el fin de socializar, y de que su tarea se haga más amena. Sin embargo, también hay trabajos que son imposibles de hacer, sin contar con la ayuda de otras personas.

La unidad del Espíritu no puede ser entendida por aquellos que realmente no son de Cristo, aunque lo pretendan e intenten imitarla con esfuerzos humanos.

“Spoudazontes”, es del verbo “Spoudazo”

en griego, que traduce la versión Reina Valera por “solícitos”. Otras traducciones de ese verbo serían: Apresurarse; aplicarse a; ocuparse

activamente; esforzarse. Como podemos ver, existe una impronta, una urgencia y gravedad en lo que leemos. Debemos esforzarnos, apresurarnos, y ser diligentes en hacer algo al respecto de la unidad del Espíritu, ¿en qué?

“…en guardar…”:

“Terein”, es del verbo “Tereo”, en griego que traduce la versión Reina Valera por: “guardar”, y que también significa: “Observar; percibir; cuidar; cumplir”.

Así pues, debemos ocuparnos diligentemente en lo concerniente a la unidad del Espíritu. En el sentido de guardarla, cuidarla, cumplirla… ¿Cómo hacemos todo esto? Evidentemente eso requiere de una puesta en práctica, así como debemos hacer con la fe. De hecho, esto también

¡es un asunto de fe!

Debemos trabajar funcionalmente para ver en lo natural, en lo tangible, el beneficio de la unidad del Espíritu. Esto es: la unidad del Espíritu en acción.

“… sed de un mismo sentir, y vivid en paz; y el Dios de paz y de amor estará con vosotros” (2 Corintios 13: 11).

Por lo tanto, el fruto en lo natural en cuanto a la unidad del Espíritu, deberá ser nuestra meta .

Proverbios 30:27

Victoria ChávezCoordinador: Rafael Molina



Heb 13:15Rom 7:23

La unidad

Progresiva


La Biblia relata en Proverbios 30:24-28 sobre cuatro seres que son muy pequeños en la tierra, pero que son sumamente sabios. Las hormigas, los tejones o conejos, las langostas y las arañas. En Proverbios 6:6 el Señor dice que veamos a las hormigas, que aprendamos de ellas y seamos sabios. Debemos aprender sabiduría de estos cuatro pequeños seres. Cuando se habla de las arañas, , en algunas versiones se traduce como: Lagarto, lagartija, similares a los geckos de las casas; como en la Strong, palabra semamit, H8079; pero la versión King James lo traduce propiamente como araña. Ahora bien, es necesario que aprendamos de la sabiduría de las arañas, a través de sus características:

Prepara una red: Las arañas tejen una red, y la red nos habla de aquellos cristianos que hacen obra evangelista. Por eso el Apóstol Pablo le encarga cuatro cosas a Timoteo: ser sobrio en todo, soportar las aflicciones, cumplir su ministerio, pero una muy importante, es hacer obra de Evangelista (2 Timoteo 4:5). El Señor les dijo a los discípulos que le siguieran, y los volvería pescadores de hombres (Mateo 4:18-19). Es necesario que nosotros hablemos del plan de salvación en todo lugar, señalando al Señor quien es el camino, la verdad y la vida (Juan 14:6); y que por su sacrificio en la cruz, somos salvos. La red nos habla de la capacidad extraordinaria de sujeción a las paredes y techo, lo que significa estar bajo sujeción y cobertura.

Tejen de noche: Según los investigadores de las arañas, la mayoría de las especies tejen sus redes de noche. La razón por la cual tejen su red o telaraña, es por tres motivos: para construir redes de caza, para tapizar refugios, y para hacerse llevar por el viento. Las redes se tejen por la noche, es figura de aquellos cristianos que hacen la obra de evangelista aún en medio de pruebas. Que viven conforme la doctrina y hablando del Señor, aún en medio de dificultades, testifican que el Señor es su libertador, la roca en quien

se refugian (Salmos 18:2). También las arañas se movilizan con sus redes por el viento, nos deja ver que son cristianos que viven y caminan conforme al Espíritu, y no conforme a la carne (Romanos 8:5, Gálatas 5:16). Quienes viven conforme al Espíritu no hay condenación para ellos (Romanos 8:1).

Despreciable: La araña, por su tamaño y naturaleza, viene a ser insignificante y hasta despreciable, teniéndola en baja estima. En cuanto al menosprecio, la Palabra nos habla en 2 Samuel 7:18-24, cuando el rey David eleva una oración, reconociendo su humilde condición junto a su pueblo, y engrandeciendo al Señor Lo que nos muestra una sabia actitud al colocar al Señor en su lugar de preminencia, como el único Dios. En esta condición tenemos la promesa encontrada en Job 8:7: “Aunque tu principio haya sido insignificante, con todo, tu final aumentará sobremanera”. Una vez más vemos la Gracia del Señor actuando en nuestras vidas, y es gracias a su favor que ahora somos resucitados con Él, y somos sentados en lugares celestiales (Efesios 2:6); recibiendo con ello toda bendición espiritual (Efesios 1:3).

Su aspecto no es agradable: Las arañas tienen en común que su aspecto no es agradable a la vista. Siendo figura de los cristianos, que a lo mejor no somos agradables al mundo exterior, pero que por dentro tenemos la presencia del Señor. Esto era semejante al Tabernáculo de Moisés, que por fuera no tenía buen parecer, pero por dentro descendía la gloria de Dios, su Shekiná. Así mismo nosotros, que, tenemos la presencia del Señor. Por eso dice la Biblia que el Señor anhela celosamente el Espíritu que ha hecho morar en nosotros (Santiago 4:5), lo cual nos recuerda que somos templo del Espíritu Santo (1 Corintios 6:19).

Tienen varios ojos: Dicen los investigadores, que algunas especies que tienen varios ojos diminutos; algunas cuentan con cuatro u ocho ojos. De la misma manera, los seres vivientes descritos en Apocalipsis, tienen ojos por delante y por detrás, también tienen ojos por dentro y por fuera; y no cesaban de decir: “Santo, Santo, Santo, es el Señor Dios, Todopoderoso, el que era, el que es, y el que ha de venir”. (Apocalipsis 4:6,8). Esto representa a aquellos cristianos que buscan la santidad, viendo no solo hacia

fuera o lo visible, sino que también lo espiritual, lo que se encuentra dentro; analizando aquello que debe ser restaurado en nuestra alma, para ser agradables delante del Señor. También es característica de aquellos que constantemente buscan adorar al Señor, porque saben que él r busca adoradores en espíritu y en verdad (Juan 4:23).

Vive en el Palacio del Rey: Una característica impresionante de la araña, es que busca su refugio en el Palacio del Rey. Esto nos deja ver, que no importa lo insignificante que uno pueda parecer, el anhelo de nuestro corazón debe ser habitar en casa del Rey; para contemplar su hermosura y meditar en su templo (Salmos 27:4). Por tal motivo anhelemos ser atraídos por el Señor y digamos: “El Rey me ha metido en sus cámaras”. (Cantares 1:4). El Señor también prometió que en la casa del Padre hay muchas moradas, y él nos prepara lugar de seguridad. (Juan 14:1-3).

Pequeño sabio:La araña que vive en el palacio del Rey

Leonel Fernández, Samuel Santos, Mario y Elsa Gonzalez,

Coordinador: Sammy Pérez

Redactores:

Citas bíblicas para estudio:Proverbios 30:28Salmo 27:4Proverbios 6:62 Timoteo 4:5Salmo 18:2Gálatas 5:161 Corintios 1:27:28Santiago 4:5


LBLA Prov. 30:29-30: “Hay tres cosas majestuosas en su marcha, y una cuarta de elegante caminar: el león, poderoso entre las fieras, que no retrocede ante ninguna”.

La Biblia menciona al León como figura de autoridad, dominio, linaje y poder; como al que vence batallas y que no retrocede. El león es todo un emblema de realeza y justicia divina. Tipifica a un líder sabio, dominante y centrado. También se identifica con nobleza, valentía y ausencia de miedo; resguarda el grupo y prefiere la tranquilidad. No ataca sin necesidad, reacciona sólo cuando es retado, y pelea a muerte para proteger. Recordemos al Apóstol Pablo quien en medio de sufrimientos y persecución dijo: “Pero de ninguna cosa hago caso ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabé mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios”. (Hechos 20:24).

Pero, ¿a qué nos referimos con el caminar elegante del león? Cuando se habla del caminar elegante del león, nos referimos a la forma en la que se comportaron y rigieron, los diversos personajes que fueron acreedores del título.

Estas son algunas de las figuras que representa al León en la Palabra de Dios:

“León de la tribu de Judá”, es nuestro Señor Jesucristo, quien es nuestro máximo ejemplo, y a quien deseamos imitar. Él es quien abre el libro y los sellos: Apocalipsis 5:5

“Cachorro de León es Judá”. Judá (Dios es alabado, D. Hitchcock) representa la alabanza. Génesis 49:9. Nuestra alabanza debe ser perfeccionada, debe evolucionar desde cachorro hasta llegar a ser el león maduro.

Dan, hijo de Jacob “cachorro de león”. Su nombre significa: “Juicio, El que juzga” (D. Hitchcock). Deuteronomia 33:22. Debemos primeramente juzgarnos a nosotros mismos, luego emitir juicios justos cuando nos sea requerido.

Gad, hijo de Jacob, Su nombre significa: “Tropa” (D. Hitchcock). Lo que representa poder caminar en unidad, en grupo. Gad “se echa como león”. Según Strong Concordance, echarse hace referencia a: Permanecer, habitar o reposar.

Deuteronomio 33:20.

Saúl: “pedido a Dios”, “el deseado”; y Jonatán: “regalo de Dios”, “dado por Dios”. 2 Samuel 1:23 “más fuertes que los leones”.

Ariel: hombre sabio que su nombre significa: “León de Dios”. Estando bajo la autoridad de Esdras, guío la caravana de Israel, desde Babilonia hasta Jerusalén sin dar marcha atrás”. Esdras 8:16

“El primer ser viviente parecía un león, que tenían ojos por dentro y por fuera, que no dejaban de adorar a Dios”. Apocalipsis 4:7-8.

El caminar como León en Adoración

Nos podemos dar cuenta entonces que lo que se describe en Apocalipsis 4:7, este ser viviente semejante a un león, continuamente está adorando a el Señor. Es representativo de lo que debemos hacer aquí en la tierra. El cachorro de león evolucionó a un León Maduro, y entonó un nuevo rugir, este rugir es una sublime adoración en lo más íntimo para nuestro Dios.

Cada vez que usamos nuestra boca para alabar a Dios, levantamos nuestro rugir, que es el rugir de la iglesia. Cuando un cristiano ya no ora, no alaba, no se congrega, no predica y no levanta sus manos; es porque aún está enjaulado, aunque esté en medio de leones libres, porque el enemigo ha apagado su voz. El cristiano no puede estar desperdiciando sus rugidos en cosas vanas, porque pierde el poder de Dios, agota sus fuerzas, se debilita ante el enemigo; debe cuidar de las armas con las que Dios lo equipó para salir en defensa de los suyos.

Necesitamos que de esta generación se levanten leoncillos, con la fuerza de león y leona, saquen a la iglesia de este mundo en donde se mueve el espíritu babilónico; que por medio de sus alabanzas (rugidos de guerra), liberen a los que están con grilletes y redes en el fondo del pozo. No olvidemos hermanos que en nosotros está el poder de dirigir, pues en nosotros está la genética de Cristo, quien ha vencido, el León de la Tribu de Judá.

El caminar agradando a Dios

Vemos en (PDT Hebreos 10:38) “El aprobado por Dios, vivirá por la fe; pero no me agradará si por temor se vuelve atrás”. Para caminar sin volver atrás, debemos añadir fe a nuestras acciones, para así poder agradar a aquel que nos llamó. El miedo intentará frenarnos, y llevarnos de regreso a la esclavitud en la que vivíamos antes de venir a los pies de Cristo.

Nos damos cuenta de que El Señor nos

manda como a Josué, a ser esforzados, valientes y a no tener miedo. A enfrentar a los gigantes que se hayan levantado en contra nuestra, así como David enfrentó a Goliat. También es necesario estar firmes para poder resistir, esto lo logramos colocándonos la armadura de Dios (Efesios 6:11). Debemos procurar evolucionar ante las situaciones que se nos presentan en la vida, siendo transformados de gloria en gloria por medio del Espíritu Santo (2 Corintios 3:18). Hasta llegar “a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo” (Efesios 4:13), convirtiéndonos de cachorros de león, a la imagen y semejanza del LEÓN DE LA TRIBU DE JUDÁ.

¡Dios nos conceda permanecer firmemente en Él sin volver atrás!

Citas Bíblicas para estudio:

Génesis 19:26

Josué 1:9

Salmos 139:7

Efesios 6:11

Lucas 9:62

2Corintios 3:18

Efesios 4:13

Mateo 26:70

Números 13:25

Carlos A. Samayoa

Ruth de Rodríguez

Miriam Barrios

Ana Lucía Valenzuela

El caminar de

El León

Coordinador: Pablo Orellana

Redactores:


Una de las características que un hijo de Dios debe manifestar en su vida, es un caminar que agrade a Dios. Cuando hablamos de “caminar”, nos referimos a la manera de actuar y comportarnos; para ello debemos ser tratados por el Señor, de tal manera que nuestros pies sean hechos ligeros para poder caminar en las alturas, como lo dice la biblia:

“El Señor DIOS es mi fortaleza; Él ha hecho mis pies como los de las ciervas, y por las alturas me hace caminar”. (LBLA Habacuc 3:19).

Tomando eso como un punto de partida, podemos ver que Proverbios 30:29 relata cosas cuya marcha o caminar es majestuoso y elegante, a las cuales debemos poner atención:

“Hay tres cosas majestuosas en su marcha, y una cuarta de elegante caminar:” (Proverbios 30:29 LBLA)

El Ceñido de Lomos:

) “El lebrel ceñido de lomos; asimismo el macho cabrío; Y un rey contra el cual ninguno se levanta”. (Proverbios 30:31 Spanish RV-BRG).

¿Por qué es tan importante ceñir los lomos? Podemos ver en Éxodo 12:11, la manera en que el pueblo de Israel debía comer la cena de la pascua; justo en la noche en que el Señor con su fuerza, los liberara de la opresión de Egipto:

“Y de esta manera lo comeréis: ceñidos vuestros lomos, las sandalias en vuestros pies y el cayado en vuestra mano, lo comeréis apresuradamente. Es la Pascua del SEÑOR.”. (LBLA Éxodo 12:11).

En este caso, podemos ver una similitud entre la salida del pueblo de Israel de Egipto, con la salida del pueblo de Dios; que ha procurado ceñirse los lomos, y que está próximo a ser arrebatado.

Ceñir los lomos tiene un propósito definido y en ocasiones específico. Era necesario ceñirse los lomos con ciertos elementos, para lograr el objetivo deseado, o evidenciar incluso un ministerio:

Para poder Correr. (1 Reyes 18:46).

Con cilicio para hallar misericordia. (1 Reyes 20:32).

Cinturón de cuero que evidencia el ministerio. (2 Reyes 1:8).

Para poder ejecutar una delegación. (2 Reyes 9:1).

Para poder tener valor delante de Jehová. (Job 38:3).

Para hablar de parte de Dios / Ser llamado a un ministerio. (Jeremías 1:17).

También es necesario ver la referencia de la manera en la que el mismo Señor Jesucristo es ceñido en sus lomos, como lo declara Isaías:

“La justicia será ceñidor de sus lomos, y la fidelidad ceñidor de su cintura”. (LBLA Isaías 11:5).

Al ser llamados hijos de Dios, debemos evolucionar hasta llegar a la estatura del varón perfecto, que es Jesucristo; ciñendo nuestros lomos con justicia y fidelidad.

Liderazgo

La versión Dios Habla Hoy nos deja ver que, un caminar elegante y digno, da la capacidad de tener el liderazgo necesario, para bendecir al pueblo que nos ha sido entregado para dirigir:

“El gallo, que marcha arrogante entre sus gallinas; el macho cabrío, que va delante de su manada, y el rey, que va a la cabeza de su ejército.” (N-C Proverbios 30:31).

El liderazgo y la dirección de un pueblo, grupo o incluso, la misma familia, no puede ejercitarse por medio de delegación. Es totalmente necesario que el líder enviado por Dios, sea un ejemplo, marchando al frente de su ejército. Un ejemplo claro lo podemos ver en Gedeón, cuando se disponía a salir a la batalla:

“Y les dijo: Miradme, y haced lo mismo que yo. Y he aquí, cuando yo llegue a las afueras del campamento, como yo haga, así haréis vosotros”. (LBLA Jueces 7:17).

Al dirigir al pueblo, grupo y familia, debemos también considerar que el corazón del líder debe ser humilde; sabiendo que no son sus capacidades las que provocan que sea reconocido y seguido, sino que Dios mismo es el que hace la obra en misericordia, y que el líder es una herramienta que el Señor usa:

“Pero Gedeón les dijo: No reinaré sobre vosotros, ni tampoco reinará sobre vosotros mi hijo; el SEÑOR reinará sobre vosotros”.

(LBLA Jueces 8:23).

Nadie te podrá hacer frente

El caminar elegante y digno del Señor, provoca también que el líder que dirige al pueblo, grupos y familia, pueda tener el respaldo de parte de Dios; obteniendo la seguridad de que nada ni nadie podrá levantarse contra él o ella, teniendo éxito:

“El lebrel ceñido de lomos; asimismo el macho cabrío; y un rey contra el cual ninguno se levanta”. (SRV2004 Proverbios 30:31).

“Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida. Así como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré ni te abandonaré. Sé fuerte y valiente, porque tú darás a este pueblo posesión de la tierra que juré a sus padres que les daría”. (LBLA Josué 1:5-6).

La dirección en la que te lleva el caminar elegante y digno, es a ser un justificado de Dios, y con ello tendrás la capacidad de evolucionar. Pasando de oyente a creyente, de creyente a siervo, y de siervo a amigo; teniendo la promesa de que estarás siempre guardado por la poderosa mano del Señor:

“Ningún arma forjada contra ti prosperará, y condenarás toda lengua que se alce contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos del SEÑOR, y su justificación viene de mí--declara el SEÑOR”. (LBLA Isaías 54:17).

Ciñe tus lomos, empieza hoy a caminar elegante y dignamente delante de Dios; Él hará una obra grande en tu vida y en la de los tuyos.

El ceñido de

Lomos


3 Juan 1:9-102 Timoteo 3:2Santiago 5:5

Ana Maribel Monterroso de Rosales y Hugo Efraín BacajolCoordinador: Hari Chacón


“Hay tres cosas majestuosas en su marcha, y una cuarta de elegante caminar: el león, poderoso entre las fieras, que no retrocede ante ninguna; el gallo, que se pasea erguido, asimismo el macho cabrío, y el rey cuando tiene el ejército con él. (LBLA Proverbios 30:29-31).

Tradicionalmente se ha enseñado, que tanto el macho cabrío como las cabras, tienen un simbolismo negativo en las Escrituras; sin embargo, a la Luz de la Palabra de Dios, veremos que también tienen un simbolismo hermoso y aplicable a nuestra vida. En este artículo se explican las características de este animal, para conocer su significado y aplicación en el Nuevo Pacto.

El macho cabrío y su función en el Antiguo Pacto:

El macho cabrío es un mamífero del ganado caprino, y servía en el Antiguo Pacto como chivo expiatorio (Levítico 9:3, 15; Hebreos 9:22; Ezequiel 45:23). En la ley de Moisés, a este macho cabrío, Aarón le imponía las manos confesando sus iniquidades y las del pueblo; entonces era llevado al desierto para que desapareciera allí, como símbolo de la eliminación de las iniquidades de Israel (Levítico 16:21-22). La fiesta de la Pascua se celebraba en el mes primero, a los catorce días del mes Nisán; en este mes se debía presentar en ofrenda por el pecado, un macho cabrío cada día de la fiesta. Entonces tenía una doble función: servir de ofrenda para el holocausto por el pecado personal o familiar, y servir de ofrenda por el pecado del pueblo.

Aplicación del macho cabrío en la nueva dispensación:

El Señor dijo que todo lo que le habría de acontecer, muerte, holocausto y resurrección; estaba escrito en la ley de Moisés, los Salmos y los profetas (Lucas 24:44). El caminar de este macho cabrío

en el desierto, representa el caminar de Jesús; como el macho cabrío que Dios estaba ofreciendo, para que sobre él fueran cargados todos y cada uno de nuestros pecados (Isaías. 53:5). Ahora en el Nuevo Pacto (Hebreos 7:12), nosotros tenemos la Sangre del Cordero de Dios que está fresca, de tal manera que Dios ya no se recuerda más de nuestros pecados (Hebreos 8:12). También somos convocados a participar de la Santa Cena (Juan 1:29, 6:54-56).

Algunas características del macho cabrío:

1. Es ágil ,veloz, y trepa con facilidad por terrenos escarpados: Los cristianos debemos salir de forma elegante de problemas, situaciones ásperas y peligrosas; como lo hizo David cuando cortó el manto de Saúl, y luego se presentó con palabras blandas aplacando la ira del rey (1 Samuel 24:11-19, Proverbios 15:1).

2. El pelo de cabra se peina y se trata como si fuera lana: Este pelo fue utilizado en el Tabernáculo para hacer cortinas (Exodo 26:7). La palabra cortina significa: “Ser domado” (Strong H3407 y H3415 yará). Es decir que para ser domados, necesitamos que los ministros nos corten el pelo de cabra, lo que nos hace útiles en el servicio al Señor. El pelo también representa el cabello de la mujer −en el Libro de Cantares− que es como rebaños de cabras que descienden de Galaad (Cantares 4:1 LBLA). Dándonos a entender que cuando nos quitan el pelo de cabra, y descendemos a su debido tiempo, seremos exaltados (Lucas 18:14).

3. Su rusticidad le permite ser poco susceptible a las enfermedades: La cabra nos enseña que debemos confiar en El Señor en medio de las adversidades; tengamos por sumo gozo el que nos hallemos en diversas pruebas (Santiago 1:2-3, Apocalipis 22:2).

4. Se adapta a condiciones ambientales variables, y a diferentes regímenes de nutrición: Hay momentos de la vida en donde toca aprender de las cabras, así como Pablo encontró el secreto de vivir en estrechez como en abundancia (Filipenses 4:12). Debemos pedirle a Dios en equilibrio, como decía el proverbista (RVR1960 Proverbios 30:9 ).

5. Tienen una excelente memoria: El Señor quiere que recobremos la memoria, de todo lo que oímos y aprendimos en la casa del Padre (Juan. 6:45); así mismo, desea que disfrutemos de las experiencias pasadas, que nos hicieron crecer y madurar (Hebreos. 10:32).

6. Tienen barba: tipifica la madurez de los ancianos, que son delegados ministeriales por donde desciende la unción, (Salmos 133:2).

El macho cabrío en la función pastoral

Cuando Jacob pastoreaba las ovejas de Labán, los animales manchados vinieron a ser de su posesión, entre ellos, algunos machos cabríos (Génesis 30:35-43). Jacob utilizó varas para separar su ganado del de Labán (Génesis 30:37). Esa palabra vara (Macqué)l significa: Germinar, retoño, brote (Strong H4731). Este tipo de vara representa la función pastoral, para hacer fértiles y prósperas a las ovejas.

Se nos ha proclamado un tiempo de primavera, lo asombroso es que durante la fiesta de la Pascua, se daba el comienzo de esta estación, y también la cosecha de la cebada (Exodo 9:31-32). Como cristianos, debemos alcanzar la estatura de primicias de la cebada para ser arrebatados; por lo tanto, necesitamos actuar velozmente y con agilidad. Como camina el macho cabrío para correr, y derramar nuestra alma en el altar de la misericordia (Exodo 27:2; 1 Reyes 1:50) Ahora tenemos la preciosa Sangre de Cristo, si nuestros pecados son como la grana, como blanca lana quedarán (Isaías 1:18).

El macho

CabríoEstuardo Herrarte y Oscar CastroCoordinador: Julio Lacán


Mt. 7:28-29Hch. 1:1Jn. 10:102 Tim. 2:15Ef. 4:11-121 Pe. 5:2-3 NTV

Mt. 25:24-30


En Proverbios 30 vemos que dentro de las cosas de elegante caminar se encuentra el rey, pero no es un rey que está en su palacio o que está siendo servido por sus criados, sino es un rey que sale con su ejército: “Hay tres, y hasta cuatro cosas que caminan con elegancia…el rey con su corona de oro que marcha frente a su ejército.” (Pr 30:29-31) BLS.

Lo que esto nos enseña a la luz de la Palabra, es que para ser hallados dignos en nuestro caminar delante de Dios debemos evitar el acomodamiento espiritual a sabiendas que repercute en lo secular; y como buenos administradores de las dádivas que nos fueron dadas, siendo una de ellas el habernos hecho reyes y sacerdotes para Dios (Ap 1:6), estamos llamados a ser reyes que salen a la batalla y se levantan como líderes en medio del pueblo para guiarlo por el camino de rectitud hacia la tierra prometida, no a ser servidos, puesto que si queremos tener un lugar en el Reino, somos nosotros quienes debemos servir a los demás “…antes, el mayor entre vosotros hágase como el menor, y el que dirige como el que sirve.” (Lc 22.26).

Al caer en acomodamiento estamos expuestos a peligros, un ejemplo lo vemos en el rey David, que al no salir con su ejército a la batalla en el tiempo en que los reyes debían hacerlo, se quedó en su palacio y levantándose tarde cometió el pecado que marcó su carrera, el cual hasta ahora es recordado cada vez que se habla de su reinado. Debemos entender que la Iglesia de Cristo está viviendo un tiempo de primavera, en el que debemos batallar y para esto debe haber una cabeza que dé instrucciones pero que esté al frente del ejército y lo guíe para pelear en contra de la estrategia del enemigo.

En la versión BLS notamos que el rey

marcha con una corona de oro, la cual es un distintivo de realeza. En la conquista de Jericó, una de las instrucciones que el Señor le dio a Josué fue que todo el oro sería consagrado al Él (Jos 6:19), como consecuencia de su obediencia el Señor se quedó con Josué y le hizo un nombre. Al ser reyes poseemos una corona, pero debemos entender que no es para ganar fama sino para dedicarnos completamente a la obra que Dios nos ordenó.

Podemos ver a distintos tipos de rey según su ámbito:

En la sociedad

“Tres cosas hay rectas en su caminar y la cuarta camina mejor…el rey que habla entre la gente” (Peshitta). Esto nos habla del comportamiento fuera de la iglesia como pueblo, debemos ser portadores de luz en todo tiempo ya que nuestro caminar es medido de acuerdo a nuestra conducta y proceder; de lo que sale de nuestra boca se ve si estamos en un camino de religiosidad o en un estado mejor al anterior.

La versión LXE describe al rey hablando públicamente ante una nación. En el AT el rey Salomón pronunció un juicio que toda Israel oyó sobre la disputa de maternidad de dos mujeres en el que emitió una resolución concluyente de la verdad (1 R 3:16-28), esto nos enseña que cuando nuestro caminar está en el Señor y no en las cosas terrenales, Él permitirá una manifestación de la sabiduría primigenia siendo ésta una personificación de la misma, permitiendo que cuando hablemos, de nuestra boca salga sabiduría “Mi boca hablará sabiduría (sabiduría primigenia), y la meditación de mi corazón será entendimiento.” (Sal 49:3).

En lo familiar

El hombre es quien asume el papel de rey como sacerdote de casa y cabeza de hogar, por lo tanto tiene la responsabilidad de estar al frente de su familia y guiarla en su crecimiento integral, cuidando de no caer en autoritarismo.

En la Iglesia

“Hay tres cosas de buen andar y una cuarta de buen caminar…el rey al frente

de su pueblo” NBE. Esta es la figura del pastor que habla a sus ovejas y éstas lo siguen (Jn 10:27) y la responsabilidad de ministros de guardar buen testimonio y tener solvencia para dirigir a un pueblo. “Y les dijo: Miradme, y haced lo mismo que yo. Y he aquí cuando yo llegue a las afueras del campamento, como yo haga, así haréis vosotros.” (Jue 7:17), Gedeón no fue estático sino que peleó al frente de su pueblo y lo llevó a la victoria. La tarea del ministro es hermosear a la Novia, cuidarla y edificarla, pero también debe ser un ejemplo en la batalla.

La cuadridimensión de los de elegante caminar es la número 6 del capítulo 30 de Proverbios, para esto quiero hacer mención de dos acontecimientos que marcan un periodo de seis: a) el principio de la creación, según el relato de Génesis hay 6 días de trabajo, pues al séptimo Dios reposó; y b) la profecía dada a Daniel sobre el final de los tiempos, hay una división de 7 semanas conocida como la restauración de Jerusalén y 62 semanas hasta la venida del Mesías, haciendo un total de 69 semanas. Por lo tanto, como hemos aprendido, estamos en un paréntesis de gracia antes de llegar a la semana final número 70 y es necesario que como reyes y sacerdotes nos demos cuenta el tiempo que estamos viviendo y según el lugar que nos corresponda, trabajemos para Dios y peleemos la buena batalla a fin de ser perfeccionados hasta el día en que el Señor venga por su Novia.

El Rey frente

a su Pueblo


3 Juan 1:9-102 Timoteo 3:2Santiago 5:5

Antonella RecancojCoordinador: Pablo Arana


Infografía: Ana Lucía Valenzuela

Amados hermanos: Es un gusto poder presentarles esta edición especial de la Revista Rhema. Esta es una edición muy peculiar, ya que fue escrita por varios de ustedes, los lectores. Queremos bendecir a todos los hermanos que nos enviaron sus artículos; pero por cuestión de espacio no podremos publicar cada uno debido que recibimos más de 150 artículos y no se da a basto la versión impresa. Sin embargo creemos con todo el corazón que ustedes son gente diligente y llena de fe. ¡Gracias a todos los que se tomaron el tiempo de escribir! Los animamos a que sigan escudriñando la Biblia, y que sigan escribiendo para que ejerciten ese talento que nuestro Señor les ha dado. ¡Bendiciones!, Maranatha

Proverbios 30:11, padre y madreProverbios 30:12, generación hipócritaProverbios 30:13, ojos altivosProverbios 30:14, usan palabras para devorar

Proverbios 30:16, la tierra que jamás se saciaProverbios 30:16, la matriz estérilProverbios 30:16, el SeolProverbios 30:16, el fuego

Proverbios 30:22, por el esclavo cuando llega a ser reyProverbios 30:22, cuando el necio se sacia de panProverbios 30:23, por la mujer odiada cuando se casaProverbios 30:23, por la sierva cuando suplanta a su señora

Proverbios 30:19, el camino del águila en el cielo Proverbios 30:19, el camino de la serpiente sobre la rocaProverbios 30:19, el camino del barco en medio del marProverbios 30:19, el camino del hombre en la doncella

Proverbios 30: 25, las hormigasProverbios 30: 26, los conejosProverbios 30: 27, las langostasProverbios 30: 28, la araña

Proverbios 30:30, el león Proverbios 30: 31, el ceñido de lomosProverbios 30:31, el macho cabríoProverbios 30:31, el rey

EDICIÓN 106 / Enero 2019

Ana Lucía Valenzuela Rosales

“Las 6 cuadridimensiones de Proverbios 30”

1. Genética

Proverbios 30:11-14

Proverbios 30:15-16

Proverbios 30:18-19

Proverbios 30:21-23

Proverbios 30:29-31

Proverbios 30: 24-28

2. Insaciabilidad

3. El misterio

de los 4 caminos

4.Los cuatro terremotos

5. Los cuatro

sabios

6.Las cuatro caminatas

editorial · 2019-04-10 · poderoso por la participación de tantos hijos espirituales que les ha...

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