Tecnología

Cloud Computing: la nueva revolución informática RODRIGO VERGARA BARBAGELATA Julio 2010 Ingeniero Comercial, PUCV Ingeniero Civil Electrónico, UTFSM Académico, Escuela de Ing. Comercial PUCV

Una de las estrategias de negocios más

importante que se está desarrollando hoy

en el mundo tecnológico, por parte de

todas las grandes compañías globales, es

conocida como “Cloud Computing” o

“Computación en la nube”, como un

adelanto de la Web 3.0 que se nos viene.

“Computación en la nube” se trata de servicios informáticos integrados que

grandes empresas (como Microsoft, Oracle, CISCO, HP, IBM, Google y las

telefónicas globales) se aprestan a ofrecer a través de Internet, bajo el concepto

de que los usuarios no necesitemos llevar las aplicaciones y la información con

nosotros, almacenadas en nuestros discos duros, sino que ellas estarán siempre

disponibles en nuestra “nube privada” (almacenadas en alguna parte del mundo

virtual) para que las podamos utilizar desde cualquier lugar y con distintos

dispositivos, sean computadores fijos o dispositivos móviles, como tablets, iPad,

laptops, netbooks y los smartphones (iPhone, Blackberry, Palm).

Esta apuesta está requiriendo de grandes inversiones por parte de las empresas

tecnológicas, que están desarrollando equipos, plataformas y software, pensados

como un servicio integrado, para trabajar en “la nube”, de manera de estar

preparadas para el momento cuando el dinero empiece, de verdad, a gastarse en

este mercado. La probabilidad de éxito es alta, ya que junto con el aumento de la

capacidad y confiabilidad de las líneas de banda ancha (tanto en Internet como en

las redes 3G de telefonía móvil), con costos cada vez menores, encontramos que

las personas valoran -cada día más- estar conectadas a sus redes sociales para

telefonear, revisar su email, enviar mensajes, chatear o “twittear”, o escuchar su

música predilecta o estar conectados a Facebook.

Actualmente hay varias aplicaciones disponibles en “la nube”, como por ejemplo el

almacenamiento de archivos en un disco virtual en Internet (como actualmente ya

ofrecen Dropbox, Windows Live y algunas telefónicas móviles locales). También

tenemos acceso a música sin tener que bajarla al disco duro (como ya ofrece

SKY.fm). Otros proveedores de música, como Rhapsody y Thumbplay ofrecen la

posibilidad de escucharla de manera instantánea en un dispositivo móvil que se

conecta a Internet sobre las redes celulares, y no sería extraño que -muy pronto-

nuestros operadores telefónicos locales nos ofrezcan planes de suscripción

ilimitada a esta música, en forma integrada en sus planes mensuales de telefonía,

con un costo adicional que podría estar cerca de $1.000 mensuales. “La nube”

también nos permitirá suscribirnos para leer libros on-line, o para usar la última

versión de Office 2010 sin tenerla instalada en nuestros equipos (como anunció

recientemente Microsoft).

Pero esta estrategia no está focalizada sólo en las personas. También las

empresas podrán aumentar la productividad de sus procesos administrativos y

operativos, utilizando aplicaciones residentes en “la nube”. Los servicios que ya se

empiezan a ofrecer en “la nube” son el acceso al sistema de correo corporativo, al

sistema contable o al sistema CRM de la empresa, en modalidad “bajo demanda”,

lo que significa que se paga tanto como se utiliza el servicio, evitando altas

inversiones en equipos computacionales, dacenters y licencias de software que -la

mayoría de veces- son subutilizadas en la empresa, lo que puede resultar

especialmente atractivo para las PYMES. Por otro lado, “la nube” facilitará el

aumento de la productividad individual del personal, porque permite que cada

usuario acceda a los sistemas y a la información corporativa desde cualquier

ubicación, permitiendo trabajar en forma remota y en cualquier horario.

Otro buen uso de la “computación en la nube” es la prevención ante catástrofes,

como nuestro terremoto 2010, en que muchas empresas vieron destruidas sus

instalaciones computacionales, con mucha información perdida y varias semanas

de esfuerzo para volver a estar comunicadas con el mundo. La “computación en la

nube” ofrece una solución en estos casos, ya que las aplicaciones y los datos

estarían residentes en “la nube”, a salvo de los embates de la naturaleza.

Ya veremos si la apuesta por el “Cloud Computing” tiene los efectos esperados.

Desde ya, presenta oportunidades para desarrollar nuevos modelos de negocio en

las empresas, pero también nos presenta el reto de un cambio de paradigma

respecto de la seguridad de la información, que estará almacenada en manos

externas, y -por otro lado- nos fuerza a tener mayor responsabilidad en el buen

uso de la tecnología, lo que nos obliga a mejorar la educación de nuestros niños

en al ámbito informático.

El concepto de “Cloud Computing” es ofrecer -a las personas y empresas- software e

infraestructura computacional como un servicio que les permitirá disponer de acceso “bajo

demanda” a un conjunto integrado de recursos informáticos que pueden configurarse de forma

dinámica, ponerse en servicio con rapidez y pagarse en base a la cantidad utilizada.