1.tesis doctoral.pdf

Upload: armando-r-pena-osorio

Post on 26-Feb-2018

226 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    1/378

    Universidad de Salamanca

    Doctorado Antropologa de Iberoamrica

    Tesis Doctoral

    Antropologa de la

    participacin poltica:

    estudio comparativo de las

    formas de interaccin

    poltica en municipios de

    Espaa y Mxico

    Por

    D. Iigo Gonzlez de la Fuente

    Dirigido por

    Dr. D. ngel B. Espina Barrio

    Universidad de Salamanca

    Abril de 2008

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    2/378

    (Luz) A Pelayo.

    2

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    3/378

    NDICE.

    ndice de fotografas, cuadros, grficos y vietas..................................................Pg.8

    Agradecimientos... 11

    INTRODUCCIN.................................................................................................... 13

    BLOQUE I.- CONOCIMIENTO LOCAL Y ANTROPOLOGA POLTICA... 31

    1.- El conocimiento local.. 31

    El conocimiento local: la etnografa multisituada pero localizada y la generalizacin a

    travs de la comparacin de casos particulares, 33.

    2.- Breve marco terico de la antropologa poltica.................................... 36

    Los evolucionistas del s. XIX, 36.- Los boasianos: reaccin al evolucionismo, 38.- Los

    funcionalistas britnicos, 39.- La transicin hacia el estudio de los procesos, 42.- Teora

    de la toma de decisiones, 44.- Los neoevolucionistas, 45.- Teora procesual, 46.- Teora

    de la accin, 48.- Otras vertientes del proceso. Teora del intercambio social. Teora

    transaccionista. Teora del Juego. Facciones, 51.- Simbolismo poltico. La teora de la

    representacin poltica, 54.- Los estructuralistas del pensamiento, 57.- La antropologa

    poltica llega a las sociedades industriales, 58.- Los enfoques semitico y hermenutico,

    61.- Participacin poltica y estructuras de poder: el modelo antropolgico de Roberto

    Varela para la explicacin del comportamiento poltico, 63.- Conclusiones, 68.

    BLOQUE II.- SOBRE LAS COMUNIDADES OBJETO DE ESTUDIO:

    UN RECORRIDO POR LA HISTORIA POLTICO-ELECTORAL

    RECIENTE DE ESPAA Y DE MXICO ................................................. 70

    1.- El caso espaol: los municipios de Nava del Rey (Valladolid) y

    Valle de Trpaga (Vizcaya) en la Espaa de las Autonomas....................... 73

    3

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    4/378

    La organizacin territorial del estado, 74.- El sistema electoral, 76.- El sistema de

    partidos, 77.- Cultura poltica, 80.

    1.1.- Moros y cristianos en la Nava del Rey..................................... 82

    El fenmeno sociocultural de partida: el voto permanente, 82.- La asuncin de una

    perspectiva multidisciplinar, 89.- La adopcin del concepto de voto identitario, 103.-

    Nava del Rey: cuando el participar es una opcin identitaria, 110.

    1.2.- Los de aqu y los de fuera en Valle de Trpaga......................... 115

    La exploracin de la periferia, 115.- La etnicidad como lnea de fractura en la periferia

    vasca, 119.- Del voto identitario de clase al voto identitario tnico, 122.- Valle de

    Trpaga: cuando lo identitario se vuelve cotidiano, 128.- Nava del Rey y Valle de

    Trpaga: participacin poltico-electoral identitaria, 132.-

    2.- El caso mexicano: los municipios de Xico (Veracruz) y Jiquilpan de

    Jurez (Michoacn) en el Mxico de la Revolucin institucional................ 136

    La organizacin territorial del estado, 137.- El sistema electoral, 137.- El sistema de

    partidos, 139.- Cultura poltica, 140.

    2.1.- Quin no tranza, no avanza.............................................................. 142

    La ampliacin del concepto de voto identitario al de participacin poltica, 142.-

    Quines participan: la construccin de categoras socioeconmicas, 155.- Cmo

    participan: interacciones ticas y no-ticas, 162.- Las formas concretas de participacin

    poltica en territorio mexicano, 164.- Participacin electoral: la emisin del voto, 167.-

    Participacin en la campaa electoral: la asistencia a las juntas o mtines, 171.-

    Participacin en organizaciones polticas: presentarse como (pre)candidato de un partido

    poltico, 174.- Participacin-contacto: visitas y cartas a los representantes polticos o

    funcionarios pblicos, 177.- Participacin-protesta: conato de toma de un ayuntamiento

    por la fuerza, 178.- Contextos de participacin poltica en Mxico: una tipologa del

    comportamiento poltico, 180.- Conclusiones, 192.

    4

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    5/378

    BLOQUE III.- SOBRE FORMAS DE PARTICIPACIN POLTICA

    EN ESPAA Y MXICO....................................................................................... 196

    1.- Los conceptos para el anlisis intercultural: distancia relativa y

    distancia absoluta.......................................................... 198

    Problemas de comparacin de los menos privilegiados, 201.

    2.- Estudio comparativo de las formas de participacin poltica en

    municipios de Espaa y Mxico................................................................... 210

    2.1.- La participacin electoral: la emisin del voto.................................. 212

    Mxico: el intercambio de emisiones de voto por prebendas, 212.- Espaa: el intercambio

    de emisiones de voto por referentes identitarios, 224.

    2.2.- La participacin en campaas: la asistencia a un mitin y

    el recorrido casa por casa......................................................................... 233

    Mxico: la gente que jala gente, 234.- Espaa: la gente que se molesta en ir a las

    casas, 249.

    2.3.- La participacin en organizaciones polticas: el asociacionismo...... 258

    Mxico: sobre la (in)satisfaccin de los dirigentes y los beneficios de las bases, 260.-

    Espaa: sobre el asociacionismo como marcador identitario, 274.

    2.4.- La participacin-contacto: el acceso directo a

    los representantes polticos........................................................... 287

    Mxico: Eso no se vale Sr. Gobernador!, 288.- Espaa: el extremo de cercana, de

    meterse en tu casa, 296.

    5

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    6/378

    2.5.- La participacin-protesta: interacciones de respuesta a

    decisiones ya tomadas........................................................... 300

    Mxico: Protestan con burros en Xico, 301.- Espaa: soy ms del Olentzero, 316.

    BLOQUE IV.- PARTICIPACIN PLENA, LIMITADA Y DIVIDIDA:

    UNA PROPUESTA INTERCULTURAL PARA EL ANLISIS

    DE LA PARTICIPACIN POLTICA....................... 322

    1.- Primer ncleo de hiptesis sobre la influencia de las condiciones

    socioeconmicas de los ciudadanos en la participacin poltica............. 323

    La distancia relativa en la participacin poltica, 325.- La distancia absoluta en la

    participacin poltica, 328.

    2.- Segundo ncleo de hiptesis sobre la influencia de las condiciones

    socioeconmicas en el clientelismo poltico........................... 333

    La distancia relativa en el clientelismo poltico, 334.- La distancia absoluta en el

    clientelismo poltico, 338.

    3.- Tercer ncleo de hiptesis sobre la influencia de las condiciones

    socioeconmicas en la identidad poltica........................... 342

    4.- Una propuesta intercultural para el anlisis de la participacin

    Poltica........................... 345

    4.1.- La participacin plena..................................... 345

    4.2.- La participacin limitada........................................ 349

    4.3.- La participacin dividida........................................ 352

    6

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    7/378

    BLOQUE V. CONCLUSIONES............................................................................. 354

    BLOQUE VI. BIBLIOGRAFA............................................................................... 358

    Publicaciones peridicas consultadas, 371.- Pginas Web consultadas, 371.

    BLOQUE VII. ANEXOS.......................................................................................... 372

    7

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    8/378

    ndice de fotografas, grficos, cuadros y vietas.

    Fotografas.

    1: La ARMH en el trmino municipal de Nava del ReyPg.86

    2: Ofrenda floral en el Pinar de la Nava.. 95

    3: Cirilo Moro Garca, nieto de Cirilo Moro Colodrn, recibiendo el bastn de mando

    que le acredita como nuevo alcalde de Nava del Rey de manos de Germn Hernndez

    Hernndez, autor de la resea periodstica Moros y cristianos. 110

    4: Zonas alta e intermedia; la comunidad rural de Tonalacocon el nevado Cofre del Perote al fondo.. 143

    5: La Cinega de Chapala a la altura del municipio de Cojumatln de Regules, Mich.. 145

    6: Cruce xiqueo vigiladopor dos esquineros. Al fondo de la calle, una de tantas capillas... 147

    7: Jornada de corte en el cafetal por parte de miembros de una misma familia...... 149

    8: Guarache de un campesino xiqueo........ 159

    9: Escenario de interacciones de campaa entre maestro y licenciado dirigentes,

    y campesinos asistentes en una junta de campaa electoral del PRD xiqueo... 173

    10: Escenario de protesta: conato de toma del ayuntamiento de Xico el 27 de abril de 2006.... 179

    11: Casa de madera (no-pared): vivienda con los requisitos para recibir la ayuda

    del programa construccin de casas para pobres ejecutado por el ayuntamiento de Xico... 203

    12: Hasta tal extremo lleg a ser la polarizacin entre el PRD y el PRI la primera vez que stos

    accedieron a la alcalda que, los vecinos de esta calle de Xico, a la hora de acondicionarla, no se

    pusieron de acuerdo en el material, optando los pristas por la piedra y los perredistas

    por el cemento..... 215

    13: Todos tenemos necesidad pero no queremos a gente que slo venga cuando se regalan

    despensas; tambin hay que llevar las gorras siempre que podamos para identificarnos como

    pristas. 236

    14: Vienen los del programa de oportunidades y empiezan a preguntar desde la iglesia hacia

    arriba y se olvidan de los que vivimos en la periferia.... 238

    15: Escenario de organizacin poltica: reunin de la ARMH de Valladolid..... 279

    16: Escenario de organizacin poltica en Xico, Veracruz..... 284

    17: Interaccin-contacto. El gobernador del estado de Veracruz, Fidel Herrera recibe de manos

    de un ciudadano un obsequio.... 290

    8

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    9/378

    18: Escenario de protesta. Los lderes privilegiados perredistas rompen las lminas que reciben

    en sus casas el grueso de no-privilegiados componentes de la movilizacin... 305

    19: Diario A-Z Xalapa, 28 de abril de 2006.... 307

    Grficos.

    1: Comparativa de voto al PSOE entre Nava del Rey, la provincia de Valladolid y

    la C. A. de Castilla y Len. 87

    2: Comparativa de participacin entre Nava del Rey, la provincia de Valladolid y

    la C. A. de Castilla y Len. 913: La polarizacin del voto en Valle de Trpaga: PSE-EE-PSOE vs. PNV...... 122

    Cuadros.

    1: Retroalimentacin identitaria en contexto de elecciones municipales en Nava del Rey.. 105

    2:Indicadores identitarios de los moros y los cristianos....

    1133: Categoras tnicas histricas en el Valle de Trpaga.... 124

    4: Indicadores identitarios de los de aqu y los de fuera.......... 129

    5: Participacin identitaria en Nava del Rey y Valle de Trpaga 133

    6: Indicadores de ciudadanos privilegiados y no-privilegiados... 161

    7: Sobre lo que entendemos interculturalmente como comportamiento tico y no-tico.. 163

    8: Sobre lo que entendemos como votos ticos y no-ticos....... 169

    9: Clases de votos segn grado de privilegio de los ciudadanos y tica con la que son ejecutados.. 170

    10: Clases de participacin de campaa segn grado de privilegio de los ciudadanos y

    tica con la que son ejecutadas.......... 173

    11: Sobre lo que entendemos como candidatos ticos y no-ticos.... 176

    12: Clases de candidatos segn grado de privilegio de los ciudadanos y tica con la que actan 177

    13: Clases de contactos segn grado de privilegio de los ciudadanos y tica con la que actan.. 178

    14: Clases de protestas segn grado de privilegio de los ciudadanos y tica con la que actan... 180

    15: Escenarios de participacin: relacin entre quines participan y cmo lo hacen........ 181

    16: La distancia relativa de una interaccin de dos ciudadanos protagonizando roles....... 198

    9

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    10/378

    17: La distancia absoluta en los escenarios polticos.......... 201

    18: Operacionalizacin del ciudadano no-privilegiado.............. 206

    19: Posibles interacciones relativas en un escenario de emisin de voto en Mxico......... 218

    20: La distancia absoluta en un escenario local mexicano......... 22421: La distancia relativa a travs de un ejemplo de voto identitario en Espaa......... 229

    22: La participacin electoral en Espaa y Mxico........... 232

    23: Posibles interacciones relativas en el escenario de un mitin en Mxico............. 241

    24: Posibles interacciones relativas en el escenario de un recorrido casa por casa en Mxico.. 243

    25: La distancia relativa en los recorridos casa por casa en Espaa... 254

    26: La participacin en campaa en Espaa y Mxico............. 256

    27: Posibles interacciones relativas en el escenario de asociacionismo en Mxico.......... 268

    28: Identificaciones tipo de los ciudadanos con las formas de participacin............. 270

    29: La distancia relativa del asociacionismo en Espaa.... 283

    30: El asociacionismo en Espaa y Mxico.............. 285

    31: Posibles interacciones relativas en el escenario de participacin-contacto en Mxico....... 294

    32: La distancia relativa de la participacin-contacto en Espaa...... 297

    33: La participacin-contacto en Espaa y Mxico............... 299

    34: Posibles interacciones relativas en el escenario de protesta en Mxico.......... 312

    35: La distancia relativa de la participacin-protesta en Espaa....... 31936: La participacin-protesta en Espaa y Mxico............... 320

    Vietas.

    1: Interaccin no-tica entre privilegiados (nivel federal).... 184

    2: Qu opciones de participacin tienen los no-privilegiados? Aceptamos tarjetas de crdito 1893: Caricatura protagonizada por una dirigente prista a nivel federal y el presidente del IFE... 262

    10

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    11/378

    Agradecimientos.

    Son tres los grupos de personas a los que quiero expresar mi ms sincera gratitud

    por acompaarme a lo largo del recorrido de la presente tesis doctoral: los acadmicos,

    los informantes, y los que siempre han estado y estn junto a m.

    Sin duda, siendo yo el principal responsable de todos las virtudes y deficiencias

    que puedan encontrarse en este texto, ellas son fruto del aprovechamiento por mi parte

    de todo un contexto de oportunidades brindado en clave de oportuna reciprocidad por

    mi director ngel B. Espina Barrio. Trabajar junto a l, amen de acercarme a la

    disciplina antropolgica, me ha permitido conocer al resto de personas a las que quieroreconocer su aportacin a la tesis: Alfonso Gmez Hernndez, director de mi primera

    redaccin antropolgica; Hernn Salas Quintanal, tutor de mis investigaciones en

    Mxico; Juan Carlos Ochoa Abaurre, artfice de mis primeros pasos como docente, y

    por extensin, Francisco J. Blzquez y Txema Uribe, con los cuales pude mantener

    fluidos debates sobre poltica en tierras navarras; Juan Andrs Blanco Rodrguez,

    quien confi en mi para seguir caminando, y como no, los colegas zamoranos

    Emiliano Gonzlez Dez y Eufemio Lorenzo Sanz; Maria Joo Simes, siempredispuesta a aportar la visin sociolgica al texto; Mercedes Cano Herrera, un apoyo

    constate desde Valladolid; Miguel Carrera Troyano, el aporte latinoamericanista; y Jos

    Antonio Fernndez de Rota y Monter, inspirador de arduas reflexiones sobre

    antropologa y poltica.

    Reflexiones generadas tambin a partir de cuatro investigaciones de campo, las

    cuales tuvieron unos protagonistas clave que me abrieron el acceso al resto deinformantes. Colaborador en mi investigacin pero sobre todo amigo, Jos Manuel

    Rodrguez es la persona sin la que no se puede entender la Nava del Rey que describo

    en estas pginas. Lo mismo puedo decir de Claudio I. Hernndez Palacios para el

    municipio de Xico, aunque en este caso sera injusto no incluir a su madre Chonita y su

    esposa Adriana como autnticos soportes de mi perodo en Mxico. Aunque ms cortas,

    mis estancias en Valle de Trpaga y Jiquilpan de Jurez deben especial mencin a

    11

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    12/378

    Begoa Saiz y Mitxel Elices por el lado vizcano, y a los colegas Guillermo Paleta y

    Mario Constantino por el lado michoacano.

    Finalmente, familia y amigos han llevado el peso de mis presencias y ausencias.

    Por supuesto, agradezco su apoyo incondicional a mis padres Flix y Loli, hermana

    Mnica, abuelos Pelayo y Angelines, primos Rubn y Nuria, y tos Alfonso, Asn y

    Toms, destacando con su permiso la figura de mi ta Marian, luchadora infatigable

    quien ha sido para mi espejo en el cual siempre reflejarme. Igualmente, esperando no

    olvidar a ninguno, stos son los amigos que sustentan emocionalmente mis esfuerzos

    tanto en Espaa como en Mxico: Fernando O. Esteban, Jos M. Molas y familia-,

    Daniel Erro y familia-, Sergio Ruprez y dems amigos del DF-, Alondra Durn ehija-, Velebita Koricancic, Jess Rivera, Susana Schmidt, Gerardo A. Zrate, Herminio

    Silvn, Alberto Marn, Patxi Orruo, Jos A. Hoya, Iigo Snchez, Asier Llaguno,

    Alberto Iglesias, Sergio Fernndez, Sergio Ruiz, Fernando Dez, Zigor Larreategi, Iaki

    Gmez, Ruth Chacn, Jos L. Morn, Aser Jimnez, Cndido Senz de Santa Mara,

    Susana Garca, Jos M. Sogo, J. lvaro Garca, Carmen R. Rodrguez, Vctor M.

    Marcos, Javier Domnguez y Jess Belver; y a los compaeros del Doctorado de

    Antropologa de Iberoamrica M. Isabel Martnez, Diana C. Florido, Gaby Montes deOca, Laura Fernndez, Marcela M. Snchez, Luis E. San Juan y Pedro E. Zimmermann.

    12

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    13/378

    INTRODUCCIN.

    Muchas veces se resalta a la hora de prologar ciertas publicaciones que las

    mismas son el resultado de las experiencias vitales del autor. Creemos que la tesis

    doctoral que el lector tiene ahora en su mano es justamente la culminacin en forma de

    punto y seguido- de un largo recorrido acadmico con inicio en la Universidad del Pas

    Vasco (UPV-EHU), estacin actual la Universidad de Salamanca (USAL), y paradas en

    el Colegio Luis Espinal Camps de Bolivia, la Universidad Nacional Autnoma de

    Mxico (UNAM), la Universidad Nacional de Educacin a Distancia (UNED) y laportuguesa Universidad de la Beira Interior (UBI). No se interprete la enumeracin de

    tales lugares como un ejercicio de exposicin curricular. Pretendemos sin embargo

    sealar los hitos personales que hacen del presente texto una obra singular en una triple

    dimensin: la interdisciplinariedad Antropologa, Ciencias Polticas, Sociologa e

    Historia-, la interculturalidad dentro del rea geogrfica iberoamericana Espaa,

    Mxico, Bolivia y Portugal1- y la eleccin de la poltica como eje analtico central.

    No cabe duda que lo que hoy presentamos como antropologa de la participacin

    poltica tiene su fuente primaria en los estudios de grado en ciencias polticas cursados

    en la universidad pblica vasca. Una posterior estancia de ao y medio en la ciudad

    boliviana de El Alto de La Paz hizo que reenfocramos nuestras inquietudes

    intelectuales hacia el mbito latinoamericano a travs de dos centros de la institucin

    acadmica salmantina. El carcter multidisciplinar del Instituto Interuniversitario

    Iberoamericano supuso el paso necesario para encontrar en la antropologa el marcodisciplinar terico y metodolgico idneo a nuestros intereses personales. Este

    afortunado encuentro sigue vivo gracias al programa de doctorado de antropologa de

    Iberoamrica, a partir del cual hemos aprendido a combinar con relativa fluidez

    conceptos politolgicos, sociolgicos y etnolgicos, y el mtodo etnogrfico

    1Siguiendo a A. B. Espina, hablamos de interculturalidad para dejar claro que propugnamos un espaciocompartido de dilogo y de comunicacin que no entrae la supremaca de unas culturas sobre otras o una

    concurrencia de muchas culturas viviendo prximas pero aisladas en especies de guetos subculturales(2006: 14).

    13

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    14/378

    caracterstico de la antropologa. Sendos periodos de investigacin en la UNAM clave

    en la eleccin de Mxico como rea geogrfica objeto de estudio-, la UNED

    fundamental en nuestra perspectiva analtica- y el Centro de Estudios Sociales de la UBI

    el imprescindible aporte europesta- completan una formacin interdisciplinaria,

    intercultural iberoamericana y poltica que pasamos a presentar brevemente.

    Aspiramos en esta obra, dentro del marco terico de la antropologa poltica, a

    estudiar comparativamente las modalidades de participacin poltico-electoral de los

    ciudadanos como actores fundamentales en un sistema poltico democrtico. Para ello,

    programamos una etnografa multisituada estudiando los fenmenos socioculturales

    no en un solo lugar, sino en varios- pero localizada el conocimiento del investigadorsiempre empieza por lo local (J. A. Fernndez de Rota, 2007: 538)-. Concretamente,

    trabajaremos sobre ciudadanos espaoles y ciudadanos mexicanos pertenecientes a

    cuatro municipios dos por cada pas- seleccionados por el autor en funcin de los

    intereses de la investigacin. Tan ambicioso plan lo hemos estructurado en tres grandes

    bloques temticos, a saber:

    1.- Una breve disertacin sobre metodologa y teora antropolgicas. 2.- Una descripcin de cada uno de los cuatro trabajos de campo realizados

    con cierta autonoma unos de otros- por el autor.

    3.- Una comparacin sistemtica entre las formas de participacin poltica

    encontradas en tales municipios de Espaa y Mxico.

    El primer bloque temtico supone por un lado una explicitacin de nuestra

    asuncin de la comparacin intercultural como herramienta fundamental de trabajo; ypor otro lado, trata de presentar un breve pero riguroso repaso de la historia particular de

    lo poltico tal y como lo han entendido los principales representantes de la rama

    antropolgica, e igualmente ha de contener un sucinto balance del actual estado de la

    disciplina. No queremos dejar de apuntar que la nuestra no ser una mera exposicin de

    autores y sus ttulos ya reconocidos mayoritaria y propiamente como antroplogos

    polticos, sino que sealaremos a aquellos autores que mayormente han influido con sus

    contribuciones en la tesis.

    14

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    15/378

    Tras esta imprescindible toma de contacto con la disciplina, pasaremos a describir

    en un segundo bloque temtico los aspectos singulares de cada municipio objeto de

    estudio, por supuesto sin perder la visin global de la investigacin. Con ello

    trataremos, aparte de la pertinente localizacin geogrfica de cada comunidad, llamar la

    atencin sobre la evolucin conceptual y epistemolgica que el autor ha tenido durante

    los meses de estada de municipio a municipio, y de pas a pas. Intentaremos ir dejando

    ver cmo hemos llegado a la conveniencia de replantear desde el inicial fenmeno de la

    fidelidad del voto previsto tanto para los municipios espaoles como los mexicanos-

    hasta el ms amplio concepto de participacin poltica, el cual aparece en el transcurso

    de la propia investigacin etnogrfica como puntal necesario para la comparacin

    intercultural de las cuatro localidades.

    Los trabajos de campo se desarrollan en Espaa y despus en Mxico de la

    siguiente manera: nuestro primer municipio es Nava del Rey, perteneciente a la

    provincia de Valladolid y a la Comunidad Autnoma de Castilla y Len, en el cual

    investigamos durante y entre las campaas de las elecciones municipales de 25 de mayo

    de 2003 y europeas de 13 de junio de 2004; la estancia en Valle de Trpaga (provincia

    de Vizcaya; C. A. del Pas Vasco) gira en torno a las autonmicas vascas de 17 de abrilde 2005; y finalmente, se vive desde octubre de 2005 la ltima campaa a la presidencia

    de la repblica de Mxico de 2 de julio de 2006 a caballo entre los municipios de Xico

    en la zona cafetalera de Coatepec del estado de Veracruz, y de Jiquilpan de Jurez,

    ubicado en la regin michoacana de la Cinaga de Chapala.

    El primer foco de inters de la investigacin, estamos comentando, corresponde a

    la forma de participacin poltica ms extendida entre la poblacin de las sociedadesdemocrticas, la participacin electoral, y ms concretamente, a la bsqueda desde la

    antropologa de los factores que hacen que una gran parte de electores espaoles y

    mexicanos- voten por el mismo partido poltico eleccin tras eleccin. Buscamos por

    tanto a todos aquellos ciudadanos que la ciencia poltica considera el suelo electoral de

    los partidos o, por decirlo de otra manera, a los no-indecisos cuyo voto se considera

    15

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    16/378

    poco decisivo para el resultado final2. En esta tesitura, se elige Nava del Rey por ser

    uno de los escasos municipios del estado espaol en los que vence una misma fuerza

    poltica en todo tipo de contienda electoral desde el inicio del actual perodo

    democrtico hasta hoy en da. Se acua para la ocasin el concepto de voto identitario

    llegando, como veremos, a un acercamiento notable de la realidad poltica del municipio

    en trminos de relacin entre participacin poltico-electoral y adscripcin ideolgica.

    Posteriormente, planteamos un segundo municipio con el objetivo de seguir

    explorando las posibilidades de explicar y comprender los resultados electorales, amn

    de las otras formas de participacin poltica (asistencia a mtines, militancia en partidos,

    formar parte de una candidatura, dirigirse personalmente al alcalde, manifestarse, etc.),como representaciones identitarias en comunidades locales: seleccionamos el Valle de

    Trpaga en Euskadi pensando en aadir a nuestro anlisis nuevas categoras sobre

    comportamientos polticos asociados a la pertenencia del ciudadano a determinados

    bloques de identidad, categoras que en el caso vasco son de tipo etnonacionalitario (I.

    Moreno, 1999: 161). Hasta ese momento, siendo los elementos que comparar del mismo

    lado del Atlntico, se incide en la interpretacin de las formas de participacin poltico-

    electoral como marcadores de los valores identitarios latentes en las comunidades objetode estudio.

    Mas cuando nos trasladamos a territorio mexicano con la decidida intencin de

    continuar estableciendo parmetros comparativos de las distintas formas de

    participacin poltico-electoral y su relacin con la identidad, fuera sta de clase, tnica

    o sujeta a determinadas ideologas, se hace necesaria una revisin de los planteamientos

    apriorsticos. El municipio previamente seleccionado responde al nombre de Xico:destacamos en l ser uno de los primeros ayuntamientos de todo Mxico donde triunfa

    una opcin poltica diferente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el cual

    gobernaba hegemnicamente en gran parte del territorio mexicano desde hace varias

    2 Esta bsqueda la hicimos pensando en que una de las mayores peculiaridades del sistema polticomexicano era el voto constante al Partido Revolucionario Institucional y, por tanto, interculturalmente

    hablando, considerbamos oportuno comparar los municipios mexicanos con municipios espaoles quetuvieran tal caracterstica de continuidad de un mismo partido poltico en el poder municipal.

    16

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    17/378

    dcadas en todos los niveles institucionales3. El mero contacto con la realidad xiquea

    avisa entonces de un ms que posible replanteamiento del fenmeno objeto de estudio

    que venamos teniendo en las localidades espaolas: la participacin electoral estable

    explicada a partir de su reconocimiento como representacin identitaria no nos sirve

    para Mxico.

    La apreciacin la corroboramos con el paso de las semanas y la estancia en

    nuevos municipios como Jiquilpan de Jurez, cuna del cardenismo y, por ende, del

    Partido de la Revolucin Democrtica (PRD)4. La palpable5 y notable presencia de

    prcticas clientelares en ambos municipios mexicanos nos lleva por un lado al estudio

    sistemtico de toda la gama de formas de participacin poltica descritas por las cienciassociales y no slo de la electoral; por otro lado, a la consabida utilizacin de la

    identidad, se aade la exploracin de los niveles socioeconmicos de la poblacin,

    sustancialmente dispares a ambos lados del Atlntico.

    En definitiva, el presente trabajo plantea la necesidad de anlisis comparativos

    interculturales entre pases de desigual nivel de riqueza, anlisis que a nuestro entender

    propician nuevos planteamientos tericos que inciden sobre factores que pasan a ser depresuntamente propiciatorios cuando de sociedades occidentales se trata, a

    marcadamente influyentes cuando la comparacin se realiza entre democracias con

    sustanciales diferencias en la distribucin de la renta entre su poblacin. Esto es,

    queremos reflexionar sobre la relativa importancia de referentes polticos identitarios

    cuando de contextos poco favorecidos socioeconmicamente se trata. Tales reflexiones

    por tanto tendrn en cuenta que dentro de cada sociedad existe desigualdad econmica y

    3Una vez centrados en Mxico, teniendo presente la gran cantidad de obras referentes a las dcadas degobierno del PRI incluidas entre ellas algunas que tratan en exclusiva los municipios objeto de nuestrainvestigacin-, se decide apostar por localidades pioneras en convertir al partido hegemnico en partidode oposicin. De esta forma, una vez conocidas las circunstancias de la larga permanencia del PRI en elpoder (autoritarismo, paternalismo, clientelismo poltico), nos interesa indagar la posible presencia devalores identitarios reactivadores de comportamientos polticos diferentes a los conducentes al votocautivo para el PRI.4 Jiquilpan de Jurez es el lugar de nacimiento del general Lzaro Crdenas del Ro (1895-1970),gobernador de Michoacn y presidente de la Repblica entre 1934 y 1940; su hijo Cuauhtmoc CrdenasSolrzano uno de los fundadores del PRD tras las elecciones presidenciales de 1988- y su nieto LzaroCrdenas Batel son igualmente gobernadores de Michoacn en los perodos de 1980 a 1986 con el PRI-y de 2002 a 2008 con el PRD- respectivamente.5

    Nos referimos, siguiendo a A. B. Espina (2005: 18), a la mayor visibilidad del clientelismo poltico ysu menor ocultamiento social en los pases latinoamericanos que en otras partes del mundo.

    17

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    18/378

    dominacin poltica, las cuales no pueden entenderse en trminos slo simblicos y de

    identidad, sino que tambin han de entenderse como un proceso social y material (D.

    Comas dArgemir, 1998: 38)6.

    A pesar de que detallaremos exhaustivamente en el tercer bloque temticodel

    texto la particular transformacin de la investigacin, no podemos dejar de exponer en

    esta introduccin un avance del esquema explicativo que se propone para el conjunto

    del trabajo. A diferencia de un buen nmero de publicaciones politolgicas y

    sociolgicas, las cuales suelen considerar la participacin poltica como accin de

    individuos o colectivos ms o menos motivados a participar en funcin de una serie de

    variables de toda ndole (L. Morales, 2004: 7)7, nuestro acercamiento intercultural alconcepto nos hace apostar por su tratamiento como interaccin. El cientfico social

    tiene que esforzarse en captar la ms reducida unidad de observacin, la cual es la

    relacin entre dos personas, la vinculacin existente entre ellas, o, ms exactamente an,

    la interaccin resultante de sus relaciones (G. Rocher, 1980: 9-36). Esta asuncin nos

    la proporciona, adems de determinadas lecturas que oportunamente sealaremos, el

    propio trabajo de campo tanto en Espaa como sobre todo en Mxico, tal y como se

    describe en captulos posteriores.

    Es importante destacar que la mayora de trabajos de poltica comparada hacen

    referencia a pases europeos o norteamericanos las denominadas democracias

    avanzadas occidentales-, y que, en esta ocasin, se trata de comparar dos pases con

    diferentes niveles de distribucin de la riqueza entre el conjunto de su poblacin.

    Pensamos firmemente que este acercamiento intercultural hace valorar la consideracin

    de cada forma de participacin poltica como interaccin ms que como accin: laobservacin de las formas de participacin en Mxico nos ha permitido relativizar la

    importancia de los factores motivadores medidos en la mayora de los casos individual

    y cuantitativamente- de la participacin y pasar a considerar como fundamental los

    factores potenciadores y/o restrictivos registrados mediante tcnicas etnogrficas como

    6Compartimos con la autora de idea de que economa y poltica se encuentren en estrecha relacin ydeban analizarse de forma conjunta.7Entre otros variables, esta autora considera como los ms influyentes en la generacin de desigualdades

    en la participacin poltica el gnero, la edad, el nivel educativo, la ocupacin laboral, la etnia, el lugar deresidencia, etc.

    18

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    19/378

    la observacin participante y la entrevista abierta- del acceso e influencia a los ncleos

    de decisin poltica8. Por ahora, interesa apuntar que tendremos los escenarios de

    participacin poltica como procesos dinmicos9de interacciones entre individuos que

    en cada caso ocupan roles bien determinados10.

    En este sentido, asumiendo que la participacin poltica implica el anlisis de

    actividades que tienen como referente a cada individuo, queremos llamar la atencin

    sobre la capacidad de la propia interaccin de condicionar las acciones individuales

    hasta tal punto que puedan ser identificadas formando parte de modelos orientadores en

    la ejecucin de determinadas funciones, identificadas como maneras de obrar esperadas

    (rol social); en definitiva, pensamos en comportamientos polticos individualesderivados de la influencia recproca entre dos personas (G. Rocher, 1980: 20).

    Igualmente Erving Goffman (citado en A. Giddens, 1991: 137), hablando sobre

    interaccin social, seala los roles sociales como expectativas socialmente definidas que

    sigue un individuo de una posicin social dada.

    Por ejemplo, no ser lo mismo identificar los rasgos individuales que condicionan

    el acceso de los ciudadanos espaoles y mexicanos a las asociaciones polticas (loscuales pueden ser los recursos econmicos11, la educacin, la edad, el gnero, etc.) que

    8Nos referimos fundamentalmente como ncleos o centros de decisin poltica a los rganos y cargosrepresentativos y/o ejecutivos de un sistema poltico, en los cuales se formulan, elaboran y aplican lasopciones genuinamente cruciales que s afectarn inevitablemente la vida del conjunto de la comunidadpoltica (J. Spencer, 2004: 60).9El presente trabajo parte del reconocimiento de que las realidades locales se construyen y reconstruyenconstantemente en las interacciones cotidianas de los actores sociales (L. Rivera, 1998: 9).10Compartimos igualmente la definicin de rol socialdel manual de Rocher (1980: 37-48): los vamos aconsiderar como el conjunto global de las maneras de obrar que, en una sociedad dada, se estima deben

    caracterizar la conducta de las personas en el ejercicio de una funcin particular; seran aquellos modelosque, transcendiendo las diferencias y adaptaciones individuales, sirven para orientar la accin de lossujetos que ocupan una determinada posicin (por ejemplo, el rol de jefe tiene una especie de fondocomn modelo- por el cual un individuo acta y es aprobado por su comunidad como tal, eso s, con laspeculiaridades propias de su personalidad).11 Laura Morales (2004: 11), basndose en los estudios clsicos de la ciencia poltica, establecefirmemente con respecto a los recursos la siguiente hiptesis: las personas con mayores recursos y conuna posicin social y econmica ms aventajada son, generalmente, ms propensas a unirse aorganizaciones polticas. Nuestra hiptesis sera sustancialmente diferente: registrada la forma concretade participacin de asociacionismo poltico como interaccin entre personas que pueden ocupar diferentesroles, unos que dan acceso a los centros de toma de decisiones (p.e. dirigir el comit municipal de unpartido poltico) y otros que tienen ms limitado ese acceso (p.e. asistir a reuniones del comit encuestin), los ciudadanos con mayores recursos y con una posicin socioeconmica ms privilegiada

    tienen msposibilidadesde ocupar el primer tipo de roles y, por tanto, tienen mayor capacidad de influiren las esferas de poder.

    19

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    20/378

    analizar el asociacionismo como interaccin de individuos ocupando unos el rol de

    dirigir una asociacin papel12fundamental en los intentos de influir en los procesos de

    toma de decisiones pblicas- y otros el rol de mera membresa actos de menor

    relevancia poltica-: a lo largo de la presente obra se expone cun interesante es

    relacionar el estatus socioeconmico de los ciudadanos participantes con los roles ms

    o menos- influyentes de la interaccin poltica que protagonizan.

    En otras palabras, mientras que la mayora de investigaciones de ciencia poltica

    trata de desentraar si los pobres13 tienen menos posibilidades de pertenecer a una

    asociacin14por el hecho de ser pobres, la presente investigacin quiere destacar las

    posibilidades por parte de los ciudadanos de acceder a los roles decisivos y decisoriosteniendo en cuenta sus condiciones socioeconmicas: qu roles ocupa un pobre y,

    desde ellos, qu capacidad tiene de influir en el proceso poltico? En este sentido, no es

    lo mismo dirigir un partido poltico que simpatizar por l; sin embargo, ambos roles son

    tratados por la politologa como la misma forma de participacin del asociacionismo

    poltico. Tampoco es lo mismo coordinar un acto de protesta que hacer bulto y ambos

    son considerados como participacin en protestas. Ni por supuesto es lo mismo vender

    un voto que comprarlo, ms las ciencias sociales suelen insistir en la venta como laforma elemental de clientelismo electoral, eludiendo muchas veces hablar de los

    compradores.

    El politlogo, digamos, analiza el asociacionismo como forma concreta de accin:

    contabiliza ciudadanos asociados por su pertenencia documentada15. El antroplogo

    debe ir ms all, estudiar in situla participacin como interaccin, y relacionar los roles

    que entran en juego con las caractersticas de los ciudadanos que ejecutan tales papeles.La presente investigacin, explicitando por vez primera el que es su objetivo terico

    12 A efectos prcticos del trabajo, se utilizan como sinnimos los conceptos de rol social y papelsocial. Para una mayor profundizacin en el debate sociolgico sobre las diferencias entre rol y papel,vase: E. Goffman, La presentacin de la persona en la vida cotidiana, Buenos Aires, Amorrortueditores, 1987.13Pnganse igualmente otras categoras relacionadas con grupos de edad jvenes, mayores-, de gnero mujeres-, de educacin personas con bajo nivel de estudios-, etc.14Utilcense de la misma manera las otras formas de participacin poltica como ir a una manifestacin,votar, participar en una campaa electoral, etc.15Tal como equipara votantes al nmero de papeletas emitidas, militantes de partidos siguiendo los datos

    del pertinente registro, o manifestantes a todos aquellos presentes en un acto reivindicativo en base aconfusas cifras aportadas por diferentes cuerpos de seguridad.

    20

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    21/378

    principal, tratar de explicar y comprender la particular influencia que las caractersticas

    socioeconmicas de los ciudadanos ejercen sobre las formas de participacin poltica,

    aunque con total seguridad tambin hubiera resultado interesante vincular los roles

    polticos con categoras de gnero y tnicas. Para ello, trabajaremos la hiptesis de que,

    cuando las interacciones polticas son protagonizadas por ciudadanos con grandes

    diferencias socioeconmicas entre ellos, los comportamientos que podemos esperar son

    el de ejecucin de funciones de relevancia en el proceso de toma de decisiones polticas

    por parte del ciudadano ms privilegiado, y el de ejecucin de funciones de escasa o

    nula relevancia poltica por parte del menos privilegiado.

    En definitiva, no desdeando las razones y factores por las que participa o deja departicipar la ciudadana, se presta primordial atencin a las propias formas de

    participacin, a sus actores, y a los roles que stos asumen; antes de hablar del

    ciudadano desmotivado que no participa, se plantea, a nivel de la comunidad donde

    habita nuestro protagonista, en qu puede participar y si esas formas le hacen influir

    realmente(C. Lisn, 1977: 331; J. R. Llobera, 1999: 100; G. Sullings, 2004: 94) en los

    procesos de toma de decisiones pblicas. Pues preguntmonos, puede un mexicano

    pobre sentirse aptico comprando votos, dirigiendo un partido a nivel local ocoordinando una manifestacin? Parece claro que de venirle apata a nuestro

    protagonista menos privilegiado socioeconmicamente, tal sensacin la tendra

    interactuando como vendedor del voto, asistiendo a una reunin donde se reparten

    prebendas o montando una barricada siguiendo precisas instrucciones del lder

    privilegiado de turno.

    En este punto, una vez expuesta nuestra intencin de analizar las formas departicipacin poltica a partir de su observacin como interacciones generadoras de

    diferentes roles, se considera que, ms all de las motivaciones de la ciudadana, la

    esencia de la democracia16pasa por que cada uno de estos ciudadanosdebe poder tener

    accesoa cualquiera de los roles que surjan en un contexto local determinado.

    16

    Siguiendo a Maria Joo Simes, pensamos que uma verdadeira democracia pressupe unacompetencia poltica igualmente repartida pela populao (2005: 63).

    21

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    22/378

    Paralelamente, tendremos en cuenta, en funcin de los ordenamientos jurdicos

    espaol y mexicano, y de la irrenunciable bsqueda del bien comnentendido como

    el bien de todos por encima de los intereses particulares- que en nuestra opinin debe

    llevar aparejado cualquier modalidad de comportamiento poltico, la ticade cada rol

    puesto en escena17. Asumimos la enorme dificultad que supone trazar una frontera

    ntida sobre lo que debemos considerar como ticamente correcto o incorrecto, ms an

    cuando los principios polticos estn sujetos a los vaivenes de la historia social,

    econmica y poltica de cada pueblo en particular y, al respecto, no pueden establecerse

    tales principios como verdades nicas y valederas para todos los sistemas polticos en

    cualquier tiempo y lugar (A. Rodrguez Kauth, 2000). Sin embargo, no renunciamos a

    equiparar conducta tica con los valores de la solidaridad, la justicia, la honestidad y lacoherencia como garantes de que todo el que quiera pueda participar [nfasis del

    autor de la tesis] en contraposicin a garantizar que todos participen ms ligado a la

    vocacin por la actividad social de los ciudadanos ms activos18.

    Antes de poner nuestro empeo en tal labor, queremos dejar bien delimitado lo

    que entendemos exactamente por participacin poltica para la mayor claridad de la

    exposicin. Basndonos en el texto de Eva Anduiza y Agust Bosch (2004: 16-31),tendremos en cuenta para nuestro anlisis las siguientes cinco formas de participacin

    poltica:

    1.- PARTICIPACIN ELECTORAL: votar (en unas elecciones o en un

    referndum).

    2.- PARTICIPACIN EN CAMPAA: participar en la campaa electoral(asistencia a mtines, financiacin, trabajar para un partido o candidato, pegada de

    17A lo largo de la exposicin del trabajo, veremos que la diferenciacin entre comportamientos ticos yno-ticos no influye de manera acusada en la articulacin de nuestra hiptesis principal. Encontraremostanto a ciudadanos privilegiados como menos privilegiados obrando ora ticamente, ora no-ticamente: laclave estar en la distinta capacidad de influencia de los roles ocupados por unos y otros individuos.18En torno a este tema, resulta estimulante la lectura del artculo de Guillermo Sullings (2004). El autorapuesta por propuestas de consenso canalizadas a travs de instancias de participacin gradual, ritmosadecuados y formas organizativas eficaces, con el objetivo de sustituir una participacin en la cual unasminoras activas en busca de poder y dinero- se aprovechan de la inaccin de los dems ciudadanos, por

    otra participacin organizada y consensuada que sea polea de transmisin desde la mayora ms pasivahacia los ms activos en busca del bien comn-.

    22

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    23/378

    carteles, visitar domicilios tratando de convencer a otro para que vote de una

    determinada manera, llevar pegatinas o distintivos de contenido poltico, etc.).

    3.- PARTICIPACIN EN ORGANIZACIN POLTICA: ser miembro activo y/o

    participar en las actividades de un partido poltico o de un grupo, asociacin,

    organizacin o plataforma de carcter poltico (sindicatos, organizaciones ecologistas,

    pacifistas, proderechos humanos, grupos de accin local o comunal, grupos feministas,

    etc.): la definicin incluye presentarse como precandidato a cargos de la propia

    organizacin o como candidato para un puesto electivo institucional, excluyndose

    expresamente el desempeo de cargos pblicos19.

    4.- PARTICIPACIN-CONTACTO: contactar directamente con los

    representantes polticossobre cuestiones pblicas y los medios de comunicacin(pedir

    audiencias o entrevistas, realizar llamadas o escribir cartas a los peridicos, etc.).

    5.- PARTICIPACIN-PROTESTA: expresar el rechazo a una determinada

    situacin o circunstancia poltica (participar en manifestaciones, boicotear determinados

    productos por razones polticas, desobedecer una ley por razones polticas, ocupar unedificio, bloquear el trfico, hacer una sentada, realizar actos de fuerza, etc.).

    Se quiere trabajar desde este punto con un primer ncleo dehiptesisel

    principal- que enunciamos prrafos atrs de manera muy sinttica: existe una estrecha

    relacin entre las condiciones socioeconmicas de los ciudadanos y las formas de

    participacin poltica ejecutadas por aqullos.

    19 Con ello evitamos abordar el anlisis del fenmeno de la corrupcin poltica, el cual tenemos,siguiendo a Susana Corzo (2002), como una situacin ilegalen el que uno de sus participantes es siempreuna autoridad ejerciendo funciones polticas o administrativas. En algunas ocasiones, la iniciativaproceder del cargo pblico e ir dirigida a actores que no lo son para incrementar el poder de aqul(corrupcin ascendente), y en otras ocasiones la iniciativa ser de los ciudadanos de a pie hacia laautoridad para obtener beneficios econmicoslos primeros (corrupcin descendente).Marcamos en negrita los tres aspectos que ayudan a diferenciar la delicada frontera entre la corrupcin yel clientelismo polticos: hay relaciones clientelares tanto legales como ilegales, mientras la corrupcinsiempre sobrepasa los lmites de la legalidad; la corrupcin siempre tiene a un cargo electo comoprotagonista mientras el clientelismo no precisa necesariamente del desempeo de ese rol; por ltimo, enla corrupcin la relacin de intercambio es siempre de corte econmico, mientras que en el clientelismo

    la moneda de cambio es de orden poltico, profesional o social, y slo indirectamente puede tenerrepercusiones econmicas (J. Cazorla, 1995: 46).

    23

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    24/378

    El desarrollo de tal enunciado se realiza a travs de dos pasos. El primero,

    centrado en el anlisis de cada interaccin poltica, consiste en plantear que las

    posibilidades de ocupar la totalidad de roles de cada una de las interacciones de

    participacin poltica por parte de los ciudadanos, estarn ligadas a la distanciaentre las

    posiciones socioeconmicas de los protagonistas de la misma20; a este nivel analtico lo

    denominamos distancia relativa. De esta manera, dada una concreta interaccin

    (mnimo de dos ciudadanos), se discute si las posibilidades de ocupar-intercambiar el

    conjunto de roles generados por parte de ambos individuos pertenecientes a una

    comunidad local21, aumentan en funcin de la menor distancia cercana-

    socioeconmica entre ellos (hiptesis 1A). Igualmente, se debate si esas posibilidades

    disminuyen siendo la distancia mayor lejana socioeconmica- entre ciudadanos(hiptesis 1B). Finalmente, se podra establecer un continuumde interacciones donde

    posicionar gradualmente desde interacciones lejanas o de baja autonoma relativa (la

    frecuencia con la que se producira intercambio de roles entre los protagonistas sera

    mnima, de manera que el ciudadano menos privilegiado ocupara el contrarrolen muy

    contadas ocasiones) a interacciones cercanas o de alta autonoma relativa (los roles

    seran protagonizados indistinta y frecuentemente por ambos ciudadanos).

    Volviendo al ejemplo de la concreta forma de participacin del asociacionismo

    poltico, hasta aqu decimos que, observando la concreta interaccin entre dos

    ciudadanos pertenecientes a la misma organizacin poltica, planteamos que las

    posibilidades de que cada uno de ellos pueda llegar a ocupar el contrarrolpasan por la

    posicin socioeconmica de ambos protagonistas. Si tienen parejo nivel de recursos, las

    posibilidades aumentan y por tanto, se da un contexto relativo de autonoma

    participativa en la medida que uno y otro tienen acceso a idnticas funciones dentro dela militancia poltica. Si sus diferencias son desequilibrantes, se estima que el ciudadano

    menos favorecido socioeconmicamente no puede acceder al rol de mayor influencia

    poltica; en este caso, se mantiene que el menos privilegiado, no pudiendo llegar a

    20 Con el trmino distancia queremos significar el dinamismo de las interacciones de participacinpoltica, en el sentido de que las posiciones socioeconmicas no estn fijadas, sino que, fruto de lamovilidad social, las diferencias socioeconmicas entre individuos pueden acercarseo alejarse.21

    Entendemos cada comunidad como unidades dotadas de medios para gestionar su destino por s mismas(J. A. Gonzlez Alcantud, 2007: 199).

    24

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    25/378

    desarrollar la totalidad de roles ejecutables en su formacin, est limitado en cuanto a

    participacin poltica se refiere en esa concreta interaccin (nivel relativo).

    Sin embargo, no nos damos por satisfechos al completo con los resultados

    obtenidos en el continuumde distancia relativa ya que, a pesar de tratarse de un primer

    buen acercamiento al estudio de la correlacin entre condiciones socioeconmicas y

    participacin poltica, solamente contextualizando las concretas interacciones en su

    entorno local permite discriminar aquellas catalogadas como cercanas entre las

    protagonizadas por actores de estratos socioeconmicos privilegiados y entre aquellos

    menos privilegiados22. En este sentido, ejecutamos un segundo paso ms centrado en

    los ciudadanos23: la posicin compartida de los protagonistas de una concretainteraccin vista en relacin a la situacin socioeconmica del conjunto de la

    comunidad local (distancia absoluta) se tiene como ntimamente asociada, primero,

    al acceso a la totalidad de roles dados en un escenario poltico municipal, y segundo, a

    la capacidad de influencia en los ncleos de decisin desde tales posiciones. Nos toca en

    este caso generar categoras de ciudadanos y de roles que sean tiles a la investigacin.

    En nuestro caso, apostamos por una discriminacin entre ciudadanos privilegiados y

    ciudadanos menos privilegiados (grado)24

    ; y entre unos roles con voz y otros sinella25.

    Lo podemos enunciar de la siguiente manera: dados unos protagonistas

    privilegiados con respecto al conjunto de sus convecinos o de alta autonoma absoluta,

    aumentaran las posibilidades primero, de que los actores pudieran ocupar la mayor

    parte de roles ejecutables de cada forma de participacin poltica en su comunidad local;

    22Una reflexin muy parecida tiene la ciencia poltica (L. Morales, 2004: 15) pero slo referida a losindividuos de mayores recursos: cuando el ciudadano est circundado por otras personas de elevadoestatus social, la participacin se convierte en una obligacin social a travs de la transmisin informal denormas grupales.23Se excluye expresamente del anlisis el comportamiento del resto de actores polticos (partidos, elites,cargos pblicos e instituciones), salvo en lo que afecta al comportamiento de los ciudadanos.24 Tomamos la definicin elemental de estatus socioeconmico, la cual resume la posicin social delindividuo basndose en el nivel de estudios, el ingreso y la ocupacin (E. Anduiza y A. Bosch, 2004:270).25Siguiendo los criterios de Len Doyal e Ian Gough (1994: 98), vincularemos las mejoras de autonomaal desarrollo de ms alternativas de eleccin. Esto es, asumiendo que todos los ciudadanos tieneninnumerables alternativas de eleccin, a menudo generadas por la gran creatividad de los protagonistas,

    no por ello debemos dejar de sealar la existencia de elecciones mundanas en la interpretacin de lasreglas que conforman los papeles sociales en los que [los oprimidos] no tienen voz.

    25

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    26/378

    y segundo, de que los roles que llegaran a ocupar en el juego poltico tuvieran mayor

    influencia en los procesos de toma de decisin (hiptesis 2A). Por el contrario, la

    interaccin entre dos actores menos privilegiados o de baja autonoma absoluta sera

    indicador de una escena poltica limitada, mundana, sin voz: tales ciudadanos ni

    podran ocupar todos los roles ejecutables ni los que ejecutaran influiran o lo haran

    muy parcialmente- en el proceso poltico (hiptesis 2B).

    De nuevo, retomando el ejemplo del asociacionismo poltico, recordamos como la

    distancia relativa establece la correlacin entre posicin socioeconmica de los actores

    y sus posibilidades de ocupar dos roles ejecutables en un partido. Ahora bien, ubicada

    tal correlacin en el contexto local de cada municipio, se estima que entre privilegiadosse tiene posibilidad absoluta de ocupar ambos roles, incluidos todos aquellos que

    permiten influir con mayor intensidad en los ncleos decisorios (dirigencia,

    organizacin, coordinacin, financiacin, presentarse a candidato); y que entre menos

    privilegiados, las oportunidades se esfuman a la par de la mayor escasez de recursos,

    dndose por supuesto que la influencia poltica es mnima (ejecucin de funciones

    secundarias como preparar materialmente una reunin, elaborar unas pancartas, etc.): no

    se espera por tanto encontrar lderes entre la poblacin menos favorecidasocioeconmicamente.

    Por tanto, a travs de la descripcin de las formas de participacin poltica, vamos

    a situar los diferentes casos etnogrficos hallados en los cuatro municipios objeto de

    estudio en un esquema analtico que genere categoras interculturales de participacin

    poltica segn el grado de posibilidades de ocupacin de roles (con voz y sin voz) de

    cada interaccin por parte de los ciudadanos protagonistas de ellas (privilegiados ymenos privilegiados), a saber:

    1.- interacciones plenas,

    2.- interacciones limitadas y

    3.- interacciones divididas.

    26

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    27/378

    1.- Las primeras son protagonizadas por ciudadanos relativamente cercanos con

    altos niveles de autonoma absoluta y, en consecuencia, opciones a la plena ocupacin

    de roles dados en cualquiera de las formas de participacin presentes en un contexto

    local determinado, tanto si son roles cercanos a los procesos de decisin como si son

    roles que no llevan a ninguna parte.

    2.- Denominamos interacciones limitadas a todas aquellas protagonizadas por

    ciudadanos relativamente cercanos que, por su situacin menos privilegiada, se ven

    circunscritos a una serie de roles bien determinados que, permitiendo un sinfn de

    combinaciones en cuanto a su ejecucin, no dan acceso a los procesos de toma dedecisiones polticas.

    3.- Por ltimo, las interacciones divididas son aquellas en las que se produce una

    divisin de trabajo entre los ciudadanos privilegiados que ejecutan los roles con voz

    y los actores menos privilegiados que asumen su papel de comparsa y/o

    acompaamiento.

    Queriendo explicar y comprender nuestras hiptesis en trminos de grado,

    decimos que un ciudadano va acercndose a una participacin poltica plena, a tener

    posibilidades de acceso reales no bastara con estar motivado ni ser creativo- a la

    totalidad de roles que puedan presentarse en un contexto local determinado, a medida

    que se reduce la distancia socioeconmica entre el conjunto de ciudadanos de la

    poblacin: un marco geogrfico local con una mayora de sus habitantes situados a poca

    distancia socioeconmica unos de otros producira una fuerte tendencia a que los rolesconformadores de la participacin poltica pudieran ser ocupados por cualquiera de las

    personas pertenecientes a esa mayora. Y decimos pudieran en el sentido literal de

    posibilidad: una cosa es poder acceder y otra cosa es, teniendo esa posibilidad, estar

    motivado o no para protagonizar los diferentes roles de participacin. Por ejemplo,

    como se expone ms adelante, registramos ciudadanos mexicanos que no pueden darse

    el lujo de abstenerse o, todo lo contrario, que lo hacen coaccionados o pagados.

    27

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    28/378

    Recapitulando lo dicho hasta aqu, dada una concreta interaccin, vemos la

    distancia socioeconmica entre sus protagonistas, para posteriormente ubicarla en

    relacin al resto de interacciones de cada comunidad con el objetivo de poder

    discriminar entre interacciones protagonizadas por ciudadanos privilegiados y por

    ciudadanos menos privilegiados, independientemente de la distancia26: el cotejo de

    estos tipos de interacciones con las cinco diferentes modalidades de participacin

    poltica sobre las que se acota el concepto, abonara un terreno prolijo para el anlisis de

    la influencia de la situacin socioeconmica de la poblacin sobre sus propias

    posibilidades de participar influyendo en el proceso poltico.

    A partir de este planteamiento inicial, el propio trabajo de campo, sobre todo enMxico nos conduce a la formulacin de un segundo ncleo dehiptesisrelacionadas

    con el clientelismo poltico. En este sentido, en cuanto al anlisis de las relaciones

    clientelares, vamos a trabajar con la idea de una estrecha relacin entre cercana

    absoluta socioeconmica de la poblacin y una reduccin de las relaciones clientelares.

    De esta forma, a mayor nmero de ciudadanos con posibilidades de acceder a la

    totalidad de roles, consideramos que se reducen considerablemente los comportamientos

    clientelares, y en todo caso, stos son voluntarios: la cercana socioeconmica entreindividuos propicia contextos de autonoma decisoria27.

    Igualmente podemos dar los dos pasos en la construccin de la hiptesis. En

    primer lugar, decididos unos protagonistas pertenecientes a una comunidad local a

    actuar clientelarmente, las posibilidades de ocupar el conjunto de roles depender de la

    distancia socioeconmica entre aquellos. A menor distancia entre ellos, mayor

    frecuencia en el intercambio de roles (hiptesis 3A); a mayor distancia, menosposibilidades de que el menos privilegiado pueda ocupar el otro rol de la interaccin

    (hiptesis 3B).

    26 Tendremos interacciones cercanas de privilegiados, cercanas de menos privilegiados, y lacombinacin entre privilegiados y menos privilegiados (interacciones lejanas).27

    Por ejemplo, un ciudadano comprador de votos no intenta la compraventa con ciudadanos de su mismoestatus socioeconmico.

    28

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    29/378

    En segundo lugar, la capacidad de influir en los procesos de toma de decisiones

    estar en funcin del nivel socioeconmico absoluto de los protagonistas, de manera

    que a mayor nivel de privilegio conjunto con respecto a su comunidad de los dos actores

    implicados en una concreta interaccin clientelar, mayor es la capacidad de la propia

    interaccin de llegar a influir en el proceso poltico (hiptesis 4A); e igualmente, a

    menor privilegio de los dos protagonistas, menor es su capacidad de influir en las

    decisiones pblicas (hiptesis 4B).

    Finalmente, recuperando el concepto de participacin poltica identitaria

    recogido en las estancias en Nava del Rey y Valle de Trpaga, y en alguno de nuestros

    escenarios protagonizados por ciudadanos privilegiados mexicanos, queremosreflexionar a modo de tercer ncleo de hiptesis sobre la idea de una participacin

    poltica ideolgica o tnica presente mayoritariamente en escenarios conformados por

    ciudadanos relativa y absolutamente cercanos en cuanto a condiciones

    socioeconmicas se refiere.

    En este sentido, queremos barajar la idea de que a mayor nmero de interacciones

    plenas en una comunidad local, mayores posibilidades de que muchas de ellas sirvancomo referentes identitarios a ojos de sus propios protagonistas (hiptesis 5). Las

    interacciones divididas que se dieran en los mismos escenarios, estimamos reforzaran

    la tendencia a una participacin poltica identitaria.

    Por el otro lado, a mayor nmero de interacciones limitadas presentes en los

    escenarios de poltica de una comunidad local, menores posibilidades de que stas se

    utilicen como marcadores identitarios en la poltica comunitaria (hiptesis 6).Asimismo, consideramos que las interacciones divididas que acompaaran a las

    limitadas, tenderan hacia el mantenimiento y fortalecimiento de las relaciones patrn-

    cliente.

    Sin duda, el desarrollo de todas estas reflexiones se encuentran con la enorme

    dificultad que supone comparar primero, dos pases considerados por las ciencias

    29

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    30/378

    sociales como dispares en cuanto a su condicin democrtica28, y segundo, unos

    municipios que, dentro de cada territorio, tienen una marcada idiosincrasia que les hace

    opuestos en muchos de sus elementos definitorios. A nadie escapa, y slo hablamos del

    sistema de partidos, la conformacin de un ayuntamiento castellano-leons entre alguno

    de los dos partidos mayoritarios espaoles Partido Popular y Partido Socialista Obrero

    Espaol-; ms no ocurre lo mismo en Euskadi, donde se conocen corporaciones

    municipales presididas por al menos cinco partidos polticos.

    Dicho lo cual, resulta oportuno enfrentarse a tales retos con el convencimiento de

    que la necesaria aportacin de la antropologa en el anlisis, ya no slo en la previsin y

    posterior revisin de los resultados electorales, sino en la explicacin e interpretacin delos comportamientos polticos. Indudablemente, la literatura de la disciplina, la

    perspectiva intercultural y el trabajo etnogrfico deben ser el marco propiciatorio a la

    apertura de los cotos reservados a politlogos y socilogos (estudios macro;

    comparaciones entre democracias occidentales; primaca de los datos estadsticos) y al

    diseo de propuestas igualmente vlidas para el anlisis poltico que, no perdiendo la

    perspectiva global, estn centradas en el nivel local; no eludiendo los mnimos

    conceptuales de lo que es una democracia, comparen sociedades avanzadas y las que nolo son tanto; y no desdeando las tcnicas cuantitativas, tenga la profundidad suficiente

    que slo la observacin participante proporciona al investigador de los fenmenos

    socioculturales.

    28Se tiene a la sociedad espaola como avanzada y occidental (ms all de su ubicacin geogrfica en

    Occidente), todo lo contrario que un Mxico en pleno proceso de transicin (P. Castro, 2005: 9; A. B.Espina, 2005: 18).

    30

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    31/378

    I. CONOCIMIENTO LOCAL Y

    ANTROPOLOGA POLTICA.

    1.- El conocimiento local.

    Qu es lo poltico? Antroplogos, politlogos y socilogos comparten el inters

    por los sistemas polticos y su organizacin, mas si hay que resaltar algn aspecto que

    diferencia a los antroplogos del resto de cientficos sociales es la impronta global y

    comparativa con la que aquellos enmarcan sus trabajos. La necesidad de plantear de un

    modo pluridimensional las interacciones de todos los que, directa o indirectamente,

    participan en el proceso poltico, no implica en absoluto renunciar al enfoque

    microsociolgico localizado pero no cerrado-. Tenemos que convenir junto con

    Enrique Luque (1996: 12) que la escala local nos permite traducir las cosas de la

    poltica de lo remoto, ajeno y conflictivo () al lenguaje de lo inmediato y conocido.

    Por tanto, aunque la antropologa poltica circunscriba sus anlisis a contextos locales,

    no por ello se ha de olvidar teorizar sobre los fenmenos espacial e histricamente ms

    amplios, tal y como tratamos de hacer en esta investigacin con las formas de

    participacin poltica. En esta misma lnea, Abner Cohen (2004: 148), siguiendo a

    Raymond Firth, subraya que a pesar de que las tcnicas antropolgicas son

    microsociolgicas, las formulaciones tericas pueden ser macrosociolgicas y pueden,

    de esta manera, adaptarse al estudio de la poltica a nivel de Estado.

    Es por esta necesidad de dar cuenta de las interacciones de los actores sociales,

    por la que investigamos empleando el municipio como marco contextual de referencia.

    En este sentido, al contrario que la mayora de estudios electorales macrosociolgicos

    tendentes a explicar el comportamiento poltico-electoral a partir de variables

    coyunturales sobre percepcin de la economa, o de variables socio-econmicas

    referidas a la estructura social de la totalidad del estado, nuestra apuesta es por el

    31

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    32/378

    enfoque microanaltico, que aunque limitado, pensamos es imprescindible a la hora de

    analizar las formas de interaccin poltica concretas. Como bien dice John Gledhill

    (2000: 24), el trabajo de campo permite a los antroplogos examinar procesos que

    frecuentemente son ignorados por los politlogos y los socilogos, que trabajan con

    tcnicas de sondeo y fuentes secundarias.

    Igualmente, nuestro acercamiento a la realidad poltica mexicana y su puesta en

    comparacin con la democracia espaola, supone un intento por superar la visin

    moralmente etnocntrica de la poltica comparada, tan profundamente arraigada en las

    tradiciones occidentales (R. Cohen, 2004: 490). Creemos firmemente que los

    antroplogos deben dar ese paso ms en el anlisis de los sistemas polticos y tratar decomparar, no slo las democracias industriales avanzadas occidentales (M. A.

    Canzos, 2004: 245), sino tambin aquellas que, teniendo mecanismos institucionales

    parejos a las primeras, no son consideradas por los politlogos dentro del grupo de

    pases comparables. Al fin y al cabo, como expone Ronald Cohen, se trata de

    comprender y explicar la variedad emprica de las instituciones y los comportamientos

    polticos (2004: 493), para posteriormente, dirigir nuestra atencin a cuestiones acerca

    de quines toman decisiones y resuelven los conflictos (C. P. Kottak, 2006: 144). Lapresente obra sigue tal camino, primero, intentando, dentro de los comportamientos que

    acotamos como participacin poltica, comprender y explicar las peculiaridades de cada

    uno de los cuatro municipios objeto de estudio, y segundo, detenindonos en las

    posibilidades de los ciudadanos de influir tomando decisiones- en los procesos

    polticos.

    Por todo ello, el trabajo que presentamos es una apuesta decidida por lacomparacin como herramienta metodolgica vlida a la hora de explicar e interpretar

    fenmenos socioculturales. Modestamente, se trata de, a partir de hechos particulares,

    llegar a la explicitacin de formulaciones tericas aplicables a niveles supralocales. Este

    intento lleva parejo mltiples problemas como el de la complejidad de combinar los

    fenmenos culturales particular y general junto con el pasado y el presente etnogrficos.

    La clave est en establecer unidades de anlisis tiles para el procedimiento

    comparativo, en este caso, unidades de anlisis de lo poltico. Esta es, sin duda, una de

    32

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    33/378

    las cuestiones cruciales: la categorizacin de los fenmenos a comparar para poder

    establecer tipos que permitan establecer una clasificacin.

    En nuestro caso, las unidades de anlisis van a ser las formas concretas de

    participacin poltica, definidas como interacciones entre individuos ocupantes de

    determinados roles. El objetivo ltimo es establecer una clasificacin intercultural de

    contextos de participacin la cual, en funcin de las condiciones socioeconmicas de los

    ciudadanos, tendr en cuenta, primero, las posibilidades de stos de ocupar los citados

    roles, y segundo, la capacidad de influir en el proceso de toma de decisiones a partir de

    tales posiciones dentro del juego poltico.

    Se busca por tanto el equilibrio entre la induccin propia del trabajo de campo y la

    teorizacin o generalizacin a la que consideremos firmemente debe enfocarse la

    disciplina antropolgica; a fin de cuentas, la comparacin y el trabajo de campo son

    mutuamente dependientes (N. Fernndez Moreno, 2004: 40).

    El conocimiento local: la etnografa multisituada pero localizada y lageneralizacin a travs de la comparacin de casos particulares.

    La metodologa en la que se basa el presente estudio es la etnografa. Tal

    estrategia de investigacin se fundamenta en largas estancias de convivencia con la

    gente y se sirve de variadas tcnicas de trabajo de campo de las cuales la observacin

    participante y la entrevista dirigida29 y reflexiva30 sern las ms utilizadas en la

    investigacin.

    29Siguiendo a C. P. Kottak (2006: 48), hablamos de entrevista dirigida cuando el investigador habla caraa cara con los informantes utilizando ms un guin que un cuestionario; de hecho, queremos hacer nfasisen la entrevista dirigida como tcnica directa y personal en su contraposicin al cuestionario, el cual esrellenado con frecuencia por el propio encuestado.30 Profundizando en las caractersticas asignadas a la entrevista dirigida, compartimos la diferenciafundamental que Martyn Hammersley y Paul Atkinson (1994: 128-9) ven entre la entrevista etnogrfica y

    el cuestionario estandarizado: aunque el etngrafo suele entrar a la entrevista con una lista de temas de losque quiere hablar con el informante, no decide de ante mano las cuestiones que aparecern en ella.

    33

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    34/378

    Por el lado de la convivencia, nos adentramos de lleno en la dimensin

    antropolgica del conocimiento local cuyo desarrollo terico corresponde

    principalmente a Clifford Geertz-, de la cual queremos resaltar tres aspectos

    fundamentales ntimamente asociados que orientan nuestra etnografa:

    El trabajo de campo multisituado: los problemas y casos especficos de

    participacin poltica van a ser perseguidos en diferentes lugares. A

    diferencia de la antropologa anterior a 1970 que asociaba cada cultura con un

    determinado territorio tratado adems como homogneo, la orientacin

    geertziana hace hincapi en la configuracin del sitio no como algo dado,

    sino construido a travs de itinerarios que incluyen diferentes sitios y

    diferentes momentos. Concretamente, se estudian las interacciones de

    participacin poltica de ciudadanos de Nava del Rey en los momentos que

    eligen a su alcalde en mayo de 2003 y representantes al Parlamento Europeo

    en junio de 2004; ciudadanos de Valle de Trpaga en el momento que votan

    unLehendakarien abril de 2005; y ciudadanos xiqueos y jiquilpenses en el

    momento que renuevan al Presidente de la Repblica en julio de 2006.

    Todo conocimiento siempre es local: un conocimiento local no contrasta con

    el universal sino que lo contrastamos con otro conocimiento local (J. A.

    Fernndez de Rota, 2006: 20). En una investigacin como la que presentamos

    que trata de reflexionar tericamente sobre participacin poltica, clientelismo

    e identidad, vamos a apoyarnos en los casos particulares a la hora de discutir y

    desarrollar las hiptesis sobre los mencionados conceptos.

    La construccin del campo a travs de la comparacin: la reformulacin de

    la participacin poltica a partir del descubrimiento de similitudes. Aunque ya

    de por s, las estancias prolongadas llevan implcitamente a una comparacin

    continua de la cultura estudiada con la cultura original del antroplogo,

    nuestra investigacin aboga por la generalizacin desde dentro del ejemplo

    (Ibd.: 21), o en palabras del mismo Clifford Geertz, por anlisis ms

    34

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    35/378

    abstractos partiendo de los conocimientos extraordinariamente abundantes que

    (el antroplogo) tiene de cuestiones extremadamente pequeas (2003: 33).

    Por el lado de las tcnicas del trabajo de campo, no queremos dejar de orientar al

    lector en las peculiaridades propias que la aplicacin de las mismas tiene en los

    territorios espaol y mexicano. Hemos de reconocer nuestra evolucin hacia una

    prctica investigadora ms cualitativa desde los primeros estudios en Nava del Rey y

    Valle de Trpaga hasta los ltimos en los municipios de Xico y Jiquilpan de Jurez,

    progresin facilitada por la asuncin plena del rol de antroplogo por parte del autor en

    Mxico. Tal asuncin coloca al investigador en una situacin excepcional de

    aprendizaje gracias al continuo dilogo intensamente contextualizado (J. A.Fernndez de Rota, 2006: 26). Esto significa de hecho que pasamos de breves estadas

    con una mayora de entrevistas programadas en las que se nos da permiso explcito

    para registrar la conversacin por medio de la grabadora- a los informantes espaoles, a

    la insercin del antroplogo durante un ao en la vida local de los xiqueos y en

    menor medida de los jiquilpenses-, posicin desde la cual la entrevista es ms eficaz,

    penetra mejor en aquello que debe alcanzar, cuando, siendo fiel a la vida real por la cual

    se pregunta, se amolda a ella como si fuese un hecho ms de interaccin ordinaria,convirtiendo la entrevista en una de sus situaciones normales (R. Sanmartn, 2003: 80).

    En todo caso, exponemos en el segundo bloque temtico de la tesis las concretas

    herramientas metodolgicas que se han utilizado en cada uno de los cuatro trabajos de

    campo.

    35

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    36/378

    2.- Breve marco terico de la antropologa poltica.

    Tratndose la antropologa poltica de una de las ramas de la disciplina ms

    difciles de agrupar en un conjunto de autores y de obras, y siendo pequeo el espacio

    del que disponemos para desarrollar un esbozo de los principales hitos que forman parte

    de ella, nos hemos decantado por el excelente trabajo de concisin de Ted C. Lewellen

    (1985) a la hora de marcar un eje-gua de la gran cantidad de materiales bibliogrficos

    manejados.

    Los evolucionistas del s. XIX.

    Si bien la antropologa poltica no se estima surge hasta la publicacin delAfrican

    Political Systems compilado por Meyer Fortes y Evans-Pritchard y prologado por

    Radcliffe-Brown (1940), se puede explorar entre los primeros evolucionistas una

    bsqueda de lo poltico. No hay una razn ntida para explicar cmo antes de esa fecha

    han existido poderosas aportaciones antropolgicas por ejemplo al parentesco y no al

    campo de la poltica; sin embargo, todas las respuestas pasan por la negacin de la

    mayor parte de representantes de la disciplina a dividir en partes a las culturas31.

    Uno de los primeros precursores fue elAncient Lawde Henry Maine (1861), texto

    en el cual el autor postula que la organizacin poltica de las sociedades primitivas se

    basa en las lneas de parentesco. Como buen evolucionista, Maine aboga por la

    tendencia de estas sociedades hacia la secularizacin y hacia una organizacin

    sociopoltica fundamentada en el territorio. La transicin de una sociedad antigua a

    una sociedad moderna Maine la expresa a partir de ciertas dicotomas: en primer lugar,

    distingue entre dos grandes tipos de sociedades, las estticas o arcaicas, y las

    progresivas o modernas; la unidad bsica del primer grupo es la familia, mientras lo es

    31E. Luque (1996: 23) matiza que precisamente lo que s han hecho bastantes antroplogos antes, en y

    despus de los aos cuarenta es negarse (implcita o explcitamente) a seccionar las realidadessocioculturales de modo arbitrario [nfasis del autor de la tesis].

    36

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    37/378

    el individuo en las sociedades modernas; la sociedad basada en la familia es una

    sociedad de estatus fijos (conjunto de preceptos reguladores de las relaciones sociales,

    entre los que destacan las obligaciones derivadas de la pertenencia de los individuos a

    grupos de parentesco corporativos), mientras que la sociedad individualizada est

    basada en contratos libres basados en el inters mutuo (no existen ligmenes que

    regulen las relaciones)32; aqulla posee la propiedad en comn, mientras que la sociedad

    de organizacin individual se caracteriza por el incremento de la propiedad privada. En

    definitiva, hay progreso cuando las sociedades se individualizan, cuando se mueven del

    estatus al contrato, y cuando se privatiza la propiedad.

    Estas importantes ideas de Maine son ampliadas por Lewis H. Morgan en su obraAncient Society(1877). En la particular secuencia evolutiva desarrollada por Morgan, el

    autor defiende que la organizacin social comienza con la horda promiscua para

    continuar con una organizacin fundamentada en el parentesco y la posterior

    especializacin poltica que llega al albor de la plena domesticacin de plantas y

    animales. El excedente generado por tal domesticacin posibilita la urbanizacin y la

    consolidacin de la propiedad privada, y en consecuencia, el gobierno ha de basarse en

    el territorio y en la propiedad. Aqu estamos ante la aparicin del Estado33

    de tal formaque Morgan, al equiparar lo poltico a lo estatal, est negando el carcter poltico a las

    sociedades no-occidentales (E. Luque, 1996: 23-24; G. Balandier, 1976: 15).

    Concretamente, este autor distingue entre formas de gobierno caracterizadas por las

    relaciones de consanguinidad (propias del mundo no occidental y de las etapas

    anteriores del mundo occidental societas-) y formas de gobierno basadas en

    relaciones polticas surgimiento de la propiedad privada y presencia de un marco

    territorial- (propias de su civilizacin civitas-). nicamente cuando la unidad deorganizacin pblica es un grupo territorial pueblo, comuna o barrio- concede Morgan

    32Maine, como jurista con vocacin histrica que fue, fundament sus argumentaciones del trnsito delestatus al contrato estudiando la antigua Roma: en principio estaban las unidades familiares presididas porpatriarcas, quienes se reunan conjuntamente para tomar las decisiones sobre los asuntos de toda lacomunidad; progresivamente, los linajes fueron perdiendo su autonoma jurdica, y en consecuencia, losasuntos pblicos de los ciudadanos empezaron a ser regulados por nuevas instituciones. La mayora deautores posteriores sealan las limitaciones de unos planteamientos que, restringidos a Europa y la India,Maine los expuso como vlidos para toda la humanidad (M. Harris, 2003: 165; M. G. Smith, 1979: 10; M.Gluckman, 1978: 35; G. Balandier, 1976: 14).33 Morgan redefine las sociedades que Maine denomina sin Estado: a las sociedades basadas en el

    parentesco y el status del autor deAncient Law, Morgan las considera como organizaciones sociales pre-polticas.

    37

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    38/378

    la presencia de una organizacin poltica (M. G. Smith, 1979: 10). Finalmente, la

    mayor relevancia de los anlisis que Morgan sobre el parentesco, hace que su esquema

    de evolucin poltico quede en el olvido, excepcin hecha de la incorporacin a la

    doctrina marxista de la mano de F. Engels.

    Aunque estos autores son duramente criticados por las generaciones posteriores34,

    no es desdeable la importancia de haber distinguido entre grupos basados en el

    parentesco y grupos basados en el territorio35. Igualmente, se deben destacar como

    aportaciones duraderas del evolucionismo el descubrimiento de los linajes corporativos

    en los que la toma de decisiones corresponde slo a un grupo reducido, la consideracin

    de las sociedades primitivas como igualitarias, y la percepcin de ausencia de propiedadprivada en aquellas.

    Los boasianos: reaccin al evolucionismo.

    La antropologa cultural norteamericana capitaneada por Franz Boas se caracteriza

    por su condena del mtodo comparativo, priorizando los estudios descriptivos deculturas concretas sobre las grandes generalizaciones de los evolucionistas. Sin

    embargo, dentro de este grupo, tenemos que destacar la figura de Robert Lowie y sus

    Primitive Society (1920) y The Origin of the State (1927)36. Valindose del marco

    evolucionista, Lowie rechaza las afirmaciones de Maine y Morgan de que el orden

    poltico de las sociedades primitivas solamente se fundamenta en las relaciones de

    parentesco, descubriendo la importancia poltica de las asociaciones entre no parientes

    34E. E. Evans-Pritchard (2006: 9) habla de la irritacin que le produce leer las construcciones tericasde los evolucionistas configuradas a partir de hipotticas escalas de progreso, en uno de cuyos extremosse encontraban formas de instituciones y creencias como las que haba en Europa y Amrica en el sigloXIX, mientras que en el otro extremo se hallaban sus anttesis.35M. Harris (2003: 163) destaca como contribuciones valiosas de Morgan los siguientes aspectos: laomnipresencia de las relaciones de parentesco en las sociedades preestatales y la influencia de factorescomo la decadencia de los grupos igualitarios y el correlativo desarrollo de grupos estratificados y delpapel de la propiedad en la emergencia de la organizacin estatal.36

    A. B. Espina (1997: 98) seala las obras del autor como un avance en la teora antropolgica al unirevolucionismo y particularismo.

    38

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    39/378

    tales como los clubes masculinos, las clases de edad o las organizaciones secretas 37;

    reconociendo que hay una correlacin positiva entre territorialidad y organizaciones no-

    basadas en el parentesco, lo que no hay es una relacin directa tal y como se demuestra

    con las asociaciones militares de los indios crow, o el pueblo de los mongoles,

    organizado en pequeas agrupaciones de parientes, las cuales son fundadoras de estados

    e imperios. Este uso de las instituciones polticas como problema de investigacin hace

    que algunos autores consideren a Lowie el fundador de la antropologa poltica

    contempornea (R. Cohen, 1995: 496; G. Balandier, 1976: 16). Ms an, el

    cuestionamiento de la dicotoma parentesco-primitivo/poltica-civilizado introduce en el

    anlisis poltico a la humanidad entera; eso s, a costa de aadir una nueva dicotoma

    entre la esfera pblica-asociaciones/esfera privada-parentesco (E. Luque, 1996: 25-26).Sin embargo, tal deferencia no impide que antroplogos contemporneos y posteriores

    consideren el modismo evolucionista de Lowie como anacrnico (T. C. Lewellen,

    1985: 6).

    Los funcionalistas britnicos.

    Se incluye en este apartado a las dos corrientes que se imponen en la dcada de

    los aos 30 en el Reino Unido, el funcionalismo psicobiolgico cuyo mximo

    representante es Bronislaw Malinowski, y el funcionalismo estructural de A. R.

    Radcliffe-Brown como punta de lanza. Cada una de las dos ramas aporta los elementos

    para que en 1940 viese la luz la obra ya citada- que la mayora de los autores considera

    como el punto de partida de la antropologa poltica moderna: el African Political

    Systems. Por un lado, Malinowski contribuye a que toda una generacin deantroplogos britnicos adopte el mtodo de la observacin participante y, ms

    concretamente, lleve a cabo investigaciones de campo en el frica colonial: se trata

    ahora de vivir con el pueblo que se estudia, realizar la investigacin en la lengua nativa,

    y participar de la manera ms plena posible en la vida cotidiana de la poblacin.

    37 M. Harris (2003: 303-4) muestra cmo finalmente Lowie, en artculo publicado en 1933 en la

    Encyclopedia of the social sciencesacaba por aceptar las tesis de Maine y Morgan de que en todo elmundo los sistemas de solidaridad del parentesco han sido anteriores a la aparicin del Estado.

    39

  • 7/25/2019 1.Tesis Doctoral.pdf

    40/378

    Por otra parte, Fortes y Evans-Pritchard beben del estructural-funcionalismo en el

    sentido de considerar a las sociedades africanas bajo la Pax Britnicacomo sistemas en

    equilibrio en los que cada parte incluida la poltica-, funciona para mantener el orden.

    Para Radcliffe-Brown, quien haba estudiado a los habitantes de las islas Andamn en

    1906, el estudio de la poltica es el estudio de las acciones sociales y roles que estn

    interrelacionadas con las funciones de mantener el orden, el monopolio del uso legtimo

    de la violencia y la ocupacin de, y los derechos sobre, un territorio definido (E. Luque,

    1996: 28; R. Cohen, 1995: 497). En definitiva, estas funciones las cuales son las

    propias de un Estado- posibilitan el inicio de una nueva etapa en el tratamiento

    antropolgico de lo poltico.

    Los antroplogos funcionalistas se interesan por sociedades totales, de manera

    que la poltica es para ellos una variedad ms de entre las categoras funcionales de

    anlisis sobre las cuales pueden basarse sus explicaciones globales de tales sociedades.

    La poltica, al igual que la religin, el parentesco o la socializacin, es una variable

    independiente, la cual ayuda a explicar la comunidad pero que en s misma no tiene

    inters alguno ms an, de haber existido ese inters, hubiera sido contrario a la visin

    holsta-.

    El African Political Systems plantea los fundamentos tericos y metodolgicos

    para toda una generacin de estudiosos de lo poltico en las sociedades primitivas.

    Adems, desarrolla una tipologa de sistemas polticos africanos que, aunque se la acusa

    de demasiado simple, supone una contribucin duradera y representa el comienzo del

    estudio comparado de la poltica y el gobierno (M. G. Smith, 1979: 14): son dos los

    tipos de sistemas, los que ostentan una autoridad centralizada los estados primitivos- ylos que carecen de esa au